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3.- Conocerte
(Monologo parte 1)
(Monologo parte 2)
10.- Amnesia
Los edificios en ruinas, que serán el «parking» de los turistas, se vuelven una obra de arte de la
decadencia de un pueblo preso de su avaricia.
Las avenidas llenas de coches son un espectáculo de luces y sonidos, cómo en un concierto de
tu artista favorito.
Todo se llena de sentido, los cafés son, ahora, «sets» de películas en las que tú y yo somos los
protagonistas y aquí no existen los políticos corruptos ni los policías vendidos y comprados por
gente que mata y desaparece gente y todo, todo, contigo, se vuelve una revolución.
San Juan se vuelve arte porque tú pintas todo de colores, porque mis niveles de serotonina se
disparan hasta el cielo como cohetes en las fiestas, porque corre el arte por tus venas.
De paz y de esoterismo.
Esto no iba a ser un poema de amor, sería un poema hablando de mi tierra y de lo que se vive
desde aquí, pero no puedo hablar de aquí sin hablar de ti y de cómo todo va mejor desde que
te conozco.
de acomodarse el cabello,
un par de pantalones
Es amante de la cafeína
y odia el cigarrillo.
la delantera.
cicatrices,
lo que siente.
en los escaparates
con hielos.
de acomodarse el cabello
y a mí que me sobran las razones,
sobre mi pecho.
Fue volver a sonreír por las pequeñas cosas y descubrir que el cielo comienza en tus pies y
termina en tu boca.
Sentir como un escalofrío recorre mi cuerpo cuando me miras y ríes y bailas, cantas y llenas
todo de ti.
Huele a ti la primavera, al dulce de tu perfume que llevo impregnando hasta los huesos, al café
de tus ojos y lo canela de tu piel.
Me vas a doler,
lo sé,
y lloraré a mares
Está decidido:
´5.- Te quise tanto que me derrumbo todavía, de vez en cuando, para que mi soledad no te
alcance.
Me contengo las ganas de llamarte a medianoche para saber si todavía queda algo de mi en ti
y el insomnio trae consigo una esperanza de que vuelvas.
Me hago daño cada vez que te pienso y estoy seguro de que así no se siente el amor.
A no verte despertar a mi lado, a que el nunca se atraviese y crezca como un muro que trunca
sueños, que corta alas, que apaga el fuego.
Quizá siempre fui el equivocado y fui solo yo quién te quiso tanto... tanto.
Maldita primavera.
Te necesito.
No quiero.
Lo siento,
No quiero saber
y no vuelvas
que la vida no ha ido mal, pero, después de ti, sólo me quedaron los amigos de siempre, los
vicios que no logro vencer y una ciudad que cada vez parece más un cementerio.
Conseguí un depa y la "libertad" que siempre quise, sólo qué, no es la libertad con ataduras al
pasado no se vive igual.
Arrumbé mi guitarra y conseguí un trabajo de oficina, escribo sólo algunas veces, cuándo la
bruma se me sube hasta los ojos y ruedan por mis mejillas plegarias a dioses que no existen.
De haber sabido que lo nuestro duraría tan poco comparado con la vida que pretendía,
hubiera aferrado mi mano a la tuya aquella tarde...
No hay mucho que contarte, la soledad sigue siendo igual de cabrona cómo en aquel poema
que te escribí.
Sé qué estás con alguien, lo vi en un post de alguna red social, te veías tan bien con tu vestido
blanco, que pasó por mi cabeza, como una bala mortal, la idea de que pude haber sido yo
quién estaba junto a ti.
Hay veces que me despierto contigo en el pensamiento y no te vas, eres cómo ese fantasma
que me persigue a dónde voy.
Adiós.
no se atreverían a preguntar,
Ella jamás buscará solucionar un problema, su orgullo es más fuerte, pero flaquea rápido sí la
solución la pones tú.
En contra parte, cumple siempre las tuyas, no soporta que no cumplan (si, es complicada, pero
con el tiempo la vas a entender y aprenderás a estar con ella).
En cuestiones de habitación a veces le gusta tomar el control, pero le gusta más que le
dominen.
Si te pide dividir la cuenta, acepta, no estará conforme hasta que te haya devuelto la mitad de
lo pagado.
Llámala princesa.
En cuestiones musicales le gusta de todo un poco, pero, consejo aparte, dedícale a Río Roma u
Oceransky.
Baila con ella, aún si no sabes, hazlo, vale la pena por verla sonreír.
Dale siempre la razón. Acaricia sus mejillas y sus labios, suave con el pulgar y se sonrojará
10.- Amnesia
Hablo en serio.
Hablo directo,
no insistir.
Mi mente te ha bloqueado,
no me llega al corazón.
o cambiar de libro,
sin remordimientos,
el nudo en la garganta,
el invierno.
y no mirar al pasado,
lejos de tu cuerpo.
a lado mío?
Pero ¿Cómo?
De Sabina escuché que para comenzar a aprender a olvidar se necesitaban 19 y 500 noches.
¡Vaya putada!
Estoy triste, claro, pero ella no tiene por qué estar en donde no cree pertenecer.
De Sabina, también aprendí que no hay finales felices, que los finales siempre duelen.
13.- Epílogo: