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Panorama bíblico.

Portada.
Las siete épocas de Plan de Salvación Bíblico en doce representaciones a todo color.
-. La creación
1. Desde la creación de hombre hasta la caída
2. Desde la expulsión de Edén hasta el diluvió
3. Desde el diluvio hasta la confusión de lenguas (Babel)
4. El tiempo de los patriarcas hasta la esclavitud en Egipto
5. El tiempo bajo la ley hasta el Gólgota
a) Desde el éxodo de Egipto hasta el reinado de Salomón
b) El tiempo de los reyes hasta el cautiverio babilónico
c) Desde el regreso del cautiverio hasta el final de Antiguo Testamento
d) Desde el comienzo del nuevo testamento hasta el Gólgota.
6. Desde pentecostés hasta la venida de Jesús en el poder y gloria
a) El tiempo de gracia
b) El tiempo de la tribulación
7. Desde la venida de Jesús hasta la eternidad
Panorama bíblico.
Las siete épocas de Plan de Salvación Bíblico en doce representaciones a todo color
Para el estudio bíblico
CONTENIDO
LA CREACIÓN
Desde el universo hasta la creación del hombre…………………………………………………………………………I

ÉPOCA PRIMERA- EDÉN


Desde la creación del hombre hasta su caída en el pecado y su expulsión…………………………………II

ÉPOCA SEGUNDA- ANTES DEL DILUVIÓ


El tiempo de la conciencia
Desde la explosión del huerto de Edén hasta el diluvio………………………………………………………………III

ÉPOCA TERCERA- DESPUÉS DEL DILUVIÓ


El tiempo de la responsabilidad del hombre
Desde el diluvio hasta el esparcimiento de Babel……………………………………………………………………IV

ÉPOCA CUARTA- LOS PATRIARCAS


Tiempo de promesa
Desde el llamamiento de Abram hasta la esclavitud en Egipto………………………………………………V

QUINTA ÉPOCA- BAJO LA LEY


Desde la salida de Egipto hasta Salomón………………………………………………………………………………VI
Desde la separación del reino hasta el cautiverio babilónico………………………………………………VII
Desde la restauración hasta el fin del antiguo testamento…………………………………………………VIII
Desde el comienzo del nuevo testamento hasta la crucifixión y la ascensión de Jesús…………IX

ÉPOCA SEXTA- EL POSTRER TIEMPO


Desde pentecostés hasta la venida de Jesús en poder y gloria
El tiempo de gracia, desde pentecostés hasta el arrebatamiento de los creyentes………………X
El tiempo de tribulación. Desde la apostasía grande
hasta la venida de Jesús en el poder y gloria………………………………………………………………………XI

ÉPOCA SÉPTIMA Y FUTURA- LA PERFECCIÓN


Desde la manifestación de Jesús hasta la eternidad……………………………………………………………XII

ANEXO 1
El evangelio- los caminos de dios en cuanto a la salvación del hombre

ANEXO 2
El momento del Arrebato de la asamblea iglesia, el cuerpo de cristo
PREFACIO
El Panorama Bíblico ha sido crea do sobre la base del libro inglés "The Panorama Bible Study
Course, No. 1: The Plan of the Ages".

En el prefacio el editor dice, entre otras cosas: "Este libro ha sido escrito para ser una ayuda visual
para el lector de la Biblia. No pretende ser un estudio teológico profundo. Antes quiere dar una
visión general de las revelaciones y las épocas dadas por Dios". El propósito del Panorama Bíblico
es semejante. Quiere pre sentar al lector una visión panorámica de los hechos de Dios en el
pasado, presente y futuro.
Estamos conscientes de que una presentación gráfica de temas bíblicos corre el riesgo de inducir a
una doctrina rígida, por una parte, y a una interpretación especulativa por otra. La variedad de las
revelaciones bíblicas no puede ser presentada completamente de una manera visual.

Por eso nos limitamos a varios aspectos en cuanto a la salvación del hombre, que pueden
observarse a través de las diferentes épocas:

 La promesa y la intención de las declaraciones bíblicas, que quieren presentar a nuestro


Redentor Jesucristo, del cual las Escrituras dan testimonio" (Juan 5:39), y su obra
redentora, indagando los profetas "acerca de esta salvación, escudriñando qué persona y
qué tiempo indicaba el Espíritu de Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de
antemano los sufrimientos de Cristo y las glorias que vendrían tras ellos" (1 Pedro 1:10-
22).
 El misterio de la Iglesia, cuerpo de Cristo, que ha sido manifestado al fin de los tiempos
(Romanos16:25).
 Las claras profecías de las Escrituras en cuanto al porvenir.
 El papel que Israel desempeña como portador de las promesas divinas.

Vemos claramente que la relación de Dios con Israel (su pueblo terrenal) no ha sido anulada por la
Iglesia (asamblea) de Dios (el pueblo celestial), sino que todas sus promesas en cuanto a Israel se
cumplirán (Roma nos 11:25).

El Panorama Bíblico, pues, quiere dar una visión general histórica en cuanto a la salvación del
hombre, para facilitar al (joven, ante todo) lector la aplicación correcta de las declaraciones
bíblicas. La Biblia no siempre habla acerca de nosotros (o sea de la Iglesia, cuerpo de Cristo, los
creyentes), pero sí nos habla, desde su primera hasta su última hoja, a nosotros.

"El primer requisito para el buen entendimiento de la actuación de Dios para con el hombre en
cuanto a su salvación es, naturalmente, la fe que reconoce la Biblia, en su totalidad, como la
Palabra de Dios y, consecuentemente, como la autoridad infalible y obligatoria. Además, es
importante saber que los relatos bíblicos históricos, como también las profecías del Antiguo y del
Nuevo Testamento, son auténticas y veraces. Si Jesucristo mismo, el Hijo de Dios, se identifica con
aquellos testimonios, nadie tiene el derecho de poner en duda las Sagradas Escrituras. Sólo el que
rechace la autoridad divina de Cristo y su obra redentora, puede negar la unidad histórica y la
profecía" (según "El Plan Divino de Salvación", E. Sauer - Prefacio).
En este sentido el Panorama Bíblico quiere animar al lector creyente a escudriñar su Biblia.
Además, es apropiado como material didáctico para el estudio bíblico en grupo, en reuniones de
jóvenes, reuniones familiares, conferencias etc., para conocer más y más su contenido sublime:
NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO y su obra consumada en la cruz del Gólgota.

Cómo usar el Panorama Bíblico:


Las diferentes secciones sobre las distintas épocas han sido arregladas de manera que están una a
continuación de la otra cuando se abren las páginas individuales.

Las breves explicaciones en cuanto a los esquemas correspondientes se encuentran frente a los
diagramas (al dorso del anterior), de modo que es posible leer el texto y el esquema al mismo
tiempo.

Significado de las líneas, en la parte ilustrada:

La línea roja: La promesa en cuanto al Mesías y el mismo Mesías, nuestro Señor Jesucristo.

La línea verde: La historia de Israel y su importancia en el futuro.

La línea naranja: La venida del Espíritu Santo a los creyentes (Juan 14:16) y el papel que ellos
desempeñan en el siglo venidero.

La línea violeta: La actividad del espíritu del anticristo.

La línea negra: Acción satánica, pecado.

La línea azul: tiempo de la iglesia


LA CREACIÓN
Desde la creación del universo hasta la creación del hombre.
"En el principio creó Dios los cie los y la tierra". Con esta declaración sublime sobre el principio de
todo ser el Espíritu Santo nos guía directamente a Dios. Aquí no hay lugar para suposiciones
humanas acerca de Dios y su existencia eterna. Génesis 1:1 declara todo lo que el hombre necesita
saber del Creador. "Levantad en alto vuestros ojos, y mirad quién creó estas cosas" (1). El hecho
de la existencia de un universo material está delante de los ojos de toda criatura, y es la Palabra de
Dios la que ofrece la única explicación realmente aceptable sobre su origen. Los geólogos
escudriñan las capas terrestres, estableciendo teorías sobre petrificaciones, fósiles etc., pero "la
privanza del Señor es con los que le temen" (2).

"Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que lo
que se ve fue hecho de lo que no se veía" (3). El término hebreo "bara" (=crear) significa en su
verdadero sentido, el acto divino de la creación por Dios, sin tener necesidad de una materia ya
existente. El "¡sea!" divino llamó a la existencia lo que hasta entonces no existía. "Porque él dijo, y
fue hecho; el mando y el éxito" (4). "Porque el mando y fueron creados" (5)

En el principio". No se nos dice cuándo fue, pero sin lugar a dudas esta declaración se refiere a la
eternidad pasada, cuando los cielos y la tierra fueron creados por у el acto, la voluntad y la palabra
del Dios Todopoderoso.

Ahora se nos dice en Génesis 1:2 que "la tierra estaba desordenada y vacía" (hebreo:
tohuwabohu). Isaías nos explica que esta no es una descripción de la tierra en su estado original:
"no la creó en vano (tohuwabohu), para que fuese habitada la creo (6).

La información dada en Génesis 1:1 es completa. Se refiere a un acto creador de Dios en la


eternidad pasada. Génesis 1:2 nos informa sobre el hecho que la tierra se transformó debido a
motivos que nosotros ignoramos, pero que Dios conoce, en un desierto caótico. Y aunque no
sepamos los detalles exactos sobre el cuándo y el cómo, el estudio cuidadoso de la Palabra de Dios
nos ofrece indicios de tal catástrofe. El versículo 3 indica que Dios empieza a "re renovar" la faz de
la tierra", para prepararla como lugar de residencia para el hombre. Así lo dice también el
salmista: "Envías tu Espíritu, son creados, y renuevas la faz de la tierra" (7).

"En el segundo día de la creación Dios "separó " las aguas; el re lato aquí no dice que las aguas 99
hubieran sido "creada" en aquel tiempo. Además, no se nos dice que Dios "creó", en el día cuarto,
el sol y la luna, sino que Dios hizo las gran des lumbreras (más exacto: portadores de luz, en
hebreo: asher). Fueron formados de manera que dieran la luz a la tierra y sirviesen para
determinar el tiempo. Pero "creadas" fueron "en el principio". En Génesis 1:9 Dios dijo:
"Descúbrase lo seco". Aquí no se habla de la creación de la tierra sino "de la reunión de las aguas
en un lugar para que se descubra lo seco (o sea la tierra, que había sido creada " en el principio")".
En resumen, el relato mosaico habla de tres actos creadores (hebreo: bara) de Dios:

 Creación del cielo y de tierra, “en el principio";


 Creación de los animales;
 Creación del hombre.

1) Isaías 40/26

2) Salmo 25/14

3) Hebreos 11/3

4) Salmo 33:9

5) Salmo 148:5

6) Isaias 45/18

7) Salmo 104/30
I. LA CREACIÓN
En el principio creo dios los cielos y la tierra
Génesis 1:1
Juan 1:1
Dios prepara la tierra como lugar de residencia para el hombre. Salmo 104

Y la tierra estaba desordenada y vacía… Génesis 1:2


"Por la fe entendemos haber sido constituido el universo por la palabra de Dios, de modo que
lo que se ve fue hecho de lo que no se veía"
Hebreos 11:3
Juan 1:3
Job 38:4
Proverbios 8:22-31
Isaías 45:18
2 Pedro 3:5-6

Día primero
"Y dijo dios: sea la luz; y fue la luz. Y vio Dios que la luz era buena; y separo Dios la luz de las
tinieblas. Y a las tinieblas llamo Noche. Y fue la tarde y la mañana un día"

Génesis 1:3-5

Día segundo
"Luego dijo Dios: Haya expansión en medio de las aguas, y separe de las aguas. Y fue así. Y llamo
Dios a la expansión cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo

Génesis 1:6-8

Día tercero
"Dijo también Dios: júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase
lo seco. Y fue así. Y llamo Dios a lo seco Tierra, y a la reunión de las aguas llamo Mares. Y vio Dios
que era bueno. Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde… árbol de fruto… Y fue la
tarde y la mañana el día tercero. "

Génesis 1:9-13
Día cuarto
"Dijo luego Dios: Haya Lumbreras en la expansión de los cielos… y fue así. E hizo Dios la grande
lumbrera… y las estrellas… Y vio Dios que era bueno. Y fue la tarde el día cuarto"

Génesis 1:14-19

Día quinto
"Dijo luego dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra… y vio
Dios que era bueno. Y Dios los bendijo, diciendo: Fructificad y multiplicaos… y fue la tarde y la
mañana el día quito."

Génesis 1:20-23

Día sexto
"Luego dijo Dios: Produzca la tierra seres vivientes según su género, bestias y serpientes y
animales de la tierra según su especie. Y fue así. Y vio Dios que era bueno. Entonces dijo Dios:
Hagamos al hombre a nuestra imagen… y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios le
creo. Y bendijo Dios … Y fue así. Y fue la tarde y la mañana el día sexto."

Génesis 1:24-31

Día séptimo
"Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos. Y acabó Dios en el día
séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día
séptimo, y lo santifico."

Génesis 2:1-3

" Tu, oh señor, en el principio fundaste la tierra. "


Hebreos 1:10
Salmo 102:25

La Creación
Isaías 14:12-15
Ezequiel 28:12-19
La tierra estaba desordenada y vacía
La tierra como lugar de residencia para el hombre
Época primera – Edén
La época de la inocencia. Desde la creación del hombre hasta su
caída en el pecado y su expulsión.
El hombre fue creado inocente y puesto en un ambiente paradisíaco, el huerto de Edén, que Dios
mismo había preparado.

"Edén" significa, en hebreo, "gozo, delicia". El hombre no había sido destinado a la ociosidad, sino
a "labrar el huerto". Juntamente con Eva, su ayuda idónea, debía consagrar todo sur ser, su
espíritu, alma y cuerpo, a su Creador y Dios, en obediencia, amor y servicio.

Con la bendición de Dios la primera pareja asumía la responsabilidad de "llenar la tierra", de


sojuzgar los animales y de labrar y guardar el huerto. Como alimento Dios le dio los frutos de todos
los árboles del huerto - salvo uno, que Dios había puesto como condición para la obediencia del
hombre: "De todo árbol del huerto podrás comer; más del árbol de la ciencia del bien y del mal no
comerás; porque el у día que de él comieres, ciertamente morirás" (1).

El hombre, pues, fue sometido a una prueba conveniente y sencilla, y la obediencia total y
permanente le habría asegurado a Adán y sus descendientes la felicidad eterna, el paraíso y la vida
(Génesis 3:22).

Por otra parte, la muerte, como castigo de la desobediencia, de la cual Dios había advertido
seriamente (2).

Cuando leemos la Palabra de Dios atentamente, nos damos cuenta de que el mal ya existía en el
mundo de aquellos días. Bajo el liderazgo de Satanás, ya existía un grupo de seres caídos que
contaba con el poder que hoy llamamos "tentación". Se esforzaban por inducir a otros a actuar
contra la voluntad de Dios, como ellos mismos lo habían hecho anteriormente.

Así Satanás tomó la forma de una serpiente y causó, por medio de Eva, la caída del género
humano. En su astucia el diablo logró que Eva tomara del fruto prohibido. No obstante, aquí ya se
puede ver que el poder tentador es limitado: Satanás puede tentar, pero no puede forzar la
transgresión. Eva "tomó"; era su propia decisión, su libre actuación. Adán siguió su ejemplo y cayó,
como ella, en el pecado de la desobediencia, y tuvo que llevar las graves consecuencias del mismo.

Dios les había advertido encarecidamente que el día que ellos pecaran, morirían, tanto física como
espiritualmente (1).

Desde ahora en adelante el cuerpo iba a tener que sufrir la muerte. De la misma manera el alma
perdía su comunión con Dios: moría la muerte espiritual. Adán mismo dio la prueba de esto, pues
mostró con su comportamiento que la comunión y la vida espiritual había muerto en su alma; por
eso huyó de la presencia del Señor, tratando de esconderse de Dios el Señor.

Dios pronunció su sentencia de inmediato, empezando con quien había inducido a pecar, es decir,
con la serpiente. Luego si guio la sentencia sobre la mujer, luego el hombre y después la tierra por
causa del hombre. Dios les había ad vertido al principio que la consecuencia del pecado (de la
desobediencia) sería la muerte, lo cual encierra muerte física, espiritual y eterna. No es sólo la
destrucción del cuerpo y la separación del alma de la comunión con Dios, sino el castigo del alma
en un estado futuro y eterno (3).

Nada era suficiente para librar de aquel castigo eterno (el que se llama en la Biblia "la muerte
segunda"), Si- no la gracia que satisfacía la justicia de Dios (4). (Vea esquema XII).

E n su cuidado divino, Dios dio a la humanidad una señal de esta gracia, cuando vistió la primera
pareja, cargada de pecado, con túnicas de las pieles de animales sacrificados. Después "lo echó
fuera del huerto de Edén" con sus bendiciones y su hermosura. Querubines y una espada
encendida guardaban el acceso al árbol de la vida, "para que no tomen de él y vivan para siempre"
(en su estado caído). Dios, en su gracia, puso al lado del castigo pronunciado la grandiosa promesa
de un Salvador que salvaría a la humanidad de la maldición del pecado y sus consecuencias
eternas. Dios prometió que la "simiente de la mujer" (6) heriría la cabeza de la serpiente y
vencería las consecuencias tan terribles de la trágica caída del hombre.

Así termina la época primera (inocencia) con el juicio: la expulsión de Edén .


1.Génesis 2/16 – 17
2) Romanos 6:23
3) Romanos 5/12 - 21
4) Apocalipsis 2011 - 15
5) Génesis 3/24
6) Génesis 3/15
II. Época primera – Edén
Significado de las líneas en la parte ilustrada.

La línea roja: La promesa en cuanto al Mesías y el mismo Mesías, y el mismo Mesías (Cristo).

La línea verde: La historia de Israel.

La línea naranja: La venida del Espíritu Santo a los creyentes (Juan 14:16)

La línea violeta: La actividad del espíritu del anticristo. 1 Juan 4:3

La línea negra: Acción satánica, pecado.

La línea azul: tiempo de la iglesia

INOCENCIA

Creación del hombre


Génesis 1:27-2:7

Adán y
Eva

Huerto de Edén
Génesis 2:8-15
La tentación
Génesis 3

Árbol de la
ciencia del bien
y del mal
Creado en inocencia, el
mandamiento de Dios y El tentado, el engañador
su advertencia de las desde el principio, la
consecuencias del serpiente antigua (vea
pecado esquema XI)
Génesis 2:15-17

LA CAIDA DEL PECADO


El pecado destruye la comunión de Dios “la paga del pecado es muerte” Romanos 6:13
“Así la muerte paso a todos los hombres, por cuanto yodos pecaron” Romanos 5:12 y 18:19
la época primera
PECADO termina con el juicio: la
explosión de edén

Árbol de la
vida

La Promesa
Génesis 3;15 La expulsión

La maldición
Génesis 3:14-19
“Echo, pues, fuera al
Las palabras de justicia de hombre, y puso al oriente
Dios encierran maldición y de Edén querubines, y
Promesa. una espada encendida
“Pondré enemistad. entre tu que se revolvía por todos
simiente y la suya; ésta te lados, para guardar el
herirá en la cabeza y tú le camino del árbol de la
herirás en el calcañar” vida”
Génesis 3:15 Génesis 3:24

 Creación del hombre


 Ca tentación
 Caída en pecado y castigo
 La promesa
 La explosión
Génesis 1-3
EPOCA SEGUNDA – ANTES DEL DILUVIO
El tiempo de la conciencia. Desde la expulsión del huerto de Edén hasta el diluvio.

La promesa dada en Génesis 3:15 no indicaba solamente la venida de un Redentor que vencería a
Satanás, sino que la profecía significaba también una enemistad permanente en el mundo entre
los descendientes de la serpiente y los descendientes, o hijos espirituales, del Redentor. Se
predecía una lucha permanente. El uno heriría al otro en el calcañar, pero finalmente el otro
heriría a aquél en la cabeza, es decir, destruiría su jefatura y autoridad adjudicadas en el mundo y
su imperio. Esta profecía anuncia una guerra permanente entre el reino de Dios y el reino del
diablo entre los hombres, una enemistad entre los hombres malos y los creyentes. Cuando Jesús
habla de los impíos, dice: “Vosotros sois de vuestro padre el diablo", en otras palabras: sois
descendientes de la serpiente (1).

Caín y Abel, los primeros hijos de Adán y Eva, son representantes de aquellos descendientes
enemistados. Así leemos que Abel fue “justo" (2), mientras que Caín era “del maligno" (3). La
Biblia relata de su enemistad, y el “espíritu de Caín” no terminará hasta que no venga la “simiente
de la mujer", para lanzar a su adversario, “el maligno" en el lago de fuego y para hacer nuevas
todas las cosas (4).

Tanto Caín como Abel trajeron una ofrenda al Señor. Caín trajo del fruto de la tierra, mientras que
Abel trajo un animal de su rebaño. La ofrenda de Caín no era sino un reconocimiento de la
existencia del Creador, pero Abel trajo una ofrenda expiadora, y lo hizo por la fe. Hebreos 11:4 y
13:24 señalan esta fe que confía en la promesa de Dios, y el reconocimiento de la verdad de que
sin derramamiento de sangre no se hace remisión de pecados (5). Sin lugar a dudas Adán, su
padre, les había contado de la caída en el pecado y sus consecuencias trágicas; también del vestido
dado por Dios por el cual animales tenían que ser sacrificados. Sin embargo, Caín, en su actitud
obstinada, trajo del fruto de la tierra maldita, probando así su falta de humildad y fe. El "camino de
Caín" (6) desagradó a Dios, y no pudo aceptar su ofrenda. En cambio, la ofrenda de Abel sí le fue
agradable. Esta demostración del afecto divino inflamó el fuego de la enemistad en el corazón de
Caín, de modo que aquél se levantó y mató a su hermano justo.

Así Adán y Eva tuvieron que llevar las consecuencias de su pecado. Su primer hijo se hizo asesino,
el segundo víctima de la enemistad entre los "descendientes de la mujer y los descendientes de la
serpiente".

Dios les dio otro hijo, y Eva lo llamó Set (sustitución), porque "Dios me ha sustituido otro hijo en
lugar de Abel" (7).

De aquí en adelante los habitantes de la tierra, (que se multiplicaban rápidamente), durante varias
generaciones o se identificaron con el camino de Caín, "que salió de delante del Señor" (8), o con
el camino de Set: " comenzaron a invocar el nombre del Señor" (9).
La corrupción de la descendencia de Caín se hizo tan grave que inundaba toda la tierra con su
influencia. La maldad de los hombres se hizo in deciblemente grande. Aun las ideas más viles
fueron realizadas; por todas partes reinaba la violencia, e incluso la vida humana tenía muy poco
valor (10). En vista de la corrupción tan grande, Dios decidió destruir la humanidad por medio del
diluvio (11).

Sin embargo, un hombre fue hallado fiel, quien no se había manchado con la pecaminosidad de su
tiempo. Y a aquel justo, Noé, Dios le anunció su intención de destruir la humanidad. Le mandó
construir un arca en la que se salvaría él y su familia asegurando así el cumplimiento de la promesa
(Génesis 3:15). Mientras construía el arca, Noé llamó a los hombres al arrepentimiento, sin
obtener respuesta (12). Cuando el arca fue terminada, Noé con su esposa y sus tres hijos con sus
esposas entraron en ella, conjuntamente con los animales necesarios para preservar sus especies y
para las ofrendas. luego Dios cerró la puerta tras ellos. Las aguas del diluvio inundaron toda la
tierra, destruyendo toda vida, mientras que solamente ocho personas, Noé y su familia, fueron
salvos en el arca (13).

Así termina la época según da (conciencia) con el juicio: el diluvio.

1) Juan 8:44
2) Hebreos 11/4
3) 1 Juan 3/12
8) Génesis 4/16
9) Génesis 4/26
10) Génesis 4/23 - 24
11) Génesis 6:5-8
12) 2 Pedro 2:5
13) 1 Pedro 3/20
7) Génesis 4:25
6) Judas 11
5) Hebreos 9/22
4) Apocalipsis :10
Adán Años
Set 130
Enós 235
Cainán 325
Mahalaleel 395
Jared 460
Enoc 622
Matusalén 687
Lamec 874
Noé 1056
Sem 1558
Arfada 1658
Sala 1693
Haber 1723
Paleg 1757
Reu 1787
Serug 1819
Nacor 1849
Tare 1878
Abraham 1948

10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 110 120 130 140 150 160 170 180 190 200 210 año
0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0 s

III. Época segunda – Antes del diluvio


IV. CONCIENCIA
Aquí comienza el
camino de la promesa Aprox. 4000 antes de J.C.
Caín y
de la simiente de la Abel
mujer hasta el
Redentor.
Génesis 3:15

La línea mesiánica:
Mateo 1:2-17
Lucas 3:24-38
Abel El altar de Abel
El altar de Abel
Caín Hebreos 11:4
Set

v
Henoc
Enós
v

v
Irad

v
Cainán

Descendientes de Génesis 3-7 La corrupción


Descendientes de
v
Mehujael Aprox. 3500 antes de J.C. del mundo
Caín Set

v
Mahalaleel
v
Metusael

v
Jared
A medida que los hombres
v
Lamec
Cainán
comenzaron a multiplicarse,
también aumento la maldad, hasta
que la tierra estaba corrompida
delante de Dios y llena de
violencia. Y Dios dijo: he decidido
el fin de todo ser… yo los destruiré
con la tierra. v
Jabal (camino, pues, Enoc con Dios y
Génesis 6.1-13
Enoc
v desapareció, porque le llevo Dios
Génesis 5.24
Cainán Hebreos 11.5
Judas 14

v
Jabal

Matusalén
v

v Caín
Tumbal-

Lamec
v
La época segunda termina
con el juicio: el diluvio

Noé, pregonero de justicia,

Noé
construye el arca y advierte
del juicio venidero
v Aprox. 3000 antes de J.C.
2 Pedro 2.5
1 Pedro 3:18-20
Hebreos 11:7

Sem El diluvio
Cam

Jafét

El diluvio
Aprox. 2500 antes de J.C.
EPOCA TERCERA – DESPUES DEL DILUVIO
El tiempo bajo la responsabilidad del hombre. Desde el diluvio hasta el
esparcimiento de Babel.
EL 1 diluvio abarca un total de un año y diez días. Siete meses desde el día que Noé entró en el
arca hasta su asentamiento sobre los montes de Ararat, y cinco meses y diez días hasta que el
patriarca recibió la orden de salir del arca. Lo primero que hizo Noé fue ofrecer al Señor un gran
holocausto. El espíritu que le movía a hacerlo agradaba a Dios, y El hizo un pacto con Noé,
diciendo que nunca más la tierra sería destruida por un diluvio, y que todas las cosas sobre la
tierra serían sometidas a Noé.

Dios bendijo a Noé y a su familia y les mandó llenar la tierra. Por primera vez ahora se les permitió
comer la carne de los animales, y la intangibilidad de la vida fue subrayada por la introducción de
la pena de muerte. "El que derrame sangre de hombre, por el hombre su sangre seria derramada."
Como prenda para todas las promesas del pacto, Dios puso el arcoíris en las nubes, señal de su
pacto con todo ser viviente de todas las generaciones (1).

De esta manera la humanidad obtuvo un nuevo comienzo, pero esta vez con la introducción del
gobierno humano. Desde ahora en adelante el hombre tenía la responsabilidad de administrar la
tierra delante de Dios. Los hijos de Noé, por los cuales la tierra había de ser repoblada, llevaron a
cabo la misión dada por Dios - la de llenar la tierra - sabiendo que Dios castiga la maldad y es un
Salvador de los que creen. Ellos habían experimentado tanto el efecto del pecado como el de la
gracia, y esto tuvo como resultado que su piedad y su fe fueron profundizadas, y que ahora se
sentían obligados a honrar y obedecer a Dios. Sin embargo, no mucho tiempo después, la injusticia
otra vez llegó a ser excesiva, de modo que los hombres y las naciones otra vez se encontraron en
enemistad contra Dios y sus propósitos. Los tres hijos de Noé se llamaban Sem, Cam y Jafet. "De
éstos se esparcieron las naciones de la tierra" (2). Noé, siendo profeta, anunció a sus tres hijos y
sus descendientes tanto la recompensa como el castigo, según su actitud y sus hechos.

Cam llegaría a ser una raza esclavizada. Los descendientes de Sem serían benditos, y los cananeos,
descendientes de Cam, serían sus esclavos; Jafet se extendería en gran manera. La historia
muestra el cumplimiento de esta profecía (3). (Compárese esquema IV, la tabla sobre la
repoblación de la tierra).

La repoblación por las familias de los hijos de Noé no se ha realizado conforme al plan de Dios, o
sea en obediencia. Fue la voluntad de Dios que los hombres se esparcirían sobre toda la tierra,
pues Dios había hecho la tierra "para que fuese habitada"

Contra la voluntad de Dios la obstinación prevaleció, y los hombres en su soberbia impía, en


abierta enemistad contra Dios, se opusieron a la dispersión que Dios deseaba. Se reunieron en la
llanura de Sinar y decidieron edificar una ciudad y una enorme torre para hacerse un gran nombre
y para impedir el esparcimiento de los hombres. Sin embargo, Dios, al cual desagradaba este
desprecio permanente del Creador por parte de las criaturas, confundió su lengua (5).
Hasta aquel momento se hablaba una sola lengua sobre toda la tierra. Pero ahora los hombres
comenzaron a hablar diferentes idiomas. De esta manera Dios los forzó a separarse los unos de los
otros, pues como es natural, los que hablaban la misma lengua se marchaban juntos. Así "el Señor
los esparció sobre la faz de toda la tierra" (6).

Hoy en día parece fundada la teoría de que los numerosos idiomas pertenecen a tres grandes
familias idiomáticas; éstas más o menos corresponden a los descendientes de Sem, Cam y Jafet,
hijos de Noé.

Así termina la época tercera (bajo la responsabilidad del


hombre) con el juicio: el esparcimiento de Babel.
1) Génesis 9:1-17
2) Génesis 10:32
3) Génesis 9/25 - 27
4) Isaías 45/18
5) Génesis 11/1 - 9
6) Génesis 11/9
V. EPOCA TERCERA – DESPUES DEL DILUVIO
Línea de Sem (línea verde) lleva a Israel y al Masías (línea roja), vea la bendición de Noé
Génesis 9:26
La época tercera

Administración y responsabilidad del hombre


termina con el
juicio. Babel
(= confusión)

"Mi arco he puesto en las


El pacto de Dios con Noé nubes, y me acordare del
pacto eterno que hay entre

Noé
Aproximadamente Dios y todo ser viviente"
2500 antes de J.C Génesis 9.8-17
Isaías 24.5

"No volveré más a maldecir la


tierra por causa del hombre,
"Y los hijos de Noé que porque el intento del corazón
Hijos de Sem
salieron del arca fueron del hombre malo desde su
Repoblación de Elam, Asur, Arfaxad,
Lucas 3.36
juventud… mientras la tierra
la tierra por Sem, Cam y Jafet; … y de
ellos fue llena la tierra"
Cam Jafet Sem Lud, Aram,
Génesis 10.21-22 permanezca, no cesaran la
Sem, Cam y Génesis 9.18-19 cementera y la siega, el frio y el
Jafet Hijos de Cam Hijos de Jafet calor, el verano y el invierno, y
Cus, Mizraim, Gomer, Magog, Arfaxad el día y la noche"
Madai, Javan, Tubal, Génesis 8.21-22
Fut, Canaán,
Mesec, Tiras
Genesis 10.6
Génesis 10.21-22
Sala
Haber
"ahora, pues descendamos, y
Babel "Por eso fue llamado confundamos, allí su lengua,
el nombre de la para que ninguno entienda el
habla de su compañero"
ciudad Babel (= La torre de Babel
confusión) porque allí "y dijeron. Vamos edifiquemos
Génesis 9-11 confundió el Señor el
lenguaje de toda la
una ciudad y una torre, cuya
cúspide llegue al cielo; y
Aproximadamente
2300 antes de J.C
La confusión de tierra, y desde allí los hagámonos un nombre, por si
las Lenguas esparció sobre la faz fuéremos esparcidos sobre la
de toda la tierra." faz de toda la tierra."
Génesis 11.9 Génesis 11.1-4

Aproximadamente
2200 antes de J.C
El esparcimiento

Descendientes de Sem
Descendientes de Jafet
Descendientes de Cam
MAPA El esparcimiento
EPOCA CUARTA – LOS PATRIARCAS
El tiempo de la promesa. Desde el llamamiento de Abram hasta la esclavitud en Egipto.

Después de la dispersión, Nimrod, un descendiente de Cam, fundó un reino junto al Eufrates, el Reino
Caldeo o el Reino Babilónico Temprano. Mizraim, otro hijo de Cam, fundó el Reino Egipcio, el segundo gran
centro de la civilización de aquel tiempo. Aunque entonces había riquezas y permanentes progresos en el
arte y otras áreas, no obstante, la corrupción religiosa aumentó. Esto se mostró en el nacimiento y la
extensión de la idolatría. Donde quiera llegaba el hombre, muy pronto creaba sus propias costumbres
religiosas e ídolos, dejando de honrar al verdadero Dios.

Pronto la idolatría se esparció sobre toda la tierra, deshonrando a Dios y degradando al hombre al mismo
tiempo. Por eso Dios tomó la decisión de apartar una familia de entre todas las familias de la tierra, para
preservar en ella la piedad, el conocimiento y la adoración del único y verdadero Dios.

Escogió a Abram, nacido en Ur de los caldeos. Se le apareció y lo llamó (1). Los habitantes de Ur, en aquel
tiempo eran idólatras. Se supone que la ciudad de Ur estaba con sagrada al dios-luna que llevaba el mismo
nombre.

Dios mandó a Abram salir de su tierra y de su parentela a un lugar que le sería mostrado. Aquel mandato
estaba vinculado con una promesa y con un pacto: El sería una nación grande, Dios le haría un gran nombre,
la tierra de Canaán pertenecería a sus descendientes para siempre, y por él serían benditas todas las familias
de la tierra (2).

Todo ello señalaba el comienzo de un nuevo reino de Dios, pues con el llamamiento de Abram Dios comenzó
a anunciar al mundo el Redentor prometido, la “simiente de la mujer". Aunque Dios había prometido a
Abram que su descendencia se ría incontable, muchos años pasaron sin que el hijo de la promesa
apareciera. En su impaciencia Abram, por sugerencia de Saraí, tomó a su sierva Agar por mujer y engendró a
Ismael, padre de los árabes. Catorce años después, como por un milagro, le fue dado Isaac, el hijo de la
promesa (3).

Isaac, al igual que su padre, creía a Dios, y el pacto concertado con Abraham le fue confirmado.

Él tuvo dos hijos, Esaú y Jacob. Esaú despreció su primogenitura y la vendió a Jacob. Entre los dos hermanos
existía una enemistad que puede observarse hasta en la historia del pueblo escogido. Esaú fue el padre de
los edomitas, quienes fueron causa de problemas permanentes para la descendencia de Jacob, Israel (4).

Más tarde el nombre de Jacob fue cambiado por "Israel", o sea "el que lucha con Dios" (5). De sus doce hijos
el favorito era José, nacido en su vejez. Por esta causa sus hermanos le aborrecieron y, por fin, le vendieron
a unos mercaderes ismaelitas que le llevaron a Egipto. Sin embargo, Dios le bendijo allí, prosperándolo en
todo lo que hacía. Veinte años después, debido al hambre que había en la tierra, Jacob se vio obligado a
emigrar, con sus hijos, a Egipto, invitado por José para vivir allí. Después de haber muerto tanto Jacob como
José otro rey subió al trono el cual "no conocía a José" (6). Inquieto por el rápido aumento de los israelitas
decidió exterminarlos por una cruel opresión y la matanza de todos los niños varones.

Durante aquel tiempo tan oscuro nació un niño, que había si do destinado a libertar el pueblo esclavizado.
Escondido en una arquilla de juncos en un carrizal a la orilla del río, fue hallado por la hija de Faraón. Lo
llamó Moisés y lo crio como hijo. Moisés vivió durante 40 años en la corte de Faraón. Fue entonces que
renunció a los deleites de Egipto (7), pugnando por la liberación de su propio pueblo, Israel. Sin embargo,
tuvo que escapar al desierto, y allí fue preparado para la misión que Dios tenía para él.
Así termina la época cuarta (promesa) con la esclavitud en Egipto.

1) Hechos 7:2-3
2) Génesis 12:1-3
3) Génesis 17+18+21
4) Génesis 36:8
5) Génesis 32:28
6) Éxodo 1:8
7) Éxodo 2:11; Hechos 7:23 Hebreos 11:24
EPOCA QUINTA – BAJO LA LEY.
El tiempo de la Ley. Desde la salida de Egipto hasta Salomón .
Antes que el pueblo de Israel pudiera ser libertado era necesario que Dios trajera plagas sobre Egipto, para
vencer la obstina da negativa de Faraón. En vísperas del último juicio, la muerte de todo primogénito, la
Pascua fue instituida y celebrada por los israelitas. Dios les mandó matar un cordero por familia, y poner su
sangre sobre los postes de sus casas. Esta señal indicaba al ángel heridor las casas de los hebreos, los hijos
de Israel, "para pasar aquellas puertas" (1) cuando viniera a herir todo primogénito en la tierra de Egipto.
Luego de este juicio del Dios de Israel todos los israelitas fueron forzados a salir a la libertad. En Éxodo 12:40
se nos dice que ellos habían vivido 430 años en Egipto, y en Gálatas 3:17 leemos que la ley fue dada 430
años después de la ratificación del pacto de Abraham en cuanto a sus descendientes.

En el tercer mes de su salida de Egipto el pueblo de Israel acampó delante del monte Sinaí, y allí se quedaron
un año. Dios llamó a Moisés a subir al monte, y allí le dio los "Diez Mandamientos" (2), así como
instrucciones acera de la construcción del Tabernáculo, una tienda santa que sería la habitación de Dios en
medio del pueblo (3).

Después del censo del pueblo en el desierto de Sinaí (4) y la comprobación de que cada familia estaba en su
respectiva tribu, salieron a tomar posesión de la tierra prometida. Al llegar a la frontera meridional, Moisés
envió 12 varones para reconocer el país. Regresando todos contaron que la tierra era buena; no obstante,
diez de ellos declararon que eran incapaces de conquistarla por causa de los gigantes y las ciudades
fortificadas. A causa de este informe tan negativo el pueblo se angustió, negándose a entrar en la tierra
prometida (5).

Como castigo de su rebeldía y su incredulidad el pueblo tuvo que atravesar el desierto durante 40 años,
hasta que todos los que en aquel tiempo tenían menos de 20 años hubieran muerto (6).

al final de aquella A peregrinación Moisés repitió la ley les dijo los requisitos para recibir las bendiciones
prometidas para su entrada en la tierra de Canaán. Después de haber dado su mensaje de despedida, Dios
llamó a su fiel siervo a su presencia y lo sepultó (7).

Después de la muerte de Moisés, el pueblo fue introducido en el país por Josué, su sucesor. La mayor parte
del país fue conquistada, y Josué lo repartió, apoyado por Eleazar, el Sumo Sacerdote, entre las tribus. El
pueblo sirvió al Señor (8) todo el tiempo de Josué y el tiempo de los ancianos. Sin embargo, después de su
muerte poco a poco el pueblo iba ca yendo en la apostasía. La Biblia di ce, resumiendo su estado: "Los hijos
de Israel hicieron lo malo ante los ojos del Señor" (9). Y "el Señor los entregó en manos de sus enemigos"
(10). En aquel tiempo tan crítico Dios llamaba a varones de en medio de ellos, por medio de los cuales Él
pudo reinar y administrar justicia. Aquellos hombres fueron llamados "los jueces".

Al cabo de varios siglos de cambios entre esclavitud y libertad, en el tiempo en que Samuel era juez, los
israelitas, cansados de los jueces, exigieron un rey, como tenían las demás naciones. Después de
presentarles Dios las graves consecuencias del cambio de la teocracia a la monarquía, les concedió lo que
pedían. Saúl, de la tribu de Benjamín, fue elegido por Dios para que fuera el primer rey de Israel (11).

Su carácter fue caracterizado por su energía y obstinación, y su muerte ignominiosa caracteriza su vida. Saúl
reinó aproximadamente 40 años sobre Israel.

El reinado de David, de la tribu de Judá fue, sin lugar a dudas, el período más brillante en la historia de Israel.
David mismo fue uno de los hombres más destacados y honrados del tiempo del Antiguo Testamento. Dios
lo llama "un varón conforme a mi corazón, el cual hará toda mi voluntad" (12). Durante su reinado las
fronteras del reino se extendieron a aquellas regiones que Dios había prometido a su pueblo desde tiempos
antiguos. También le fue prometido a David "un reino eterno" en su hijo (13). (Compare: Cristo - hijo de
David).

Le sucedió en el trono, su hijo Salomón, del que nadie igualó su magnificencia, poder y sabiduría. El reinado
de Salomón ha sido llamado la "época de oro" de Israel. El pueblo alcanzó la cumbre de su grandeza
nacional. La obra más importante de Salomón fue la construcción del templo en Jerusalén, el cual ya había
sido proyectado por su padre.

Durante el reinado de los reyes Saúl, David y Salomón Israel era un reino unido.

(Continuará)

1) Éxodo 12:13; Hebreos 11:28

2) Éxodo 20 3) Éxodo 40:34

4) Números 1

5) Números 13-14

6) Números 14:34

7) Deuteronomio 34:5-6 8) Josué 24:31

9) Jueces 2:11; 3:7; 4:1;

6:1; 10:6; 13:1; 21:25

10) Jueces 2:14; 6:1; 10:7 11) 1 Samuel 8:4-22

12) 1 Samuel 13:14

Salmo 89:20

Hechos 13:22 13) 1 Crónicas 17:11-13


EPOCA QUINTA – BAJO LA LEY.
El tiempo de la Ley. Desde la separación del reino hasta el cautiverio babilónico.

Todo el mundo venía a Salomón para oír la sabiduría que Dios había puesto en su corazón (1). Dotado de
sabiduría, inteligencia y estando en favor con los hombres, Salomón tenía las mejores oportunidades para
dar testimonio del único Dios verdadero, ya que muchas veces venían delegaciones de tierras lejanas para
ver su gloria y oír la sabiduría de sus palabras. Salomón tuvo un buen comienzo, y el primer tiempo de su
gobierno estaba caracterizado por sinceridad y piedad. Buscaba la dirección y sabiduría divinas antes que
todas las otras cosas. No obstante, los años posteriores de su reinado traje ron la decadencia y, después de
su muerte, la división del reino. Esa de cadencia fue promovida por la edificación de santuarios para los
ídolos de las numerosas mujeres extranjeras de Salomón, perjudicando así la adoración de Dios y
promoviendo la idolatría en su reino. Y esa apostasía de su Señor acarreó el juicio de Dios sobre su casa (2).
Dios juzgó su actitud y envió al profeta Ahías a Jeroboam, un supervisor de Salomón, y le reveló su intención
de cortar diez tribus del reino de Salomón para dárselas a Jeroboam (3).

Cuando Roboam fue coronado rey, luego de la muerte de Salomón, el pueblo le rogó que aliviara el peso de
los impuestos. Sin embargo, la respuesta de Roboam consistió en el anuncio de nuevos gravámenes. En
consecuencia, las diez tribus se negaron a obedecerle, consumándose la división del reino. Jeroboam, de la
tribu de Efraín, logró ser elegido jefe del nuevo reino. Las tribus de Judá y Benjamín, con las cuales más tarde
se juntaron los levitas, permanecieron bajo el reinado de Roboam.

A hora, pues, existían dos reinos a la vez. Los primeros 60 años estaban caracterizados por guerras
permanentes. Poco a poco los dos reinos se debilitaron por dentro y fuera. Y por fin fueron vencidos por sus
enemigos y llevados al cautiverio.

 El Reino de Israel se mantuvo 250 años, hasta que fue conquista do por los asirios. El sitio y la
caída de Samaria, su capital, trajo el fin de aquel reino. La mayor parte de la población fue
deportada a varias regiones del reino asirio, y en lugar de ellos, el rey de Asiria repobló Samaria
trayendo gente de otros lugares. Lo que caracterizó la historia de Israel fue su grave idolatría y el
hecho de que ni uno de sus 19 reyes fue un hombre piadoso.

 El Reino de Judá continuó existiendo, después de la caída de Israel, unos 135 años más.
También sobre Judá reinaron 19 reyes y una reina, todos descendientes directos de David. La
historia del reino de Judá se caracterizó por cambios entre avivamientos y decadencia religiosa,
como reflejo de la vida e intereses espirituales de sus respectivos reyes. Aunque Judá contó con
varios reyes piadosos y experimentó algunos avivamientos y reformas, a pesar de todo, Dios tuvo
que decir: "También Judá hizo lo malo ante los ojos del Señor" (4).

El fin llegó con la destrucción de Jerusalén por el rey babilónico Nabucodonosor. El rey de Judá y el pueblo
fueron llevados cautivos a Babilonia. El templo fue saqueado y quemado hasta sus fundamentos. El muro de
la ciudad fue arrasado. Según dicen los historiadores, el pueblo sitiado tuvo que pasar por sufrimientos,
crueldades y matanzas indescriptibles. (Continuará)
EPOCA QUINTA – BAJO LA LEY.
El tiempo del cautiverio 2 Crónicas 36:20

Juda 70 años en el cautiverio


Aprox 600 antes J.C

El reino babilónico

Nabucodonosor

1ª dotación: Daniel en la corte de nab; interpretación de la imagen. Daniel 1-2


2ª deportación: los amigos de Daniel en el horno de fuego Daniel 3
3ª deportación: Destrucción de Jerusalén y del templo interpretación del sueño por Daniel- humillación de
Nabucodonosor 2 reyes 25;8

Evil-merodac

Joaquín es liberado de la cárcel 2reyes 25:27

Belsasar

En el primer año: el sueño de Daniel (las 4 bestias Daniel 7


En el tercer año: la visión de Daniel (carnicero y macho cabrío) Daniel 8
El juicio de Dios sobre Belsar “mene, tekel, uparsion“ Daniel 5

Aproxima 550 antes de J.C

El Reino de medo- persa

Dario el medo, capitán y co-regente de ciro, conquista el reino babilónico Daniel 6:1 / jeremías 25:12

En el primer año: Daniel se da cuenta de nuemero de años sobre jerusalen en la profecia de jeremias
(70 años) Daniel 9

Daniel en el foso de los leones Daniel 6

Ciro el persa

En el primer año: decreto para edificar la casa de Dios (isaias) 45:1 Esdras 1:2

Fin de los 70 a{os de cautiverio

Aprox 500 antes de J.C

Cambises (Asuero)

En el tercer año: la última visión de Daniel Daniel 10-12


Queja de los enemigos contra la edificación del templo Esdras 4
Darío I

Verificación del decreto de ciro Esdras 6:3


En el año sexto: inauguración del templo Esdras 6:15

Jerjes I (Asuero)

La reina Ester Ester 1-10

Artajerjes

Aprox 450 antes de J.C

En el año septimo: Esdras sube a jerusalen (renovación religiosa) Esdras 7:7

En el año veinte: nehemias sube a jerusalen (reedificacion del muro) nehemias 2:1
EPOCA QUINTA – BAJO LA LEY.
Continuación

El tiempo de la Ley. Desde la restauración hasta el fin del Antiguo Testamento.

Durante el cautiverio de Israel el gran imperio babilónico llegó a su fin, cuando Ciro, fundador del Imperio
Persa, conquistó Babilonia. Belsasar, último rey de Babilonia, fue muerto, y Darío de Media, con el cual Ciro
compartió el dominio sobre el extenso imperio, subió al trono (1). Cuando Darío murió, dos años más tarde,
Ciro se hizo Emperador de Babilonia. Sin lugar a dudas Daniel, que había tenido una gran reputación bajo los
reyes babilónicos, había llamado la atención del nuevo emperador sobre las profecías (2), en las cuales él
mismo, Ciro, fue nombrado como instrumento de Dios para librar el pueblo judío. Muy impresionado, Ciro
emitió un decreto permitiendo a los judíos regresar a Jerusalén para reedificar su santuario (3). Aunque una
parte considerable del pueblo prefirió quedarse en Babilonia, oficialmente había terminado el cautiverio con
el decreto de Ciro (4).

El regreso de los judíos de Babilonia se realizó en tres etapas diferentes. El primer grupo, bajo Zorobabel, un
príncipe de Judá (la casa de David) regresó con menos de 50.000 personas. Lo primero que hizo aquel
remanente fue la restauración del altar en su lugar y la institución de la adoración. En él segundo año se
echaron los cimientos del templo (5). Cuando los que volvieron de la cautividad no permitieron que él
"pueblo de la tierra" colaborase con ellos en la obra, aquellos les obstaculizaron el trabajo y finalmente
consiguieron que el rey ordenara cesar la obra (6). Al cabo de 16 años, los profetas Hageo y Zacarías
convocaron al pueblo para que continuasen con la obra, y así el templo fue terminado e inaugurado con
gran gozo (7).

El segundo grupo fue llevado por E el escriba Esdras, unos 78 años más tarde que Zorobabel. Esdras, que
pugnaba con celo por la reintroducción de la ley mosaica y la renovación religiosa del pueblo, obtuvo el
permiso del rey Artajerjes para volver con un grupo pequeño pero decidido a Jerusalén.

Al llegar a Jerusalén se vio confrontado con graves pecados mora les, costumbres religiosas inmundas y
abusos por todas partes. Durante tres meses apeló a la conciencia del pueblo, logrando así una amplia
renovación. Otro servicio valioso que se atribuye a Esdras, fue el del coleccionar y copilar los escritos del
Antiguo Testamento (8)

El tercer conductor fue Nehemías, un judío del cautiverio, que había alcanzado una buena posición en la
corte del rey Artajerjes de Persia. Un pequeño grupo emprendió el largo viaje a Persia, para pedir la ayuda
de Nehemías. Le contaron del estado desesperado de la ciudad y de sus muros derribados, lo cual era una
vergüenza para el pueblo. Nehemías se conmovió, y obtuvo el permiso del rey de viajar con ellos a Jerusalén.
Al llegar comprobó secretamente

El estado de los muros en ruinas. Reuniendo todas las fuerzas disponibles reconstruyó el muro en un lapso
de 52 días, a pesar de la violenta oposición. Nehemías vino otra vez a Jerusalén, y el resultado de su
actividad tan fiel y eficaz fue una ciudad fortificada y floreciente, y un pueblo reanimado y dispuesto a servir
y glorificar a Dios (9).
Los profetas de la restauración fueron Hageo, Zacarías y Malaquías. Hageo había nacido en Babilonia y
acompañaba al remanente que regresó bajo Zorobabel. Se cree que Zacarías, colaborador de Hageo, vino
con Zorobabel a Jerusalén. Fue activo exhortando, profetizando y animando al pueblo en la Reconstrucción.
Malaquías era el último de los profetas de Antiguo Testamento.

Los cuatro siglos entre el Antiguo y el Nuevo Testamento son un período importante en la historia de
Palestina. Al final del Antiguo Testamento los persas eran los señores del mundo de aquel entonces; el
tiempo del Nuevo Testamento se desarrolla en los días del Imperio Romano (10).

(Continuará)

1) Daniel 5:30 + 6:1 2) Isaías 44:28 + 45:1

3) Daniel 9:2; Jeremías 25:12

4) 2 Crónicas 36:22; Esdras 1:1-4

5) Esdras 3

6) Esdras 4

7) Esdras 5:1-2; 6:14-15

8) Esdras 7-10

9) Nehemías 1-13

10) Compare las profecías en Daniel 7-8


EPOCA QUINTA – BAJO LA LEY.
Continuación

El tiempo de la Ley. Desde el principio del Nuevo Testamento hasta la crucifixión y la


ascensión de Jesús.

El silencio en las relaciones entre Dios y su pueblo, los judíos, fue interrumpido "cuando vino el
cumplimiento del tiempo" (1) por el envío de Aquel que había sido prometido desde el principio: "la
simiente de la mujer" (2). Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los
padres de Israel por los profetas, en los postreros días nos ha hablado por el Hijo (3). Envió a su Hijo, nacido
de mujer, y lo puso bajo la ley (4).

En los días del rey Herodes, la llegada del Prometido, Hijo de David, Hijo de Dios y el Señor mismo, fue
anunciada por el ángel Gabriel a Zacarías. Al principio Zacarías, un sacerdote, recibió el mensaje de que su
esposa Elisabeth tendría un hijo a su edad avanzada al cual debían llamar Juan. Este iría delante del Señor
para llamar el pueblo al arrepentimiento (5).

Poco después Dios envió a su mensajero Gabriel a una virgen, María, de la línea de David, para decirle que
ella había sido escogida por Dios para ser la madre del Mesías prometido. A su pregunta de cómo se
realizaría esto, respondió el ángel: "El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su
sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios". Dios le daría el trono de su
padre David, él reinaría sobre la casa de Jacob, y su reino no tendría fin (6). — José, el desposado de la
virgen María, un descendiente de David, recibió la orden divina de no repudiar a su desposada, "porque lo
que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es". "Jesús" sería su nombre, o sea: "el Señor es salvación",
pues El, solamente El, iba a salvar a su pueblo de sus pecados (7).

Cuando Jesús nació, el cielo mismo dio un poderoso testimonio con la aparición nocturna de un ángel del
Señor. El mensaje celeste a un pequeño grupo de pastores en el campo era: "Os ha nacido hoy, en la ciudad
de David, un Salvador, que es Cristo el Señor" (8).

Su nacimiento no correspondía con su procedencia divina: Fue envuelto en pañales y acostado en un


pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón (9). Por amor a nosotros se hizo tan pobre, para que
nosotros con su pobreza fuésemos enriquecidos (10). Las Sagradas Escrituras dan mucha importancia a
aquel acontecimiento. Con el nacimiento vemos el cumplimiento de las promesas de Dios en la Persona de
Jesús. Las Escrituras lo llaman el "indiscutiblemente grande misterio de la piedad": "Dios fue manifestado en
carne" (11). La excelsa Persona de Jesús, el Hijo de Dios, caracteriza todo el plan de salvación, y en El y por El
todo recibe un significado inmenso, eterno y divino.

En un período de unos 30 años hasta su primera presentación formación de Jesús, excepto lo poco, pero
importante, que nos dicen los escritores inspirados: la circuncisión de Jesús y su presentación en el templo
(12), más tarde la adoración por los magos (13), la huida a Egipto, el regreso y su establecimiento en Nazaret
(14) como también el relato sobre el muchacho de doce años en el templo (15). Era un hombre como
nosotros - pero sin pecado - un bebé, luego niño, sin embargo, al mismo tiempo el Hijo de Dios. De aquel
tiempo tenemos el testimonio de Dios y de los que le conocían: "Crecía en sabiduría y en estatura, y en
gracia para con Dios y los hombres" (16). Le llamaron también "el hijo del carpintero" (17) o "el carpintero"
(18); sus hermanos y hermanas nacidos después de Él, eran bien conocidos (19), y Nazaret era el pueblo
donde fue criado (20).

Juan Bautista, su precursor, anunciaba su cercana venida y con ella el Reino de Dios que iba a establecer.
Llamaba al pueblo que esperasen al "que ha de venir" en un estado humillado y arrepentido, y que los
arrepentidos fueran bautizados en el Jordán (21). Muchos judíos respondieron al llamado de Juan el
Bautista.
También Jesús vino a él para ser bautizado (22), no porque hubiera cometido algún pecado había pecado
sino pues en El no para identificarse con todos aquellos que confesaban sus pecados. Juan Bautista le
proclamó como el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo (23). Y recibió el testimonio público de
Dios: "Tú eres mi Hijo amado, en ti tengo complacencia" (24). El Espíritu Santo descendió sobre El y
permaneció sobre El. Lleno del Espíritu Santo fue llevado al desierto, para ser tentado por el diablo. Lo
venció por su obediencia a Dios en su dependencia incondicional de la Palabra de Dios (25). Inmediatamente
después comenzó su ministerio público (y eficaz) durante los siguientes tres años. Su mensaje: "Arrepentíos,
porque el reino de Dios se ha acercado" (26).

Muchos del pueblo le escuchaban, seguían y eran sanos de sus enfermedades. Jesús, además echó fuera
demonios y resucitó muertos. Literalmente se cumplieron las palabras que Dios había dicho por Isaías el
profeta: "He aquí que vuestro Dios viene, El mismo vendrá, y os salvará... Entonces los ojos de los ciegos
serán abiertos, y los oídos de los sordos se abrirán. Entonces el cojo saltará como un ciervo, y cantará la
lengua del mudo…" (27). "En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. A lo suyo vino, y los suyos
no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser
hechos hijos de Dios" (28). Caminando de aldea en aldea, se presentó a su pueblo terrenal como su Dios,
Rey y Salvador. De entre la multitud de sus seguidores escogió doce, a los que llamó apóstoles (= enviados).
Ellos habían de estar con El (29), y a la vez testigos, enviados a todo el país, a las ovejas perdidas de la casa
de Israel (30). Les mandó a predicar y a confirmar su predicación por medio de obras milagrosas,
capacitándolos a sanar, en su nombre, a echar fuera demonios y a resucitar muertos (31). - Sus palabras
eran espíritu y vida, verdad y luz, ya que Jesús mismo es todo eso en su persona. Ellos colocaron a los
hombres a la luz de Dios. -dijo- "los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran
malas" (32). No querían venir a la luz, al Señor. Pero entonces como hoy esto significa: El que no le acepte,
permanecerá bajo la ira de Dios (33).

Los conductores de aquel pueblo, los escribas, ancianos, principales sacerdotes, fariseos y saduceos, le
aborrecieron por causa de sus palabras verdaderas y de su santidad, y final mente le llevaron a la muerte.

Así como se cumplieron las profecías en su nacimiento y ministerio, también se cumplieron en sus
sufrimientos y muerte, resurrección y glorificación. La descripción de sus sufrimientos causados por los
hombres (impulsados por Satanás, el homicida desde el principio), sus sufrimientos sustitutorios y
expiatorios de parte de Dios por nuestros pecados, nos hacen ver la grandeza de su obra salvadora.

Por la fe en la sangre vertida de Jesucristo, Hijo de Dios, recibe aquel que, arrepentido, confiesa sus pecados,
la redención, perdón, la justificación y la vida eterna y glorificada en la presencia de Dios. Estas verdades
fueron enseña das por Jesús y confirmadas por su obra en la cruz. Él fue entregado por Dios por nuestras
transgresiones, y resucitado para nuestra justificación (34)

El tiempo se había cumplido en todo do sentido cuando Dios envió a su Hijo para solucionar una vez y para
siempre el problema del pecado, por medio del sacrificio de Jesucristo, para la salvación de todo aquel que
cree. La resurrección de entre los muertos por Dios Padre y por el poder del Espíritu Santo es el sello, la
confirmación de que Dios había aceptado la inmensa obra de la salvación.
Después de su resurrección el Señor se apareció a los Suyos durante un lapso de 40 días (35). Les abrió las
Escrituras y el entendimiento sobre ellas. Dijo que, según las Escrituras, era necesario que el Cristo sufriera,
para entrar entonces en su gloria.

Comenzando desde Moisés y siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que de
él decían (36). Les dijo: "Así está escrito, y así fue necesario que el Cristo padeciese, y resucitase de los
muertos al tercer día; y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas
las naciones, comenzando desde Jerusalén. Y vosotros sois testigos de estas cosas. He aquí yo enviaré la
promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis
investidos de poder desde lo alto. Y los sacó fuera hasta Betania (Monte de los Olivos), y alzando sus manos,
les bendijo. Y aconteció que, bendiciéndoles, se separó de ellos, y fue llevado arriba al cielo. Ellos, después
de haberle adorado, volvieron a Jerusalén con gran gozo; y estaban siempre en el templo, alabando y
bendiciendo a Dios" (37).

1) Gálatas 4:4
2) Génesis 3:15
3) Hebreos 1:1
4) Gálatas 4:4
5) Lucas 1:11-17
6) Lucas 1:26-38
7) Mateo 1:18-25
8) Lucas 2:8-14
9) Lucas 2:1-7
10) 2 Corintios 8:9
11) 1 Timoteo 3:16
12) Lucas 2:21-35
13) Mateo 2:1-22
14) Mateo 2:13-23
15) Lucas 2:39-52
16) Luscas 2:40-52
17) Mateo 13:54-55
18) Marcos 6:3
19) Mateo 13:54-55
20) Lucas 4:16
21) Mateo 3:1-6
22) Mateo 3:13-17
23) Juan 1:29-34
24) Mateo 3:17
25) Mateo 4:1-11
26) Mateo 4:12-17
27) Isaías 35:4-6
28) Juan 1:1-13
29) Mateo 10:1-4
30) Mateo 10:5-6
31) Mateo 10:8
32) Juan 3:19
33) Juan 3:36
34) Romanos 3:21-26 4:24-25; 5:1-2
35) Hechos 1:1-3
36) Lucas 24:25-27
37) Lucas 24:46-53
3…

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