Gracia y Gloria Buenos Aires

Anunciando todo el consejo de Dios

¿La salvación Puede perderse?

- diciembre 29, 2020

¿La salvación Puede perderse?

Por el Hno. Fernando Pitra.

Esta pregunta viene a cada creyente en algún momento de su caminar, queremos por las
escrituras dar luz acerca de este tema para que el corazón de los hijos de Dios pueda resolver
bajo la guía del Espíritu santo esta cuestión por la sola palabra de Dios. Le aconsejo leer este
folleto hasta el final hermano amado, en la palabra de Dios encontramos la revelación de
Jesucristo nuestro real y único reposo dado a todos los hombres, encontramos a aquel que
hizo una obra completa y consumada a la cual nada le falta, ya no podemos agregar más a
ella, Dios y el hombre encuentran allí abundantes riquezas las cuales queremos descubrir.
Separe en algunos puntos algunas porciones para meditar acerca de la salvación y sus
resultados para nosotros.
1) Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; no por obras, para que nadie se gloríe.
Efesios 2:8-9
Note primeramente que la palabra nos enseña que por Gracia somos salvos, las religiones
enseñan que hay que obrar de diferentes maneras para alcanzar la salvación, podemos decir
que la religión se basa en todo lo que el hombre hace por Dios, pero eh aquí encontramos al
Dios de toda Gracia, el que por amor nos dio su hijo, a diferencia de la religión, la salvación
es todo lo que Dios ah hecho por el hombre y este es el principio por el cual Dios comienza a
tratar con el hombre, ya que el pecador nada puede hacer por si mismo, Dios ha provisto su
Gracia, miremos su definición
Gracia: Don, Regalo, beneficio o favor. Dios nos a dado primeramente la fe, para alcanzar
este favor, el hombre en su estado natural no tiene fe, aunque cree tenerla, la fe verdadera
viene de Dios, la fe es el único medio para alcanzar la Gracia y Dios nos la da en el momento
que recibimos a Cristo en nuestro corazón, para poder creer y recibir su salvación que es por
pura Gracia, por esto dice: y esto no de vosotros (La Fe), pues es don de Dios;
Sigamos viendo el mismo versículo: “no por obras, para que nadie se gloríe”. La salvación es
aparte, o sea va por un camino diferente al de las obras, ya que es por la fe, el creer nos hace
salvos no el obrar, no podremos gloriarnos jamás de haber llegado a los cielos, ya que Dios
solo acepta la obra de Jesús en la cruz, es por esa obra que Dios nos salva y no deberíamos
tratar de añadir nada a esa obra, ya que el mismo grito, ¡Consumado es! ¡Hecho esta!
Preciosas palabras que hicieron callar las alabanzas celestiales, Cristo gano la salvación, es el
único que pudo, es el único que podrá por su obediencia y perfección
“Al que no conoció pecado, lo hizo pecado por nosotros, para que nosotros fuésemos hechos
justicia de Dios en Él”. 2 corintios 5:21
El Gano para nosotros la salvación, es recibir algo que no merecíamos, una Gracia, Dios por
Jesucristo nos perdonó todos los pecados mediante su obra de la cruz, Dios juzgo a su hijo
Jesucristo como si fuese el único y más vil pecador en representación de todos nosotros para
salvarnos a través de ella, por eso en la cruz el murió, para propiciar a Dios, para calmar y
aplacar su ira que debía condenar a los pecadores, Dios que ama al hombre, condeno en su
hijo a toda la raza humana, todos los pecados que se cometieron, que se estaban
cometiendo y los que se cometerían fueron puestos sobre Cristo, para librar, a los que en él
creen, de la condenación eterna por su propios pecados
“Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; más
Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros”. Isaías 53:6
“Y la ley se introdujo para que abundara la transgresión, pero donde el pecado abundó,
sobreabundó la gracia” Romanos 5:20
Esto ocurrió en la cruz el pecado abundo sobre Cristo, pero la Gracia sobreabundo y
sobreabunda, salvando hasta lo sumo al hombre que nada puede hacer por sí mismo.
2) La salvación es algo seguro, es una posesión. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no
tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. 1 Juan 5:12
Aquí no dice tendrá, dice “tiene”, depende de que hayamos puesto nuestra confianza en el
salvador, es algo seguro por que no depende de nuestras obras, de nuestras justicias, la
salvación es la persona de Jesucristo plantada en usted y en mí, no es una religión, no son
unas cuantas normas que tratemos de cumplir, o la beneficencia que hagamos, la salvación
es un nuevo nacimiento, un nacimiento celestial, es nacer de Dios, por la fe en Cristo.

Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al
mundo: nuestra fe. ¿Y quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo
de Dios? 1 Juan 5:4-5
Hemos vencido solo por creer, ya somos contados como vencedores
El apóstol Juan dice más:
Ninguno que es nacido de Dios practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en
él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios. 1 Juan 3:9
Note esta frase hemos nacido de Dios y no podemos pecar, no somos contados ya mas como
pecadores, pero usted dirá seguimos teniendo malos pensamientos, o mintiendo
ocasionalmente, es que tenemos que reconocer como dice la palabra, “El mal Esta en mi” Y
si hago lo que no quiero, ya no lo hago yo, sino el pecado que mora en mí.
Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. Porque según el
hombre interior, me deleito en la ley de Dios; pero veo otra ley en mis miembros, que se
rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis
miembros. Romanos 7:20-23
Encontramos que, aunque sinceramente recibimos a Jesús, tenemos una fuerza (una ley) que
sigue impulsándonos al pecado, esa es la antigua naturaleza a la cual pertenecíamos antes,
este es el pecado que esta aun en nosotros o la raíz de los pecados que aun cometemos,
muchas veces esto nos confunde y nos preguntamos ¿seré salvo?
Si querido hermano, si usted recibió a Cristo en su corazón, usted es salvo, pero a
descubierto que en usted habita el hombre viejo y también el hombre nuevo, la vida nueva
de Cristo, dos ánimos hay en usted y en mi que nos hacen inconstantes en todos nuestros
caminos espirituales, hay una batalla dentro suyo, la mas fortalecida toma el control y
dominio de nuestro ser, pero nada de esto cambia lo que usted es delante de Dios. "De
modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura (nueva creación) es; las cosas viejas
pasaron, ahora han sido hechas nuevas." 2 Corintios 5:17
Es y será visto para siempre por Dios como una nueva persona en Cristo, como una nueva
creación, de ahí entendemos que lo que peca es la carne, el viejo hombre, usted y yo hemos
sido hechos nuevos, somos una vida celestial así somos contados, todo pecado es puesto a
cuenta de ahora en mas de la vieja creación, no del creyente que es una nueva creación,
¿ahora nos preguntamos?
¿Pecaremos, porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? En ninguna manera.
Romanos 6:15
Darle rienda suelta a la carne, trae perdida no de salvación, si de recompensa y trae dolor y
angustia en la carne (cuerpo).
3) La salvación no es solo la salvación del alma, o ser libres de la condenación.
¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande? La cual, habiendo
sido anunciada primeramente por el Señor, nos fue confirmada por los que oyeron, Hebreos
2:3
Nuestra salvación incluye:
1-El perdón de pecados
2- La Justificación
3- Nuestra santificación
4- La liberación del poder del pecado
5- La sanidad del cuerpo
6- La llenura con el Espíritu Santo
7- Nuestro Crecimiento espiritual
8- Nuestra Glorificación
9- Nuestra traslación
10- Las recompensas celestes
11- El Premio que es reinar con Cristo
Descuidar nuestra salvación es igual a Descuidar nuestra vida espiritual y así descuidar todas
las oportunidades de alcanzar lo mejor en los cielos; es no prepararse para venida del Señor,
es vivir para nosotros mismos, es vivir por debajo de lo que somos y ser salvos pero no con
gloria, si no como por fuego, por descuidados, este verso en hebreos fue escrito a Israel que
rechazo a su mesías, y así rechazo el ser cabeza de naciones , rechazo todo lo que eso
significa, y ser librados del yugo del dominio de Roma, ahora rechazaban aun su Cristo que
podía salvarles.
Pedro vio: preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes
de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la
concupiscencia. 2 Pedro 1:4.

¿Cuántas promesas tenemos para el vencedor en la carrera? El apóstol Pablo además de

todo lo que vio, vio una corona de justicia, el hablo de perderlo todo, para ganar a Cristo, he
aquí está el tope de la salvación, reinar con Cristo como su Esposa por la eternidad.
4) El creyente está unido a Cristo. Estamos unidos a cristo por medio de su vida, condenar a
un creyente seria lo mismo que intentar condenar al Señor, al hijo de Dios, "Ahora, pues,
ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la
débil naturaleza humana, sino conforme al Espíritu". Romanos 8:1
Estas últimas palabras: "los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu", no
pertenecen a este primer versículo, sino que son parte del versículo cuatro, donde también
podemos leerlas. Aparentemente fueron agregadas por algún escriba al copiar las Escrituras.
El verso termina con la frase “en Cristo Jesús”, esto cambia por completo el sentido del
versículo, se nos dice entonces, que no tenemos "ninguna condenación, un creyente no
puede ser condenado, la primer razón es por que no hay, no existe ninguna de las
condenaciones, todas cayeron sobre nuestro Señor, se agotaron en él, para que nosotros hoy
podamos ser bendecidos en El, hermanos estamos unidos a él, lo que implica que su muerte
es nuestra muerte
pero también su resurrección es nuestra resurrección, aleluya!
¿Quién nos podrá separar de Él?
¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre,
o desnudez, o peligro, o espada? Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el
tiempo; Somos contados como ovejas de matadero. Antes, en todas estas cosas somos más
que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la
muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni
lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que
es en Cristo Jesús Señor nuestro. Romanos 8:35-39
Es imposible separar un salvado del Salvador, ni satanás, ni todo lo creado, ni nosotros
mismos podríamos ser arrebatos de sus manos eternas,
Y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre
que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. Yo
y el Padre uno
somos. Juan 10:28-30
El es la fuente de la vida, él nos dio su vida eterna, en sus manos estamos seguros, nadie nos
quitara de allí.
5) El creyente ha sido justificado.
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor
Jesucristo” (Romanos 5:1). “Justificar” significa “declarar justo”. Todos los que reciben a
Jesucristo como Salvador son “declarados justos” por Dios. Dios como juez nos ha imputado
la justicia divina más allá de nuestra obras, la justicia por medio de la fe, nos salvó a crédito,
de la justicia de cristo, estamos rodeados de ella para siempre , esa será nuestra vestidura en
los cielos, no nuestra justicia o buen comportamiento, somos llamados y vistos como justos
antes de actuar justamente, luego a través del crecimiento de la fe y amor en nosotros,
llegamos a manifestar esa justicia, visiblemente al manifestase la vida nueva en nosotros
Para que un cristiano perdiera la Salvación, Dios tendría que retractarse de lo dicho en Su
Palabra y “cancelar” lo que Él declaró previamente. Los absueltos de culpa tendrían que ser
juzgados de nuevo y declarados culpables. Dios tendría que revertir la sentencia dictada por
el tribunal divino. Dios no es hombre para que mienta ni hijo de hombre para que se
arrepienta. El ve en usted y en mi la justicia de Cristo, por ella somos acepto delante El, por
esa justicia nuestra posición ha cambiado de pecadores a justos para siempre, nuestro
estado o condición es variable , a veces somos espirituales nos comportamos como tales,
pero a veces nos comportamos como carnales, hasta que seamos totalmente y
completamente establecidos eso ocurre, pero hasta que eso ocurra ,mientras tanto, nuestra
posición delante de Dios es firme , es de justicia, por eso él nos recibe como hijos amados, en
la justicia y santidad de Cristo.
6) Un creyente no puede perder la Salvación.
Todo, de lo que la Biblia dice que nos sucede cuando recibimos a Cristo, sería invalidado si la
Salvación se perdiera. La Salvación es el don de Dios, y los dones de Dios son “irrevocables”
Porque irrevocables son los dones y el llamamiento de Dios. (Romanos 11:29). Un cristiano
no puede ser creado sin ser nueva creación. Los redimidos no pueden ser re-comprados. La
vida eterna no puede ser temporal. Dios no puede renegar de Su Palabra. Las Escrituras
dicen que Dios no puede mentir
en la esperanza de la vida eterna, la cual Dios, que no miente, prometió desde antes del
principio de los siglos, (Tito 1:2).

Miremos a Jesús como el Pastor

Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso;
y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he
encontrado mi oveja que se había perdido. (Lucas 15:5-6).
El cordero es encontrado, y el Pastor soporta alegremente la carga; nuestro Señor asume
toda la responsabilidad de llevar al perdido a casa sano y Salvo.
Judas también mira la gran salvación anunciada y enfatiza aún más la bondad y fidelidad de
nuestro Salvador:
“Y Aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su
gloria con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio
y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén”.* Judas 1:24-25
nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia,
por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, Tito 3:5
no por obras a las cuales estamos predispuestos a realizar en nuestra mala naturaleza, sino
por su misericordia, por la regeneración, el nos hizo un nuevo género, pertenecemos a una
raza resucitada, somos ciudadanos nacidos en la Jerusalén de arriba, una nueva creación.
Podríamos citar más y más verdades en toda la escritura para ver que el creyente no puede
perder su salvación, el no puede salvarse, ni mantenerse salvo, depende de otro de aquel
que le redimió, de aquel que le salvo, que le justifico y en provisión también le glorifico, la fe
nos muestra ya salvados, hemos sido sellados con el Espíritu santo al recibirle, esa es la
garantía de que estaremos en una esfera celestial para siempre, alabando su gracia sublime,
demos gracias al Señor y descansemos en El, en su obra, hasta su pronta venida. Amen.