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Introducción
El 22 de julio de 2020 se aprueba en el Congreso de la República el proyecto de Región
Metropolitana Bogotá- Cundinamarca (RM), el cual ahora entra a ser parte de una nueva
institucionalidad que determinará el ordenamiento de los municipios que la integren, esta fue
aprobada a través del acto legislativo 02 el cual modifica la Constitución Política Colombiana,
determinando lo siguiente:
Esta modificación ha contado con varios cuestionamientos por la baja participación ciudadana para
la modificación constitucional y en especial la falta de publicidad a los municipios y
territorialidades que busca integrar, pues fue leída como una imposición, ya que no fue socializada
ni concertada, por lo cual el proceso de construcción de la ley orgánica que inició en el mes de
agosto de 2020, pasó a ser un espacio para la participación en el cual afloraron varias
inconformidades y propuestas ante esta, ligadas a la preservación y cuidado de la estructura
ecológica principal entre otros temas.
La ley orgánica logra presentarse ante el congreso el 10 de agosto de 2021 con mensaje de
emergencia por parte de la presidencia de la república para ser aprobada el 1 de diciembre de 2021,
a través del proyecto 213 de 2021, con su entrada en vigencia a partir del 1 de enero de 2022. Esta
nueva figura determinará la planeación y desarrollo de la ciudad de Bogotá, el departamento de
Cundinamarca y los municipios que se asocien a esta nueva figura, generando una visión conjunta
del desarrollo territorial.
Una de las principales zonas de importancia ecosistémica en la que se vivenciaron los efectos y
toma de decisiones de la RM es la Sabana de Bogotá (SB) que es una de las regiones de mayor
importancia económica y poblacional en el país, ya que con Bogotá concentra el 19,42% de la
población del país y aproximadamente un 30% del PIB Nacional se produce allí. Albergando de
esta forma complejidades y desafíos, que requieren de una gestión directa de los municipios que
allí se encuentran y que comparten características físicas y ambientales. Es por ello que en este
trabajo se busca:
Proponer la figura de ecorregión de la sabana de Bogotá como unidad de gestión territorial desde el
enfoque de la complejidad ambiental para la Región Metropolitana.
3. Identificar los procesos relacionales presentes de forma inicial con los procesos demográficos
básicos.
Gráfico 4-1 Bases para la toma de decisión en torno al ordenamiento, esquema propio a partir de la
ley 388 de 1997 y el decreto 3600 de 2007.
Estructura natural
Dinámicas poblacionales
Ecorregión: Se entiende como una elevación de los ecosistemas a escala regional que
incluyen ecosistemas menores funcionalmente similares, los cuales son una propuesta de
planificación y gestión que encierra las diversas complejidades para la preservación de la
diversidad biológica de la zona (Mesa, Corzo, Hernández-Manrique, et al., 2016). Este
concepto se ha enmarcado en la relación estrecha con los ecosistemas acuáticos, los cuales
deben también ser manejados como determinantes de la planificación, requiriendo un
mayor énfasis en la investigación tanto en sus dinámicas ecosistémicas como las relaciones
que entablan con la cultura (Fallas, 2011; Mesa, Corzo, Hernández, et al., 2016; TNC,
2009).
Las propuestas de ecorregiones en Colombia por parte del instituto Von Humboldt parte de
una apuesta por integrar la heterogeneidad geográfica del país, siendo una de las funciones
de esta institución la zonificación hidrográfica del país, para su respectivo manejo, las
ecorregiones en el país parten de una apuesta por escalar a mayor detalle de zonificaciones
regionales en el continente, dotándolo de aspectos biogeográficos que permiten mejorar la
toma de decisiones en las áreas hidrográficas con que cuenta el país.
Bajo esta perspectiva, surge una necesidad de generar apuestas a múltiples escalas que
respondan y se conecten a la mejora de este tipo de figuras, integrando nuevas variables,
complejizando la visión biológica, con las dinámicas locales que fluyen entre la naturaleza
humana y no humana. En este sentido, una ecorregión, además de componerse de aspectos
biológicos (Naturaleza no humana), requerirá de la comprensión de aspectos sociales y
culturales (naturaleza humana) que tienen injerencia en las dinámicas ecosistémicas
presentes, proponiéndole de esta forma una mayor complejización para la comprensión
global de las dinámicas, ya que las dinámicas humanas generan transformaciones
ambientales, llegando a escalar sus acciones a niveles globales.
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La historia de la Sabana de Bogotá posee una fuerte ligazón con la historia de los
humedales y la existencia de un lago durante el periodo cuaternario, hace aproximadamente
6 millones de años la cordillera Oriental empezó su proceso de levantamiento final, que
consistía en diferentes fenómenos geológicos que hace uno 3,5 millones de años, antes de
llegar a la altura actual, existía ya un proto río Bogotá, cuyo valle y sedimentación se
encontraba muy lejos de su cauce actual, siendo Villapinzón el centro de este y se extendía
por su actual área, llegando al río Magdalena atravesando la región del Tequendama.
una laguna en la que desemboca el río Bogotá que se conecta al río magdalena por medio
de la región del Tequendama (Recordemos la leyenda de Bochica y la generación del salto
del Tequendama) esta laguna conocida como la Laguna de la Sabana o el Lago Humboldt.
(Van Der Hammen, 2003)
Para Van Der Hammen, en dicha época el enfriamiento de la tierra da inicio, dando
final al periodo del plioceno, abriendo paso a los periodos interglaciares y de glaciación, los
cuales, en el último millón de años, antes a la época actual, presentaron 10 ciclos de este
tipo. La Sabana y su lago entonces era 8 grados más frío que en la actualidad, por lo que se
puede imaginar un paisaje de páramo con presencia de glaciares a alturas menores a los
3000 m.s.n.m durante los periodos glaciales, mientras que los periodos interglaciares
aparecían condiciones parecidas a la actualidad, lo cual presentaba variaciones en el tamaño
del lago, que por precipitaciones podía crecer o reducirse generando áreas de pantanos y
turberas.
Hace aproximadamente 128.000 y 73.000 años empezó a reducirse el nivel del lago
el cual tenía profundidades de 30m en la actual zona de la ciudad universitaria (Universidad
Nacional de Colombia sede Bogotá) y profundidades de 43 a 51 metros en los municipios
de Funza, Tenjo y Subachoque.
Hace 60.000 años el clima en la sabana se hacía menos frío, pero más húmedo,
llevando a que la laguna aumentará su altura hasta los 2600 m.s.n.m, expulsando sus aguas
en grandes cantidades en la región del Tequendama. 28000 años atrás la humedad
disminuye haciendo que la laguna empiece a quedar vacía dejando suelos libres además de
surgir del fondo nuevos cerros, lo cual mostraba que el lago no se encontraba en una
superficie plana, lo cual obligó a cuerpos de agua a buscar la salida en medio de un suelo
arcilloso que dificulta la formación de su cauce, siendo el río Bogotá el que recogería sus
aguas para buscar salida hacia el Tequendama, antigua desembocadura de la Laguna. La
región empieza a recibir especies animales como los mastodontes y caballos americanos.
cordillera central, la sabana de Bogotá recibía las cenizas de estos procesos, configurándose
en ella unos suelos muy fértiles conocidos como andisoles.
▪ Pie de Monte: los cuales son la transición entre los cerros y las planicies,
presentan alta presencia de rocas y pueden contener manantiales y pequeñas
quebradas.
▪ La Planicie: es la zona del fondo del lago, con suelos andisoles en zonas
húmedas (parte central de la sabana) y suelos de tipo inceptisoles hasta
Alfisoles en las áreas más secas (norte y sur de la sabana), en zonas con bajo
drenaje se concentraban los humedales y vegetación de bosque inundable y
en donde el agua drena más bosque andino.
▪ Valles de ríos y sus afluentes: originados en los cerros, no poseen suelos
andisoles, con vegetación de humedal a su alrededor, el área de ensancha en
el sur donde el río Bogotá se une con el Tunjuelo, siendo esta un área de
bastante inundación.
Van Der Hammen (2003) identifica que, hace aproximadamente 5000 años se
encontraron evidencias de una población más sedentaria, que construyeron sus chozas, se
dedicaron a la cacería, la recolección y junto a evidencias de la pesca. Además, se
comienzan actividades como la Horticultura.
Hace 3500 años aparece el maíz como parte de la dieta y 500 años después se
identifica que este se convierte en base de la dieta de las poblaciones de la zona,
complejizando las relaciones de los pueblos allí presentes y surgiendo sociedades
organizadas por jerarquías y el desarrollo de asentamientos humanos. Previo a la llegada de
la colonización, la cultura Muisca se desarrolla en la Sabana y el altiplano cundiboyacense,
por medio de la organización de cacicazgos.
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Lo anterior llevó a la expansión de los cultivos, ligados a las dinámicas que ofrecía
el territorio, ya que en épocas de lluvia los suelos se inundaban, mientras que en
temporadas secas el recurso hídrico escaseaba, por lo que las tecnologías y prácticas de
siembra estaban ligadas en aprovechar los regímenes de inundación, al igual que la
generación de estructuras como canales para la utilización del agua y su manejo adecuado,
junto con camellones para la producción agropecuaria, mientras que los asentamientos
humanos se realizaban en zonas altas de la sabana poco inundables.
Imagen 4-3 Proyección de la Pintura de tierras y pantanos, 1614 de Juan de Aguilear Redón, sobre
la Sabana de Bogotá. Tomado de (Muñoz, 2020)
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Imagen 4-4 Vista aérea de Camellones hechos por indígenas, Vuelo C-778 foto 86g, 1956. Tomado
de (IGAC, 1956)
Por otro lado los bosques cercanos a la ciudad, repletos de arbustos fueron también
utilizados para la obtención de carbón a lo largo de la colonia y parte de la república, lo que
llevó a procesos de deforestación de los cerros, mientras tanto la parte baja de la sabana, en
las cercanías con Funza, existían variados pantanos y juncales, donde las aves acuáticas
solían habitar, mientras en temporadas secar surgían de allí grandes praderas, el paisaje
alrededor del río también, seguía dinámicas de pantanos y bosques y seguía siendo fuente
de proteína como peces y cangrejos que eran vendidos en los mercados de la ciudad. Los
bosques garantizaban pequeños mamíferos que alimentaban a indígenas y nuevos
habitantes en la zona, además de los materiales para la construcción de sus casas.
La ciudad de Bogotá desde sus orígenes coloniales se ubicó en una zona con gran
densidad poblacional y gran fertilidad en sus suelos, la lógica de ciudad que se formaba
alrededor de una plaza principal, donde todos los eventos sociales ocurrían, por medio de la
generación de cuadrículas permitió la rápida ubicación de suelos para los nuevos
pobladores. La ciudad mantuvo una lógica de aldea hasta la entrada de las reformas
borbónicas, las cuales le dieron su papel como ciudad capital, sin contar con la
representatividad poblacional o económica que tenían las capitales de otros virreinatos, las
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Imagen 4-5 Evolución Perímetro Urbano Ciudad de Bogotá en la Colonia 1538, 1560 y 1600
1700-1750 1750-1800
Se aprecia en la imagen de grandes las grandes La dinámica colonial permaneció constante en vísperas de
haciendas alrededor de Bogotá la independencia.
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1850-1875
1825-1850
En rojo, se aprecia un primer desarrollo de poblamiento
Las grandes haciendas al principio de la nueva república
fuera del área urbana de Bogotá.
continuaban con una dinámica parecida a la Colonia.
La hacienda la Conejera por ejemplo se divide en tres
grandes predios.
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1875-1900 1900-1925
Se aprecia en este plano el desarrollo del En principios del siglo XX, se denota
tranvía en dirección a Chapinero la forma en que Chapinero se amplía y la
división de las grandes haciendas se da por
herencia, aspecto que dinamizara la
ocupación de la ciudad.
Tabla 1. Evolución tenencia de tierras en Bogotá y municipios aledaños que luego serían anexados 1700-1925 tomado
de: (Botero, 1979)
Imagen 4-7 Delimitaciones del perímetro Urbano de la Ciudad de Bogotá 1890, 1910 y 1914
A finales de Siglo XIX, surge el barrio Chapinero, el cual funcionó en parte como
detonante del crecimiento de la ciudad hacia el norte, por parte de las clases altas, mientras
que las fábricas instaladas en la parte sur de la ciudad atrajeron a la población de las clases
bajas, pero este fue un fenómeno espontáneo, como lo presenta Palacio, Chapinero como
barrio se configura como un espacio Suburbano. Para 1910 el centenario de independencia
los parques extraurbanos comienzan a ser centros de atracción de la población, esto también
gracias a la construcción, por ejemplo, de tranvías jalados por mula o la construcción de la
vía férrea hacia el norte.
Igualmente, solo hasta finales de siglo la ciudad pudo contar con su primer
acueducto. Antes usaba las aguas de los ríos San Francisco, San Agustín y Arzobispo, los
cuales estaban presentando disminuciones de su caudal, por la tala de árboles en los cerros
orientales, como se muestra en la Imagen 4-8, donde la pintura presenta una representación
de los cerros sin presencia de vegetación.
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Imagen 4-8 Panorámica de Bogotá de Manuel María Paz, CA 1850-1902, Colección de arte, Banco
de la República. Reg. AP 4839
Las formas de producción de la tierra y esa fuerte relación de la Sabana con Bogotá
se fueron transformando en el siglo XX, la existencia de una fuerte demanda de alimentos
por parte de la ciudad, dio a la sabana el rol de alimentarla. Mientras ésta, al mismo tiempo,
iniciaría a expandirse hacia esas tierras productivas, en la búsqueda de la vivienda. (Ruiz,
2008)
Entre 1912 la ciudad de Bogotá contaba con 121.000 habitantes y en el país las
haciendas empezaron a fragmentarse, las vías dentro de la ciudad empezaron a tener
presencia de automóviles y el ferrocarril que era el medio por el que entraban las
mercancías a la ciudad desde Puerto Salgar. Para la tercera década del siglo, la construcción
de vías empezaba a generar nuevas dinámicas en el transporte, los automotores y la
maquinaria agrícola, por ejemplo, transformaron las formas de producción optando por la
mecanización del agro, principalmente en las zonas planas, teniendo en cuenta que estas
eran las mejores tierras para la producción, la concentración de la tierra fue el fenómeno
que generó la expansión de la frontera agraria, acompañado de un claro fenómeno de
violencia resultado de los conflictos entre partidos, que en los departamentos de Boyacá,
Cundinamarca y parte de Santander resultó en la expulsión de población a otras áreas del
país, incluso la entrada de poblaciones a ecosistemas que requerían de una difícil
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La gran Hacienda pasó a ser la gran finca en que la oferta de trabajo era constante
para una parte de la población, mientras que otra, principalmente aquella sin propiedad, se
transformó en un contingente de mano de obra flotante, como los obreros temporeros.
Mientras la tecnología y nuevas especies ingresaban, la ganaderización y la potrerización
de la propiedad se volvieron tendencia en la zona. El pasto Kikuyo junto con el ganado
vacuno se integraron y normalizaron en el paisaje. Mientras, en los cerros y como parte de
la delimitación de las propiedades los pinos y eucaliptos se hacían predominantes en el
paisaje.
Imagen 4-9 Perímetros urbanos de la ciudad de Bogotá 1940 a 1954, con la absorción de nuevos
municipios.
El río Bogotá el principal cuerpo de agua que atraviesa la sabana también ha sido
sujeto de cambios constantes, no solo con la llegada de los españoles, la fuerte tendencia a
la generación de tierras productivas alrededor de este, llevó a procesos de canalización de
sus aguas, generación de distritos de riego y sequía de cuerpos de agua adjuntos a este
como los humedales, el control de la corriente del río por medio de las obras, llevó también
a la implementación de tecnologías para extraer agua de pozos, en los años 60 se generó
uno de los mayores cambios de este, dadas las obras de canalización que se dieron a lo
largo de todo su cauce esto llevó a una modificación de las actividades y a la pérdida de
vegetación alrededor de este.
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Ya entrado el nuevo siglo, las dinámicas que se empezaron a presentar desde mediados de
siglo, como lo fue la expansión urbana, la tendencia a la ganaderización y el loteo de la
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En medio de estas dinámicas las dinámicas regionales que sobrepasan el control entre entes
territoriales, por lo cual desde finales de siglo XX desde la ciudad y algunos municipios se
identificó la urgencia de generar una figura capaz de gestionar dichos temas, en Julio de
2020 se crea la Región Metropolitana Bogotá-Cundinamarca. Figura que requiere de la
construcción e innovación en torno a la toma de decisiones en que la complejidad ambiental
como apuesta de conocimiento puede aportar a dichas perspectivas.
Las Ecorregiones en diálogo con las dinámicas sociales, una propuesta para
direccionar la planificación en la Región
La determinación de la ecorregión de la Sabana de Bogotá, parte de una serie de cruces de
información, en la que se parte de una perspectiva ecológica, pero que debe entrar a
relacionarse con la naturaleza humana, bajo este precepto se inicia con la determinación de
una cuenca como la primera escala de trabajo, que, en este caso, es el río Bogotá, el cual se
divide en tres subcuencas alta media y baja, que bajo la perspectiva de las tradicionales
divisiones del departamento, como lo es el nivel provincial no está presente en esta
división, Las provincias de los departamentos datan de sus inicios en la colonia, y parte de
los procesos de independencia con estas figuras se buscó generar una distinción identitaria
de los pobladores de estas áreas, destacándose la búsqueda de la homogeneidad del paisaje,
por lo anterior el paisaje como parte de la determinación de una ecorregión se configura
como una determinante, otro aspecto de importancia, que se tomó en cuenta a la hora de
pensar en esta ecorregión parte de la configuración de los suelos de la zona, teniendo en
cuenta que en el proceso de formación de la sabana y bajo la existencia de un proto-lago,
que al secarse recibió las cenizas volcánicas de la cordillera central, el suelo como una
determinante de la ecorregión también se transforma en un elemento a analizar. La
presencia de diversidad de ecosistemas se integra a estas dinámicas, estos ecosistemas
actuales, permiten observar la forma en que se está ocupando el suelo, reconociendo sus
dinámicas y conflictos.
occidentales, en los que se destaca el cerro del Majuy, en medio de la Sabana se encuentra
el Cerro de la Conejera.
Imagen 4-10 Modelo de elevación digital de la Sabana de Bogotá y la Ecorregión Sabana y mapa de
curvas de nivel
1 Páramos
1 Turbera de páramo
4 Tipos de herbazal
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2 Tipos de sabanas
2 Tipos de Arbustales
5 Tipos de Bosques
1 tipo vegetación secundaria
1 Complejo rocoso
6 Tipos acuáticos
Ecorregión Sabana 10 Agroecosistemas
2 Tipos herbazales
y Bogotá generales
1 Otras Áreas
1 Páramo
1 Sin información
1 Subxerofitia (Bosque seco)
1 territorio artificializado
1 Transicional transformado
Viendo la forma en la actual ocupación del suelo desde la perspectiva ecosistémica ofrece
una primera visión de lo que está ocurriendo, la vocación del suelo por su parte permite
apreciar la existencia de los conflictos de uso existentes en la zona.
Mapa 2 Ocupación Urbana en la Ecorregión Sabana, mapa construido a partir de datos geográficos
del Censo DANE 2018 y mapas Colombia en mapas IGAC.
Por ejemplo, en la zona norte de la ciudad de Bogotá, las provincias de Sabana Centro y
Sabana occidente, alberga uno de los suelos más productivos del país, el cual fue el
determinante principal a la hora de delimitar la ecorregión, este suelo clase 2 apto para el
aprovechamiento para la generación de alimentos, tiene dos fenómenos que le afectan. 1.
La tenencia general del uso de este suelo para el ganado vacuno y 2. Este suelo también ha
sufrido cambios en torno a la ocupación de sus suelos para la urbanización. Esto se puede
apreciar en el Mapa 3.Mapa 3 Comparación vocación y ecosistemas identificados
Revisando la forma en que los suelos se han ocupado a través junto a la presentación de los
mapas de la ciudad de Bogotá, es claro que la expansión urbana es una constante en la
zona, la cual se liga no solamente a las dinámicas propias sociales, sino a la oferta
ecosistémica presente, la existencia de unos suelos planos, con gran productividad fue en
un principio atractivo para el asentamiento de una sociedad, pero en un mundo integrado a
un proceso de globalización en el que las cadenas de valor se configuran y extienden en
todo el planeta(De Mattos, 2002), configura entonces el surgimiento de las ciudades
globales, siendo estas los principales centros de intercambio económico de capital en el
mundo, de esta forma la primacía de la ciudad de Bogotá frente a otras ciudades la ha hecho
un polo de fuerte atracción poblacional.
Se calcula que el consumo per-cápita en ese entonces por habitante era de 96 litros diarios,
tomando en cuenta lo anterior surge la prospectiva de la Tabla 2.
2014 2035
Tabla 2 Población y consumo per-cápita en metros cúbicos año 2014 (Alcaldía Bogotá, 2014) y
2035
Tomando en cuenta estos crecimientos poblacionales que se han dado en los últimos años
dentro de la región también se buscó pensar en la forma en que la población se estaba
repartiendo allí, ahora vemos en el gráfico 1 que para el año 2005 existía un porcentaje
mayor de la población en el área rural, aun así se aprecia que existía un poco la tendencia
hacia la igualdad de población entre áreas, para 2018 se aprecia un gran vuelco en el que la
ecorregión ha presentado una fuerte transición de la población a áreas urbanas y esto mismo
ocurre en las proyecciones de 2035. En que la población rural se proyecta puede llegar a
disminuir drásticamente.
Bajo esta apuesta se puede hacer un acercamiento a la apropiación inicial del gobierno de
Gustavo Petro en torno a la Jerarquía de las determinantes ambientales en las que el agua y
la gente son los elementos determinantes de la planificación del territorio. En donde el
agua, pero también el suelo son los sistemas que permiten la vida, mientras que, la gente
como el grupo de sujetos que interactúan constantemente con el agua y el suelo se integran
a estos reconociendo que son elementos que atraviesan la vida humana y que al mismo
tiempo reciben fuertes impactos por parte de esta.
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