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EN LO PRINCIPAL: CONTESTA DEMANDA DE VIF; EN EL PRIMER

OTROSI: SOLICITA QUE SE TENGA A LA VISTA CAUSA F-170; EN


EL SEGUNDO OTROSI: ACOMPAÑA DOCUMENTOS; EN EL TERCER
OTROSI: FORMA ESPECIAL DE NOTIFICACIÓN; EN EL CUARTO
OTROSÍ: PATROCINIO Y PODER.-

S. J. L. DE FAMILIA DE LINARES

ELISABETH DEL ROSARIO GONZALEZ ALVAREZ, profesora,


cédula de identidad 10.615.287-K, con domicilio en calle
Yerbas Buenas número 782 de la ciudad de Linares,
demandada en procedimiento de violencia intrafamiliar,
causa RIT F-221-2021, caratulado “GONZÁLEZ/GONZÁLEZ” a
US., respetuosamente digo:

Que, por este acto vengo en contestar demanda por


violencia intrafamiliar, por supuestos hechos de
violencia contra mi padre, don Juan Del Carmen González
Retamal de edad 84 años, interpuesta por mi hermana,
doña Gladys Del Carmen González Álvarez, solicitando
desde ya su rechazado en todas sus partes, con expresa
condenación en costas, por las razones de hecho y
fundamentos de derecho que a continuación paso a
exponer:

LOS HECHOS.

1.- Que, la demanda de autos, incoada contra esta


parte tiene tantas imprecisiones que denotan un enorme
desconocimiento de la actora, que cuesta hacer una
defensa coherente debido a que, en primer lugar, no se
explica qué hechos constituirían la Violencia
Intrafamiliar, (en adelante VIF), si es en, como dice la
demandante “ser expulsado de su casa mi padre”, si es en
“la incertidumbre que vivió la demandante”, si es en “la
campaña de investigación” que tuvo que realizar para
encontrar el Hogar Sagrada Familia o si es en que “no le
dieron la información como describe”, ya que los hechos,
los pocos que se narran, por sí solos o en conjunto, no
configuran VIF, a juicio de esta parte. En segundo
lugar, su base son hechos falsos, incompletos,
engañosos, que tergiversan la verdad, y que, en algunas
de sus partes, hacen el relato a todas luces ambiguo,
contradictorio, como se dirá y expondrá con documentos o
antecedentes que acreditan la posición esta parte, y por
consiguiente la actora demuestra su desconocimiento y
desconexión con nuestro padre, que se prolongó por
meses.- (Las palabras en negrita son nuestras)

2.- Que, es del caso que soy la hija menor de mi


padre, el cual he cuidado y atendido en sus
enfermedades, como mi padre que es. Mi hermana Gladys
dejó de “cuidarlo” por problemas con la cuidadora, doña
Edith Rivera en el mes de agosto de 2020, desde entonces
esta parte se encargó de nuestro padre junto a su
hermana Maritza González. Pongo las comillas puesto que
la función de la actora de cuidado, era relacionada a
actos puntuales, como cobrar la pensión de mi Madre,
acompañarla a controles, urgencias médicas y comprar
algunos medicamentos, lo que hizo por un tiempo acotado,
pero en específico, por nuestro padre, hizo bien poco.

3.- Es del caso SS., que somos 6 hermanos, hijos de


don Juan Del Carmen González Retamal, domiciliado en
Avenida Leonor Ferrada, número 276, sector Abranquil
comuna de Yerbas Buenas, y de mayor a menor; 1ª. Gladys
Del Carmen, rut 8.745.624-2; 2ª. Ana Julia, rut
8.747.530-1; 3°. Mauricio Antonio, rut 9.042.328-2; 4ª.
Maritza De Las Mercedes, rut 9.549.879-5; 5°. Patricio
Humberto, rut 10.144.930-0; y 6ª. Elizabeth Del Rosario,
rut 10.615.287-k, todos de apellido González Álvarez.

De los nombrados, nos hicimos cargo del cuidado de


nuestros padres, entendiéndose visitas a su casa, compra
de insumos o medicamentos, asistencia y compañía a
médicos, hospitales, contratar cuidadoras y pagarles al
día, en general las involucradas eran, por periodos
acotados, mi hermana Gladys, Maritza y esta parte, sin
perjuicio de lo que se dirá respecto de nuestra madre,
punto de inflexión, que al día de hoy solo ésta parte es
la demandada por VIF, más pensión de alimentos, por un
millón de pesos. ($1.000.000)

4.- Que, cronológicamente, para entender el presente


Y contexto de la demanda, en el año 2016 nuestra madre
cae postrada por un accidente vascular y la actora, mi
hermana Gladys se hizo cargo de cobrar la pensión de mi
madre, acompañar a controles y urgencias y comprar
algunos medicamentos, nada más, puesto que nuestros
padres contaban ya, desde aquel tiempo, con cuidadores,
para lo cual casi todos contribuían, en mayor o menor
medida económicamente.

Pero el quiebre de la familia empezó en el último


semestre del 2020, año difícil, puesto que primero
falleció nuestra madre doña María Lucinda Álvarez Leiva,
el 4 de agosto del año pasado, ella estaba postrada por
un accidente vascular desde el 2016. En paralelo,
nuestro padre, quien presenta una serie de enfermedades
crónicas, como bien dice la demandante, Diabetes,
Hipertensión, Asma, Tratamiento por Depresión, etc.,
sufre además un Accidente Cerebrovascular el 01 de
septiembre del 2020, que le acarreo problemas motores y
pérdida de memoria, siendo su condición dependiente
severo. Que, continuando en el tiempo, aproximadamente 20
días después de la muerte de mi madre, mi padre cae a
cama, el lunes 24 de agosto del 2020, sufre una caída,
en su casa y no se puede mantener de pie. Es llevado a
la posta varias veces, pero lamentablemente devuelto a
su casa, en cama, siendo hospitalizado el 1 de
septiembre, después de reiteradas visitas al Cesfam,
quedando ahí por 9 días con diagnóstico de ingreso de
infarto cerebral, donde se expone en el ingreso médico
que “el paciente varón de 83 años que ingresa por cuadro
de 3 días de evolución, con inestabilidad de la marcha,
mareos y alteración visual”, siendo dado de alta el 9 de
septiembre del 2020, por “accidente cerebro vascular del
territorio de la arteria cerebral posterior izquierda,
hematurial asociada a sonda el paciente con hiperplasia
de próstata, que le produjo problemas motores y pérdida
parcial de memoria. Presenta además demencia senil,
hipertensión arterial y diabetes tipo 2”.

5.- Que, antes las situaciones descritas del año


2020, en los dos puntos anteriores, ya la actora se
había desentendido de los asuntos de nuestro padre de
los que libre y voluntariamente se hacía cargo,
funciones que consistían en comprar algunos medicamentos
de mi padre, acompañarlo a controles y urgencias médicas
en ocasiones, pero abandonó o dejó de lado todos los
asuntos de él, el 9 de septiembre del 2020.

Que ahora, antes de fallecer nuestra madre, mis


padres tenían como cuidadora a doña Edith Rivera, quien
tuvo problemas con la demandante por malos tratos, según
relató la cuidadora en su oportunidad, renunciando a su
labor debido a que, según doña Edith, la actora cuando
supo lo de nuestro padre, que fue llevado al hospital,
la increpó duramente porque no lo acompañó en la
ambulancia, más otros hechos o roces entre ambas que se
arrastraban de anterior, a lo que la señora Edith
justificó que fue porque no la dejaron, (recordemos que
estábamos en plena pandemia) hecho que motivo el enojo
de la actora. Edith manifestó que “renunciaría si Gladys
seguía pagando su sueldo”, porque no era la primera vez
que la Sra. Gladys la trataba mal. Entonces para que
doña Edith no se fuera y pudiera seguir cuidando a mi
padre, ésta parte demandada, le canceló el sueldo de
agosto, ente lo cual doña Gladys se molestó y (tal vez
sintiéndose pasada a llevar) por ese motivo dejó de
preocuparse de medicamentos y del cuidado de nuestro
padre, alejándose de todo en agosto, y la última vez que
estuvo con mi padre fue el 9 de septiembre de 2020.

Por otro lado, hasta agosto de ese 2020, nuestra


otra hermana Ana Julia, iba por largos periodos a cuidar
a nuestra madre, incluso se la llevó a su casa un par de
meses. Al morir mi madre, extendió su estadía por un
periodo aproximado de 15 días acompañando a mi padre y
se fue el domingo 23 de Agosto del año 2020, puesto que
vive en Santiago, pero volvió a fines de agosto hasta
los primeros días de septiembre, a raíz de la
hospitalización de nuestro padre.

El lunes 24 de Agosto de 2020, mi padre empezó a


decaer, sufre una caída y ya no volvió a ser
autosuficiente. Posteriormente, al salir de hospital, 5
días después, nuestra hermana Maritza se lo llevó a su
domicilio en San Vicente de Tagua Tagua, en la región
del Libertador General Bernardo O'Higgins, por casi tres
meses en condición de postrado, haciéndose cargo de las
medicinas e inscribiéndolo en el Cesfan de la comuna de
su domicilio. Aquí la actora no estuvo en nada.

6.- Que, mi hermana Maritza, lo tuvo casi 3 meses en


su domicilio, desde 14 de septiembre se hace cargo de mi
padre, hasta el 8 de diciembre del 2020. Se encargó de
remedios y controles médicos pero, por problemas de su
salud dejó de cuidarlo, regresándolo a su casa, pues
ella lidia con un Cáncer, hoy en atapa 4, enfermedad que
le dificultaba cuidarlo e interfería en su tratamiento
oncológico.

Ella, antes de traerlo a su casa, nuevamente habló


con todos los hermanos, incluida esta parte y preguntó
quién se haría cargo de nuestro padre, a lo que ninguno
de los demás hermanos dio respuesta afirmativa, más bien
evasivas como que tenían cosas que hacer, que no podían,
que trabajaban, que la pandemia, que la situación
económica, etc. De todos modos fue regresado a su casa.

Quedó al cuidado de nuestra sobrina Claudia


González, quien cobraba por ello. Maritza viajó en enero
del 2021 a Linares, puesto que al renunciar nuestra
sobrina Claudia, esta parte contrató a 2 cuidadoras, a
las que les enseñó cómo darle cuidados, llevar los
remedios, cuánta dosis, alimentación, aseo y ejercicios
de mi padre. También el 2 de Marzo viajó a Linares para
acompañarme a dejar a mi padre al Hogar Sagrada Familia,
hecho consumado el 3 de Marzo de 2021.

Que, desde que mi padre regresó de casa de mi


hermana Maritza, esta parte se encargó de él, por 2
meses lo cuido los fines de semana, compraba sus
insumos, alimentos y de pagaba a las cuidadoras, primero
a doña Claudia González Becerra, hija de nuestro
hermano, don Mauricio Antonio González Álvarez, quien
renuncia el día 6 de enero del 2021, intempestivamente.
Después de su renuncia contraté a dos cuidadoras de
lunes a viernes, de día doña Eugenia González Alarcón, y
de noche a doña Sara Maureira. Me hice cargo directo de
mi padre, debido a que estaba de vacaciones, lo cuidaba
los fines de semana.
Que, en lo narrado anteriormente, desconozco qué
hacia la actora, puesto que se desentendió de nuestro
padre, hecho que no explica en su demanda, desde fines
de 9 de septiembre de 2020, hasta marzo del año 2021.

7.- DECISIÓN DE INTERNAR A MI PADRE: Que, el 1º de


noviembre 2020 llamé a mis hermanos para pedirles ayuda
económica, sin perjuicio de lo que se explicará más
adelante en relación a este tópico, para pagar a las
cuidadoras y Gladys, Ana y Patricio dijeron que no
aportarían, Mauricio dijo que si y aportó por 2 meses y
ya no más, Patricio solo aportó 1 mes. En enero y
febrero nadie aportaba para los gastos de mi padre.
Llegaba marzo y debía presentarme a trabajar ya no podía
seguir cuidándolo los fines de semana.

Que hablé con mi Hermana Maritza, que era la única


que estaba al tanto, llamaba para saber de él, le
expliqué mi situación, decidiendo ambas internar a mi
padre en el Hogar Sagrada Familia, ubicado en Avenida
Presidente Ibáñez número 724, de esta ciudad, hecho
acaecido el 3 de marzo de este año.

8.- RELACIONES ENTRE HERMANOS: Que los problemas


entre hermanos se dieron por variadas circunstancias,
que si bien no es objeto directo de la demanda, pero es
un antecedente que da luces de la génesis de ésta;

-Con la actora, mi hermana Gladys, desde 9 de


septiembre del año 2020, se desentendió de nuestro
padre, inclusive con posterioridad me bloqueó su
teléfono móvil, si bien antes se hizo cargo de pagarse
del sueldo de nuestra madre, compraba sus insumos, los
llevaba a casa de mis padres en el campo, Comuna de
Yerbas Buenas, según Maritza ella “se desaparecía por
periodos de 3 meses sin ver a nuestros padres, enviando
con terceras personas los insumos o remedios”. En el
mismo sentido, la señora Sara, expreso que, (cuidadora
de noche de mi padre, que en enero y febrero de 2021
también cuidó a mi madre, el año 2018 y parte de enero
de 2019) la actora Gladys, “solo aparecía en el hospital
cuando mi madre quedaba hospitalizada o asistía a
algunos controles médicos”.

Pero es justo reconocer que la acora acompañó a mi


madre en su hospitalización en sus últimos meses de
vida, (desde julio hasta el 4 de agosto del 2020) en
periodo de pandemia. También, en el mismo sentido, se
hizo cargo del funeral de mi madre, según ella, que el
alcalde de Linares don Mario Meza, costeó los gastos;

-Sra. Ana Julia, quien vive en Santiago, lo visitó


solo un día en el mes febrero de este 2021, y en el año
2020, por 15 días, hasta el 23 de agosto de ese año,
regreso a Santiago, pero volvió a fines de agosto hasta
septiembre, por unos días, puesto que Maritza se lo
llevó a su domicilio. Fue llamada por ésta parte el 1 de
noviembre del año 2020, para apoyar con los gastos de
nuestro padre y se negó, después ya no contestó mensajes
de su celular, también es justo mencionar que fue a
verlo a San Vicente de Tagua Tagua una vez;

-Don Mauricio Antonio, vino al funeral de mi madre


en agosto, puesto que vive en la comuna de Maipú,
Santiago, visita a mi padre una vez en San Vicente de
Tagua Tagua, en diciembre y además lo trae de vuelta a
mi padre, desde San Vicente a Linares, pero se fue y no
volvió, se molestó y no contestó su teléfono, Mauricio
nunca llamó para saber de mi padre, su hija dejó el
trabajo en 6 de Enero de 2021;

-Don Patricio Humberto, viviendo al lado de mi


padre, hizo su casa ahí. En un principio supervisaba los
cuidados de mi madre, él la iba a acostar en las tardes.
Cuando mi padre cae enfermo le menciona a Maritza que
“él no se va hacer cargo de mi padre”, lo dice en forma
irrespetuosa, además se molestó porque se le pidió, por
ésta parte que sacara su caballo de la casa de mi padre,
ya que tiene especio suficiente en su casa, y el motivo
fue que atraía moscas y, además la sobrina que lo
cuidaba, también lo solicitó, provocando un enojo
inexplicable en él, desentendiéndose de nuestro padre
viviendo en casa contigua, como da cuenta el Informe de
Social de doña Evelyn Moya;

-Doña Maritza De Las Mercedes, quien se llevó a su


casa a nuestro padre por tres meses, el año 2020,
hablamos casi diariamente y ella preguntaba por su padre
todo el tiempo, era quien estaba al tanto de todo, y
aportaba económicamente, por eso hablé con ella respecto
a la decisión de internar a nuestro padre. Que
finalmente esta parte, desde que mi madre quedó
postrada, dejaba un monto mensual de 100 mil pesos para
cancelar a las cuidadoras, compré sus piyamas y ropa que
ella necesitaba. La iba a visitar en forma periódica
hasta que empezó la pandemia, con sus restricciones,
pero aun así en la semana los llamaba y estaba al tanto
de todo;

-En lo personal, desde antes de fallecer nuestra


madre, y después lo de mi padre que cae hospitalizado,
al salir, después de 5 días es llevado por Maritza a su
casa, siempre apoyé lo que más pude, incluso supliendo
económicamente parte de mis hermanos. Estaba atenta de
mis padres. A mi padre cuando no podía ir verlo o,
porque estaba en San Vicente, lo llamaba constantemente
por video llamadas, cuando la conexión era estable.
Empecé a pagar a doña Edith su sueldo, para que ella no
renunciara porque era muy apegada a mi padre, es su
ahijada y lo trataba con cariño, le decía “padrino”. Mi
padre se sentía tranquilo seguro y cómodo con ella,
nunca fue por llevarle la contra a mi hermanan Gladys.

Sin embargo Edith no pudo acompañar a mi padre en la


ambulancia en agosto de 2020 porque los de ambulancia no
la dejaron y por pagarle el sueldo a Edith, Gladys se
enojó y desde ese entonces se empezó a alejar, ya que
quería que renunciara, hasta que mi padre salió del
hospital, el 9 de septiembre, a la actora no volví a
verla más.

Ahora, el 8 Diciembre del 2020, mi padre vuelve a su


casa, quedó al cuidado de Claudia su nieta, eso me
tranquilizó porque como era su nieta, mi padre iba a
estar a gusto o en confianza con un familiar.

Yo no podía hacerme cargo de él por mi trabajo, ya


que soy profesora y estaba en los exámenes finales de
mis alumnos, viendo las notas atrasadas, pero aun así
ayudé a comprar sus insumos, alimentos y útiles de aseo
para el hogar. Sin embargo me ocupé de cancelar el
sueldo a Claudia, hasta que renuncia. Posteriormente
contraté a doña Eugenia y a doña Sara, que lo cuidaban
de lunes a viernes tanto de día como de noche y esta
parte los fines de semana. Fue por un periodo de enero y
febrero de 2021.

Yo me quedaba a su cuidado los fines de semana y los


días en que las cuidadoras pedían permisos o días
libres. Los hermanos de mi padre, tíos me iban a ayudar
para poder poner a mi padre al baño o acostarlo cuando
yo estaba sola, pero de a poco ellos empezaron a
alejarse, ya no contestaban los teléfonos, ni mensajes.
Me sentí sola con mi padre. En ese sentido se acababan
mis vacaciones y me angustiaba que pasaría en marzo,
debido a que debía entrar a trabajar. Nunca quise
demandar a mis hermanos por ayuda económica y por
cuidados para mi padre, para no forzarlos, puesto que
todos estábamos viviendo el duelo de mi madre y cada
persona vive su duelo de distinta forma.

Por ello hablé con Maritza sobre esta situación y


decidimos que lo mejor era poner a nuestro padre en un
buen hogar, y el 3 de marzo de 2021 lo ingresamos al
cuidado de profesionales, en el Hogar Sagrada Familia de
Linares. Conversamos con nuestro padre de la decisión
tomada, le dijimos en la medida que entendía, que iría a
un hogar con otros abuelitos para que lo cuidaran y
rehabilitaran y volviera a su casa, que íbamos iba estar
pendiente de él todo el tiempo, a lo que nuestro padre
asintió con su cabeza. Me quedé tranquila porque mi
padre lo tomó a bien, puesto que el fin era que se
recuperara, hiciera terapia y volviera a su casa.

Que, más allá de que su padre entendiera o no, para


esta parte, fue muy doloroso dejarlo en el Hogar, y que
siente aún más injusta la situación de esta demanda,
porque no hubo quien ayudara, todos desaparecieron,
descansaron en ella y ahora es la demandada.

9.- ASPECTOS ECONÓMICOS: Que respecto a este tema y


gastos que originó todo lo relacionado al cuidado de
nuestro padre, es el siguiente, y esta demandada, lo
sabe bien, ya que siempre estuvo involucrada en ello:

-La actora, mi hermana Gladys no puso ningún peso;

-Ana Julia ningún peso;

-Mauricio Antonio, e noviembre, año 2020 puso


160.000 pesos (porque, en parte, se le pagaba a su hija
como cuidadora en el mes de diciembre de 2020. Esto es
especulación mía, pero los hechos lo demuestran así, ya
que después de renunciar su hija, ni siquiera llamaba a
nuestro padre);
-Patricio Humberto, solo en el año 2020, puso
100.000 pesos, nada el año 2021;

-Maritza González, a pesar su enfermedad ponía


$100.000 mensuales, inclusive después que dejó de
cuidarlo personalmente por 3 meses. O sea, la única en
el año 2021, (con una enfermedad a cuestas) hizo
aportes.

-En todo esto, ésta demandada se ha llevado el


mayor peso en los gastos de mi padre, pagando las
cuidadoras desde Agosto 2020, inclusive cuando estaba al
cuidado con Maritza, Yo costeaba los gastos de la
cuidadora en San Vicente. También asumiendo las
diferencias económicas, pagaba y hablaba con las
cuidadoras y hacia las compras, abastecía a mi padre de
víveres.

10.- EN CUANTO A LOS HECHOS DE LA DEMANDA. Que, por


todo lo relatado, esta parte no se explica dónde está el
hecho constitutivo de VIF. Se Cuidó y asistió a su padre
en las medidas de sus posibilidades, y más allá,
llevándose el mayor peso, hablo de esfuerzo físico,
emocional, traslado de Linares a la localidad de
Abránquil, Comuna de Yerbas Buenas, desde que fue traído
por Maritza a su domicilio, el resto de mis hermanos no
aportaban nada y no me refiero a lo económico. No está
demás señalar que, nunca maltrate física o
psicológicamente a nuestro padre, me duele pensar que
mis hermanos piensen eso, si ni siquiera estaban con él,
no lo veían, ni quisiera estaban ahí como para ver un
posible maltrato, no tenían ninguna responsabilidad con
nuestro padre, la actora no explica cómo violenté a mi
padre. Que, por todo lo señalado y narrado, no se
configura en la demanda VIF, ya que no hay narración de
los hechos o descripción de daño físico o psíquico. Que
el párrafo entre comillas es muy importante aclarar,
según la actora, al final del Primer Otrosí;

“…Considerando los hechos y los antecedentes


que se acompañan en esta presentación dan cuenta de
una clara situación de violencia física y existiendo
un riesgo y peligro inminente que la situación se
repita…”

Que, como se puede ver o más bien leer, no se señala


cuáles serían los hechos o actos de violencia física. Que
de acuerdo al artículo 86 de la Ley 19.968 nos dice que:
“Contenido de la demanda. La demanda contendrá la
designación del tribunal ante el cual se presenta, la
identificación del demandante, de la víctima y de las
personas que componen el grupo familiar, la narración
circunstanciada de los hechos y la designación de quien o
quienes pudieren haberlos cometido, si ello fuere
conocido”.

Que, la demanda no tiene la identificación de todas


los hijos que componen el grupo familiar, que son seis,
no hace una narración o descripción de los hechos materia
de VIF, según el artículo 86, en concordancia con el
articulo 254 N° 4 del Código de Procedimiento Civil, pero
el otrosí citado señala que “dan cuenta de una clara
situación de violencia física”, la cual no se especifica,
o explica qué o cuales situaciones serian “clara”, habla
la actora sin describir dónde está el daño físico a mi
padre, si se le cuidó, tuvo personas que lo asistían día
y noche, se le proveía lo que necesitaba.

Su demanda es inconexa al señalar que, en lo


principal, solicita que a ésta parte, se le “condene al
pago de las una multas que establece la ley del Ramo,
además de la prohibición de acercarse a la víctima, y al
domicilio del padre mi representada”, lo que no tiene
sistematización y orden de ideas, ya que debió establecer
la VIF, los hechos que la constituyen y en consecuencia
solicitar que esta parte sea condenada por ella, cuestión
que no hace.

Después, en el primer otrosí se refiere nuevamente a


la violencia intrafamiliar (que debe ir en lo principal)
y vuelve a pedir cautelares. Ahora, agregó a las
cautelares pensión de alimentos.

Otro error notable es que, y se deja de manifiesto


su desconocimiento de todos los hechos, cuando relata en
la demanda que;

“…fue expulsado de su casa de la cual es dueño, en


donde ha vivido toda su vida y ahí tenía todas las
comodidades para vivir tranquilo de acuerdo a su condición,
además una persona que lo cuidaba de nombre EUGENIA
GONZALEZ ALARCON y la Sobrina de mi representada la
señorita CLAUDIA GONZALEZ BECERRA.. Además de la
Demandante que se preocupaba de que sus medicamentos
fueran los necesarios para poder contra arrestar sus
patologías…” (El subrayado es mío)

Que, aquí no es correcto lo señalado, puesto que


estaba sólo al cuidado de doña Claudia González Becerra,
desde diciembre del 2020, o sea desde que volvió de la
casa de la Sra. Maritza, hasta el 6 de Enero de 2021, día
en que renuncia. Entonces esta parte contrata a doña
Eugenia González Alarcón y a doña Sara Maureira. Los
continuos errores de la actora, en su demanda no hacen
más de demostrar su desconocimiento de los hechos, y lo
que es peor, que no se preocupaba de su padre, la actora
no es participa en esto, menos “preocuparse de sus
medicamentos”. Tampoco fue expulsado de su casa, solo fue
llevado a un Hogar para sus cuidados, debido a que la
actora y los demás hermanos no ayudaban en nada y ya,
esta parte debía estar trabajando en marzo de 2021.

Que ninguno de mis hermanos tenía la voluntad de


ayudar, ni aportar económicamente, sabiendo que esta
parte lo cuidaba, y doña Gladys no lo veía desde 9 de
septiembre del 2020, por lo que muy mal podía ocuparse de
“los medicamentos” de nuestro padre. Que otro error en el
libelo de la demanda “que fue “expulsado” de su casa…”,
ahora sabiendo que jurídicamente la expresión “expulsión”
puede ser de carácter administrativo, regulada por el DL
1.094 de 1975, y la otra de carácter penal, en la Ley
20.603 de 2012, ante un hecho penal. En la primera opción
sería como si fuera extranjero y que en el país después
del vencimiento de los plazos de residencia (Art. 71) o,
si se le sorprende realizando actividades remuneradas sin
autorización (Art. 80 inciso 2 en relación al Art. 70) o,
ha ejecutado actos contrarios a la moral o buenas
costumbres (Art. 17 en relación al Art. 15 número 2)
todas del DL 1094. Lo cual carece de toda lógica.

Que continúa la demanda:

“Así las cosas mi representada no sabe si se continuo


con su tratamiento para sus enfermedades y tampoco supo
si las visitas médicas domiciliarias se mantienen, es decir
además de estar en una situación de incertidumbre”.

Que, de sus dichos se desprende que su narrativa es


falsa, porque afirma que “se preocupaba de sus
medicamentos”, y pero en la frase, continuando su
narración, señala “que no sabe” si se le están dando sus
medicamentos, los que siempre se han dado, quedado al
descubierto el alcance de su preocupación. Si no lo sabe,
es porque se desentendió de nuestro padre que, más encima
interpone la presente demanda, que a confesión de parte
relevo de prueba, puesto que nuestro padre fue internado
recién el 3 de marzo del 2021 en el recinto Sagrada
Familia, circunstancias ya explicadas, entonces cabe
preguntarse; ¿dónde estuvo antes, 6 meses enteros?, ¿qué
hizo por nuestro padre, lo llamó, compró medicamentos, lo
ayudó en algo, en lo que hubiese sido?, ¿cómo no sabe si…
“…la demandante que se preocupaba de que sus medicamentos
fueran los necesarios para poder contra arrestar sus
patologías”?, ¿podría acompañar una boleta de los últimos
6 meses, que justifiquen sus dichos?. Por ello hay falta
a la verdad, un engaño, puesto que no se preocupó ni
estuvo con nuestro padre por 6 meses, mínimo.

Que además, por ser casa de mi padre, no podía


negarle el ingreso a nadie y esta parte no hace
discusiones, peleas o problemas a los demás, es más, me
hubiese gustado y bienvenida la ayuda o compañía de
cualquiera de ellos para distribuir los menesteres. No
podía y nunca hice, negarle la entrada a nadie de mis
hermanos. Tampoco menciona, un llamado telefónico, por
cualquiera de ellos.

Que, en otro punto, la demandante alega que cuando


fue a visitar a su padre, al hogar Sagrada Familia y “se
identificó como hija para poder saber el estado de su
padre y jamás le quisieron dar ningún tipo de información
con respecto a su padre”, lo que sucedió en realidad, es
que ella quería ingresar al recinto y se le negó por
normativa y protocolo ante la pandemia, hecho notorio y
público del brote de covid-19. Se le informó que su padre
estaba bien, pero no la dejaron ingresar, no porque
quisiesen o por razones personales, y eso se lo
explicaron a ella, según lo explicó don Guillermo
Parraguez, encargado del recinto, que señaló que fue no
solo por normativa sanitaria, sino que además por
experiencia en otros centros o recintos similares que,
por dejar entrar a muchos parientes, éstos contagiaron a
las personas cuidadas y al personal que los atiende.
Que, a mayor verosimilitud de lo señalado, en
respuesta que consta en la causa, a folio 19, en el
OFICIO 221-2021 se dan los detalles que se mencionan, y
que por Resolución 591 del 2020 del Ministerio de Salud,
se aplica restricción a las visitas como consecuencia a
la declaración de Estado de Excepción Constitucional de
Catástrofe, por Calamidad Pública, en virtud del Decreto
Supremo Nº 104, de fecha 18 de marzo de 2020, por
pandemia Covid-19.

También no hay ningún indicio o demanda del


consultorio o CESFAM de la comuna de Yerbas Buenas por
VIF, o contra El Hogar Sagrada Familia, quien cuidó bien
a nuestro padre, había especialistas en distintas áreas,
fue tratada su herida al pie, la que casi estaba sanada,
cuando caprichosamente lo retiraron, en el mes de abril
del 2021, cosa que a nosotros nos fue difícil, inclusive
con las visitas del Cesfam Ambulatorio a su hogar. Además
esta parte pagó un kinesiólogo, para ayudar a su padre en
sus ejercicios para normalizar su movilidad.

Que, en la demanda la actora solicita pensión de


alimentos, la que es infundada e improcedente, ya que no
cumple los requisitos, según dijimos el artículo 86 de la
ley 19.968, omite deliberadamente a una hermana, Maritza
González, y que durante este tiempo esta parte pagó casi
todo, según se explica en el punto 9 de esta
presentación.

La actora es la que menos tiene la calidad moral


para ello, puesto que abandonó a nuestro padre por más de
medio año, (6 meses) y por otro lado, nuestro padre tiene
como solventar sus gastos; recibe pensión, rentas, tiene
un gran terreno, que arrienda como medianero, etc., lo
que le genera un ingreso anual de casi $5.500.000.
Entonces, si somos 6 hermanos, que sea según las
facultades económicas de cada uno, debemos ir todos en
ello. Ahora bien, tal vez en la demanda hay un error en
el guarismo de 1.000.000 pesos y, tal vez quiso decir
100.000 pesos, puesto que hay una serie de errores
numéricos en su demanda, como en el número de la
dirección de esta parte, la que tuvo que corregir, (que
también lo hizo en su nombre) también cometió el error en
el número de la dirección del Hogar Sagrada Familia,
entonces es razonable que, podría ser otro error
numérico. Sin perjuicio de lo anterior, se afirmar que no
es ético, y denota un aprovechamiento solicitar a ésta
parte un millón de pesos ($1.000.000) sin justificar en
cómo, en qué se gastará, cuánto es lo que se requiere
para el cuidado de nuestro padre o cómo racionalizar los
gastos prudentemente, no despilfarrar dineros, ahora que
lo tiene a cargo la demandante. Cuando ésta parte
soportó, sin ayuda de varios de mis demás hermanos, como
se señaló en los puntos 8 y 9 de esta contestación, sería
justo que lo que esta parte pagó y gastó, los demás
hermanos se lo compensen. Al tener esta parte el cuidado
de su padre, todos estuvieron ausentes, ahora se pretende
que esta parte pague un millón de pesos por alimentos
provisorios, (¿los demás también aportarán un millón de
pesos?). La actora no acompaña certificados, documentos o
instrumentos o un informe que detalle y acredite las
necesidades del alimentario, lista de gastos básicos y
generales (esporádicos, mensuales, anuales), que se debe
incluir los gastos del alimentario, dividiendo estos por
el número de integrantes (seis), más gastos específicos
(diarios, mensuales y esporádicos), pero lo extraño es
que solamente se pide alimentos a esta demandada, que fue
la única que estuvo pendiente de pagar los gastos de mi
padre, desde que él quedó postrado y cuidó a su padre por
los últimos 3 meses, después de Maritza.

Tampoco se pide, calculadamente los gastos en la


cual esta demanda incurrió, ya que daría cuenta de lo
desigual y de los desproporcionados gastos que hizo esta
parte en relación a los demás. Que nuevamente no se hace
mención.

11.- Que, hay un claro intento de aprovechamiento,


económico y social, principalmente por de la actora o de
mis hermanos que la apoyan, los que han estado ausentes
mientras estuvo a cargo de Maritza, y después por esta
parte.

Que así las cosas, ellos hicieron el nulo o mínimo


esfuerzo por cuidar o aportar económicamente en el
cuidado de nuestro padre, sin ayudar en su cuidado
básico como bañarlo, cambiar sus ropas, sacarlo al aire
libre en el tiempo de verano o tiempo fresco, nada. Y se
pide $1.000.000, sin justificativos.

12.- Que, es tal el desconocimiento de la actora,


que da una narración de los hechos generalizada y pobre,
narrando hechos inexactos en el libelo de la demanda,
porque los desconoce o carece de ellos, como se ha
explicado detalladamente.

Así las cosas, la demanda tan general, no contiene


los mínimos exigidos por el artículo 86 de la Ley que
crea los Tribunales de Familia, en relación al artículo
254 N° 4 del Código de Procedimiento Civil, en que no se
narran los hechos circunstanciados de la eventual VIF,
de lo que se desprende de la demanda, es que hay mala
fe, una falta a la verdad, y querer aprovecharse de esta
parte, puesto que, como se explicará con detalles:

a. A nuestro padre, se lo internó en un hogar


Sagrada Familia el 3 de marzo de este año, recinto que
tiene todos los conocimientos y personal especializado
para cuidarlo y velar por su salud.

b. Que, esta parte por su obligación de tener


ingresar a trabajar, desde el 1 de marzo de 2021, no
podía estar preocupada de su trabajo y por otro lado,
preocuparse de los víveres, cuidadoras de mi padre, y en
el evento de no presentarse al trabajo, hubiese tenido
que pedir permiso en su trabajo, (ya que a veces las
cuidadoras no iban a trabajar por el estado de excepción
y pandemia, lo cual me hacía asumir el cuidarlo y dejar
mi trabajo) y controlar su asistencia o salida diaria de
ellas.

Aparte del agotamiento físico y psíquico que fui


acumulando y, ante el hecho que debía entrar a trabajar,
los problemas ya señalados, se tomó la alternativa de
internarlo, como último recurso.

c. Que todos los hermanos “desaparecieron”,


igual los sobrinos cercanos y tíos. Esta parte los
llamaba para que, cuando había que llevarlo al baño,
ducharlo o sacarlo de la cama, asearlo, la ayudaran por
ser un hombre pesado y alto, y que mis fuerzas no daban
para ello, por lo cual todos empezaron a no responder,
silenciar, bloquear o apagar sus teléfonos, o ignorar
mis mensajes, no contestando a mis llamadas, (puesto que
asumo que sabían para que los llamaba)

d. Errores múltiples. Dice la actora que fue


expulsado, su casa el día 02 de marzo, cuando el hecho
ocurrido el día 3 de marzo al Hogar Sagrada Familia de
Linares. Señala la dirección de ésta parte,
erróneamente, en el número 872, siendo el número 782,
también erra en la dirección del establecimiento Hogar
Sagrada Familia como 714, siendo en Avenida Presidente
Ibáñez, número 724, erra en mi nombre y obviamente en la
descripción de los hechos.

e. Que, en la casa de mi padre fue puesta una


cadena, para evitar posibles robos a la propiedad, que
en ningún caso, categóricamente, fueron cambiadas chapas
u otras cerraduras para evitar que los demás hermanos
ingresasen. Nunca ha sido o fue mi intención evitar en
ingreso de los demás hermanos, solo se cuidaba la
propiedad, hecho reconocido por la actora en
conversación posterior a su demanda.

f. Que, respecto del Informe Social, emitido


por doña Evelyn Moya González, detalla información
clínica y social de mi padre, sin embargo no prueba que
esta parte haya cometido VIF. Según recibe y describe la
información parcial de la enfermera, doña Javiera
Inzunza Sepúlveda, por correo electrónico del 11 de
marzo 2021, al señalar solo respecto de un día del mes
de febrero y un día del mes de marzo del año 2021, sin
mencionar fechas pasadas. Además, no podemos saber con
precisión los datos que se señalan ahí. Hay fechas como
el 9 de febrero y 4 de marzo de este año, en que habla
solo de curaciones. La enfermera relata que en las 2
ocasiones, Patricio González, viviendo en la casa
contigua, en terreno que mi padre que le donó o vendió,
éste se desatendía de todo, igual que su esposa
Margarita, según el informe social. En atención a la
visita domiciliaria del 4 de Marzo de 2021, la señora
Margarita, esposa de Patricio dice que, “se lo llevaron
llorando” a mi padre, lo que es falso, nosotras íbamos
con él, no es imparcial y que no puede corroborar, y
agregó que asistirá el día 5 de marzo al Cesfam para que
hable con trabajadora social. Como se puede apreciar el
sesgo y contradicción que, cuando esta parte necesitaba
ayuda para el cuidado de mi padre, nadie lo hizo, como
queda de manifiesto aquí. Ahora, el informe no establece
maltrato que sea atribuido a esta demandada, más bien da
cuenta de los hechos que ésta parte tuvo que lidiar,
sola al cuidado de mi padre, habiendo un hermano
viviendo al lado con su esposa, y ella señala hechos
subjetivos, (que se tienen como parte de este informe)
pero se les pudo preguntar en que ayudaron a don Juan, o
por qué se llegó a eso, o si ayudaron o cooperaron en
algo, como controlar la salida de las cuidadoras, ya que
esta parte tiene su domicilio en Linares y viajaba al
domicilio de su padre en la localidad de Abránquil,
comuna de Yerbas Buenas. Por último, el servicio de
salud pudo directamente poner la denuncia de por VIF,
situación que no ocurrió.

g. Que respecto a las medidas cautelares. Es


improcedente que se me prohíba acercarme a mi padre, ya
que no hay VIF hacia él, es una exageración o
sobrerreacción al hecho que, si bien por nadie es
querido, internar a mi padre fue mi última opción.
¿Sancionarme por no poder ayudarlo más?

h. Que, finalmente en la denuncia que se ventiló


y que fue rechazada, en la causa F-170-2021 de este
mismo tribunal, en ella se habló de maltrato
psicológico, en cambio en la causa de marras, se habla
de daño físico, sin precisar cuál es uno y cuál es otro.
Como se ve, sin explicar cuáles serían los hechos
circunstanciados que configuran VIF, en ambas causas, la
contradicción es patente y vaga. No es baladí la
situación, puesto que lo que hace con esta demanda,
encubriendo su intención real, es disfrazar una pensión
para mi padre, pero que solo sea soportada por esta
parte, dejando tranquilos a los demás hermanos, la
mayoría indiferentes hasta ahora.

EL DERECHO.

Que, si bien no existe acuerdo absoluto en la


conceptualización y tipología del maltrato contra el
adulto mayor, lo que aquí en Chile llamamos violencia
intrafamiliar o VIF, en doctrina ha alcanzado un relativo
consenso y que constituye un fenómeno multicausal, y
convergen una serie de elementos de índole personal,
familiar, social y cultural. En el derecho comparado se ha
tipificado el maltrato físico el maltrato psicológico y/o
emocional, el maltrato espiritual, el maltrato sexual, y
el maltrato patrimonial.

Que hay que señalar que la Violencia Intrafamiliar se


regula en la Ley 20.066, en el artículo 5° establece que
se entiende como “Todo maltrato que afecte la vida o la
integridad física o psíquica de quien tenga o haya tenido la
calidad de…” y en el inciso segundo, el sujeto o victima a
proteger, “…adulto mayor o persona con discapacidad que se
encuentre bajo el cuidado o dependencia de cualquiera de los
integrantes del grupo familia…”, y que, cuando “los actos de
violencia intrafamiliar que no constituyan delito, serán vistos por
Tribunales de Familia”, según el artículo 6 de la misma
ley, y que el procedimiento se encuentra regido por las
normas contenidas en la Ley 19.968, dicha normativa lo
trata en el artículo 8 N° 16, y en el Párrafo 2° del
Título IV, artículos 82 a 101, y en lo no previsto por
dicho título, es decir, de manera supletoria, por el
Título III, (el título incorpora los principios del
procedimiento, las reglas generales, de todo lo
relacionado con la prueba y el procedimiento ordinario de
los Juzgados de Familia). En nuestro país, el año 2002, se
promulgó la Ley 19.828 que crea el Servicio Nacional del
Adulto Mayor (SENAMA), con el objetivo de velar por la
plena integración del adulto mayor en la sociedad,
protegerlo del abandono y la indigencia, defender los
derechos que la Constitución y las leyes le reconocen.
Dice el SENAMA que; Maltrato Físico consiste en
“agresiones que dañan la integridad corporal y que son hechas con
la intención de provocar dolor, lesión o ambas (empujones,
zamarreos, bofetadas, golpes, cortes, quemaduras, ataduras,
pueden ser acompañados de aislamiento físico y afectivo”.

Respecto al Maltrato Psicológico, dice son; “actos


intencionales que producen malestar mental o emocional en la
persona, como son las agresiones verbales, aislamiento, amenazas
de intimidación, humillación, falta de respeto a sus creencias,
ridiculización y cualquier otra conducta degradante, amenaza de
abandono, o de envío a un establecimiento de larga estadía, sin su
consentimiento, falta de consideración de sus deseos y
sobreprotección que genera sentimiento de inutilidad o limita la
capacidad de decidir.”

Que en la demanda, no se señala qué tipo de maltrato


es, no hay “la narración circunstanciada de los hechos”, lo
que debió estar “En Lo Principal” de la demanda del cuerpo
del escrito, pero no se narra ningún maltrato. Y solo se
pide, rogando a US., que: “Se sirva tener por interpuesta
demanda de violencia intrafamiliar en contra de ELIZABETH DEL
ROSARIO GONZALEZ ALVAREZ, ya individualizada, y en definitiva
condenarla al pago de las una multas que establece la ley del
Ramo, además de la prohibición de acercarse a la víctima, y al
domicilio del padre mi representada”. Como se ve, solo se pide
multa, prohibición de acercarse al domicilio de la
“víctima”.

Ahora, siguiendo con su demanda en el Primer Otrosí,


(que se supone de acuerdo a su escrito que se pide medidas
cautelares), no tiene concordancia con el cuerpo del
escrito, pues habla de que “los hechos y los antecedentes que
se acompañan en esta presentación dan cuenta de una clara
situación de violencia física” y que a continuación se señala
que; “existiendo un riesgo y peligro inminente que la situación se
repita”, como se ve, se narra de un posible daño físico, y
lo curioso es que en el cuerpo del escrito se habla de
violencia física por primera vez en toda la demanda.
Usando la lógica simple, sin narrar los hechos
constitutivos de VIF, dice que hay que precaver que se
repita la clara situación de Violencia física, pero sin
señalar qué hechos no deben repetirse…, lo que debió
establecerse en lo principal del escrito, y que se
califica malamente de “claro daño físico”, ya posteriormente
habla de precaver un daño en la frase “existe un peligro
inminente en la salud de la víctima ya que no se sabe…”. Lo que
demuestra que el posible daño físico que intentan
“precaver”, no saben cuál sería o, no se detalla. (El
subrayado es nuestro).

De lo que se lee en su libelo, en lo principal de su


escrito, en ningún caso pide que se condene por VIF a esta
parte, ya que no la hay.

Que, así razonando que se debió establecer en “lo


principal” del libelo de la demanda y que, como dijimos
sin describir la VIF, en el otrosí, con dos alocuciones
contradictorias. Primero señala que hay “una clara
situación de violencia física” y, a continuación de ello,
“existiendo un riesgo y peligro inminente”, sin explicar

que “se repita…”, o tal vez se refiera a sacarlo de su


casa para llevarlo al recinto Sagrada Familia, no lo
sabemos. Reiterando nuevamente que en lo Principal de su
presentación, solo pide pago de multa y las cautelares.

Que, en la demanda por VIF se exponen los siguientes


hechos, “Fue expulsado de hogar”, de “Incertidumbre” de la
demandante, de una “campaña de investigación” y, que “no
le dieron información” en el Hogar Sagrada Familia de
Linares. A todas luces, no se desprende de dónde estos
hechos encuadren en el tipo legal de VIF, y que los hechos
sean responsabilidad de esta parte, pues la demanda no lo
señala.

Ahora bien, para que haya VIF se requiere que del


ejercicio habitual de violencia física o síquica respecto
de las personas protegidas por la ley de violencia
intrafamiliar. El requisito determinante de este delito es
que los actos de violencia intrafamiliar sean habituales.
Lo que no se señala por ningún lado en la demanda, ni
cuáles son los hechos que son constitutivos de VIF.

Para que se configure VIF, deben darse las siguientes


conductas:

a) Que exista un maltrato físico: toda agresión


ejercida por una persona que está en relación de poder con
respecto de otra, que puede o no tener como resultado una
lesión física.

b) Que exista un maltrato psicológico o emocional:


hostigamiento verbal habitual por medio de insultos,
críticas o descréditos, ridiculizaciones. Se toma también
en cuenta la indiferencia, rechazo implícito o explícito,
como también aterrorizar a niños, ya que ser testigo de
violencia entre los padres constituye una forma de
maltrato habitual.

e) Consecuencia: Ese maltrato debe afectar la salud


física y psíquica de la víctima, es decir, debe producir
un detrimento, menoscabo, daño o vulneración del aspecto
físico o psicológico del individuo.

f) Ofensor: El sujeto activo de la violencia


intrafamiliar, es aquel que maltrata física o
psicológicamente a otro a quien la ley señala.

g) Situación de riesgo: Cuando exista una situación


de riesgo inminente para una o más personas de sufrir un
maltrato consecutivo de la violencia intrafamiliar, aun
cuando este no se haya llevado a cabo, el tribunal, con el
solo mérito de la denuncia, deberá adoptar las medidas de
protección o cautelares que correspondan.

Por ello el maltrato debe afectar la salud física y


psíquica de la víctima, es decir, debe producir un
detrimento, menoscabo, daño o vulneración del aspecto
físico o psicológico del individuo.

Por otro lado, el artículo 92 de la ley 19.968,


señala; Medidas cautelares en protección de la víctima. El juez de
familia deberá dar protección a la víctima y al grupo familiar. Cautelará,
además, su subsistencia económica e integridad patrimonial. Para tal
efecto, en el ejercicio de su potestad cautelar y sin perjuicio de otras
medidas que estime pertinentes, podrá adoptar una o más de las
siguientes:

Y Nª 3. Fijar alimentos provisorios.

EN CUANTO A LOS ALIMENTOS:

Que el número 3 del artículo 321 del Código Civil


expone, “Los hijos tienen el deber de cuidar a sus padres
en su ancianidad, en el estado de demencia, y en todas las
circunstancias de la vida en que necesitaren sus auxilios.
Dicha obligación, que se materializa en el deber de
socorro, recae en los hijos de cualquier edad, aún
aquellos emancipados”. (Artículo 223, inciso 1º del Código
Civil). No excluye a unos u otros, hermanos o hermanas en
dicha norma legal, como se ha hecho en esta presentación.

Ni el Código Civil ni leyes especiales definen los


alimentos o la obligación alimenticia. En la doctrina
nacional, los alimentos, desde un punto de vista jurídico,
se han definido como las prestaciones a que está obligada
una persona respecto de otra de todo aquello que resulte
necesario para satisfacer las necesidades de la
existencia.

Se agrega por la doctrina a este concepto, que esta


obligación subsistirá, en la medida que el obligado esté
en condiciones de satisfacerla (con las salvedades que
veremos) y el acreedor justifique su necesidad de
reclamarla. René Ramos Pazos, define el derecho de
alimentos como aquél “que la ley otorga a una persona para
demandar de otra, que cuenta con los medios para
proporcionárselos, lo que necesite para subsistir de un
modo correspondiente a su posición social, que debe cubrir
a lo menos el sustento, habitación, vestidos, salud,
movilización, enseñanza básica y media, aprendizaje de
alguna profesión u oficio.”

Agrega el autor que estos alimentos “se deben ex


lege, esto es, la obligación alimenticia encuentra su
fuente en la ley. Y puesto que ella impone a determinadas
personas el gravamen de tal obligación, de modo
independiente de su voluntad, estos alimentos se denominan
también forzosos.”

De igual opinión es Luis Claro Solar, quien


consideraba que no existía razón alguna para no aplicar en
esta materia la regla del artículo 1698 del Código Civil;
en consecuencia, agregaba, es el alimentario quien debe
probar que no cuenta con medios económicos para subsistir
modestamente de un modo correspondiente a su posición
social y la importancia de los recursos de que puede
disponer el demandado para socorrerlo.

Cabe advertir que el artículo 328 del Código Civil


dispone que, si hubo dolo para obtener alimentos, serán
obligados solidariamente a la restitución de los mismos
quienes los hayan recibido y también a la indemnización de
perjuicios todos aquellos que hubieren participado en él.
La norma es similar a la que contempla el artículo 1458,
inciso 2° del Código Civil, que dispone que aquellos que
fraguaron el dolo, responden por el total valor de los
perjuicios y quienes se hubieren aprovechado de él hasta
concurrencia del provecho que han reportado del dolo.

POR TANTO, en mérito de lo expuesto y conforme a los


artículos 225 y siguientes del Código Civil, las normas
respectivas de la Ley N° 19.968, especialmente el
articulo 86 y siguientes, junto con el artículo 254
número 4 del Código de Procedimiento Civil, y demás
normas aplicables.-

RUEGO A SS. Tener por interpuesta contestación de


demanda por VIF, y en definitiva rechazarla en todas sus
partes, por ser imprecisa, contradictoria, ser
manifiestamente incongruentes los hechos narrados, no
contener la narración clara de los hechos, omitir
deliberadamente a una parte de los integrantes del grupo
familiar como doña Maritza González, dar datos falsos, que
manifiestan un aprovechamiento económico contra esta
parte, sin justificar los alimentos provisorios y,
finalmente se condene expresamente a la demandante, antes
individualizada, al pago de las costas de la presente
demanda, puesto que hay dolo en su demanda.-

PRIMER OTROSI: Ruego a US., en virtud de los hechos de


la demanda, en que habla de maltratos físicos y en otra,
la Rit F-170–2021, de este mismo tribunal, en una
denuncia por maltratos psicológicos, en la cual tampoco
se hace una narración de los hechos claros que
consistirían en el supuesto daño psicológico, que fuera
realizada por doña Gladys González Álvarez, demandante
de autos, se tenga vista la causa sirva F—170-2021, por
manifestar evidente contradicción entre ambas.-
SEGUNDO OTROSI: Sírvase SS., tener por acompañado los
siguientes documentos:

1.- Certificado de Nacimiento de todos los hijos de don


Juan González.

2.- Antecedentes, boletas y gastos que realizaron


durante el cuidado de mi padre. (No se guardaron
todos, por ser gastos que hacía voluntariamente)
3.- Certificado de trabajo y firmas diarias de entrada y
salida de mi trabajo. Debía ingresar el 1 de Marzo 2021.

4.- Piezas de la causa RIT F-170- 2021, del Juzgado de


Familia de Linares.

5.- Reitera Informe del Hogar Sagrada Familia de Linares.

6.- Copia simple de la Cédula de Identidad.-

TERCER OTROSÍ: Por este acto vengo en solicitar a S.S.


que las notificaciones que hayan de efectuarse a esta
parte sea a la dirección del correo electrónico
hernangerardob@gmail.com, ello en virtud de lo dispuesto
en el inciso final del artículo 23 de la Ley N° 19.968.-

CUARTO OTROSÍ: Ruego a SS., tener presente que designo


abogado patrocinante y confiero poder al abogado HERNÁN
GERARDO BRAVO, cédula de identidad número 13.505.819-K,
domiciliado en Calle Colo Colo número 483, de la ciudad
de Linares, con todas y cada una de las facultades que
se expresan en ambos incisos del artículo 7° del Código
de Procedimiento Civil, que se dan expresamente por
reproducidas y que se firma con clave única en señal de
aceptación, adjuntando copia de cédula de identidad.

Lo anterior, conforme a lo dispuesto en ACTA 84 del


acuerdo en Pleno de la Ilustrísima Corte de Apelaciones
de Talca, de fecha 30 de marzo de 2020, el presente
patrocinio y poder se efectúa bajo la hipótesis número 3
del acta en referencia, esto es: “...que -sin perjuicio
de las reglas generales- se tendrá por constituido el
patrocinio y mandato judicial, en su caso, sin otras
solemnidades, en las hipótesis siguientes: …3.- Si no
tienen firma electrónica avanzada, pero sí cuentan con
clave única del Estado, cuando ella sea usada por ambos
al momento de ingresar el escrito OJV”.-

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