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GLOBALIZACION
GLOBALIZACION
La caída del Muro de Berlín marcó el inicio de un cambio de época. El macromodelo económico
keynesiano entró en una crisis irreversible y el llamado “estado de bienestar” en una fase de
agotamiento y el tercer mundo en un período de desestructuración.
Bajo el monitoreo de organismos internacionales de crédito, los países de la región cayeron en una
profunda reconversión económica y sus estados debieron orientarse en una reforma que los
achicase y redefiniese.
Primero, vivimos una época de transformaciones amplias y profundas que podría clasificarse como
cambio civilizatorio, una vuelta de página histórica.
Segundo, surge una nueva realidad con nexos entre economía, sociedad y política, que trata de
concebir la política como un fenómeno social y económicamente condicionado.
Existen procesos profundos que inciden sobre aspectos de la vida social y generan una enorme
consecuencia.
El reemplazo del hombre por máquinas genera un descalabro, la demanda de las empresas es cada
vez menor, opera también en la reforma del Estado, disminuyendo o abandonando políticas sociales
vinculadas, sobre todo, al mundo del trabajo, provocando desestabilización, vulneración y exclusión.
La protección social sustentada por el estado implica un costo para las empresas, por medio de
impuestos. Mayor proteccioción social, mayor costo impositivo para las firmas.
Dinámica perversa: éxito económico por un lado y, desestructuración, exclusión, disgregación social
por el otro. Las exigencias económicas de la globalización son rigurosas y las consecuencias sociales
sumamente dañinas. Aquí la perversión de un movimiento que pareciera no detenerse. Países de
economías saludables con firme protección social como Francia y Alemania, tienen el desafío de
confrontar esta situación.
Dinámica Inmensa: se dice que la globalización es una dinámica inmensa, donde actúan
simultáneamente, fuerzas globalizadoras y fuerzas localizantes. Las primeras desencadenadas
generalmente, por la dinámica económica y las segundas por dinámicas sociales, políticas y
culturales. A medida que las personas y organizaciones pierden autonomía, buscan proteger sus
intereses y alcanzar cierta tranquilidad anímica, volviéndose hacia los grupos más cercanos de
contención. La inmensidad no es más que un cambio civilizatorio.
Una de las consecuencias del desarrollo del proceso de globalización fue la desarticulación entre las
problemáticas económicas y de seguridad. La globalización impulsó tres potencias económicas,
EEUU, la Unión Europea y Japón, pudiendo hablar de una multipolaridad económica. La exigencia se
hizo cada vez más exigente entre ellos.
GLOBALIZACIÓN Y REGIONALIZACIÓN
La globalización económica trae como consecuencia la disminución del estado, una desvalorización
en la soberanía estatal.
La libre empresa y la libertad de comercio reduce el control económico por parte de los estados.
Estos pierden autoridad para controlar actividades en su propio territorio, sus fronteras se
conviertes en más poderosas y significativas. Se ponen en cuestión los vínculos entre territorialidad y
Estado y se habla de una desterritorialización.
La vulnerabilidad de los estados queda sujeta también al endeudamiento externo y, por ende, el
monitoreo de las agencias internacionales. La crisis del estado de bienestar y el desarrollo de la
metamorfosis de las sociedades golpea sobre la relación de los individuos con la política y el propio
estado. Crece la disconformidad, el desapego, el delito y el desarraigo. Los mc donals, los shopings,
el consumo son un ejemplo de ello. Con la globalización económica, el lazo mercado/estado se ha
modificado, y el mercado interno queda debilitado como consecuencia de la globalización y la
regionalización, lo que lleva al estado cumplir nuevas funciones.
La globalización es irreversible, tiene una amplitud que abarca casi todas las economías significativas
del planeta y, si bien, los estados y sociedades no están obligados a incorporarse, asumen el riesgo y
costo de quedar al margen de una recomposición capitalista en el mundo. Quienes sí lo hagan,
deberán satisfacer ciertos requisitos o condiciones:
Confiablidad: la credibilidad que despierta frente a otros países, en especial, en las mayores
potencias, y tiene que ver al desenvolvimiento, desempeño y forma de organización social y política
entre otras. La transparencia con que un país se presenta en la interacción internacional y la
capacidad de previsión, puesto que lo que sucede en un lugar repercute en otro.