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GUIA DE TRABAJO INDEPENDIENTE 2

CAROLINA ESCOBAR ROMERO

UNIVERSIDAD LIBRE
FACULTAD DE DERECHO
PROGRAMA DE TEORÍA GENERAL DEL PROCESO
SOCORRO - SANTANDER
2023
GUIA DE TRABAJO INDEPENDIENTE

CAROLINA ESCOBAR ROMERO

DOCTOR CARLOS JUSTINO RAMIRES WAGNER

UNIVERSIDAD LIBRE
FACULTAD DE DERECHO
PROGRAMA DE TEORÍA GENERAL DEL PROCESO
SOCORRO - SANTANDER
2023
LEY PROCESAL EN EL TIEMPO Y ESPACIO

La Ley Procesal en el tiempo y espacio es un elemento fundamental en


cualquier sistema jurídico, ya que establece las normas y procedimientos que
rigen el desarrollo de los procesos legales a lo largo del tiempo y en diferentes
lugares. Esta ley se adapta a las necesidades cambiantes de la sociedad y a las
evoluciones del pensamiento jurídico, garantizando así un sistema de justicia
efectivo y equitativo.

En cuanto al tiempo, la Ley Procesal no es estática, sino que está sujeta a


modificaciones y actualizaciones periódicas. A medida que la sociedad evoluciona
y surgen nuevas tecnologías, relaciones y desafíos legales, la ley debe adaptarse
para mantenerse relevante. Esto implica revisar y reformar los códigos y
reglamentos procesales, asegurando que reflejen las realidades contemporáneas
y promuevan la justicia en cada época.

Asimismo, el factor espacio también juega un papel crucial en la Ley


Procesal. Las leyes procesales varían de un país a otro e incluso dentro de una
misma nación, en función de su estructura legal y cultural. Las diferencias en
sistemas legales y tradiciones jurídicas pueden dar lugar a variaciones en los
procedimientos, plazos y recursos disponibles para las partes involucradas en un
proceso legal.

En un nivel más práctico, la Ley Procesal en el tiempo y espacio también


abarca cuestiones de jurisdicción. Determinar qué tribunal tiene la competencia
para conocer un caso particular es esencial para garantizar un proceso justo. Esto
puede depender de factores como la ubicación geográfica de las partes
involucradas, la materia del caso y las leyes locales aplicables.

Además, con el avance de la globalización y la digitalización, surgen nuevos


desafíos en relación con la aplicación de la Ley Procesal en el espacio. Los casos
transfronterizos y la comunicación a través de medios electrónicos requieren un
análisis cuidadoso de cómo las leyes y los procedimientos se aplican en diferentes
jurisdicciones.
Por ejemplo, si una ley procesal se modifica en 2023, esta nueva ley no se
aplicará a los procesos que ya estaban en curso al momento de la modificación.
Sin embargo, sí se aplicará a los procesos que se inicien a partir de la entrada en
vigor de la nueva ley.

Existen algunas excepciones al principio de irretroactividad de la ley


procesal. Por ejemplo, la ley procesal puede aplicarse retroactivamente si es más
favorable al justiciable. También puede aplicarse retroactivamente si es necesaria
para asegurar la seguridad jurídica o el orden público.

Dentro de estas excepciones se encuentran:

La ley procesal más favorable al justiciable: Esta es la excepción más


importante, y se aplica en todos los casos en los que la nueva ley procesal sea
más favorable al justiciable, incluso si es posterior a la comisión del acto o hecho
que origina el proceso.

Así mismo, si una ley procesal establece un nuevo plazo para interponer
una demanda, y este plazo es más favorable al demandante, la nueva ley se
aplicará a los procesos que ya estaban en curso al momento de la modificación.

La ley procesal necesaria para asegurar la seguridad jurídica o el


orden público: Esta excepción se aplica en casos excepcionales, en los que la
aplicación retroactiva de la nueva ley procesal es necesaria para asegurar la
seguridad jurídica o el orden público.

Un ejemplo de ello, si una nueva ley procesal establece un nuevo


procedimiento para la celebración de un matrimonio, y este procedimiento es más
favorable a la seguridad jurídica, la nueva ley se podrá aplicar retroactivamente a
los matrimonios que se celebraron al amparo de la ley anterior.

La ley procesal necesaria para garantizar los derechos


fundamentales: Esta excepción se aplica en casos excepcionales, en los que la
aplicación retroactiva de la nueva ley procesal es necesaria para garantizar los
derechos fundamentales de los justiciables.
De este modo, si una nueva ley procesal establece un nuevo procedimiento
para el ejercicio de un derecho fundamental, y este procedimiento es más
favorable a la garantía de este derecho, la nueva ley se podrá aplicar
retroactivamente a los procesos que estaban en curso al momento de la
modificación.

Ahora bien, en cuanto a la aplicación en el espacio, la ley procesal se aplica


en el territorio de un Estado. Sin embargo, existen algunos casos en los que se
aplica la ley procesal de un Estado a procesos que se realizan en el territorio de
otro Estado. Esto se conoce como la ley procesal internacional.

Como lo puede ser, si una persona comete un delito en un país y se refugia


en otro país, el país de refugio puede aplicar su ley procesal para juzgar el delito.

 "La ley procesal es un instrumento dinámico que se adapta a los cambios


de la sociedad."

 "La aplicación de la ley procesal en el tiempo y en el espacio es una


cuestión compleja que requiere un análisis cuidadoso."

 "La ley procesal es una herramienta esencial para garantizar la seguridad


jurídica y el acceso a la justicia."

 "La aplicación de la ley procesal internacional es un desafío creciente en un


mundo globalizado."

PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DEL DERECHO PROCESAL Y DEL


PROCEDIMIENTO

Principios fundamentales del derecho procesal. En dos categorías dividimos


los principios fundamentales de la ciencia procesal: los que sientan las bases
generales del derecho procesal y los que miran a la organización del proceso.

A. Principio de interés público o general en el proceso. Nadie discute ya que


tanto el proceso penal, como el civil, laboral, contencioso-administrativo y de
cualquiera otra clase, son eminentemente de interés público o general, porque
persiguen y garantizan la armonía, la paz y la justicia sociales.
B. Carácter exclusivo y obligatorio de la función jurisdiccional del Estado. Es
éste un principio elemental, sin el cual la vida en comunidad se haría imposible
en forma civilizada, pues es fundamento de la existencia misma del Estado,
como organización jurídica. Sus consecuencias son: prohibición de la justicia
privada y obligatoriedad de las decisiones judiciales.
C. Independencia de la autoridad judicial. Para que se pueda obtener el fin de
una recta aplicación de la justicia, es indispensable que los funcionarios
encargados de tan delicada y alta misión puedan obrar libremente en cuanto a
la apreciación del derecho y de la equidad, sin más obstáculos que las reglas
que la ley les fije en cuanto a la forma de adelantar el proceso y de proferir su
decisión.
D. Imparcialidad rigurosa de los funcionarios judiciales. Esta imparcialidad es
una de las razones que exigen la independencia del órgano judicial en el
sentido expuesto. Pero con ella se contempla, además, la ausencia de todo
interés en su decisión, distinto del de la recta aplicación de la justicia.
E. Igualdad de las partes ante la ley procesal y en el proceso. Dos
consecuencias se deducen: 1) la de que en el curso del proceso las partes
gozan de iguales oportunidades para su defensa, lo cual tiene fundamento en
la máxima audiatur et altera pars, que viene a ser una aplicación del postulado
que consagra la igualdad de los ciudadanos ante la ley, base de la
organización de los Estados modernos; 2) que no son aceptables los procedi-
mientos privilegiados, al menos en relación con raza, fortuna o nacimiento de
las partes.
F. Necesidad de oír a la persona contra la cual va a surtirse la decisión y la
garantía del derecho de defensa. Es principio consagrado en la Constitución
colombiana y en todas las promulgadas después de la Revolución Francesa,
que nadie puede ser condenado sin haber sido oído y vencido en proceso por
los trámites legales.
G. Publicidad del proceso. Significa ese principio que no debe haber justicia
secreta, ni procedimientos ocultos, ni fallos sin antecedentes ni motivaciones.
Pero ello no quiere decir que todo el proceso debe ser necesariamente público,
y que toda persona pueda conocer en cualquier momento los expedientes.
H. Obligatoriedad de los procedimientos establecidos en la ley. La ley señala
cuáles son los procedimientos que se han de seguir para cada clase de
proceso o para obtener determinadas declaraciones judiciales, sin que les sea
permitido a los particulares, aun existiendo acuerdo entre todos los interesados
en el caso, ni a las autoridades o a los jueces modificarlos o permitir sus
trámites, salvo cuando expresamente la misma ley autoriza hacerlo.
I. El principio de que las sentencias no crean, sino declaran derechos. Los
derechos subjetivos se originan en el derecho positivo y principalmente en la
ley, su fuente formal más común en el mundo moderno. Los procedimientos
sirven para obtener su tutela, su ejecución, su garantía, para permitir, en
ocasiones, su ejercicio, pero no para crearlos.
J. El principio de la verdad procesal. Entiéndase por verdad procesal la que
surge del proceso, es decir, la que consta en los elementos probatorios y de
convicción allegados a los autos. Esta puede ser diferente de la verdad real.
Significa este principio que para el juez lo importante y único es la verdad
procesal, que su decisión tendrá que ceñirse a ella y que entonces será recta y
legal.
K. El principio de la cosa juzgada. Este principio se deduce del carácter
absoluto de la administración de justicia. Significa que una vez decidido, con
las formalidades legales, un litigio o un asunto penal entre determinadas
partes, éstas deben acatar la resolución que le pone término, sin que les sea
permitido plantearlo de nuevo, y los jueces deben respetarla.

JURISDICCION DE PAZ

La "jurisdicción de paz" es un término que generalmente se refiere a un enfoque


legal y judicial que busca abordar conflictos y delitos en el marco de procesos de
paz y reconciliación, con el objetivo de poner fin a la violencia y promover la
justicia de una manera que facilite la convivencia y la estabilidad en sociedades
que han experimentado conflictos armados o situaciones de violencia prolongada.
Aunque no es un concepto formalmente establecido en el derecho internacional,
se ha utilizado en contextos específicos para describir ciertos enfoques judiciales
en situaciones posconflicto.

La jurisdicción de paz suele tener algunas características clave:

Enfoque en la reconciliación: A diferencia de los tribunales penales


internacionales que a menudo se centran en el enjuiciamiento y castigo de los
perpetradores de crímenes, la jurisdicción de paz busca también promover la
reconciliación entre las partes en conflicto. Esto puede incluir medidas como la
amnistía condicional, la desmovilización de combatientes y programas de
reintegración.

Participación de las comunidades afectadas: Los procesos de jurisdicción de


paz a menudo buscan involucrar a las comunidades afectadas por el conflicto en
el proceso de justicia y toma de decisiones. Esto puede lograrse a través de
consultas públicas, asambleas comunitarias y otras formas de participación
ciudadana.

Justicia reparadora: En lugar de enfocarse exclusivamente en castigos, la


jurisdicción de paz puede incluir mecanismos para reparar a las víctimas y
restaurar el tejido social dañado por el conflicto. Esto puede incluir
compensaciones económicas, programas de rehabilitación y medidas simbólicas
de reconocimiento.

Enjuiciamiento selectivo: En lugar de procesar a todos los responsables de


crímenes, la jurisdicción de paz puede enfocarse en los casos más emblemáticos
o graves, con el objetivo de enviar un mensaje de que la impunidad ya no es
tolerada.

Mecanismos híbridos: En algunos casos, se pueden establecer tribunales


especiales con elementos tanto nacionales como internacionales para tratar los
crímenes cometidos durante el conflicto. Estos tribunales híbridos pueden
combinar la experiencia legal internacional con el conocimiento y la comprensión
locales.

Un ejemplo notable de jurisdicción de paz es el proceso de paz en Colombia,


donde se ha implementado una combinación de enfoques legales y medidas de
justicia transicional para abordar los crímenes cometidos durante décadas de
conflicto armado. En este contexto, se estableció la Jurisdicción Especial para la
Paz (JEP), un sistema judicial especializado que busca la verdad, la justicia y la
reparación para las víctimas, mientras busca garantizar la estabilidad y la
reconciliación en el país.

JURISDICCIÓN EN EL DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO

La jurisdicción en el Derecho Internacional Humanitario (DIH) se refiere a la


autoridad que un Estado o una entidad internacional tienen para investigar,
enjuiciar y sancionar a individuos por crímenes cometidos en el contexto de
conflictos armados. El DIH es un conjunto de normas que busca regular la
conducta de los Estados y otros actores en situaciones de conflicto armado, con el
objetivo de proteger a las personas que no participan directamente en las
hostilidades, así como limitar los medios y métodos de guerra.

Existen varias dimensiones de la jurisdicción en el DIH:

Jurisdicción Nacional: Los Estados tienen la principal responsabilidad de


enjuiciar a las personas que hayan cometido crímenes de guerra, crímenes contra
la humanidad y otros delitos graves en su territorio o por sus nacionales. Esto se
basa en el principio de jurisdicción territorial y personal.

Jurisdicción Universal: Algunos delitos graves, como los crímenes de


guerra y los crímenes contra la humanidad, se consideran tan serios que cualquier
Estado puede ejercer jurisdicción sobre ellos, independientemente de dónde se
hayan cometido y de la nacionalidad de los perpetradores o las víctimas.
Jurisdicción Internacional: En ciertos casos, los tribunales
internacionales, como la Corte Penal Internacional (CPI), tienen jurisdicción sobre
crímenes graves que trascienden las fronteras nacionales. La CPI puede enjuiciar
a individuos por genocidio, crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y el
crimen de agresión.

Jurisdicción de Complementariedad: La CPI actúa en


complementariedad con los sistemas judiciales nacionales. Si un Estado es capaz
y dispuesto a enjuiciar a los presuntos responsables de crímenes graves, la CPI
no interviene. Sin embargo, si el sistema nacional es incapaz o no está dispuesto
a actuar, la CPI puede intervenir.

Tribunales Ad Hoc: En algunos casos, se han establecido tribunales ad


hoc para enjuiciar crímenes cometidos en situaciones específicas de conflicto,
como el Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) y el Tribunal
Internacional para Ruanda (TPIR).

En resumen, la jurisdicción en el DIH se refiere a la capacidad de los Estados y


tribunales internacionales para enjuiciar a individuos por crímenes cometidos en el
contexto de conflictos armados. Esta jurisdicción es esencial para garantizar la
rendición de cuentas por violaciones graves del DIH y contribuir a la prevención de
futuros crímenes en el ámbito de los conflictos armados.

JURISDICCION EN EL DERECHO PENAL INTERNACIONAL

La jurisdicción en el derecho penal internacional se refiere a la autoridad y


el poder de los tribunales y jurisdicciones internacionales para investigar, enjuiciar
y sancionar delitos de naturaleza internacional. En otras palabras, es la capacidad
legal de un tribunal para ejercer su autoridad sobre ciertos actos delictivos que
trascienden las fronteras nacionales y afectan a la comunidad internacional en su
conjunto.

Existen varias jurisdicciones y mecanismos en el derecho penal


internacional que tienen diferentes ámbitos de acción y enfoques:
Tribunales Penales Internacionales: Estos tribunales son creados
específicamente para enjuiciar delitos graves de carácter internacional, como
genocidio, crímenes de lesa humanidad, crímenes de guerra y agresión. Los dos
tribunales penales internacionales más prominentes son:

Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY): Establecido


para enjuiciar a individuos responsables de crímenes cometidos durante los
conflictos en la ex Yugoslavia.

Tribunal Penal Internacional para Ruanda (TPIR): Creado para juzgar a


los responsables del genocidio y otros crímenes graves en Ruanda en 1994.

Corte Penal Internacional (CPI): Establecida por el Estatuto de Roma, es


el primer tribunal permanente para enjuiciar crímenes de genocidio, crímenes de
lesa humanidad, crímenes de guerra y el crimen de agresión a nivel internacional.
La CPI tiene jurisdicción sobre individuos, no sobre Estados.

Jurisdicción Universal: Algunos países han adoptado legislación que


permite el enjuiciamiento de ciertos crímenes graves, como genocidio, tortura y
crímenes de guerra, independientemente de dónde se hayan cometido y de la
nacionalidad del perpetrador o de la víctima. Esto significa que un país puede
juzgar a un individuo por crímenes cometidos en otro país si el acusado se
encuentra en su territorio.

Tribunales Ad Hoc: Además del TPIY y el TPIR, se han establecido otros


tribunales temporales para enjuiciar crímenes internacionales. Por ejemplo, el
Tribunal Especial para Sierra Leona (RSCSL) fue creado para enjuiciar a los
responsables de crímenes cometidos durante el conflicto en Sierra Leona.

Es importante destacar que la jurisdicción en el derecho penal internacional puede


ser compleja debido a las cuestiones de soberanía estatal y al principio de
complementariedad, que establece que los tribunales internacionales solo actúan
cuando los tribunales nacionales son incapaces o no están dispuestos a juzgar los
crímenes.

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