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Monografía
presentada en cumplimiento parcial de los requisitos de la materia
Angelología, Antropología y Hamartiología
Esleiter Barillas
Saúl Ruiz Ramírez
22 de Junio de 2021
ACERCAMIENTO A LA INJUSTICIA SOCIAL
DESDE EL PROFETA AMÓS
fue denunciar las injusticias sociales. Esta faceta ha sido inspiradora para varios
movimientos a través de la historia que han luchado por la justicia y la equidad. A través
profeta Amós y cómo esta se contrapone con una vida religiosa y el carácter justo de
Dios. En primera instancia, se conocerán los elementos más relevantes del autor y el
contexto cultural, económico y político del Reino del Norte. Posteriormente, a manera de
síntesis, se evaluarán tres secciones del libro que darán una mejor comprensión del
Contexto histórico
El autor
Más allá de lo que él dice sobre sí mismo se conoce poco acerca de este profeta.
El autor lo identifica como uno de los pastores de Tecoa (1:1), y Amós se refiere a sí
mismo como cultivador de sicómoros (7:14).1 Tecoa estaba situada a unas diez millas al
1
No se ofrecen detalles respecto a su familia o la edad que este tenía cuando profetizó, ni cuánto
tiempo vivió. Algunos autores sostienen que la calidad del lenguaje del libro y su conocimiento de la
política y la historia dan la impresión de que era una persona pudiente y educada. Véase Daniel Carroll,
“Amós” en Comentario bíblico contemporáneo, ed. René Padilla (Buenos Aires: Certeza Unida, 2015), 7.
Así mismo, se piensa que Amós, debido a sus oficios, pudo haberse caracterizado por viajar demasiado.
Esto debido a que los registros indican que los sicómoros no crecían en ninguna parte de Tecoa, ya que esta
aldea se encuentra a más de dos mil pies sobre el nivel del mar y estos árboles crecen en tierras más bajas
del valle del Jordán y en las orillas del Mar Muerto y del Mediterráneo. Véase Peter C. Craigie "Amos the
nöqed in the Light of Ugaritic" Studies in Religion 11 (1982): 29-33.
2
sur de Jerusalén y a seis millas al sur de Belén, en Judá.2 Por lo tanto, Amós era un
ciudadano del reino del sur enviado a profetizar al reino del Norte, Israel (1:1). Él no se
(7:14).3 El consenso general de los estudiosos del AT sitúa su ministerio profético entre
los años 760-750 a. de C.4 El prólogo del libro indica que en este periodo Jeroboam II era
rey de Israel y Uzías rey de Judá. Así mismo, Amós posiciona el inicio de su profetismo
dos años antes del terremoto. Walton menciona que las zonas de Israel y Judá son
social. Su mensaje fue dirigido especialmente contra las clases altas y sacerdotales de
período de prosperidad y poderío militar.6 Los israelitas suponían que Dios estaba de su
lado y que los buenos tiempos no terminarían nunca. La crueldad con los pobres, la
2
Jeff Niehaus, “Amos” en The Minor Prophets An Exegetical and Expository Commentary, ed.
Thomas Edward McComiskey (Grand Rapids: Baker Book, 1992), 1:315.
3
Amós afirma no ser hijo de profetas. Los “hijos de los profetas” eran miembros de la cofradía
profética, en la que se entrenaban para ser profetas profesionales. En los días de Elías y Eliseo,
aparentemente se los tenía en alta estima (ver 2 R. 2.3,15s.); pero también existían profetas profesionales
que, junto con sus discípulos, se prostituían en el ejercicio de sus servicios, diciendo lo que los gobernantes
deseaban oír (ver 1R. 22.6-23). Sin juzgar el oficio profético, Amós simplemente decía que no había sido
profeta, pero que un día Dios lo llamó a profetizar al reino del Norte. William Sanford, David Allan,
Frederic Bush, Panorama del Antiguo Testamento: Mensaje, forma y trasfondo del Antiguo Testamento
(Grand Rapids: Nueva Creación/Eerdmans, 1995), 314.
4
José Luis Sicre, Introducción al Antiguo Testamento (Navarra: Verbo Divino, 2012), 282.
5
John H. Walton, Victor H. Matthews, Mark W. Chavalas, Comentario del contexto cultural de la
Biblia: Antiguo Testamento, trad. Nelda Bedfor et al (El Paso: Mundo Hispano, 2004), 871.
6
Duane A. Garret, Amos A Handbook on the Hebrew Text (Waco: Baylor University Press, 2008),
1.
3
sociedad israelita en el siglo VIII a. de C., junto con la amenaza de un severo castigo
oráculos contra las naciones (1:3-2:16); 2) juicios de advertencia (3-6); 3) cinco visiones
La primera sección contiene una serie de oráculos que amenazan a los vecinos de
Israel con un castigo divino por sus atroces crímenes de guerra (1: 3–2: 5). Sin embargo,
la serie finalmente culmina en un discurso de juicio contra Israel (2: 6–16).9 De esta
manera, el profeta señalará a Israel como el principal objetivo del castigo divino, que a su
vez será una respuesta de parte de Yahvé en favor de los débiles y marginados que son
oprimidos por el pueblo. En este sentido, la nación ha roto el pacto con Yahvé y por eso
van dirigidos especialmente a las ciudades de Samaria y Bethel, la capital y el lugar del
santuario principal.10 Aquí el profeta registra cinco discursos. El primer discurso (cap. 3)
discurso (cap. 5:1-17), también son introducidos por esta frase. Mientras que, el cuarto
(cap. 5:18-27) y quinto discurso (cap. 6), son introducidos por la frase “Ay de los que”
En las primeras dos visiones (7:1-3; 4-6) Yahvé le muestra a Amós lo que sucederá, pero
él interviene como mediador en favor del Pueblo y Dios determina que lo visto por el
profeta “no va a suceder”. Sin embargo, en las siguientes visiones (7:7-9; 8:1-2; 9:1-4),
El libro introduce el mensaje del profeta a través de ocho oráculos, seis de ellos
son contra las naciones circunvecinas de Israel y, las últimas dos, son para Judá e Israel:
Damasco (1:3-5); Gaza (1:6-8); Tiro (1:9-10); Edom (1:11-12); Amón (1:13-15); Moab
(2:1-3); Judá (2:4-5) e, Israel (2:6-16). Para Garret, el propósito de Amós al enlistar los
oráculos de esta manera, es atrapar retóricamente a los Israelitas al comenzar con las
Israel y su capital, Samaria.12 Los juicios hacia las naciones vecinas de Israel son por
crímenes de guerra y por su violencia extrema. Mientras que a Judá se le juzga por
11
En este punto radica uno de los principales problemas de la reconstrucción del mensaje de los
profetas. Aun suponiendo que el Amós histórico considerase el castigo algo inevitable, los redactores
finales del libro pensaban que la última palabra de Dios era de perdón y salvación para el pueblo de Israel,
dejándolo claro en el añadido final (9,14-15). Sicre, Introducción, 288.
12
Garret, Amos, 18. Al escuchar cada juicio pronunciado sobre sus vecinos, sin duda habrían
respondido con un cordial "¡Amén!", estando de acuerdo con lo apropiado del juicio sobre sus enemigos.
Incluso Judá era un enemigo, y habrían estado a favor del juicio sobre sus parientes del sur. Sin embargo,
después de proclamar el juicio sobre los vecinos que rodean a Israel, Yahvé se concentra en el principal
culpable: el propio Israel. En este punto, el coro de "¡Amén!" sin duda cesará cuando Yahvé dirija su
oráculo de juicio principal a Israel. En esencia, al incluirlos en la lista de naciones extranjeras que deben ser
juzgadas, Yahvé está tratando a Israel como una nación extranjera. J. Daniel Hays, The Message of the
Prophets: a survey of the prophetic and apocalyptic books of the Old Testament, ed. Tremper Longman III
(Grand Rapids: Zondervan, 2010, Versión Logos).
5
acusaciones en las que se detalla la injusticia de Israel como nación (2:6-8); la segunda es
una remembranza histórica de los hechos de Yahvé a favor de los israelitas (2:9-12); la
tercera es una sentencia hacia Israel, en la cual se describe la derrota del ejército Israelita
injusticias (2:13-16). La sección de acusaciones comienza con la frase “por tres pecados
de Israel, y por el cuarto” (2:6a RV60). Esta frase no tiene la intención de enumerar los
pecados de Israel, sino que, como Hays señala, esta expresión es simplemente una forma
poética de decir "Esta gente ha cometido numerosos pecados".13 Este tipo de retórica
La primera acusación es: venden al justo por monedas, y al necesitado, por un par
de sandalias (2:6b NVI). Amós acusa a la nación de “vender al justo”, Hays propone que
(1) Es [el justo] vendido como esclavo por un precio fijo de plata, e indica que no
lo merece. (2) Es vendido como esclavo porque debe algún dinero, e indica de
nuevo que no lo merece y que la pena es demasiado dura. (3) Se vende
metafóricamente en los tribunales de justicia cuando alguien soborna a los jueces
por una cantidad de plata, e indica que es inocente o está en lo cierto en el caso
judicial.14
De manera personal, quienes suscriben optan por la opción número tres, sin
Bajo este argumento, el profeta acusa al pueblo de oprimir y explotar a los justos, a los
13
J. Daniel Hays, The Message of the Prophets: Versión Logos.
14
Garret, Amos, 57.
6
pobres, a los indigentes y a los humildes (2:6-7a). De manera que, Amós parece señalar
institucionalización. No se dice mucho respecto a quienes eran los que impartían justicia
proponen que es posible que el sistema judicial en la monarquía posterior haya sido
adoptado de algunos ejemplos de Josué y los Jueces.15 En este sentido, la imagen que
emerge es una en la que Israel estaría dirigido por hombres que pertenecen a linajes
Por lo tanto, los jueces de Israel, en este caso, debieron haber sido hombres de
poder e influencia que estaban establecidos en la corte para impartir justicia entre los
ciudadanos del reino. Desafortunadamente, en (2:6b) el profeta se dirige a los jueces para
denunciarlos como personas corruptas que lucran con la justicia. Los acusa de condenar a
los inocentes a cambio de ganancias. La frase “por un par de sandalias” puede significar
dos cosas; (1) los jueces se venden por una cantidad insignificante o, (2) los pobres son
vendidos como esclavos al no poder pagar una deuda insignificante (un par de sandalias).
Sicre propone que la acusación de Amós puede estar inclinada hacia la segunda opción.
Las personas están siendo esclavizadas desde los tribunales por deudas que no justifican
tal resolución.17 Así pues, el profeta acusa a las clases dominantes, los ricos y poderosos,
15
John Rogerson, Philip Davies, The Old Testament World (York: T&T Clark. 2005), 34-35.
16
Ibíd. Estudios con énfasis sociológico han intentado especificar la realidad socioeconómica de
Israel —los mecanismos del mercado en ese mundo mayormente agrícola, las clases sociales y las tensiones
entre sí, la naturaleza del comercio internacional— a fin de ir más allá de etiquetas abstractas como la
“opresión” o la “injusticia”. Tenemos la impresión que los latifundios se habían desarrollado por
manipulación política y económica y que los patrones, quienes en esa cultura tenían la responsabilidad de
proteger a los que estaban bajo su cuidado, estaban aprovechándose de estas personas para su propio
beneficio. Carroll, Comentario bíblico contemporáneo, 10.
17
José Luis Sicre, Con los pobres de la tierra: la justicia social en los profetas de Israel (Madrid:
Cristiandad, 1984), 105-106.
7
justicia.
El profeta sigue añadiendo más delitos en contra de los jueces corruptos de Israel.
Ahora menciona que: “pisotean la cabeza de los desvalidos” (2:7a). Barton propone que,
Además, esa injusticia se traslada incluso al ámbito sexual (7b). Para Niehaus la frase
“padre e hijo se acuestan con las misma mujer” es un alusión a posibles relaciones
incestuosas.19 Sin embargo, Barton argumenta que esta expresión debe leerse dentro del
explotación de esclavos. De esta manera, este tipo de mujeres que se menciona aquí,
una relación incestuosa no necesariamente se tiene que eliminar, sino que, siguiendo la
sexual..21
toman la ropa de los pobres como prenda y el vino que les cobraban como multa para
emborracharse en los altares de sus dioses (RV60). Niehaus comenta que, la perversión
18
John Barton, The Theology of the Book of Amos, eds. Brent A. Strawn, Patrick D. Miller
(Cambridge: Cambridge UnivPara Nersity Prees, 2012), 78-79.
19
Niehaus, “Amos”, 1:366.
20
Barton, The Theology of the Book of Amos, 79.
21
Walter J. Houston, Contending for Justice: Ideologies and Theologies of Social Justice in the
Old Testament (York: T&T Clark, 2006), 61-62. El profeta fustiga a los señores que se aprovechan de las
criadas a su servicio, abusando de su situación privilegiada. La afirmación «un hombre y su padre» pondría
de relieve la humillación continua de esas muchachas impotentes. En este sentido, es interesante el dato
aportado por Dürr: las leyes hititas conocen este hecho, pero no lo castigan: «Cuando un padre y su hijo
tienen relaciones con una esclava o una prostituta no hay motivo para condenarlos» (II, 80). Amós, en
contra de la práctica admitida en otro pueblo y difundida en Israel, denuncia con energía esta humillación
de los débiles. Sicre, Con los pobres de la tierra, 111.
8
de los jueces es tanta que abusan hasta de las cosas que les han quitado a los pobres y
oprimidos recostándose sobre los mantos de los pobres, que así no tienen con qué
abrigarse por la noche.22 Algunos autores señalan que el vv. 8 alude a un tipo de
prostitución religiosa de índole sexual23. Garret piensa que, en el contexto, donde hay
actividad sexual en un santuario, la idea puede ser que los hombres no quieren ensuciar
sus propias ropas usándolas como sábanas para tener sexo, y por eso usan la capa del
Irónicamente, la cuna de las injusticias está donde se supone que se debe impartir la
injusticia social. Los jueces aceptan sobornos que perjudican a los que menos tienen.
Amós no se calla ante esto y emite denuncias y juicios de parte de Yahvé. La aparente
prosperidad que vive la nación ha sido el resultado de sus maldades en contra de los que
menos tienen. Sicre enumera siete pecados señalados por el profeta en este oráculo: 1)
desprecio hacia la persona del deudor; 2) esclavitud por deudas ridículas; 3) humillación
y/u opresión de los pobres; 4) desprecio hacia los humildes; 5) abuso de los débiles; 6)
las multas).25
22
Niehaus, “Amos”, 1:367.
23
Sicre comenta que, esta acusación sitúa el ambiente de una comida en honor a la divinidad,
celebrada en el templo. Además, sugiere que no hay motivo para entender esto como una referencia a
«templos paganos». Más bien se debe pensar en santuarios como los de Betel, Dan, Samaría, etc. Sicre,
Con los pobres de la tierra, 112.
24
Garret, Amos, 63.
25
Sicre, Con los pobres de la tierra, 113.
9
Con la libertad que el reino del Norte bajo el mando de Joás había logrado, la
económicas como la agricultura, la industria textil y el tinte, se consolidó una era gloriosa
social profunda y desgarradora que se vería reflejada en las enormes distancias entre la
clase rica y la clase pobre.27 Sicre dice que: “A pesar de su aparente paz y prosperidad,
era una sociedad sumida en el terror, en una guerra civil encubierta”.28 Amós no condena
pecados concretos, sino el resultado de estos: la brecha económica y social entre ricos y
pobres.
Carroll señala que el lenguaje del profeta en la sección 3:1-4:3 tiene un tinte de
también anuncia las razones del mismo.30 El lujo, hedonismo e indiferencia son las que
salen a relucir. El lujo que yacía en el pueblo de Israel en sí mismo no era la razón de la
condena, de hecho, como dice Von Rad, “...ningún precepto prohibía yacer en lechos
lujosos o ungirse con perfumes costosos”.31 Más bien, se condena el contraste entre el
lujo y prosperidad con la falta de compasión hacia las clases más bajas del estrato social;
26
Luis Alonso Schökel y José Luis Sicre, “Amós”, en Profetas II, eds. Luis Alonso Schökel y José
Luis Sicre (Madrid: Cristiandad, 1980), 952.
27
Fernando Mosquera, El Señor de la historia, ed. Ramón Nieto (Bogotá: AMAI, 1996), 74.
28
Sicre, Con los pobres de la tierra, 142.
29
Carroll, “Amós”, 12.
30
Sicre, Introducción, 284.
31
Gerhard von Rad, Teología del Antiguo Testamento, séptima edición, trad. Fernando Carlos, ed.
Luis Alonso Schökel (Salamanca: Sígueme, 2000) 2:175
32
Jennifer Porras Pabón, “El concepto de justicia desde la mirada de Amós” Ventana Teológica
14 (2019): 23.
10
permite estar en una situación de privilegio a costa de los pobres. Los pasajes que se
estudian en esta parte (3:1-3; 4:1-3) tienen un punto unificador: las personas “no saben
hacer lo recto” (3:10). Y, desde el punto de vista de Amós, “lo que atesoran los ricos en
sus palacios no son “arcas de marfil” (3:15) ni “cobertores de Damasco” (3:12), sino
sufrimiento.
La última parte de esta sección (4:1-3) inicia con la identificación del enunciado:
“vacas de Basán”, que no son más que “las mujeres de la élite” de quienes Amós se burla
al identificarlas como animales.34 Ellas muestran un hedonismo sin ética porque disfrutan
Amós no se limita con la denuncia, también lanza el castigo hacia estas mujeres que
“serán llevadas como peces en una cubeta”.35 Carroll dice que este mismo destino es el
mayoritaria, por causa de los líderes, todo el pueblo era culpable de pecado y sufriría el
exilio. Sin embargo, los líderes tenían una mayor responsabilidad en esta “estructura de
opresión y la injusticia, los opresores creían que este estilo de vida era compatible con su
33
Sicre, Introducción, 285.
34
Carroll, “Amós”, 13.
35
Ibid.
36
Mathias Nebel dice: “El pecado estructural, aunque no es un tema para nada nuevo si está
olvidado. Hablar de esta manera tiene varios conflictos, uno de ellos es que choca con la concepción
tradicional que se tiene del pecado y otro porque despierta de nuevo la dimensión política de la fe”. Para
una mayor comprensión de pecado estructural véase https://www.youtube.com/watch?v=boujSWTsWHM
37
Carroll, “Amós”,13.
11
profeta los motiva a que sigan con sus peregrinaciones a Bet-el y Gilgal y ofrezcan sus
que lo que el profeta les estaba queriendo decir era que fueran a pecar a los santuarios
históricos.40 Las visitas a los santuarios en lugar de agradar a Dios solo sirven para pecar
y aumentar los pecados, por esa razón Dios manda a rechazar enfáticamente esto a través
de su profeta.41 Pero ¿cómo pecaban si estaban “adorando” a Dios? Las ceremonias que
enumera Amós no tienen nada que ver con el pecado; son ofrendas de agradecimiento, así
que el pecado no se encontraba en las ceremonias en sí, sino en que “...todo lo hacían
El Señor no quiere que cumplan con las pautas de la vida religiosa, aunque
parezca contradictorio con todas las leyes referidas a los sacrificios, ofrendas y
holocaustos. Él quiere derecho y justicia.43 Así que Dios por medio de Amós denuncia
que la injusticia que reinaba en su pueblo era totalmente incompatible con la vida
religiosa y demanda que el culto corresponda a una vida ética y comprometida con los
38
Sicre, Introducción, 285.
39
Carroll, “Amós”, 13.
40
Ibid.
41
Sicre, Introducción, 285.
42
Carroll, “Amós”, 13.
43
Sicre, Introducción, 285
12
caracterizan a menudo como términos jurídicos, una visión general de los términos tal y
como se utilizan en los libros proféticos indica que estos conceptos son indicativos de las
expectativas de Dios para su pueblo con respecto a todos los aspectos de la sociedad.44
Dicho de otra manera, la justicia desde el lenguaje de los profetas tiene implicaciones no
solo en los asuntos legales, sino también en la corte real, los aspectos del culto y el
bienestar de la comunidad.45
Hay dos términos hebreos para hablar de justicia y derecho. (1) sedeq = “justicia”
que aplicado con sentido individual a una “persona justa” (en hebreo: sadik) tiene
principalmente el significado de ser íntegro, honrado, recto; mientras que aplicado con un
término hebreo para justicia es mishpat que se aplica frecuentemente en el campo político
normas y leyes justas.47 Ambos términos están relacionados íntimamente, por lo que es
44
Elizabeth R. Hayes, “Justice” en Dictionary of the Old Testament Prophets, eds. Mark J. Boda,
J. Gordon McConville (Downers Grove: InterVarsity Press, 2012), 466.
45
Ibíd.
46
Samuel Almada “Biblia y Teología para trabajar por la justicia y la paz en el mundo actual Un
concepto de justicia desde la perspectiva bíblica” en La Justicia y la cuestión del otro vulnerado:
Acercamientos multidisciplinares en diálogo con la Teología, eds. María José Caram, María Alejandra
Leguizamón (Valencia: Tirant lo Blanch, 2019), 39.
47
Ibíd.
48
Luis Alonso Schôkel, Diccionario Bíblico Hebreo-Español (Madrid, Trotta, 1994), 764.
13
jueces contra los más pobres y frágiles de la comunidad (5:7.10-11); contra el falso culto
justicia (5:21-24); contra el lujo y la falsa seguridad de los ricos y poderosos que no les
hacen su fortuna a costa del hambre y sufrimiento de los pobres (8:4-8); contra la religión
poder político (el rey de Israel) para asegurar un proyecto oficial excluyente y opresivo
(7:10-15). Con base en esto, el mensaje de Amós debe entenderse como un llamado a
Israel para que transforme toda su injusticia social y falta de sinceridad religiosa en
tierra la justicia” (5:7 NVI). Él señala que las estructuras sociales están corrompidas a tal
punto que los frutos de la justicia son amargos como el ajenjo.50 Sicre menciona que la
sociedad debía estar basada en estos dos pilares; el derecho y la justicia: ya que el
89,15; 97,2) y consideraban que éstas eran cualidades esenciales del rey (Sal 72).
«Derecho y justicia» es lo que Dios hace (Sal 99,4), lo que Dios ama (Sal 33,5), lo que
en ajeno, el profeta quiere decir que las clases opresoras de su tiempo pervirtieron la
49
Patrick Kofi Amissah, “Justice and Righteousness in the Prophecy of Amos and Their
Relevance to Issues of Contemporary Social Justice in the Church in Ghana” (tesis de PhD, King´s College.
2013), 70.
50
Haroldo Reimer, “Amós, profeta de juicio y justicia”, RIBLA 35-36 (2000): 162.
51
Sicre, Con los pobres de la tierra, 126.
14
pobres, la administración injusta de la ley creaba amargura y sufrimiento. Amós les dice
que ellos odian a quienes defienden la justicia y detestan al que dice la verdad (5:10).
Estas personas aman oprimir a sus semejantes. Las acusaciones lo confirman: pisotean al
desvalido y les imponen impuestos injustos (5:11); oprimen al justo, les piden sobornos y
en los tribunales condenan a los necesitados injustificadamente (5:12). Toda esa maldad
ha causado que los sabios mejor opten por quedarse callados (5:13).
justicia impere desde los tribunales (5:14-15). El arrepentimiento tiene que ver con un
festividades religiosas y sacrificios serán sin sentido, puesto que Dios no está dispuesto a
aceptarlas (5:21-23). Amós vuelve a pronunciar lo que Dios espera de la nación: “pero
que fluya el derecho como las aguas, y la justicia como arroyo inagotable” (5:24). Es un
llamamiento a la clase dirigente y a los individuos para que apoyen a los vulnerables de la
seres humanos. No es necesario, por tanto, restringirla a una única acción divina. En la
justicia social que Yahvé decreta y espera que las personas con autoridad y con recursos
establezcan.54 En este sentido, Amós insta a los Israelitas a buscar la justicia social,
porque esta es una manifestación de la justicia divina que gobierna el mundo. La exégesis
52
Niehaus, “Amos”, 1:418.
53
Amissah, “Justice and Righteousness, 152.
54
Ibíd., 155.
15
judía, y la predominante entre los modernos, aduce el paralelismo con otros textos
bíblicos (Os 6:6; Mi 6:6-8; Is 1:10-20).55 Por ejemplo, Isaías dice: ¡Lávense, límpiense!
¡Aparten de mi vista sus obras malvadas! ¡Dejen de hacer el mal! ¡Aprendan a hacer el
sociedad. Sin embargo, la corrupción obstaculiza e imposibilita que dicho fin sea
del poder para beneficio propio”.56 Lo cual implica el desvío en el uso o ejercicio de un
beneficio personal o de ciertos grupos, afectando el interés o bien común.57 Así que la
corrupción es una de las mayores muestras de injusticia en nuestra sociedad actual porque
55
Sicre, Con los pobres de la tierra, 131.
56
Transparency International, Informe global de la corrupción 2009: Corrupción y sector privado
(Nueva York: Cambridge University Press, 2009), 3.
57
OXFAM, La corrupción: sus caminos, su impacto en la sociedad y una agenda para su
eliminación (Guatemala: Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, 2015), 9.
58
Ibid.
16
el rango 149 de 180 países en su Índice de Percepción de Corrupción (IPC) dándole una
puntuación de 25/100, lo cual deja ver la gravedad del problema. De los países de
(15/100) tienen una menor puntuación.59 La puntuación que ha recibido Guatemala en los
últimos años se debe primero, a que desde 2019 el gobierno de Jimmy Morales tomó la
dos meses después de ser investido el 14 de enero del mismo año. Ante la crisis sanitaria
préstamos millonarios para paliar dicha crisis. El monto asignado a nueve ministerios,
seis secretarías y tres dependencias del Estado suma una cantidad de más de Q11 mil
millones.61 Si bien es cierto que heredó un sistema de salud colapsado, se ha hecho poco
o nada para su mejoramiento y así poder brindar servicios de calidad que suplan las
59
Transparencia Internacional, Índice de percepciones de corrupción 2020
https://www.transparency.org/en/cpi/2020/index/nzl (21 de junio de 2021).
60
L. Sapalú, F. Montepeque “Guatemala entre los cinco países más corruptos en América”
https://elperiodico.com.gt/nacionales/2020/01/24/guatemala-entre-los-cinco-paises-mas-corruptos-en-ameri
ca/ (21 de junio de 2021)
61
Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales, 7
62
Ibid
17
(MP) junto a la Policía Nacional Civil (PNC) realizó varios allanamientos con el fin de
Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) quien ejerció su cargo durante la crisis de la
adquirió 20,000 batas “esterilizadas”, que serían utilizadas en el Hospital de Villa Nueva,
por un monto total de Q1.3 millones. Sin embargo, por medio de pruebas de laboratorio
se comprobó que las batas sobrevaloradas en Q65 (precio por unidad) no estaban
esterilizadas. 63
Este caso solamente muestra que ni aun la crisis existente en el país derivada de la
covid-19, hizo que la corrupción menguara, por el contrario, muchos vieron en ella una
humanas. El ICEFI dice que: “la corrupción impacta las vidas de las personas vulnerables
sin acceso a un servicio esencial... en los casos más graves, la corrupción también
institucionalidad. Ellos “se acuestan en la ropa de los pobres” (Amós 2:8a). Es decir,
hacen mal uso de los impuestos, multas y presupuestos destinados para mejorar, en este
63
María España “Develan el caso Corrupción en tiempos de Pandemia”; buscan capturar a
exviceministro de Salud”
https://lahora.gt/develan-el-caso-corrupcion-en-tiempos-de-pandemia-buscan-capturar-a-exviceministro-de-
salud/ (21 de junio de 2021).
64
OXFAM, La corrupción, 23.
18
Aplicaciones y conclusiones
debía acudir a ellos para saber la voluntad de los dioses, esto no era diferente en la cultura
mantener contacto con el pueblo, ya que Dios le encomienda una misión hacia sus
El profeta mantenía una relación estrecha con el rey, aunque generalmente estas
El monarca necesitaba el refrendo del profeta, que era más que un simple respaldo
moral. Por otra parte, el profeta, con capacidad de elegir reyes y dinastías, no
disponía de un poder político equivalente al del rey. En el fondo existía siempre
un conflicto de poderes —uno religioso, otro político—, que era fuente de
innumerables tensiones y sospechas.69
El profeta sostenía relaciones difíciles con los sacerdotes y con los diversos
grupos sociales. Por ejemplo, cuando denunciaban la injusticia, mencionaban a los jefes
políticos y militares, a los oficiales reales y ancianos, a los jueces, a veces bajo títulos que
los engloban a todos ellos. De igual manera, se pronunciaban en contra del ejército y la
corte cuando se trataba de asuntos de política interior o exterior.70 Por lo tanto, una de las
65
José Luis Sicre, Introducción al profetismo bíblico (Navarra: Verbo Divino, 2012), 73.
66
Ibíd.
67
Ibíd., 78.
68
Ibíd., 94.
69
Ibíd., 97.
70
Ibíd., 98.
19
acomodó al status quo y no legitimó las acciones políticas de los poderosos, sino que
resistió de manera firme a los que oprimían y explotaban a los sectores sociales
indefensos de Israel de mediados del siglo VIII a.C.71 Desde la óptica de Amós, la raíz de
los males sociales radicaba no solo en el corazón de las personas, sino también en las
estructuras de la sociedad, por eso su crítica no se dirigió solo contra las personas
concretas, sino que atacó también a aquellas estructuras sociales y a sus representantes,
que hacían posible una conducta antisocial.72 Sin embargo, Amós ya no camina de
manera física por las calles ni proclama sus oráculos por las plazas de este mundo.
Entonces, ¿quién o quiénes deben asumir ese rol profético en la actualidad? ¿Qué es lo
que Dios pide de su pueblo y de todas las personas en una América Latina rodeada de
La propuesta de quienes suscriben es que la Iglesia debe asumir este rol como
debe entenderse la denuncia del mal del pueblo de Dios y de las naciones, el llamado al
arrepentimiento, el anuncio del juicio para el pueblo de Dios y para los enemigos del
identificada como Reino de Dios.75 En este sentido, la Iglesia, al estilo de los profetas,
71
Darío López R., El mensaje de los profetas: una verdad pública (Lima: Puma, 2020, Versión
Scribd).
72
José Luis Sicre, “Los profetas y los problemas sociales” Proyección: Teología y mundo actual
105 (1997): 79.
73
David Suazo Jiménez, La función profética de la educación teológica en América Latina
(Barcelona: Clie, 2012, Versión Kindle).
74
Ibíd.
75
Ibíd.
20
La Iglesia, al igual que el profeta, debe ser capaz de discernir los tiempos. Es
decir, debe ser consciente acerca de cuándo es tiempo de lamentos, de llantos, de gozo, de
alegría, de denuncia y de acción. Dios hablaba a través de los oráculos proféticos. Desde
el lente de los profetas, Dios se preocupa por las personas que padecen injusticias, por los
pobres, por los débiles, por los que pasan hambre y sed, por los que están desnudos y
encarcelados, sobre todo en una sociedad en la que todos o la mayoría tienden a ponerse
corrupción e injusticia que imperan desde las altas esferas del poder. Los casos de
impunidad desde los tribunales de justicia siguen siendo un problema que hace que la
destinados para ayudar a los pobres, el soborno, los inocentes que son condenados, los
activistas que son silenciados con la muerte, los feminicidios, el racismo, etc., están a la
76
Walter Brueggemann, La imaginación profética, quinta edición, trad. Jesús García (Santander:
Sal Terrae, 1986), 60.
77
Sicre, “Los profetas y los problemas sociales”, 80.
21
Una Iglesia profética debe sacudir las conciencias y persuadir a su audiencia hacia
un cambio radical. Debe señalar las injusticias y a los responsables y enfatizar que el
estilo de vida que rechaza la justicia es inaceptable para Dios.78 No se trata de generar o
inspirar una revuelta de parte de los oprimidos, sino de convertir a los opresores.79 Tal
como Amós lo menciona: “busquen el bien y no el mal... ¡odien el mal y amen el bien!
Hagan que impere la justicia (Am 5:14-15). El profeta Amós no claudicó del encargo
recibido por Dios, a pesar de que lo amenazaron. No amordazó las palabras de Dios.80 El
contraste es evidente cuando se analiza la posición de Amasías, quien se puso del lado de
los opresores (7:10-11) e intentó callar al profeta enviado por Yahvé (7:12-13), lo que era
importancia, pertinencia y relevancia que el mensaje del profeta Amós tiene para los
diversos escenarios en los que se puede encarnar la injusticia social. De igual manera, se
una realidad cotidiana que identifique a la Iglesia de Dios. El mensaje del profeta no debe
entenderse desde una perspectiva espiritualizada que siga justificando la apatía ante los
tiempos de Amós no debe caracterizar a la Iglesia evangélica del siglo XXI. Las palabras
de Yahvé siguen resonando en cada rincón de las diferentes sociedades: ¡pero que fluya el
derecho como las aguas, y la justicia como arroyo inagotable! (Amós 5:24).
78
Ibíd., 81.
79
Ibíd.
80
López R., El mensaje de los profetas, Versión Scribd.