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EXAMEN MODELO.

TEXTO Y MORFOLOGÍA

Resulta que el pasado domingo se celebró el Día Mundial Sin Automóvil, una cita que se
hace oficiosa en 1994 tras una conferencia en el Congreso de Ciudades Accesibles (Conciuble) que
tuvo lugar ese año precisamente en Toledo. No pasa nada, todos los días hay un Día Mundial de
algo y todo el mundo puede instaurar una efeméride en apoyo de aquello que considera
conveniente. En este caso, el motivo fue la supuesta necesidad de reducir y si es posible eliminar el
uso del automóvil, con la excusa de su contribución a la contaminación y el calentamiento global, y
como responsable principal del cambio climático. Esta gente aspira a una especie de Arcadia en la
que el ser humano vivirá en comunión con la naturaleza, sin malos humos y en el que el futuro se
construirá pedaleando. Los únicos vehículos posibles serán la bicicleta, los patines en línea y las
carrilanas. Para los promotores del día sin coche no significa nada la contribución del automóvil al
desarrollo de la humanidad, la revolución de las comunicaciones, el turismo, la autonomía
individual. Esto es, no importa que se trate de una industria que da trabajo a cientos de miles de
personas. Ni que, además, en los últimos años los fabricantes hayan invertido sumas millonarias en
la búsqueda de soluciones de movilidad alternativas a los motores de combustión. No: ellos quieren
un mundo sin coches.
Entonces, ¿por qué no empezamos a abogar también por un mundo sin aviones? ¿Y sin barcos,
ni trenes? ¿Y sin calefacción? ¿Y sin vacas y otros animales -ya lo sugirió la ONU- que tienen la
mala costumbre de expeler gas metano sin pedir perdón? Y sin móviles, claro. ¿Saben los anti-
coches que los centros de datos necesarios para mover el tráfico de su Gmail, su WhatsApp, su
Instagram, su Netflix y sus billones de fotos y vídeos almacenados y descargados están
consumiendo el 2 % de la energía mundial? Que vuelvan a los árboles, yo no quiero un mundo sin
coches. (Javier Armesto, La Voz de Galicia, 26/09/2019).

1. Resume con tus palabras el contenido del texto.


2. Localiza en el texto al menos cuatro mecanismos que le otorguen cohesión al texto y
explícalos brevemente.
3. Fíjate en los cuatro verbos subrayados y clasifícalos.
4. Indica a qué clase pertenecen las palabras sombreadas en el texto. Tu respuesta debe ser lo
más completa posible.
5. Localiza en el fragmento cuatro palabras derivadas, señala sus afijos e indica su significado.
6. Explica el fenómeno de formación de palabras mediante siglas o acrónimos tomando para
ello ejemplos del texto.
7. Construye un texto coherente que contenga los siguientes elementos (que deberás indicar
convenientemente): una palabra parasintética; un verbo en presente de subjuntivo; dos
palabras que contengan alomorfos de un mismo morfema.
8. Analiza morfológicamente las siguientes palabras explicando cómo ha sido su evolución:
DESENMARCARADO; ANTROPOMORFO; HISPANOAMERICANO; LLEGASTEIS;
ESCRIBIERAN.
9. Compara los siguientes pares de palabra. Explica en qué se parecen y en qué se diferencian:
CAMISÓN / MONZÓN
EXTRAÑO / EXTRAGRANDE

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