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UNA MIRADA A LA REBELIÓN EN LA GRANJA- GEROGE ORWELL.

En la historia del hombre han sido muchos los sistemas de gobierno que se han
implementado, dentro de ellos convergen características económicas diferentes, la propiedad
de los medios de producción, la remuneración por la fuerza de trabajo y la voz de los obreros
varía en cada uno de ellos; en el presente escrito se realiza un análisis crítico de los hechos
relatados en la fábula satírica de George Orwell denominada “la rebelión en la granja”, siendo
esta desarrollada dentro del seno de la segunda guerra mundial con la finalidad de criticar el
régimen soviético de Stalin.

La historia inicia con una asamblea convocada por un jefe que se encuentra en el último
suspiro de su existencia, el líder cerdo cansado de una vida de abusos proveniente de su
“amo” humano le expone a sus camaradas animales que es hora de sublevarse y tomar a la
fuerza lo que por ley les corresponde, ya que el propietario de la granja no tiene consideración
alguna con ellos, por lo cual su actuar encaja perfectamente en el esquema de un tirano, la
fuerza de trabajo de los que mantenían en pie el fundo no era remunerada por el señor Jones;
dicho esto y tomado en cuenta por los “obreros” el gran líder fallece y se le da inicio a la gran
rebelión animal.

Por medio de la rebelión animal el tirano Jones es despojado de su propiedad, los animales
por fin pueden vivir bajo un régimen democrático en el cual la división del trabajo es igual para
todos, la fuerza de trabajo es remunerada y se respira un ambiente de igualdad y equidad
entre los integrantes de la granja, todo ello bajo la observancia de “bola de nieve”, un cerdo
que tomo el liderazgo entre los animales y creía que por medio del trabajo mancomunado se
alcanzaría el verdadero desarrollo de la hacienda.

En esta historia se crearon 7 leyes fundamentales que ningún animal debía romper, estas son:

1. Cualquier cosa que ande en dos piernas es enemiga.

2. Cualquier cosa que ande en cuatro piernas o tenga alas es amiga.

3. Ningún animal usará ropa.


4. Ningún animal dormirá en una cama.

5. Ningún animal beberá alcohol.

6. Ningún animal matará a otro animal.

7. Todos los animales son iguales.

Después de un tiempo pacífico y prolifero bajo el gobierno de “bola de nieve”, Napoleón,


otro cerdo se sentía realmente envidioso de lo alcanzado y creía que era él quien
verdaderamente debía gobernar; por medio de engaños y fuerza bruta sacó del camino al
benévolo administrador de la granja; este nuevo gobernante plantea un esquema en el cual el
tomaría todas las decisiones quedando de esta manera todo acto de asamblea abolido.

La democracia que con tanto esfuerzo se había alcanzado, ahora se convertía en una
demagogia que mutaría irreversiblemente en una nueva tiranía, ahora Napoleón el cerdo se
equipaba a Jones el Hombre, la fuerza de trabajo de los animales volvió a pertenecer al tirano,
los alimentos escasearon para los obreros, instaurándose un régimen en donde primaba la
desigualdad en la cual se destacaban tres clases sociales: los cerdos (gobierno), los perros (el
ejército) y el resto de animales (plebe, obreros, esclavos).

Pasaron los años y cansados de esta situación el resto de animales se sublevaron y lograron
una nueva revolución animal, despojando de esta manera a los cerdos de todos los poderes
que por medio de engaños habían logrado obtener; en esta fábula se retrata perfectamente la
metamorfosis entre existente entre la tiranía, democracia, demagogia y de vuelta al régimen
autoritario.

Las leyes descritas anteriormente fueron reemplazadas por una solamente que esbozaba:
“todos los animales son iguales, pero algunos animales (cerdos) son más iguales que otros”;
si la analizamos a fondo encontramos la apertura de una gran brecha social en la cual la
cúspide era de los gobernantes que gozaban de todos los beneficios adquiridos por la
explotación a la clase obrera, pues sin el aporte de la fuerza de trabajo que esta representa
no habría producción, consecuentemente no tendrían con que derrochar el tirano junto con su
sequito.

Por medio de esta obra, Orwell pretendía denunciar la terrible dictadura instaurada luego
de que Stalin sube al poder. En la historia narrada vemos cómo, a través del cerdo Napoleón,
el poder se le sube a la cabeza, y un cargo de liderazgo hace que un supuesto representante
del pueblo abuse para obtener beneficios personales. (Fuks)

En el régimen tiránico se vivencio una distopia, la situación de los animales era realmente
denigrante, no podían disponer de su fuerza de trabajo, medios de producción y mucho
menos del producido, el comercio era controlado por el dictador y sus vidas eran consideradas
como poco o nada, eran simples herramientas cual esclavos que solo cumplían con la función
de obedecer y trabajar en favor de la administración.

La fuerza de trabajo en los regímenes autoritarios no es recompensada en debida forma, los


obreros son tomados como maquinas sirvientes que generan grandes riquezas en favor del
tirano y obtienen poco o nada de la producción; la fuerza de trabajo no es bien remunerada, el
descontento es palpable, el miedo es la manera maquiavélica para lograr el orden y evitar
posibles revoluciones, pero cuando ya no hay nada que perder hay mucho por lo cual luchar.

A modo de conclusión, encontramos en la novela de George Orwell una crítica a la tiranía, en


el ámbito económico observamos como varía la administración de la fuerza de trabajo, medios
de producción, bienes y servicios en los sistemas de gobierno totalitaristas y en los
democráticos; las brechas sociales presentes cuando existe explotación del hombre por el
hombre; en el contexto colombiano desdichadamente encontramos muchas similitudes, en
donde los ciudadanos son humillados por los gobernantes, en donde las políticas públicas
cada vez son más simplistas; creyendo las mentiras de aquel que prometió ser diferente
periodos tras periodos, pero ya en el poder olvida todo lo que alguna vez pregonó.

Recordemos que lo importante no es cambiar de gobernante, sino de mentalidad y esto es lo


que nos enseña Orwell dentro de su obra, no importa si los líderes son humanos o animales,
lo que verdaderamente guarda valor es el interés en trabajar mancomunadamente para
alcanzar un bienestar general, en el que se le garanticen los derechos a todos por igual, pues
la dignidad y la libertad de las personas son sus tesoros dorados, aún más que la propia vida.

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