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1 de Pedro 2:2 “ desead como niños recién nacido la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis
para salvación “
Hay muchos versículos que podemos encontrar en la biblia que nos enseñan la relación que existe entre la
palabra de Dios y los creyentes. Pero creo que hay uno en especial que nos muestra de manera única y vivida
esta relación. Desear la palabra de Dios como un niño de pecho desea la leche de su madre es la figura que el
Apóstol Pedro usó para motivarnos a ser dependientes de la hermosa y poderosa palabra de Dios.
A modo de introducción al discipulado primero debemos decir la importancia de la Biblia, ya que es nuestro
manual para conocer a Dios.
El nombre “Biblia”, viene del griego “biblión” que significa, “colección de libros” o “rollos”. La Biblia es una
biblioteca que está compuesta por 66 libros, los cuales se dividen en 2 partes; El Antiguo Testamento
(compuesta por 39 libros) y el Nuevo Testamento (compuesta por 27 libros). Estos libros fueron escritos por 40
autores de distintas clases sociales, distinta educación y distintas ocupaciones.
2 Timoteo 3:16 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir,
para instruir en justicia”.. El propósito de Dios al inspirar Su Palabra es revelarse al ser humano para que éste
conozca los planes que Dios tiene para su vida.
2 Timoteo 3:16
Pero ¿a que nos referimos cuando decimoscimos que la palabra escrita fue inspirada por Dios? Debemos saber que
los autores de los distintos libros que forman este gran libro al que llamamos La Biblia, fueron autores
humanos, y como seres humanos también sabemos que fueron falibles, es decir, que están sometidos a la
posibilidad de fallar o equivocarse. Entonces ¿debemos decir que este factor le resta autoridad y credibilidad a
la palabra de Dios como algunos afirman? La
biblia es en rigor una colección de 66 libros ordenados en dos partes llamado
llamadoss antiguo y nuevo testamento, fue
escrita por 44 autores distintos en un periodo de 1500 años. La iglesia, desde sus inicios a creído y
enseñado que cada uno de los autores de los distintos libros de la biblia, fue milagrosamente inspirado por el
Espíritu de Dios, es decir, fue Dios mismo quien puso sus palabras, ideas, y argumentos en el corazón de ellos
cuando escribieron los “autógrafos originales” (pergamino o manuscrito original que fue escrito físicamente
por el
autor inspirado). La inspiración de Dios tiene que ver con el soplo del aliento de Dios sobre la mente y corazón
de la personas, la cual es llevada a conocer, entender y aceptar lo que Dios le está hablando en lo profundo de
su ser. La inspiración no anulaba a la persona, no la hacía entrar en algún tipo de trance ni la movía
mecánicamente para que hiciera algo de lo cual no estaba consciente. Los escritores de la palabra de Dios
fueron hombres muy distintos entre ellos, de toda esfera social, económica e histórica. De cada uno de ellos
Dios permitió que sus vivencias y experiencias personales le dieran un matiz y un valor sin igual a sus escritos.
Los autores inspirados por Dios, en su mayoría no se conocieron entre ellos ni se pusieron de acuerdo para
escribir sus obras, sin embargo, y de manera gloriosa y maravillosa, sus obras no se contradicen ni se refutan
entre sí. Podemos ver el poder y la veracidad de Dios en cada una de ellas. Creemos también que Dios no solo
inspiro las ideas o conceptos generales de la escritura, sino que también inspiro cada letra y palabra que fue
escrita. Veamos lo que nuestro señor Jesús dijo acerca de esto;
Podemos ver que para nuestro señor Jesús, cada palabra, letra, coma o tilde de la palabra de Dios, tienen
autoridad debido a que han sido escritas bajo la inspiración del único Dios verdadero. ALELUYA!!!
Si decimos que la palabra de Dios fue escrita bajo la inspiración de Dios, entonces reconocemos que su autor
es Dios. Este argumento entonces es suficiente para decir que la palabra escrita de Dios es la última y más alta
autoridad por la cual se debe guiar la iglesia como comunidad y el creyente en su vida personal. Cada idea,
razonamiento, doctrina y enseñanza deben estar de acuerdo con lo que Dios ha dicho en su palabra.
Dato histórico: Martin Lutero y La Reforma Protestante. (Hacer referencia para que ellos puedan realizar una
breve y pequeña investigación como tarea)
La autoridad de la palabra de Dios se sustenta en:
La autoridad de los profetas y Apóstoles: Los escritores del antiguo testamento fueron la gran mayoría
hombres que fueron llenos del espíritu de Dios para realizar proezas y milagros inigualables. Las
señales y milagros son un medio que Dios usa para avalar a la persona que él ha escogido con un fin
específico.
La autoridad de Jesús: El mismo señor Jesús, el cual es nuestra más grande revelación de Dios en si
mismo declaró
Jesús tuvo que enfrentar el acoso de Satanás cuando se encontraba ayunando en el desierto. Mateo capitulo
4:1-11. En esta oportunidad vemos como la defensa del Hijo de Dios contra el tentador y enemigo de Dios fue:
Porque escrito está!!! ALELUYA!!!
La palabra de Dios tiene autoridad para reprender incluso al más grande enemigo de la humanidad.
La Palabra de Dios es el medio por el cual crecemos y llegamos a ser un cristiano firme (1 Pedro 2:2). Dios es el
autor de la Biblia y a medida que leemos su Palabra aprendemos más sobre Él y cómo vivir una vida que lo
glorifique.
• Quién lo dijo?
• ¿A quien lo dijo?
• ¿Cuándo lo dijo?
• ¿Cómo lo dijo?
• ¿Por qué lo dijo?
• ¿Desde donde lo dijo?
• ¿Qué palabras uso para decirlo?
Tarea
1. Qué hace Dios: anota todo lo que veas que Dios hace en el pasaje (aún las cosas pequeñas, tales
como, caminar, hablar y curar)
2. Quién es Dios: anota atributos y características que este pasaje revela de Dios (ej. Santidad,
misericordia, gracia, justicia, etc)
3. Cómo trabaja Dios: anota que aprendiste sobre la forma en la que Dios trabaja (planes,
preocupación sobre mi felicidad, más interesado en el bienestar espiritual que físico, etc.)