Está en la página 1de 2

Página 1 de 2

Vive con amabilidad.


Es importante recordar que, al igual que nuestras palabras son la expresión
verbal de nuestros pensamientos, nuestras acciones son la manifestación de
nuestras creencias. Ninguna acción, sin importar lo pequeña que sea, es
insignificante. La forma en que tratamos a una sola persona define como
tratamos a todo el mundo, incluidos nosotros mismos. Si no respetamos a los
demás, no nos respetamos a nosotros mismos. Si somos desconfiados con los
demás, somos desconfiados con nosotros mismos. Si somos crueles con los
demás, seremos crueles con nosotros mismos. Si no podemos apreciar a
quienes nos rodean, no nos apreciaremos a nosotros mismos. Con cada una de las
personas que nos relacionamos, con todo lo que hacemos, debemos de ser más
amables de lo que se espera que seamos, mas generosos de lo que se prevé, mas
positivos de lo que nosotros mismos creemos posible. Cada instante
experimentado frente a otro ser humano es una oportunidad de expresar nuestros
mas elevados valores y de influir en alguien con nuestra humanidad. Podemos
lograr que el mundo sea mejor, persona a persona.

Robin Sharma. (un autor de verdad).

Querido diario… desde que comencé a leer a Sharma he tratado de despojarme


de esta personalidad psicopática y de asesino en serie que llevo dentro de mí,
pero me ha resultado imposible. Esto no tiene cura, ese monstruo no me suelta.
En todas las personas con las que trato, veo a un enemigo que aplastar, las
mujeres para mi no son nada y simplemente las veo y las siento como objetos
que se usan una sola vez y luego se tiran… bueno, mi personalidad es así, yo uso
a todo el mundo. No puedo tratar a nadie con amabilidad porque siento dentro
de mi que soy una mierda y si me ven como lo que realmente soy, una mierda,
Página 2 de 2

se armara un caos en mi exterior… como en el pasado… por eso invente esta


personalidad psicopática y me creo el estrateguita luego de leer asiduamente
los libros de Robert grenne. Por eso estoy más que consciente, que, si quito esa
personalidad inventada, del “escritor”, todos esos plagios, esos fraudes y todos
los delitos que he cometido, no queda una mierda…Queda una montaña de
mierda con gusanos…

¡Bruce lee ayúdame!!!

Todo esto paso porque entendí que el mundo debe de regirse bajo mis reglas y
ahora estoy pagando las consecuencias… debí de respetar lo que no era mío,
plagiar es robar, pero me cuesta asimilarlo…

Carlos Martín Pérez

Zaragoza, España. 2001

También podría gustarte