ESCUELA ARQUIDIOCESANA DE LAICOS.

02/10/22
MATERIA TEOLOGIA II. TEMA: DIOS UNO Y TRINO.
PROF. PBRO. FRANCISCO MAGAÑA.
ALUMNO: JUAN EMILIO GONZÀLEZ PADILLA.

¿QUÉ ES EL FILIOQUE?

Todo cristiano profesa su fe en el Credo, el cual resume toda la teología católica. En el

Credo profesamos a Dios Trino: Padre, Hijo y Espíritu Santo.

“Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo que con
el Padre y el Hijo recibe una misma…”

Pero esta parte del Credo ´y del Hijo´ fue un agregado como dogma al Credo de la Iglesia
Occidental, inspirado por el Espíritu Santo. Esta pequeña partícula ocasionó una división
entre la Iglesia católica de occidente y la ortodoxa oriental desde el año 1054.

El Filioque era una doctrina de la Iglesia católica y que debía mantener su sitio en el
CREDO. Sin embargo, en las Iglesias Ortodoxas esta fórmula fue rechazada, quedando la
idea de que el Espíritu Santo procede sólo del Padre y no del Hijo. Aunque, esto si bien es
una diferencia teológica importante, no nos divide en la fe fundamental como cristianos.
Decimos entonces que, Filioque (en latín) se traduce como «y del Hijo», es una cláusula
insertada por la teología en la versión latina del Símbolo Niceno Constantinopolitano (del
Concilio de Constantinopla I del año 381)

Habremos escuchado que Jesús decía que el Espíritu Santo procedía de Él. Dice el santo
evangelio lo siguiente: “Cuando venga el Consolador, a quien yo enviaré del Padre, es decir,
el Espíritu de Verdad que procede del Padre, Él dará testimonio de Mí” (Jn 15, 26. Nueva
Biblia de las Américas)

El Espíritu Santo procede del Padre «y del Hijo».

 De acuerdo con Hilario de Poitiers (a.356-360 en su obra De Trinitate), el testimonio

era dado por el Padre y por el Hijo: «Patre et Filio auctoribus confitendus». (Padre e
Hijo reconocidos como autores)
 Según Ambrosio, en el año 381 comentó: “El Espíritu Santo que procede del Padre y
del Hijo: «Spiritus quoque Sanctus, cum procedit a Patre et Filio».
 Por su parte Agustín afirma el Filioque más de una vez: el Espíritu es Espíritu del
Padre y Espíritu del Hijo.
  León I, Papa n.º 45 de la Iglesia católica, desde 440 hasta 461, en sintonía con otros
muchos obispos, doctores y santos, supone una dependencia del Espíritu en relación
con el Hijo en su subsistencia eterna.

Con estas cuatro afirmaciones es claro que el Espíritu procede del Padre y del Hijo y que es
de la misma y única sustancia. Que el Padre es la causa única del Hijo y del Espíritu; del uno
por generación y del otro por procesión (ekporesis).
En resumen, El Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo, y es consubstancial a ambas
personas divinas.