La demencia

La demencia no es considerada como enfermedad específica, sino como un grupo de

trastornos caracterizados principalmente por el deterioro de una o dos funciones cerebrales,
es provocada por el daño o pérdida de las células nerviosas y sus respectivas conexiones en
el cerebro. Los síntomas dependen del área cerebral dañada por lo que puede afectar de
distintas maneras a cada individuo que la presente, las áreas que pueden verse
comprometidas para considerar una demencia son:

 Memoria
 Comunicación y lenguaje
 Capacidad de concentrarse y prestar atención
 Razonamiento y juicio
 Percepción visual

Esta condición comúnmente ocurre a una edad avanzada por lo que es poco frecuente en
personas menores de 60 años y el riesgo de padecerla aumenta a medida que envejecemos.
Los principales signos para entrar en alerta son:

 Perderse en lugares donde frecuenta (su barrio, villa o población, camino al trabajo,
etc.)
 Pierden noción del tiempo o época en la que están.
 Dificultad para recordar el nombre de un familiar o persona cercana.
 Comportamiento irracional o conductas contradictorias.
 Dificultad para completar tareas o actividades cotidianas de manera independiente.

Aun se investigan más posibles causas o factores que aumenten el riesgo de la demencia
pero entre las estudiadas podemos encontrar: la edad, donde se considera un gran factor de
riesgo en adultos mayores al estar en proceso de deterioro cognitivo por el envejecimiento.
Antecedentes familiares, aumenta la probabilidad de presentar demencia si hay historial
genético en la familia. Lesión cerebral traumática con secuelas en funciones cerebrales o
por una deficiencia cardiaca que limite el porcentaje de oxígeno en el cerebro.

Rudolf Jan Slaby resaltaba que para acceder al tratamiento de las demencias, se debe
diagnosticar las que son susceptibles de tratamiento, con miras a la remisión o a la
detención de la sintomatología. Es decir, serían tratables las demencias reversibles o
seudodemencias; tales como: las causadas por aneurismas intracraneales, hidrocefalia
normotensiva, endocrinopatías, infecciones cerebrales, angiomas cerebrales, anoxias
cardiorrespiratorias, absceso cerebral, hematomas subdurales, desequilibrio electrolítico,
entre otras. Actualmente no se lleva el diagnostico únicamente al lado clínico mediante
pruebas de laboratorio o de imagenologia sino que también se le da énfasis a los factores
externos y se puede llegar a la conclusión de una demencia mediante test de funciones
cognitivas, actividades funcionales, memoria, razonamiento, resolución de problemas o test
neuropsicológicos.

Si mencionamos como interviene la psicopedagogía en la demencia hablamos básicamente

de estimulación, el abordaje psicopedagógico se basa en ralentizar el proceso de
deterioración progresiva a nivel cognitivo del usuario con diagnóstico de algún tipo de
demencia (entre ellas destacamos: enfermedad de Alzheimer, demencia vascular, demencia
con cuerpos de Lewy, demencia fronto -temporal, demencia temporal con causas
reversibles y demencia mixta).Por lo cual las sesiones se basan en realizar tareas,
actividades o juegos que potencien y preserven las capacidades conservadas del
paciente ,identificar los deterioros presenten y perturbaciones del proceso demencial.

¿Qué es la demencia? Division of Population Health, Centros para el Control y la

Prevención de Enfermedades (2019, diciembre 19). De
https://www.cdc.gov/aging/spanish/features/dementia.html.

Amarista, Félix José. (2002). Demencia. Gaceta Médica de Caracas, 110(3). Recuperado en
10 de septiembre de 2023, de http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0367-
47622002000300003&lng=es&tlng=es.