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Staff de traducción
MAY
4
YULI
GABBY
DISEÚO
GABBY
Índic
Capítulo Capítulo 5
Capítulo 2 Capítulo 19
Capítulo 3 Capítulo 20
Capítulo 4 Capítulo 21
Capítulo 5 Capítulo 22
Capítulo 6 Capítulo 23
Capítulo 7 Capítulo 24
Capítulo 8 Capítulo 25
Capítulo 9 Capítulo 26
Capítulo 10 Capítulo 27
Capítulo 11 Capítulo 28
Capítulo 12 Capítulo 29
Capítulo 13 Capítulo 30
Capítulo 14 Capítulo 31
Capítulo 15 Capítulo 32
Capítulo 16 Capítulo 33
Capítulo 17
Prólog
Maggi 6
que ni siquiera lo oiga ―dice en voz baja. Una ola de su aliento acaricia
mi clavícula y de inmediato estoy cubierta de escalofríos. Se echa
ligeramente hacia atrás y me mira mientras espera mi respuesta.
―CF ―le digo. No estoy segura de que siquiera sabrá lo que significa
CF, pero si lo mantengo sencillo quizás no me haga demasiadas
preguntas.3
―¿Cómo están sus niveles de
O2? Tal vez sí sabe lo que
significa.
―Hasta ahora todo bien.
―¿Tienes un permiso de tu médico?
Niego con la cabeza. ―Decisión de último minuto. Tiendo a ser un poco
impulsiva a veces.
Sonríe, luego mira de nuevo al formulario y marca "no" en
afecciones médicas. Vuelve a levantar la mirada. ―Bueno, tienes
suerte porque resulta que soy médico. Pero si mueres hoy, voy a
decirles a todos que mentiste en el cuestionario.
Me río y asiento en acuerdo, agradecida de que esté dispuesto a restarle
importancia. Sé que es una gran cosa. ―Gracias.
Ve el cuestionario y dice: ―¿Por qué me agradeces? Si no hice nada.
Su negativa me hace sonreír. Continúa desplazándose por la lista de
preguntas y las contesto con honestidad hasta que finalmente
llegamos a la última página. ―De acuerdo, última pregunta
―dice―. ¿Por qué quieres lanzarte en paracaídas?
Me inclino sobre él para echarle un vistazo al formulario. ―¿Es
realmente una pregunta?
Él señala la pregunta. ―Sip. Justo aquí. 9
***
―¿En verdad eres médico? ―grito por encima del rugido de los
motores.
Estamos sentados justo enfrente del otro. Sonríe enorme, mostrándome
una sonrisa llena de dientes bastante derechos y blancos; apostaría
dinero a que en realidad es un dentista.
―Cardiólogo ―grita. Agita una mano alrededor del interior del
avión―.
¡Hago esto por diversión!
¿Un cardiólogo que hace caída libre en su tiempo libre?
Impresionante.
―¿A tu esposa no le molesta que estés tan ocupado todo el tiempo?
— grito. Oh, Dios. Esa fue una pregunta tan obvia y cursi. Me 1
Sydne
1
(Me liberaste)
I've been running 'round
(He estado corriendo alrededor)
I've been laying down
(He estado acostado)
I've been underground with the devil
(He estado bajo tierra con el diablo)
You've been saving me like a ship at sea
(Tú has estado salvándome como un barco en el mar)
Saying follow me to the light now
(Diciendo sígueme ahora a la luz)
So here we go
(Así que aquí vamos)
A little more
(Un poco
más)
Something I've been waiting for
(Algo por lo que he estado
esperando)
Here we go
(Así que aquí vamos)
A little more
(Un poco 2
más)
(Tú me You set
liberaste)
Shook the dust right off me
(Sacudiste el polvo fuera de mi)
Locked up tight you found the
key (Encerrado, tú encontraste la
llave)
And now I see
(Y ahora veo)
Ain't no place I'd rather be
(No hay lugar donde preferiría estar)
I got you and you got me
(Yo te tengo y tú me
tienes)
You set me free
(Tú me
liberaste)
Hard to know the cost of it
(Difícil saber el costo)
when you've lost something
(Cuando has perdido algo)
Then you know there's a price
tag
(Entonces sabes que tiene un
precio) Think you might been born
to (Pienso que debes haber nacido
para) 2
Maggie
24
Pienso en la muerte cada minuto de cada hora de cada día de mi vida.
Estoy casi segura de que pienso en la muerte más que cualquier persona
promedio. Es difícil no hacerlo cuando sabes que te han dado una
fracción del tiempo que se le ha dado a casi todas las demás personas
en la Tierra.
Tenía doce cuando empecé a investigar sobre mi diagnóstico. Nadie se
había realmente sentado conmigo a explicarme que la Fibrosis Quística
venía con una fecha de caducidad. No una fecha de caducidad de la
enfermedad, una fecha de caducidad de mi vida.
Desde ese día, con tan sólo doce años de edad, vi la vida de una manera
completamente diferente a como la veía antes. Por ejemplo, cuando
estoy en la sección de cosméticos en una tienda, veo la crema anti
envejecimiento y sé que nunca la necesitaré. Tendré suerte si mi piel
siquiera comienza a arrugarse antes de morir.
Puedo estar en la sección de consumibles, ver la fecha de caducidad de la
comida y preguntarme quién durará más. ¿La mostaza o yo?
Algunas veces me llegan invitaciones por correo para una boda para la
que aún falta un año y encierro la fecha en el calendario, preguntándome
si mi vida durará más que el compromiso de los novios.
Incluso al ver a los bebés recién nacidos pienso en la muerte. Saber que
nunca viviré para ver a mi propio hijo convertirse en adulto me ha
quitado todo deseo de convertirme en madre.
No soy una persona depresiva. Ni siquiera estoy triste por mi destino.
Lo
acepté hace mucho tiempo.
La mayoría de la gente vive sus vidas como si fueran a vivir por 100
años. Planean sus carreras su familia, sus vacaciones y su futuro como
si fueran a estar presentes para hacer todo eso. Pero mis pensamientos
que viviré hasta tener 100 años. Porque no lo haré. Basado en el 2
estado
precisamente la razón por la que pienso en la muerte cada minuto de
cada hora de cada día de mi vida.
Hasta hoy.
Hasta el momento en el que salté del avión y miré hacia abajo a una
Tierra que lucía tan insignificante que no pude evitar reír. Y no pude
parar de reír. Todo el tiempo que estuvimos cayendo, me reí
histéricamente hasta que comencé a llorar porque la experiencia fue
hermosa y estimulante y sobrepasó por mucho las expectativas que tenía
sobre ella. Todo el tiempo que estuve cayendo en picada hacia la Tierra
a unas 100 millas por hora, no pensé ni una sola vez en la muerte. Sólo
podía pensar en la suerte que tenía por poder sentirme así de viva.
Las palabras de Jake se repetían en mi cabeza mientras me empujaba
contra el viento. "¡Esto es vivir!"
Tiene razón. Esto es lo más que he vivido y quiero hacerlo otra vez. Sólo
hemos estado en la tierra por apenas un minuto. El aterrizaje de Jake fue
impecable, pero aún estoy atada a él y estamos sentados en el piso, con
mis pies frente a mí mientras trato de recuperar el aliento. Aprecio el
hecho de que me haya dado un minuto de silencio para procesarlo todo.
Comienza a desatarnos y se para. Aún estoy sentada cuando él camina
frente a mí y tapa el sol con su altura. Lo miro y estoy un poco
avergonzada de seguir llorando, pero no lo suficiente como para
ocultarlo.
―¿Y bien? ―dice, extendiéndome su mano ―¿Cómo estuvo?
Tomo su mano y me levanta mientras uso mi otra mano para limpiar
mis lágrimas. Suspiro y luego me río. ―Quiero hacerlo otra vez.
Se ríe. ―¿Justo ahora?
Asiento vigorosamente. ―Sí. Fue increíble. ¿Podemos hacerlo otra
vez? Niega con la cabeza. ―El avión estará ocupado el resto de la 2
**
*
Ridge y yo salimos por tanto tiempo que ni siquiera recuerdo la última
2
vez que estuve preocupada por la ropa que me pondría en una cita.
Además
aquí demetida
estoy, su fascinación por losintentando
en mi armario, sujetadoresbuscar
con broche frontal,
cualquier cosano
que
combine o que no tenga hoyos, o que no parezca hecha para una abuela.
No puedo creer que no tenga ninguna braguita linda.
Abro el cajón inferior donde tengo todas las cosas que por alguna razón
creí que nunca usaría. Busco entre calcetines sin par y bragas ridículas
hasta que encuentro algo que me hace olvidar lo que busco.
Es una hoja de papel doblada. No tengo que abrirla para saber lo que
es, pero camino hacia mi cama y la abro de todos modos. Me siento y
miro la lista que comencé a escribir hace diez años, cuando sólo tenía
catorce.
Es una lista de cosas que hacer antes de morir, aunque en ese entonces
no tenía siquiera idea de lo que eso significaba. Esa es la razón por la
que la llamé "Cosas que quiero hacer antes de cumplir dieciocho" La
parte antes de tener dieciocho del título está tachada porque pasé mi
cumpleaños número dieciocho en el hospital. Cuando llegué a casa,
estaba enojada con el mundo entero y con el hecho de no haber tachado
nada de mi lista. Así que lo cambié a "Cosas que quiero hacer. Tal vez
uno de estos días..."
Sólo hay nueve cosas en la lista:
Conducir un auto de carreras.
Saltar en paracaídas.
Ver una aurora boreal.
Comer spaghetti en Italia.
Perder $5,000 en Las Vegas.
Visitar las cuevas en las Cavernas de
Carlsbad. Saltar en bungee.
Tener una aventura de una noche.
Visitar la Torre Eiffel en París. 2
Miro la lista y me doy cuenta de que de las nueve cosas que quería
hacer cuando era adolescente, sólo he hecho una. Salté en paracaídas. Y
aunque no lo hice sino hasta hoy, terminó siendo el mejor momento de
mi vida.
Me acerco a mi mesita de noche y tomo un bolígrafo. Tacho la segunda
línea en mi lista. Y honestamente, todas son posibles. Tal vez. Si de
alguna manera puedo evitar enfermarme mientras viajo, cada una de las
cosas en esta lista es posible. La número ocho puede incluso ser posible
ésta noche.
No sé cómo se sentiría Jake por ser catalogado como una cosa en mi
lista, pero realmente no creo que se queje mucho al ser la otra parte de
mi aventura de una noche. No es como si fuera a dejar que pasara algo
más, de todos modos. La última cosa que quiero es otra situación en la
que me sienta como si fuera una carga para alguien. La idea de ser la
aventura de una noche de alguien me emociona más que pensar en ser la
novia con una enfermedad terminal.
Doblo la hoja y la guardo en el cajón de la mesita. Camino hacia mi
armario y tomo un par de bragas. Ni siquiera me importa cómo son. Si
todo sale según lo planeado, no las llevaré puestas lo suficiente como
para que a Jake le importe le importe como lucen. Me estoy poniendo el
pantalón cuando me llega un mensaje de texto.
Ridge: Misión cumplida.
Sonrío cuando leo el mensaje. Han pasado varios meses desde que
terminamos, pero Ridge aún me mensajea ocasionalmente. Tan difícil
como fue ver cómo nuestra relación terminó tan abruptamente, hubiera
sido mucho más difícil perder su amistad.
Él y Warren son dos de los pocos amigos que he tenido en los últimos
seis años de mi vida. Estoy agradecida de que no porque nuestra relación 29
no haya funcionado, signifique que nuestra amistad no pueda hacerlo. Y
sí, es raro hablar de Sydney con él, pero Warren me ha puesto al tanto de
todo lo relacionado con Ridge, aún en las áreas en las que no me interesa
estar al tanto. Pero honestamente, quiero que Ridge sea feliz. Y aunque
estuve muy enojada cuando me enteré del beso con Sydney, aún me
agrada la chica. No es como si se hubiera aparecido con malas
intenciones y tratara de robármelo. Ella y yo nos llevamos bien y sé que
ambos intentaron hacer las cosas bien. Pero no estoy segura de poder
llegar a un punto donde todos podamos salir como amigos. Eso sería
demasiado extraño. Pero al menos puedo estar feliz de que Ridge es
feliz.
Y desde que Warren me informó de su plan de llevar a Sydney al bar
ayer en la noche para que Ridge la pudiera convencer de estar con él, he
tenido curiosidad de cómo terminó todo. Le dije a Ridge que me enviara
un mensaje si el plan tuvo éxito, pero no creo que quiera saber los
detalles. Puedo aceptar que ella es parte de su vida ahora y de verdad
estoy feliz por él. Pero creo que nunca estaré en la posición de querer
saber los detalles.
Yo: ¡Eso es genial, Ridge!
Ridge: Sí, eso es todo lo que diremos sobre eso porque aún es muy extraño hablarlo
contigo. ¿Alguna novedad con la tesis?
Me alegra que estemos en la misma página. Y no puedo creer que olvidé
decirle la buena noticia.
Yo: ¡Sí! Me enteré ayer. ¡Obtuve un 5!
Antes de que responda, escucho un golpe en mi puerta delantera. Miro la
hora en mi teléfono y apenas son las 6:30. Lanzo el teléfono a mi cama y
cruzo la sala de estar para ver por la mirilla de la puerta. Jake no
bromeaba cuando dijo que tal vez se apareciera más temprano. Aún ni
siquiera he terminado de arreglarme.
30
Me dirijo al espejo en el pasillo y grito: ―¡Un segundo! ―mientras veo
mi reflejo. Luego corro y veo por la mirilla otra vez. Jake está parado
con sus manos en los bolsillos, mirando hacia el jardín mientras espera
que abra la puerta. Honestamente es un poco surreal, saber que estoy a
punto de tener una cita con este chico. ¡Es un maldito cirujano
cardiólogo! ¿Por qué está soltero? Es muy lindo. Y tan alto. Y exitoso.
Y... eso es un...
Abro la puerta y doy un paso afuera. ―Santa mierda, Jake. ¿Eso es un
Tesla? —No quiero ser grosera, pero lo ignoro y camino directo hacia su
carro. Lo escucho reír detrás de mí mientras me sigue al aparcamiento.
No soy de ninguna manera una fanática de los coches, pero una de
mis vecinas sale con un chico que conduce un Tesla y mentiría si
dijera que no estoy un poco obsesionada con estos carros. Pero no
conozco lo suficientemente bien a mi vecina como para preguntarle si
puedo ir a pasear en el coche de su novio.
Deslizo mi mano por la superficie negra del cofre. ―¿Es verdad que no
tienen motor? ― Me doy la vuelta y Jake me mira divertido mientras me
como su carro con los ojos en lugar de a él.
Asiente. ―¿Quieres ver debajo del capó?
―¡Sí!
Levanta el cofre con su control remoto y se para al lado de mí para
abrirlo. No hay nada más que un espacio vacío cubierto de alfombra. No
hay motor. No hay transmisión. Sólo hay... nada. —¿Así que no tienen
motor? ¿Nunca tienes que ponerle gasolina?
Niega con la cabeza. ―Nop. Ni siquiera hay necesidad de hacer cambio
de aceite. Sólo darle mantenimiento a sus frenos y llantas, de verdad.
―¿Cómo lo mantienes cargado?
―Tengo un cargador en mi cochera. 31
32
Capítulo 3
Ridge
33
Abro mis ojos y miro hacia el techo. Mi primer pensamiento es Sydney.
Mi segundo pensamiento es que no puedo creer que me haya quedado
dormido en el sofá a mitad de la tarde.
Aunque apenas dormí anoche. De hecho, apenas pude dormir durante
toda la semana pasada. Estaba tan ansioso antes del espectáculo que
había planeado para Sydney anoche, no sabiendo cómo reaccionaría, y
luego, después de que ella reaccionara mejor de lo que esperaba y
termináramos en su departamento, todavía no pude dormir porque no
podía dejar de enviarle canciones a Brennan por mensajes de texto.
Probablemente tiene material suficiente para hacer tres canciones solo de
anoche.
Cuando dejé el departamento de Sydney esta mañana, mi plan era
regresar a casa y ponerme al corriente con el trabajo, pero no podía
concentrarme en nada porque estaba exhausto. Finalmente me acosté en
el sofá y sintonicé Games of Thrones. Soy probablemente la última
persona en comenzar la serie, pero Warren ha estado tratando de hacer
que me ponga al corriente. Él está en la temporada tres y yo logré llegar
a los primeros tres episodios de la temporada uno hoy antes de
desmayarme.
Me pregunto si Sydney la ha visto. Si no, preferiría comenzarla de
nuevo y verla con ella.
Tomo mi teléfono y veo que tengo dos mensajes sin leer de Warren, uno
de Maggie, uno de Brennan y uno de Sydney. Voy directo al texto de
Sydney.
Sydney: Escuche la canción, me hizo llorar. Es realmente buena, Ridge.
Ridge: Creo que solo eres parcial porque estás enamorada de mí.
Ella responde al texto inmediatamente.
Sydney: Nop. Amaría la canción aún si no te conociera.
Ridge: No eres buena para mi ego. ¿A qué hora estarás aquí?
34
Sydney: Ya estoy en camino, ¿estarán Warren y Bridgette ahí?
Ridge: Estoy muy seguro que ambos trabajan esta noche.
Sydney: Perfecto. Te veo pronto.
Cierro los mensajes de Sydney y abro los mensajes de texto de Warren.
Warren: Brennan me envió la nueva canción. Me gusta.
Ridge: Gracias. Hoy comencé Games of Thrones. Me gusta.
Warren: ¡YA ERA HORA! ¿Ya llegaste al episodio donde decapitan a Stark enfrente de
sus hijas?
Presiono mi teléfono en mi pecho y cierro mis ojos. Algunas veces lo
odio. Como, realmente lo odio.
Ridge: Eres un jodido imbécil.
Warren: Hermano, ¡es el mejor episodio!
Tiro mi teléfono sobre la mesa de café y me levanto. Camino a la cocina
y abro el refrigerador para intentar buscar una manera de vengarme de
él.
Espero que Warren esté bromeando. ¿Ned Stark? ¿En serio, George?
Hay un bloque de uno de los quesos elegantes de Bridgette en el cajón.
Lo saco y abro el paquete, es una especie de queso blanco con unas
elegantes piezas de espinacas o algo en ellas. Hele a mierda, pero se ve
justo como una barra de jabón una vez que ya no tiene la envoltura. Lo
llevo al baño de Warren, quito su jabón de la ducha y lo reemplazo por
el queso.
¿Ned es decapitado? Lo juro por Dios, si eso en realidad sucede, lanzo
mi televisor.
Cuando regreso a la sala de estar, mi teléfono se ilumina en la mesa de
café. Es un texto de Sydney diciéndome que acaba de estacionarse.
Camino a la puerta y la abro, después bajo hacia las escaleras. Ella está 35
subiendo y tan pronto veo la sonrisa en su rostro, me hace olvidar todo
acerca de la decapitación por la que estoy rezando que sea solo una
terrible broma que Warren me está haciendo.
Nos encontramos en medio de las escaleras. Ella se ríe de mi afán
cuando la empujo sobre la barandilla y la beso.
Dios, la amo. Lo juro, no sé qué habría hecho si ella no hubiera signado
"Cuando" anoche. Estoy seguro de que aún seguiría sentado en ese
escenario, tocando cada canción en la que pudiera pensar mientras bebo
hasta la última gota de alcohol en el bar.
Pero no solo el peor de los casos no sucedió. El mejor de los casos
sucedió. Ella lo amó, y ella me ama a mí y aquí estamos, juntos, a punto
de pasar una perfecta noche aburrida en mi departamento haciendo nada
más que comer comida para llevar y viendo televisión.
Me alejo de ella y se estira para quitarme el brillo labial de los labios.
―¿Alguna vez has visto Game of Thrones? ―le pregunto.
Ella sacude su cabeza.
―¿Quieres verlo?
Asiente. Tomo su mano y caminamos escaleras arriba. Cuando
entramos, ella va al baño y yo tomo mi teléfono. Abro el mensaje de
texto sin leer de Maggie.
Maggie: ¡Sí! Me enteré ayer. ¡Obtuve un 5!
Ridge: ¿Por qué no me sorprende? ¡Felicidades! espero que estés haciendo algo para
celebrar.
Maggie: ¡Lo hice! ¡Fui a hacer paracaidismo hoy!
¿Paracaidismo? Espero que este bromeando. Paracaidismo es lo
último que ella necesita estar haciendo. No puede ser bueno para sus
pulmones. Comienzo a responder, pero hago una pausa a la mitad del
texto. Esta es una de las cosas que menos le gustan de mí. Mi 3
Debo dejar de estresarme acerca de ella haciendo cosas que podrían
empeorar su situación. Es su vida y merece vivirla como sea que ella
desee.
Borro mi respuesta. Cuando alejo la vista de mi teléfono, Sydney está de
pie en el refrigerador, observándome. —¿Estas bien? —pregunta.
Me enderezo y deslizo mi celular en el bolsillo. No quiero hablar
sobre Maggie en este momento, así que sonrió y lo dejo para otro día.
―Ven aquí ―le digo.
Ella sonríe y camina hacia mí deslizando sus brazos alrededor de
mi cintura. La acerco hacia mí. ―¿Cómo estuvo tu día?'
Ella sonríe. ―Excelente. Mi novio me escribió una canción.
Presiono mis labios en su frente, entonces coloco mi pulgar debajo de
su barbilla, inclinando su cara a la mía. Tan pronto comienzo a besarla,
ella toma mi camisa y caminamos de regreso a mi habitación. No
dejamos de besarnos hasta que ella cae sobre mi cama y yo estoy sobre
de ella.
Nos besamos durante varios minutos con nuestra ropa puesta, lo cual
rectificaría, pero es lindo. Realmente no nos enamoramos de una manera
típica, así que pasamos de un beso que nos llenó de culpa por semanas, a
tres meses seguidos sin comunicarnos para nada a una noche de besos y
hacer el amor. No éramos nada en absoluto y de pronto lo somos todo.
Es algo agradable llevarlo despacio. Quiero pasar el resto de la noche solo
besándola porque he estado pensando en besarla de esta manera por tres
meses seguidos.
Ella rueda sobre mi espalda y después se desliza encima de mí
rompiendo nuestro beso. Su cabello cae sobre su cara así que lo quita
deslizándolo sobre su hombro. Me besa suavemente en la boca y
después se sienta a horcajadas sobre mí para poder signar.
―Anoche se siente como...―Hace una pausa, luchando por signar el 37
resto, así que lo dice. ―Se siente como hace una eternidad.3
Asiento en acuerdo y después levanto mi mano para enseñarle cómo
signar la palabra "eternidad". Lo digo en voz alta mientras ella me imita.
Cuando lo consigue, asiento y signo ''Buen trabajo''.
Ella cae a mi lado y se apoya en su codo. ―¿Cuál es la seña para la
palabra sordo?
Hago la moción para la palabra, deslizando mi mano sobre mi
mandíbula y hacia mi boca.
Ella arrastra su pulgar desde su oreja hasta su barbilla. ―¿Así?
Sacudo mi cabeza para hacerle saber que lo hizo mal. Me apoyo en mi
codo, luego tomo su mano para meter el dedo pulgar y enderezar su
dedo índice. Lo presiono en su oído y lo deslizo sobre su quijada hacia
su boca. ―Así ―le digo. Ella repite la seña para "sordo" a la perfección.
Me hace sonreír. ―Perfecto.
Se recuesta nuevamente en su almohada y me sonríe. Amo que haya
estudiado el lenguaje de señas en los tres meses que estuvimos
separados. Aunque estoy muy enojado con Warren por arruinarme Game
of Thrones, nunca seré capaz de pagarle todo lo que ha hecho para
ayudarnos a Sydney y a mí para poder comunicarnos sin tantas barreras.
De verdad es un buen amigo cuando no está siendo un completo idiota.
Sydney captó el ASL muy rápido. Cada vez que dice algo con señas, me
impresiona nuevamente. Me hace querer que hable así por siempre y me
hace querer decir para ella todas las palabras que alguna vez he dicho.
―Mi turno —digo—. ¿Cómo haces el sonido que hace un gato?
Hay tantas palabras que aun no entiendo, y los sonidos que hacen los
animales son una gran parte de ellas. Tal vez tengo problemas con
entender cómo suenan porque es imposible leer los labios cuando el 38
sonido sale de un gato o un perro.
―¿Te refieres a miau? —pregunta.
Asiento y presiono mis dedos contra su garganta para poder sentir su
voz cuando lo dice. Ella repite la palabra para que yo pueda sentirla, y
luego hago mi mejor esfuerzo. ―¿Mi ou?
Ella niega con la cabeza. ―La primera parte suena como. .―Ella
deletrea la palabra mi.
―¿Mi? ―Asiente.
―Segunda parte... ―Levanta su mano para deletrear las letras, A, U
mientras las dice en voz alta. Mantengo mi palma presionada contra su
garganta.
―Otra vez ―digo.
Ella lo pronuncia lentamente. ―Mi.. au.
Amo la forma en la que sus labios forman un círculo al final del sonido.
Me agacho y la beso antes de intentar hacer el sonido nuevamente.
―Mi.. .au.
Sonríe. ―Mejor.
Lo digo más rápido. ―Miau.
―Perfecto.
Comienzo a preguntarle por qué Miau se usa en ciertos casos, pero
olvido que es nueva hablando en señas y sus ojos se agrandan en
confusión mientras trata de entender lo que están diciendo mis manos.
Me inclino sobre ella, tomo mi teléfono y escribo mi pregunta.
Ridge: ¿Por qué la palabra MIAU algunas veces se usa cuando algo es
sexy? ¿La palabra hace un sonido sexy cuando es pronunciada? 3
4
Sigo el rastro que deja el dedo de Ridge con mis ojos mientras lo
de un lado al otro sobre mi estómago. Hemos estado acostados así por
cinco minutos: él recorriendo sus dedos en círculos suaves sobre mi piel
mientras me mira. De vez en cuando me besa, pero los dos estamos
demasiado exhaustos para el segundo round.
Ni siquiera sé cómo sigue despierto. Apenas durmió anoche en mi casa
porque se quedó despierto escribiendo esa canción para mí y tan pronto
como llegué aquí, hace una hora y media, vinimos directo a la
habitación y nos hemos mantenido medianamente ocupados. Son casi
las ocho y si no como algo pronto me quedaré dormida justo aquí, en
su cama.
Mi estómago ruge y Ridge ríe, presionando la palma de su mano sobre mi
estómago. ―¿Tienes hambre?
Lo miro. ―¿Sentiste eso?
Él asiente. ―Déjame bañarme y después veré qué hacer para la cena. ―
Me besa y se levanta de la cama con dirección al baño. Encuentro su
camisa y me la pongo antes de caminar hacia la cocina en busca de algo
de beber. Cuando abro el refrigerador, alguien detrás de mí dice:
―Hola.
Grito y abro completamente la puerta del refrigerador, tratando de
esconder mi parte desnuda detrás de ella. Brennan está sentado en el
sofá, sonriendo.
Al igual que los dos chicos de su banda que todavía no me han sido
presentados formalmente.
Brennan inclina su cabeza. ―La primer noche que te conocí no llevabas
puesta una camisa, ahora eso es todo lo que llevas puesto.
No puedo recordar un momento de mi vida en el que haya estado así de
mortificada. Ni siquiera me puse mi ropa interior y por más que la
camisa de Ridge cubra mi trasero, no sé cómo llegar hasta su habitación
sin perder mi último pedazo de dignidad.
41
―Hola ―digo, colocando mi brazo sobre la puerta con un patético
saludo—. ¿Les molestaría mirar para el otro lado así puedo ir a buscar
mis jeans?
Los tres se ríen pero miran hacia la pared dándome unos segundos para
correr hacia la habitación de Ridge. Tan pronto como empiezo a cerrar la
puerta del refrigerador, la puerta de entrada se abre de golpe y Warren
entra pisando fuerte. Vuelvo a abrir la puerta del refrigerador para seguir
usándola como escudo.
Bridgette entra al apartamento como un torbellino detrás de él y
enseguida Warren da un portazo. ―¡Ve! ―le dice, diciéndole adiós
mientras ella corretea a través de la sala de estar camino a su habitación.
―¡Ve a esconderte en tu habitación y dame el tratamiento del silencio
como siempre haces!
Bridgette cierra la puerta de un portazo. Miro hacia Warren, quien está
observando a Brennan y a los otros chicos en el sofá. ―Hola ― les dice,
sin darse cuenta todavía de que estoy aquí. ―¿Qué hay?
Ninguno de ellos está mirando a Warren porque yo les pedí que se
dieran vuelta hacia la pared, por lo que Brennan continúa mirando a la
pared cuando dice ―Hola Warren.
―¿Por qué están mirando la pared?
Brennan señala el refrigerador pero sigue mirando la pared.
―Estamos esperando a que ella corra hacia su habitación y así pueda
ponerse algo de ropa.
Warren enfoca su atención en mí y sus ojos inmediatamente se
encienden ―Bueno, ¡qué espectáculo estos pobres ojos! ―dice tirando
sus llaves en la barra—. Sé que te veo todo el tiempo, pero es bueno
verte
de finalmente en este apartamento. 42
**
*
Ridge: Hola. ¿Estás dormida? 5
el piso)
(Mismo perro en nuestra puerta)
Same room, same bed
(Misma habitación, misma cama)
I wouldn't wish for anything instead
(No desearía nada en su lugar)
Está viendo la letra cuando salta de la cama y comienza a buscar por el
piso. ―¿Pantalón? ―dice. Señalo la sala de estar. Asiente, como si
hubiera olvidado que entramos a mi cuarto desnudos. Apunta sobre su
hombro—. Guitarra. Mi carro. ―Sale corriendo de mi habitación y un
minuto después lo escucho salir por mi puerta delantera. Veo la hoja y
leo nuevamente la letra. Tengo otras dos líneas escritas cuando regresa a
mi habitación con su guitarra.
When everything is changing
(Cuando todo está cambiando)
Baby you're written in Stone
(Bebé, tú estás escrito en
piedra)
Coloca su guitarra en la cama y lee la letra, luego toma el bolígrafo.
Arranca la hoja y comienza a escribir acordes y notas en otra página.
Esta es mi parte favorita. Es como magia, verlo escuchar una canción
que ni
siquiera tiene sonido y aún ni existe. La pluma vuela frenéticamente
sobre el papel. Vuelve a colocar la hoja con la letra frente a él y
comienza a añadir más.
Feels like we made it
(Se siente como que lo
logramos) Got something of our
own
60
(Tener algo para nosotros)
Maybe it's predictable
(Tal vez es
predecible)
But I can't complain
(Pero no me puedo quejar)
With you and me
(Siendo tú y yo)
All I need
(Todo lo que necesito)
Is more of the same
(Es más de lo mismo)
More of the same
(Más de lo
mismo)
Me pasa el bloc de notas y el bolígrafo y toma su guitarra. Comienza a
tocar y estoy leyendo la letra, preguntándome cómo hace esto con tan
poco esfuerzo. Sólo así, ha creado una nueva canción. Toda una canción
salida de nada más que unas pocas frases y un poco de inspiración.
Comienzo a escribir otro verso mientras toca los acordes.
Same songs in the car
el piso)
All I need
(Todo lo que
necesito) Is more of
the same (Es más de
lo mismo) More of
the same 6
Maggie
besarnos y hacer el amor e inspirarnos para escribir más canciones.
Ridge me besa y luego se aleja para decir: ―Esta es mi nueva canción
favorita.
―Lalemía
Sólo también.
he dado tres bocados a mi hamburguesa, pero alejo el plato de mí
yDesliza ambas
me recargo enmanos por mis
la cabina. ―Nomejillas
puedo yterminar
muerdeesto
su labio por un
―murmuro, 64
6
dejando que mi cabeza caiga sobre la cabina―. Lo siento.
Jake se ríe. —Saltaste de un avión por primera vez y después manejaste un
auto en círculos durante una hora seguida. Me sorprende que seas capaz
de comer algo en absoluto.
Dice esto con un plato vacío frente a él mientras se bebe una
malteada. Supongo que cuando estás acostumbrado a saltar de aviones
y manejar autos veloces, la adrenalina no juega con tu equilibrio al
punto de sentir que el mundo gira dentro de tu estómago.
―Aunque fue divertido ―digo con una sonrisa―. No todos los días
elimino dos cosas de mi lista de deseos.
Coloca ambos platos en la orilla de la mesa y se inclina. ―¿Qué otra
cosa hay en tu lista de deseos?
―Vegas. La Aurora Boreal. Paris. Lo usual. —Fallo en decirle que él
también es una de las cosas en mi lista de deseos. Nos hemos divertido
mucho esta noche, y quiero hacerlo de nuevo. Pero a la vez no,
simplemente porque nos hemos divertido mucho esta noche. He pasado
la totalidad de mi adultez en una relación. No quiero eso de nuevo.
Incluso si él es demasiado bueno para ser verdad—. ¿Por qué estas
soltero? ―Le pregunto.
Rueda sus ojos como si la pregunta le apenara. Toma el vaso de agua
que está frente a él, dándole un sorbo para evitar contestar por unos
cuantos
No esperaba esa respuesta. ―¿Por cuánto tiempo saliste con ella?
―Doce años.
Me ahogo un poco. ―¿Doce años? ¿Qué edad tienes?
―Veintinueve. Comencé a salir con ella en la preparatoria.
―¿Puedo preguntar por qué terminó, o prefieres cambiar de tema?
Jake sacude su cabeza. ―No me importa hablar de ello. Terminamos las
cosas hace unos seis meses. De hecho estábamos comprometidos. Me le
propuse hace cuatro años. Simplemente nunca llegamos a planear la
boda porque estábamos esperando hasta que termináramos nuestras
residencias.
―¿Ella es doctora también?
―Oncóloga.
Dios. De pronto me siento tan... joven. Apenas acabo de terminar mi
tesis, y aquí está él, con una ex prometida que pasó por la escuela de
medicina con él y salva vidas. Tomo mi bebida y le doy un trago,
intentando lavar todas mis inseguridades.
―¿Fue un rompimiento de mutuo acuerdo? ―le pregunto.
Él mira hacia abajo a sus manos brevemente. Un rayo de culpa toma su
expresión antes de que responda. ―No realmente. Yo sólo me di cuenta
doce años más.
segundos muy tarde quedeja
Cuando no quería pasar elcaiga
que la pajilla restolejos
de mi
devida con ella.
sus labios, se Sé
que eso suena
encoge mal después
de hombros. de haber estado
―Normalmente no lo con ella por tanto tiempo,
estoy.
pero por alguna razón elegir pasar el resto de mi vida con ella fue más
Me río. Eso era algo de esperar, supongo. Un paracaidista que maneja
fácil que tan sólo terminar con ella.
un Tesla, bien parecido y cardiólogo no solo se sienta en su casa cada
¿Por quépor
viernes estoy sintiendo
la noche. todo lo eres
―¿Acaso que está diciendo? Me encuentro a mí
un mujeriego?
misma queriendo levantar mi brazo y decir "Amén" como si estuviera en
Él sacude su cabeza. ―De hecho lo opuesto. Acabo de salir de
una iglesia. ―Me puedo identificar absolutamente con lo difícil que esa 66
una relación. Una muy larga relación. 6
decisión debió haber sido.
Jake se inclina, apoyando sus brazos en la mesa. Inclina su cabeza
como pensando por un momento, luego dice: ―Tuve un momento
antes de terminar con ella. Recuerdo preguntarme a mí mismo qué era
de lo que me arrepentiría más. ¿Terminar algo que fue bueno para no
acabar arrepentido? ¿O pasar el resto de mi vida arrepintiéndome por
no tener el valor de terminar algo simplemente porque le tuve miedo al
arrepentimiento? Cualquier opción me habría dejado con alguna forma
de arrepentimiento, así que decidí terminarlo. Y fue difícil. Pero
prefiero arrepentirme de terminar algo bueno, que ser lo que le impida
a ella encontrar algo mejor.
Lo observo por un momento, pero tengo que dejar de hacerlo porque
estoy comenzando a tener ese sentimiento otra vez. El sentimiento
de quiero que sea más que una aventura de una noche.
―¿Por cuánto tiempo estuvieron juntos tú y tu novio? ―pregunta.
―Casi seis años.
―¿Tú fuiste quien terminó la relación?
Pienso en su pregunta por un momento. Si lo ves desde fuera, se podría
decir que lo hice. Pero estando dentro... No estoy tan segura. ―No lo sé
―admito—. Se enamoró de otra chica. Y no es como si hubiera sido una
infidelidad apasionada y escandalosa. Él es una buena persona y me
hubiera elegido al final, pero me hubiera elegido por las razones
equivocadas.
Jake se ve sorprendido. ―¿Te fue infiel?
Odio esa palabra. Me encuentro sacudiendo mi cabeza, a pesar de que sí
lo fue. Ridge me fue infiel. Sólo que eso lo hace sonar más malicioso de
lo que es. ―Infiel es un término feo para describir lo que pasó. —Lo
67
pienso por un momento mientras muevo la pajilla alrededor del vaso.
Luego volteo a ver a Jake y digo: ―Él conectó con alguien más en una
manera más profunda, creo. Llamarlo infiel se siente como un insulto
que no merece. Cruzó la línea con alguien con quien conectó.
Dejémoslo así.
Jake me ve por un momento, leyendo mi expresión. ―No tienes que
hablar de eso si no quieres. Sólo encuentro fascinante que no suenas
como si lo odiaras.
Sonrío. ―Es uno de mis mejores amigos e intentó hacer lo correcto.
Pero algunas veces lo incorrecto es lo correcto.
Jake reprime una sonrisa, como si estuviera impresionado con esta
conversación pero no quisiera mostrarlo. Me gusta eso. Me gusta que sea
interesante. Y me gusta que parece encontrarme interesante. Aún me
está viendo, como si quisiera escuchar más, así que continúo. ―Ridge
escribe canciones para una banda. Hace unos dos años, la banda publicó
una nueva canción y nunca olvidaré la primera vez que la escuché.
Ridge siempre me envía las canciones antes de publicarlas, pero por
alguna razón, nunca me envió esta canción en particular. Después de
descargarla y escucharla, inmediatamente supe la razón por la que nunca
me la envió. Es porque escribió sobre nosotros.
―¿Una canción de amor?
Niego con la cabeza. ―No. Fue como que lo opuesto. Algo así como una
canción de des-enamoramiento, sobre una pareja que necesitaba tomar su
―¿Cuál era esa frase?
―Me sigo preguntando por qué no puedo decirte adiós.
―Wow ―dice Jake, recargándose hacia atrás―. Eso definitivamente es
una confesión.
Asiento. ―No sé por qué esperó tanto tiempo después de eso para
terminar. Supongo que es como tú dices: las cosas entre nosotros eran
buenas, pero sabía que había encontrado algo mejor en otra chica. Y
él merecía mucho más que sólo bueno.
La expresión de Jake es estoica mientras me observa silenciosamente
por unos segundos. Pero luego sonríe sacudiendo la cabeza. ―¿Cuántos
años tienes?
―Veinticuatro.
Hace una cara como si estuviera impresionado. ―Eres un poco joven
como para haber entendido la vida tan bien.
Su cumplido me hace sonreír. ―Sí, bueno, tengo una esperanza de vida
más corta que los demás. Tengo que resumir un montón de lecciones de
vida en un tiempo muy reducido.
Casi me arrepiento de bromear sobre mi enfermedad terminal, pero no
parece molestarlo. De hecho, lo hace sonreír. Dios, odio lo mucho que
me gusta.
propiotucamino
―¿Es primeraporcita desde Ridge?
separado pero no―pregunta. Asiento
supieran cómo y dice―:
hacerlo. La mía
No fue
también.
hasta que escuché esa canción que me di cuenta de que se sentía de la
mismaen
Pienso manera que
eso por unyo. Pero ninguno
momento. de salido
Si no ha los doscon
estuvimos en lasu
nadie desde
posicióneso
ruptura, de significa
admitirloque
en ese entonces.
no ha salido con otra chica desde la
preparatoria.
―¿Alguna vez Y probablemente no debería
le preguntaste por eso? abrir la boca, pero la frase ya
está saliendo. ―Si saliste con tu ex por doce años, eso significa que sólo
―No. No tuve que hacerlo. Supe que se trataba de mí tan pronto
has estado con... 69
como escuché la primera frase. 6
―Ella ―dice con seguridad―. Eso es correcto.
Y aquí estamos, de alguna manera hablando sobre nuestras parejas
sexuales en la cena de nuestra primera cita. Y de alguna manera la
conversación no es incómoda. Conversar con él ha sido genial, de hecho.
No ha habido ni una pausa en toda la noche. Ni siquiera cuando estaba
conduciendo su auto a 100 millas por hora en círculos en la pista de
carreras.
Tampoco ha habido una pausa en nuestra química. Hubo un par de
veces esta noche que creí que me iba a besar y yo lo hubiera dejado,
pero luego sólo sonreía y se alejaba como si disfrutara la tortura.
Supongo que eso tiene sentido. Es un adicto a la adrenalina. La
adrenalina y atracción son dos cosas muy relacionadas entre sí.
Me está observando ahora mismo y yo lo estoy observando, y no sé qué
es exactamente lo que siento en este momento. Un poco de adrenalina,
atracción, tal vez incluso enamoramiento. Lo que sea, tengo un mal
presentimiento porque puedo decir por el gesto intenso en su rostro que
él también lo siente, tanto como yo.
Rompo el contacto visual y aclaro mi garganta. ―Jake....―digo. Levanto
la vista, encontrándome con su mirada otra vez―. No quiero una
relación. Para nada. Ni siquiera remotamente.
Desearía poder explicarle todas las razones por las que no quiero volver a
salir con él. Pero hay demasiadas razones por las que no debería hacerlo,
al contrario de la única razón por la que debería: Me gusta.
Jake presiona la parte de atrás de su nuca y luego se inclina, apoyando
sus brazos en la mesa otra vez. ―Maggie ―dice―. Me falta práctica
para toda esta cosa de las citas. Pero... Creí que te gustaba. ¿Te gusto?
¿O sólo estoy cegado a tu desinterés porque estoy extremadamente
atraído por ti?
Ugh. No puedo ocultar mi sonrisa. También puedo sentir cómo me
sonrojo por el hecho de que me acaba de decir que soy extremadamente
atractiva. ―Sí me gustas. Y...―Esto es tan difícil de decir. Coquetear es
tan extraño para mí―. Me siento extremadamente atraída por ti,
también. Pero no quiero salir contigo después de esta noche. No es nada
personal. Sólo quiero vivir el momento, y justo ahora, otra relación seria
no es parte de mi momento. Ya he estado ahí, lo he hecho. Tengo otros
planes para mi vida.
Jacke se ve intrigado y decepcionado de mi respuesta, ni sé si es
posible sentir ambas cosas al mismo tiempo. Asiente y dice: ―Así
que, ¿eso es todo? ¿Dejo la propina en la mesa, conduzco hasta tu
casa para dejarte ahí y nunca nos volvemos a ver?
Muerdo mi labio inferior, porque saber que es ahora o nunca me pone
nerviosa. O uso este momento para eliminar otra cosa de mi lista, o
despierto mañana arrepentida de no haberlo invitado a pasar la noche.
No
Mistengo miedo.
palabras Puedo hacer
no causan esto. Soy
un impacto Maggie
visible en él.maldita Carter. Soy la
Simplemente
presiona
chica que saltó de un avión y condujo un auto de carreras el mismo día.
sus labios y luego, un momento después, pregunta: ―¿Qué es lo que
Me trago el último rastro de timidez y lo veo a los ojos. ―Esta cita no
quieres?
tiene por qué terminar cuando me dejes en mi puerta.
Me encojo de hombros de una manera lenta e insegura. ―No lo sé ―
Puedo ver el cambio inmediato en su conducta. Puedo ver su intriga, y su
digo, bajando mis hombros otra vez―. Quería divertirme contigo en
atracción, y su esperanza, todo combinado en sus ojos que están viendo
nuestra cita. Y lo hice. Me estoy divirtiendo. Pero no estoy segura de 71
mi boca. Baja la voz y dice: ―¿Cuándo, exactamente, tiene que 7
que sea una buena idea que salgamos otra vez.
terminar?
Santa mierda. Está pasando. Cosa número tres de mi lista, estás
prácticamente en mi bolsillo.
―¿Y si sólo vivimos el momento? ―digo―. Y luego cuando
el momento acabe, te vas a casa y yo me quedo dormida.
La esquina de su boca se levanta en una sonrisa. Luego saca su billetera
y deja la propina en la mesa. Se levanta y me ofrece su mano. Deslizo
mis dedos entre los de él mientras dejamos el restaurante, viviendo el
momento y ni un segundo más.
Capítulo 6
Maggie
Me doy la vuelta para ver si se ha ido tan pronto como abro los ojos.
72
Se ha ido.
Paso mi mano sobre su almohada, preguntándome cómo alguien puede
sentirse tan lleno de vacío.
Anoche fue... bueno... valió la pena, eso es seguro. En cuanto dejamos el
restaurante, nos dirigimos a mi casa. Me dejó conducir. Hablamos de
autos, de mi tesis y del hecho de que quiero probar el salto en bungee.
Se ofreció a llevarme, pero entonces se dio cuenta de que básicamente
me estaba invitando a salir otra vez, por lo que rectificó y mencionó un
lugar en el que creé que debería probar. Cuando llegamos a mi casa,
ambos nos reímos al entrar, porque los rociadores se encendieron tan
pronto como salimos del auto y el chorro de agua nos golpeó en la cara a
los dos.
Caminé hacia la cocina y agarré una toalla de mano para secarme. Jake
me siguió y cuando le alcancé la toalla para que la usara, la tiró sobre
su hombro y me alcanzó, besándome como si hubiera estado esperando
para hacerlo desde el primer momento en que puso sus ojos en mí hoy.
Fue inesperado, pero deseado, y aunque sentía cada detalle mientras su
boca estaba sobre la mía, también estaba llena de incertidumbre. Solo
he estado sexualmente con dos personas en mi vida, y estuve
enamorada en ambas relaciones. Esta ha sido la primera vez que he
estado a punto de tener relaciones sexuales con alguien de quien no
estoy enamorada. No estaba segura de que esperar, pero el saber que él
tampoco, me hizo sentir más a gusto. Seguí recordándomelo con cada
nueva parte de mi cuello que él besaba.
enterado? ¿Solo tenemos permitido tener sexo una vez?
Me reí y él volvió a estar sobre de mí y tan divertido como fue la
primera vez, la segunda vez fue aún mejor. Fue intenso. Y lento. Y
perfecto.
No se volteó sobre su espalda después de la segunda vez. Rodó sobre su
costado, envolvió sus brazos alrededor mí y susurró: —Buena noches—,
antes de besarme. Me gustó que me diera las buenas noches en lugar de
decir adiós, porque me distrajo del hecho de que ambos sabíamos que
se iría antes de que despertara hoy.
Supuse que me despertaría en un estado de eufórica felicidad hoy, no en
un estado de melancolía.
Sin embargo, sentirse un poco decepcionada por el hecho de que todo
haya terminado no es necesariamente algo malo. Significa que no podría
haber tenido una mejor persona para tener mi aventura de una noche. Si
hubiese sido otra persona, no creo haberlo disfrutado tanto como lo hice.
Y si no lo hubiera disfrutado siento que no tendría el derecho de tacharlo
en mi lista de cosas por hacer.
Entonces sí, apesta que no pueda encontrar nada malo en él. Pero sería
aún peor volver a caer en algo que con el tiempo me gustaría. No puedo
ponerme otra vez en una situación en la que sienta que alguien se verá
obligado a cuidar de mí.
No es unade
Después buena sensación,
quince minutos saber que alguien
besándonos, algo se ha convencido
cambió en mí. Node séque
cómo
está más enamorado de ti de lo que realmente está, simplemente porque
lo hizo,
eres pero estuvo
dependiente tanPrefiero
de él. atento ysentirme
cariñoso,melancólica
que todas mis
a sentirme
preocupaciones e inseguridades se desvanecieron junto con mi ropa.
patética.
Cuando llegamos a la habitación, ya estaba metida del todo. Y luego
Agarro la almohada donde durmió Jake —la misma almohada que estaba
fue él quien estaba metido del todo en más de un sentido.
acariciando con nostalgia— y la tiro fuera de mi cama. La arrojaré a la
basura más tarde.
justo cuando penséNique
siquiera
estabaquiero olerla depara
preparándose nuevo.
irse, giró la cabeza y 7
me acerco al tocador y tomo mi lista de deseos. Marco el número ocho y
Me 74
luego observo la lista de nuevo. De repente me siento completa sabiendo
que el número ocho era probablemente la única cosa de mi lista de
deseos que estaba segura nunca tendría las agallas para tachar.
Maggie maldita Carson. Eres ruda.
Doblo la lista y la coloco sobre el tocador. Abro el segundo cajón y
tomo un par de bragas y una camiseta sin mangas y me las pongo.
Necesito ir a visitar a mi abuelo hoy mientras aún tengo la oportunidad,
pero primero necesito waffles y una ducha.
Waffles antes de la ducha. Estoy bastante emocionada por los waffles
después de no haber comido mucho anoche.
Incluso podría ir a hacerme la manicura hoy. Estoy mirándome las uñas
cuando entro en mi sala de estar. Pero me congelo cuando huelo tocino.
Lentamente levanto la cabeza para encontrar a Jake de pie frente a la
estufa de mi cocina.
Cocinando.
Se da la vuelta para alcanzar un plato y me ve. Sonríe. —Buenos días.
Yo no sonrío. No hablo. Ni siquiera le respondo con un asentimiento.
Me quedo ahí, y lo observo preguntándome cómo un hombre de
veintinueve años podría honestamente no entender el significado detrás
de una aventura de una noche. Noche es la palabra clave. No se supone
que haya un "mañana" incluido en la definición.
—Oh —dice, de repente luciendo fuera de lugar—. Pensaste que... está bien
—Empieza a asentir e inmediatamente alcanza la estufa para apagar el
quemador—. Mi culpa —dice sin mirarme. Toma el vaso que está junto a
la estufa y le da un rápido trago a lo que hay dentro. Cuando vuelve a
levantar la cara ni siquiera puede mirarme—. Esto es incómodo. Voy a
irme. Yo solo... —Finalmente hace contacto visual conmigo. Yo me
abrazo incluso más fuerte porque detesto que he creado un momento tan
incómodo cuando él claramente solo estaba tratando de hacer algo
lindo.
—Lamento haber hecho esto incómodo —digo—. Pero no esperaba que
todavía siguieras aquí.
Jake asiente, caminando hacia mí para tomar los zapatos que anoche se
quitó junto al sofá. —Está bien. Malinterpreté las cosas, obviamente. Sé
que fuiste clara ayer en la noche, pero eso fue antes de que nosotros...
dos veces... y fue... —Aprieto mis labios. Ahora sus zapatos están en sus
pies y se para muy recto, mirándome—, esperanzador, supongo. —Luego
apunta a mi puerta principal—. Me voy a ir ahora.
Asiento. Probablemente es lo mejor; acabo de arruinar todo lo bueno de
ayer.
De hecho, él arruinó todo lo bueno de ayer. Yo entré a mi sala de estar
aceptando que nunca lo vería otra vez, ¡Y él tenía que ir y arruinarlo todo
asumiendo que quería que se quedara y me preparara el desayuno!
Alcanza la puerta,
Bajo la vista a mi pero se detiene
camiseta y ropaantes de abrirla.
interior Cuando
y de repente me se da la
siento
vuelta, me observa
modesta. Aunque porsé un momento
que anochey estuvo
despuéssobre
caminamíen elmi dirección.
tiempo
Se detiene acomo
suficiente unospara
dos pies de mí ecada
memorizar inclina su cabeza.
centímetro de—¿Estás
mi cuerpo, segura
me de
que no quieres
abrazo volverme a ver? ¿No hay algo que pueda hacer para
a mí misma.
convencerte de darle a esto otra oportunidad?
—¿Qué estás haciendo? —pregunto.
Suspiro. —Estaré muerta en unos cuantos años, Jake.
Jack está mirándome, un poco inseguro de sí mismo después de ver mi
Mis palabras
reacción lo ofenden
al darme cuentainmediatamente.
de que sigue aquí. DaPlanta
mediosu paso haciaentras
mirada la sin 76
7
apartar
estufa su mirada
y de nuevodeenmí.
mí—Wow
y puedo—Se
jurarlleva
quelasus
mano a la boca
ánimos caen yjusto
la pasa por
su mandíbula—. ¿Realmente estás usando esa excusa?
—No es una excusa, es un hecho.
—Un hecho del que estoy al tanto —responde. Su quijada está tensa y sé
que está enojado. ¿Ves? ¡Si él se hubiera simplemente ido antes de que
despertara esto habría terminado perfectamente! Ahora, cuando se vaya,
los dos estaremos frustrados y llenos de remordimiento.
Doy un paso adelante. —Estoy muriendo, Jake. Muriendo. ¿Qué va a
resultar de esto? Ni siquiera quiero casarme. No quiero hijos. No tengo
ningún deseo de tener otra relación para eventualmente terminar siendo
la carga de alguien. Sí, me gustas. Sí, lo de ayer fue increíble. Y esa es
exactamente la razón del porqué ya no deberías estar aquí. Porque
tengo cosas que quiero hacer y enamorarme y pelear con alguien acerca
de cómo vivo los últimos años de mi vida es algo que nunca estará en
mi lista. Así que gracias por lo de anoche, y gracias por intentar
prepararme el desayuno, pero necesito que te vayas.
Dejo salir un suspiro frustrado e inmediatamente miro al suelo. Odio la
mirada que tiene en sus ojos ahora mismo. Varios segundos pasan y él
no responde, sólo se queda ahí empapándose de todo lo que dije.
Eventualmente da un paso atrás, y luego otro. Levanto la mirada y él la
aparta, girándose hacia la puerta principal. La abre y sale, pero antes de
cerrarla me mira directamente. —Para que conste, Maggie: solo estaba
preparándote el desayuno, no te estaba proponiendo matrimonio.
Capítulo
7
Ridge
7
hacia él, la tomo y lo tiro entero en la basura.
Me inclino contra la barra y no puedo evitar hacer pucheros. Me
pregunto si el que Jake terminara una relación doce años demasiado
tarde es mejor o peor que terminar una relación totalmente y
absolutamente demasiado temprano.
Llevo mis manos a mi nuca y presiono mis hombros, doblándome. Trato
de no sentirme decepcionada, pero el hecho de que me encuentro
decepcionada gracias a un chico que conocí hace veinticuatro horas me
decepciona aún más. Me toma unos cuantos minutos recuperarme y
después me obligo a enderezarme.
Camino al refrigerador y tomo la caja de waffles que tenía la intención
de comer para el desayuno, solo que ahora no estoy ni de cerca
emocionada por comerlos.
Cierra la puerta, y mi casa nunca antes se ha sentido tan vacía como
ahora.
Odio esto. Odio todo lo que le dije. Odio cuánto desearía que no fuera
la verdad.
Odio esta estúpida y jodida enfermedad.
Y odio que le dije todo eso e hice que se fuera antes de que pudiera
7
terminar de cocinar el maldito tocino. Miro el sartén y después camino
y cae de bruces sobre el colchón.
Día difícil, supongo.
Probablemente sea mi culpa porque anoche me quedé en su casa otra
vez. Tal vez debería darle una noche para que recupere el sueño. Fuera
de su trabajo hemos estado juntos casi sin parar desde el martes. Sé que
sólo es viernes, pero estamos exhaustos de estar juntos. De la mejor
manera.
Me aseguraré de que esta noche sea un poco más relajada que las últimas
noches que hemos pasado juntos. Podemos relajarnos viendo Netflix.
Relajarnos y literalmente ver series toda la noche. Entonces la dejaré
dormir el tiempo que ella quiera mañana. Diablos, probablemente me
quede a dormir con ella.
Me acerco a la cama y me recuesto a su lado. Le retiro el pelo de la cara,
ella abre los ojos y a pesar de lucir agotada, me sonríe.
—¿Mal día? —le pregunto.
Ella niega con la cabeza y se da vuelta sobre su espalda. Levanta las
manos para signar pero lo que sea que quiere decirme, no sabe cómo
hacerlo. —Exámenes semestrales —dice finalmente.
Inclino mi cabeza. —¿Exámenes semestrales?
Ella asiente.
—¿Hubo exámenes esta semana?
Me encojo de hombros. Que to recuerde no estoy esperando nada.
Abro
el paquete y hay otro paquete dentro. Un tubo de póster. Conociendo a
Warren, probablemente me envió un rollo de papel higiénico con su
cara en todas partes. Empiezo a quitar la cinta, pero noto que Sydney
camina a mi alrededor, hacia la sala de estar. Cuando la miro, ella está
93
Había planeado invitarla a salir desde el momento en que la vi entrar a
las
instalaciones ese día.
Me sorprendió mi atracción inmediata hacia ella. Ni siquiera puedo
recordar la última vez que me atrajo alguien así. Pero en el momento
en que la vi, algo en mí se despertó. Algo que sabía que estaba allí,
desde que miré a una chica y sentí lo que estaba sintiendo en 9
ese
Le había rogado que me llevara a practicar paracaidismo con él desde
que aprendí a hablar, pero en Texas no es tan fácil darle permiso legal a
tu hijo para saltar de un avión.
Él era un adicto a la adrenalina, justo como el niño que había creado.
Debido a eso, básicamente viví en la zona de salto donde él pasaba todo
su tiempo libre. La mayoría de los padres iban al golf los domingos. El
mío saltaba de aviones.
Para cuando me gradué de la escuela secundaria, ya había completado
450 de los 500 saltos necesarios para calificar como instructor de
tándem. Pero debido al giro que tomó mi vida durante mi último año de
escuela, tardé varios años en terminar esos últimos cincuenta saltos.
Finalmente me certifiqué como instructor de tándem recién salido de la
escuela de medicina. Y a pesar de que Maggie fue mi quingentésimo
salto en tándem, probablemente haya dado ese número de saltos al
menos tres veces desde que comencé a los diez años.
Incluso con tanta experiencia, ese quingentésimo salto en tándem se
sintió como el salto más terrorífico que jamás haya tenido. Nunca antes
me había sentido nervioso para saltar de un avión. Nunca me ha
preocupado que mi paracaídas no se abriera. Nunca antes me había
preocupado por mi vida hasta ese momento. Porque si ese salto en
particular no terminaba bien, eso significaba que la cena con Maggie
estaba completamente descartada. Y realmente quería llevarla a cenar.
Capítulo
9
Jake
9
vida llena si no me deja ser parte de ella? Eso es algo que sólo un
narcisista pensaría. La chica en frente de mí es la misma chica que fue
sola a saltar en paracaídas por primera vez esta semana. Así que
respetaré su decisión y me iré por la misma razón por la que me atrajo en
primer lugar. Porque es una chica ruda que no me necesita para llenar un
vacío. No hay ningún vacío en su vida. Y aquí estoy yo, queriendo
egoístamente rogarle que llene el mío.
—Vas muy bien con tu lista —digo—. Prométeme que tacharás algunos
deseos más.
Inmediatamente comienza a asentir y una lágrima escapa de su ojo.
Rueda los ojos como si estuviera avergonzada. —No puedo creer que
esté llorando. Apenas te conozco—. Se ríe, apretando sus ojos antes de
abrirlos otra vez. —Estoy siendo tan ridícula.
Le sonrío. —Nah. Estas llorando porque sabes que si tu situación fuera
diferente, estarías enamorándote de mí justo ahora.
Deja salir una risa triste. —Si mi situación fuera diferente, habría
empezado a hacer eso desde el martes pasado.
Ni siquiera sé qué decir. Me levanto de mi silla y me inclino para
besarla. Me devuelve el beso, sosteniendo mi cara con ambas manos.
Cuando me alejo, presiono mi frente contra la suya y cierro mis ojos.
—Creo que deseo un poco nunca haberte conocido.
Niega con la cabeza, pero sé que está mintiendo. Responde muy
rápido.
—Estoy bien. Pero probablemente necesite descansar.
Me está pidiendo que me vaya, pero quiero decirle que a pesar de que
apenas la conozco, quiero estar aquí para ella. Quiero ayudarla a
cumplir esos últimos deseos de su lista. Quiero asegurarme de que siga
viviendo y no se enfoque en el hecho de que no tiene tanto tiempo 1
comocambia
Algo todos. en su expresión. Se endurece un poco. Niega con la cabeza y
aleja sus manos de mi cabeza. —Estaré bien. Deberías irte.
Asiento, levantándome. Ni siquiera sé nada sobre su familia. No sé nada
sobre sus padres, o si tiene hermanos y hermanas. Creo que no quiero
estar aquí cuando lleguen. No quiero conocer a las personas más
importantes en su vida si no tengo la oportunidad de ser uno de ellos
algún día.
Aprieto su mano una vez más, mirándola mientras intento ocultar mi
arrepentimiento. —Debí haberte traído un Twix.
Hace una cara de confusión, pero no aclaro mis palabras. Doy un paso
atrás y me despide con un pequeño movimiento de su mano. Le regreso
el gesto, pero me doy la vuelta sin decirle adiós. Sólo salgo de la
habitación lo más rápido que puedo.
Como alguien que ha ansiado el sentimiento de adrenalina durante
toda mi vida, no siempre he tomado las mejores decisiones. La
adrenalina te hace hacer mierda estúpida sin pensar mucho en tus
acciones.
Fue estúpido de mi parte a los trece años, chocar mi primera
bicicleta porque quería saber lo que se sentía romperse un hueso.
Fue estúpido de mi parte a los dieciocho, tener sexo con Chrissy sin
condón, simplemente porque se sentía emocionante, e ignorantemente
asumimos que éramos inmunes a las consecuencias.
Agita su cabeza. —Yo no. Estoy agradecida de haberte conocido.
Terminaste ayudándome con una tercera cosa en mi lista de deseos.
Me alejo y le sonrío, deseando más que nada ser lo suficientemente
egoísta para tratar de hacerla cambiar de opinión. Pero es suficiente
por ahora saber que el día que pasamos juntos significa algo para
ella. Tiene que ser suficiente.
La beso una última vez. —Me puedo quedar hasta que tu familia 1
Creo que Maggie lo sabe. Y estoy seguro de que es por eso que me está
alejando otra vez.
Ella no alejaría a alguien tan firmemente si no estuviera asustada de
que su muerte también lo mataría. Puedo quedarme con ese
pensamiento mientras me voy, al menos. El pensamiento de que vio
algo en nosotros que tenía suficiente potencial como para que haya
tenido la necesidad de terminarlo antes de que ambos nos hundiéramos.
Capítulo 10
Fue estúpido de mi parte a los veintitrés, saltar de espaldas de un
precipicio que no conocía en Cancún sin saber si había rocas cerca de
la superficie del agua.
Ridge
Y sería estúpido de mi parte a los veintinueve, rogarle a una chica
saltar de cabeza en una situación que podría terminar siendo ese loco
tipo de amor que he ansiado toda mi vida. Cuando una persona cae en
Estoy en el fregadero colando la pasta, mirando a Sydney caminar por la
así de profundo, nunca logran salir de ahí, aun cuando termina. Es 1
cocina
como y la sala de estar mientras señala las cosas y las dice con señas. La 111
corrijo cuando está equivocada, pero la mayoría de las veces está en lo
correcto. Señala la lámpara y hace el signo de "lámpara".
Cuando asiento, ella sonríe y luego se quita la toalla de la cabeza. Su
cabello húmedo cae sobre sus hombros y me he imaginado más veces de
lo que me gustaría admitir el cómo huele su cabello recién salido de la
ducha. Me acerco a ella y la rodeo con mis brazos, presionando mi cara
contra su cabeza para poder inhalar su aroma.
Luego vuelvo a la estufa, dejándola de pie en la sala de estar, mirándome
como si fuera raro. Me encojo de hombros mientras vierto la salsa
Alfredo en la sartén de fideos. Alguien me agarra por el hombro y sé de
inmediato que es Warren. Lo miro.
—¿Hay suficiente para mí y Bridgette?
No sé por qué no hicimos esto en el departamento de Sydney. Es mucho
más pacífico allí para mí y ni siquiera puedo escuchar. Solo puedo
imaginar cuánto más tranquilo es para Sydney.
—Hay muchas cosas —digo con señas, dándome cuenta de lo mucho que
necesito sacar a Sydney en una cita real. Necesito sacarla de este
apartamento. Lo haré mañana. La llevaré a una cita de doce horas
mañana. Almorzaremos e iremos al cine, luego a cenar y no tendremos
que ver a Warren y Bridgette.
Voy a sacar el pan de ajo de la cocina cuando Sydney se precipita al
baño. Al principio, me preocupa que ella acabara de correr al baño, pero
luego
Sydney termina su llamada telefónica y se sienta en la mesa junto a
mí.
Deslizo el teléfono hacia ella y le digo "correo de voz" con señas.
—¿Puedes escuchar esto? —señaló.
Esta tarde me pidió que empezara a signar todo lo que le digo, así que
lo hago. Le ayudará a aprender más rápido. Agarro su plato mientras
coloco frente a ella, justo cuando aleja el teléfono de su oreja. 1
Ella mira la pantalla por un segundo y luego mira a Warren antes
conocido de su vida son Hunter y Tori, y me gustaría olvidar que alguna
vez los conocí.
Sydney me sonríe y dice "mamá" con señas mientras me muestra el
teléfono. Ella desliza mi teléfono a través de la barra hacia mí. Presiono
el botón de inicio y veo que tengo una llamada perdida y un correo de
voz. Es raro que reciba llamadas porque todos los que me conocen saben
que no puedo responder el teléfono. Normalmente solo recibo mensajes
de texto.
Abro mi aplicación de correo de voz para leer la transcripción, pero
dice: "La transcripción no está disponible". Pongo mi teléfono en mi
bolsillo y espero a que Sydney termine su llamada telefónica. Haré que
escuche el correo de voz y me diga lo que dice.
Apago la estufa y el horno y pongo los platos en la mesa, junto con los
platos de comida. Warren y Bridgette aparecen mágicamente tan pronto
como la cena está lista. Son como un reloj. Desaparecen cuando llega el
momento de limpiar o pagar facturas, pero aparecen cada vez que hay
algo para comer. Si alguna vez se mudan, ambos van a morir de hambre.
Tal vez debería mudarme. Dejarlos tener este apartamento y vean lo
divertido que es tener que pagar las facturas a tiempo. Uno de estos
días lo haré. Me mudaré con Sydney, pero todavía no. No hasta que
conozca a todos los miembros de su familia y no hasta que haya tenido
la oportunidad de vivir sola durante un tiempo como siempre quiso.
recuerdo que nuestros teléfonos todavía están en el mostrador. Ella
debe
tener una llamada telefónica.
Regresa un momento después a la cocina con su teléfono en la oreja.
Se ríe mientras habla con alguien. Probablemente su madre.
Quiero conocer a sus padres. Sydney no me ha contado mucho sobre
ellos, aparte de que su padre es abogado y su madre siempre ha sido 1
ama de casa. Pero ella no parece molesta cuando les habla. Quiero
mirarme. Nunca antes había visto esta expresión en su rostro. No estoy
seguro de cómo leerla. Parece vacilante, preocupada y de alguna manera
enferma y no me gusta.
—¿Qué pasa? —señalo.
Me da el teléfono y agarra el vaso de agua que serví para ella. —Maggie —
dice, obligando a mi corazón a detenerse. Ella dice algo más, pero no
con señas y no puedo leer sus labios. Balanceo mis ojos hacia Warren y
él señala lo que Sydney acaba de decir.
—Era del hospital. Maggie fue admitida hoy.
Todo simplemente se detiene, o algo así. Digo "algo así" porque Bridgette
todavía está sirviéndose la comida, ignorando todo lo que está pasando.
Miro a Sydney de nuevo y está tomando un trago de agua, evitando mi
mirada. Miro a Warren y él me mira como si yo supiera que hacer.
No sé por qué está actuando como si yo supiera qué hacer. Maggie es
su amiga también. Lo miro expectante y luego señalo —Llámala.
Sydney me mira y la miro y no tengo ni puta idea de cómo manejar esta
situación. No quiero parecer demasiado preocupado, pero no hay forma
de saber que Maggie está en el hospital y no preocuparme. Pero
también estoy preocupado por cómo esto hace sentir a Sydney. Suspiro
y tomo la mano de Sydney debajo de la mesa mientras espero que
Warren se ponga en contacto con Maggie. Sydney desliza sus dedos a
través de los
Me giro para caminar hacia mi habitación, pero Sydney está de pie en
la
puerta con sus zapatos puestos y la bolsa sobre su hombro. Se está
yendo.
—Lo siento —dice—. No me estoy yendo porque esté enojada, solo
necesito procesar todo esto. —Mueve su mano con ligereza alrededor
***
Ella me ayuda a empacar.
Debo procesar el momento y respetarlo por lo que es. Mi nueva novia
me está ayudando a empacar para poder asegurarme de que mi ex novia
no pase sola esta noche en el hospital.
Todo el tiempo que Sydney pasa metiendo más cosas en mi bolsa de
lona, sigo distrayéndola, tirando de ella hacia mí, besándola.
Bridgette levanta la vista de su teléfono y mira a Warren. Él pone los
ojos
en blanco y comienza a alejarse de mí, hacia la puerta. —Tengo que
aprender a dejar de hablar en voz alta cuando te hable con señas. —
Mira a Sydney y le pregunta nuevamente: —¿Estás bien con todo esto?
Sydney asiente, pero luego ambos miran a Bridgette. Ella comienza a
que dice Bridgette. 1
—Escúchame, Sydney —dice—. Algunos hombres vienen con un
Ella pone los ojos en blanco con una sonrisa después de ese mensaje.
Ambos sabemos que eso no pasará. Caminamos de regreso a la sala de
estar, donde Warren y Bridgette todavía están en la mesa. Warren está
comiendo con una mochila colgada en su silla. Bridgette está sentada
frente a él, mirando su teléfono. Cuando levanta la vista, parece un poco
sorprendida de que Sydney y yo salgamos juntos de la habitación.
Supongo que no esperaba que esto terminara tan amigablemente.
—¿Listo? —Warren pregunta.
Asiento y camino hacia la mesa para agarrar mi teléfono. Warren
camina alrededor de la mesa para darle un beso a Bridgette, pero ella
gira la cara para él, así que solo puede besarla en la mejilla. Pone los
ojos en blanco y se endereza, agarrando su mochila mientras se aleja de
la mesa.
—¿Está enojada contigo? —Le pregunto con señas.
Warren parece confundido. Él mira hacia atrás a Bridgette y luego me
mira. —¿No, por qué?
—Se negó a darte un beso de despedida.
Él ríe. —Eso es porque ella acaba de follarme como despedida.
Miro a Bridgette, que todavía está mirando su teléfono. Luego miro
hacia atrás a Warren. Él sonríe encogiéndose de hombros. —Somos
rápidos.
Simplemente no creo haberla amado más de lo que lo hago en este
momento. Y a pesar de que no estaré aquí esta noche, la quiero en mi
cama. Agarro su teléfono y escribo un mensaje en la aplicación de
notas.
Ridge: Deberías quedarte aquí esta noche. Quiero tener tu olor en mi almohada
mañana.
Ridge: Puedo limpiar mañana. Come, pero deja todo como está. O tal vez 1
Bridgette
pesado, como cinco niños y tres bebés de mamás diferentes. Pero el
equipaje de Ridge y Warren es solo una exnovia con la que a veces
tienen pijamadas. Déjalos que jueguen con su Barbie. Tú y yo nos
quedaremos aquí y nos emborracharemos y pediremos pizza y
pagaremos con la tarjeta de débito de Warren. De todos modos, la pasta
de Ridge es una mierda.
Wow.
Es lo que más ha hablado Bridgette alguna vez. Sydney me mira con
los ojos muy abiertos. No estoy seguro de si tiene los ojos muy abiertos
porque Bridgette habló mucho o porque podría haber invitado a Sydney
a pasar el rato con ella. Cualquiera de los dos no tiene precedentes para
Bridgette.
—Debe haber luna llena —dice Warren. Él camina hacia la puerta de la
entrada y la abre. Miro hacia abajo a Sydney y le rodeo la cintura con mi
brazo, tirando de ella contra mí. Inclino mi cabeza y aprieto mi boca
contra la suya.
Ella me devuelve el beso, empujándome hacia la puerta. Le digo que la
amo tres veces antes de que finalmente pueda cerrar la puerta. Y tan
pronto como llegamos al auto de Warren, saco mi teléfono y le envío un
mensaje de texto mientras nos alejamos.
Capítulo
11
Maggie
1
Muero
amo, portecomer
te amo, amo, te un
amo,Twix justo
te amo, ahora.
te amo, Maldita
te amo, te amo,sea, Jake.
te amo, te amo, te amo.
JODIDAMENTE. TE. AMO. SYDNEY.
Ridge: te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo,
te
amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te
amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te
amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te
amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te
amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te
amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te amo, te 1
estaba en el pasillo. Escuché una que otra palabra y me pude dar cuenta
de que estaba hablando con su hijo; cuando oí la palabra "papá" todo
cobró sentido.
De repente entendí por qué parecía tan macho alfa en la superficie, pero
de alguna manera tenía un lado extremadamente adorable y romántico.
Sabía que amaba los autos rápidos y los deportes extremos, pero en
nuestra cita, no pude evitar preguntarme qué fue lo que lo obligó a sentar
cabeza y tomar seriamente su carrera como lo hizo.
Ese algo resultó ser Justice.
Aún no sé por qué Jake hizo ese comentario sobre un Twix, pero
ahora las únicas cosas en mi mente es la velocidad en la que Jake salió
de esta habitación de hospital... Y un Twix.
Me acerco a mi mesita de noche y tomo mi teléfono. No sé cuál de los
dos está conduciendo, así que hago una conversación grupal entre los
tres.
Maggie: En verdad necesito un Twix.
Warren: ¿Un Twix? Como, ¿la barrita de chocolate?
Maggie: Sí. Y un Dr. Pepper, por favor.
Ridge: Warren, deja de textear y conducir.
Warren: Es genial, soy invencible.
están estables y esa es la única razón por la que estoy aquí justo ahora.
Lo
suficientemente estables para comer al menos la mitad de una barra de
Twix. Y la última cosa que quiero hacer es pasar toda la noche en una
cama de hospital sin dormir.
Llamaré al hospital en la mañana para disculparme, diciendo que fue
seguido; está acostumbrada a estar enojada conmigo, especialmente 1
hoy.
Ridge: Nope. No lo creo.
Warren: ¿Alguien dijo DAMA?
Ridge: No.
Warren: ¡¡VAMOS A HACERLO!! ¡Sal en cinco minutos, Maggie!
Ridge: No lo hagas, Maggie. Estaremos ahí en cinco minutos.
Warren: No, estaremos afuera en cinco minutos.
Ignoro la preocupación de Ridge y elijo ponerme del lado de Warren.
Me quito las sábanas, sintiendo la primera punzada de felicidad desde
que Jake entró en esta habitación. Dios, los he extrañado tanto. Miro
alrededor de mi cuarto para asegurarme de no dejar nada. Mi doctora se
fue aproximadamente media hora después de que Jake vino, así que no
espero otra visita de ella hasta en la mañana. Es el momento perfecto
para escapar. Me agacho para quitarme mi I.V., sabiendo exactamente lo
que Ridge está pensando justo ahora.
DAMA es el acrónimo de Discharge Against Medical Advice (Escape sin
autorización médica). Sólo he tenido éxito escapando del hospital dos
veces en todos estos años, pero Warren y Ridge han estado presentes en
ambos escapes, y no es tan irresponsable como Ridge lo está haciendo
parecer. Soy experta en I.V. y agujas, y sé que sólo me hacen quedarme
aquí para monitorearme. No porque esté en ningún tipo de peligro. He
estado más congestionada hoy que otros días, pero mis niveles de
azúcar
Ridge: Pero yo no.
Maggie: ¿Ya casi llegan?
Ridge: Estamos a cinco minutos. Haremos una parada en la tienda antes de llegar.
¿Necesitas algo más?
Maggie: No tengo mi bolso conmigo pero no necesito nada más. Creo que se nos
hace tarde para un DAMA. 1
necesito escuchar.
Sydney: Te amo.
Bridgette: Despídete de Ridge. Este es mi momento.
Volteo a ver a Bridgette, quien me está viendo con aburrimiento. Me río.
Sydney: Bridgette dice que ya no puedo hablar contigo.
Ridge: Mejor hazle caso. No te diré las consecuencias de no hacerlo. Te amo, buenas
noches. Te amo, buenas noches.
Sydney: Lo dijiste dos veces.
Ridge: Lo quiero decir más que eso.
Cierro los mensajes, aun sonriendo, y luego coloco mi teléfono en la
barra. Bridgette se está sirviendo otra copa de vino.
—¿Te puedo hacer una pregunta personal? —dice.
—Claro —Me bajo de la barra y tomo la botella de vino, luego me giro y
lleno mi copa.
—Él... ¿gime?
Me doy la vuelta ante esa pregunta. —¿Disculpa?
Ridge: Eso es inquietante.
Sydney: Bien. Quiero que te sientas inquieto hasta que te vea mañana.
Ridge: No te preocupes, me siento inquieto. Siento muchas cosas; me siento culpable
porque te dejé sola, preocupado de que estés triste, solitario porque estoy aquí y no
contigo. Pero más que nada, me siento agradecido porque haces las situaciones
mucho más fáciles para todas las personas involucradas.
1
Llevo con
Niego mi mano a mi —No,
la cabeza. boca yestoy
sonrío. Amode
segura que dice
que exactamente
la mayoría de lalo
gente no
se pregunta eso, Bridgette.
—Como sea. Sólo responde la pregunta.
No se detendrá. Mi cara y cuello se sonrojan, pero no sé si es por el
vino o porque acaba de hacer esa pregunta tan personal. Tomo un trago
largo y luego asiento. —Lo hace. Él gime y gruñe y suspira, y no sé por
qué, pero el hecho de que es sordo convierte todos sus sonidos en algo
excitante.
Bridgette sonríe. —Eso es tan ardiente.
—No le digas ardientes a los sonidos sexuales de mi novio.
Se encoge de hombros. —No deberías haberlo hecho sonar tan ardiente,
entonces.
El timbre suena y estoy aliviada por esa interrupción. Bridgette de
repente se ve más feliz de lo que la haya visto alguna vez. Se apresura
hacia la puerta con emoción hambrienta, como si no se hubiera comido
todo un plato de pasta Alfredo hace dos horas. —Dame dinero para la
propina, Syd. No tengo nada.+
Es perfecta para Warren. Absolutamente perfecta.
Capítulo 13
Bridgette hace un movimiento con la mano, desestimando mi asombro.
—
Sólo dime. Siempre me he preguntado si hace ruido durante el sexo, ya
que no puede escuchar nada. Ridge
Me ahogo con mi risa. —¿Te preguntas cómo suena mi novio durante
el sexo?
Es la primera vez que voy a casa de Maggie desde la noche en que
Ladea la cabeza
rompimos. Es unypoco
me mira, rodando
extraño, perolapodría
cabeza.
ser—Oh,
peor. vamos.
WarrenMucha
siempre 1
140
tuvo esta habilidad mágica para asegurarse de que ser más extraño de
lo que podría ponerse cualquier situación. Y eso es exactamente lo que
está sucediendo en este momento; acaba de allanar el congelador y el
refrigerador de Maggie y está de pie en la cocina, sumergiendo las
empapadas y húmedas barras de pescado en el budín de chocolate.
—Comes de las cosas más asquerosas —dice Maggie, abriendo el
lavavajillas.
Estoy sentado en el sofá de Maggie, mirándolos; se están riendo,
haciendo bromas. Maggie está limpiando su cocina mientras Warren lo
arruina. Miro la muñeca de Maggie —todavía tiene el brazalete del
hospital junto a ella— y trato de no estar molesto porque estoy aquí.
Pero estoy enojado. Estoy molesto. Si ella está lo suficientemente bien
como para escabullirse de un hospital y limpiar su cocina, ¿qué estoy
haciendo aquí?
Maggie agarra una toalla de papel y se tapa la boca con ella mientras
Warren la golpea en la espalda un par de veces. Noté en el auto que
estaba tosiendo mucho. Cuando estábamos saliendo y notaba que
estaba tosiendo, ponía mi mano en su espalda o en su pecho para sentir
lo mal que estaba. Pero ya no puedo hacer nada de eso, todo lo que
puedo hacer es preguntarle si está bien y confiar en que ella no esté
minimizando su salud.
Éste ataque de tos dura un minuto entero. Probablemente hoy no haya
usado su chaleco percutor, así que me levanto y camino a su
habitación;
varias veces al día para romper todo el moco.
Los chalecos son un salvavidas. Especialmente para Maggie porque vive
sola y no tiene nadie para administrar las percusiones en el pecho. Pero
ella nunca lo usó tanto como debería y eso solía ser un gran punto de
discordia entre nosotros. Supongo que todavía lo es, porque aquí estoy,
conectándolo, a punto de obligarla a usarlo.
Después de conectarlo, Maggie me da un golpecito en el hombro. —Está
roto —Miro hacia abajo al generador y lo enciendo. No pasa nada— ¿Qué
le pasa?
Ella se encoge de hombros. —Dejó de funcionar hace un par de días. El
lunes lo cambiaré.
¿Lunes? Ella no puede pasar todo un fin de semana sin él.
Especialmente si ya está tosiendo como lo está. Me siento en el sofá para
tratar de descubrir qué tiene de malo. Maggie regresa a la cocina y le
dice algo a Warren. Puedo decir por su lenguaje corporal y la forma en
que me mira que dijo algo acerca de mí.
—¿Qué dijo ella?
Warren mira a Maggie. —Ridge quiere saber lo que acabas de decir.
Maggie me mira por encima del hombro y se ríe, luego se enfrenta a mí.
—Dije que no has cambiado.
—Sí, bueno, tú tampoco.
Ella parece
está en ofendida,
su silla junto a lapero
cama.sinceramente,
Agarro el chalecono ymeel generador
importa. Ella
al que
siempre trató dey hacerme
está conectado lo acercosentir
al sofáculpable por preocuparme
para conectarlo porestar.
en la sala de ella.
Puedo ver que nada ha cambiado y mi preocupación todavía la
Se supone que debe usarlo dos o tres veces al día para ayudar a romper
molesta.
el moco en sus pulmones. Cuando una persona tiene fibrosis quística,
Maggie
provocada unse
que paso hacia
moco adelante,
se espese, lo irritada
que a supor
vezmicause
respuesta.
bloqueo—Tienes
de los
razón, Ridge.
órganos No he cambiado.
principales. Antes de queEs algo imposibleestos
se inventaran dejarchalecos,
de tener fibrosis
los
quística.
pacientes dependían de otras personas para realizar percusiones 142
1
manuales
La miro, preguntándome porqué está tan de mal humor. Probablemente
por la misma razón que yo: estamos teniendo los mismos argumentos
que siempre hemos tenido, solo que esta vez no hay relación entre
nosotros para recurrir y aliviar nuestros sentimientos.
Puedo sentir que mi ira comienza a desarrollarse. Ya estaba molesto
porque ella dejó el hospital, ahora estoy molesto de que ella sea tan mal
agradecida incluso por el hecho de que estoy aquí, tratando de ayudarla.
Dejé a mi novia en mi apartamento porque Maggie lo hizo sonar como
si fuera una emergencia, y ahora me está regañando porque estoy
tratando de ayudarla.
No puedo sentarme aquí y tener esta conversación. Me levanto,
desconecto el generador y luego llevo todo a su habitación. Maggie y
Warren pueden comer su sacrílega combinación de palitos de pescado y
budín de chocolate y yo estaré en la otra habitación, tratando de reparar
un chaleco que literalmente ayuda a mantenerla con vida.
Ni siquiera llego a su habitación cuando doy la vuelta y veo que me está
siguiendo. Pongo el generador sobre la mesa al lado de la silla y tomo
asiento. Enciendo la lámpara que está al lado de la silla. Maggie todavía
está parada en la entrada.
—¿Cuál es tu problema, Ridge?
Me río, pero no hay nada de divertido. —¿Qué comiste esta mañana
antes de desmayarte por un nivel bajo de azúcar en la sangre? —Maggie
entorna los ojos. Le estoy preguntando esto porque probablemente ni
siquiera
—Es un viaje largo desde Austin a San Antonio. Además,
necesitábamos
estar juntos. Nosotros tres. Tenemos que encontrar la manera de lidiar
con todo esto en el futuro.
— ¿Todo esto? —dice Maggie, señalándose a sí misma —¿Te refieres a
mí?
¿Tienen que encontrar la manera de lidiar conmigo? Supongo que esto 1
prueba que realmente no soy más que una carga para ustedes.
—Si no puedo opinar sobre cómo te cuidas, ¿por qué estoy aquí? —Me
levanto y camino cerca de ella—. No te cuidas y terminas en el hospital y
luego llamas a Warren, llorando y asustada. Dejamos todo para estar
aquí para ti, pero en cuanto llegamos aquí, sales del hospital sin que te
den el alta ¡Perdóname si tengo mejores cosas que hacer que venir
corriendo cada vez que eres irresponsable!
—¡No tenías que venir, Ridge! Ni siquiera sabía que el hospital los había
llamado. ¡Y no llamé a Warren por teléfono ni le dije que tenía miedo!
Me preguntó si quería compañía y le dije "sí", ¡porqué pensé que todos
podíamos resolver esta situación estúpida como verdaderos adultos! Pero
al parecer NO —Ella cierra la puerta cuando sale de su habitación.
La abro de nuevo pero no sigo a Maggie. Voy directo a la cocina y miro a
Warren. — ¿Por qué me dijiste que lloraba y estaba asustada?
Maggie está de pie al otro lado con los brazos cruzados mientras mira a
Warren. Él está sosteniendo un refresco, mirándonos a ambos. Sus ojos
finalmente aterrizan en mí.
—Bien, exageré. No es la gran cosa. No hubieras venido de otra manera.
Me obligo a inhalar profundamente, buscando calmarme. Hago eso o
voy a golpearlo. Él continúa defendiéndose.
comió— ¿Has siquiera revisado tus niveles de glucosa desde que te
bebiste
un Dr. Pepper y te comiste la mitad de una barra extra grande de Twix?
Puedo decir que está a punto de gritar. Cuando está realmente conmigo
signa y grita. Solía excitarme. Ahora simplemente daría cualquier cosa
por poder gritarle de vuelta.
—No tienes derecho a comentar sobre lo que como, Ridge. En caso de 1
que las cosas habrían resultado diferentes si se tomara todo esto un poco
más en serio, como he intentado que hiciera en los últimos seis años.
—No eres una carga, Maggie —signo—. Eres egoísta. Si te cuidaras y
chequearas tu nivel de azúcar en sangre, si usaras tu chaleco como se
supone que debes hacerlo, .... Y no sé.... Tal vez dejaras de saltar de
los malditos aviones, ninguno de nosotros estaría siquiera discutiendo.
He puesto a Sydney en una situación muy incómoda en la que no
estaría si cuidaras mejor de ti misma.
Warren se cubre la cara con la mano como si yo acabara de joder todo.
Maggie pone los ojos en blanco con exageración. —Pobre Sydney. Ella es
realmente la víctima de todo esto, ¿no es así? Obtiene al hombre de sus
sueños y está sana. ¡Pobre jodida, Sydney! — Ella dirige su atención a
Warren— ¡Nunca lo obligues a venir a cuidarme otra vez! No necesito
que me cuide. ¡No necesito que ninguno de ustedes cuide de mí!
Warren levanta una ceja, pero permanece estoico. —Con el
debido respeto, como que sí nos necesitas, Maggie.
Aprieto mis ojos y miro hacia abajo. Sé que eso tuvo que lastimarla y no
quiero ver el aguijón. Cuando vuelvo a abrir los ojos, ella marcha hacia
su habitación y cierra la puerta. Warren se da vuelta y golpea el
refrigerador. Camino hacia la mesa junto al sofá y tomo las llaves del
auto de Warren.
—Quiero irme largo
—Es un viaje —Le desde
tiro lasAustin
llavesaaSan
Warren, peroAdemás,
Antonio. sus ojos se dirigen a la
puerta de la habitación de Maggie. Corre a toda prisa por la sala de estar
necesitábamos
yestar
abrejuntos.
la puerta. Naturalmente
Nosotros corro con
tres. Tenemos queélencontrar
porque nola puedo
maneraescuchar
de lidiarlo
que
conacaba de escuchar.
todo esto en el futuro.
Maggie
— ¿Todoestá en —dice
esto? su baño, abrazándose
Maggie, al inodoro
señalándose y vomitando.
a sí misma Warren
—¿Te refieres a
agarra
mí? una toalla y se inclina junto a ella. Me acerco y me siento al
borde
¿Tienende la
quebañera.
encontrar la manera de lidiar conmigo? Supongo que esto 1
145
prueba
Esto que realmente
sucede cuando tieneno demasiada
soy más que una carga para
acumulación ustedes.
en sus pulmones.
Estoy seguro de que en este momento es una combinación de eso: no
usar su chaleco durante varios días y todos los gritos que acaba de hacer.
Extiendo la mano y tiro de su cabello hacia atrás hasta que se detiene. Es
difícil para mí estar enojado con ella ahora mismo; está llorando,
apoyada en Warren.
No sé lo que es tener esta enfermedad, así que probablemente no debería
juzgar sus acciones tan duramente; solo sé lo que ser el que cuida a
alguien con esta enfermedad. Solía tener que recordarme eso todo el
tiempo, no importa cuán frustrado me encuentre, no es nada comparado
con lo que ella tiene que pasar.
Parece que todavía necesito ese recordatorio.
Maggie ni siquiera me mira en todo el tiempo que esperamos con ella
para ver si su episodio ha terminado. Ni siquiera me mira cuando
estamos convencidos de que todo ha terminado y Warren la ayuda a
llegar a su habitación. Es su manera de darme el tratamiento silencioso.
Solía negarse a mirarme cuando estaba enojada porque no quería
darme la oportunidad de signarle.
Warren la mete en la cama y llevo su generador a la sala de estar. Una
vez que Maggie se instala, Warren deja la puerta entreabierta mientras
regresa a la sala de estar y toma asiento en el sofá.
Todavía estoy enojado porque mintió sobre la llamada telefónica para
poder obligarme a venir, pero también entiendo por qué lo hizo. Los
tres
los que están en tu esquina, eventualmente vas a perder a tu equipo. Y
sin tu equipo, eventualmente pierdes la pelea.
No quiero que pierda la pelea. Ninguno de nosotros lo hace. Por eso
Warren y yo nos quedamos, porque ella necesita un tratamiento. Y eso
no puede suceder hasta logre arreglar su chaleco.
Warren mira la televisión durante la siguiente hora, levantándose una
vez para llevarle un vaso de agua a Maggie. Cuando vuelve a la
habitación, agita la mano para llamar mi atención.
—Su tos suena mal —dice.
Solo asiento. Ya lo sé. Es por eso que todavía estoy tratando de trabajar
en este chaleco.
Son más de las 2 de la madrugada cuando finalmente descubro el
problema. Encontré un generador viejo que solía usar en el armario de su
pasillo. Cambié los cables de alimentación y puedo ponerlo en marcha,
pero no permanecerá encendido a menos que sujete el cable con los
dedos.
Warren está dormido en el sofá cuando llevo el chaleco a la habitación
de Maggie. Su lámpara todavía está encendida, así que puedo ver que
sigue completamente despierta. Me acerco a su cama, enchufo el
generador y le doy el chaleco. Ella se sienta y se lo pone.
—Hay un corto.
de nosotros Tengoque
tenemos quesentarnos
sujetar el ycable mientras
resolver esto. está encendido
Maggie o se
no quiere
ser
cortará.
una carga, pero hasta que ponga a su salud como enfoque principal,
Ella asiente, pero no dice nada. Ambos conocemos esta rutina. La
nunca será tan independiente como desea ser. Y mientras ella sea
máquina funciona durante cinco minutos y luego tiene que toser para
dependiente, somos nosotros dos quienes nos ocuparemos de ella.
limpiar sus pulmones. Lo manejo por otros cinco minutos y luego le dejo
Sé queotro
tomar somos todo lo
descanso quetoser.
para ella tiene. Y sécontinúa
La rutina que Sydney entiende
durante mediaeso.
hora.
alguien terminamos
Cuando en tu esquina. Pero
con cuando continuamente
el tratamiento, ella se quitahaces cosas yque
el chaleco 1
147
menospreciando
continúa evitandoeelincluso
contactole faltan
visualelconmigo
respeto mientras
a los esfuerzos
se da laque
vuelta.
Pongo el chaleco en el suelo, pero cuando miro hacia atrás, puedo ver
por el movimiento en sus hombros que está llorando.
Y ahora me siento como un imbécil.
Sé que me frustré con ella, pero ella no es perfecta. Yo tampoco lo soy.
Y mientras no hagamos más que discutir y señalar las deficiencias del
otro, nunca vamos a lograr que su salud vuelva al camino correcto.
Me siento a su lado en la cama y le aprieto el hombro. Es lo que solía
hacer cuando me sentía impotente ante su situación. Alcanza y aprieta
mi mano, y solo así, la discusión termina. Ella se da vuelta sobre su
espalda y me mira.
—No le dije a Warren por teléfono que tenía miedo.
Asiento con la cabeza. —Ahora lo sé.
Una lágrima cae de su ojo y se desliza hacia abajo en su cabello. —Pero
tiene razón, Ridge. Tengo miedo.
Nunca antes había visto esta expresión en su rostro y me agarra por
completo. Odio esto por ella, realmente lo hago. Ella comienza a llorar
más fuerte y se aparta de mí, y por mucho que quiero decirle que no
sería tan aterrador si dejara de actuar como si fuera inmune a los efectos
de su enfermedad, no digo nada. Envuelvo mi brazo alrededor de ella
porque no necesita ningún discurso ahora.
dormir, pero Warren me está sacudiendo.
Busco mi teléfono y miro la hora, no esperando que ya sea medio día.
Me siento inmediatamente, preguntándome por qué el me dejó dormir
tanto.
—Levántate —signa—. Necesitamos traer el auto de Maggie y dejarlo aquí
antes de regresar a Austin.
Asiento, frotando el sueño de mis ojos. —Primero tenemos que ir a la
tienda de suministros médicos —le digo—. Quiero ver si pueden darle un
generador hasta que se repare el suyo.
Warren signa "Bien", y camina hacia el baño.
Me recuesto en el sofá y suspiro. Odio cómo ha ido todo este viaje. Me
ha dejado con una sensación incómoda, lo cual, irónicamente, es
exactamente lo que Sydney estaba esperando. Sonrío, sabiendo que se
salió con la suya y ni siquiera lo sabe. No he hablado con ella desde la
última pelea entre Maggie, Warren y yo anoche. Veo mis mensajes y me
doy cuenta de que no me ha escrito desde la noche anterior. Me pregunto
cómo fue su noche con Bridgette.
Ridge: Regresaremos pronto. ¿Cómo estuvo tu fiesta de pijamas?
Ella comienza a responder de inmediato. Miro cómo aparecen las
burbujas de texto y desaparecen varias veces hasta que aparece su
respuesta.
Sydney: Aparentemente
Solo necesita un no tan memorable como la tuya.
**
Su mensaje me confunde. Miro a Warren, que está saliendo del baño.
—¿Le dijiste a Sydney sobre la discusión de anoche?
*
—No —dice Warren—. No he hablado con ninguna de ellas hoy. Supongo
Le hice
que estána resentidas
Maggie unysegundo tratamiento
todavía en la cama. a media noche. Estoy
bastante seguro de que me dormí en algún punto de su segundo
Mi
quepecho
estabaseen
tensa porque
su cama. Séese
quetexto es extraño
Sydney en cómoda con eso, así
no estaría 149
1
que
ella. Ridge: ¿Qué quieres decir?
Sydney: Comprueba Instagram.
Inmediatamente cierro mis mensajes de texto y abro Instagram. Me
desplazo hacia abajo hasta que lo veo.
Hijo de puta.
Maggie publicó una foto de nosotros. Ella está haciendo una cara tonta
a la cámara y estoy a su lado. En su cama. Dormido. El pie de foto dice:
"No he extrañado sus ronquidos".
Aprieto mi teléfono con ambas manos y lo acerco a mi frente,
apretando los ojos. Esto. Es por esto que debería haberme quedado en
casa.
Me levanto. —¿Dónde está Maggie?
Warren asiente con la cabeza por el pasillo y señala: —El cuarto de
lavado.
Camino hacia ahí y la encuentro colgando casualmente una camiseta
como si no acabara de intentar sabotear mi relación con Sydney con su
pequeña publicación de Instagram. Le muestro mi teléfono. —¿Qué es
esto?
—Una foto tuya —dice, como si no fuera obvio.
—Me doy cuenta. ¿Pero por qué?
En todos mis años de conocerla, nunca estuve tan enojado con ella. No
sé
por qué pensé que esto podría funcionar. —Si tienes una emergencia
real, avísame, Maggie. Estaré aquí para ti. Pero hasta entonces, no
puedo ser tu amigo. Camino hacia la puerta principal y la abro, luego
miro a Warren—. Vámonos.
en cuanto a qué decir o hacer. —¿Qué con el auto de Maggie? 1
—Ella puede tomar un Uber —Salgo de la casa de Maggie y voy hacia
hacia la puerta, pero me paro al frente.
—Podrías mostrar un poco de respeto por nuestra relación.
Maggie entorna los ojos. —¿Estás hablando en serio? ¿Realmente me
pides que simplemente muestre respeto por la relación en la que
estás con la chica con la que me engañaste?
Eso no es justo. Ya superamos eso, o al menos creí que lo hicimos. —
Podrías haber publicado cualquier foto mía, pero eliges publicar una de
mí en tu cama. Una cama en la que estuve porque me quedé despierto
durante horas para asegurarme de que te encontrabas bien. Usar eso
como una oportunidad para echarme en cara mi error no es justo,
Maggie.
Su mandíbula se endurece. —¿Quieres hablar de cosas justas? ¿Qué tan
justo es que seas tú el que tuvo una aventura emocional, pero soy yo la
que tiene que ser respetuosa con lo que publico en Instagram? ¿Qué tan
justo es que yo sea la que está enferma, pero a ti es al que le preocupa
que los sentimientos de una chica no salgan heridos por una simple foto?
¿Qué tan justo es que yo sea la mala por comer un Twix? ¡Quería un
maldito Twix, Ridge! —Ella me empuja, así que la sigo. Gira cuando llega
a su sala de estar—. Olvidé que nunca se me permite divertirme cuando
estás cerca. ¡Tal vez no deberías volver porque este es el peor día que
he tenido en meses!
Ella termina de colgar la camiseta y luego se apoya en su lavadora. —
También publiqué una foto de Warren. ¿Por qué estás tan enojado?
Muevo la cabeza y levanto las manos en señal de frustración. Me
confunde el por qué lo hizo en primer lugar y ahora estoy confundido
sobre por qué está actuando como si no fuera gran cosa.
Ella empuja su lavadora. —No me di cuenta de que teníamos reglas
para esta amistad. He publicado fotos de todos nosotros durante seis 1
años.
auto de Warren.
Le toma unos minutos salir finalmente. Estoy seguro de que estaba
tranquilizando a Maggie. Déjalo. Tal vez pueda tranquilizar lo
irrazonable, pero seguro que yo no.
Cuando Warren finalmente llega a su auto, abro mis textos con Sydney.
Ni siquiera trato de justificar la imagen con una excusa. Se lo explicaré
todo cuando esté cara a cara con ella.
Ridge: Lamento que haya publicado eso, Sydney. Ya estoy en camino a mi apartamento.
Sydney: Sin hay prisa. Ni siquiera estaré en tu departamento cuando llegues aquí.
Bridgette: Idiota. Eres un idiota. Idiota. Idiota. Idiota.
Sydney: Y no te molestes en venir a mi apartamento. Yo y Bridgette tendremos otra
fiesta de pijamas.
Bridgette: ¡NO SE ADMITEN IDIOTAS!
Cierro los textos de ambos y recuesto mi cabeza contra el asiento. —Ve al
apartamento de Sydney primero.
Saco mi teléfono y borro la imagen, luego escribo un mensaje para
Ridge.
Maggie: Ha sido una de las peores semanas de mi vida y me aproveché
y lo siento. Dile a Sydney que lo siento mucho. Eliminé la imagen.
Pulso enviar y luego apago mi teléfono y me acuesto. Presiono mi cara
en el sofá y lloro.
El problema de odiarte a ti misma cuando estás sola es que no tienes a 1
***
Condujimos el auto de Sydney a mi apartamento porque no tenía mi auto
y no podemos caminar al restaurante desde su apartamento como
podríamos desde el mío. Ella insistió en que camináramos como la
última vez que vinimos aquí. Sydney pidió desayuno para la cena pero
también comió la mitad de mis aros de cebolla y tres bocados de mi
hamburguesa.
Eso realmente explica mucho. —Eso es extraño, Brennan.
Él se reclina en su asiento. —No, no lo es. Eres mi hermano. Él
mira a Sydney—. Hola. Es bueno verte completamente vestida.
Lo pateo debajo de la mesa y el solo se ríe, después cruza sus
brazos sobre la mesa y dice en voz alta su siguiente oración. —¿Te
sientes con ganas de escribir algo esta noche?
1
Sacudo mi cabeza. —Estoy en una cita con mi novia.
Hasta que Brennan aparece.
Ahora me estoy concentrando en Brennan mientras se desliza en la
cabina al lado de Sydney y se inclina sobre mi mesa por el último aro de
cebolla.
—Hola —Se mete el aro de cebolla a la boca y yo me recargo en mi
asiento, preguntándome qué demonios hace aquí. No es que me importe,
pero es mi primera cita oficial con Sydney y estoy confundido porque él
está interrumpiendo.
—¿Qué estás haciendo aquí? —signo.
Brennan se encoge de hombros. —No tengo nada planeado esta
noche. Estaba aburrido y fui a tu apartamento pero no estabas ahí.
—¿Pero cómo supiste que estábamos aquí?
—La aplicación —dice tirando de mi refresco y tomando un trago. Le doy
una mirada haciéndole saber que no tengo idea de lo que está hablando.
—Tú sabes —dice—. Esas aplicaciones que usas para rastrear los teléfonos
de las personas. Rastreo el tuyo todo el tiempo.
—¿Que demonios? Pero tienes que configurar esa aplicación con mi
teléfono.
Brennan asiente. —Lo hice hace como un año. Sé dónde estás todo el
tiempo.
Decidimos jugar veinte preguntas durante la cena, así que usamos
nuestros teléfonos en lugar de señas porque era difícil hacer eso y
comer al mismo tiempo. En los cuarenta y cinco minutos que hemos
estado aquí no he pensado en mi pelea con Maggie, no he pensado en
lo atrasado que estoy con mi trabajo, ni siquiera he pensado en ese
maldito spoiler de Games of Thrones. Cuando estoy con Sydney así, su
presencia absorbe todas las partes malas de mi dia y encuentro tan fácil
concentrarme en ella y solo en ella. 1
como estoy con Hunter y tan enojada que Maggie debió haber estado
con Ridge, hay pocas traiciones en la tierra que duelen más que la
traición de tu mejor amiga. Ella es la persona con quien compartí mi
vida, mi hogar, todos mis secretos. Y todo el tiempo en el que vivimos
juntas, ella me traicionaba a diario.
No quiero tomar un café con ella. Ni siquiera quiero estar aquí
hablando con ella, actuando como si no me rompió el corazón con diez
veces más fuerza que Hunter.
Niego con la cabeza. —No creo que el café sea una buena idea. —Elijo
caminar alrededor de la parte trasera de su auto para no tener que
acercarme más a ella. Antes de dirigirme hacia las escaleras, la miro—.
Realmente me hiciste daño, Tori. Más de lo que Hunter alguna vez
podría haberme hecho. Pero sigo creyendo que te mereces algo mejor
que un hombre que ni siquiera se molesta en venir y ayudarte a llevar
las bolsas de comestibles.
Me alejo y corro escaleras arriba, lejos de ella, lejos de ese coche
maloliente y lejos de la triste realidad de que todavía no ha encontrado la
felicidad. Me pregunto si alguna vez lo hará.
Entro en el apartamento y Brennan está en el sofá con su guitarra. Él
asiente con la cabeza hacia la habitación de Ridge. Cuando abro la
puerta de la habitación de Ridge, él yace boca abajo sobre la cama,
abrazando una almohada. Me acerco a él, pero está dormido. Sé que ha
tenido
veinticuatro
frente a mí, horas duras,
con dos sacosasíenque nomano,
cada me molesto en despertarlo.
los brazos hacia abajoLo dejo
a los
descansar.
costados. —Entonces, umm... —Hace una pausa e inhala una respiración
profunda,está
Brennan exhalando igualahora,
en la mesa de rápido—.
tocando¿Quieres tomar
la canción que café alguna acaban
él y Ridge vez?
Realmente
de me gustaría
escribir. Camino ponerme
hacia la cocinaal ycorriente.
me sirvoEscuchar
una copatodo sobreSolo
de vino. el
nuevosuficiente
queda novio. para un vaso. Bridgette y yo realmente acabamos con su
escondite. Ridge
La miro por probablemente
un momento, comenzarápor
preguntándome a mantener el vino
qué pensaría queenestoy
una
botella
acuerdodecon
Windex.
eso. Me doy cuenta de que también fui una Tori en un 185
1
momento muy corto durante mi amistad con Ridge, pero tan
—¿Sydney?
Me vuelvo hacia Brennan, él está abrazando su guitarra y su barbilla
apoyada en ella. —Tengo mucha hambre. ¿Crees que puedes hacerme un
sándwich de queso asado?
Me río tan pronto como la pregunta sale de su boca. Pero luego me doy
cuenta de que habla en serio. —¿Me estás pidiendo que te prepare un
sándwich?
—Ha sido un día largo y no sé cómo cocinar. Ridge siempre cocina para
mí cuando estoy aquí.
—Oh, Dios mío. ¿Qué edad tienes? ¿12?
—Cambia el orden de esos números y obtendrás tu respuesta.
Pongo los ojos en blanco y abro el refrigerador para sacar el queso. —No
puedo creer que te esté preparando un sándwich. Siento que estoy
decepcionando a todas las mujeres que alguna vez pelearon por la
igualdad.
—Solo es contra el feminismo cuando le haces un sándwich a tu novio.
No cuenta si solo es un amigo.
Me río mientras saco una cacerola del cajón. —Bueno, ni siquiera seremos
amigos si crees que puedes pedirme que cocine para ti cada vez que
visitas a tu hermano.
Brennan sonríe y se vuelve hacia su guitarra. Él comienza a rasguearlo
con una melodía que no había escuchado de él antes. Entonces comienza
a cantar.
Cheddar, suizo, provolone. Ahí es donde me siento como en casa.
Ponle un poco de queso al pan. Me gusta más que una mamada.
Queso asado
186
Queso asado,
Queso a la parrilla de
Sydney. Blake. No Australia.
Me estoy riendo de sus impresionantes habilidades de improvisación, a
pesar de que fue una canción terrible. Es obviamente tan talentoso como
Ridge, simplemente lo suprime por alguna razón.
Pone su guitarra sobre la mesa y camina hacia la barra. Él agarra una
toalla de papel y la coloca frente a él. Supongo que ese es el alcance de
su preparación de sándwich.
—¿Tienes problemas para escribir letras o pretendes que no puedes
escribir por la culpa?
—¿Por qué me tendría que sentir culpable? —Brennan pregunta,
tomando asiento en el bar.
—Solo una corazonada, pero creo que odias el hecho de que nacieras con
la capacidad de escuchar, pero Ridge no. Así que pretendes que lo
necesitas más de lo que realmente lo haces, porque lo amas —Le doy
vuelta el queso a la parrilla. Brennan no responde de inmediato, así que
sé que lo tengo vinculado.
—¿Ridge también piensa eso?
Lo enfrento completamente. —No lo creo. Creo que le encanta escribir
letras para ti. No te estoy diciendo que dejes de fingir que no sabes
cómo escribir letras tan bien como él; solo digo que entiendo por qué lo
haces.
Brennan sonríe, aliviado. —Eres inteligente, Sydney. Realmente deberías
considerar hacer más con tu vida que solo preparar sándwiches para
hombres hambrientos.
187
Me río y tomo su sándwich con la espátula. Lo dejo caer sobre la
servilleta de papel frente a él. —Tienes razón. Renuncio.
Da un mordisco, justo cuando se abre la puerta principal. Bridgette entra
sosteniendo un saco, vistiendo su uniforme de Hooter y frunciendo el
ceño. Nos ve en la cocina y asiente, luego camina hacia su habitación y
cierra la puerta. —¿Acaba de asentirte con la cabeza? —Brennan pregunta.
—Ese fue un gesto sin incluir el dedo medio extrañamente agradable. ¿Ya
no te odia?
—Nah. Somos prácticamente mejores amigas ahora —Comienzo a limpiar
la cocina, pero Bridgette grita mi nombre desde su baño. Brennan
levanta una ceja, como si estuviera preocupado por mí. Camino hacia su
baño y puedo escuchar un montón de conmoción. Cuando abro la
puerta, me agarra de la muñeca y me empuja hacia adentro y luego
cierra la puerta de golpe. Se vuelve hacia el mostrador y comienza a
tirar el contenido de su saco en el fregadero
Mis ojos se abren cuando veo cinco cajas de pruebas de embarazo sin
abrir. Bridgette comienza a romper frenéticamente una y me da la otra.
— Date prisa —dice ella—. ¡Tengo que terminar con esto antes de que
me vuelva loca! —Saca un palo de la caja y luego agarra otro para abrir.
—Creo que una es suficiente para indicar si estás embarazada.
Ella niega con la cabeza. —Tengo que estar segura de que no estoy
embarazada o no dormiré hasta que tenga doce períodos.
Miro su taza de pis y niego con la cabeza. —No quiero.
Ella tira el inodoro y se pone los pantalones cortos, luego me saca del
camino. Ella sumerge las cinco pruebas en el vaso a la vez y los
mantiene allí. Luego los saca y los pone a todos en una toalla.
Todo esto sucede tan rápido que no estoy segura de haber tenido tiempo
de procesar la idea de que estamos a punto de descubrir si Bridgette
será madre. O si Warren va a ser padre.
—¿Alguno de ustedes quiere niños? —pregunto.
Bridgette niega con la cabeza inflexible. —Ni siquiera un poco. Si estoy
embarazada, puedes quedártelo.
No lo quiero. Mi idea del infierno es tener un niño compuesto por piezas
de Warren y Bridgette.
—¡Bridgette! —Warren grita, justo antes de que la puerta se cierre de
golpe. Bridgette se encoge. La puerta del baño se abre de golpe y de
repente siento que ya no debería estar aquí—. ¡No puedes mandarme un
mensaje de texto así en el medio de mi grupo de estudio y luego
ignorarme cuando te devuelvo la llamada!
Warren... ¿en un grupo de estudio? Me río, pero mi risa hace que los dos
me vuelvan la mirada. —Lo siento. No puedo imaginar a Warren en un
grupo de estudio.
Él ruedados
Tengo los de
ojos.
las—Es un proyecto
pruebas abiertas de grupo
y ella obligatorio
abre —Él
la tercera, vuelve
luego tomasu
una
atención hacia Bridgette—. ¿Por qué crees que estás embarazada? Estás
taza de enjuague
tomando bucal junto al fregadero y la enjuaga. Se baja los
la píldora.
pantalones cortos y se sienta en el inodoro.
—Pepinillos —dice ella, como si fuera una buena explicación—. Esta noche
robe
—¿Hastresleído las instrucciones?
pepinillos de los platos¿Se
de supone que debes
mis clientes y odioorinar en una
los pepinillos.
taza no
¡Pero en esterilizada?
lo único que puedo pensar es en pepinillos! —Ella vuelve hacia
las pruebas
Ella me ignorade embarazo
y comienzay recoge una,
a orinar en pero aúnCuando
la taza. no ha sido
ella el tiempo
termina, 189
1
suficiente para obtener un resultado.
—¿Pepinillos? —Warren dice, asombrado—. Santo Dios. Creí que era algo
serio, pero solo se te antoja un jodido pepinillo.
Warren está atascado en los pepinillos, pero yo todavía estoy atrapada
en la idea de Warren en un grupo de estudio. —¿Cuándo te gradúas? —
Le pregunto.
—Dos meses.
—Bien —dice Bridgette—. Porque necesitas conseguir un trabajo real para
poder criar a este niño.
—No estás embarazada, Bridgette —dice Warren, poniendo los ojos en
blanco—, solo se te antojó un pepinillo. Eres tan dramática.
Toda su conversación me hace querer garantizar que Ridge y yo usemos
el doble de protección a partir de ahora. Tomo mi control de natalidad
religiosamente, pero ha habido una o dos veces que no hemos usado un
condón. Sin embargo, no pasará nunca más.
Bridgette toma una de las pruebas de embarazo y presiona su mano
contra su frente. —Oh, joder —Ella se da vuelta y se la arroja a Warren. Le
golpea en la mejilla y luego sus manos pierden el control mientras
intenta atraparlo.
—¿Es positivo? —pregunto.
prueba de embarazo.
—Me lo arrojaste. Hay pis en mi cara. —Él toma una toalla de mano y la
moja debajo del fregadero.
—No estás embarazada —le aseguro—. No es positiva.
Ella toma otra de las pruebas y la estudia, apoyándose contra el
mostrador. —¿Crees? —Levanta una de las cajas y la lee, luego suspira con
alivio. Ella vierte la taza de orina en el fregadero.
—¿Por qué no tiraste eso en el inodoro? —Warren pregunta con una
expresión asqueada en su rostro. Esto, viniendo del tipo que comió una
barra de queso después de que Bridgette trató de lavarse con ella.
—No lo sé —dice Bridgette, mirando el fregadero. Ella deja salir el agua
para enjuagarlo—. Estoy angustiada. No estaba pensando.
Warren se desliza frente a mí y abraza a Bridgette, llevándola a su nivel.
Él cepilla su pelo hacia atrás suavemente. —No voy a dejarte embarazada,
Bridgette. Después de nuestro primer susto, envuelvo bien a mi Jimmy
Choo cada vez.
Estoy en mi camino hacia el exterior del baño para darles privacidad,
pero me congelo cuando escucho a Warren referirse a su pene como un
Jimmy Choo.
Vuelvo alrededor. —¿Jimmy Choo?
Warren measiente,
Bridgette mira apasando
través del
susreflejo
manosenpor
el su
espejo.
rostro.—Sí, ese una
—¡Hay es sulínea!
nombre.
¿Ridge
¡Mierda,nomierda,
apoda su pene hay
mierda, después de hacer
una línea cosas larga
realmente geniales?
y visible! ¡Joder!
Miro unageniales?
—¿Cosas —Yo—Una
de las cajas. digo—. Jimmy
línea soloChoo's sonque
significa zapatos de diseñador.
está funcionando.
No significa
—No que estés Un
—dice Warren—. embarazada.
Jimmy Choo es un gran cigarro cubano.
¿Verdad, Bridgette?
Warren sostiene —él dice,
la prueba mirándola—.
entre Tú eres lo
dos dedos cuando quien
dejalocaer
nombró.
sobre
la toalla. —Eso
Bridgette trata detiene tu pis.una cara seria, pero chisporrotea de risa. Ella
mantener
191
1
pasa junto pone
Bridgette a mí ylos
corre
ojoshacia la sala—No
en blanco. de estar, pero Warren
me jodas, estáEs
Sherlock. justo
una
sobre sus talones. —¡Dijiste que los Jimmy Choo eran enormes cigarros! —
Terminan en el sofá, Warren encima de ella. Ambos se ríen y es la
primera vez que los veo afectuosos.
Es algo inquietante que un susto de embarazo sea lo que saca lo mejor de
ellos como pareja.
Warren la besa en la mejilla y luego dice: —Deberíamos ir a celebrar
con el desayuno de mañana —Se sienta y nos mira a mí y a Brennan—.
Todos nosotros. El desayuno va por mi cuenta.
Bridgette empuja a Warren lejos de ella y se pone de pie. —Lo haré si
me despierto a tiempo.
Warren la sigue fuera de la sala de estar y entra a su habitación. —Chica,
ni siquiera dormirás esta noche.
Su puerta se cierra.
Miro a Brennan. Él mira hacia otro lado de la puerta, hacia mí.
Ambos negamos con la cabeza.
—Me voy a casa —dice, poniéndose de pie para empacar su guitarra. Él
agarra sus llaves y camina hacia la puerta—. Gracias por el bocadillo,
Sydney. Lo siento, soy un malcriado. Es culpa de Ridge por haberme
consentido tanto tiempo.
—De hecho, es bueno saberlo. Si Ridge es quien te mima, entonces no
voy a tener que romper con él por esperar que le prepare sándwiches.
Brennan se ríe. —Por favor, no termines con él. Creo que podrías ser lo
primero que haya hecho que la vida de Ridge sea más fácil.
Él cierra la puerta detrás de él y no puedo evitar sonreír ante sus
palabras de despedida. Él no tuvo que decir eso, pero el hecho de que lo
hizo me hace pensar que Brennan y Ridge son más parecidos de lo que 192
inicialmente pensé. Ambos pensativos.
Después de que Brennan se va, bloqueo la puerta de entrada. Oigo un
sonido estruendoso detrás de mí, así que giro y escucho por unos
segundos para ver de dónde viene.
La habitación de Warren y
Bridgette. Oh, asco, asco, asco,
asco.
Me apresuro a la habitación de Ridge y cierro la puerta, luego me
arrastro en la cama con él. No pensaba quedarme aquí esta noche,
todavía tengo tarea: no he terminado este fin de semana y realmente
necesito tener algo de tiempo a solas para poder hacer todo. Ridge es
demasiada distracción.
—Syd —dice Ridge, rodando hacia mí. Sus ojos están cerrados y creo que
aún podría estar dormido— No... Tengas miedo... el pollo —Él signa la
última palabra.
Él está hablando y signando mientras duerme. Sonrío ante sus palabras
sin sentido. ¿Habló mientras dormía antes de comenzar a verbalizar? ¿O
es algo nuevo?
Lo beso en la mejilla y doblo su brazo sobre mí mientras me acurruco
contra él. Espero para ver si él habla de nuevo, pero no lo hace. Él solo
duerme.
***
Estaba despierta a las siete, pero Ridge todavía estaba dormido. Se
despertó en mitad de la noche y se quitó los vaqueros y los zapatos, pero
luego volvió a dormirse.
Estaba haciendo una taza de café cuando Warren salió de su habitación y
me dijo que me detuviera. —Les estoy llevando a desayunar,
¿recuerdas?— Luego se fue a despertar a Ridge, pero Ridge le dijo que
necesitaba dos horas más de sueño.
193
—Déjalo dormir —le dije—. Déjame cambiarme el pijama y podemos irnos.
Warren me dijo que no, que el lugar que vamos a comer en realidad
requiere pijamas.
No tengo ni idea de a dónde vamos, pero Bridgette quería dormir, así que
ahora somos solo yo y Warren quienes vamos a desayunar en pijamas
para celebrar la prueba de embarazo negativa de Bridgette. SinBridgette.
Nop. No es extraño en absoluto.
—¿Este restaurante acaba de abrir? —Le pregunto a Warren— ¿Es por
eso que nunca he oído hablar de él? —Me dijo anteriormente que se
llamaba Fastbreak Breakfast, pero no suena familiar.
—No vamos a ir a un restaurante.
Lo miro desde el asiento del pasajero, justo cuando se detiene en la
entrada de un hotel y conduce hacia un lado del edificio. —Espera aquí —
dice, saltando del automóvil. Se lleva sus llaves con él.
Me siento y lo miro mientras está de pie junto a la entrada lateral del
hotel. Empiezo a enviar un mensaje de texto a Ridge para preguntarle en
qué demonios me he metido, pero antes de que pueda escribir el texto,
un hombre de negocios sale por la puerta lateral y ni siquiera se da
cuenta cuando Warren agarra la manija de la puerta y la mantiene
abierta. Me hace señas para que salga del auto, así que salgo y lo sigo
adentro, sacudiendo la cabeza. Finalmente entiendo por qué me dijo que
usara pijamas. Porque él quiere que parezca que somos huéspedes.
—Tal vez sea así. Pero no queda adentro tu historial porque yo fui quien
te trajo aquí.
Hacemos nuestros platos y tomamos asiento en un área junto a la
ventana que no es visible en la recepción. Durante los primeros diez
minutos, Warren habla sobre la escuela ya que estaba tan intrigada con
la idea de que él estuviera realmente sentado en un grupo de estudio. Se
está especializando en administración, que es otra cosa que me intriga.
Me desconcierta, incluso. No puedo imaginarlo en una posición en la
que esté a cargo de otras personas, pero creo que él maneja muy bien a
Sounds of Cedar.
No creo que le dé suficiente crédito a Warren. Tiene un trabajo, va a la
escuela a tiempo completo, maneja una banda local exitosa y se las
arregla para mantener a Bridgette un tanto feliz. Supongo que es solo su
adicción al porno y su incapacidad para limpiar su desastre lo que me
lleva a suponer que tiene mucho que madurar.
Cuando terminamos de comer, Warren agarra una bandeja y coloca
magdalenas y jugos sobre ella, luego la trae de vuelta a la mesa. —Para
Ridge y Bridgette —dice, cubriendo los muffins con una servilleta.
—¿Con qué frecuencia vienes aquí? Pareces tener experiencia en el arte
del robo de desayuno.
—No muybromeando,
—¿Estás a menudo. Tengo
Warren?algunos hoteles
¿Estamos en la ciudad
colándonos quedesayuno
en un frecuento
pero trato degratis?
continental mezclarlos de vez en cuando. No quiero que los empleados
del mostrador empiecen a sospechar.
El sonríe. —Oh, no es solo un desayuno gratis, Sydney. Tienen waffles
Me
conrío, sorbiendo
forma de Texaslo último
aquí. de mi jugo de naranja.
—Ridge
No puedonunca haque
creer estado
estaasea
bordo. Ya sabes
su idea cómo
de llevar es personas
a las él, siemprea está
tratando de hacer lo correcto. Sin embargo, Maggie vino conmigo
desayunar.
algunas
—Esto es veces,
robarle—le
gustaba la emoción
susurro, de serentramos
justo cuando atrapada.al En
árearealidad,
de es por 1
195
eso que lo llamo Fastbreak Breakfast. Tuvimos que dejar de hacerlo una
vez porque un empleado caminó, anotando los números de las
habitaciones y revisando los apellidos.
Miro hacia abajo cuando dice el nombre de Maggie, no queriendo
saber lo buenos amigos que son. No es que me importe si Warren y
Maggie son amigos. Simplemente no quiero escuchar nada sobre eso,
especialmente tan temprano en la mañana.
Él nota mi reacción, porque se inclina hacia adelante y cruza los brazos
sobre la mesa. Él inclina su cabeza pensando. —Nuestra amistad con ella
realmente te molesta, ¿eh?
Niego con la cabeza. —No tanto como probablemente piensas. Lo que
me molesta es lo mucho que Ridge se estresa al respecto.
—Sí, bueno, imagina cuánto Maggie se estresa al respecto.
Pongo los ojos en blanco. Sé cuánto probablemente Maggie se estresa al
respecto. Pero solo porque ella se estresa más que yo, no significa que
no pueda estresarme.
—Ya le dije a Ridge que me iba a tomar un poco de
tiempo acostumbrarme a eso.
Warren se ríe por lo bajo. —Sí, bueno, acostúmbrate porque ya te dije
una vez que nunca la dejará.
Me reclino en mi asiento, cada vez más a la defensiva, como siempre
hago cuando Warren habla sobre la relación que tengo con Ridge.
Parece que siempre va un paso demasiado lejos, aunque siento que he
sido más que complaciente y comprensiva cuando se trata a la amistad
de Ridge con Maggie. —Tú dijiste eso —estoy de acuerdo—. Pero
estabas equivocado, porque rompieron.
Warren se pone de pie y comienza a recoger basura de la mesa. —
Rompieron, seguro. Pero no te dije que nunca se separarían, te dije que
nunca la dejaría. Y él no lo hará. Así que tal vez en vez de tratar de
convencerte de que solo necesitas tiempo, es hora de que te acostumbres
a la idea de que ella siempre será parte de su vida, debes recordarte a ti
misma lo que ya sabías mucho antes de que accedieras a estar en una
relación con él.
Lo miro, estupefacta, mientras camina con la basura hacia la papelera. Él
regresa a la mesa y recupera su asiento. Recuerdo sus palabras otra vez,
solo que esta vez significan algo completamente diferente.
"Él nunca la dejará, Sydney".
Todo este tiempo, pensé que Warren estaba diciendo que Ridge nunca
rompería con ella. Cuando todo el tiempo, Warren simplemente quiso
decir que Maggie siempre sería parte de la vida de Ridge.
—¿Sabes una cosa que podría hacer que esta situación sea un poco
más fácil? —Warren pregunta.
Niego con esa
Recuerdo la cabeza, sin saber
noche muy nada Fue cuando Ridge y yo nos
claramente.
abrazamos
más. en el deliberadamente.
Él me mira pasillo. Warren entró
— al apartamento y no le gustó lo
que estaba viendo porque Ridge estaba saliendo con Maggie en ese
Tú.
momento. Ridge no sabía que Warren estaba en el apartamento, pero
antes de que Warren caminara a su habitación, se aseguró de que yo
¿Qué?
supiera sus pensamientos sobre nuestra situación. Las palabras exactas
—¿Yo? ¿Cómo
de Warren podría
fueron, hacerlo
"Solo voy amás
decirfácil?
esto Si
unanovez
lo yhas notado,
necesito he
que
trabajado muy duro para intentar tener la paciencia de un maldito santo.
escuches: Él nunca la dejará, Sydney". 197
1
Él asiente con la cabeza. —No estoy hablando de tu paciencia. —dice,
inclinándose hacia delante—. Has sido paciente. Pero lo que no has
hecho aún es disculparte. Hay una chica a la que lastimaste seriamente
que forma una gran parte de la vida de Ridge. Y a pesar de que ella dice
no culparte, creo que todavía le debes una disculpa. Las disculpas no
deberían hacerse por la respuesta de la persona que fue perjudicada, las
disculpas deberían hacerse por el error. —Él golpea la mesa con las
manos como si la conversación hubiera terminado y se levanta,
agarrando la bandeja que hizo para Ridge y Bridgette.
—Vamos —dice, levantándome mientras trato de procesar todo lo que
acaba de decir. —Hay cosas peores en la vida que tener un novio con un
corazón del tamaño de un elefante.
***
Estoy completamente en silencio en el camino a casa. Warren ni siquiera
intenta hablarme. Cuando volvemos al apartamento de Ridge, Ridge
todavía está dormido. Le escribo una nota y la dejo a su lado en la cama.
No quería despertarte porque mereces dormir. Tengo mucha tarea con la
que necesito ponerme al día hoy, así que tal vez pueda venir mañana por
la noche después del trabajo.
Te amo.
Sydney.
Me siento mal mintiéndole porque no voy a casa a hacer la tarea, me
voy a casa a cambiarme de ropa.
Este viaje a San Antonio debió hacerse hace mucho tiempo.
198
el año que yo cumplí nueve, descifré que lo que ella no quería de mí
era
mi enfermedad, no era yo.
Tuve la idea de que si pudiera convencerla de que podía cuidar de mi
misma y de que no necesitaba ayuda, ella me llevaría consigo y
podríamos finalmente estar juntas. En las semanas precedentes a la
las vitaminas que me fue posible obtener para que así mis compañeros 2
de
relacionaba con su propia vida, así la tragedia de los demás podía ser su
tragedia también. Imagínate cómo era para ella tener una hija con fibrosis
quística. Era su momento para absorber la simpatía, para hacer que todos
sintieran pena por ella y por la manera en que su hija había nacido. Mi
enfermedad se convirtió más en un problema para ella que para mí.
Pero esto no duró muro porque ella tomó una posición temporal con su
compañía en Paris, Francia, cuando yo tenía 3 años. Me dejó con mis
abuelos porque era "muy frío" para mi allá, y porque sería "muy difícil"
aprender a conocer un nuevo país con una niña enferma. Mi padre nunca
fue parte de mi vida, por lo que quedarme con él no era una opción; pero
mi madre siempre me prometía que me llevaría a Paris a vivir con ella.
Mis abuelos tuvieron a mi madre a una edad tardía, y mi madre me tuvo
a finales de sus 30. Estaba llegando al punto en el que mis abuelos
difícilmente podían cuidar de ellos mismos, mucho menos de una niña.
Pero la posición temporal de mi madre se volvió permanente, y cada vez
que venía de visita, me prometía que me llevaría devuelta con ella
cuando se diera la ocasión. Pero sus visitas en navidad siempre
terminaban con su partida hacia Paris en año nuevo. Sin mí.
Quizá ella tenía intenciones de llevarme con ella, pero después de pasar
dos semanas conmigo en la casa de mis abuelos todos los años en
navidad, ella recordaba la gran responsabilidad que yo sería en su vida.
Yo solía pensar que eso sucedía porque no me quería, pero recuerdo que
Capítulo
18
Maggie
1
Mi madre
veces de lasera
queuna
se mujer dramática.
me requería Todo
usarlo, megiraba en torno
aseguraba a ella,8aun
de dormir
horas cada noche. Y aunque Austin vio su primera caída de nieve en
años ese invierno, me rehusé a salir y experimentarlo porque temía
resfriarme y terminar en el hospital durante la visita de mi madre.
Cuando ella llegó la semana antes de navidad, fui muy cuidadosa de no
toser nunca cerca suyo. No tomaba mis medicaciones cerca suyo. Hice
todo lo que pude para parecer una niña animada y saludable, así ella no
tendría otra opción que verme como la niña que ella deseaba que fuera y
me llevaría a Paris con ella. Pero eso no sucedió, porque la mañana de
navidad, por casualidad, la escuché teniendo una discusión con mi
abuela. Ella le estaba diciendo a mi mamá que quería que se mudara a
los Estados Unidos, le dijo que estaba preocupada sobre qué me pasaría
cuando ella y mi abuelo murieran. «Qué hará Maggie cuando nosotros
ya no estemos si tú no estás cerca para cuidarla? Necesitas regresar y
entablar una mejor relación con ella».
Jamás me voy a olvidar las palabras que mi madre le dijo como respuesta.
«Te preocupas por cosas que quizá nunca sucedan, madre.
Probablemente Maggie sucumbirá a su enfermedad antes de que
cualquiera de ustedes sucumba a la edad».
Estaba tan devastada por su respuesta a mi abuela que corrí hacia mi
habitación y me rehusé a hablarle durante el resto de su estadía. De
hecho, esa fue la última vez que le hablé. Ella acortó su viaje y se fue el
día después de navidad.
Aunque Ridge lo hizo. Estuvo conmigo por un largo tiempo. Pero
supongo que ese fue el problema; Ridge y yo no habríamos estado
juntos por tanto tiempo como estuvimos si no hubiera sido por mi
enfermedad. Éramos muy diferentes. Así que, supongo que cual sea el
fin por el que la gente esté —ya sea que sean muy egoístas para cuidar
de mí o muy generosos para no hacerlo— voy a resentirlos. Porque por
cualquier razón, parece que he perdido una parte de mí por esta
enfermedad. 2
porque murió, lloré porque a pesar de lo dramática que era, ella nunca
hizo un dramático intento para que yo la perdonara. Creo que es porque
fue más fácil para ella vivir una vida sin mí mientras estaba enfadada con
ella, que vivir una vida sin mí cuando la extrañaba.
Dos años después de su fallecimiento, mi abuela murió. Esa fue la cosa
más difícil que nunca he sufrido. No creo que todavía haya superado su
fallecimiento. Ella me amaba como nadie nunca me había amado, así
que cuando murió, sentí la pérdida absoluta de ese amor.
Y ahora mi abuelo, —el último de las personas que me criaron— ha sido
puesto en hospitalización debido a la reciente desmejora en su salud, a la
par de un caso de neumonía contra el cual no puede luchar por su
debilidad. Mi abuelo morirá cualquier día de estos, y a causa de mi
fibrosis quística y la naturaleza de su enfermedad, no tengo permitido
verlo para decirle adiós. Probablemente él muera algún día de esta
semana, y justo como mi abuela, se habrá ido y yo estaré sola.
Supongo que mi madre se equivocó al decir que sucumbiría en mi
enfermedad antes que ellos. He vivido por más tiempo que todos ellos,
incluso que mi madre.
Sé que mi experiencia con mi madre impide todas mis otras relaciones.
Es difícil para mí creer que alguien más podría amarme a pesar de mi
enfermedad cuando ni mi propia madre pudo hacerlo.
De alguna manera fue desapareciendo de mi vida después de eso.
Llamaba a mi abuela para chequear cómo estaba todos los meses o
algo así, pero nunca volvió para navidad porque todos los años le
decía a mi abuela que ya no la quería ver. Luego, cuando tenía
catorce, mi madre falleció. Estaba viajando desde Francia a Bruselas
en un tren por un viaje de negocios cuando sufrió un gran ataque al
corazón. Nadie en el tren siquiera notó que había muerto hasta tres
estaciones pasadas su parada. 2
Sydney niega con su cabeza mientras sus ojos recorren la sala de estar,
observando mi casa. Ella no parece nerviosa, pero entra en mi casa tan
cuidadosamente que la hace parecer vulnerable de alguna manera. Me
pregunto si Ridge sabe que está aquí. No es típico de él dejar que su
novia aparezca y luche sus batallas por él. Y Sydney no parece del tipo
que pelearía las batallas de Ridge.
Lo que significa que ella está aquí para pelear su propia batalla.
—Perdón por aparecer solo así —dice—. Te habría escrito primero, pero
me preocupaba que me dijeras que no viniera.
Tiene razón, pero no lo admito en voz alta. La miro por un momento y
luego giro y camino hacia mi cocina. —¿Quieres algo de tomar? —le
pregunto, mirándola devuelta. Ella asiente.
—Agua estaría bien.
Saco dos botellas del refrigerador y le indico que pase a la mesa de mi
comedor. Algo me dice que a esta conversación le asentará más una
mesa que un sofá. Las dos tomamos asiento en frente a la otra. Sydney
deja su teléfono y sus llaves delante de ella y abre la botella. Toma un
gran trago y pone la tapa devuelta, agarrando la botella mientras se
acerca más a la mesa.
—¿Qué estás haciendo aquí? —No pretendo que mi voz suene rígida,
pero todo esto es tan raro.
ver con ponerme celosa, es suficiente como para dar un paso hacia
atrás e
invitarla a pasar.
Solo podría haber una otra razón para que ella esté aquí.
—¿Estás aquí por el post en Instagram? —Es la única razón en la que
puedo pensar por la que ella estaría en mi casa sin Ridge. Ella nunca ha
estado aquí antes. De hecho, no hemos hablado desde el día en el que 2
— 2
Ella ya está lo suficiente molesta. Pongo mis manos en la parte posterior
de mi cuello y recorro la sala de estar un par de veces. Me detengo
cuando siento que mi teléfono vibra. Lo agarro.
Sydney: Gracias por avisarme. Sé paciente con ella, Ridge. Estoy segura de que necesitó
mucha valentía para aparecer allí.
Miro el texto de Sydney y niego con la cabeza, preguntándome
cómo diablos ella es más comprensiva con mi situación que yo
mismo.
Honestamente, no sé por qué se está especializando en música.
Su verdadero talento es la psicología.
Deslizo mi teléfono en mi bolsillo y miro a Maggie, que todavía está
sentada en la mesa, secándose los ojos llorosos. Esto ha tenido que ser
difícil para ella. Sydney tiene razón; estar aquí y luego decir todo lo que
acaba de decir requiere una gran cantidad de coraje.
Camino de regreso a mi asiento, alcanzo la mesa, tomo su mano y la
sostengo entre las mías. —También lo siento —le digo, apretando su mano
para que pueda sentir la sinceridad en esa declaración. Retrocedo para
poder hablar en señas el resto de lo que tengo que decir—. Debería
haber sido más un novio para ti y menos... como un dictador.
Mi elección de palabras hace que ría a través de su llanto. Ella niega. —No
fuiste un dictador. —ella responde—. Quizá eras más un moderado
autoritario.
comienzan a rodar por sus mejillas a borbotones—. Lo siento, Ridge.
Realmente lo siento. Por todo.
Soplo un aliento rápido y
tembloroso. Necesito salir de esta
silla.
Me pongo de pie y camino hacia la cocina, agarro una servilleta y luego 2
se la alcanzo. Pero no me puedo sentar. No esperaba esto y ni siquiera
Ella camina hacia la puerta delantera y estoy seguro de que la azota
cuando se va. Miro devuelta hacia Maggie y ella está mirando hacia la
puerta. —¿Qué fue todo eso?
Yo encojo los hombros. —Ella se ha vuelto raramente protectora de
Sydney ahora. Ha sido... interesante.
Maggie levanta una ceja —Quizá deberías enviar un mensaje a Sydney y
decirle que estoy aquí. Antes de que Bridgette lo haga.
Yo sonrío —Ya lo he hecho.
Maggie asiente como si lo supiera. —Claro que lo hiciste —signa. Ella está
sonriendo ahora y las lágrimas ya no invaden sus ojos. Ella toma otro
sorbo de agua y se recuesta en su silla—. Así que, ¿Sydney es la elegida?
No respondo por un momento porque sé que es raro. No quiero que
Maggie piense que a ella le faltaba algo, pero simplemente es distinto
con Sydney. Es más. Es más profundo y mejor y yo lo ansío como no he
ansiado nada nunca, pero ¿cómo lo expreso sin ser insensible a lo que
Maggie y yo tuvimos? Asiento lentamente, y signo: —Definitivamente ella
es la última.
Maggie asiente y una tristeza entra en sus ojos. Lo odio. Pero no puedo
hacer nada para cambiarlo. Las cosas están como se suponen que deben
ser ahora, aún si Maggie siente arrepentimiento de ello.
—Desearía
Me rió con que la vida
ella. Cosaviniera con un
que pensé queinstructivo. —dice—.
nunca pasaría Verde
después lo irme
que túdey
su
Sydney tienen me hace darme cuenta cuán idiota soy por haber alejado
acasa la mañana
un gran chico. del sábado.
Estoy casi segura de que arruiné esa oportunidad.
Maggie
Me muevomira
en hacia otra
mi silla dirección,
con así queNiyosiquiera
esas palabras. miro para luego
sé que encontrar
decir. ¿Ella
a Bridgette.
pensó Se está
que venir hastayendo al trabajo,
aquí abriría unapero se detiene
oportunidad cuando
para estar ve a de
juntos
MaggieSienasí
nuevo? nuestra
fue, hesala de estar,
estado sentada
tratando esta aconversación
mi lado en lacomo
mesa.algo
Ellaque
no es. —Maggie —le digo— No voy... no vamos... a volver a estar juntos
— 2
219
nunca.
Maggie entrecierra los ojos y me da una de las miradas que me daba
cuando estaba siendo un idiota. —¡No estoy hablando de ti, Ridge! —Se ríe
— Me refiero a mi guapo doctor e instructor de paracaidismo.
Yo inclino mi cabeza, sintiéndome aliviado y avergonzado a la vez. —Oh.
Bien. Eso fue raro.
Ella se empieza a reír devuelta. Ella mueve un dedo hacia adelante y
atrás entre nosotros. —Tú creíste... cuando dije "gran chico"
¿inmediatamente pensaste en ti mismo? — Ahora se está riendo más aún.
Estoy tratando de evitar mi risa, pero no puedo evitarlo. Me encanta que
se esté riendo y me encanta aún más que ella esté hablando de alguien
más enteramente.
Esto es bueno.
Maggie se para. —¿Estará Warren aquí el sábado?
Asiento y me paro. —Sí, debería. ¿Por qué?
—Quiero que todos nos sentemos juntos y hablemos. Siento que
necesitamos pensar en un plan a largo plazo.
—Sí, claro. Me gustaría que pudiéramos hacerlo. ¿Te importa si viene
Sydney?
Maggie se pone su chaqueta. —Ya lo tiene en su agenda —dice,
guiñándome un ojo.
Bien, ahora estoy confundido. —¿Has hablado con Sydney?
Maggie asiente. —Por alguna razón, ella sentía que debía disculparse. Y yo
también. Tuvimos una buena charla. —Maggie camina hacia la puerta,
pero se detiene antes de abrirla—. Ella es muy... diplomática.
Yo asiento, pero todavía estoy confundido por cuándo tuvieron esta
charla. O por qué no sabía de ella. —Sí —digo—. Ella es definitivamente
diplomática.
Maggie abre la puerta. —No dejes que Bridgette la arruine —dice—. Te veo 220
el sábado.
—Te veo el sábado —Le sostengo la puerta—. Y Maggie, realmente siento
lo de tu abuelo.
Ella sonríe. —Gracias.
La miro mientras baja las escaleras hacia su auto. Una vez que se va,
corro hasta mi mostrador, tomo mis llaves y me pongo los zapatos.
Manejo directo a la biblioteca.
***
La encuentro en la esquina trasera de la biblioteca. Está al lado de un
carrito, sosteniendo un marcador en su mano, tachando cosas en la lista
mientras va llenando las estanterías con los libros que están en el carro.
Me está dando la espalda, así que la miro por un minuto entero mientras
trabaja. El lugar está casi vacío así que pienso que nadie notará que la
estoy observando. Simplemente no puedo entender cuándo o cómo ella y
Maggie podrían haber tenido una conversación. O por qué. Saco mi
teléfono y le envió un mensaje.
Ridge: ¿Tú y Maggie tuvieron una conversación y no me lo dijiste?
Miro su reacción mientras ella lee el mensaje. Se congela, mirando al
teléfono, y luego se frota la cabeza. Ella se recuesta sobre la estantería e
inhala profundamente.
para que llegue, pero tan pronto como sucede, ella se gira. Nuestros ojos
se encuentran.
Yo sacudo mi cabeza como negando sutilmente, pero no porque esté
enojado con ella de ninguna manera. Sacudo mi cabeza por la
incredulidad de que esta mujer tome como su responsabilidad manejar
hasta la casa de mi ex novia porque quería hacer que las cosas estuvieran
mejor entre nosotros.
Nunca he sentido este nivel de aprecio por nadie o nada en toda mi vida.
Empiezo a caminar en su dirección. Ella empuja la estantería cuando me
acerco y se queda quieta, fija, anticipando mi próximo movimiento.
Cuando llego, no signo ni digo una sola palabra. No tengo que hacerlo.
Ella sabe exactamente lo que estoy pensando, porque es Sydney. Todo lo
que tiene que hacer es estar cerca mío para comunicarnos. Ella me mira
y yo la miro, y como si estuviéramos en sincronización perfecta, ella da
dos pasos atrás y yo dos pasos adelante así estamos escondidos entre dos
paredes de libros.
Te amo.
No signo o digo esas palabras. Solo las siento, pero ella las escucha.
Levanto mis manos y recorro mis dedos sobre sus mejillas. Trato de
tocarla con la misma suavidad con la que ella me toca. Recorro mis
pulgares sobre su boca, admirándola y a todas las palabras gentiles que
salen
Sydney:deSí. ella.
DeberíaDeslizo
habértelomis
dicho.manos hacia
Solo quería quesu cuello
los dos y presiono
tuvieran mis
una oportunidad
pulgares contra
de hablar antes su garganta.
de que Puedo
yo lo mencionara, sentir
pero suhasta
manejé pulso
su rápido debajoNo
casa el domingo. dequería
las
puntas
empezardeningún
mis dedos.
drama. Lo juro. Solo había algunas cosas que tenía que decirle. Lo
siento,mi
Bajo Ridge.
frente hacia la de ella y cierro mis ojos. Sólo quiero sentir sus
pulsaciones contra Todo
La miro devuelta. mis pulgares. Quiero
en ella está sentir
por los su respiración
bordes ahora. Estácontra mis
labios. Me tomo
preocupada, un momento
frotándose la nucay hago estasrehusándose
esta vez, cosas mientras a separar la vista
silenciosamente le digo gracias
de su teléfono hasta que yo le conteste.mientras nuestras frentes se mantienen
222
2
juntas.
Tomo mi teléfono y le saco una foto, luego se la envió. Toma un
Me gustaría que no estuviéramos en público ahora. Le agradecería de
muchas más maneras y sin usar una sola palabra.
Mantengo mis manos en su cuello y me acerco a ella para girar y
posicionarla contra las estanterías detrás de ella. Cuando su espalda
encuentra los libros, mantengo su cabeza inclinada hacia la mía y acerco
nuestras bocas, apenas conectando nuestros labios. Puedo sentir su
rápida respiración chocando contra mis labios, así que la sostengo y
absorbo algunas de ellas antes de deslizar mi lengua dentro de su boca y
sacarle más de esas rápidas exhalaciones. Su boca está más caliente y
tentadora que nunca.
Ella trae sus manos hacia mi pecho, chocando el papel y marcador contra
mi camisa, mientras se calma. El papel cae al suelo. Ella inclina su
cabeza todavía más hacia la mía y abre su boca un poco más, queriendo
más de nuestro beso. Yo deslizo mi mano derecha y la curvo alrededor
de su nuca mientras cierro mi boca sobre la de ella e inhalo.
La beso. La
amo. La amo. La
beso.
Estoy muy enamorado de ella.
Es la cosa más difícil que tengo que hacer cuando me separo de sus
labios. Sus manos están hechos puños alrededor de mi camiseta. Sus
ojos todavía están cerrados cuando retrocedo, así que la miro por un
momento, convencido de que el Karma quizá sabe lo que está haciendo
camiseta. El papel que estaba agarrando se cayó hace rato, pero el
marcador todavía está sostenido por su puño. Lo agarro desde sus
dedos y ella abre sus ojos, justo cuando deslizo mis dedos en el escote
de su camisa. Lo bajo, exponiendo la piel sobre su corazón. Saco la
tapa del marcador con mis dientes y luego presiono el marcador a su
pecho.
Escribo tres letras directamente sobre su
corazón. M-I-A.
Le pongo la tapa al marcador y la beso una última vez antes de girar e
irme.
Es lo más que nos hemos comunicado y lo menos que nunca hemos
dicho.
Capítulo 20
después de todo. Quizás había una razón por la que tantas cosas de
mierda tuvieron que pasar en mi vida. No hubiera sido una vida
Sydney
balanceada si hubiera tenido una hermosa infancia, para luego crecer y
compartir una vida como la que ahora voy a compartir con Sydney.
Creo que mi niñez fue el balance que necesitaba para así poder tenerla.
Ella es así de buena y así de perfecta. Quizá yo fui hecho para sufrir
Estoy sentada
primero, antesendeelque
asiento del acompañante
me fuera delde
dado un regalo auto
estademagnitud.
Ridge, mirando
por la ventana. Mi mano derecha está tocando mi pecho, rozando 2
Deslizo mis manos hacia las suyas, que todavía están empuñadas sobre 224
ligeramente la palabra que escribió sobre mi corazón la noche del
martes. M-I-A. Ahora está desvanecido porque han pasado cuatro días
desde que lo escribió, pero por suerte era un marcador permanente, así
que evité restregarlo en la ducha.
Cuando salió de la biblioteca el martes por la noche, inmediatamente
tuve que sentarme. Me dejó tan sin aliento que casi me desmayo. Ni
siquiera estuvo allí cinco minutos y fueron los cinco minutos más
intensos de mi vida. Tanto así que convencí a mi compañero de trabajo
de que se quedara el resto de mi turno y luego conduje directamente al
apartamento de Ridge para terminar lo que comenzó. Cinco minutos
intensos en la biblioteca se convirtieron en dos intensas horas en su
cama.
Desde entonces, hemos pasado tres de las últimas cuatro noches juntos.
Él me contó todo sobre su conversación con Maggie. Odié el hecho de
que su abuelo falleciera apenas horas después de que saliera de su
departamento el domingo, pero saber que estaba lidiando con todo eso, y
aún así hizo tiempo para pasar por Ridge y disculparse con él, me hizo
apreciar su esfuerzo aún más. Y realmente hizo una gran diferencia en
Ridge. Es como si se levantara un gran peso después de su charla del
martes. Los últimos cuatro días con él han sido los mejores cuatro días
que he pasado con él desde el día que nos conocimos.
Al comienzo de conocerlo, cada conversación que teníamos estaba
encerrada en la culpa por Maggie. Luego de su pelea la semana pasada,
cada conversación que tuvimos estaba llena de preocupación por
Maggie.
está conduciendo. Bridgette no ha dicho una sola palabra en el camino a
la casa de Maggie porque ella y Warren tuvieron una pelea justo antes de
que saliéramos del apartamento. Ella le exigió venir con él, pero él le
dijo que no la quería allí porque no sabía cómo ser amable con Maggie.
Eso la cabreó. Fueron a su habitación y pelearon mientras Ridge y yo
nos sentamos en el sofá y esperamos.
En realidad, nos sentamos en el sofá y nos besamos, así que no nos
importó cuánto duró su pelea, pero todavía no ha terminado porque
estamos entrando a la entrada de Maggie y las únicas palabras que
Bridgette ha hablado entre Austin y este camino son: "Tengo que
orinar". Ella lo dice mientras sale del auto y cierra la puerta.
Bridgette no es la persona más razonable. Pero estoy llegando a que
realmente me guste e incluso la entienda. Ella lleva sus emociones en la
manga, pero tiene muchas emociones, así que es más como si usara sus
emociones en varias camisas de manga larga, superpuestas una encima
de la otra.
Nadie tiene que llamar a la puerta porque Maggie la abre mientras
caminamos por la entrada. Warren entra primero y le da un abrazo.
Bridgette pasa junto a ella, pero Ridge le da un rápido abrazo. Yo
también, simplemente porque prefiero comenzar con un buen
sentimiento.
—Huele bien —Ridge signa mientras arroja sus llaves sobre el mostrador.
—Lasaña —dice
Pero desde Maggie—.
el martes, cadaEstoy leyendo
vez que este solos,
estamos libro donde los personajes
finalmente parece
que lasaña en siempre que necesitan hablar sobre algo. Pensé que era
hacen
estamos solos.
apropiado De alguna
para esta manera, fusionar
noche —Maggie me miramás a Maggie
mientras entra en
a sunuestras
cocina—.
vidas
¿Te parece
gusta leer,haberla alejado aún más de nuestra relación. No debería
Sydney?3
tener sentido, pero lo tiene. Poner más énfasis en su amistad que en el
—Me encanta leer —le digo, quitándome el cárdigan. Lo coloco sobre la
hecho de que ella es su ex novia será mejor para nuestra relación a
parte posterior de una de las sillas—. Simplemente no tengo mucho
tiempo. Lo cual
Con suerte, es triste,
Bridgette considerando
podrá quedetrabajo
darse cuenta en unaPorque
eso pronto. biblioteca.
ahora 2
226
mismo nocamina
Bridgette está feliz.
haciaWarren y Bridgette
el baño y Warren están
se tiraendramáticamente
el asiento trasero.
en el
sofá, boca abajo en una almohada. —Mátenme ahora —murmura.
—¿Problemas en el paraíso? —Maggie dice.
Warren levanta la cabeza y la mira. —¿El paraíso? ¿Cuándo hemos vivido
Bridgette y yo en el paraíso?
—¿Problemas en el Sheol? —Maggie lo corrige.
Warren se sienta en el sofá. —Ni siquiera sé lo que eso significa.
—Es otra palabra para infierno.
—Oh —dice Warren—. Sabes que no debes usar grandes palabras a mí
alrededor.
—Son solo cinco letras.
Los veo conversar, mi atención va y viene entre ellos. Finalmente
me concentro en Ridge, quien está frente a mí ahora. —¿Tienes sed?
—Él pregunta.
Asiento con la cabeza. Él camina hacia la cocina, abre un armario y
luego comienza a hacernos algo de beber a los dos. Es extraño, verlo
moverse por la cocina como si fuera su cocina. Me hace darme cuenta de
que de alguna manera, así solía ser. No sé cuánto tiempo pasó aquí en su
casa.
Creo que este es uno de esos momentos bastante incómodos a los que
que pudo alquilarle la casa a otra persona, así que tengo que salir para
el
final del mes.
Tomo su pausa como una oportunidad para interrumpir con una
pregunta. —¿No está tu doctor aquí en San Antonio?
Maggie niega con la cabeza. —Ella tiene una oficina satélite aquí un día a
la semana. Pero tiene su base en Austin, así que en realidad será más 2
Warren se da palmadas en los pantalones vaqueros. —Listo —dice,
saltando.
Los cuatro nos dirigimos a la mesa de la cocina justo cuando Bridgette
sale del baño. Maggie está a la cabeza de la mesa. Estoy sentado al lado
de Ridge y Warren está sentado al lado de una silla vacía, pero Bridgette
elige reclamar la silla en la cabecera opuesta de la mesa para que haya
un asiento vacío entre ella y Warren. Él niega con la cabeza,
ignorándola.
Maggie abre una carpeta, luego se sienta derecha y signa todo lo que
comienza a hablar. Me gusta mirar cuando signa. No sé por qué, pero
me resulta un poco más fácil seguirla a ella que a Ridge o a Warren. Tal
vez porque sus manos son más delicadas, pero parece que ella lo hace
un poco más lento y si esto tiene sentido, con más enunciación.
Ella nos mira a todos. —Gracias por aceptar esto —Ella dirige su atención
hacia mí— Y gracias a ti—dice, sin ser específica. Asiento, pero en
realidad, es a Warren a quien debería agradecer. Él fue quien me dio la
patada en la retaguardia. Necesitaba hacer un movimiento hacia
adelante con Maggie.
—He tomado un par de decisiones de las que quiero hablar primero
porque afectan el próximo año de mi vida. Y por consecuencia, el suyo
— Ella asiente con la cabeza hacia el pasillo. Todos miramos el pasillo
y, por primera vez, noto que las cajas—. Mi pasantía terminó y también mi
tesis, así que decidí regresar a Austin. Mi arrendador me informó el
miércoles
voy a tener que acostumbrarme. Ridge me trae un vaso de agua y luego
se
sienta en el sofá junto a Warren.
Entro en la cocina. —¿Necesitas ayuda? —Le pregunto a Maggie.
Ella niega con la cabeza y abre la nevera, colocando una ensalada
dentro.
—No, gracias. Todo está terminado, excepto la lasaña. —Ella mira a 2
Esto se trata de cómo podemos hacer las cosas más fáciles para Warren
y Ridge, y vivir en el mismo complejo les facilitará las cosas.
Maggie asiente. —Lo sé. Pero no quiero causar problemas entre Warren
y Bridgette. Creo que finalmente debería ser tu decisión y la de
Bridgette, pero no creo que ella lo acepte nunca. Honestamente, no la
culpo.
Ella está en lo correcto. Debería ser algo de lo que todos estemos de
acuerdo. Dirijo mi cabeza hacia la puerta y grito —¡Bridgette!
Oigo una silla que se desliza por el suelo, seguida de un dramático
pisoteo en dirección a la habitación de Maggie. Bridgette finalmente abre
la puerta, pero ella se apoya contra el marco de la puerta y cruza los
brazos sobre su pecho.
Yo acaricio la cama. —Ven aquí, Bridgette.
—Estoy bien aquí.
La miro como si mirara a un niño travieso. —Pon tu trasero aquí ahora
mismo.
Bridgette se acerca a la cama y se arroja al otro lado de la cama. Ella
está siendo tan dramática como Warren cuando se tiró en el sofá de
Maggie antes. Sus intensas similitudes hacen que quiera reírme.
Bridgette me mira y evita el contacto visual con Maggie.
Me recuesto contra la cabecera e inclino mi cabeza mientras la miro.
—¿Qué estás sintiendo, Bridgette?
—Realmente no quiero elogiarte porque eres mala conmigo —le
dice
Maggie a Bridgette—. Pero Sydney tiene razón. ¿Has visto tu
trasero? Parece que dos Pringles se están abrazando.
¿Qué diablos significa eso? El comentario de Maggie hace reír a
Bridgette, a pesar de que trata de ocultarlo.
—Trabajas en Hooter's por el amor de Dios —Agrega Maggie—. Si yo 2
Warren echa hacia atrás su silla y se levanta, luego reclama la silla vacía al
lado de Bridgette. Él se acerca y toma su lima de uñas, luego la arroja a
la sala de estar. Él acerca su silla más cerca de la suya y la besa.
Y Bridgette realmente lo deja por unos buenos cinco segundos. Es
adorable y muy incómodo.
Maggie pone los ojos en blanco y luego empuja su carpeta frente a Ridge.
—He hecho una lista de compromisos. Hay cosas que todavía quiero
hacer y necesito que estés bien con eso. Y a cambio, prometo que me
cuidaré mejor. Pero no puedes ser mandón conmigo hasta que me hayas
dado un poco de tiempo para ajustarme a tus reglas. Soy un desastre y
tomará un tiempo mejorar esa parte de mi personalidad.
Ridge mira la lista por un momento, pero la mira y signa algo que no
reconozco. Maggie asiente. —Sí. Voy a saltar en bungee y no puedes
decirme que no. Estamos comprometiéndonos.
Ridge suspira y luego empuja la lista hacia Maggie. —Bien. Pero te unirás
a un grupo de apoyo de CF.
Maggie se ríe, pero Ridge no.
—Eso no es un acuerdo —dice Maggie—. Eso es tortura.
Ridge se encoge de hombros. —Estamos acordando. Tres reuniones —
dice—. Si lo odias, puedes parar. Pero creo que será bueno para ti.
Ni siquiera sé que podría estar en desacuerdo con que ella
permanezca
allí por unos días en este punto porque todo lo que sucede con las
personas en esta mesa hace tiempo que ha pasado la definición de
normalidad. Warren una vez me dijo "Bienvenido al lugar más
extraño que jamás vivirás".
la puerta giratoria que hay junto a él desafían cada límite que alguna 2
vez se
Hacer puenting. Hmmm. La ex novia de mi novio quiere que salte de un
puente. Es irónico cuando lo piensas. Miro a Ridge y sonrío. Siempre he
querido hacer puenting. Él niega con la cabeza y me devuelve la sonrisa,
como si acabara de derrotarlo.
—Siempre me he preguntado algo —dice Bridgette, mirando hacia la
cocina, a Maggie. Warren está en la sala de estar recuperando la lima de
uñas de Bridgette—. ¿Por qué no te acaban de hacer un trasplante de
pulmón? ¿Eso no curaría la enfermedad?
Me lo he preguntado, pero todavía no lo he mencionado.
—No es tan fácil —dice Warren, entregándole a Bridgette la lima de uñas—
La fibrosis quística no solo afecta los pulmones, por lo que los nuevos
pulmones no curarán completamente a alguien de la enfermedad.
—Además, todavía no estoy en esa situación —dice Maggie—. Para obtener
nuevos pulmones tienes que tener un pronóstico desalentador, pero sin
estar demasiado enfermo como para recibir un trasplante de pulmón.
Afortunadamente, estoy demasiado saludable para ser un candidato
en este momento. Es una posición difícil de encontrar. Los nuevos
pulmones estarían bien, pero realmente no quiero estar en posición de
ser candidato porque significa que mi salud tendría que disminuir
primero. Y un trasplante podría prolongar la vida de alguien por unos
años, pero también podría reducirla. Demasiado. No es algo que
estoy esperando a corto plazo, para ser honesta.
—Sin embargo,
Maggie gime ynuevos avances
deja caer ocurren
su cabeza todos
sobre los días
la mesa, —agrega Warren—.
golpeándola tres veces
Por esolaesta
contra nocheElla
madera. soloseestamos discutiendo
retira de el futuro
su silla y me cercano,
mira. —Tú no a
vienes
largo plazo. Si tratamos de adelantarnos demasiado, eso puede
conmigo
desalentar otras posibilidades.
—dice, caminando Maggie no quiere obstaculizar nuestras
hacia la cocina.
vidas y nosotros obstaculizar la de ella, entonces, en este momento, el
—¿A tu grupo de apoyo? —pregunto, confundida. No sé por qué de
mejor escenario es abordar las cosas unos meses a la vez con las
repente estoy siendo torturada por este compromiso.
herramientas que tenemos para enfrentarlas.
—No —dice Maggie—. No al grupo de apoyo. Vas a saltar en bungee 2
238
Ridge asiente, pero luego responde a Warren. —A veces siento que
tu cerebro tiene una reserva de energía. Está apagado la mayor parte
del tiempo, pero las pocas veces que lo enciendes, es una gran
potencia.
Warren le sonríe. —Gracias, Ridge.
Maggie se ríe. —No estoy segura de que fuera un cumplido, Warren.
—Claro que sí —dice Warren.
Creo que fue tanto un insulto como un cumplido, lo que me hace reír.
Pasamos la siguiente media hora comiendo la lasaña que Maggie
preparó y elaborando más acuerdos. Bridgette no dice mucho, pero
tampoco es grosera, lo cual es una gran mejora desde que entramos por
la puerta principal.
Después de que le decimos a Maggie buenas noches, Ridge toma mi
mano y me lleva al asiento trasero del auto. Él obliga a Warren a
conducir a casa, lo cual está bien conmigo porque realmente quiero
compartir el asiento trasero con Ridge en el camino a casa.
Él se extiende a través del asiento y desliza sus dedos a través de los
míos mientras salimos de la entrada de Maggie. Él saca su teléfono y
me envía un mensaje con una sola mano.
Ridge: Eres como el susurrador de Bridgette. No sé cómo lo haces.
Sydney: Ella no es tan mala. Creo que siempre está a la defensiva porque nadie ha hecho
ningún esfuerzo para superar esa actitud defensiva.
Él aprieta mi mano después de leer su texto. Luego se acerca y me
desabrocha el cinturón de seguridad, acercándome más a él. Una vez que
estoy en el medio del asiento trasero, él reajusta el cinturón de seguridad
del medio a mi alrededor, tirando de mí contra él. —Mejor —dice,
envolviendo su brazo a mi alrededor.
Su pulgar está rozando mi hombro, pero su mano eventualmente baja lo
suficiente como para que pueda rastrear las letras desteñidas que
escribió sobre mi corazón. Él presiona su boca contra mi oreja. —Mía —
dice en voz baja.
Sonrío y coloco mi mano sobre su corazón. —Mío —le susurro.
Ridge me sonríe y luego me señala antes de darse unas palmaditas en el
pecho dos veces signando la palabra "Mía".
Le señalo y hago la misma seña: mío. Él asiente, pasando el dorso de sus
dedos sobre mi mejilla. Él presiona su boca contra la mía y sonrío
mientras dura el beso. No puedo evitarlo. Cuando él se retira, se apoya
contra la puerta, acercándome aún más. Levanto mis piernas sobre el
asiento mientras me acurruco contra él.
Esto se siente bien. Finalmente. Solía sentirse tan mal, pero ya nada
entre nosotros se siente mal. Le debo mucho a la disposición de Maggie
para perdonar y seguir adelante e incluso aceptarme en su vida después
de todo lo que sucedió.
Mucho ha cambiado
Ridge: Exactamente. Dice en
algoel
queúltimo año.elEl
hayas hecho día que cumplí veintidós
esfuerzo.
años, pensé que iba a ser el peor año de mi vida. Pero poco sabía, un
enTambién
Sydney:
chico lo hizo
un balcón conWarren.
su guitarra cambiaría todo eso.
Ridge: Solo
Ahora estoyporque
aquíquería
en susacostarse
brazos,conincapaz
ella. No creo queganas
y sin haya esperado enamorarse
de borrar la sonrisa
de mi
de ella.rostro
Eso fueporque
una sorpresa para todos.
su corazón es Especialmente
mío. para él.
Sydney: Tienes amigos únicos. Me gustan.
M-Í-O.
240
2
Ridge: Ahora son tus amigos también
Warren o yo pasemos algunas noches ahí cuando se enferme porque
se
debilita tanto que ni siquiera se puede levantar de la cama.
Si está en el mismo complejo, hará todo más fácil. No tendré que
pasar noches incómodas en el mismo apartamento que ella, pero
estará lo suficientemente cerca para que Warren o yo podamos correr
Sydney se mostró tan complaciente. Ha visto a Maggie durante sus 2
peores
de reversa un camión si ni siquiera es capaz de subir las malditas escaleras
mientras empuja un colchón.
Tampoco entiendo por qué estamos subiendo el colchón de Maggie. Su
apartamento estará listo en cuatro días y tiene un sillón, además de que
la cama de Brennan está vacía. Pero no discutiré, porque si ella va a
estar en mi apartamento, prefiero que esté en la habitación más alejada
de la mía para que esto se sienta menos incómodo, a pesar de que pasaré
las noches de esta semana en el apartamento de Sydney.
Warren se detiene a tres escalones del final para descansar. Recarga su
brazo en la barandilla y se quita los audífonos. —Esto es lo único que
vamos a mover, ¿verdad? ¿Todo lo demás se queda en el camión de
mudanza?
Asiento y le digo con señas que levante nuevamente el colchón. Rueda
sus ojos y reajusta su agarre, empujándolo hacia mí.
El nuevo apartamento de Maggie está del otro lado del complejo. Cerca
del viejo apartamento de Sydney, de hecho. Maggie ha intentado
retractarse varias veces y encontrar a alguien más con quién quedarse
porque está preocupada de que sea demasiado, vivir tan cerca. Pero
honestamente, esto será lo mejor para todos. Ella se enferma muy
seguido y el último año he tenido que pasar una gran cantidad de
noches en San Antonio. Aunque sólo esté a unas cuantas millas de
nosotros, el hecho de que esté en otro complejo haría que fuera
necesario que
Capítulo
21
Ridge
2
Es muy difícil decirle a Warren todo lo que está haciendo mal cuando
hasta conseguir un vaso con agua. Eso sin mencionar sus medicinas,
asegurarse de que esté haciendo su tratamiento de respiración cuando
está débil y recuperándose de una enfermedad, asegurarse de que sus
niveles de azúcar estén bien cada ciertas horas. Si no estuviera en el
mismo complejo, su cuidado requeriría un coche para ir con ella, y no
sería posible dejarla sola. Pero estando en el mismo complejo, requiere
menos de mi tiempo y menos de mi presencia, y al final, eso hará que
Maggie se sienta más independiente, justo como quiere.
Dejaremos todas sus cosas en el camión de mudanzas porque uno de
los compañeros de trabajo de Warren también trabaja a medio tiempo
para la compañía que nos lo está rentando. Nos dejan tenerlo toda la
semana por sólo $19 al día, así que se quedará lleno de todas las cosas
de Maggie y estacionado hasta que se mude a su apartamento.
Maggie aún está en el camión, juntando todas las cosas que necesitará
para los próximos cuatro días. Sydney fue a recoger a Bridgette del
trabajo. Warren y yo finalmente metimos el colchón a la habitación y lo
dejamos caer en el piso. Warren está respirando pesadamente con sus
manos en la cintura. Me voltea a ver. —¿Por qué no te quedaste sin
aliento?
—Sólo subimos un tramo de escaleras. Una vez. Y me ejército.
—No, no lo haces.
—Sí, lo hago. En mi habitación. Todos los días.
En mi camino por las escaleras, recibo un mensaje de texto. Veo mi
teléfono y me detengo cuando veo que es de Sydney. Es un
mensaje grupal conmigo y Warren.
Sydney: Estamos en el autoservicio de DQ. ¿Alguien quiere un blizzard?
Warren: ¿Acaso un perro con una sola pata nada en círculos?Quiero uno de
Ridge: M&M, por favor. 2
Miroque
giro hacia
dio,abajo
pero al camión
ahora no loenpuedo
el estacionamiento y miro
imaginar de otra a Maggie
manera.
Así que, sí. En respuesta a la pregunta de Warren, es raro, así que
asiento. Pero sólo es raro porque todo parece estar funcionando. Sólo
estoy esperando que caiga la bomba. Ya sea que la arroje Maggie o
Bridgette o Warren, no lo sé. Pero dudo mucho que la arroje Sydney.
Ella ha manejado esto mejor que nadie, y tiene muchas razones para no
hacerlo.
—¿Y si Sydney y Bridgette vivieran juntas y decidieran vivir con algún tipo
con el que ambas hayan salido en el pasado? ¿Crees que estaríamos
bien con eso?
Me encojo de hombros. —Supongo que depende de la situación.
—No, no depende —Warren dice con señas—. Estarías molesto. Lo
odiarías, actuarías como una pequeña perra molesta, justo como yo lo
haría, y luego todos terminaríamos.
No quiero creer que actuaría así. —Eso nos da más razones para hacerles
saber cuánto las apreciamos.
Warren patea una hoja en el colchón de Maggie y luego se agacha para
levantarla. —Le hice saber a Bridgette cuánto la aprecio durante toda la
noche anterior —Sonríe y lo tomo como la señal para regresar al
camión de mudanzas.
Me mira como si lo que acabara de decir fuera algún tipo de traición.
Baja la mirada al colchón. —¿Esto es raro?
Miro el colchón de Maggie, finalmente dentro del mismo apartamento
en el que estoy. Solía odiar que nunca aceptó mudarse conmigo y
ahora lo hará por unos cuantos días, y ni una sola parte de mí quiere
que pase como lo hacía antes. Eso es raro para mí. Después de tantos
que Maggie y yo terminaríamos viviendo en este apartamento juntos, 2
y
por la rampa y desaparecer dentro de él. Este es uno de esos incómodos
momentos a los que nos vamos a tener que acostumbrar. Necesito
recordarle a Sydney que Maggie está aquí y que probablemente quiera
uno, pero se siente raro recordarle a Sydney que tenemos que incluirla.
Probablemente no es tan raro como cualquier cosa que haya pasado en
las últimas dos semanas en las que hemos estado saliendo. y una parte
de mí tiene problemas con lo que debo decirle a Maggie y si está bien
ofrecerle un helado sabiendo que no debe consumir mucha azúcar. Pero
no quiero ser quien mencione su salud justo ahora; estoy tratando de
mantener mi distancia con la esperanza de que ella sola se esté
controlando.
Justo en medio de mi batalla mental, Maggie envía un mensaje al grupo.
Maggie: Yo quiero una Dr. Pepper de dieta grande. ¡Gracias!
Ni siquiera me di cuenta de que Sydney la incluyó en el grupo. Pero por
supuesto que lo hizo. Cada vez que algo de esto se empieza a poner
incómodo, Sydney de alguna manera desaparece ese sentimiento antes
de que se establezca completamente.
Camino hacia el camión y Maggie está completamente dentro de él,
escarbando en el primer cajón de su tocador. Está lanzando cosas hacia
la parte de arriba del tocador, buscando algo. Encuentra la blusa que
estaba buscando y la mete en una bolsa. Levanta la mirada y me ve
parado en la puerta del camión.
Después de eso, nunca habría considerado la idea de un viaje
internacional. Tal vez debí haberlo hecho. Me doy cuenta de eso
ahora, después de saber lo mucho que odiaba mis precauciones. Y
honestamente no la culpo. Su vida no es la mía y aunque mi única
meta era alargar su vida, todo lo que ella siempre ha querido es una
vida con más sustancia.
Puedo ver movimiento por el rabillo del ojo, así que me doy la 2
vuelta y
debería hacerlo.
Hay tres cosas tachadas en la lista. Salto en paracaídas, conducir un
auto de carreras y una aventura de una noche.
Sé que se lanzó en paracaídas, ¿pero cuándo condujo un auto de
carreras? ¿Y cuándo...? No importa. No es mi problema.
Leo el resto de las cosas de la lista, recordando cómo ella solía hablarme
de estas cosas. Siempre odié que quisiera hacer tantas cosas porque
sentía que tenía que ser la voz de la razón y eso la ponía de mal humor.
Me recargo en el tocador, mirando la hoja. Una vez planeamos un viaje a
Europa. Fue justo después de terminar mi segundo año de universidad,
hace como cuatro años. Estaba aterrado de ir porque aun estando en un
espacio pequeño en un vuelo internacional por diez horas era suficiente
para poner su salud en riesgo. Sin mencionar el cambio en los niveles de
oxígeno y atmósfera, y estar en un área turística en un país con
hospitales no familiarizados con su historial médico. Intenté tanto
hacerla cambiar de opinión, pero no lo pude lograr porque honestamente
no la podía culpar por querer ver el mundo. Y no quería ser quien la
detuviera.
Pero al final, no fui yo quien impidió que fuera. Lo hizo una infección
pulmonar que contrajo y la dejó en el hospital por diecisiete días. Nunca
la había visto tan enferma, y todo el tiempo que estuvo en el hospital,
sólo pude sentirme aliviado de que no contrajo esa enfermedad en
Europa.
—¿Puedes tomar la maleta y traerla?
Asiento y me agradece con señas, luego sale del camión y se dirige a
las escaleras del apartamento. Camino hacia el tocador para tomar la
maleta de arriba de él, pero hago una pausa cuando veo una hoja de
papel en el piso del camión. Me agacho para recogerlo. No quiero ser
invasivo, así que lo coloco arriba pero está desdoblado y puedo ver
que es una lista. 2
En la parte de arriba dice "Cosas que quiero hacer", pero la frase al
dos blizzards en sus manos. Está usando una de mis camisas de Sound
of Cedar y le cuelga del hombro porque es muy grande para ella. Si por
mí fuera, usaría una de mis camisas cada día por el resto de nuestras
vidas.
Amo este estilo sin esfuerzo en ella.
Me sonríe y me pasa uno de los blizzards. Saca la cuchara de su blizzard
y lame el helado, luego cierra su boca sobre la cuchara.
Sonrío. —Creo que me gusta más el tuyo y ni siquiera sé de qué sabor
es. Sonríe y se para de puntitas, besándome brevemente en los labios. —
Oreo
—dice. Mete la cuchara en su helado e inclina la cabeza hacia la hoja
de papel que aún tengo en las manos—. ¿Qué es eso?
Miro la lista, preguntándome si tengo el derecho de compartir algo como
esto con ella. —La lista de cosas por hacer de Maggie. Estaba en el piso —
La coloco en el tocador y tomo la maleta—. Gracias por el helado —La
beso y salgo del camión. Cuando volteo a ver si me está siguiendo, no lo
hace.
Está levantando la hoja de papel.
Maggie y me pidió acompañarla hace que el sentimiento tenga un
nuevo
nivel de significado.
Doblo la lista y tomo mi helado, luego salgo del camión y me dirijo al
apartamento de Ridge. Él está en la cocina con Warren; ambos están
recargados sobre el mostrador, terminándose su helado. Bridgette
Camino hacia la habitación de Maggie y está de rodillas frente a su 2
maleta, hurgando en ella. Levanta la mirada y me ve parada en la
muerte y lo odié cada segundo.
Cuando tenía once, pasamos dos semanas en un tour de tren en Europa.
Vimos la torre Eiffel, fuimos a Roma, visitamos Londres. Tengo en el
refrigerador la fotografía que mi padre nos tomó a mi madre y a mí
frente al Big Ben.
Fui una vez a Las Vegas con Tori. Fuimos en mi cumpleaños número
veintiuno y nos quedamos solo una noche porque no podíamos costear
más que eso y Hunter estaba molesto de que me hubiera ido en mi
cumpleaños.
He hecho muchas cosas que están en la lista de Maggie, y aunque no di
los viajes por sentado, ciertamente no creo haberlos apreciado lo
suficiente. No sé si alguna vez pensé en hacer una lista de cosas por
hacer, o qué es lo que pondría en ella si lo hiciera. No hago planes con
tanta anticipación.
Ese es el problema, creo. Tampoco Maggie lo hace. Pero anticipación
para ella y anticipación para mí, tienen significados completamente
diferentes.
Coloco mi blizzard sobre el tocador y observo el número siete en la lista.
Saltar en bungee.
Nunca he saltado en bungee. No puedo decir que eso estaría en mi lista
de cosas por hacer, pero el hecho de que es una de las cosas en la lista de
Capítulo
22
Sydney
2
Cuando tenía ocho años, fuimos a un viaje por carretera hacia
—¿Puedo pasar?
Asiente, así que camino hacia su colchón y me siento. Coloco mi vaso
en el piso al lado del colchón y levanto su lista.
—Encontré esto —digo, levantándola para que la pueda ver. Está a solo
unos pies de distancia, así que se acerca y la toma, luego la ve. Hace
una expresión como si fuera basura y luego la lanza a la cama.
—Era una gran soñadora —Le da su completa atención otra vez a
su maleta.
—Puede que pienses mal de mí —digo— pero he estado en París, y
probablemente no debería admitir esto, pero la torre Eiffel se ve como
una gran torre de transmisión. Es un poco decepcionante.
Maggie se ríe. —Sí, definitivamente no deberías admitir eso frente a nadie
más —Cierra la maleta y luego se mueve hacia la cama, acostándose boca
abajo. Toma la lista y la coloca frente a ella—. Taché tres de estos en un
día.
Recuerdo el día que se lanzó en paracaídas porque no pasó hace mucho.
Lo que significa... la aventura de una noche tampoco pasó hace mucho
tiempo. Tengo curiosidad, pero no estoy segura de estar en un punto
donde le quiero preguntar sobre su vida sexual.
—Las cavernas —dice— he visto el vuelo de los murciélagos aquí en
Austin
una docena de veces.
—De acuerdo —digo, dibujando un paréntesis abierto al lado de las
Cavernas de Carlsbad en la lista—. Podrías ir a las cavernas de
Georgetown. Probablemente no sea tan genial como Carlsbad, pero
definitivamente es una cueva. 2
Maggie ve la lista por un momento. No estoy segura de si cree que
bungee?
Niega con la cabeza. —Es muy difícil viajar para mí. Lo he intentado un
par de veces y nunca llegué muy lejos. Tengo demasiado equipo médico.
Demasiadas medicinas por las que preocuparme. No es tan divertido
para mí, pero no me di cuenta cuando escribí esta lista.
Odio eso para ella. Casi quiero alterar un par de estas cosas sólo para
que ella pueda cumplir más. —¿Qué tan lejos eres capaz de viajar sin
que sea un inconveniente?
Se encoge de hombros. —Los viajes de día son geniales. Y probablemente
podría ir a algún lugar por un par de noches, pero no hay ningún lugar
cerca de aquí al que no haya ido. ¿Por qué?
—Un segundo —me levanto y camino hacia la sala para tomar un bolígrafo
y un cuaderno de la mesa. Regreso a la habitación de Maggie, sintiendo
la mirada de Ridge y Warren todo el tiempo. Me doy la vuelta y les
sonrío antes de dirigirme a la cama de Maggie. Coloco su lista sobre el
cuaderno.
—Creo que con una pequeña modificación, todas se pueden realizar.
Maggie se levanta sobre su codo, curiosa sobre lo que estoy haciendo. —
¿Qué tipo de modificación?
Recorro la lista. Me detengo en las cavernas de Carlsbad. —¿Qué te
interesa acerca de Carlsbad? ¿Los murciélagos o las cavernas?
—La mayoría de las otras cosas que escribí son un poco imposibles.
Me
enfermo muy fácilmente y muy seguido como para viajar a otro país.
Veo el de Las Vegas. —¿Por qué querrías perder cinco grandes en vez
de ganarlos?
Se da vuelta sobre su espalda y me mira. —Si pudiera perder cinco
grandes, significaría que soy rica. Ser rica está implícito en mi lista. 2
2
Hoy me
—Muy grandes.
Maggie me quita la lista y la observa. Sonríe mientras la lee, luego toma el
cuaderno y bolígrafo de mis manos. Coloca la lista sobre el cuaderno. Al
inicio de la lista, se lee: "Cosas que quiero hacer. Tal vez uno de estos
días..."
Maggie reescribe una parte del título, así que ahora dice: "Cosas que
quiero hacer. Tal vez ahora."
—¿Qué más? —pregunto, recorriendo la lista. Al parecer ya condujo un
auto de carreras y tuvo una aventura de una noche, la cual evité
discutir satisfactoriamente. La única cosa que no hemos modificado es
Las Vegas. La señalo con el bolígrafo—. Hay casinos justo afuera de
Paris, Tx.
Técnicamente, podrías ir ahí después de visitar la falsa Torre Eiffel. Y
tal vez podrías... —Tacho dos de los ceros— sólo perder cincuenta dólares
en lugar de cinco grandes. 2
Es la primera vez que he visto a mi doctora desde que salió del cuarto
del hospital —justo antes de que me fugara—. Dediqué la primera mitad
de mi cita hoy disculpándome con ella y prometiéndole tomar las cosas
más en serio de ahora en adelante. La segunda mitad de mi cita la pasé
con diferentes especialistas. Cuando tienes fibrosis quística no es seguro
ir con varios especialistas y sentarte en diferentes salas de espera, así
que de hecho el equipo viene a ti en una locación central. Es uno de los
beneficios que amo acerca de mi doctor, pero no pude disfrutar
completamente mientras vivía en San Antonio. De verdad siento como
si mi salud fuera a ser más fácil de mantener ahora que estoy de regreso
en Austin. Solo debo renunciar a dejar que mi frustración acerca de mi
enfermedad le gane a mi voluntad. Lo cual es difícil, porque me frustro
fácilmente.
He estado fuera la mayor parte del día, pero cuando regreso al
departamento estoy sorprendida de ver el carro de Ridge aquí. Se ha
estado quedando en lo de Sydney la mayor parte de la semana. Hoy es
viernes y se supone que me mudaría mañana, pero la mudanza se ha
retrasado hasta el domingo. Estoy segura de que Ridge estará feliz de
tener su propia cama otra vez. O no. Dudo que le moleste en lo absoluto
pasar tanto tiempo en el departamento de Sydney.
Cuando abro la puerta de la sala de estar, ambos están en el sofá. Ridge
sostiene un libro enfrente de él, sus pies apoyados en la mesa de centro.
Sydney está recargada contra él, mirando las palabras en las páginas
mientras él lee en voz alta. Capítulo
Ridge está leyendo. En voz alta. 23
Los observo por un momento. Él tiene problemas con una palabra y
Sydney le hace mirarla mientras la murmura para él. Le está ayudando a
pronunciar las palabras en voz alta. Es un momento tan íntimo; quiero
estar en cualquier otro lugar cuando cierro la puerta y me gano la 253
2
Hoy me de Sydney. Me mira y luego se sienta derecha, poniendo un
atención
poco de distancia entre ella y Ridge. Lo noto. También lo hace él,
porque deja de leer y sigue la mirada de Sydney hasta que me ve.
—Hey —Sonrío y dejo mi bolso en el bar.
—Hola —dice Sydney—. ¿Cómo estuvo la cita?
Me encojo de hombros. —En general, estuvo bien. Pero pasé la mayor
parte de ella siendo regañada —Tomo una botella de agua del
refrigerador y camino directo a la habitación en la que me estoy
quedando—. Lo merecía de todas formas—Camino a mi cuarto y cierro
la puerta. Me dejo caer en la cama porque es lo único que hay aquí. Ni
siquiera hay una cómoda o una TV o una silla; solo yo, mi cama y una
sala de estar en la que me siento ligeramente incómoda.
No porque Ridge está ahí con Sydney. Honestamente no me molesta
verlos juntos. Lo único que me molesta de eso, es que verlos juntos me
recuerda a Jake y siento una punzada de celos de que esos no somos Jake
y yo abrazados en un sofá en algún lado. Siento que Ridge y Sydney
encajan juntos en una forma similar a la que Jake y yo lo hacemos. O
podríamos haberlo hecho.
Es interesante mirar atrás al qué tan malos éramos Ridge y yo para el
otro. Y no era para nada porque hubiera algo mal con nosotros como
individuos; solo que no sacábamos la mejor parte del otro. No como
Sydney lo hace con él. Quiero decir, está sentado en un sillón, leyéndole.
Su conexión con ella a través de sus mensajes es algo que nunca
experimenté con él. Finalmente decidí terminar nuestra relación debido
a su conexión. No porque la formaron... sino porque él y yo nunca lo
hicimos.
Se supone que las personas saquen lo mejor unos de otros. Yo no
saqué lo mejor que había en Ridge, él no sacó lo mejor de mí. Pero ver
Sydney con él en el sillón justo ahora, ayudándolo... ella saca lo mejor 2
de
llegué a casa leí todos los mensajes. Más de una vez. Y la conversación
que más me hirió fue cuando Ridge le explicó a Sydney de dónde salió
el nombre de la banda, Sounds Of Cedar.
La razón por la que me hirió tanto es porque me di cuenta que en todos
los años que habíamos estado saliendo, nunca le pregunté a Ridge de
dónde había salido el nombre de la banda. Y por eso, nunca supe
exactamente todo lo que hizo por Brennan cuando eran más jóvenes.
Había muchas cosas que leí de sus conversaciones que una vez deseé
nunca haber leído. Entre todos los mensajes que había en su iMessage y
todos los de su Facebook, me senté ahí por horas leyendo. Pero leer todo
eso también me dejó algo muy en claro: había mucho más en Ridge de
lo que yo sabía. Había cosas que compartió con Sydney en un corto
periodo de haberla conocido, que nunca compartió conmigo en un lapso
de seis años. Y eso no era porque Ridge me estuviera escondiendo algo
acerca de sí mismo o su pasado, o estuviera de alguna manera
mintiendo. Solo que había cosas acerca de los dos que nunca cavamos lo
suficientemente profundo para descubrirlas. Se me ocurrió que tal vez
no compartimos esas cosas porque eran sagradas para nosotros. Y uno
solo comparte las cosas realmente sagradas con las personas que te
alcanzan a un nivel así de profundo.
Yo no alcancé a Ridge en el mismo nivel que Sydney lo hizo. Y Ridge
no me alcanzó.
Y lo hace porque es su forma de perfeccionar su habla; ese no es lado
de
él que alguna vez yo haya sacado, o incluso incitado. En el pasado
tuvimos conversaciones acerca de por qué no verbalizaba, pero
siempre se encogía de hombros y decía que no le gustaba hacerlo.
Nunca obtuve una explicación más profunda que eso.
entre él y Sydney. No los leí todos en ese momento porque 2
honestamente
Noté como se alejó de él un poco cuando se dio cuenta de que estaba en
la habitación con ellos. Me molesta que sienta la necesidad de hacer eso,
quiero que sepa que su afección física no es algo que se deberían sentir
obligados a esconder por mí. De hecho, me gusta, en una forma extraña,
ver cuánto se gustan entre sí. Incluso me da más seguridad de que tomé
la decisión correcta al no permitirle a Ridge utilizar mi enfermedad
como una razón para quedarse conmigo.
Me levanto y hago mi camino de vuelta a la sala de estar. La única cosa
que aliviará la incomodidad cuando estamos todos juntos en una misma
habitación, es forzarnos aún más a estar todos juntos en una misma
habitación. Esconderme en mi habitación no nos llevará a ningún lado.
Tristemente, Ridge ya no está en el sillón con Sydney cuando salgo a la
sala. Está en la cocina, hurgando un gabinete. Ridge ya no está.
Camino al bar y tomo asiento, mirando a Sydney. —¿Qué harán mañana?
—le pregunto.
Ella se da media vuelta, sorprendida por mi presencia. Su mano está
sobre su corazón —Me asustaste —Se ríe y cierra el gabinete—. Creo que
todos planeamos ayudarte con la mudanza mañana, así que ahora que no
te estarás mudando sino hasta el domingo, tenemos el día libre.
—¿A qué te refieres con "todos"? ¿Warren también está libre mañana?
Su conexión con ella a través de sus mensajes es algo que nunca
experimenté con él. Finalmente decidí terminar nuestra relación debido
a su conexión. No porque la formaron... sino porque él y yo nunca lo
hicimos.
Se supone que las personas saquen lo mejor unos de otros. Yo no
saqué lo mejor que había en Ridge, él no sacó lo mejor de mí. Pero ver
Sydney con él en el sillón justo ahora, ayudándolo... ella saca lo mejor 2
de
Sydney asiente, como si hubiera estado pensando lo mismo. —¿Ahora
que la dinámica ha cambiado y es jodidamente incómodo?
—Sip, eso.
Sydney ríe y se inclina sobre la barra, pensando. —Tal vez podríamos
hacer lo de la cueva, en Georgetown.
—Estaba pensando más en algo a la hora del almuerzo —admito—. No
espero que pasen todo el sábado conmigo.
—Las cuevas suenan realmente divertidas.
Inclino mi cabeza, buscando una señal de que sólo esté diciendo eso por
ser amable. Algunas veces parece demasiado amable y demasiado
complaciente, hasta el punto de hacerme sospechar. Pero también, no
transmite nada más que un ambiente auténtico. Tal vez algunas personas
simplemente no se rebajan al mismo nivel de celos que otras. Como si
Sydney pudiera sentir la desconfianza en mi expresión, continúa
hablando.
—¿Recuerdas la noche de la fiesta de cumpleaños de Warren? —pregunta.
Asiento —¿Te refieres a la noche en la que creí que tu bra era lindo y
estúpidamente quería que Ridge lo viera?
Sydney se estremece un poco. —Esa noche —Confirma. Mira sus manos,
unidas en la barra frente a ella—. Me divertí un mucho contigo esa
noche,
Maggie. De verdad
Ella asiente. lo hice.
—También En ese entonces
Bridgette. Aunque creí que realmente
no creo tal vez había
queuna
ella
posibilidad de que
fuera a ayudar contermináramos
la mudanza. volviéndonos amigas y me
emocionaba porque realmente necesitaba una amiga después de lo que
Me río. —Me habría sorprendido si lo hiciera.
Tori me hizo. Pero entonces como que arruiné esa oportunidad cuando
rompí el código
—Cierto. depreguntas?
¿Por qué chicas y besé a tu novio
—dice —Levanta
Sydney— ¿Tieneslaalgo
mirada hacia mí
en mente?
—.
Me encojo de hombros —Nada específico. Sólo pensé... no lo sé. Tal
Siempre odié haber arruinado lo que sinceramente pienso que podría
sería bueno para todos si pasáramos más tiempo juntos. Ahora
haber
que...sido una buena amistad entre nosotras. Y ahora, meses después, 257
2
aquí estamos otra vez; y por alguna razón, estás extendiendo una rama
de olivo. Así que sí, el almuerzo mañana suena bien. Pero también tengo
muchas ganas de ver las cuevas, así es de que, si pudieras extender un
árbol de olivo entero, entonces creo que sería divertido.
Luce nerviosa mientras espera mi respuesta. No la hago esperar mucho
porque no quiero que se sienta nerviosa, o incómoda, o culpable o
alguna otra cosa que esta chica no merezca sentir. Le sonrío. —No
arruinaste nada al romper el código de chicas, Sydney.
Mis palabras la hacen sonreír. —Sin embargo, apuesto a que nunca
traerías chicos si estoy alrededor, y lo entendería completamente.
—Terminé con los chicos —digo con una risa—. Especialmente después de
lo que le hice al último.
Sydney levanta la ceja con curiosidad y de repente me doy cuenta de
que hablé más de lo que debería. No quiero hablar acerca de Jake, pero
basándome en la mirada que me está dando ahora mismo, ella quiere
detalles.
—¿Es el de tu aventura de una noche?
Asiento. Honestamente me sorprendió que no me preguntara sobre eso
cuando estuvo modificando mi lista de deseos el otro día. —Sí, su
nombre es Jake. Me entró pánico con él.
—¿Por qué?
—Me preparó el desayuno.
—No. No, para nada. Estaba en mi cuarto de hospital y pude escucharlo
afuera hablando con su hijo en el teléfono y todo se sintió tan real en
ese momento. Como, no solo este chico —el cual es bastante
asombroso, inteligente y divertido— entraría a mi vida, sino que también
lo haría su hijo que sonaba como un gran niño y yo solo... me asusté.
—¿De qué?
Suspiro. Esa es una buena pregunta, porque incluso yo estoy confundida
sobre el porqué seguí alejándolo. —Creo que mis miedos se
interpusieron en mi camino en algún punto. Me dije a mí misma que no
quería romper su corazón o convertirme en su carga. Pero siendo
totalmente honesta, estoy más asustada de que él rompa el mío. Me
golpeó, cuando me di cuenta de lo mucho que me gustaba, que la
mayoría de las personas no son tan comprometidas como Ridge y no
estarían dispuestas a soportar lo que implicaría tener una relación
conmigo. Me aterrorizó que él terminara siendo el que se alejara, así que
yo lo hice primero. Tal vez no quería que las cosas con él terminaran
mal. No lo sé. Cuestiono mi decisión todos los días.
Sydney me mira en silencio por un momento. —Si hubieras tenido
la oportunidad de saber que tu relación con Ridge terminaría, ¿te
retractarías de los seis años que pasaste con él?
Ni siquiera me toma un segundo responderle. Sacudo mi cabeza. —No.
Por supuesto que no.
Sydney
Sydneyse meencoge deuna
dispara hombros
miradaa burlona
sabiendas.
de —Si las—Oh,
horror. cosas cómo
terminan
se mal
atrevetú y este chico Jake, seguro que tampoco te arrepentirías del
entre
—dice.que hayas pasado con él. Nuestras vidas no deberían girar en
tiempo
torno
Me ríoa sus posibles
de su finales,
sarcasmo y menuestras
cubro elvidas deberían
rostro con las girar
manos.en —Lo
torno sé.
a las
experiencias
Lo sé, Sydney.queYconducen al final. un par de días después pero
traté de arreglarlo
entonces
Hay terminé
silencio entiempo.
por un el hospital y descubrí que tiene un hijo y no lo
Sus palabras
—¿Por se quedan
qué? ¿Por conmigo.
qué odias a los Se adhieren a mí. Se absorben dentro 259
2
de mi piel.
Ella tiene razón. Y aunque ha sido mi meta el trata de vivir mi vida sin
enfocarme en el final, eso es exactamente lo que termino haciendo.
Especialmente cuando se trata de Jake. No sé por qué me he estado
diciendo a mí misma que no puedo hacer ambos... vivir mi vida al
máximo y permitirme estar en otra relación. No es como si no pudiera
tener ambas.
—Tal vez deberías darle otra oportunidad —sugiere Sydney.
Dejo caer mi cabeza otra vez y suspiro. —Ese pobre chico —digo—. Lo
voy a convertir en una liga con todo lo que estiro y aflojo.
Sydney se ríe. —Bueno, de ahora en adelante asegúrate de solo aflojar y
no apretar.
Tomo un largo suspiro y me levanto. —De acuerdo, voy a llamarlo.
Sydney sonríe y yo trato de ignorar mis nervios mientras camino de
regreso a mi habitación. Saco mi teléfono y abro mis contactos; mi mano
comienza a temblar mientras selecciono su número. Me reclino contra la
puerta de mi habitación y cierro mis ojos después de presionar su
contacto y activar el altavoz.
Timbra dos veces y después inmediatamente entra al buzón de voz.
Acaba de mandarme al buzón de voz.
Tan pronto como cuelgo, gruño y me dejo caer sobre mi cama. No
puedo creer que me haya mandado al buzón de voz. Pero de nuevo, lo
hago. Y ahora lo único que tiene que podría cambiar su forma de
pensar es un nervioso y vergonzoso mensaje de voz que probablemente
está escuchando ahora mismo.
Me revuelco en mi autocompasión por unos momentos, pero después
me empujo fuera de la cama y camino a la sala de estar. Sydney sigue
en el bar, pero Ridge ahora está de vuelta en la habitación. Él le está
enseñando algo en su celular, pero Sydney me da su atención tan
pronto como camino fuera de mi recámara. Puedo palpar su curiosidad.
—Me mandó al buzón de voz.
Ella hace una mueca. —Oh, ¿tal vez está ocupado?
Sacudo mi cabeza y me dejo caer sobre el sofá, mirando fijo al techo. —
O tal vez se dio cuenta de lo psicópata que soy por correrlo de mi casa
antes de que siquiera terminara de freír el tocino.
—Sí, esa también es una posibilidad —dice Sydney.
Me cubro la cara con el brazo y trato de pensar en todas las razones
por las que Jake no vale la pena tanto arrepentimiento.
No se me ocurre nada. Él merece absolutamente mi arrepentimiento.
***
Han pasado
Es un golpedos horas. Tomé
aplastante, una ducha,
pero uno me puse mi pijama
que probablemente y he visto
merezco.
Espero
mi teléfono unas quinientas veces. Ridge fue a buscar la cena para
por suBridgette
todos. buzón. y Warren están aquí ahora, sentados en el sofá
conmigo.
«Hola, haz intentado localizar al Dr. Jacob Griffin. Por favor deja un
Warren
mensajeestá en medio
detallado y teydevolveré
Bridgettelaestá del otro
llamada tanlado de Warren.
pronto Estoy
como pueda.»
jugando Toy Blast en mi teléfono, pero no porque esté interesada en el
juego, sólo estoy obsesionada con observar mi teléfono. Esperando.
—Hey, Jake, es Maggie. Carson. Umm... llámame si puedes. O si
Deseando. 261
2
quieres,
—¿Libido lésbico? —pregunta Warren.
—Ni cerca —dice Bridgette.
Lo volteo a ver, preguntándome por qué demonios sigue soltando títulos
extraños que suenan como porno. Está leyendo una lista en su teléfono.
—¿Bebés en Bali?
Bridgette se ríe ante ese comentario. —Si hubiera conseguido ir a Bali
para filmar una película porno, no estaría trabajando en Hooters.
Warren se da la vuelta hacia ella. —Espera —dice— ¿Por cuánto tiempo
has estado trabajando en Hooters? ¿Es una película pornográfica
relacionada con Hooters?
De acuerdo, ahora los estoy viendo a ambos. ¿De qué demonios están
hablando?
Sydeney está en la mesa de la cocina haciendo tarea. Aparentemente
siente mi confusión porque me da una explicación. —Bridgette besó a
una chica en una película porno y se rehúsa a decirle a Warren el
nombre para que no la pueda ver. Se ha convertido en su misión en la
vida.
Wow. —Eso explica muchas cosas —digo.
Warren me mira. —¿Cuántas películas porno crees que se filman cada
día?
Me encojo de hombros. —Ni siquiera sé decirte una aproximación.
Ridge entra por la puerta con tacos y Brennan inmediatamente olvida
la
extraña situación en la que estamos, y Warren está fuera del sofá con
una única cosa en la mente que no tiene nada que ver con películas
porno.
Los tacos pueden aliviar casi cualquier problema. Estoy convencida de
eso ahora.
2
inapropiado.
Warren: Oh, bueno, sí. Definitivamente deberías preocuparte por eso.
Me río y bajo mi teléfono porque Sydney viene de regreso al sofá con
una cuchara llena de helado en su boca y no quiero pensar en nada más
en este momento. Como si pudiera leer mis pensamientos, sonríe un
poco, sacando la cuchara de su boca.
—¿Quieres un poco?
Asiento.
No se sienta a mi lado en el sofá para compartirlo conmigo. Se sienta
sobre mí, sosteniendo el tazón de helado entre nosotros mientras ajusta
sus piernas a ambos lados de mí. Toma una pequeña cucharada de
helado y me da un poco. La trago y luego inclina su cabeza y me besa.
Su boca sabe a vainilla. Su lengua está fría mientras la desliza contra la
mía.
La acerco pero el tazón de helado entre nosotros me estorba. Lo tomo y
lo coloco en la mesa al lado de ella y luego la acerco más. La beso
mientras la bajo lentamente hacia el sofá.
Está a punto de derretirse, justo como su tazón de helado.
Quiero que sea yo yendo a través de él. Solo necesito encontrarlo solo
de
alguna manera antes de que conozca a Warren o Ridge. Merece saber
qué es en lo que se está metiendo antes de que entre al departamento.
Si pudiera llevarlo de la entrada a mi habitación sin que conozca a
nadie, nos daría unos cuantos minutos solos para reencontrarnos a
Eso es lo que haré. De alguna manera lo arrastraré hasta mi cuarto 2
antes
¿Quién va a explorar cuevas con tacones altos?
O... mejor aún... ¿quién aparece en una cita con una cita?
Estaba cubierta en sudor cuando desperté, pero no estoy segura si fue
porque en mi sueño Jake apareció con una cita o porque Warren y
Bridgette eran un solo cuerpo con dos cabezas. Ambos aspectos de mi
sueño eran igualmente perturbadores.
No sé si fue el sueño lo que me hizo temblar tanto o es el hecho de que
todavía me hace falta hablar con Jake acerca de la dinámica de grupo,
pero estoy parada en el lavabo del baño intentando lavarme los dientes y
mi mano tiembla visiblemente.
Quiero hablar con Jake antes de que conozca a todos, pero estará aquí en
media hora y no puedo llamarlo minutos antes de que llegue y decir:
«Oh, por cierto, estás a punto de pasar el día con mi ex novio. Mis dos ex
novios, de hecho. ¡Será divertido!»
Debería haber cancelado.
Casi lo hice cuando me desperté después de la pesadilla que tuve
anoche. Tenía toda una excusa acerca del porqué necesitaba cancelar,
lista para enviar en un mensaje de texto, pero estaba demasiado asustada
para mandarlo. Él vería a través. He sido poco confiable demasiadas
veces con él y alejarlo otra vez sería probablemente el último contacto
que él tenga conmigo. Además, en nuestra conversación de anoche él
dijo que quería consistencia. No quiero que nuestra consistencia resulte
en mí alejándolo.
Capítulo
25
Maggie
2
Tan pronto como termino de lavarme los dientes me seco la boca con la
toalla de mano y observo mi reflejo. Aparte del miedo absoluto en mis
ojos, luzco igual que siempre. Pongo mi cepillo de dientes de vuelta en
mi bolsa de tocador justo cuando Bridgette abre la puerta del baño que
lleva a su habitación. Se detiene cuando me ve. Me detengo cuando la
veo.
Siempre ha sido incómodo entre nosotras, pero nunca antes habíamos
tenido que compartir un baño, así que el hecho de que ella está
básicamente en ropa interior lleva la incomodidad a un nuevo nivel. Para
mí, de cualquier forma. A ella no parece molestarle el hecho de que la
estoy viendo casi desnuda, porque camina directo a excusado y se baja
las pantis para orinar.
Es igual de deshinibida que Warren.
—Así que —dice Bridgette, enrollando el papel de baño en su mano—.
¿Este chico tiene idea de en lo que se está metiendo?
—¿Qué quieres decir?
Ella hace un círculo con una mano. —Ya sabes, todo este grupo con
el que está a punto de pasar todo el día. ¿Conoce la historia?
Cierro mis ojos por un segundo, respirando conscientemente. —Aún no —
digo, exhalando.
Bridgette hace algo raro. Sonríe.
envié la dirección de nuestro apartamento y media hora después me
respondió con un texto que decía "La conferencia terminó. Voy
en camino".
Eso fue hace casi una hora, lo que significa que tocará la puerta en
cualquier momento.
—¿Estás bien? —pregunta Sydney.
2
Levanto la vista de mi celular. Está recargada contra la barra,
Luzco pálida. No sé si se debe a mis nervios o a mis niveles de azúcar. A
veces es difícil distinguir la diferencia entre el azúcar baja, el azúcar alta o
el inicio de un ataque de pánico.
Salgo del baño y camino hacia la cocina. Mi bolsa está sobre la barra
así que hurgo dentro de ella hasta dar con mi medidor de glucosa. Me
inclino contra la barra mientras reviso el azúcar en mi sangre, tan
pronto como inserto la lámina en el monitor, la puerta principal
empieza a abrirse.
Ridge y Sydney entran al departamento tomados de las manos. Sydney
me dice hola y Ridge asiente, entonces le signa a Sydney que se dará una
ducha. En su camino al cuarto se detiene al verme con el medidor en mis
manos. Su frente se arruga con preocupación naturalmente.
—Estoy bien —le digo en señas—. Sólo quería revisarlo antes de irnos para
estar segura.
Alivio llena su expresión. —¿Cuánto para que nos vayamos?
Me encojo de hombros. —No hay prisa. Jake ni siquiera ha llegado.
Asiente y se dirige a su habitación. Sydney coloca su bolsa sobre el bar
junto a mí y abre el gabinete para tomar una bolsa de tortilla chips.
Mis niveles de glucosa están dentro del rango normal. Suspiro, aliviada,
luego pongo el medidor de vuelta en mi bolsa. Tomo mi celular y abro
mis mensajes con Jake. Tuvimos una rápida conversación esta mañana,
le
De verdad sonríe. Una enorme sonrisa de emoción que revela todos
sus
blancos y perfectos dientes. Debería sonreír más a menudo. Tiene una
gran sonrisa, a pesar de aparecer en un momento extraño.
—¿Por qué luces tan feliz? —pregunto con precaución.
Se encoge de hombros. —Ha pasado mucho tiempo desde que estuve
así de emocionada por algo. 2
***
Uno podría pensar que a un hombre que regularmente corta el pecho de
las personas no le molestaría un poco de vómito.
No es mi caso.
Estoy convencido de que Justice ha vomitado más hoy que en los
primeros cinco años de su vida. O tal vez solo parece ser así porque es
más viejo y más grande y produce más vómito, pero cielos, había tanto
vómito. No puedo estar más feliz de que haya terminado, por ahora. No
debe quedar nada en el pobre niño por vomitar.
Cuando termino de fregar el baño, de ducharme y revisar a Justice,
finalmente me acomodo en el sofá para ponerme al día con mi
conversación con Maggie. Regresaron de las cuevas hace poco más de
una hora y ella me envió algunas fotos. Le dije que hablaríamos tan
pronto llevara a Justice a la cama.
304
Ella responde casi de inmediato. La sonrisa en su rostro me decepciona,
pero solo porque no la estoy viendo en persona.
—¿Cómo está Justice?
Me encanta que ella me pregunte eso antes de que siquiera digamos
hola.
—Dormido. Y vacío. Creo que ha expulsado todo lo que ha comido desde
Enero.
Ella hace una mueca. —Pobre niño.
Está acostada en su cama, con el cabello extendido sobre la almohada.
Está sosteniendo el teléfono sobre ella. Es la misma visión que tuve de
ella hoy cuando estaba sobre ella, preparándome para besarla. Me
obligo a sacar esa imagen de mi cabeza antes de ella pueda ver a través de
mí. —
¿Fue el viaje tan divertido como lo mostraron tus imágenes?
—Lo fue. Bueno, en su mayoría —Aparta el cabello de su frente para
revelar un pequeño vendaje cerca de su sien—. Warren pensó que sería
una buena idea esconderse de nosotros para luego asustarnos. Me volví
realmente rápido y Bridgette y yo chocamos nuestras cabezas —Ella ríe,
alisando si cabello—. Warren se sintió tan mal que nos invitó a cenar.
Quiero decir, fuimos a Taco Bell, pero aun así, Warren nunca paga por
nada.
Yo sonrío. Me gusta que parece haberse divertido. La felicidad se ve
muy bien en ella. —¿Estás lista para la gran mudanza mañana?
Ella asiente, rodando sobre su costado mientras baja el teléfono. —Estoy
lista para tener mi propio baño de nuevo.
— Me ofrecería para ayudar, pero Chrissy no está disponible hasta el
lunes. Probablemente tendré que quedarme con Justice en casa hasta
que se sienta mejor, así que no habrá muchas escapadas de ida y vuelta.
—Tenemos mucha ayuda. No tengo mucho que mover, de todos modos.
Pero te llamaré mañana en la noche y te mostraré mi nuevo lugar una 305
vez que hayamos terminado.
—Me gustaría más poder verlo en persona.
Ella sonríe. —¿Cuándo es tu próximo día libre?
—Estoy de guardia el próximo fin de semana, pero tengo el miércoles
libre. Podría manejar hasta allá... y podríamos pedir comida para llevar.
No puedo pasar la noche pero podría quedarme unas cuantas horas.
—Eso suena bien. Cocinaré para ti —ella dice.
—¿Sabes cuánto tiempo ha pasado desde que comí mi última comida
casera?
Ella sonríe de nuevo y luego sigue su sonrisa con un suspiro. Abro la
boca para decirle lo bonita que se ve, pero me interrumpen cuando
Justice entra en la habitación. —Oye, amigo —le digo, levantando la vista
de mi teléfono—. ¿Te sientes bien?
Justice asiente pero no me mira. Camina hacia la cocina y abre la nevera.
—Te dejo ir —Maggie susurra, volviendo mi atención al teléfono.
Le sonrió con cariño. — Llámame mañana cuando esté todo acomodado.
—Lo haré. Buenas noches.
La miro por un momento, no del todo listo para terminar mi
conversación con ella. Pero tampoco quiero hablar por teléfono con ella
Justice agarra la bolsa de jamón y cierra la nevera. —No podría esperar
tanto. Siento que podría moriría de inanición —Toma una bolsa de
papas fritas y se sienta en la barra con el jamón frente a él. Abre la bolsa
de papas fritas y pone algunas en su boca—. ¿Con quién hablabas?
—Maggie.
—¿La misma chica a la que fuiste a ver en el hospital?
Es por eso que no quería hablar por teléfono con ella mientras él estaba
en la habitación. Él no se asusta de nada. Y soy un gran creyente en ser
honesto con él, así que asiento. —La misma.
—¿Por qué estaba en el hospital?
—Tiene fibrosis quística.
— Eso suena serio.
—Es serio. Deberías investigarlo.
Justice rueda sus ojos porque sabe que estoy hablando en serio. Cada vez
que hace una pregunta y le digo que investigue, siempre lo sigo el día
siguiente para asegurarme de que lo hizo. Luego lo corrijo sobre
cualquier cosa que aprendió que fuera inexacta. Esa es la desventaja de
Google. Hay mucha información, pero debes saber cómo desherbar la
porquería. Creo que esa es la razón por la que siempre le pido que
investigue las respuestas
mientras Justice esté en laasala.
muchas de susnoches,
—Buenas preguntas, para—susurro.
Maggie que Ella
se
pueda aprender a navegar correctamente en la porquería.
despide con la mano y luego termina la llamada. Dejo mi teléfono en el
—¿Maggie es tu novia?
sofá y luego entro a la cocina con Justice.
Niego con la cabeza. —No.
Está de pie con la puerta del refrigerador abierta y picando una
—¿Pero
rebanadahasdetenido
quesosexo con ella?
americano. Le da un mordisco, dejando la rodaja
mete
La en la boca,de
combinación junto con el
mi hijo deresto
once de la rebanada
años de queso.
preguntándome si he tenido 307
3
sexo con
—Sería alguien
más fácil simientras mastico
me dejaras unun
hacerte bocado de jamón
sándwich —me es extraña y
entretenida. —¿Qué?
—Mencionaste algo sobre no poder pasar la noche con ella otra vez. Lo
que significa que has pasado la noche con ella antes. Lo que
probablemente significa que has tenido relaciones sexuales con ella
porque Cody dice que eso es lo que hacen los adultos cuando pasan la
noche juntos.
—Cody tiene once años. No siempre tiene la razón.
—¿Entonces eso es un no?
Me siento culpable porque en este momento estoy deseando que Justice
aún estuviera en cama y enfermo.
—¿Podemos poner esta conversación en pausa hasta que tengas unos
catorce años?
Justice rueda sus ojos. — Dices que te gusta que soy un niño curioso,
pero nunca quieres alimentar mi curiosidad.
—Me gusta que seas curioso, me gusta alimentar tu curiosidad, pero a
veces tienes demasiada hambre —Abro el refrigerador y agarro un agua
para él—. Bebe esto. No has tenido suficiente líquido hoy.
Justice me quita el agua. —Bien. Pero en mi decimocuarto cumpleaños,
prepárate para volver a esta conversación.
último que querrá hacer es ver películas con su papá. Como padre,
aprendí a tomar lo que puedo mientras puedo conseguirlo, porque
ninguna de las fases que atraviesa un niño dura para siempre.
Eventualmente, las cosas que una vez encontraste repetitivas e irritantes
se convierten en las cosas por la que darías cualquier cosa para volver a
repetir.
—Sí, podemos ver Señales. Ponla mientras te preparo las tostadas.
Capítulo 27
Me río. Dios, amo a este niño. Pero a este ritmo, no estoy seguro de
llegar hasta que tenga catorce años. Su curiosidad va a matar al gato. Yo
Sydney
soy el gato.
—¿Quieres que te haga algo más para comer?
Justice asiente y cierra el jamón. —Pan francés. ¿Podemos mirar
Escaneo las estaciones de radio en busca de una canción con la que
Quiero decirle que no porque la idea de ver una de sus películas
pueda cantar. Estoy de humor para cantar. Mis ventanas están abajo, el
favoritas 3
309
clima es hermoso, y se me ocurrió en mi camino a casa desde el trabajo
que no había estado con humor para cantar a todo pulmón desde hace
tiempo. No sé si es por la trayectoria que tomó mi vida el año pasado,
por la universidad o una combinación de ambos. Pero algo cambió la
semana pasada. Es como si mi vida fuera una montaña rusa, avanzando a
gran velocidad a través de túneles oscuros y girando a través de espirales
con todo mi cuerpo sacudido de izquierda a derecha y de adelante hacia
atrás y luego... zas. La montaña rusa emocional llega a una parte suave,
lenta y reconfortante del camino donde puedo soltar un suspiro y saber
que estoy a salvo y todo lo que hay dentro de mí está empezando a
asentarse.
Así es como se siente esto. Mi vida finalmente está comenzando a
sentirse estable.
Después de ayudar a Maggie a mudarse el domingo, todos estábamos
exhaustos. Nos desplomamos en los muebles de su sala, Ridge y yo en
un sofá, Maggie y Bridgette en el otro y Warren en el suelo. Todos
vimos el final de temporada de The Bachelor, un programa del cual
ninguno de nosotros había visto un solo episodio de toda la temporada,
pero no pudimos encontrar el control remoto y nadie tuvo ganas de
cambiar de canal. Warren realmente se metió en eso y comenzó a
discutir con la televisión cuando sintió que el chico escogió a la chica
contra la que él habría apostado si tuviera dinero.
Cuando todo terminó, Ridge y yo volvimos a su departamento y nos
fuimos a dormir. Estaba demasiado cansada para conducir a casa y los
realmente no necesita mucho si está rodeada de las personas adecuadas.
Amada por las personas adecuadas.
Si pudiera embotellar el amor que tengo hoy mi vida, lo haría. Es un
amor que vale la pena salvar.
Me acerco a mi complejo y tomo mi teléfono para revisarlo mientras
salgo de mi automóvil. Todavía no hay ningún texto de Ridge. Me dijo
que enviaría un mensaje de texto cuando terminara de trabajar hoy, pero
son más de las siete y no he tenido noticias suyas.
Yo: ¿Vendrás esta noche?
Ridge: ¿Quieres que lo haga?
Yo: Siempre quiero que lo hagas.
Inserto mi llave en la cerradura y abro la puerta de mi apartamento.
Estoy mirando mi teléfono, esperando que Ridge me envíe un mensaje
de texto, cuando alguien me agarra por la espalda. Grito, pero me doy
cuenta casi de inmediato que es Ridge, solo por la sensación de sus
brazos envueltos alrededor de mí. Giro en sus brazos y él me sonríe.
—Me alegro de que no hayas dicho que no porque ya estoy aquí.
Me río. Mi latido es errático. No esperaba que hubiera nadie aquí,
pero no podría estar más feliz de verlo ahora mismo. Él me besa y de
alguna manera hace que este día sea aún mejor.
Ni
dossiquiera puedo
estábamos soportarme
demasiado ahora mismo.
cansados No recuerdo
para incluso haber estado
ducharnos.
Caminamos
tan enamorada de mi vida antes de hoy y no sé cómo acostumbrarme a
directamente
esta haciade
nueva versión la mí
cama y caímos
misma. sobre
Estuve tan ella. Debimos habernos
acostumbrada a estar tan
quedado
triste dormidos
por tanto sin es
tiempo, quitarnos
como silaestuviera
ropa, porque me desperté
descubriendo una en medio
parte de
de que
mí la noche con élantes
no existía quitándome los zapatos y tapándome con las
de este mes.
sábanas.
O tal vez siempre existió... solo que nunca tuve a nadie que pudiera
sacar lo mejor de
la universidad quemívive
comode lo hace aRidge.
sueldo sueldo. Pero siento que sería feliz 311
3
conpongo de puntillas y lo beso. Sus manos acunan mis mejillas y él
Me
me devuelve el beso, caminando hacia mí hasta que mi espalda se
encuentra con el mostrador. Nos besamos por un buen minuto antes de
reconocer que todo mi apartamento huele a restaurante. Me alejo de él
y me doy vuelta para encontrar la cena preparada en la estufa. Cuando
miro hacia atrás a Ridge, él me sonríe. —Sorpresa. Cociné.
—¿Cuál es la ocasión especial?
—No es necesario que sea una ocasión especial para que yo quiera
hacerte feliz. Te trataré así por el resto de tu vida.
Me gusta como suena eso.
Ridge se inclina y planta besos rápidos por mi cuello antes de alejarse y
caminar hacia la estufa. —Estará listo en cinco minutos si te quieres
cambiar.
Sonrío de camino a mi habitación. Él me conoce demasiado bien. Sabe
que no importa qué hora del día sea, tan pronto como entro en la puerta
me gusta estar cómoda. Eso significa deshacerme de mi sostén en el
momento en que llego a casa. Significa quitarme los pantalones
vaqueros y ponerme un par de pantalones de pijama y una de sus
camisetas.
Significa recogerme el pelo en un nudo y que no me importe
absolutamente nada excepto estar lo más cómoda posible.
Me encanta que él ame eso de mí.
Cuando regreso a la cocina, él está preparando la mesa. Hizo pollo al
horno y verduras con risotto al lado. Honestamente, no sé si mi cocina
alguna vez ha experimentado este tipo de comida. Raramente cocino
comidas completas porque soy solo yo. A veces Ridge y yo, pero es raro
que nos volvamos locos y hagamos algo tan drástico como usar el
horno. Microondas, seguro. Estufa, tal vez; pero el horno significa una
comida seria y simplemente no hemos tenido mucho tiempo para eso.
Signo y le digo que se ve delicioso y luego procedo a comer la mitad sin 312
parar. Sabe incluso mejor de lo que parece.
—En serio, Ridge. Está delicioso.
—Gracias.
—No puedo cocinar así.
—Sí, puedes. Te sabe mejor porque no lo hiciste tú. Así es como
funciona la cocina.
Me río. Espero que sea cierto. —¿Cómo estuvo el trabajo hoy?
Él se encoge de hombros. —Jugué a ponerme al día. Pero Brennan
envió un mensaje de texto y me dijo que necesitaba que yo tocara en un
espectáculo con él porque les falta un guitarrista para el próximo fin de
semana.
—¿Dónde?
—Dallas. ¿Quieres venir? ¿Pasar un fin de semana?
Asiento con la cabeza. Por supuesto que quiero ir. Ver a Ridge en el
escenario es mi cosa favorita. —Absolutamente. ¿Sadie estará allí?
Ridge me da un vistazo para decirme que no sabe de quién estoy
hablando.
—Sadie la cantante —aclaro—. La chica que abre los conciertos de
Brennan. Creo que a él le gusta.
Ridge responde de inmediato. —Me encantaría conocer a tus padres,
Sydney.
No sé por qué, pero esa oración acaba de hacer que mi corazón se derrita
un poco. Sonrío y tomo un trago.
—¿Le has contado a tus padres sobre mí? —pregunta.
—Le dije a mi madre que tenía novio. Ella me hizo veinte preguntas.
Él sonríe. —¿Solo veinte?
—Tal vez veinticinco.
—¿Qué dijiste? ¿Cómo me describiste?
—Dije que eres muy talentoso. Y muy lindo. Y bueno con las bromas. Y
bueno en la cama.
Ridge se ríe. —Estoy seguro de que lo hiciste —Él se reclina en su silla,
casualmente golpeando mi rodilla con la suya. Está mirando su
plato, moviendo el resto de su risotto—. ¿Les dijiste que soy sordo?
No se los dije, pero no por otra razón que simplemente no surgió y
honestamente no pensé en ello. —¿Debería haberlo hecho?
Ridge se encoge de hombros. —Podría valer la pena mencionarlo. No
me gusta atrapar a la gente con la guardia baja si puedo evitarlo. Me
gustaría que estén advertidos.
—A misí.noEstoy
—Oh, me diste unadeadvertencia.
seguro que estará —Él sonríe—. Eso será interesante.
Por lodiferente
—Fue contigo. sobre Brennan, él no se entusiasma con las
que he aprendido
chicas muy a menudo, lo que me hace querer invertir en ver cómo
—¿Cómo?
resulta esto. Espero conocerla.
Él inclina la cabeza y contempla su respuesta. Luego levanta su
Ese pensamiento
teléfono, me llevaque
lo que significa a mi siguiente
quiere pensamiento.
explicar No puedo
algo que siente que puede
visitar Dallas
transmitir mejor sinendetenerme
texto que averbalizado.
visitar a mis padres. —Ya que estaremos
en Dallas... ¿quieres cenar con mis padres? 3
314
Ridge: En la mayoría de los casos, me gusta advertir a las personas antes de
encontrarnos, hace el momento menos incómodo cuando lo descubren. No te advertí
porque se sentía como... No sé. Fue diferente contigo.
Yo: ¿Una buena diferencia?
Ridge: La mejor clase de diferencia que posiblemente pueda existir. Toda mi vida he
sido el tipo sordo. Viene primero con cada persona que conozco. Ser sordo y cómo
reaccionará una persona ante eso es mi primer pensamiento en cada nueva conversación
que tengo. Es muy probable que sea el primer pensamiento de la persona con quien estoy
hablando. Define cómo me tratan, cómo reaccionan ante mí y cómo reacciono ante ellos.
Pero contigo, a veces me olvido de esa parte de mí mismo. Contigo, olvido la única cosa
que me define con todos los demás. Contigo... solo soy yo.
Me alegro que escribiera todo eso en un mensaje de texto, porque es
una de las cosas que me ha dicho que quiero mantener y recordar para
siempre.
—Mis padres te amarán tanto como yo.
Ridge sonríe por un momento, pero la sonrisa es fugaz. Él trata de
esconderlo mientras alcanza su bebida, pero vi el conflicto de una
fracción de segundo en sus ojos. Me hace preguntarme si solo está
accediendo a conocerlos para apaciguarme. ¿Qué pasa si él no está listo
para dar ese paso? No es que hayamos estado saliendo mucho tiempo.
“¿Estás bien?” —signo.
automóvil, manejando a casa desde el club y él encendió la radio de
su
auto por mí.
Son las pequeñas cosas que las personas hacen por otros que definen
la mayor parte de ellas.
Ridge dobla sus brazos sobre la barra y se inclina hacia adelante,
sonriéndome. —Te tengo un regalo. 3
—Y Bridgette.
Ridge hace una cara. —Curioso.
—¿Verdad? Realmente me agrada —digo con una sonrisa—. Si alguien me
hubiera dicho hace seis meses que Bridgette y yo eventualmente
seríamos buenas amigas, habría apostado los ahorros de mi vida contra
eso. Son solo $500 dólares, pero aún así.
Ridge se ríe. —Si me hubieras dicho hace seis meses que tú y yo
estaríamos saliendo y pasando todo un día ayudando a Maggie a
mudarse a mi complejo, también habría apostado los ahorros de tu vida
en contra de eso.
—La vida es extraña, ¿no?
Ridge asiente. —Maravillosamente extraña.
Le sonrío y terminamos de comer en un silencio cómodo. Limpio la
mesa y cargo los platos en el lavavajillas. Ridge engancha su teléfono al
bluetooth en mi estéreo y enciende una de mis listas de reproducción de
Spotify.
Así es como sé que él realmente me ama. Él hace cosas que no le afectan
para nada, como asegurarse de que siempre haya música, aunque él no
pueda escucharla, él sabe que me gusta, así que lo hace para hacerme
feliz. Me recuerda la primera vez que hizo esto. Estábamos en su
Él asiente, buscando mi mano. Apoya la suya sobre la mesa y pasa el
dedo pulgar sobre ella. —Estoy bien —dice—. Es solo que a veces me
haces desear tener mejores padres. Padres que pudieran conocerte y
saber que eres perfecta para mí. Padres que pudieran amarte.
Sus palabras hacen que mi corazón duela por él. —Tienes a Brennan.
Él ama que seas feliz.
—Sí —dice, sonriendo—. Y a 3
Golpeo la página mientras muevo los dedos sobre la letra para darle a
Ridge una idea del ritmo de la canción. Él palmea su mano sobre su
rodilla a tiempo con la mía y luego toma la pluma y escribe, "Coro", y
luego sigue con algunas líneas propias.
Even if our clothes are fading
Incluso si nuestras prendas se están desvaneciendo
They'll always look new on you
Siempre se verán nuevas en ti
Even when the times are changing
Incluso cuando los tiempos
cambien
Nothing's gonna change my view on you
Nada va a cambiar como te veo
You know we got a love worth saving
Sabes que tenemos un amor que vale la pena salvar
Tan pronto como veo las Ourlíneas,
house"Incluso si nuestra
ain't pretty honey ropa se está
desvaneciendo, siempre se verán nuevas en ti", sonrío. La semana
Nuestra casa no es bonita,
pasada estábamos teniendo una conversación sobre mis posibles
cariño But
cambios de carrera. Todavía baby
no sé it keeps
lo que us hacer,
quiero dry pero él apoya lo
que sea que decida, incluso
Perosi bebé,
eso significa que tendremos dificultades
nos mantiene
financieras por más tiempo. Me dijo esas palabras, que la ropa luciría
nueva en mí, incluso sisecos
estánOur friends ain'ty rich
descoloridas, or que sería mejor que
le dije
las pusiera en una canción. Es casi como si hubiera estado esperando
famous 319
3
este momento y ya tenía preparadas las letras. Es increíble cuán
perfectamente trabajamos juntos. Escribir música es algo tan solitario,
muy parecido a como supongo que sería escribir un libro; pero cuando
estamos juntos, simplemente funciona. Es como si estuviéramos mejor
juntos de lo que estamos solos.
Él está tocando el ritmo del coro, pero todavía estoy atrapada en las
letras que escribió. Dibujo un corazón al lado de ellas para hacerle saber
que las amo, luego me detengo un momento hasta que puedo llegar a las
siguientes líneas de letras.
Don't need no gold or diamonds
No necesito oro ni diamantes.
Got the glow right in your eyes
Tienes el brillo justo en tus
ojos.
If it's your love you're selling
Si es tu amor, el que estás
vendiendo.
You know I'm gon' keep on buyin'
Sabes que voy a seguir comprando
We can make something outta
nothing Podemos hacer algo de la
nada
Mi pecho se tensa con sus palabras. Me acerco a él y le extiendo la
mano,
tirando de él hacia arriba. —Ridge Lawson, tú puedes hacer lo que
quieras.
Envuelvo una mano en su cuello y él pone sus manos en mi cintura.
Empiezo a golpear contra su pecho junto con el ritmo de la canción.
Canto las letras para que pueda mirar mi boca y saber dónde estamos 3
en
coincida con el piano.
Él agrega algunas letras más y otro estribillo y en una hora, la canción está
en su mayoría resuelta. Solo tenemos que dársela a Brennan para una
grabación aproximada esta semana para ver cómo suena. Esta fue una de
las más fáciles que hemos escrito juntos. Grabo mientras tocamos de
nuevo y luego presionamos reproducir en el teclado para poder
escucharla; es más optimista que la mayoría de las canciones que
escribimos juntos.
Me encanta escribir con dos instrumentos. Las opciones para agregar
más variaciones usando el teclado hacen que la canción suene más
pulida que las que le enviamos a Brennan en el pasado simplemente
usando la guitarra de Ridge. Estoy tan entusiasmada con la canción y el
regalo que me dio Ridge que me dan ganas de bailar mientras se está
reproduciendo.
Ridge deja a un lado su guitarra y me mira bailar alrededor de la sala
mientras suena la canción. Me río cada vez que nos miramos porque
estoy de muy buen humor. En un punto cuando vuelvo a mirarlo, él no
está sonriendo. Me detengo, preguntándome qué cambió en él.
Él signa: —“Desearía poder bailar contigo.”
—Tú puedes. Tienes que.
Él sacude la cabeza. —No una canción lenta en la que simplemente me
paro allí. Me refiero a algo así ——Ondea su mano hacía mi—, a un ritmo
real.
Just keep that feel good coming
Y solo mantener la sensación de
3
Mi antigua casera me escribió esta mañana para decirme que tenía algo
Ella tomará prestados unos calcetines.
¡¡Mierda!!! ¡¡El anillo!!!
Abro de golpe la puerta del baño, pero es demasiado tarde. El cajón de
calcetines está abierto y la caja está en su mano. La caja está abierta y ella
está mirando el anillo de compromiso con una mano cubriendo su boca.
—Voy a tomar prestado el protector solar.
Estoy en el baño con la puerta cerrada antes de darme de cuenta de
que lo que ella acaba de decir no tiene ningún sentido. O no leí sus
labios correctamente. ¿Bloqueador solar? Es de noche. Ella no
necesita bloqueador solar. ¿Si no dijo bloqueador solar entonces qué
fue lo que dijo?
¿Unos calcetines?. 3
mi correo, así que decidí manejar a San Antonio para reunirme con Jake
en lugar de hacerlo manejar hasta Austin. Le envié un texto después de
recoger mi correo para hacerle saber que no era necesario que viniera
por mí para ir a cenar; él me respondió casi inmediatamente con su
dirección. Ese mensaje fue seguido de otro que ponía: La llave está
debajo de la roca junto al asador en el patio trasero. Estaré ahí en un par
de horas.
Eso hace hace siete horas.
Me ha enviado varios mensajes desde entonces, disculpándose
profusamente. Lo llamaron para una cirugía de emergencia. Sigo
asegurándole que está bien, incluso me ofrecí a volver otro día pero él
me hizo jurar que no me iría antes de que llegara a casa.
Así que... en un intento de hacer las siete horas que tengo que pasar en la
casa del chico con el que no estoy saliendo oficialmente menos extrañas,
me he mantenido ocupada. Creo que he subestimé la honestidad de Jake
cuando dijo que era una persona desordenada, porque... incluso después
de un viaje a la tienda por artículos de limpieza y cinco horas de trabajo
sin parar... este lugar sigue sin estar impecable. He puesto cuatro cargas
de ropa en la lavadora, dos de platos sucios en el lavavajillas, tendí su
cama por, estoy segura, la primera vez en la vida; lavé ambos baños y
ahora estoy preparando la cena.
Llegué a su casa preparada para quedarme a pasar la noche. No estoy
segura de que él me pida que me quede, pero solo por si acaso he traído
mis medicinas, un cambio extra de ropa y mi chaleco respiratorio. La
idea
Capítulo
29
3
Mi antigua casera me escribió esta mañana para decirme que tenía algo
Me encuentro acomodando el queso sobre la pizza cuando escucho sus
llaves en la puerta. Cuando la abre, siento ese pequeño temblor en mi
estómago. Es tan tonto, pero me gusta mucho. Ayuda que sea divertido
verlo. Lleva un par de pantalones de mezclilla desgastados, una camisa
azul claro, una corbata negra y una sonrisa. Trata de procesar como
luce su cocina mientras se acerca a mi, pero sus ojos siguen regresando
a los míos. Puedo decir, por la forma en que me mira, que ha estado
esperando todo el día por este momento.
—¿No llevas bata al trabajo? —Le pregunto.
Tira sus llaves sobre el mostrador. —Sí, casi todos los días, pero las dejo
en el trabajo. Fines de esterilización. —Comienza a desatar su corbata
mientras mantiene su mirada en mí—. Deberías mudarte conmigo.
Me río de su humor inexpresivo y sonríe. —No gracias. No tengo en mis
planes ser tu sirvienta. —Me giro hacia el mostrador otra vez y termino de
colocar las coberturas en la pizza.
Jake se acerca desde atrás y envuelve sus brazos alrededor de mí. Me
inclino hacia él, extrañando su olor y cómo se siente. Él baja su boca a la
altura de mi oído. —Si fueras mi sirvienta, podría pagarte con orgasmos.7
—Después de hoy creo que ya me he ganado uno o dos.
Se ríe contra mi cuello. —Considerando la condición prístina de mi
cocina, creo que te debo unos cuantos.
Dejo caer la
de usarlo cebolla
frente a élpicada sobre la pizza
es vergonzosa, y me
pero la idealavo las manos.
de evitar mis Él sigue
detrás de mí, sus brazos
responsabilidades rodeándome.
y terminar —¿Vas otra
enfermándome a quedarte?
vez sería—Suena
aún más
esperanzado.
vergonzoso.
No quierotengo
Aunque vermeel desesperada,
presentimientoasíde
que
quenome
admito
pediráque ya tengo
pasar un
la noche.
cambio
Nuestrosdemensajes
ropa dentro de mi mochila
empezaron en su
a ponerse habitación.
coquetos hace—Veremos
un par de qué
pasa —El
horas. bromeo.
último mensaje que le envié fue una foto de mi mano
reluciente
Lo y limpio
siento negar con lavabo de ysuluego
la cabeza cocina,
meahace
lo que él respondió
girar para quedarcon:
de Esa 327
3
es a él.
frente
—No, yo digo que nos adelantemos y decidamos ahora. Quédate.
—De acuerdo. —Soy demasiado fácil. Lo rodeo y deslizo la pizza en la
rejilla dentro del horno.
—¿Cuánto tardará en estar lista?
Cierro la puerta del horno y doy media vuelta —Tardará lo que te lleve
pagarme uno de los orgasmos que me debes.
Finalmente, me besa. Después, me levanta y me carga a su habitación,
colocándome en su cama perfectamente tendida. Mira alrededor por un
momento antes de darse cuenta de que también limpié su cuarto,
entonces me deja tendida en su cama mientras camina a su baño.
Después de ver su impecable baño va a su cuarto de lavado.
Eventualmente regresa a la cama y se arrastra sobre mi. —Maggie Carson.
Es todo lo que dice; solamente mi nombre, con una sonrisa. Y luego
desaparece de mi campo de visión y hace su camino hacia abajo en mi
cuerpo, hacia el botón de mis pantalones de mezclilla.
Me agradece, y cuando termina seguimos teniendo cinco minutos de
sobra antes de que la pizza esté lista.
—No es lo que piensas —dice Ridge.
Levanto la mirada y alejo mi mano de mi boca. Miro de nuevo el anillo
y me siento fatal por simplemente agarrarlo y abrir la caja. No sé por qué
lo hice; creo que solo estaba... ¿en shock?Y creo que se equivoca porque
esto se ve exactamente como lo que creo que es. —Pienso que es un
anillo de compromiso, ¿no es así?
Ridge sacude la cabeza mientras camina hacia mí. —No. Sí. Quiero decir,
lo es, pero no lo es. Es un anillo de compromiso... pero... no es tuyo.
Él está pisando con mucho cuidado, así que me toma un momento
darme cuenta del porqué no hay nada más que una mirada cautelosa y
arrepentida en sus ojos. Miro de nuevo el anillo que no es para mí. —
Oh
—digo—. No sabía que alguna vez le propusiste.
Sacude la cabeza, casi con firmeza. —No lo hice.
El pobre hombre parece aterrorizado de mi reacción potencial. Lo que
no puede ver es lo jodidamente aliviada que estoy. Ni siquiera hemos
estado saliendo oficialmente por un mes entero todavía. Si ya me
hubiera comprado un anillo con la intención de proponérmelo,
probablemente habría llorado, pero no lágrimas de alegría.
Estoy bastante segura, basado en cómo me siento en este momento, de
que me habría asustado. Lo que es raro. Amo a Ridge más de lo que
podría amar a cualquiera y me encantaría ser su esposa. Me encantaría
estar casada con él. Pero quiero disfrutar de cada etapa de nuestra
relación mientras podamos. Capítulo
3
Cuando me desperté esta mañana, le preparé el desayuno.
—No lo sé. Intentaré deshacerme de algunas citas que tengo en la tarde.
—Está bien. Pero voy a seguir tu consejo y no voy a limpiar. —Me dió un
beso en los labios y luego se dejó caer en el sofá—. Me quedo aquí
mismo. Todo el día.
—Está bien. —Me incliné sobre ella y le di un beso. Un buen beso. No,
un beso grandioso. Uno que se quedó conmigo por el resto del día. Uno
que no puedo esperar repetir al volver a casa.
Hoy pude mover mis últimas tres citas. Es la segunda vez en dos
semanas que hago esto. Viniendo de mí no es normal, por lo que mi
enfermera, Vicky, sabe que algo está pasando. Cuando salgo por la
puerta, ella dice:
—Diviértete en tu cita.
Hago una pausa y me doy la vuelta para mirarla. Ella me lanza una
mirada de complicidad y camina de regreso por el pasillo.
No pensé que estaba siendo tan obvio, pero es difícil ocultar este tipo de
euforia. No estoy seguro de haber conocido este lado de una relación.
Con Cassie, nos convertimos en padres desde muy temprano en nuestra
relación. Antes de eso, solo éramos niños. Entre la escuela de medicina y
criar a Justice, nunca nos tomamos el tiempo para disfrutar el uno del
otro.
Me gusta.
Ella sonrió. —¿Qué tipo de chocolate?
—Reeses. Tal vez algunos Twix.
Arrugó su nariz. —Suena tentador, pero necesito cuidar mi azúcar.
—También hay chocolate sin azúcar.
—Ugh —dije, dejando caer su cabeza en derrota—. No puedo decir no
a eso. O a ti. ¿A qué hora regresarás? 3
—Nunca la he visto.
Maggie se mudó a su complejo de apartamentos hace unos meses. Pero
viendo cómo están las cosas, Bridgette sigue siendo bastante fría.
Ella estásentada en la cama de Maggie mientras yo ayudo a Maggie a
elegir un atuendo para esta noche, así que estamos progresando. Ella no
ha estado aquí desde que Maggie se mudó, excepto en una ocasión en la
que Maggie tuvo que pasar algunas noches en el hospital porque se
enfermó. Bridgette vino a buscar algo de ropa para ella, pero solo porque
Warren se lo pidió.
—Creo que la blusa negra se vería mejor con esto —dice Maggie—. Voy a
probármelo —Agarra la blusa que traje y la lleva al baño, cerrando la
puerta detrás de sí. Miro a Bridgette. Ella está sobre su espalda,
mirando al techo, bostezando. Saco mi teléfono y le escribo un mensaje
de texto porque no quiero que Maggie escuche nuestra conversación.
Yo: Estás haciendo esto incómodo.
Bridgette lee el texto y luego me mira, levantando una frustrada mano.
Bridgette: ¿Qué? Solo estoy siendo yo.
Yo: Sí, no te ofendas, pero ese es el problema. A veces las personas tienen que hacer un
esfuerzo para NO ser ellas mismas a fin de que las situaciones a su alrededor sean un poco
más tolerables. No le has dicho una palabra. Haz un esfuerzo. Hazle preguntas.
Bridgette: ESTOY haciendo un esfuerzo. Estoy aquí. Además, no tengo nada que
preguntarle. ¿Qué debería decirle? No sé como fingir.
Sydney: Pregúntale sobre su graduación. Pregúntale sobre cuando fuimos a hacer
Capítulo
puenting. Pregúntale cómo están ella y Jake. Hay un montón de posibles conversaciones si
lo intentas.
32
Maggie sale del baño justo cuando Bridgette deja caer su teléfono sobre
la cama y pone los ojos en blanco.
—Me gusta como se te ve esa blusa —le digo a Maggie. Ella se da vuelta
hacia adelante y hacia atrás en el espejo. 341
3
He estado tratando de que Bridgette se contente con Maggie desde
Miro a Bridgette y hago una mueca. Bridgette se sienta dramáticamente,
golpeando las palmas contra la cama y se aclara la garganta.
—Entonces...Maggie. ¿Cómo están...Jake y tú? ¿Bien? ¿Espero? —Ella
fuerza una sonrisa, pero suena como un robot rígido.
Tal vez esto fue una mala idea. Miro a Maggie y ella está parada allí,
mirando a Bridgette con la cabeza inclinada. Luce realmente confundida.
Miro hacia Bridgette y sacudo la cabeza. —Wow. Realmente no sabes
cómo hablar con la gente.
Bridgette levanta sus manos. —¡Te lo dije!
Maggie me mira. —¿Tú le hiciste preguntarme eso?
—Solo estoy tratando de enseñarle cómo interactuar con los humanos de
forma normal.
Mirando hacía Bridgette, Maggie dice: —No te queda.
—¿Ves? —Bridgette se deja caer de nuevo en la cama—. Debería solo ser
yo. Soy buena siendo yo.
—Bien. Lo siento por intentarlo —Le devuelvo mi atención a Maggie—.
Pero, ¿Cómo están tú y Jake?
Bridgette lanza una mano hacía mí. —¿Por qué suena tan normal cuando
tú lo dices?
—¿Qué estás haciendo? —le pregunto, justo cuando Maggie sale con la
blusa púrpura. Le doy un pulgar hacia arriba. El morado es
definitivamente el indicado.
—Maggie —dice Bridgette, todavía mirándose en el espejo—. Cuando
dijiste que mi trasero se veía como dos Pringles abrazados, ¿fue un
cumplido?
Maggie se ríe. —Por supuesto que lo fue. 3
de Bridgette siempre tienen que ver con el sexo. ¿Ridge gime durante el
sexo? ¿Jake es bueno en la cama?
—Es muybueno —dice Maggie sin dudarlo.
—¿Quién es mejor? —Bridgette pregunta, sentándose—. ¿Ridge o Jake?
¿O Warren? Wow, te has acostado con nuestros tres novios.
Me golpeo la frente con una mano. Ella es una causa perdida.
Por suerte, Maggie simplemente se ríe. —Sí, Bridgette. Solo no tengamos
esta conversación, ¿de acuerdo?
Bridgette hace pucheros. —Pero de verdad quiero saber la respuesta a esta
pregunta. Apuesto a que fue Warren.
Maggie me mira y arruga la nariz mientras sacude la cabeza. —No lo fue —
articula.
Bridgette murmura algo acerca de querer un bocadillo, por lo que dirige
a la cocina. Le doy a Maggie una blusa morada con botones. —Pruébate
esta. Creo que te gustará más que la negro.
—¿Por qué siquiera importa? Jake está de guardia todo el fin de semana,
así que ni siquiera estará allí. —Maggie regresa al baño justo cuando
Bridgette entra de nuevo al dormitorio, haciendo crujir sus papas. Se
mira en el espejo, girándose para poder mirar su trasero. Sostiene un
Pringle y lo coloca de manera que cubre su trasero en el espejo.
Maggie y yo nos reímos. Ella se mira en el espejo y se pasa los dedos
por
el pelo.
—Estamos bien —dice ella, sonriendo en el espejo—, Todo ha sido tan
fácil con él. Él es... tan simple. Quiere divertirse y no se toma nada en
serio hasta que es necesario.
—¿Pero es bueno en la cama? —pregunta Bridgette. 3
***
Ridge y Warren han estado en el lugar ayudando a la banda a prepararse
para el show, así que Maggie y yo llegamos con Bridgette. Ridge no está
tocando esta noche; dijo que a veces simplemente le gusta ser
espectador.
Maggie tiene una sonrisa en su rostro cuando salimos del auto, pero
puedo decir que está tensa. Ella se detiene mientras mira hacia el
edificio.
—Ojalá Jake hubiera podido llegar —dice en voz baja.
Agarro su mano. —Puede venir al siguiente. Solo intenta divertirte.
Estoy ansiosa por entrar, así que la arrastro detrás de mi y le escribo un
mensaje a Ridge para avisarle que estamos en la puerta de atrás. Un
momento después, la puerta se abre y Ridge sale seguido por Warren.
Me siento mal porque Ridge me está dando un abrazo y Warren le está
dando un abrazo a Bridgette y Maggie está parada ahí, incómoda y
sola.
La habitación está llena cuando salimos. Afortunadamente uno de los
miembros del grupo nos guardó un área en la parte delantera.
Beneficios de escribir música para la banda.
Jake y Maggie están de pie junto a nosotros. Él está de pie detrás de la
ella con sus brazos envueltos a su alrededor. Cuando Brennan y la
banda suben al escenario, Maggie se separa de él y comienza a aplaudir
No tengo ida de cuánto tiempo ha pasado desde que los ha visto 3
cantar,
ninguna otra cosa, su rostro se ilumina y corre. Salta sobre él y se
envuelve a su alrededor como un mono araña, con los pies pegados a su
espalda y las muñecas agarradas detrás de su cuello. Él la sostiene con
poco esfuerzo y me da un poco de envidia que no pueda saltar sobre
Ridge de esa manera. Quiero decir, supongo que podría; pero no soy tan
pequeña como Maggie. Necesitaríamos planearlo. Necesitaríamos un
testigo. Y un colchón para cuando nos caigamos.6
Están tan enamorados. Es tan adorable.
Ridge se inclina hacia mi oído y dice: —Te ves hermosa.
Su comentario le consigue un beso. Somos tan
adorables.
Warren abre la puerta trasera y la sostiene para todos mientras nos
arrastramos al interior. Siento que mi teléfono vibra, así que miro a
Ridge y él me indica que acaba de enviarme un mensaje de texto.
Ridge: Le di el anillo a Jake.
Yo: ¿Lo hiciste? ¿Le asustó? ¿O parecía estar agradecido?
Ridge: Me lo agradeció cinco veces y siguió mirándolo durante el viaje. Dudo que espere
mucho.
Eso me hace sonreír. Sé que el matrimonio no estaba en la lista de
Maggie, pero creo que está en un momento de su vida en que quiere
agregar más cosas a la lista. Y Jake no se irá a ninguna parte. Lo sé solo
por la forma en que se miran el uno al otro.
Aunque no durará mucho.
Justo cuando la puerta se cierra de golpe, se abre desde dentro y
Jake sale.
Ha sido un infierno ocultárselo, pero él realmente quería sorprenderla.
Pudo cambiar su turno de guardia los fines de semana, pero no quería
que ella supiera. Planea quedarse con ella hasta el lunes por la
mañana. 3
Wherever we go
A donde sea que vayamos
Well what if all we saw
Bueno, qué si todo lo que vimos
Was the rain dancing off the roof as it
falls Fue la lluvia bailando en el techo al
caer Swaying in the leaves at the top of
the tree
Balanceándose en las hojas en lo alto del
ábrol Water washing sand right from our
feet Agua lavando la arena de nuestros
pies
Well what if all we knew
Qué si todo lo que
sabíamos
Was right from wrong with no point of view
Fue de bien a mal sin ningún punto de
vista The day can go off the tracks up in
the air El día se puede salir de su rumbo en
el aire
The world can try to make it all disappear
El mundo puede intentar hacerlo desaparecer
But let me tell you something that I happen to
know
Pero dejáme decirte algo que sucede que
sé 3
It's gonna
Porque tenemos todo,feel like
todo lothis
quewherever we justo aquí
necesitamos
Wherever we go
A donde sea que vayamos
You know we'll be here for a while
Sabes que estaremos aquí por un
tiempo I think we better do it with a
little style
Creo que es mejor que lo hagamos con un poco de
estilo So we make the most of every day like it's faded
And we don't
care
Y no nos
importa
No, we don't
away
Así que aprovechamos al máximo cada día como si se
desvaneciera
We'll be
alright
Estaremos
bien 3
***
Ni siquiera estoy seguro de qué otras canciones se tocaron después de
eso; no podía concentrarme en otra cosa que no fuera Sydney. Después
del show, todos se reunieron con la banda en el backstage para
averiguar a dónde íbamos a cenar. Mientras conversaban, Sydney y yo
nos
quedamos en el pasillo y nos enredamos. Ahora estamos cenando y
es
una tortura mantener mis manos lejos de ella.
Brennan y los muchachos necesitaban irse, así que somos yo y
Syd, Maggie y Jake, y Warren y Bridgette. No estoy seguro de
por qué conseguimos una mesa grupal porque ninguna de las
Bueno... no lo hacíamos.Pero ahora Warren ha puesto su atención 3
en
—Acláranos algo—dice, refiriéndose a él y Bridgette.
—¿Qué pasó? —responde Sydney.
—La canción que reescribiste, de alguna manera sonó como si fuera un
indicio de que quieres casarte.
Sydney se ríe y luego me mira nerviosa. Ella mira a Warren y sacude la
cabeza. —Hablamos sobre cómo no estábamos listos hace unos meses.
Y cuando estaba reescribiendo la canción, me di cuenta de que tal vez
ya lo estoy. Quiero decir... —Ella me mira de nuevo— ¿Lo tomaste de
esa manera? No estaba diciendo que esperaba una propuesta. Sólo
quise decir que cuando estés listo... estoy lista.
Oh, estoy listo. Pero no le digo eso. Ella merece una propuesta más
pensada.
—Espera —dice Warren antes de que pueda responder—. Baja
la velocidad. Bridgette y yo hemos estado juntos por más
tiempo. Deberíamos casarnos primero.
—No —dice Bridgette—. Creo que Jake y Maggie deberían casarse primero.
Ella tiene menos tiempo que el resto de nosotros.
Espero estar malinterpretando los labios de Bridgette, pero acaba de
hacer que Sydney escupiera su bebida, así que supongo que entendí bien
lo que dijo. Bridgette tiene suerte de que Maggie se esté riendo en este
momento, en lugar de estrangularla.
—¿Qué? —Bridgette dice inocentemente—. Es verdad —Mira a Maggie
—. No estoy tratando de ser mala. Pero en serio, debes tratar de hacer
todo lo que puedas lo más rápido que puedas. Tiene sentido. Agrega el
matrimonio a tu lista de deseos y termina con esto.
Las mejillas de Maggie son un tono más oscuro que antes de que toda la 357
atención estuviera en ella. A Bridgette no parece importarle que la esté
avergonzando. O tal vez simplemente no se da cuenta.
—No nos vamos a casar —dice Maggie—. Solo nos conocemos desde hace
unos meses. Hablando estadísticamente, cuanto menos tiempo salgas
con alguien antes de casarte, mayores serán tus posibilidades de que
termine en divorcio.
Warren se inclina hacia delante pensativamente, con un dedo en su
menton. Siempre me pone nervioso cuando trata de impartir sabiduría a
otras personas.
—Tal vez sea así —dice—, ¿pero no valdría la pena arriesgarse a agregar un
matrimonio a tu lista de deseos? Tú y Jake pueden solo salir como ahora
para siempre y nunca sabrás el cómo es casarte. O puedes arriesgarte y
posiblemente experimentar el matrimonio yel divorcio antes de morir.
Jake levanta una ceja y mira a Maggie. —Suena como ganar/ganar para mí.
Los ojos de Maggie se abren como platos. Jake le sonríe mientras toma
un sorbo de su bebida. Luego se gira en su asiento y se enfrenta a ella,
tomando su mano. —Quiero decir... tiene sentido si lo piensas.
Arriesgándome a sonar como un médico profesional, tu expectativa de
vida no es tan larga como la mía. Así que... Estoy listo cuando estés
lista.
Maggie lo mira sin comprender. Todos lo hacemos, en realidad. No creo
que nadie esperara que él estuviera de acuerdocon Warren.
—Espero que eso no haya sido una propuesta —le dice Maggie a Jake—.
Ni
siquiera vino con un te amo. O con un anillo de compromiso.
Jake se queda mirando a Maggie por un momento. Luego extiende su
mano sobre la mesa. —Dame tus llaves, Ridge.
Ni siquiera dudo. Le doy mis llaves y Maggie lo mira desconcertada
mientras él sale del restaurante. 3
El fin.