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Muy a menudo se dice que todo ciudadano tiene derecho a elegir y ser elegido. Y claro,
legalmente es muy cierto ya que es un artículo de nuestra Constitución Política. No obstante,
se ha evidenciado en muchas situaciones que no respetamos esta ley. Un claro ejemplo y el
más significativo es la desigualdad y discriminación que se le da a las mujeres de nuestro Perú
cuando se lanzan para candidatas, para ocupar cargos importantes en nuestro país. Podemos
ver que se sigue viendo como un privilegio el que ellas puedan participar en la política y no
como un derecho que fundamentalmente tienen. Considero que este problema no deja que
avancemos como sociedad, no deja que vivamos en un país totalmente democrático donde
todos puedan involucrarse de manera directa e indirecta en los asuntos o decisiones públicas,
donde podamos tener las mismas oportunidades y derechos, y sobre todo donde podamos
expresarnos libremente sin ser juzgados por ello. Personalmente, pienso que para contribuir
con la erradicación de la problemática mencionada al principio, debemos promover el
cumplimiento de las leyes y por qué no decir de la ley de paridad y alternancia, la cual
debemos tener muy en cuenta para las próximas elecciones regionales Piura 2022.
La Ley de Paridad y alternancia, significa qué en las listas de cargo de representación, el 50%
deben ser mujeres y el otro 50% deben ser hombres, como la propia palabra lo dice: Paridad,
debe haber igualdad. Y su ubicación debe ser de forma intercalada: una mujer, un hombre y así
sucesivamente. Esto es muy importante, debido a que se ha visto que el 70% de las mujeres
que van en las listas de los partidos políticos, van en los tercios inferiores, esto quiere decir
que van a la cola como para que nadie las note y son los hombres los que ocupan los primeros
números. Por tanto, son ellos los que tienen más posibilidad de ser elegidos a comparación de
las mujeres. Otro ejemplo, es que la participación de las mujeres en el Parlamento Nacional no
representa ni el 30% de los 130 congresistas. Las mujeres no pueden seguir siendo
postergadas. Con esta ley (la paridad y alternancia), busca que las mujeres, sí, la mitad de la
población, accedan, en igualdad de condiciones, a cargos de elección popular.
En conclusión, nosotros somos los encargados de velar por bien común, tenemos la obligación
de dar un voto consciente, responsable y reflexivo en las próximas elecciones y promover el
cumplimiento de las normas que deben regir a nuestra sociedad para así construir una
sociedad democrática y sobre todo para acortar la brecha entre la proporción de hombres y
mujeres y poder alcanzar la equidad de género en las políticas públicas y actividad privada.
Porque debemos contrarrestar esos 135 años que nos han quitado el derecho de ser elegidas.
Ahora ya conoces una manera de ver si el candidato o candidata que elegirás será el indicado,
debes ver si primero cumple con la ley de paridad y alternancia en su lista.