Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Cátedra: Metafísica
Es casi cómico que nuestros filósofos exijan que la filosofía tenga que empezar
con una crítica de la facultad de conocer: ¿no es muy improbable que el
órgano del conocimiento pueda «criticarse» a sí mismo cuando ha surgido la
desconfianza sobre los resultados obtenidos hasta el momento por el
conocimiento? La reducción de la filosofía a la «voluntad de una teoría del
conocimiento» es cómica. ¡Cómo si así se pudiera encontrar seguridad!
El nihilismo europeo
Lenzer Heide 10 de junio de 1887
1.
2.
Pero entre las fuerzas que crió la moral estaba la veracidad: ésta se vuelve
finalmente contra la moral, descubre su teleología, su visión interesada — y
ahora, la comprensión de esta larga e inveterada mendacidad, que se
desespera de poder abandonar, actúa precisamente como estimulante. Al
nihilismo. Constatamos ahora en nosotros necesidades implantadas por la
larga interpretación moral que nos parecen ahora necesidades de algo no
verdadero: por otra parte, son aquellas de las que parece depender el valor
gracias al cual soportamos la vida. Este antagonismo, no estimar lo que
conocemos y ya no poder estimar las mentiras que nos quisiéramos contar:
— da por resultado un proceso de disolución.
3.
4.
5.
Que este «¡en vano!» sea el carácter de nuestro actual nihilismo, resta por
demostrar.
La desconfianza frente a nuestras anteriores estimaciones de valor se
intensifica hasta llegar a la pregunta «¿no son todos los «valores» señuelos con
los que la comedía se prolonga sin acercarse sin embargo de ninguna manera
a un desenlace?» La duración, acompañada de un «en vano», sin meta ni fin,
es el pensamiento más paralizante, en especial cuando además se comprende
que uno está siendo burlado y sin embargo no tiene el poder de no dejarse
burlar.
7
6.
7.
8.
9.
10.
¡Más bien, a la inversa! No hay nada en la vida que tenga valor fuera del grado
de poder — suponiendo, precisamente, que la vida misma es la voluntad de
poder. La moral protegía del nihilismo a los malparados atribuyendo a cada
uno un valor infinito, un valor metafísico, e integrándolo en un orden que no
concuerda con el del poder y la jerarquía mundanos: predicaba la sumisión,
la humildad, etc. Suponiendo que sucumba la creencia en esta moral, los
malparados no tendrán ya su consuelo — y sucumbirán.
11.
12.
13.
14.
16.