Está en la página 1de 168

CONTENIDO

Críticas
Alis, de Clare Weiskopf y Nicolás Van Hemelryck
Gloria Isabel Gómez

Alis, de Clare Weiskopf y Nicolás van Hemelryck


Martha Ligia Parra

Cada vez que muero, de la red comunicataria TRANS Y Raúl Vidales


Javier Pérez-Osorio

Camilo Torres: el amor eficaz, de Marta Rodríguez y Fernando Restrepo


Joan Suárez

Camilo Torres: el amor eficaz, de Marta Rodríguez y Fernando Restrepo


Gonzalo Restrepo Sánchez

Herida abierta, de Lina Rodríguez


Hugo Chaparro Valderrama

La otra forma, de Diego Felipe Guzmán


Verónica Salazar

La niebla de la paz, de Joel Stängle


Danny Arteaga Castrillón

Lo peor hasta el momento, de Iván Garzón Mayorga


Liliana Zapata B.
Medellín, Colombia

Lo peor hasta el momento, de Iván Garzón


Lina María Rivera (Sunnyside)

Mudos testigos, de Luis Ospina y Jerónimo Atehortúa


Hugo Chaparro Valderrama

Mudos testigos, de Luis Ospina y Jerónimo Atehortúa


Andrés Múnera

Topos, de Carlos Zapata


Oswaldo Osorio
Un varón, de Fabián Hernández
Alejandra Meneses

Anhell69, de Theo Montoya


David Guzmán Quintero

Un varón, de Fabián Hernández


Oswaldo Osorio

Artículos y Ensayos
Gustavo Nieto Roa (Tunja, 1942)
Mauricio Laurens

Modos de representación de la subcultura punk en Colombia


Valentina Vasco Restrepo

Entrevistas
Entrevista a la “Rata” Eduardo Carvajal
Óscar Iván Montoya

Entrevista a Jerónimo Atehortúa Arteaga


Óscar Iván Montoya

Entrevista a Fabián Hernández


Redacción Canaguaro

Biblioteca
Cuadernos de Cine Colombiano No. 32
Verónica Salazar

Documentos
Una historia común y particular del cine colombiano
Luis Ospina
FESTIVALES
La evolución del proyecto cultural del Festival Cine en la Isla
Felipe Montoya Giraldo

FICCI 62
David Guzmán Quintero

Sala cortos
Cuando la llanura encuentra el piedemonte, de Jonas Radziunas
Daniel Tamayo
Críticas
ALIS, DE CLARE WEISKOPF Y NICOLÁS VAN HEMELRYCK
RETRATO SOBRE UN ESPEJO
Gloria Isabel Gómez

Clare Weiskopf y Nicolás Van Hemelryck historia personal la lleva a vivir en la selva,
son documentalistas. Como pareja, en sus lejos de las rutinas de la ciudad y las expec-
dos últimos largometrajes han abordado el tativas sociales que recaen sobre las muje-
impacto que tienen los vínculos familiares res.
inconstantes: en Amazona (2017) Weis-
kopf reflexiona sobre su propia maternidad Mientras que en Alis (2023), hacen una
a través de la relación con su madre, cuya co-dirección y dedican sus esfuerzos a con-

6
tarle una historia a sus propias hijas a tra- estas jóvenes, sus anhelos más profundos,
vés de la vida de un grupo de jóvenes que sus experiencias amorosas, los traumas de
viven lejos de sus familiares en un centro la infancia y otras vivencias que se mezclan
de acogida denominado La Arcadia. Allí, las entre lo propio y lo ficticio, lo personal y lo
condiciones económicas y sociales deter- ajeno.
minan los espacios que habitan estas ado-
lescentes, quienes son invitadas a crear un Estas conversaciones, lejos de ser expe-
personaje imaginario llamado Alis: una jo- riencias imaginarias, son las proyecciones
ven de quince años que también forma par- de cada una de estas jóvenes frente a la cá-
te del internado. mara, puesto que Alis no es solo un meca-
nismo narrativo útil para contar esta his-
Con esta premisa, el documental cons- toria sino una forma de proteger a estas
truye un coro de voces, miradas y sentidos adolescentes de exponer su vida privada
que no solo se vinculan por el espacio fí- de manera directa ya que en medio de las
sico, sino por la emoción y la temática de anécdotas, improvisaciones, mentiras y
cada secuencia, pues gracias a la confian- confesiones ¿Quién puede determinar qué
za que existe entre el equipo de filmación y le sucedió a cada una?
las jóvenes entrevistadas, es posible cono-
cer la posición de cada una sobre aspectos Alis es un personaje real para la mayoría
amplios y universales como la libertad, la de jóvenes, porque es un alter-ego de ellas
muerte o el amor. mismas y sus compañeras, un reflejo de una
generación que en un contexto desigual e
Sin embargo, a pesar del bello encuadre injusto forja su sistema de valores fuera de
y el color que tienen todas las entrevistas, casa a partir de experiencias en la calle o en
Alis no posee fortalezas visuales ni foto- los barrios. Al hablar, ellas utilizan la pri-
gráficas. Esto se debe –tal vez– a que una mera y la tercera persona, lo cual es un gran
de las intenciones del documental es ha- acierto de la película, que logra universali-
cer extensivo el dispositivo narrativo que zar experiencias propias de la juventud fil-
le da sentido a toda la película: la imagina- mando un contexto muy particular.
ción. Como espectadores(as) se nos invita a
evocar todo lo que no vemos: el pasado de Por otro lado, a pesar de la diferencia de

7
edades que existe entre quienes filman y tos. En este caso, Alis nace a partir de una
son filmadas no hay una distancia jerárqui- serie de talleres audiovisuales que desa-
ca entre los creadores(as) y las adolescen- rrollaron Clare Weiskopf y Nicolás Van He-
tes: la voz de Claire orienta la conversación melryck durante varios años, los cuales les
y, a la vez, favorece la expresión individual dieron herramientas a estas adolescentes
de cada una de las jóvenes, quienes hablan para narrar y narrarse a sí mismas, demos-
sobre sus vidas utilizando su lenguaje, sus trando que, al mismo tiempo, el cine puede
miedos, sus canciones y sus silencios. La ser retrato y espejo.
presencia del adulto, que en la mayoría de
testimonios es problemática, se convierte
aquí en un referente seguro que se impli-
CONTENIDO SITIO WEB
ca con las emociones y necesidades de las
adolescentes.

Estas conversaciones, lejos de ser ex-


periencias imaginarias, son las pro-
yecciones de cada una de estas jóvenes
frente a la cámara, puesto que Alis no
es solo un mecanismo narrativo útil
para contar esta historia sino una for-
ma de proteger a estas adolescentes de
exponer su vida...

Existen razones suficientes para que esta


obra haya tenido una buena acogida entre la
audiencia: a diferencia de la ficción, el cine
documental no solo propone una represen-
tación de la realidad sino su transformación
inmediata a través de recursos que inducen
la acción de las personas sobre sus contex-

8
ALIS, DE CLARE WEISKOPF Y NICOLÁS VAN HEMELRYCK
SUAVIZAR LA CORAZA Y EL PREJUICIO
Martha Ligia Parra

En Instagram y Twitter @mliparra

“Quiere que le diga una cosa, que tiene 15 años y se llama Alis”. Es la in-
es que yo afuera no tengo nada”. vitación que anima a las jóvenes del docu-
Menor interna en La Arcadia mental a hablar sobre cómo es, qué siente y
cómo será el futuro de esa niña ficticia. Esta
especie de juego, de mecanismo de iden-
“Vas a imaginarte a una compañera tuya tificación, implica una escucha paciente y

9
generosa. La intención, suavizar la coraza Esta emotiva obra es el resultado de un pro-
de ellas y los prejuicios del espectador. Al ceso de varios años de trabajo con las jóve-
indagar por Alis, una de las niñas responde: nes. Alis, una historia simple en apariencia,
“Es feliz, pero tiene mucho dolor por den- es compleja al lograr el difícil equilibrio en-
tro”. tre la intimidad y la distancia con las me-
nores; entre la realidad y la ficción. Hay una
La película se ubica en un internado pú- cercanía prudente y responsable, que se
blico, llamado La Arcadia, lugar de acogida cuida de no afectar la fragilidad emocional
para adolescentes menores de edad. Han de sus protagonistas.
vivido en la calle y sus familias no pueden
hacerse cargo de ellas. “Algunas ya son Al mismo tiempo, es una pieza ambicio-
madres y otras seguramente lo serán, y el sa que opta primero por los personajes y
riesgo de perpetuar el ciclo de abandono no por construir un documental basado en
y violencia que vivieron es muy alto”, ex- personajes. También porque elude el cami-
plican los directores del documental Clare no de la revictimización y porque involu-
Weiskopf y Nicolás van Hemelryck. cra a un grupo amplio de jóvenes, veinte en
total. Sus protagonistas, en primer plano,
Pese a la dureza de sus historias y entor- miran directamente a la cámara y tienen la
nos, los realizadores confiesan lo impor- libertad de imaginar, de decir la verdad o no
tante que era darle mayor espacio al lado y de ser ellas mismas. La película respeta
luminoso. El documental parte del deseo sus tiempos, historias, personalidades.
de romper con las ideas que han construi-
do discriminaciones sociales y de todo tipo. Los realizadores también entendieron que
Se niega a ver con lástima a estas niñas y, las jóvenes y sus relatos, debían dar forma
sobre todo, quiere hacer énfasis en que su al tipo de narrativa; descartaron el docu-
presente no es una condena. mental de observación y el testimonial. Y
prefirieron una vía participativa, lúdica y de
El documental se aleja de la mirada ex- experimentación, más espontánea.
tractivista. Por el contrario, concibe el cine
como vínculo, espejo y espacio de libertad. Lo más interesante es que de este modo,
Como medio de contención y lugar seguro. se da la catarsis, la proyección y la posibi-

10
lidad de verse reflejadas e identificadas. que el espectador las mirara a los ojos du-
Pero, también la oportunidad de soñar con rante toda la película”, afirman los realiza-
el futuro. Frente al interrogante sobre lo dores.
que quiere ser Alis, las respuestas son: Ser
mamá, ser papá, tener estudio, ser alguien, Y para lograr la intimidad necesaria, de-
piloto, cantante, futbolista, veterinaria y cidieron que el espacio principal fuera el
hasta presidente de Colombia. cuarto de las chicas. Por eso fue importan-
te trabajar con un grupo de rodaje lo más
pequeño posible. Los rostros de las jóve-

...es una pieza ambiciosa que opta pri- nes con sus gestos y expresividad llenan el
mero por los personajes y no por cons- plano. Y como pausas, funcionan los planos
truir un documental basado en perso- del exterior del internado, los camarotes
najes. También porque elude el camino donde duermen con sus muñecos de felpa,
de la revictimización y porque involu- las acciones cotidianas de lavarse los dien-
cra a un grupo amplio de jóvenes,..
tes, peinarse el cabello entre ellas, bailar,
ver juntas televisión y arreglar el salón de
clase. Una imagen llama, particularmente,
Las niñas del internado extrañan lo más la atención: la de una coneja rosa de pelu-
básico, la compañía y el cuidado de los pa- che que da vueltas en la lavadora.
dres, un lugar donde sentirse protegidas y
al cual pertenecer. Una de ellas responde a Explican los directores que el 86 por cien-
la pregunta: ¿Qué ves de Alis en ese espejo? to de jóvenes como Alis se encuentran en-
–No sé, como dolor. ¿Y por qué dolor? –Por- tre los 14 y 17 años de edad. El más reciente
que le ha tocado sola y le ha tocado difícil la informe del Dane revela que más de 4.000
vida. niñas de entre 10 y 14 años dieron a luz el
año pasado. Y que en Colombia 45.000 me-
Formalmente, la película es radical al usar nores de edad fueron mamás en 2022. Es
una sola cámara, un solo lente y un solo en- una realidad estremecedora que debe pesar
cuadre. “El camarógrafo y el editor nos de- en la conciencia de nuestra sociedad. Y que
cían que era muy riesgoso; nos sugirieron también mueve a la reflexión que propone
llevar una segunda cámara, pero queríamos Alis sobre lo que significa ser mujer en el

11
mundo actual. Como lo afirman sus reali-
zadores: “Es además el comienzo de un diá-
logo sobre la niñez y la adolescencia; temas
que parecen ser secundarios”. Al final, este
delicado y acertado filme nos devuelve la
mirada en silencio de sus protagonistas. Es
como un golpe seco en el corazón.

CONTENIDO SITIO WEB

12
CADA VEZ QUE MUERO, DE LA RED COMUNICATARIA
TRANS Y RAÚL VIDALES
COMO AVES FÉNIX 1

Javier Pérez-Osorio

PhD Candidate
Centre for Film and Screen - University of Cambridge
jap93@cam.ac.uk

Cada vez que muero (2022) es un documen- biano fundado en 2012. La película recurre
tal desarrollado por el director colombiano a técnicas narrativas tanto documentales
Raúl Vidales en estrecha colaboración con 1 Esta es la traducción de una reseña
origialmente publicada en inglés en la revista
siete mujeres de la Red Comunitaria Trans
European Review of Latin American and Caribbean
(RCT), un colectivo transfeminista colom- Studies.

13
como de ficción para explorar la sombra la pandemia del COVID-19. Aprovechando
de la muerte que se cierne sobre las vidas el confinamiento forzoso y las dificultades
de las personas transgénero en Colombia. para ganarse la vida que las integrantes de
Aunque no es una novedad que las vidas la RCT enfrentaron durante ese periodo, Vi-
LGBTQ+ estén amenazadas, en los últimos dales solía reunirse dos veces por semana
años los casos de acoso, violencia y homi- con ellas para debatir posibles temas para
cidios a los que se enfrentan las personas una película. El resultado fue una obra co-
queer en el país han ido en aumento. En laborativa en la que el papel de estas sie-
particular, el número de mujeres trans víc- te mujeres en la producción (por ejemplo,
timas de crímenes de odio ha aumentado de como guionistas, directoras de arte y dise-
forma alarmante, algo que ha sido ignorado ñadoras de vestuario) llegó a ser tan esen-
en gran medida tanto por las autoridades cial como el del director. Cada vez que muero
como por los medios de comunicación. En se estrenó en el Ciclo Rosa 2021 de Bogotá y
un contexto tan hostil, Cada vez que muero se exhibió en salas seleccionadas de toda
es el primer largometraje que pone en pri- Colombia. Actualmente está previsto que
mer plano los cuerpos, las voces y las ex- la película se proyecte en varios festivales
periencias transgénero como un valiente dentro y fuera de Latinoamérica.
testimonio contra un gobierno negligente y
una sociedad indiferente. Durante esas reuniones semanales, se
hizo evidente que la muerte era un tema
El director de la película es psicólogo de central para las siete mujeres de la RCT,
formación e incursionó en el cine a princi- Alexandra, Yoko, María Fernanda, Valeria,
pios de la década de 2010. Durante más de Katalina, Daniela y Sahory. Sus vidas han
diez años ha intentado trasladar sus intere- estado marcadas por el acecho persistente
ses sociales y políticos al ámbito cinemato- de la muerte, el luto por sus hermanas ase-
gráfico. La idea de hacer una película sobre sinadas y el interminable proceso de rena-
la vida de las experiencias trans comenzó cimiento que conlleva la transición. Como
cuando conoció a los participantes de la sugiere su título, la película indaga en la
RCT. Aunque consideró la idea de desarro- paradójica búsqueda del sentido de la vida
llar un proyecto con y sobre ellas durante a través de varias formas de morir. Aunque
algunos años, esta no se materializó hasta devastadores, los testimonios son al mis-

14
mo tiempo reparadores. Cada vez que mue- tos visuales independientes. Algunos son
ro presenta así en estas mujeres trans una narraciones ficticias inspiradas en los tes-
versión latinoamericana contemporánea de timonios de las protagonistas y otros son
la leyenda popular del ave Fénix, la criatura grabaciones de celebraciones/manifesta-
inmortal que renace de sus cenizas. ciones trans en Bogotá. A diferencia de las
escenas de los encuentros, estas secuencias
El documental se estructura en torno a dos tienen colores vibrantes, música envol-
líneas argumentales entrelazadas. Por un vente y variadas localizaciones de rodaje.
lado, muestra imágenes en blanco y negro Filmados en su mayoría en el barrio Santa
de las reuniones semanales que origina- Fe, donde viven y trabajan muchas de las
ron el argumento de la película. Con planos protagonistas, los relatos ofrecen una des-
medios y primeros planos, la cámara in- cripción estetizada pero descarnada de sus
vita al público a participar en esta reunión experiencias cotidianas de la muerte. En
íntima. Mientras beben y fuman, las pro- uno de los relatos, por ejemplo, Alexandra
tagonistas –jóvenes y de mediana edad– y Valeria persiguen a un hombre –aparen-
escriben y comparten sus historias. Ríen y temente un policía– que las amenaza con
lloran juntas al recordar su difícil infancia un cuchillo. Vestidas con trajes de colores
y adolescencia, los obstáculos para expre- neón y rasgos monstruosos, las mujeres
sar su identidad de género y las horribles arrastran al hombre hasta una habitación
experiencias de violencia ejercidas por fa- donde las espera un grupo más numeroso.
miliares, hombres y fuerzas policiales. Sin Mediante un montaje rápido y planos sub-
embargo, también se toman el tiempo para jetivos extremos, la película las muestra
hablar de sus sueños, de la alegría de su so- bailando furiosamente al son de una can-
roridad y de las innumerables oportunida- ción de heavy metal que denuncia los crí-
des de renacer. Su forma de hablar informal menes cometidos contra las mujeres trans.
y sencilla, incluso cuando cuentan historias Más tarde, en la secuencia más impactante
sombrías, es tan entrañable como sorpren- de la película, el grupo acaba tomándose la
dente. justicia por su mano y devora al hombre.

Entrelazados con estas imágenes, por


otra parte, la película presenta ocho rela-

15
vida de estas mujeres. Es precisamente esta
Aunque devastadores, los testimonios libertad formal la que invita al espectador
son al mismo tiempo reparadores.
a entrar en contacto con las experiencias
Cada vez que muero presenta así en es-
tas mujeres trans una versión latinoa- transgénero de una manera sin preceden-
mericana contemporánea de la leyen- tes. De este modo, en un contexto social en
da popular del ave Fénix, la criatura el que las vidas transgénero se niegan per-
inmortal que renace de sus cenizas. sistentemente, Cada vez que muero les per-
mite a Alexandra, Yoko, María Fernanda,
Valeria, Katalina, Daniela y Sahory vencer a
Cada vez que muero es deliberadamente la muerte una vez más y renacer, esta vez
provocadora en sus temas y formas. La pro- en forma de cine.
vocación reside en la capacidad de alternar
y conectar con fluidez imágenes descon-
certantes con las conversaciones íntimas
de las protagonistas. Este contrapunto en-
tre violencia y calma, lucha y esperanza, y
muerte y vida propone un retrato menos CONTENIDO SITIO WEB

reductivo y más completo de las vidas de


las mujeres trans en Colombia. Aunque la
película puede resultar formalmente tos-
ca en algunos momentos (por ejemplo, en
la composición de algunos planos y en la
edición de sonido), la innovadora mezcla
de estilos cinematográficos señala la im-
portancia de reflexionar sobre temas queer
urgentes, así como sobre la forma más ade-
cuada de representarlos. El contraste entre
el documental monocromático y las colori-
das imágenes dramáticas, el contenido grá-
fico sin complejos y la rudeza experimental
de la película hacen eco de los matices de la

16
CAMILO TORRES: EL AMOR EFICAZ, DE MARTA
RODRÍGUEZ Y FERNANDO RESTREPO
ELEGÍA EN BARRO
Joan Suárez

¿Dónde estarán sus manos? posturas como la esencia de su práctica del


¿Qué estará haciendo ahora? sermón, cuando pocas veces se asoma el
criterio de las ideas con la acción. Las go-
Y una mano de agua intenta esculpir con tas de agua dibujan en la pantalla la silue-
delicadeza la figura, tan vehemente en sus ta de Camilo Torres Restrepo, el amor eficaz

17
(2023), un documental experimental que
tiene el coraje de reunir material de archivo Como una artista de la alfarería, la direc-
y entablar un diálogo entre preguntas, re- tora Marta Rodríguez toma piezas arqueo-
flexiones y análisis. Una película epistolar lógicas de archivo para fabricar un latido
en la que Marta Rodríguez (1933) ─Pionera único en el corazón de Camilo Torres Res-
del documental antropológico en Colombia─ trepo y un solo ritmo divino: el amor efi-
transciende la muerte del sacerdote y resu- caz, la forma política que integra el amor al
cita con epitafios un encuentro imaginario prójimo con el discurso y la práctica libera-
entre los dos. Una oración en verso para el dora. Este es el corolario de su revolución
rescate del recuerdo, incluso con su propia personal. Tan vibrante como impactante
tonalidad para evocar Chircales (1972), allí en su narración en la que aparece como un
donde descubrió la historia que la llevaría a raro espejismo y alumbra la oscuridad del
trabajar durante seis años y que llegó a Tun- olvido en la sala. Así sube la tensión con la
juelito gracias a Camilo Torres (1929-1966). oposición de la alta jerarquía del clero para
manifestarse sobre sus planteamientos, es
Tan sutil como la espuma en la corriente decir, el surgimiento de líderes en las ma-
de un río, inicia una charla auténtica para el sas campesinas y urbanas. La voz divina y
espectador, tan versado en la vida de Cami- sagrada de Camilo responde y el lector de
lo como en la de algún desprevenido, una esta carta fílmica encuentra, quizá, una ex-
correspondencia instantánea que incorpora plicación sobre los elementos que lo llevan
la inquietud por sus decisiones, sus actos y a decidir su vinculación a las filas del Ejér-
sus postulados de pregonar algo construc- cito de Liberación Nacional.
tivo, una nueva mirada para crear un nue-
vo país: paz con justicia social. Una serie Un sacerdote que no aparece en el aura de
de pedradas de imágenes en blanco y negro esta misiva, Federico Carrasquilla, y que fue
nos contextualizan la década del sesenta amigo de Camilo y quien ha vivido (y toda-
(que dependía de las circunstancias histó- vía) con intensidad en el medio popular nos
ricas de Colombia y los vientos de cambio dice:
en la Iglesia católica1) e intentan recoger la
expresión de su pensamiento y algunos de Mi gran contradicción con Camilo
sus discursos dictados en conferencias. tiene que ver con la estrategia para el

18
cambio. A Camilo como cristiano pudo tiempo (el contacto con la realidad social,
parecerle que la lucha armada era el sus lecturas académicas y, ciertamente, la
camino. Yo no entiendo cómo un sa- revolución cubana de 1959) en una aproxi-
cerdote puede aceptar la lucha armada. mación para comprender el ahora; y sí en la
Jesús no la usó, prefirió el ejemplo y la apremiante vigencia de su revelación pro-
palabra. (Carrasquilla, 2019, p. 49) fética. Una carta en yuxtaposición de pen-
samiento y petición a modo de un examen
El padre Carrasquilla (n. 1935), un refe- retrospectivo.
rente inseparable del amor y la admiración
por Jesús, reconoce “de Camilo su actitud
humana y su visión del cristianismo, pero Y esta breve interrupción obedece a la
no lo seduce su proyecto político (Frente necesidad que suscita esta joya visual,
Unido)”. Y esta breve interrupción obedece el espectador siente el deseo de inter-
a la necesidad que suscita esta joya visual, venir, también de interpelar ante los
el espectador siente el deseo de intervenir,
asuntos que aquí se exponen,...
también de interpelar ante los asuntos que
aquí se exponen, pero el tiempo de ahora y
el ayer parece que una humarada lo expan- Un atributo especial de este documental,
de en cánticos de secuencias discursivas y como una voz del alma en una marcha fu-
transiciones memorables. neral, es su posición en el relato, a diferen-
cia de otro tan significativo y potente Ca-
De ahí que el documental en su curso milo, el cura guerrillero (Norden, 1974), en el
contraste y alterne testimonios de amigos que con un tono periodístico nos acercan a
y seres cercanos. Las secuencias pintan una imagen del sacerdote con las opiniones
una vasija impecable como maestro, ejem- y comentarios de quienes estuvieron a su
plo y orientador. Un ser de lección y espí- alrededor; Marta Rodríguez, decide, por el
ritu sin máscara. La rebelión de su sotana, contrario, apelar por la súplica y el rezo con
según esta conversación de invocación, es la expresión mítica de Camilo y lo toca de-
para presentar un Camilo sin idealizarlo, y licadamente.
sí para venerar su lucha social, lejos de las
manipulaciones; y sí para situarlo en su Igualmente, la directora con su magistra-

19
Referencias:
lidad esboza su afectiva amistad, los tiem- Torres, C. (n.d). Camilo Torres Restrepo: Escritos
pos de universidad cómplice, el colega de Escogidos 1966-1986. Tomo II. s.l: [s.n.].
Umaña Luna, E. (2003). Camilo y el nuevo hu-
aula, el conductor de seres humanos, (cre-
manismo: paz con justicia social. (2. ed). Univer-
yentes, ateos, agnósticos) y las manos que sidad Nacional de Colombia. Facultad de Derecho,
con amor abrazaron El nuevo humanismo, Ciencias Políticas y Sociales.

como ejemplo y orientador; las mismas Vélez, A; Ramírez, H. (2019). Jesús y el pobre. En
la vida del Padre José Federico Carrasquilla Mu-
manos que ahora con una cámara escribie-
ñoz. Publicación de la Fundación Pepe Breu.
ron para el buzón de la curiosidad de otras
(y nuevas) generaciones la vida de Camilo,
sin sermón, pero sí con palabras hechas de
palo santo.
CONTENIDO SITIO WEB
Nota:
1. Primero con el Concilio Vaticano II
(1962-1965). Luego con la II Conferencia
del Episcopado Latinoamericano (1968) de
Medellín. Y los procesos alternativos que
sucedieron de manera inmediata al Conci-
lio Vaticano II, los grupos de clérigos Gol-
conda, bajo la orientación de lo que se co-
nocería como Teología de la liberación, de
la que Camilo sería uno de sus precursores;
y Sacerdotes para América Latina (SAL).
Igualmente, para situar el contexto social y
eclesial hay que nombrar otros dos grupos
o movimientos de Iglesia: Cristianos por el
Socialismo (CPS) y Comunidades Eclesiales
de Base (CEBs). Todo esto en el horizonte de
los primeros misioneros cristianos, en de-
fensa de los oprimidos.

20
CAMILO TORRES: EL AMOR EFICAZ, DE MARTA
RODRÍGUEZ Y FERNANDO RESTREPO
UN AMIGO PERSONAL
Gonzalo Restrepo Sánchez

“Porque donde murió Camilo nació una cruz.


No de madera sino de luz…” esta película quieren contar a su país cómo
se erige desde la memoria los relatos his-
Este documental es dirigido por la co- tóricos sobre la lucha de clases y política,
nocida cineasta Marta Rodríguez (Chirca- en torno a una figura histórica [sin lugar a
les, 1972) y Fernando Restrepo Castañe- dudas, polarizadora en la sociedad colom-
da (Nunca más, 2001), quienes a través de biana] como lo fue Camilo Torres. Al mar-

21
gen de la película y a modo de anécdota, el ciólogo Eduardo Umaña Luna y del padre je-
hoy cineasta Rodrigo García (hijo de Gabriel suita Javier Giraldo, de otros elementos del
García Márquez), fue bautizado por el per- instrumento fílmico en sí: material archivo
sonaje de marras. de imágenes, de audio y los soliloquios de
la cineasta, donde deja entrever su disen-
El documental plantea “una conversa- timiento con el sacerdote de haberse ido a
ción” [si bien, un soliloquio por obvias una lucha armada. En este sentido de estra-
razones] entre Marta Rodríguez y Cami- to tajante, sin intersubjetividad [una moda-
lo Torres, mezclando en medio de ello: re- lidad pasiva de la experiencia del Otro] ya
flexiones, testimonios, e imágenes de ar- que Camilo ya no está entre nosotros; di-
chivo, sin intimidación alguna. Qué quiere sipa algo de empatía en el documental de
decir esto último. A lo mejor, aquellas úni- Martha Rodríguez por dos asuntos. Como
cas imágenes que pudieron haberse filmado experiencia fenomenológica: la ausencia
como único “refugio de caricias”, ya que el [audiovisual] de aquellas imágenes afecti-
presente, cinematográficamente hablan- vas entre dos amigos que pudieran haberse
do, no permitió segundas oportunidades alojado en lo más profundo de sus corazo-
para hablarse físicamente y frente a frente. nes. Y las tipificaciones que van desde la
Sin embargo, como contrapartida, pudiera conjetura hasta la certidumbre subjetiva.
convenirse con base en lo observado y es-
cuchado, alguna conclusión personal como Como la idea en este análisis no es llenar-
si fuera un desaliento. Viene a mi memo- lo de spoilers, ante la formulación de si es
ria aquella sentencia de Emil Cioran que pertinente traer una vez ante nuestros días
planteaba que el hombre puede imaginarlo este personaje y tema [el cine colombiano
todo, vaticinarlo todo, excepto hasta dónde tiene otro documental del cura guerrille-
puede llegar a hundirse, eso no tiene fin. ro rodado en 1974, por Francisco Norden].
Pues la respuesta, desde el otro lado de la
Martha [que conoció a Camilo Torres en orilla, no tan parcializado; tiene a mi pa-
vida] sin dejar de lado su ideología sobre la recer, dos respuestas desde lo académico y
salvaguardia del pueblo en ese cine deno- memoria colectiva.
minado de compromiso, en este trabajo se
apoya, además de las intervenciones del so- Por el lado académico: “El documental no

22
nació para hablar por el poder, sino, muy cierto acomodo a lo testimonial.
al contrario, para desafiar su discurso he-
gemónico; para explorar los márgenes y la Y la segunda respuesta [por el lado de la
periferia, para acercarse al Otro” (Weinrich- memoria social y sin que resulte lacónico el
ter, 2015, p.24). En este sentido, el docu- enunciado]. “El filme documental contri-
mental de Martha Rodríguez reconoce hoy, buye a la formación de la memoria colecti-
y lejos de antojarse asfixiante ante el des- va. Propone perspectivas sobre cuestiones,
tino de los actos de la Colombia de Camilo procesos y acontecimientos históricos e
Torres, así como sus consecuencias, luces y interpretaciones de los mismos” (Nichols,
sombras, a un amigo personal. Pero tam- 1997, p. 13). De todas formas, el enuncia-
bién, sin alejarse de ese formato cinema- do traza una enérgica discusión académica
tográfico ya tipificado [testimonio e imá- e intelectual que ha girado alrededor de esta
genes archivo y viceversa], nos aproxima diferencia frente a la perspectiva histórica,
de alguna manera a aquellos colombianos e interpretación. En cualquier caso, la pe-
[a ese “Otro”] quienes siempre estuvieron lícula colombiana hoy analizada, conside-
[y están] contiguos a la violencia en un país ro que tiende más a cierta aproximación a
como Colombia. otros y heterogéneos puntos de vista desde
una correlación historiográfica y ese diálo-
De todas formas, Camilo Torres: el amor go invariable con el presente. ¿Qué quiero
eficaz no es una propuesta audaz que huye decir? “En realidad, la conflictividad entre
del carácter divulgativo para penetrar en la memoria y la historia está planteada des-
un aliento intelectual que haga difícil de de el momento de la constitución de ambas
digerir dichas imágenes. Los cineastas del como fenómenos presentes en todas las
filme procuran o prefieren, sin una esfor- culturas” (Aprea 2012, p.36). Y para el ar-
zada producción estilística, no asfixiar la gumento que hoy nos irrumpe, a modo de
comunicación del mensaje que querían. conclusión:
Para quienes se aproximan por primera
vez a Camilo Torres, con toda seguridad se Camilo Torres: el amor eficaz, plasma un
quedarán con algunas ideas inestimables, carácter perceptible de cómo el documental
esparcidas a lo largo de un [por momen- cinematográfico es una parte esencial de los
tos] irregular metraje –culpa, a lo mejor, de discursos ideológicos que fluyen en el tejido

23
Traducido por Josetxo Cerdán y Eduardo Iriarte.
social. En últimas, el “Amor Eficaz” llevó a Paidós Ibérica.
que Camilo Torres se implicara en desafiar Weinrichter, A. (2015). Con voz propia o en boca
ajena: Voces y alteridad en el documental. En Ha-
los grandes problemas sociales y liberarlos.
cer con los ojos. Estados del cine documental.
En otros términos: es el carácter político
que logra el amor al prójimo en el discurso
y la experiencia redentora de Camilo. El sa-
cerdote, uno de los fundadores del departa-
mento de Sociología de la Universidad Na-
cional, dio una alocución antes de tomar las
armas e irse al campo con las filas del Ejér-
cito de Liberación Nacional. Su paso por la CONTENIDO SITIO WEB
guerrilla fue muy corto, a los pocos días de
alistarse fue dado de baja en Patio Cemento,
zona rural de San Vicente de Chucurí.

...el documental de Martha Rodríguez


reconoce hoy, y lejos de antojarse asfi-
xiante ante el destino de los actos de la
Colombia de Camilo Torres, así como
sus consecuencias, luces y sombras, a
un amigo personal.

Referencias:
Aprea, Gustavo. 2012. “Documental, historia y
memoria: un estado de la cuestión.” En Filmar
la memoria: los documentales audiovisuales y la
re-construcción del pasado. Universidad Nacional
de General Sarmiento.
Nichols, B. (1997). La representación de la reali-
dad: cuestiones y conceptos sobre el documental.

24
HERIDA ABIERTA, DE LINA RODRÍGUEZ
VIAJE AL EXILIO
Hugo Chaparro Valderrama

Laboratorios Frankenstein

El exilio geográfico de Lina Rodríguez es hacer de la cámara el testigo invisible de los


también un exilio formal y narrativo en dilemas visibles que sus señoritas revela-
términos cinematográficos. Cuando estre- ban a través de la intimidad de sus diálogos
nó su primer largometraje, Señoritas (2013), sobre los encuentros y desencuentros entre
descubrimos a una directora interesada por la visión femenina y masculina del mundo.

25
Nueve años después, su filmografía es una dríguez acerca del laberinto que significa
promesa cumplida por lo que pueda signifi- el exilio para continuar con el aprendizaje
car el riesgo de filmar en contra o al margen de lo que es la vida. El sentido de cada uno
de las fórmulas que desnuda por contraste de los títulos no es en vano. So Much Ten-
con sus historias: la vida familiar que retra- derness define la ternura de Aurora (Noëlle
ta en Mañana a esta hora (2016) se acerca a la Schönwald) para hacer de su refugio lejos
ficción como si se tratara de un documen- del miedo un escenario del amor cotidiano
tal filmado con cámara en mano sobre las con su hija Lucía (Natalia Aranguren); un
emociones en el terreno impredecible de la refugio en contra del horror que las echó del
vida doméstica; Aquí y allá (2019) es una vi- país y un destino para la supervivencia, que
sita a los fantasmas del tiempo rescatados tendrá variantes en las dudas que persigan
por el cine en tono contemplativo y meta- a Lucía y sus amigas sobre los misterios de
fórico; Mis dos voces (2022) insiste con su tí- las relaciones amorosas, y en la evocación
tulo en la dualidad que propone la distancia que trae como una sombra a la memoria el
con el país que se abandonó y el país en que fantasma del esposo asesinado de Aurora.
se vive, matizando con la distancia los re-
cuerdos que tienen tres mujeres en Cana- Herida abierta es una referencia al cani-
dá. Películas sin prisa visual, que invierten balismo en términos colombianos –o lati-
los términos del vértigo permitiendo que la noamericanos: la violencia no tiene exclu-
mirada se detenga en sus planos y que los sividad geográfica– cuando el azar impone
personajes actúen e improvisen sus parla- un viaje que sirve para conjurar el miedo,
mentos, proponiendo más preguntas que aunque no cicatrice del todo la herida que
respuestas al término de sus diálogos; de- deja el rastro de la muerte en sus víctimas;
claraciones de independencia creativa ante una herida en la piel del cuerpo que llena la
las rutinas audiovisuales de una industria pantalla cuando se inicia la película y la vida
que parece enferma cuando sus guiones son se revela en primer plano, escuchándose la
revisados por un script doctor para ser ren- respiración que asfixiará la muerte.
tables.
Entre la ternura y el dolor, la película po-
So Much Tenderness o Herida abierta (2022) dría ser otra anécdota de la historia contem-
es el capítulo más reciente de madame Ro- poránea cuando la procesión de migrantes

26
atraviesa el mapa de América huyendo de la El énfasis en la edición, que fragmenta y
miseria o del terror que los expulsa de sus conduce la mirada del espectador, enrique-
países –con matices desconcertantes en ce formalmente la anécdota, y su puesta en
un rincón del mundo tan insólito como es escena libera a los actores para que cons-
Colombia y su ilusión por vivir algún día en truyan sus personajes con base en la im-
paz–. provisación, a través de diálogos que per-
miten comprenderlos en sus conflictos y en
el rompecabezas que ensambla narrativa-

Herida abierta es una referencia al ca- mente el guión cuando alrededor del tema
nibalismo en términos colombianos del exilio, como centro temático de la his-
–o latinoamericanos: la violencia no toria, suceden desvíos que van más allá del
tiene exclusividad geográfica– cuando alegato con el que se denuncia una situación
el azar impone un viaje que sirve para y se rebasa lo circunstancial con lo esencial:
conjurar el miedo, aunque no cicatrice
observar el comportamiento del corazón de
del todo la herida que deja el rastro de
la muerte en sus víctimas;... las tinieblas que ilumina, bien o mal, la in-
certidumbre de un destino riesgoso.

La sinopsis nos habla de una abogada am- Se trata de la barbarie, pero también de las
bientalista que huye tras el asesinato de preguntas sobre el significado de ser mujer
su esposo y reorganiza su vida en Toronto, en un mundo maltratado por la testostero-
donde su hija cruzará por el huracán de las na; del asesinato que nutre los noticieros y
emociones que quizás le ayuden a entender de la vida íntima que consuela con el espe-
el mundo y resolver sus misterios, ponien- jismo del amor los desastres de la vida pú-
do a prueba la suerte de una realidad apa- blica; de la mala costumbre que propaga la
rentemente equilibrada con la presencia muerte como una expresión de la sordidez y
insólita del primo que tal vez asesinó al es- de la buena costumbre de la vida que atra-
poso de Aurora, a quien la viuda descubre viesa fronteras para continuar en el mundo.
–o cree descubrir– en el metro, dudando al
final de las visiones que parecen inventarle No sobra hacerse una pregunta ante cual-
sus paranoias. quier película: ¿qué intentó el director al
narrar una historia con la forma que eligió

27
para moldear sus aspectos visuales? espectador con su mirada o para que el es-
pectador se interrogue y llegue a sus pro-
Los nueve años de rodaje que han trans- pias conclusiones sobre lo que ha visto en la
currido desde Señoritas han sido un experi- pantalla–.
mento cifrado por los hallazgos en el cine
de Lina Rodríguez. Podemos sospechar que
se interesa por darle al sentido de sus pla- Los nueve años de rodaje que han
nos una razón dramática cuando se ilumina transcurrido desde Señoritas han sido
con la presencia de alguno de sus perso- un experimento cifrado por los hallaz-
najes. Sucede en el momento del suspen- gos en el cine de Lina Rodríguez. Po-
so que inicia la historia, con el plano en el demos sospechar que se interesa por
darle al sentido de sus planos una ra-
que Aurora aparece o se retira con un mo-
zón dramática cuando se ilumina con
vimiento pendular, compartiendo la es- la presencia de alguno de sus persona-
pera de lo que todavía es inexplicable y se jes.
revelará como ese viaje hacia el exilio que
emprende en el baúl de un automóvil don- La brevedad de la escena invierte los tér-
de se esconde para cruzar la frontera entre minos de un estilo generacional en el cine
Estados Unidos y Canadá. La imagen es su- latinoamericano, obsesionado con los ac-
ficiente para narrar lo que después explica- tores naturales. So Much Tenderness o Herida
rán los diálogos. Y entre la cámara y la es- abierta tiene la fortuna de contar con actri-
critura, la plenitud del ser humano, a pesar ces profesionales que actúan por el sortile-
de sus fragilidades, se revela por la mira- gio de su talento como actrices naturales,
da de Rodríguez –así como se propone una desvaneciendo la impostura de la ficción
pregunta que nos hace en silencio Aurora con el tono documental que revela la verdad
al final de la película, reflejada en un espe- de sus personajes, una verdad que se consi-
jo ante el que llora con un dolor torrencial, gue con un largo entrenamiento dramático,
confundida al descubrir que la presencia de así como en la escritura la sencillez de una
su primo en Toronto pudo ser una trampa trama se consigue con una larga reescritura
de la ira y la frustración que la persiguen, y en la que se edita, con la transpiración de la
una consecuencia del hecho cumplido de la inspiración, lo que no contribuye al relato.
muerte, girando el rostro para interrogar al

28
Pienso entonces en otra excepción al ca-
nibalismo que respira en las pesadillas del
cine colombiano: Lina Rodríguez, como
Franco Lolli en Gente de bien (2014), se inte-
resa por el material cambiante de las emo-
ciones de sus personajes sin buscar el mar-
keting de la sociología hecha ficción o hacer
del cine un púlpito del apostolado político
con ansias de redimir las desgracias loca-
les; sin aprovechar los delirios nacionales
para narrar “historias basadas en la reali-
dad”; sin rodar con la mala conciencia de
la culpabilidad por los azares políticos de la
guerra civil que continúa enfrentándonos
o repetir los infortunios de los rebeldes sin
causa que viven su adolescencia amenazada
por el crimen; sin consentir la mirada del
exotismo que espera en los festivales por la
vida de un continente reducida al lugar co-
mún de sus tragedias.

Un cine que no deja de ser legítimo y útil


para los investigadores que quieran tener
una mirada sobre el caos, como también es
legítimo y, quizás, rebase la cronología de
su realización, el cine de monsieur Lolli o
de madame Rodríguez por la forma como
nos descubren qué significa algo tan senci-
llo –o tan complicado– como estar vivo.

CONTENIDO SITIO WEB

29
LA OTRA FORMA, DE DIEGO FELIPE GUZMÁN
EL PRECIO DE SER AUTÉNTICO
Verónica Salazar

Más que difícil, lograr la producción de una y Brasil dirigida por Diego Felipe Guzmán,
película animada en Colombia es un even- nos plantea un mundo distópico del que los
to fortuito. El cine de nuestro país favore- personajes quieren escapar a toda costa, y
ce ciertos formatos, temas y estructuras por ello intentan encajar en las formas im-
narrativas de las que este filme se aleja. La puestas y artificiales que se les presentan.
otra forma, una coproducción de Colombia En este caso geométricas.

30
más ansiedad. Sin embargo, al ser un filme
Con un planteamiento inicial simple, la que requiere de mucho esfuerzo por parte
historia se transforma a una estructura del espectador, logra entretener y entrega
más bien compleja ante la audiencia, pues lo que promete: una historia compleja y la
la película no contiene diálogos, el drama posibilidad de reflexionar sobre el valor de
se propulsa a través del sonido y la músi- la autenticidad.
ca, con una animación muy bien lograda y
pocos personajes principales, lo que ayuda Con éxito y premios en su paso por fes-
a comprender la base del relato: nos encon- tivales, como el Festival Internacional de
tramos en un futuro donde los humanos Cine Fantástico de Cataluña, el Festival In-
buscan salir del planeta Tierra y emigrar a la ternacional de Cine de Animación de Anne-
Luna, la cual ya han intervenido y converti- cy y el Festival Chilemonos, La otra forma
do en un cubo. Para ser elegibles y lograr ir demuestra buena factura y un efecto ins-
a su soñado destino, al cual llaman Paraíso, pirador en la audiencia. No es una película
las personas deben encajar en figuras tipo fácil de ver, pero sí vale la pena acercarse a
Tetris, que finalmente forman prismas y así su mensaje. Además, con una excelente es-
son lanzados al espacio exterior. trategia de redes sociales la distribución del
filme deja un ejemplo para los demás; has-
Es una historia llena de ansiedades, pues ta crearon un filtro de Instagram para pro-
habla de la obsesión, del no pertenecer, de mover el engagement con los espectadores
querer salir de un mundo que ya no es via- y abrir la puerta a que ellos también fueran
ble, de lastimarse física y mentalmente por parte de la película a través de las redes.
encajar en impositivos moldes que venden
falso bienestar. Es una lectura del malestar
cultural contemporáneo y de la propaga-
...al ser un filme que requiere de mu-
ción de ideas en masa, con lo que muchas
cho esfuerzo por parte del espectador,
personas se pueden identificar. La parte logra entretener y entrega lo que pro-
difícil, en este caso, es identificarse con el mete: una historia compleja y la posi-
aspecto estético. Esto se debe al estilo de bilidad de reflexionar sobre el valor de
animación que es un poco grotesco, al pa- la autenticidad.
recer, con el fin de incomodar y generar aún

31
Es de memorar el mensaje que deja La otra
forma, pues hace una lectura muy aproxi-
mada del mundo que habitamos y llena el
relato con una conjunción de arte, músi-
ca y detalles que llaman la atención, pero
también le piden al espectador su partici-
pación. Este debe hacerse preguntas, crear
hipótesis e irlas contrastando, comparando
y descartando a medida que avanza el filme
mudo (aunque no silente). Sin embargo, no
es necesario el diálogo para comprender lo
que ocurre ni el nivel de profundidad que
alcanza la película. Pocas producciones tra-
tan a su audiencia como otro elemento de la
historia y esta lo hace con éxito.

CONTENIDO SITIO WEB

32
LA NIEBLA DE LA PAZ, DE JOEL STÄNGLE
LAS OTRAS VOCES DE LA MEMORIA
Danny Arteaga Castrillón

La conjugación entre las imágenes y las tórica, tema que sobresale en su narrativa
voces en La niebla de la paz es el reflejo pal- y se muestra como el camino esencial para
pable y elocuente de la construcción de paz la consolidación de una paz que aún es bru-
y de reconciliación en un país que ha estado mosa, pero que deja entrever una luz, como
siempre marcado por el estigma del con- la que precisamente irradia el documental.
flicto armado. Es además un ejercicio en sí
mismo de recuperación de la memoria his- La película, cuyo estreno estaba predis-

33
puesto para el 2020, pero debido a la pan- dos exguerrilleros. Ambos son conscien-
demia se postergó hasta el pasado mes de tes de la importancia de las palabras para
febrero, es dirigida por Joel Stängle, esta- la recuperación de la memoria. Boris tiene
dounidense que ha realizado proyectos so- un talante más periodístico, pero es crítico
bre multiculturalismo y memoria, y pro- sobre la información y las narrativas que se
ducida por la socióloga Carolina Campos. tejen en los medios de comunicación. Con
Juntos se internaron meses en la selva, en su cámara en mano registra la cotidianidad
el 2016, para filmar la experiencia de gue- de los negociadores a lo largo de los pasillos
rrilleros rasos en los momentos previos y del recinto, en La Habana, donde se enta-
posteriores a la firma del acuerdo de paz blan los diálogos. Lo denomina como un la-
entre el Gobierno y las Farc. Allí, en las berinto compuesto de distintas recamaras,
montañas del suroccidente colombiano, re- tras las cuales se trata un tema diferente de
curren a la voz del hoy excombatiente Teó- la agenda, pero desde donde se conforma el
filo González, un hombre campesino que, propósito común de encontrar un solo ca-
como él mismo lo dice, tiene el propósito mino para todos. “Conozco el pasado a tra-
de escribir para conservar la memoria; así, vés de imágenes. Eso es lo que lo impulsa a
desde su campamento, lo vemos recopilar uno también a grabar el presente, para que
la historia de vida de sus compañeros y dar la próxima generación conozca qué es lo
sus propias reflexiones sobre la guerra y el que uno está viviendo. Es como un ciclo que
futuro que anhela para el país. Las imáge- se repite; ojalá que este sea el último”, dice
nes se complementan con las realizadas por con estoicismo.
Boris Guevara, miembro del equipo de co-
municaciones de las Farc durante las nego- Teófilo es más poético, tiene la voz de un
ciaciones en La Habana, que resultan en un narrador, de un contador de historias, ca-
material hasta ahora inédito. Las dos his- paz además de captar la esencia de sus en-
torias conforman un paralelo, un contraste, trevistados. Su libreta y grabadora lo acom-
entre dos mundos: el de los rebeldes en la pañan en las charlas con sus compañeros
selva y el de quienes construyen la paz en en la selva, y luego relata en sus textos las
las mesas de negociación. historias que recoge, imprimiendo en ello
su propio sentir. “Las historias se pueden
El ejercicio de la comunicación une a estos usar para justificar la guerra, la continuidad

34
de un espiral de venganza, odio sin final.
O las mismas historias pueden ser usadas “Las historias se pueden usar para jus-
para reflexionar y detener el ciclo de la gue- tificar la guerra, la continuidad de un
rra. Cada persona decide qué sacar de ellas y espiral de venganza, odio sin final. O
para qué usarlas (…). Cada guerrillero anda las mismas historias pueden ser usadas
con sus propias memorias encaletadas, lo para reflexionar y detener el ciclo de la
guerra. Cada persona decide qué sacar
que se vive en la guerra se guarda adentro,
de ellas y para qué usarlas (…)
pero que estén enterradas no quiere decir
que no sigan vivas”, dice.
Hay un cuidado minucioso también en
Tal es el gran mérito del documental: re- las imágenes que acompañan estos relatos.
tratar el afán y las ansias auténticas de es- Hay un rastro poético en ellas. Unas mues-
tos exguerrilleros de recuperar la memoria, tran la cotidianidad de los campamentos,
que es el mismo deseo de sus compañeros la belleza que se puede hallar en la mani-
de campamento y de los diferentes actores gua, una cierta tensión en los rostros y en
que participan en el proceso. De ahí se des- las palabras de los combatientes ante los
prende otro de los móviles del documental: avances del proceso, el quiebre anímico
una caleta enterrada en algún lugar de las que representó el plebiscito para refrendar
montañas que contiene registros en video los acuerdos, en el que se impuso el “no”.
y audio y otros documentos confidenciales Todo ello en contraste con lo ceremonioso
en los que se recopilaron los reportes dia- de las negociaciones, la urbe y sus edificios
rios, durante más de nueve años, del cam- brillantes, las imágenes de archivo a veces
pamento de Alfonso Cano. La búsqueda de frías de los medios de comunicación y de
esa caleta representa para los dos comuni- las intervenciones del secretariado de las
cadores una fuente de información valiosa Farc y del presidente Juan Manuel Santos.
para enriquecer y revivir la memoria. “Si Un diálogo constante entre la vida civil y el
dejamos eso botado se pierde, y los que van tiempo detenido de la selva, la tranquilidad
a escribir la historia son otros; no podemos del recinto durante los diálogos y la incer-
dejar perder la historia nuestra”, dice Teó- tidumbre en los campamentos, como si esa
filo, a quien se le asigna la misión de en- yuxtaposición de secuencias en el docu-
contrar ese material. mental fuera en sí misma una metáfora de

35
lo que significó la negociación. moria y esclarecer la verdad, para que con
ello se pueda escribir la historia aún nebu-
Se aviene, luego de la firma del acuerdo, losa de nuestro país.
la última marcha de los guerrilleros, el re-
encuentro con la sociedad civil, los aires de
una transformación. Casi que un arco na-
rrativo se percibe en el carácter de todos los
CONTENIDO SITIO WEB
actores, incluidos Boris y Teófilo. El prime-
ro decide estudiar Diseño de Comunicación
y apoya desde esta área los proyectos pro-
ductivos de los exguerrilleros. El segundo
ha llevado a cabo labores de desminado y
forma parte de la Comisión de la Verdad. La
voz de los dos, algo nostálgica a lo largo de
la película, toma otro tenor hacia el final,
dos años después de la firma, en el 2018:
la de mantener la esperanza en el acuerdo
de paz, cuya implementación tambalea por
las medidas del Gobierno de ese momento,
pues una nueva incertidumbre se suma a
sus vidas: la dificultad de ver un horizonte
cristalino.

Por décadas, el imaginario del colombiano


frente al conflicto era el de la lucha de un
Estado contra un enemigo oculto en la sel-
va. La niebla de la paz logra cambiar esa idea
y desentrañar el sentir de aquellos excom-
batientes que, como los demás ciudadanos,
añoran también la paz y tienen el compro-
miso y sueño colectivo de recuperar la me-

36
LO PEOR HASTA EL MOMENTO, DE IVÁN GARZÓN
MAYORGA
LA COMPLEJIDAD EN LA SENCILLEZ
Liliana Zapata B.
Medellín, Colombia

Hacer cine siempre ha tenido y tendrá un quienes la hacen, sin embargo, me atrevo a
gran mérito, por el riesgo que se corre con decir que hacer una película 100% indepen-
la recepción del filme, la devolución de la diente, implica todos esos riesgos y además
inversión, el tiempo invertido en su crea- pone en juego el futuro de quienes la hacen,
ción y la satisfacción con el resultado de si se tiene en cuenta la industria tan com-

37
petida en la que están inmersos y con –no Llama la atención enormemente que dos
pocas veces– productos de tan alta calidad, estudiantes de Artes Visuales sin las he-
donde destacarse para continuar adelante, rramientas de guion, edición, dirección de
es la premisa básica. actores, entre otras –que sí podría tener un
estudiante de cine–, obtengan un largo-
Estamos en un momento en el que hay metraje tan logrado, y precisamente des-
cabida a toda clase de propuestas cinema- de estos aspectos –teniendo en cuenta que
tográficas, el eclecticismo es tal que casi además su idea inicial era hacer un corto-
cualquier proyecto tiene un público, o un metraje–, pues lo que consiguen transmitir
nicho –para expresarlo más concretamen- los personajes, los actores, y por supuesto
te–. Proyectos que no necesariamente es- la historia, son de una potencia tal, que ya
tán pensados para enriquecer a sus reali- otros más avezados quisieran conseguir.
zadores, más aún, sus ideas están menos Sin embargo, el aporte estético al que se-
permeadas por el dinero y más por la im- guramente ha contribuido el conocimiento
plicación que tienen en ese nicho, y si eso que de él tiene su director, es innegable en
se logra, habrá valido la pena para ellos. los primeros planos y en el uso de la luz en
Esta, llamémosla apertura, a nuevos y par- las escenas y conversaciones más profun-
ticulares planteamientos, nos permite ser das, donde las protagonistas son las pala-
testigos de realizaciones sencillas y de bajo bras.
presupuesto a las que quizás en el pasado
no habríamos podido acceder. Me refiero Estrenada en la más reciente edición del
específicamente a Lo peor hasta el momento Festival Internacional de Cine de Cartagena
(2022), la ópera prima de Iván Garzón Ma- de Indias –FICCI–, Lo peor hasta el momen-
yorga, quien, de la mano de Santiago Posada to, nos narra la historia del reencuentro de
Bernal como coguionista, idearon una pelí- dos hermanos separados física y emocio-
cula sincera y cercana, a pesar de la extrema nalmente desde años atrás, cuando Juan, el
sencillez y carencia de recursos, tanto eco- mayor de ellos, decidió hacer su vida lejos
nómicos como fílmicos, que, sin embargo, de su madre y su hermano menor, entende-
no fueron necesarios para obtener una cin- mos que distanciándose completamente de
ta poderosa y profunda. ellos como consecuencia de una tensa rela-
ción con su madre. Mario, por su parte, el

38
hijo menor, se quedó con su madre y ejer- completamente discapacitada y a la merced
ce ahora un rol de cuidador de esta, quien de los demás. El abordaje de estos tres per-
padece una enfermedad terminal. El reen- sonajes, pero sobre todo el de la madre, es
cuentro entre estos dos seres desconocidos tan sincero como sobrecogedor, y podemos
por el paso del tiempo, ocurre precisamen- casi sentir su impotencia, tanto como la ra-
te debido a esta situación, y dos personas bia, la desazón y el cansancio de Mario. Solo
que tienen perspectivas radicalmente dife- cuando la cuarta pared es rota en una esce-
rentes de la vida, deben encontrar juntos la na crucial, volvemos a comprender que es
manera de afrontar una realidad, ya de por una obra de ficción tan bien lograda y tan
sí retadora. respetuosamente escrita y dirigida, que nos
expulsa del hechizo de sentir que asistimos
a un hecho real, pues incluso es sencillo
caer en la trampa de creer que la madre pa-
dece fuera de la ficción, la enfermedad que
...el aporte estético al que seguramente
ha contribuido el conocimiento que de se retrata en la pantalla.
él tiene su director, es innegable en los
primeros planos y en el uso de la luz en Lo peor hasta el momento es un logro que
las escenas y conversaciones más pro- no solo les permitió a Iván Garzón y a San-
fundas, donde las protagonistas son las
tiago Posada graduarse de su pregrado –la
palabras.
película fue su tesis–, sino que además, nos
recuerda que el cine también es esto, una
herramienta para contar historias sencillas
Juan, el hermano mayor, es un hombre pero contundentes, que si hay infinidad de
ensimismado con una alta carencia de em- recursos al servicio de dicha historia, está
patía y fracturado, entendemos, por una bien, pero que si no los hay, el resultado
sucesión de circunstancias adversas. Mario, también puede darse si se cuenta con un
el menor, es un hombre trabajador, dedica- guion firme y claro, unos actores que en-
do y paciente con su madre enferma, y, sin tiendan esa historia, la vivan como propia
embargo, saturado por una situación per- y logren que el espectador compagine con
manente que tiene signado su presente y su ella, una puesta en escena convincente,
futuro. La madre, por su parte, es una mujer una fotografía que busque ambientar las

39
escenas pero que a su vez se compenetre
y transmita la realidad de los personajes
y lo que estos sienten en su interior. Esta
cinta consigue todo esto de la forma más
sincera posible y con una total precariedad
de recursos –pero no de claridad en lo que
busca transmitir–, logrando que nos abs-
traigamos de la parafernalia exterior que
en ocasiones nos distrae de la historia, para
terminar entendiendo que oscilar entre ser
héroe y villano está en nuestra naturaleza
humana, e incluso conviven en nosotros,
aun cuando queramos creer que no es así.

CONTENIDO SITIO WEB

40
LO PEOR HASTA EL MOMENTO, DE IVÁN GARZÓN
LETANÍA DE LO PERECEDERO Y TRANSICIONAL
Lina María Rivera (Sunnyside)

Iván Garzón y Santiago Posada empren- nas estaba destinado a ser su primer largo-
den una aventura hacia lo desconocido metraje autofinanciado. Después de cua-
cuando deciden escribir como tesis de gra- tro años, creyendo incansablemente en los
do Lo peor hasta el momento, sin conocer por sentimientos e ideas planteadas en el ma-
completo el procedimiento de escritura de terial, se deciden por un corte final y la pe-
un cortometraje, que con cincuenta pági- lícula se estrena a nivel nacional en el FICCI

41
2023. Por sí mismo, este recorrido, que solo dentes que hacen parte de la trama, como
puede generar admiración para quienes sa- el apellido de la familia, Espejo; los encua-
ben o por lo menos se imaginan la osadía dres, la forma misma del relato y la fun-
que significa realizar una película, es mere- ción alegórica que tiene cada personaje en
cedor de ser resaltado en la historia del cine las dinámicas familiares; una madre que no
colombiano. No obstante, la obra de Iván y puede hablar como proyección de ese si-
Santiago, sólida, desbordante de matices y lencio inquebrantable entre los hermanos,
detalles, fascina más allá de sus aspectos de Mario y Juan como reflejo de lo que el otro
producción y nos habla directo al corazón podría ser pero no es. Son algunas de las
con una historia tan entrañable como des- decisiones estéticas y narrativas con las que
garradora. Lo peor hasta el momento convierte esa su-
perficie reflectiva en un instrumento de la
La película comienza planteando la pesa- psique que remarca la complejidad del alma
dilla de una familia que, fragmentada por y que, en términos metafóricos, refleja el
conflictos del pasado, trágicamente se reú- “afrentamiento” de los hermanos y la di-
ne por la enfermedad degenerativa de Mar- ficultad para encontrarse con sí mismos,
ta, la madre de Mario y Juan, dos hermanos cautivando al espectador en un drama bo-
incapaces de reconciliarse y verse en el otro. gotano, tan juvenil como maduro, que re-
Desde un punto de vista, donde el narrador cuerda los inicios del cine de Felipe Aljure.
silencioso es el espejo que mira a los per-
sonajes tal y como son, sin que puedan de- En la dirección de Iván Garzón, el universo
volverle la mirada la mayoría de las veces, realista que envuelve a la familia Espejo se
acompañamos a los protagonistas en una convierte en una realidad palpitante y viva.
transición hacia lo conocido. Representada de una manera romántica,
en el sentido en que considera a los senti-
La mirada y presencia simbólica del es- mientos de los personajes como el elemen-
pejo se mantiene presente durante todo to definitivo para determinar lo que cada
el relato. Detalles diminutos como la no- escenario proyecta; las texturas desgasta-
menclatura de la casa 55-22, la duración de das, el desorden vetusto, tanto como la luz
la película 1:11 y la tipografía con iniciales y sombra, nos permiten identificarnos con
invertidas. Así como elementos más evi- las palabras de Mario Espejo cuando dice

42
que “Siempre le muestran a uno dos caras sez son las armas con las que la ciudad sigue
de todo. Es blanco o es negro. Es vida o es devorando la juventud y el ansia.
muerte… pero igual todos pasamos por to-
das las caras; lo más importante es la tran-
sición de una a la otra”. Y es precisamen- ...las texturas desgastadas, el desorden
te en esa espera que carcome lo existente, vetusto, tanto como la luz y sombra, nos
cuando el tiempo pesa sobre lo que queda y permiten identificarnos con las pala-
el presente es una sombra tenue a la que le bras de Mario Espejo cuando dice que
falta luz y oscuridad, donde reside la esen- “Siempre le muestran a uno dos caras
de todo. Es blanco o es negro. Es vida o
cia del film.
es muerte… pero igual todos pasamos
por todas las caras; lo más importante
Alejándose del enfoque tradicional so- es la transición de una a la otra”.
bre la juventud en el cine colombiano, ca-
racterizada como liberada y enajenada en
su micro universo, pero uniéndose a una El tono cómico con el que se cuenta esta
visión del futuro imposible y a un sentido tragedia, se unifica de una manera magis-
de la existencia indescifrable, Lo peor has- tral en una de las escenas más divertidas al
ta el momento evidencia una voz sensible e tiempo que reveladora de la película. Casi
inusual que reflexiona sobre la negligencia en la mitad del relato, cuando los pequeños
generalizada de la realidad citadina, la vida conflictos se acumulan en el carro varado en
acorralada como mera supervivencia y los medio de la vía y el absurdo supera el des-
demonios internos de una generación que tino fatídico, los hermanos luchan con el
tiene como proyección la evasividad o esca- peso de la realidad para ir en contravía, asu-
patoria, permitiendo matizar la calamitosa miendo que un nuevo paradigma entre los
enfermedad de Marta con anhelos sobre en- dos debe efectuarse para conseguirlo. Esta
contrar la muerte en la dureza fulminante e escena define y resume casi por completo
inmediata de un disparo o una bomba, en el desarrollo de la trama de una manera tan
vez de la dilación incalculable de un padeci- fresca, pertinente y natural que podría pa-
miento crónico. Acercándonos a una visión sar por insignificante, pero que si se des-
pulsante sobre violencia e incertidumbre, comprime puede observarse cómo funciona
en la que el silencio, el desamparo y la esca- a manera de microrrelato que sintetiza el

43
esquema general de la película. por su calidad y singularidad será una obra
que no pasará desapercibida y que segui-
Este drama familiar, escrito por Iván Gar- rá rompiendo los parámetros en las eta-
zón y Santiago Posada, tiene además otro pas venideras de distribución y promoción.
componente que supera los límites de la Acercándose al público, quizás también de
pantalla. Desde dos escenas donde el me- maneras tan propias y diferentes como la
tacine se convierte en metarelato, a través película desde su génesis lo reclama. Defi-
de un paralelismo entre la clásica escena nitivamente, “lo peor hasta el momento”
de la película mexicana Nosotros los pobres, solo podría ser perderse la oportunidad de
de Ismael Rodríguez, y las acciones repro- ver un film con un alma que se desborda por
chables de Juan hacia su madre; o cuando fuera de la pantalla que, a través de una ab-
los personajes de Marta y Mario sueñan con surda y agreste cotidianidad, nos recuerda
ser parte de una película como Lo peor has- que aunque la vida nos diga lo contrario, los
ta el momento. Se teje un diálogo profundo sueños pueden volverse realidad.
y conmovedor con los espectadores que co-
nocen perfectamente ese sentimiento de
soñar sobre lo invisible, confiar sobre lo
improbable y arriesgarlo todo por el deseo
de hacer cine. Aspirando a crear una obra
que acompañe a otros durante su vida y les CONTENIDO SITIO WEB
haga saber que aun en sus ideas más retor-
cidas o pesadumbrosas no están solos, qui-
zás como una eterna respuesta de gratitud
hacia lo que el cine hace en las personas y lo
que las personas hacen por el cine.

Es una lástima que para estos modos de


producción aún nóveles en Colombia, no
haya una ventana más accesible para que
películas como esta estén disponibles en
la cartelera del país. Sin embargo, sé que

44
MUDOS TESTIGOS, DE LUIS OSPINA Y JERÓNIMO
ATEHORTÚA
EL RETORNO DE LOS MUERTOS VIVIENTES
Hugo Chaparro Valderrama

Laboratorios Frankenstein

Sufro por tu silencio. Rafael Uribe Uribe, que estremeció a Bogotá


Monna Bell, Mudos testigos el 15 de octubre de 1914, la Empresa de Pe-
lículas Nacionales Di Domenico Hermanos
El primer largometraje del cine colombia- decidió reconstruir el que sería nuestro pri-
no fue una predestinación que nos condenó mer hecho de sangre impreso en el celuloi-
a la violencia: tras el asesinato del general de doméstico. La historia tuvo entonces un

45
tono periodístico que confundió los térmi- ción realizada por Máximo Calvo y Alfredo
nos con la ficción: Leovigildo Galarza y Jesús del Diestro:
Carvajal, los asesinos de Uribe Uribe, fue-
ron contratados por los Di Domenico para “Si la adaptación de María al lienzo
interpretar, un año después del magnicidio, no obtuvo el triunfo de Aura”, escribió
el crimen que los hizo lúgubremente céle- José María Garcés Bejarano en un artí-
bres. Y aunque se mezclaron imágenes do- culo publicado el 19 de mayo de 1924 en
cumentales del entierro de Uribe Uribe con Cromos, “fue porque aquella historia ro-
la puesta en escena del crimen, el testimo- mántica, de literatura única, tiene toda
nio del periodismo filmado y la veneración su fuerza en el lenguaje, es profunda-
por el héroe de la Guerra de los Mil Días no mente subjetiva, difícil de objetivarse.
fueron suficientes para suavizar la ira con María será siempre un drama; María es
la que sus familiares protestaron al consi- para leerla a los quince años, cuando la
derar que el general aparecía como un tore- vida no tiene engaños, ni el corazón he-
ro en los carteles que anunciaban El drama ridas; María es la lectura de las vírgenes;
del 15 de octubre: su aventura en la pantalla María no se escribió para deleitarnos
reflejó así el temor a ver nuestras miserias sino para emocionarnos, y vivirá mien-
magnificadas por el cine. Un prejuicio que tras el aristocrático sentimentalismo de
se manifestó simbólicamente cuando un nuestra raza no se pervierta con el sal-
crítico agresivo y espontáneo descargó su vaje deporte sajón (¿?)”.
revólver, durante una proyección en Girar-
dot, contra la imagen del general. Películas casi invisibles por la amenaza
del tiempo a la que solo sobrevivieron frag-
Siete años después, la versión cinemato- mentos, la educación pasional en la escuela
gráfica de María insistió en nuestra conde- del cine y su arqueología, que siempre le in-
na a la violencia en clave sentimental con teresaron a Luis Ospina, fueron el material
la desmesura de las pasiones. Aunque solo de los sueños para que ensamblara –con su
se salvaron unos segundos de las tres horas pupilo, Jerónimo Atehortúa, quien termi-
que hicieron llorar al público, se conservan nó el trabajo de lo que sería una invocación
registros no menos melodramáticos de los de ultratumba tras la muerte de Ospina– el
cronistas que escribieron sobre la adapta- collage de una época que regresa en Mudos

46
testigos: una reconstrucción de nuestra vio- ción de Mudos testigos es también un do-
lencia íntima y pública con los trances des- cumental sobre las costumbres de la vida
quiciados de la barbarie política y los trau- cotidiana en el ámbito familiar donde la
mas hormonales. madre es la encarnación de la bondad su-
prema, en las calles como escenario público
Los riesgos que padecen Alicia y Efraín, de la moda, en el registro de las diversiones
protagonistas de la historia de amor que que alegraban nuestro aire conventual, en
se narra en Mudos testigos, aterrados por- las ciudades donde transcurren su historia
que Uribe, el hombre con el que se casará y su histeria: Bogotá, Manizales y Medellín
Alicia, descubra su secreto, es la anécdota según Aura o las violetas (Garzón/Di Dome-
y el pretexto para conocer la forma cine- nico, 1924); Como los muertos (Garzón/Di
matográfica de nuestros primeros relatos Domenico, 1925); El amor, el deber y el crimen
y sus códigos sociales –la censura prohibía (Garzón, 1926) y El trágico final de Gardel, su
en los años 20 los besos lentos y se inco- última despedida (Hermanos Acevedo, 1935).
modaba con las películas francesas “por
sus argumentos de infidelidades con besos Piezas de un rompecabezas armado por
apasionados”, recordaba uno de nuestros Ospina y su pupilo para recrear las emocio-
pioneros, Pedro Moreno Garzón, en una en- nes que tanto quiso reprimir Manuel Anto-
trevista a Hernando Salcedo Silva en Cróni- nio Carreño en el Manual de urbanidad y bue-
cas del cine colombiano 1897-1950–. nas maneras para uso de ambos sexos (1853),
consultado a principios del siglo XX como
una referencia para comportarse sin sobre-
saltos sociales –cuando Carreño aconsejaba
...fueron el material de los sueños para
que ensamblara –con su pupilo, Jeró- “asear el alma, tratando de despojarla por
nimo Atehortúa, quien terminó el tra- medio de la oración de las manchas que las
bajo de lo que sería una invocación de pasiones han podido arrojar en ella durante
ultratumba tras la muerte de Ospina– el día”–.
el collage de una época que regresa en
Mudos testigos:...
Al rescate de lo que pudo ser alguna vez
el cine colombiano en su período silente,
Como en El drama del 15 de octubre, la fic- en una época en la que nuestros realizado-

47
res jugaron su corazón al azar y se los ganó el cine silente.
la violencia y la frustración por la forma
como sus largometrajes se convirtieron en Una sorpresa final nos recuerda el hu-
cortometrajes fragmentados por el olvido, mor infalible de Ospina cuando se agrega
Ospina y Atehortúa narran una historia de a la historia un fragmento de Los primeros
acuerdo con la sensibilidad que ventiló pú- ensayos de cine parlante nacional (1937), en el
blicamente lo que vivía el público a través que Gonzalo Acevedo saluda con voz níti-
de los personajes como un espejo de sus se- da al público y anuncia con orgullo la evo-
cretos. lución técnica del cine doméstico, como si
le diera la bienvenida al futuro. El sonido,
El prólogo y el epílogo en medio de los que que no deja de ser paradójico en Mudos tes-
vemos el romance tortuoso de Alicia, Efraín tigos cuando se utilizan de forma excesiva y
y Uribe es un caleidoscopio de imágenes que redundante la música y los recursos del fo-
reciben al espectador como si entrara a un ley –vemos a un caballo y el foley nos re-
espectáculo de vodevil, amenizado por las pite lo que vemos cuando escuchamos sus
bailarinas que danzan en una de las pocas cascos–, saturando y contradiciendo con su
películas del cine mudo en Colombia que pirotecnia la elocuencia muda de las imá-
todavía se conservan –Garras de oro (Jam- genes, incluso aunque nos recuerde la pre-
brina, 1926; “Cine-novela para defender sencia de las orquestas que acompañaban
del olvido un precioso episodio de la histo- en los años veinte las proyecciones del cine
ria contemporánea [la pérdida del Canal de silente o la estrategia comercial que recu-
Panamá], que hubo la fortuna de ser piedra peró varios clásicos en video, acompañados
inicial contra uno que despedazó nuestro por organistas como Rosa Río para que el
escudo y abatió nuestras águilas”, anun- silencio no ahuyentara a los espectadores –
cia uno de sus intertítulos)–, y lo despiden algo semejante a que Marcel Marceau fuera
cuando termina el relato con un caos visual acompañado por la cabalgata de las walqui-
de imágenes superpuestas, que contrastan rias de Wagner, un efecto estruendoso du-
con la sencillez narrativa de los fragmentos rante la proyección de Mudos testigos en la
con base en los que se narra Mudos testigos; que un espectador protestó pidiendo que le
un caos que acaso intenta sugerir la oscuri- bajaran el volumen a los mudos–.
dad y el desastre en los que está sepultado

48
El cine como artificio histórico y radio- perderse en el fin del mundo –donde sea
grafía social es en el testamento de Ospi- que esté el fin del mundo, quizás en el Ama-
na una recopilación de la memoria, tejida zonas–, los personajes huyen hacia la selva
cuidadosamente en su edición con los frag- filmada por los hermanos Acevedo en Co-
mentos que nos heredó el tiempo para que lombia victoriosa (1933), que intentó seguir
Atehortúa finalizara el montaje que sirve de con su reportería cinematográfica la guerra
antídoto contra la amnesia. La escritura de colombo-peruana de 1932.
los intertítulos, que enfatizan las contor-
siones de los actores cuando están a punto
de suicidarse o no pueden soportar el trance El cine como artificio histórico y radio-
ardiente de su romance –“Sé que este amor grafía social es en el testamento de Os-
nos está matando… ¿Sería imposible que pina una recopilación de la memoria,
volviéramos a vernos, a retomar nuestros tejida cuidadosamente en su edición
amores y amarnos en silencio? ¿No podría-
con los fragmentos que nos heredó el
tiempo para que Atehortúa finalizara
mos seguir amándonos en el misterio?”–, se
el montaje que sirve de antídoto contra
alternan con las imágenes en las que vemos la amnesia.
una Bogotá de fiesta durante los carnava-
les estudiantiles filmados por los hermanos
Acevedo, que despeinaron a la ciudad desde “El último cable de nuestro Cónsul”, es-
1921 hasta 1934, utilizadas para la ficción en cribe Rivera en el epílogo de La vorágine,
El amor, el deber y el crimen. “dirigido al señor Ministro y relacionado
con la suerte de Arturo Cova y sus compa-
El melodrama hizo entonces parte de la ñeros, dice textualmente:
realidad como la realidad hace parte del «Hace cinco meses búscalos en vano
melodrama en Mudos testigos cuando se pa- Clemente Silva.
rodia la huida de Alicia y Arturo Cova hacia Ni rastro de ellos.
Casanare en La vorágine, así como también ¡Los devoró la selva!»”.
se parodia la estructura de la novela según Alicia y Efraín sufren entonces la
el orden que le dio Rivera con un prólogo, misma suerte que Alicia y Arturo Cova,
un epílogo y tres partes. Al final de todo y tanto en la ciudad que los expulsa como
cuando ya no les queda otra esperanza que en la selva que los devora, y podríamos

49
verlos como sus dobles dramáticos. tubre, el documental y la ficción; evocando
el destino anunciado, como otra predesti-
La investigación en los archivos del cine nación, por el título de un film dirigido por
mudo colombiano –y de otras geografías: Camilo Cantinazzi para la Colombian Film
The Great Toronto Fire of 1904 (George Sco- Company, fundada en Cali en 1923: Suerte y
tt & Co.) fue utilizada para el fragmento en azar –algo tan impredecible como revivir a
el que las llamas lo devoran todo como una los muertos y a su tiempo en la pantalla–.
consecuencia hiperbólica de las travesuras
sensuales de los amantes– hizo de Ospina
y Atehortúa restauradores de la historia vi-
sual con la que editaron una ópera silencio-
sa, que filmaron y podrían firmar todos los
fantasmas que a través del tiempo la hicie-
CONTENIDO SITIO WEB
ron posible.

Mudos testigos puede verse entonces de


distintas maneras: como una ficción en la
que se representa una época; un relato que
canibaliza fragmentos de otros relatos; un
documental sobre el cine mudo colombia-
no; un juego cronológico que rescata la au-
dacia de los pioneros; una semblanza de lo
que significaba ser colombiano en los años
veinte a la luz de nuestras películas; una
parodia de La vorágine o todo esto a la vez.

En cualquier caso, antes de que el cine


mudo colombiano fuera devorado por la
selva, lo rescataron Ospina y su pupilo, tal
vez conscientes del encuentro que han te-
nido en el país, desde El drama del 15 de oc-

50
MUDOS TESTIGOS, DE LUIS OSPINA Y JERÓNIMO
ATEHORTÚA
EXPERIMENTAR EL SINGULAR TRASTOCAMIENTO DEL
ARCHIVO EN UNA SALA DE CINE.
Andrés Múnera

La sombra del archivista dispositivos del poder y restituye al uso co-


En Elogio de la profanación el filósofo ro- mún los espacios que este había confisca-
mano Giorgio Agamben conjura la profa- do. Un sacrificio que restituye el orden de
nación como una práctica que desactiva los las cosas tocadas de su morada sagrada, de

51
lo que había sido separado y petrificado, a y a la vez es arqueólogo, puede ser pintor,
la esfera profana del uso como realidad y un juglar de una tierra lejana o un cineas-
deber político. Estas “profanaciones” po- ta-vampiro inmortalizando cuerpos con la
drían hermanarse a las prácticas críticas que mordida del tacto. Desata constelaciones
describe Foucault en sus modos de subjeti- manipulando impresiones de formas. ¿Aca-
vación, prácticas que intentan una “desu- so eso no se la pasó haciendo el cineasta y
jeción” de los regímenes de verdad y sus archivista Luis Ospina a lo largo de una vida
dispositivos de poder, y que a su vez pro- de ejercicio fílmico desmesurado y ecléctico,
vocan una escisión en el archivo de su épo- luchando contra el olvido y activando dis-
ca, al cuestionar los límites del saber que positivos dormidos de las camisas de fuer-
administran sus regímenes sensoriales. za formales y sensoriales de la imagen y el
El archivista emerge y atraviesa el umbral sonido? En su obra póstuma Mudos testigos
de las lógicas enunciativas del archivo (acá (2023), junto al cineasta y crítico Jerónimo
como el agente que ordena y distribuye los Atehortúa, automatizan el archivo del pe-
enunciados que conforman las formacio- riodo silente de la historiografía cinemato-
nes discursivas en un momento dado), al gráfica colombiana, des-encantan y re-en-
posibilitar un camino inusitado facilitando cantan unas mitologías y procedimientos
el uso de un material que antes había sido de lectura epistemológicos para entregarse
confiscado por los regímenes de una dis- al juego, un juego sensorial e imaginativo,
ciplina, promoviendo diálogos de abertura pero también de índole político; algunos
y agitando las lecturas de lo oprimido y lo sectores pueden advertir en esta pelícu-
reprimido en el archivo, este genera nuevos la grandilocuencia o ligereza en los móvi-
pensamientos no cristalizados por el dic- les representacionales pero precisamente
tamen de la memoria oficial, no sólo en el el sismo de dichas automatizaciones hacen
ámbito de esa solemnidad de posibilidades del visionado de esta película un goce, una
históricas, sino que con su juego y contacto contemplación del desarme de los controles
con los materiales, vacía la relación obli- minuciosos de las operaciones de los cuer-
gada y el encantamiento de lo archivado ya pos (acá en cuerpos me remito a la fisicali-
emancipado. dad del archivo como agente de síntomas)
que son métodos propios de las disciplinas
El archivista es imaginativo, es médium y sus poderes censores y aniquilantes. Lo

52
ideal sería haber empezado esta disquisi- fermedades de la imagen como una estéti-
ción señalando la naturaleza del artilugio ca del desborde) Las imágenes de la María
que teje el sentido del montaje de las imá- (1922) de Máximo Calvo y Alfredo del Dies-
genes de Mudos testigos pero dichos ejerci- to, de Expedición al Caquetá (1931) de César
cios podrían encontrarse en otros acerca- Uribe Piedrahíta o Aura o las violetas (1924)
mientos que se han hecho alrededor de la de Pedro Moreno Garzón y Vicenzo Di Do-
película de Luis Ospina y Jerónimo Atehor- menico emergen, después del ritual de pro-
túa, yo débilmente encauzo mis energías fanación, en rumores que circulan por la
en este acto de profanar el raigambre fas- pantalla en un doble movimiento donde la
tuoso y solemne de nuestros antepasados apropiación pervive con la extrañeza y lo
fílmicos para celebrar esta creación como trascendente, un rescoldo de alteridad, esta
una llave de entrada a nuevos terrenos es- profanación política celebra la entrega a la
peculativos, el cine de Ospina de Agarran- fábula, al melodrama (de urgente reivindi-
do pueblo (1977) junto a Carlos Mayolo o cación) la abrasiva práctica experimental de
En busca de María (1985) junto a Jorge Nie- la intervención como laboratorio artesanal
to, así lo evidencia; por Mudos testigo laten de resistencia de los “usos correctos” me-
las profanaciones de autores como Raoul todológicos científicos o artísticos, como el
Peck, Bill Morrison, Sergei Loznitsa o João estudiante Luis Ospina en la UCLA lo hacía
Moreira Salles pero con un brío autónomo, en El bombardeo de Washington bajo el influ-
propio de los ejercicios de fe, se desplaza la jo embriagante del cine de Bruce Conner o
función comprobatoria y documental del de Kenneth Anger.
archivo permitiendo una nueva respiración
de cine, realizado a través de la exhumación
y los últimos hálitos de un cuerpo propenso ...yo débilmente encauzo mis energías
a la desaparición ( de nuevo el cuerpo físi- en este acto de profanar el raigambre
co, como palimpsesto de enfermedades que fastuoso y solemne de nuestros antepa-
tanto señala el fotógrafo Fontcuberta, pre- sados fílmicos para celebrar esta crea-
cisamente el carácter milagroso de la im-
ción como una llave de entrada a nue-
vos terrenos especulativos,...
pronta visual de esta película sea gracias a
su negativa a la restauración institucional
del archivo, permitiendo evidenciar las en-

53
Mudos testigos no inaugura una estela ni
quiere ser fundacional en una corriente
pero logra conjugar pensamiento, práctica
y juego con ingenio y talento: advierte una
urgencia, señala una necesaria lectura de
la memoria archivística de nuestro pasado
cinematográfico sin dejar de lado la expe-
riencia de la sala de cine en una época del
consumo de imagen en cubículos monocor-
des de incorporación y desecho vertiginoso,
además puede erigirse como un enclave de
reflexión, un volver a la locuacidad muda
de las imágenes que nos precedieron justo
en el momento hiperbólico de producción
irreflexiva de “contenidos” de un presente
abúlico con las profanaciones. Actualizo la
sentencia de Agamben “… la profanación
de lo improfanable es la tarea política de
esta generación”.

CONTENIDO SITIO WEB

54
TOPOS, DE CARLOS ZAPATA
RATAS DE ALCANTARILLA (POR DOS)
Oswaldo Osorio

Los niños de la calle ha sido uno de los de la región tiene su buen puñado de cine
grandes y constantes motivos del cine lati- con este adverso y delicado tema. Adverso
noamericano. Desde Los olvidados (Buñuel, porque las condiciones materiales y afecti-
1950), pasando por Crónica de un niño solo vas de estos niños nunca dan para relatos
(Favio, 1965) y Gamín (Durán, 1977), hasta felices, y delicado porque siempre habrá el
Pixote (Babenco, 1981) y La vendedora de ro- riesgo de caer en los territorios de la porno-
sas (Gaviria, 1998), casi cada cinematografía miseria o de la mirada lastimera y condes-

55
cendiente. película es potente, con toda la ciudad como
escenario de fondo y una cuidada puesta en
En casi todos estos relatos, por supues- escena en cuanto al vestuario y maquillaje
to, la aproximación realista se impone, principalmente, es en la palabra donde ra-
pero suele haber, en mucho o poco, gestos dica la fuerza expresiva y significativa de la
de fantasía y delirio, dada la naturaleza de obra, así como lo que define a los persona-
los personajes. En esta película de Carlos jes. Lo primero que golpea fuerte (aunque
Zapata, a quien ya se le reconoce un estilo es conocido de otras películas, pero en esta
intenso e irreverente (algo punketo inclu- se hace más evidente) es la carga de violen-
so) por sus películas Pequeños vagos (2012) cia y hostilidad que hay en la cotidiana co-
y Las tetas de mi madre (2015), esa fantasía municación entre estos niños. No importa
y delirio están en el centro de su propuesta si son amigos o si se trata de la circunstan-
para hablar de los niños de las alcantarillas cia menos conflictiva posible, la agresividad
de Bogotá. para con el otro y la actitud de estar siempre
a la defensiva son la gramática de su voz.
Se trata de la historia de Titi, un gamín
que, a pesar de su corta edad, tiene un par- Esto, claro, es reflejo de su vida y entor-
ticular carisma, además de un grupo de no, de una existencia en la que han tenido
amigos, entre ellos un hermano y algo así siempre que valerse por sí mismos y de un
como una novia. Lo primero que propone mundo donde tienen que defenderse cons-
Zapata, quien también es también el guio- tantemente y cada quien es su única pro-
nista, es un relato más de personajes que de tección, y ante la ausencia de fuerza, bue-
historia, pues el argumento está compuesto nas son las palabras. Tienen a su grupo de
por el ir y venir de ellos en las usuales ac- amigos, es cierto, pero aun así, el indivi-
tividades: limpiar vidrios en los semáforos, dualismo se impone muchas veces y, aun-
mendigar, aspirar pega y deambular por la que no haya agresión física, la verbal está
ciudad. Pero el grueso de las acciones está a flor de lengua. Pero lo impresionante de
concentrado en las relaciones que estable- esta dinámica de su lenguaje es la contra-
cen entre ellos y en sus diálogos. dictoria manera como se combinan, orgá-
nica y fluidamente, las actitudes y gestos de
Entonces, aunque el universo visual de la hostilidad e insulto con los de solidaridad

56
y fraternidad. Todo esto, por supuesto, ca-
balgando sobre la farragosa jerga propia de Pero Titi no se quedará solo, porque em-
la calle, para la que hay que estar atentos a pieza una amistad–noviazgo con La Rato-
inferir o descifrar su intrincado glosario. na, una joven que ve en él a un compañero
para ir al “paraíso”. Y este concepto tiene
varios sentidos en el relato: físicamente,
es un mejor sitio donde podrán vivir (lejos
Lo primero que golpea fuerte (aunque
es conocido de otras películas, pero en de los pirómanos asesinos), es igualmente
esta se hace más evidente) es la carga un estado mental que flirtea un poco con la
de violencia y hostilidad que hay en la fantasía, y también un lugar espiritual a la
cotidiana comunicación entre estos ni- manera de la tradición católica. Incluso es
ños.
una imagen: el cartel de un hotel cinco es-
trellas con ese nombre.
Ahora, esa lucha por la supervivencia
diaria está enmarcada en el gran conflic- Es entonces con esto que se empieza a
to social que significa su desamparo, tanto complicar (y a enriquecer) el relato, pues la
de los vínculos familiares como de la ins- relación con ella hace más complejo al pro-
titucionalidad. Pero hay otro conflicto más tagonista, en tanto se activan otros aspec-
específico, del que el relato hace su punto tos, como su contradictoria actitud frente a
más dramático y reactivo: La incineración su individualismo y el deseo de tener com-
de las alcantarillas, con estos niños aden- pañía, o la ambigua presencia de su grupo
tro, como un acto de “limpieza social”, el de amigos, o sus deseos a futuro ante las
cual tiene su propia y criminal declaración: propuestas de La Ratona. Así mismo, el jue-
“Las alcantarillas son para el agua, no para go con la fantasía (o el delirio) se evidencia
las ratas”. Es así como Titi pierde a sus en distintas ocasiones de manera alegórica
amigos, quienes pasan a un segundo plano y lírica, dando lugar a escenas muy impor-
a deambular, por el relato y por la ciudad, tantes para el sentido del relato y en las que
como tiznados fantasmas que ya ni pueden el espectador debe saber leer el código de la
decir groserías, porque donde están, ya no película o elegir cuál cree que puede ser el
necesitan la violencia del lenguaje para de- significado de la historia y el papel de los
fenderse. personajes.

57
Así que, como sería de esperar, la versión
El asunto es que este último aspecto de- del director parece más clara y directa con
pende de las dos versiones que tiene esta lo que quiere decir, incluyendo el sentido
película, porque está el “boceto” liberado lírico y entrañable que desarrolla con la re-
en internet por su director con la adverten- lación entre la pareja de personajes prin-
cia de que es “la versión fidedigna de la obra cipales; mientras que la otra versión tiene
original”, y está la versión de los producto- elementos de mayor impacto para con el
res, con la factura y el acabado general del espectador en general, como el uso de cier-
último corte para salas (ver al final el link tas canciones, el lamento a gritos de la vio-
donde se pueden ver ambas versiones). lación, la madre llorando o el preciosista
viaje en bote, es decir, no parece tanto una
En términos generales, las dos versio- película de Carlos zapata, ya que hay dos
nes no difieren en mucho cuando se trata para compararla.
del universo del relato y los personajes, así
como de la denuncia y esa mirada afectiva
que hacen sobre los niños de las alcantari- Así mismo, el juego con la fantasía
llas. No obstante, hay otras diferencias sus- (o el delirio) se evidencia en distintas
tanciales, en cuanto a las escenas incluidas ocasiones de manera alegórica y lírica,
o no, lo cual determina unos cambios signi- dando lugar a escenas muy importan-
ficativos en la comprensión de la historia. tes para el sentido del relato y en las
que el espectador debe saber leer el có-
Pero la gran diferencia, es que en el boceto
digo de la película...
del director el personaje de La Ratona exis-
te realmente y, en la otra, es solo producto
de la imaginación de Titi, con todas las im- Son dos versiones de una historia y una
plicaciones que esto tiene en relación con sola premisa verdadera: la dura realidad de
la historia y el personaje, empezando por lo estos niños contada en clave lírica y emotiva
decepcionante que suele ser para el público y mirada desde unos recursos y tics propios
saberse “engañado” todo el tiempo con lo del cine de ficción, que unas veces logra un
que le acaban de contar. acercamiento honesto y otras veces se pasa
con sus artificios.

58
BOCETO DEL DIRECTOR CARLOS ZAPATA:
https://drive.google.com/file/d/19RM1fzzdYpt-
ZWW01uLdOpCSdY_AysqHH/view?usp=share_link

CORTE FINAL DISPONIBLE EN RTVCPLAY:


https://www.rtvcplay.co/peliculas-ficcion/topos

CONTENIDO SITIO WEB

59
UN VARÓN, DE FABIÁN HERNÁNDEZ
EL DOLOR DE UN VARÓN
Alejandra Meneses

Un varón es la ópera prima del director co- a las de Carlos, el protagonista de la película. Un
lombiano Fabián Hernández, la cual se estrenó varón vuelve una vez más la mirada a la vio-
en la 75 edición del Festival de Cannes 2022. En lencia urbana, pero esta vez abriendo puertas
ella, Hernández retrata un fragmento de la ju- de diálogo y debate respecto a los estereotipos
ventud en el centro de la capital. Las localidades construidos en torno a la masculinidad.
Mártires y Santafé son espacios donde también
él creció y en donde vivió situaciones similares Primero está el abandono,

60
o la ausencia. un ser sin lágrimas, pero con criterio.
No hay padre ni madre, no hay casa,
sólo la vida vivida en falta. Su criterio está hecho de escombros. Si
El futuro es una imagen ajena. la ciudad está en ruinas, el barrio en rui-
El presente es reacción, nas, la familia en ruinas, la casa en ruinas
acción reacción, y el cuerpo en ruinas, queda el criterio de
sobrevivir en esa cadena de aconteci- piedra. Como la piedra, su corazón se va
mientos. enfriando y con los golpes se fragmenta.
Nadie sabe lo que se esconde bajo ese cri-
Está la calle, terio.
o el riesgo de vivir en ella,
en donde lo único que tiene valor es la pa- A un cuerpo flaco y sin músculos, como
labra. el de una niña, le dan una pela. Por eso
Si usted no tiene nada, el varón tiene que ejercitarse; debe saber
su palabra promete y paga las deudas. sostener un arma, mantener la mirada,
Si no es capaz de pagar disparar y salir ileso. Un varón se cons-
y se muestra débil, truye con poca ternura y mucha venganza.
la calle lo carcome, Sus razones tienen el peso y la dimensión
con sus tentáculos lo atraviesa. del rencor, la justicia por mano propia, la
Párese duro. respuesta inmediata, sin espacio para las
No tenga miedo. dudas.
Muestre de qué está hecho.
Tenga criterio. ¿Y si no tiene plata? Se mete a una pan-
Sea un varón. dilla. ¿Y si tiene a la mamá en la cárcel?
Las vueltas de la pandilla le ayudan a aho-
El varón no puede llorar en medio del rrar la plata. ¿Y si está solo? La pandilla lo
fuego cruzado. Por ningún motivo se deja respalda.
humillar. Si es necesario hacerse matar se
arriesga, pero apuntando de frente prime- ¿Si le duele el cuerpo? Calla. ¿Si no quiere
ro. El varón reacciona de pie, sin mente y ser un varón? Calla. ¿Si extraña a la mamá
sin culo, como los muñecos de plástico. Es y a la hermana?...

61
de consuelo. La sociedad parece demandar
La calle está llena de varones que andan la presencia del bandido como parte de su
en círculos y hieren, estructura mecánica, como insumo para la
producción del capital. Pero el varón, en
¿Existe una forma posible de la huida o un medio de todo, intenta resistirse a su con-
cambio de dirección? dena.

El “varón”, sobreviviente de la calle, es Una voz le susurra al oído:


quizás la forma masculina más dura del
patriarcado: su posibilidad de elección res- “Comienza el drama
ponde a lo inmediato. No tiene tiempo para Me levanto de la cama
pensar en cómo ser otro, aunque otro se co- Me cepillo los dientes
rresponda con su deseo interior. Y miro el sol salir
Prendo una vela con mucha cautela
Y afuera escucho el barrio sin saber quién
va a morir
A un cuerpo flaco y sin músculos,
como el de una niña, le dan una pela. Y es que el destino no está escrito
Por eso el varón tiene que ejercitarse; Lo escribimos nosotros
debe saber sostener un arma, mante- A nosotros nos toca el destino escribir
ner la mirada, disparar y salir ileso. Un Y aunque la vida esté dura
varón se construye con poca ternura y
Y el gobierno la empeore
mucha venganza.
A nosotros nos toca decidir
Hay días en que yo cruzo el barrio
A veces, furtivamente, su deseo íntimo En pleno tiroteo, él va detrás de mí
se convierte en otra imagen y aparece otra Si me aborrezco a veces de estar vivo
cara de la película. Cuando el varón recupe- Y pierdo la esperanza, él va detrás de mí
ra o descubre sus propias lágrimas, su otro Si me confundo y pierdo la fé
yo se manifiesta. Es la imagen del miedo, A medio caminar el ángel me dice a mí
del hombre amenazado. Es a su vez la ima- “Levántate e’ la cama y enfréntate a
gen de lo humano, nuestro propio reflejo La vida porque tu naciste pa’ sobrevivir”
frágil en el espejo. El dolor y la necesidad ”.

62
por fin a la ternura, al refugio, al hogar.
Ese susurro es su propia voz y la de los
sobrevivientes de la calle. Por un instante,
su canto al unísono se convierte en grito y
demanda, fuerza protectora, corazones en-
lazados, latentes. Pero del instante fugaz se
pasa rápidamente a la ciudad en ruinas.
CONTENIDO SITIO WEB

El joven, adormecido en su cuerpo de va-


rón, deambula hasta el encuentro con otros
jóvenes disfrazados de varones. Otro ins-
tante íntimo se manifiesta. Sus cuerpos se
juntan alrededor del fuego. En silencio, y
con las llamas iluminando sus rostros ex-
traviados, aparecen en su lugar los niños
abandonados, introspectivos, quizá resig-
nados, o maquinando alguna salida al borde
del abismo. Nadie los ve, ellos mismos no
se miran, no conocen sus nombres, tan sólo
ansían el sosiego en medio del ruido.

El varón tiene que decidir si matar o mo-


rir. ¿Su retrato es atemporal? ¿Es acaso otro
sujeto sin futuro? ¿Una imagen reciclada,
sin fin? En medio de la oscuridad, el varón
corre con furia. ¿Cuándo amanecerá? No
para sobrevivir, sino para vivir dignamen-
te. Cansarse y al fin detenerse. Llorar y sa-
car el deseo íntimo a flote, sostenerlo entre
las manos o en la boca, y lanzarlo sin miedo
al mundo. Después de la oscuridad, volver

63
ANHELL69, DE THEO MONTOYA
AN.HELL69 D. NO FUTURO
David Guzmán Quintero

“Y siento un humo como familiar. Los carceleros de la humanidad


Alguien se acerca y comienza a hablar. no me atraparán
Me quedo piola y digo: ‘¿Qué tal? dos veces con la misma red”.
Vamos a pescar –No soy un extraño (Charly García)–
dos peces con la misma red’.
Desprejuiciados son los que vendrán
y los que están ya no me importan más. Me gusta el cine. Tengo cierta distancia

64
con hacerme llamar ‘cinéfilo’, pero he vis- experimentado esta sensación de vulnera-
to unas cuantas pelis. No puedo decir que bilidad tan exquisita frente a la hostilidad
mi encuentro con el cine fue una casuali- del relato que veía. Es como si, por primera
dad, pues lo busqué, lo rebusqué y desde vez en muchos años, sintiera que una pelí-
entonces he tenido unos dieciocho años en cula es más importante que el cine. Es como
los que me he ido enamorando de él cada si, por primera vez en muchos años, sintie-
día más (claro, con todo y las tusas que uno ra cierta extrañeza al salir de la sala y ver
puede pasar con cualquier amor); el cine ha a la gente siguiendo su vida, desentendida
sido mi amigo, novio, padre, hijo, maes- de eso a lo que yo acababa de asistir. Todo
tro; ha hablado de mí (o yo he hablado de lo anterior es muy a pesar de esa línea a la
mí a través de él) como ser sexual, social, que intento aferrarme y es a la de hablar de
de mi (supuesta) identidad como colombia- películas como películas (no como novelas
no, como hombre, ha cuestionado mi po- literarias, no como obras de teatro) y, así
sición económica, mis creencias políticas y mismo, manteniendo al margen cualquier
mis privilegios; ha sido la mala y la buena argumento emocional del tipo “esta peli es
influencia (si tan solo mis padres hubie- buenísima, me hizo llorar”; pero una pe-
ran sospechado que el ir a cine no es algo lícula única requiere, así mismo, una ex-
tan inocente como parece), llevándome a cepción a la norma. Expongo entonces, de
orgías, favelas, tertulias, bares, tabernas, entrada, un componente subjetivo mucho
burdeles, bajos fondos, viajes por carrete- más presente de lo que de por sí lo ha es-
ras, con ricos, pobres, pobres ricos, pros- tado en otros textos. Expongo entonces, de
titutas, drogadictos, asesinos, amantes, entrada, que la forma en la que he recibi-
enfermos, parias, abusados y abusadores, do Anhell69 ha estado fuertemente condi-
ladrones. Y fue todo eso lo que me llevó a cionada por la cercanía que siento con esas
intentar escribir crítica, que no es otra cosa imágenes y cuánto llevaba esperándolas.
que una simple verbalización de ciertas re-
flexiones que a veces comparto. El relato empieza con un carro fúnebre
transportando un ataúd. La cámara lo sigue
Hago esta nota autobiográfica introduc- desde atrás y la banda sonora está com-
toria porque, con todo y los años que llevo puesta solamente por un ruido blanco que
viendo cine, pocas veces (o ninguna) había se va a extender por algunas de las próxi-

65
mas escenas; se corta a un plano más cerca paña a los vivos y a los muertos) y la pugna
que encuadra a la ventanilla del ataúd, sin en contra de la norma. Quién sabe cuál es el
embargo, la oscuridad no nos deja perci- que más se desarrolla, o si los primeros son
bir bien un rostro y las luces que pasan por consecuencias directas del tercero.
encima tampoco son suficientes: el muerto
puede ser cualquiera. La voz en off entra di- Sobre estos mismos tres ejes, gira un tra-
ciendo que no pidió nacer. Cortamos a un bajo corto del 2020 del mismo Theo Mon-
material de archivo de la apocalíptica Me- toya, Son of sodom, que se centra solamente
dellín de los ochenta y noventa, después a en Camilo Najar, que vuelve a aparecer en
una fiesta y luego a una iglesia que pasa a la Anhell (de hecho, ambos títulos vienen del
habitación del narrador, que cuenta que es Instagram de Camilo. Usuario: @an.he-
de una generación criada solo por madres ll69. Nombre: Son of sodom), un joven ho-
y cómo lo excomulgaron de la iglesia a los mosexual al que Theo le hizo casting para
trece años; durante este último momento una película de horror muy cercana al cine
que es abordado con una simpleza soberbia, B estadounidense y que muere poco tiempo
descubrimos, mediante una panorámica, después, antes de que Theo pudiera decirle
algunos símbolos que entran en pugna des- que había sido seleccionado como el prota-
de la perspectiva normativa de género: pri- gonista de su peli.
mero, el logo de Nike en la ventana (símbolo
deportivo, “actividad de hombres”) y luego
florecitas en el closet junto a una fotogra- ...Theo Montoya sintetiza los tres ejes
fía de Britney Spears (símbolo de la cultu- en torno a los cuáles gira el relato: la
ra pop, propia “de mujeres”); a esa pugna muerte (que acompaña a los vivos), la
hay que añadirle la tensión que se genera rumba (que acompaña a los vivos y a
entre la tranquilidad de la panorámica y la
los muertos) y la pugna en contra de la
norma.
voz en off, parca, que cuenta cómo entró
en las calles y probó las drogas siendo un
niño. Solamente en estos tres momentos, Entonces cabría decir que tanto Son of so-
Theo Montoya sintetiza los tres ejes en tor- dom como Anhell69 (y especialmente Anhe-
no a los cuáles gira el relato: la muerte (que ll69, por abarcar más tiempo y más perso-
acompaña a los vivos), la rumba (que acom- nas) parten de un luto que Theo Montoya

66
exorcizó a través del cine (“Me enamoré hecho de aparecer a lo largo del filme, se
del cine porque era el único lugar en el que chocará contra un relato al que ignorante-
podía llorar”; cada vez tiene más sentido lo mente llamará “inconsistente”; en cambio,
que decía Haneke de que hace cine para no quien lo afronte como experiencia sensorial
ir al siquiatra), un estado letárgico al que detonada por el luto, se encontrará con una
nos incorporamos frecuentemente en un propuesta errática y laberínticamente esti-
país violento, en un país violento para la mulante.
clase media-baja, en un país violento para
la población LGBTIQ+ de clase media-baja. Es quizá por eso mismo que Theo Mon-
Esto es una sensación universal, pues so- toya renunció a realizar su filme de ficción
mos víctimas de la violencia, aún si no he- tras el fallecimiento de su protagonista. En
mos recibido agresiones personalmente; cambio, en Anhell, Theo se extiende, prime-
coincidimos en la vulnerabilidad que im- ro, en las recreaciones de lo que iba a ser
plica ser parte de una sociedad beligerante este, mientras, en segundo lugar, ahonda
a la que se le entregan los cuerpos para que también en sus otros amigos que también
los cuide y estos resultan siendo un conte- presentaron castings. Su ficción iba sobre
nedor vivaz de vejaciones. Visto desde esta una Medellín (más) apocalíptica en la que
perspectiva, el relato toma muchísimo más ya los muertos eran tantos que no cabían
sentido desde lo que decía Judith Butler en en los cementerios, por lo que los fantas-
Deshacer el género (2006) de que “puede ser mas y los vivos comenzaron a convivir y los
que en esta experiencia [la del luto] nos sea vivos comenzaban una práctica sexual que
revelado algo de nosotros mismos, algo que se denominó “Espectrofilia” y empiezan a
delinea los lazos que tenemos con los otros, ser perseguidos y aniquilados por el gobier-
que nos muestra que estas relaciones cons- no y la iglesia a causa de ese mismo deseo.
tituyen nuestro sentido del yo, y que com- Y en cuanto a lo segundo, Camilo Najar se
ponen quiénes somos […]” Y este sería el convierte solo en un extremo del ovillo que
frente para abordar Anhell, pues quien lo se desenreda en esos otros jóvenes que son
aborde esperando un relato clásico o aris- asesinados día a día, todos los días en esta
totélico (o desde cualquier parámetro pre- selva que es Medellín; esto se sintetiza al fi-
establecido, en general), tomando el coche nal en el collage (¿o es todo el relato un co-
fúnebre como un hilo narrativo por el mero llage, una colcha de retazos?) de los rostros

67
de quienes murieron: un collage que sigue a manifestantes que exigen una vida digna?
y sigue añadiendo nombres en su registro. ¿Una sobredosis? ¿Las enfermedades e in-
fecciones para las que no hay tratamientos
a las que cualquier persona pueda acceder
fácilmente?) Opuesto a la cara que hemos
...a convivir y los vivos comenzaban
una práctica sexual que se denominó visto del No futuro, en la que la violencia se
“Espectrofilia” y empiezan a ser perse- inscribe como un elemento más del paisaje
guidos y aniquilados por el gobierno y y las personas ignoran el peligro latente que
la iglesia a causa de ese mismo deseo. les susurra al oído, estos jóvenes de Anhell
son conscientes de que van por la calle con
Medellín es una ciudad cercenada por el la muerte agarrada de la mano y prefieren
cine, una ciudad trepidante que nos en- hacerle el amor… ese mundo de sexo, dro-
seña cada vez otra cicatriz. En este relato, gas y fiestas es solo un medio a través del
Theo hace uso de varias estrategias (como cual reivindican su estadía en el mundo de
dramatizaciones, entrevistas, material de los vivos, con la tranquilidad de que, cuan-
archivo, material grabado que roza con lo do pasen al de los muertos, algún espectro-
contemplativo) que abren ese postigo en la fílico los invitará a seguir viviendo.
ciudad que nos da la bienvenida a otra cara
del No futuro1: jóvenes que se ven obligados El montaje del filme hace que incluso el
a robar para poder pagar la matrícula del co- mismo relato pareciera que cargase con el
legio, jóvenes agazapados que encontraron mismo presagio que sus protagonistas, no
un hogar en las drogas, el sexo y la clandes- solo por el registro de todo un mundo que
tinidad, y lo único que hicieron fue una rum- amenaza la vida de las personas que no per-
ba en casa, mientras esperaban a la muerte tenecen a una hegemonía sexual o de clase,
con los brazos abiertos. (¿Qué puede matar sino porque muchas veces pareciera que el
a la juventud en un país que suda crueldad? filme está por acabarse y resulta dando un
¿Sicarios, Guerrilla? ¿La policía, que asesina soplo de vida más… hasta que se acaba de
verdad. Y al final, de todas formas, se sien-
1 Es importante discriminar el precedente (la ausencia del padre)
del contexto (el No futuro), pues no es una consecuencia de la te que acompañamos a estos personajes por
otra; el filme en ningún momento sugiere que las drogas y la fies-
mucho tiempo (sin embargo, no por el su-
ta (muchísimo menos la sexualidad y la identidad de género) sean
consecuencia de ser una generación sin padre. ficiente). La estructura realza sobremane-

68
ra esta sensación de pérdida, pues primero estilo vodevil, etcétera; tal vez, sin embar-
conocemos a los personajes, nos encariña- go, Cortejo, al no ser un relato tan personal
mos con ellos y luego nos dicen que no po- y tan visceral, se permitía ser más atrevido
demos seguir sabiendo de ellos, que ya no y arriesgado en cuanto a su tratamiento: ya
están: sentimos, como Theo, que nos los queda ad libitum de la audiencia a qué darle
han arrebatado. más importancia, si es que acaso merece la
pena meterse en esa discusión.
Este trabajo elaborado en el montaje del
filme, es extensible a todos sus aspectos No obstante, más allá de ser un relato ci-
formales, pues es una exploración inquie- nematográfico imperdible, Anhell es un ho-
ta en el lenguaje cinematográfico, atrave- menaje (por eso no debe entenderse que sea
sando los recursos, mutando de un géne- cándido). Es de los asesinatos al padre más
ro al otro sin mayor inconveniente: utiliza hermosos que he visto2, representándolo,
el material de archivo de los castings y lo de hecho, con el reconocimiento a Víctor
rescatado en redes sociales, la iluminación Gaviria dentro del mismo filme, siendo este
del material filmado es mortecina en algu- quien conduce el carro fúnebre, comprán-
nos momentos (realzando esa sensación de dole una rosita a una vendedora de rosas en
incomodidad constante en esa atmósfera un semáforo. Pero es también un homena-
hostil), las dramatizaciones generan con un je póstumo a esos amigos que le dieron el
contrapeso radical respecto a esa sensación privilegio a Theo de conservar sus últimas
de realidad del resto del relato, migran- imágenes. Es también una celebración del
do a una fantasía distópica. Pocos filmes deseo, del encuentro, del beso, de la gente
se atreven a poner todas las cartas sobre la que está abierta a dar y recibir el amor que
mesa; de hecho, en este momento, el único
2 Por el principio también se incluye la escena inicial de Pura
relato que se me viene a la cabeza cuya for- sangre (1982), de Luis Ospina; una película, como la que pre-
tendía Theo, que intentaba acercarse al horror de serie B; esta
ma podría acercarse a la de Anhell es Cortejo
escena es visualmente impactante: un travelling hurga en una
fúnebre de rosas (1969), de Toshio Matsu- casa y va descubriendo un cadáver desnudo, lleno de sangre,
mientras un gallo se pasea indiferentemente por ese corredor; la
moto, un relato (coincidencia) sobre la vida cámara entra a la habitación para descubrir una cama, también
ensangrentada, y otro cadáver desnudo. Igualmente, se incluye la
trans en el Japón de los años sesenta que escena final de Rodrigo D. (1990), de Víctor Gaviria, en la que
Ramiro Meneses observa con impotencia, a través del vidrio, a
utiliza entrevistas, dramatizaciones psico-
esa ciudad que le arrebató el futuro, a esas calles a las que les
délicas, animaciones tipo cómic, peleas al entregará su vida.

69
les ha sido reprimido, del amor en todas sus daderamente cuir3: o sea, con esa perspec-
manifestaciones (incluso las espectrales), tiva “distorsionada” de alguien con quien
del margen de un escenario coactivo y cons- el mundo ha sido indiferentemente voraz y
trictivo como otro escenario con libertaries y que la “víctima” haya decidido escupirle al
libertines como actantes. Este relato sí que rostro y no pedirle perdón; relatos ajados,
quiere sembrar la anarquía: es una venia a imperfectos, cargados de indignación y que
la vida sin etiquetas, a la herejía y a quie- tengan toda la voluntad de generar moles-
nes tienen presente la imagen de Jesucristo tia y no seguir con ese ímpetu complacien-
para hacerse una paja pensando en ella. te ya tan rancio; esto es cine cuir, no como
esa charlatanería revictimizante que hace
el mercantilismo; de hecho, quien esté es-
perando un relato en el que el género y/o la
...el único relato que se me viene a la
sexualidad de los personajes sea el epicen-
cabeza cuya forma podría acercarse a
la de Anhell es Cortejo fúnebre de rosas tro y que todo surja por y a partir de que el
(1969), de Toshio Matsumoto, un rela- personaje sea gay o travesti a través de esa
to (coincidencia) sobre la vida trans en mirada estupefacta y morbosa de quien pa-
el Japón de los años sesenta... reciera que recién descubre deseos no cap-
turables por una cisheteronorma, que me-
Y es justamente esa la razón por la cual jor siga comiendo crispetas.
tanto me entusiasma Anhell69, porque me
despierta una esperanza en el cine colom- Como sea, y muy a pesar de lo escrito has-
biano; va más allá del yo mismo haber ha- ta ahora, es muy probable que esta no sea
bitado estos escondrijos y tener que asistir la mejor forma de reconocer la importan-
a los velorios de mis amigos vivos; tiene que cia de Anhell69. (De cualquier forma, este
ver con que llevaba mucho tiempo exigién- es del tipo de filmes que aceptan todo tipo
dole al cine este tipo de relatos: relatos ver- de recepciones y hacen innecesario el mero

3 Pongo en duda, sin embargo, que el filme se au-


todenomine “cuir” a pesar de que el narrador dice explícita-
mente que es una película trans, pues antes dice que es una
película sin fronteras, por lo que bien podría estar haciendo
referencia a la hibridación que hay durante todo el relato:
pasando de la ficción al documental, de la tragedia al ro-
mance, del realismo al horror de serie b, etcétera.

70
hecho de escribir un texto al respecto.) Hay
que esperar a que llegue a salas, no tenga
más de un par de funciones comerciales,
que los viejitos salgan furiosos de alguna,
acusando bajeza e indecencia, y que algún
puritano ofendido escriba una columna en
algún periódico conservador... entonces
Anhell69 habrá recibido el mejor de los ha-
lagos.

CONTENIDO SITIO WEB

71
UN VARÓN, DE FABIÁN HERNÁNDEZ
LOS HOMBRES SÍ LLORAN
Oswaldo Osorio

“Hable como un hombre”, “Sea macho” linidad tradicional, el machismo y las im-
o “Pórtese como un varón” fueron frases posiciones del heteropatriarcado, persisten
que uno escuchó cotidianamente en su en- estas y otras expresiones en la vida diaria,
torno mientras crecía. Aún en estos tiem- sobre todo en contextos donde están más
pos en que hay una mayor consciencia entre erosionadas o de plano no existen estruc-
cierta parte de la población, los medios y la turas como la familia, la educación y el Es-
institucionalidad por cuestionar la mascu- tado.

72
Esta película, escita y dirigida por Fa- que su familia esté reunida, que su herma-
bián Hernández, habla sobre esa visión de na deje su trabajo de prostituta y su madre
la masculinidad, y lo hace de manera más salga de la cárcel, dos circunstancias casi
enfática al ponerla en un medio marginal, insalvables en términos reales. Ese es el
hostil y violento, definido por la precarie- verdadero y más desgarrador conflicto de él
dad en la civilidad y hasta en la moral. Se y de la película misma.
trata de las calles de los barrios margina-
les de Bogotá, donde impera la ley del más Pero ese medio ambiente de la calle y el
fuerte y constantemente es puesta a prueba desamparo en que vive Carlos no deja que
la hombría. Por eso este parece ser el prin- esa sensibilidad y casi debilidad por el amor
cipal conflicto de su protagonista, Carlos, filial afloren, en cambio, lo reta constante-
un joven escuálido, callado y de voz delga- mente con amenazas y cuestionamientos
da, a quien la calle se lo puede comer entero a su hombría. Pero todo esto, el relato lo
si se descuida, si no se porta como un varón. presenta de manera sobria, sin alharacas ni
trifulcas, incluso manteniendo la consabida
Pero la elección de este personaje con ta- violencia de las historias contadas en este
les características es, justamente, la base de contexto en el fuera de campo y apelando
la propuesta de esta película, la cual desafía en su narración, mejor, a la cotidianidad del
esos estereotipos y los hace más eviden- protagonista y a esa permanente tensión
tes por medio de la esmirriada pero decidi- emocional entre sus sentimientos y el tem-
da presencia de su protagonista y del actor ple que lo rodea.
que lo encarna (Felipe Ramírez Espitia). Y
va aún más allá, también lo reviste de una En este sentido, también hay que desta-
sensibilidad que parece incompatible con car el tipo de realismo por el que se decan-
ese entorno duro y constrictor en el que se ta esta película. Es un realismo diferente al
mueve, una sensibilidad que se manifiesta que estamos acostumbrados a ver en el cine
de manera más clara en su único anhelo: colombiano, ni tan sucio ni con esos deva-

73
neos con el lirismo, tampoco con la violen- constantemente. Tampoco está dispuesto
cia explícita y gritona, menos con la crítica hacerle el juego a la violencia, no por debi-
social asomándose entre cada fotograma. lidad, sino porque es un gesto que no va con
El realismo de esta película es más sutil y su sensible humanidad, revelada de mane-
sencillo, sin que esto quiera decir que no ra contundente en ese agónico travelling fi-
cuida su imagen, lo cual hace con equilibra- nal y en la decisión que termina definiendo
da precisión, desde sus encuadres hasta el quién es él realmente, aunque eso implique
manejo de la luz. Solo que hay una suerte de la agudización de su conflicto, porque por
honestidad en el realismo que propone esta progresistas que parezcan estos tiempos,
película, porque no asume poses o estile- en la Colombia profunda y en la profundi-
tes, aunque lo que plantea necesariamen- dad de las calles, siempre le van a exigir a
te es un estilo, de cierta forma inédito, sin cualquier hombre que sea un varón.
mediaciones académicas o cinéfilas, y en
buena parte por eso resulta tan cercana y
reveladora su historia.

Pero ese medio ambiente de la calle y el


desamparo en que vive Carlos no deja CONTENIDO SITIO WEB
que esa sensibilidad y casi debilidad
por el amor filial afloren, en cambio, lo
reta constantemente con amenazas y
cuestionamientos a su hombría.

Aunque Carlos se repita, como otra de


esas frases impuestas por nuestra cultu-
ra machista, que los hombres no lloran, su
sentir y su desamparo filial lo traicionan

74
Artículos y Ensayos
GUSTAVO NIETO ROA (TUNJA, 1942)
DEL MELODRAMA AL ‘BENJUMEÍSMO’ O VICEVERSA
Mauricio Laurens

Fecundo director y productor nacional do del sector exhibidor y no descuidó a la


con medio siglo de trayectoria profesio- hinchada neoyorquina. Además, tuvo ac-
nal, el realizador de viejas cintas taquilleras ceso a campañas previas de lanzamiento y
años setenta y ochenta: comedias de corte cuñas publicitarias en espacios u horarios
populachero, novelones de barrio y cos- adecuados. Porque a Gustavito Nieto se le
tumbrismo local o tele-novelesco. Pionero debe reconocer por algo más que gestor de
de estrategias privadas, desde su empre- comedias chistosas, a veces bobas, del me-
sa Centauro Films de Colombia, fue alia- morable Carlos ‘El Gordo’ Benjumea –ellos

76
dos lograron estrenar en circuito nacional Omar Sánchez –el viejo ricachón–.
cinco o seis diciembres consecutivos–.
Esposos en vacaciones (1978). Tres com-
El cine colombiano taquillero, por ini- pinches bogotanos abandonaron sus ho-
ciativa propia y antes de aparecer Focine gares y viajaron a Cali, con el pretexto de
(Compañía de Fomento Cinematográfico hacer negocios y lanzarse como ‘gallinazos’
de Colombia), se encauzó por vías comer- a las aventuras galantes. Se suceden episo-
ciales con el gancho de las ‘estrellas’ de dios más o menos divertidos, extraídos di-
aquel entonces hechas en pantalla chica y rectamente del medio televisivo y sujetos
consentidas por farándulas locales. Rece- al chiste efectista de toquecitos picantes.
tas, entonces, de una pretendida eficacia Cámara de Gustavo, con asistencia de Toni
taquillera: esquemas populistas y clichés, Navia. El Gordo acompañado de Franky Li-
entretenimiento simple e historias bana- nero y Otto Greiffenstein tras Lyda Zamora,
les. Conquistar mercados nacionales hizo Celmira Luzardo y Virginia Vallejo –entre
parte de tal empeño, aunque sin mayores otras beldades de entonces–.
preocupaciones por obtener estándares de
mejor calidad. Colombia Connection (1978). Parodia de-
tectivesca y aventuras criollas sin mayores
En 1974, Nieto incursiona en el largome- pretensiones artísticas, con recursos uti-
traje con la adaptación del melodrama pue- lizados en farsas a lo James Bond y otros
blerino Aura o las violetas, escrito original- ajustes provenientes de los llamados enla-
mente por el poeta bogotano prohibido José tados de televisión. Sus actores y libretis-
María Vargas Vila en torno a diferencias de tas (Frankie Linero y Carlos Benjumea) lo-
edades y propiedades amorosas –la prime- graron apuntes charros y caricaturescos. El
ra versión de 1924 fue segundo largome- detective criollo aportó una cauchera como
traje del cine mudo colombiano, producido arma defensiva en contraste con sofistica-
por Di Doménico Hermanos–. Trasladada dos dispositivos del espionaje moderno, y
de Bogotá al Socorro (Santander), fueron el Gordo caía sobre una canasta de huevos
intérpretes del desigual triángulo pasional: o se tambaleaba en una canoa. Repiten los
Martha Stella Calle –la tentadora jovenci- nombres antes mencionados, al igual que
ta–, César Bernal –el galán estudiante– y los de María Eugenia Dávila, Esther Farfán

77
y Martha Stella. rante a músico, cuyo sueño de dirigir una
orquesta de ritmos tropicales debía alter-
El taxista millonario (1979). Comedieta so- narse con diversos empleos disfrazados.
bre el hampa bogotana, bajo moldes pa-
tentados por los siempre llamados cuen- Amor ciego (1980). Transición de la come-
ta-chistes de Caracol. Un taxista bogotano dia farandulera y de barrio capitalino a una
atraviesa mala racha debido entre otras al crónica folletinesca de trasfondo cartage-
mal estado de su cacharro, por casualidad nero, con la presencia del galán mexicano
se enreda con un asalto bancario a mano ar- Jaime Moreno e ingredientes narrativos
mada y se convierte en dueño del botín que de repercusiones netamente comerciales.
oportunamente rescata. Pobre pero hon- Historia simple e ingenua: reina de belleza
rado, finalmente es recompensado e inicia de nacionalidad estadounidense llega como
una vida de ‘nuevo rico’ junto a familiares, turista al aeropuerto El Dorado de Bogotá
amigos y vecinos. La taquilla le fue muy ge- en donde le roban su equipaje, pero un ma-
nerosa, siendo una cinta naif, que mezcla el letero invidente sale en su ayuda. Al iniciar
costumbrismo con el sainete o la farsa cari- un romance, las malas amistades hacen
caturizada de naturaleza televisiva. Desta- circular el rumor de tratarse de una gringa
co de la ficha técnica: asistencia de Manolo millonaria en situación de secuestro.
Busquets Emiliani, cámara y fotografía de
Mario González (socorrano) y sonido de Na-
cho Jiménez (de la Macarena).
La taquilla le fue muy generosa, siendo
una cinta naif, que mezcla el costum-
El inmigrante latino (1980). Siguiendo la lí- brismo con el sainete o la farsa carica-
nea burlesca que había caracterizado a sus turizada de naturaleza televisiva.
anteriores realizaciones, Centauro Films de
Colombia se dispuso a presentar su quinto
largometraje –protagonizados cuatro veces Caín (1984), o la historia de dos hermanos
consecutivas por Carlitos Benjumea–. Se que se odian por culpa de una mujer. Li-
trataba en aquella ocasión de los infortu- gera adaptación de la novela boyacense del
nios o tribulaciones de un indocumentado escritor boyacense Eduardo Caballero Cal-
colombiano, en los Estados Unidos: aspi- derón. Los peros fueron muchos y provoca-

78
ron el desconcierto de algunos espectado- bogotano. Expone, con probada credibi-
res que la vieron: intriga refundida y piezas lidad y discreta puesta en escena, el triste
mal armadas de un rompecabezas, abrupta desarrollo de las presiones ejercidas por las
narración sujeta a giros previsibles, filtros directivas de un colegio privado, y por al-
no muy atractivos para exponer las fanta- gunos de sus propios compañeros, hacia un
sías del protagonista, incorporación gra- muchacho muy inteligente y sensible que
tuita pero quizás visionaria de una guerrilla desató emociones encontradas al revelar
mercantilista y notables desniveles en la su noviazgo con uno de sus compañeros de
actuación. pupitre. Entre sus actores profesionales, se
destacaron: María Helena Döering (madre
Entre sábanas (2007). Hombre maduro y corajuda de la víctima) y Consuelo Luzardo
mujer atractiva se conocen en una noche de (abuela comprensiva).
rumba y amanecen juntos en las instalacio-
nes de un hotel, sin desperdiciar las opor-
tunidades para demostrar lo mucho que se
gustan y hacer varias veces el amor. Su títu-
lo, bastante sugestivo, obligaba igualmen- CONTENIDO SITIO WEB
te a referirse a los problemas personales
que aquejaron a esta pareja e indagar sobre
quiénes eran ellos. Aunque sus nombres
poco importaban –decían llamarse Roberto
y Paula–, los estados civiles o sentimenta-
les se prestaron para divagaciones, pues él
sostenía ser casado y ella estaba en vísperas
de hacerlo.

Cierra el ciclo: Mariposas verdes (2017).


Versión dramática libremente inspirada
por un sonado caso de matoneo escolar e
intolerancia sexual que provocaron indi-
rectamente el suicidio de un adolescente

79
MODOS DE REPRESENTACIÓN DE LA SUBCULTURA
PUNK EN COLOMBIA
Valentina Vasco Restrepo

alegaba que no hubo claridad sobre el uso


“Odio los videos que dominan los sentidos de música en la cinta y la retribución que
Y a Rodrigo D porque nos ha mentido” recibirían los autores (Bravo, 2016), y por el
GP otro, se rechazaba la forma de representa-
ción de los punks:
Así manifestaba la banda GP, en 1993, una
polémica popular dentro de la subcultura “Y es en esto donde los realizadores de la
punk con respecto a la película Rodrigo D: no película cometen el grave error de MEZCLAR
futuro (Víctor Gaviria, 1990), por un lado, se el ambiente de nosotros con el de un grupo

80
de individuos dedicados a todo menos a es- oficios, y las instituciones como la familia
cuchar y sentir la música, lo que origina que y la religión. En Rodrigo D los personajes se
irremediablemente los que vean la película diferencian por las acciones que realizan, a
relacionen el ambiente de los Punk y de los excepción de Rodrigo, que destaca por ser el
Metaleros con el de los traquetos”. (Alzate, protagonista y moverse a un ritmo distinto
1989) a los demás. En Los nadie se logra diferen-
ciarlos e identificarlos más como indivi-
Nuevamente el cine se encontraba bajo la duos por esa vida personal, sin embargo, la
lupa del “cómo deben ser las cosas”, de la película los conecta no solo por medio de la
manera “correcta” de representar y de la música sino a través de un objetivo común.
fidelidad con la “realidad”. Causa molestia Se hace poco sutil el aspecto marginal que
la existencia de personajes en los que coe- los envuelve, explícito desde el mismo tí-
xiste el ambiente musical con el hecho de tulo de la película, el punkero pareciese ser
ser traqueto, al implicar esto algo negati- sólo víctima y no victimario a la vez como
vo. Aunque no se puede pretender tapar el en el filme anterior.
sol con un dedo y negar la existencia de una
persona así y mucho menos caer en el este- No se ha manifestado un descontento
reotipo de que todos los punkeros son Des- fuerte por la imagen del punkero en esta
troy1. película, ya que dentro de la misma hay
tópicos muy afines a la subcultura, como
En Los nadie (Juan Sebastián Mesa, 2016) el hecho de tejer lazos a partir del entorno
se actualiza el modo de representación, musical. Este es un punto de convergencia
aquí hay una exploración más variada al de- que impulsa esa idea de liberación en los
sarrollar más el mundo íntimo de los per- personajes, muy distinta a la proyectada en
sonajes, no solo está el deambular por las Rodrigo D, a pesar de compartir letras que
calles que siempre ha sido un punto impor- siempre han apuntado a lo mismo. Siguien-
tante en la subcultura, sino también los do el rumbo de cada personaje se construye
empatía y se comparte el malestar por sus
adversidades, hay cierta romantización por
1 Dentro del punk se refiere a la pasividad su estilo de vida alternativo y el objetivo co-
ideológica y a las “actitudes o corrientes violentas,
negligentes, autodestructivas o antisociales”. mún.

81
En la película los personajes evidencian
En la película de Mesa, la imagen proyec- distintos puntos de vista que se viven en la
tada no genera influencia negativa sobre el subcultura, están quienes son capaces in-
imaginario colectivo, en parte porque en la cluso de bailar en discotecas otros ritmos,
actualidad la sociedad se ha acostumbrado hasta los mismos que cuestionan ese com-
a esos seres que antes provocaban aversión, portamiento, por ejemplo. Es interesante
sin embargo, su lugar en la estructura social que no deja de lado el hecho de que son jó-
se conserva: se acepta, pero sigue siendo venes inmersos en el mundo digital, a pesar
parte de ese mundo marginal. de no ser el tema central, rompe con la fi-
gura del punkero estática en el tiempo pro-
ducto de la nostalgia por el pasado.

En Rodrigo D los personajes se dife-


rencian por las acciones que realizan, a Un tópico presente en la película, y a su
excepción de Rodrigo, que destaca por vez en cualquier subcultura no necesaria-
ser el protagonista y moverse a un rit- mente la punkera, es esa otra familia que
mo distinto a los demás. En Los nadie trasciende del lazo sanguíneo y que se ins-
se logra diferenciarlos e identificarlos
taura a modo de refugio. En el filme está la
más como individuos por esa vida per-
figura del vieja guardia, que funciona como
sonal,...
un apoyo para uno de los protagonistas. En
las subculturas, una de las maneras en las
La subcultura punk se ha diversificado al que se forja la identidad es por medio de la
punto en el que el modo de representación capacidad de reconocerse en los otros, y es
que propone Fósforos mojados (Sebastián curioso que en el punk está esa idea de per-
Duque, 2022) no es tan ajeno a lo que se ve- tenecer y al mismo tiempo no, sin embargo,
ría en la calle. Se conserva la socio-estética una de las ideas que surgen a partir de la pe-
y el espíritu rebelde, se rompe con el radi- lícula es que, a pesar de las adversidades, el
calismo puritano de algunos otros que pa- espíritu rebelde del punk y los lazos creados
recen inclinarse más hacia el fascismo que a partir de él es lo que queda y acompaña.
a los ideales que se comparten en la escena
punk. Esta película del 2022 aún no ha llegado
a circuitos subterráneos como para conocer

82
la receptividad dentro de la subcultura. de ser la amiga que acompaña y apoya a los
miembros de la banda.
Algo importante para mencionar, es la
imagen de la mujer punkera, problemática Estos personajes femeninos dan cuenta
dentro de la misma escena punk, a causa del de la evolución de la inclusión de la mujer
machismo y la misoginia que incluso aún dentro de la escena punk y ponen en cues-
en estos tiempos sigue presente. En Rodrigo tión el trato que reciben por parte de los
D está la escena de las metaleras interpre- hombres dentro de la misma.
tadas por Vicky y Piedad Castro, dos de las
mujeres más importantes dentro del punk
colombiano, que, sin embargo, al momento Algo importante para mencionar, es
de coger el micrófono, son menos precia- la imagen de la mujer punkera, pro-
das y no poseen protagonismo dentro de la blemática dentro de la misma escena
historia. Hay por ahí un plano con una ex- punk, a causa del machismo y la miso-
tra en un pogo pero nada más. En Los nadie ginia que incluso aún en estos tiempos
sigue presente.
las cosas cambian. En el concierto se nota la
presencia de muchas mujeres e incluso hay
dos que son protagonistas y que son activas Pasando a un plano más general, no se
en la escena punk, sin embargo, su papel trata de decir cuál de estas películas tiene
frente al resto de amigos pareciera apenas personajes más fieles a la realidad, ya que
de acompañantes, a pesar de compartir el ninguna de ellas pretende ser una radiogra-
mismo sueño. Esto se nota cuando La Mona fía de la subcultura punk ni parte del cine
le ruega a Pipa que la lleve con él, este tiene etnográfico para desarrollar sus historias; y
la palabra final sobre si hacerla parte o no. si fuera así ¿Quién dictamina cómo se debe
representar y por qué su palabra tiene más
Por último, en Fósforos mojados, el perso- validez que cualquier otra? No es posible
naje de Meli empieza siguiendo esa línea de hablar de un único modo de representación
acompañante, pero la cosa cambia cuando en el cine ya que la misma subcultura punk
coge el micrófono a manera de desfogue, no es estática y propone abolir la uniformi-
casi como una declaración de su presen- dad, tanto así que los personajes de las tres
cia, demostrando sus capacidades más allá películas dan cuenta de generaciones dis-

83
tintas que pueden coexistir dentro del mis-
mo movimiento. Este postulado también
aplicaría para otros escenarios más allá del
punk.

El cine no debería limitarse a crear desde


lo que hay en el mundo real buscando cu-
rarse en salud con la receptividad que pue-
da tener una película. En el caso del punk,
lo problemático sería si este se convierte en
un adorno inaportante para lo que se quie-
re comunicar, desechando así su naturaleza
como medio de expresión política.

Referencias
Alzate, Y. (Noviembre de 1989). Rodrigo D No futuro.
Nueva Fuerza (3). Medellín.
Bravo, C. A. (2016). La banda ruidosa de una pelíula
de (in)culto. Rodrigo D, No Futuro. En C. A. Bravo,
Mala Hierba: El surgimiento del punk en el barrio
Castilla 1985 - 1995 (págs. 141-142). Medellín.

CONTENIDO SITIO WEB

84
Entrevistas
ENTREVISTA A LA “RATA” EDUARDO CARVAJAL
LA FOTOFIJA ES LA HISTORIA GRÁFICA DEL CINE
Óscar Iván Montoya

Las fotografías de Eduardo la “Rata” Car- Cali, una pandilla de literatos, cineastas y
vajal le insuflaron un aire de leyenda a lo que artistas plásticos que le dieron un revolcón
con los años se conocería como el Grupo de al solemne escenario cultural de nuestro

86
país en los años setentas y ochentas, y les ría de un arte. Son alrededor de treinta mil
permitiría a sus integrantes más conocidos negativos que reposan en sus archivos, y
instalarse en el imaginario colectivo de ge- que están siendo sometidos a un proceso de
neraciones y generaciones de cinéfilos. Las digitalización. Son imágenes icónicas que
imágenes de Andrés Caicedo en las afueras guardan los lugares en los que se rodaron
del teatro San Fernando, con su cerveza y Pura sangre o La mansión de Araucaima, que
su pose a lo Mick Jagger; las tomas de Car- almacenan los gestos de Adriana Herrán o
los Mayolo dirigiendo sus películas gótico David Guerrero, eternamente jóvenes y be-
tropicales; las fotos de Luis Ospina, en ca- llos; que atesoran los momentos más sig-
misilla y con una percha de sonido, ya for- nificativos nuestra historia cinematográfi-
man parte de la historia de nuestro cine. ca, porque “al fin a y al cabo la fotofija es la
Además, están sus registros en las películas historia gráfica del cine, porque las pelícu-
de Marta Rodríguez y Jorge Silva, su trabajo las quedan en la memoria, pero la mayoría
con Camila Loboguerrero, su labor al lado de se quedan sin saber quiénes trabajaron en
Víctor Gaviria, Jorge Navas y Carlos Moreno. la producción, quiénes hicieron las esce-
Son más de cincuenta años recogiendo los nografías, cómo eran los tiempos muertos
momentos más significativos de nuestra en medio de los rodajes. La fotofija es un
accidentada andadura cinematográfica, ac- reportaje a los personajes, a las formas de
tividad que ha combinado con la publicidad trabajo, de la misma evolución de uno en el
y la actuación, siendo famosas sus aparicio- oficio”.
nes en Agarrando pueblo (1977), María Cano
(1990), Alguien mató algo (1999), La sangre y Todos los que estamos metidos en el cine te-
la lluvia (2008) o Lavaperros (2020). nemos una matriz común, y es que antes de ha-
bernos decantado por algún oficio, en tu caso la
Pero más allá de conformar una parte muy fotofija, y en el mío el periodismo cinematográ-
importante de cualquier producción, las fo- fico, los dos fuimos espectadores y tenemos una
tografías de la “Rata” adquirieron una in- pasión en común por el cine como arte y entre-
dependencia artística, que les permiten ser tenimiento. ¿Cómo te apasionaste por el cine,
valoradas sin necesidad de conocer la his- y qué clase de películas te gustaban, porque si
toria del cine colombiano o sus principales bien en tu época era muy escasa la producción
representantes. Elevó su oficio a la catego- nacional, sí había una cinefilia exacerbada, so-

87
bre todo en lo que después se llamó el Grupo de Y ya en lo específico con la fotografía, ¿de
Cali? dónde te surgió el gusto por la fotografía, a sa-
biendas que en tus tiempos era un placer cos-
Generalmente uno iba a cine los domin- toso, restringido por los precios de las cámaras,
gos, a matinal, casi siempre a las 10:30 de el material fotográfico, los químicos para el re-
la mañana, a las películas comerciales que velado?
llegaban en la época, mucho cine nortea-
mericano, y de vez en cuando alguna eu- La fotografía sí fue una herencia de mi
ropea. Realmente yo me enganché con el padre, que cargaba su camarita para todas
cine fue cuando conocí a Andrés Caicedo, partes cuando salíamos en familia, y ya
en Ciudad Solar, a finales de los años se- más grandecito yo era el encargado de to-
senta, y ya después en el cineclub de Cali, mar las fotos, y casi siempre de un rollo de
en donde comenzó a hacer unos ciclos que doce fotos reservaba unas foticos para mis
eran muy interesantes, porque eran pro- cosas. Recuerdo que era una camarita de un
gramados por temáticas, por directores, por Iso 120 y que yo gastaba ocho o nueve y me
movimientos. Andrés preparaba para cada guardaba el resto para mis caprichos. Luego
mes, por decir algo, un ciclo de cine negro tuve ganas de estudiar arquitectura como
americano, después uno de la Nueva Ola, y mi papá, y al fin decidí no hacerlo, y me dije
por último uno de cine soviético, y así me que me iba a dedicar a la fotografía, y me
fui enganchando cada vez más con el cine, fui a trabajar a la Universidad del Valle, a la
y ahí fue donde aprendí a apreciar y a ver el Facultad de Biología, como asistente de fo-
cine como se tenía que ver. tografía. En ese tiempo era pura fotografía
análoga, con rollos súper delicados, real-
mente era una cosa muy costosa, pero en
la universidad estábamos patrocinados por
Realmente yo me enganché con el cine
la Fundación Rockefeller y otras fundacio-
fue cuando conocí a Andrés Caicedo,
en Ciudad Solar, a finales de los años nes americanas que sostenían esa facultad,
sesenta, y ya después en el cineclub de y regalaban mucho rollo, entonces yo tenía
Cali, en donde comenzó a hacer unos acceso a todo ese material, a los químicos, a
ciclos que eran muy interesantes,... los papeles fotográficos, y así fui desarro-
llando mi trabajo como fotógrafo, como la-

88
boratorista, prácticamente a costillas de la quedó todo el material de Caicedo, de Ma-
universidad. yolo y de los otros actores, que algunos de
ellos fueron actores en Agarrando pueblo,
Y en lo que tiene que ver con el ámbito del como Fabián Ramírez y Astrid Orozco. De
cine, ya mencionaste que conocías a Andrés ahí para acá arranqué como fotofija del cine
Caicedo y a la gente de Ciudad Solar y del cine- colombiano, hacía también cámara y mu-
club, pero, ¿cómo lograste estar en el rodaje de cha publicidad, me tocaba combinar todos
Angelita y Miguel Ángel, y qué carajos llegaste esos trabajos.
a hacer allá?
De esa época son muy icónicas las fotografías
En esa época todavía nos manteníamos en que le tomaste a Andrés Caicedo en las afue-
Ciudad Solar, y allí Andrés Caicedo y Carlos ras del San Fernando, con su bella sonrisa, con
Mayolo querían rodar una película llamada su cerveza Póker, y agarrándose la bragueta.
Angelita y Miguel Ángel (1971), basada en una ¿Cómo organizaron esa sesión de fotos, y cuál
historia de Andrés. A mí me llamó mucho la era el feeling y el momento emocional de An-
atención, hasta el punto de querer curiosear drés Caicedo?
en el rodaje, y allí me di cuenta que era una
cosa súper primitiva, con Carlos Mayolo de En esa época Andrés y yo también traba-
director, de director de fotografía y cama- jábamos en una agencia de publicidad, yo
rógrafo, la sonidista era una novia alemana como fotógrafo y él como copy, y resulta que
que tenía Mayolo, además de Andrés y cua- un viernes por la tarde me dijo: “Eduardo,
tro actores más, y un señor Alexandro quien yo necesito que vos me hagás unas fotos,
fue quien dio la plata para hacer la película. nos vemos en el cineclub mañana en la ma-
El caso es que yo me les pegué a todos, y les ñana?”. Quedamos en vernos a las diez de
dije que hacía lo que me pusieran a hacer, lo la mañana, pues era una hora en la que todo
que hubiera que cargar, el trípode o alguna estaba vacío, en la que no había llegado na-
otra vaina. Resulta que ya al segundo día me die, porque en el cineclub la función era a las
dije que eso había que documentarlo foto- 12:30. Yo de una comencé a tomar las fotos
gráficamente, entonces me puse a hacer la y él empezó a posar mientras conversába-
fotofija del rodaje, hasta que duró, porque mos, y realmente le hice como cuatro o cin-
esa película quedó inconclusa, pero a mí me co rollos, y con el paso del tiempo esas fotos

89
se convirtieron en las imágenes icónicas del drés nos identificamos mucho porque esas
cineclub de Cali, en las que se puede ver a fueron nuestras vivencias, sobre todo para
Andrés en su plenitud. Ya un rato después nosotros los caleños que reconocemos los
comenzó a llegar la gente, los muchachos, lugares y los personajes que Andrés men-
y ahí acabé los rollos, ya con Andrés par- ciona en su novela y sus cuentos, lugares
chado con los niños, con los Lemos, Clarisol y personajes que ya no existen en su gran
y Guillermito, mejor dicho, todos los ami- mayoría. Además, reconocemos las mane-
gos de Andrés, gente muy joven siempre. ras de hablar, la música de la época. A los
Ya después revelé el material, y pasó lo que jóvenes de ahora tal vez les gusta la manera
pasó, que fue la muerte de Andrés, enton- en cómo está retratada una época tan boni-
ces esas fotos cogieron mucha fuerza. ta, tan romántica a su manera, sobre todo
en su novela que aborda tan de buena ma-

De ahí para acá arranqué como fotofi- nera lo que ahora llaman lo urbano, las ga-
ja del cine colombiano, hacía también lladas de amigos, el círculo familiar, los ha-
cámara y mucha publicidad, me tocaba bitantes del Norte y del Sur, el rock, la salsa
combinar todos esos trabajos. de Richie Ray y Bobby Cruz. A mí modo de
ver es una vaina que es muy universal, y
Y más allá del conocimiento personal que tu- ahora que esta tan de moda todo lo urbano,
viste con Andrés, y que de una forma muy de- yo creo que les genera mucha identifica-
terminante contribuiste a la consolidación de ción entre los jóvenes, sobre todo, a manera
su leyenda, ¿a qué le atribuyes la vigencia de muy personal, que tiene mucho que ver la
su obra escrita, su novela, sus cuentos, sus tex- música, desde el mismo título de su novela:
tos cinematográficos, que tengan una especial ¡Que viva la música! Andrés menciona en esa
acogida entre los jovencitos, y entre los que ya novela yo no sé cuántas docenas de cancio-
somos mayores, que lo volvemos a leer y en- nes de la época que son identificables para
contramos esa frescura intacta, esos personajes la mayoría, en especial para los caleños, por
maravillosos como Ricardito el “Miserable”, el las menciones a músicos de salsa y a los Ro-
Hombrecito, o la súper rubísima María del Car- lling Stone, que ha sido la banda icónica de
men Huertas? los integrantes del Grupo de Cali.

Primero, nosotros los de la edad de An- ¡Que viva la música! es una novela con ban-

90
da sonora, como algunas películas… Carlos Mayolo y de Luis Ospina, en la que
nos fuimos involucrando un montón de
Claro, Sandro Romero Rey hizo algún personas, todo un colectivo que aportaba
tiempo atrás un programa en Radiónica con ideas, recursos, técnicos y humanos, como
las canciones que aparecían mencionadas el actor Luis Alfonso Londoño, el perso-
en ¡Que viva la música!, y era una cosa ate- naje que aparece al final de Agarrando pue-
rradora, una vaina que no tenía acabadero blo, que terminamos reunidos con él, en un
de toda la cantidad de música que suena en principio para conocerlo, para escucharlo,
la novela. y resultó que era un tipo inteligente, que
decía cosas interesantes, muchas de ellas
quedaron en Agarrando pueblo. Y te cuento
...Andrés menciona en esa novela yo
no sé cuántas docenas de canciones de que además hicimos una “vaca”, pues en
la época que son identificables para la esa época no existía el vaking de ahora, y
mayoría, en especial para los caleños, utilizamos lo que recogimos para comprar
por las menciones a músicos de salsa y el material para rodar, y después para reve-
a los Rolling Stone, que ha sido la ban-
lar, y para lo otro que se requiriera, pues era
da icónica de los integrantes del Grupo
un momento en el que estábamos muy ilu-
de Cali.
sionados con hacer esa película, que termi-
nó por llamarse Agarrando pueblo, que era
Y en el primer trabajo de gran envergadura una referencia directa al cine que se hacía
que acometió el Grupo de Cali, ya sin Andrés en ese momento en Bogotá, que consistía
Caicedo, llamado Agarrando pueblo, tuviste en explotar la miseria y luego exportarla a
una participación muy destacada como fotofija, Europa, en donde eran muy bien recibidas
camarógrafo, y también como actor. ¿Qué sig- las películas de gamines, de gente llevada,
nifico para tu trayectoria estar en esta película muy pobre; entonces, nosotros hicimos esa
ya mítica del cine colombiano, rodeado de lo- película en respuesta a esos cineastas que
cos por todas partes, tanto delante de la cámara estaban haciendo ese tipo de películas, con
como detrás de ella? las que se estaban enriqueciendo, además.

¡Los locos buscamos a los locos! (Risas) La Y en las presentaciones de Agarrando pueblo,
idea de la película nació de las cabezas de que me imagino te tocó asistir, ¿qué decía la

91
gente, se reían o decían: “uyy, estos malparidos de Focine fue Pura sangre, que precisamente
sí están es muy pasados”? fue rodada en Cali, otra oportunidad para que
se juntaran todos estos locos geniales. Hace un
La verdad eso parecía una película de hu- tiempo, el actor Humberto Arango, el recorda-
mor, la gente se reía todo el tiempo, y estoy do Ever en la película, repitió algo que también
convencido que, si la presentan de nuevo dijiste en el conversatorio en Medelín, y era que
mañana, la gente se va a reír porque la pe- ustedes en ese momento no sabían cuándo es-
lícula tiene un humor negro intemporal, y taban rumbiando y cuándo estaban trabajan-
más lo era para las personas de mi época, do. ¿Qué recuerdas del rodaje de esa película
que sabíamos cuál era el tipo de cine que tan loca, con un tema como el vampirismo, que
dizque nos estaba representando en el ex- era tan novedoso en esa época en nuestra cine-
terior, pues vimos que Agarrando pueblo se matografía, con ese montón de gente talentosa,
iba a convertir en una especie de tapón para con esa belleza de Florina Lemaitre, y con esos
ese mercado horrible. personajes inolvidables de Mayolo y Humberto
Arango, par de cacorros bien periqueros?
Luis Ospina decía que fue un poco como ha-
berles escupido en la sopa a todos estos cineas- Inicialmente la cogimos con mucha serie-
tas que se estaban lucrando de la situación de dad, porque, como dijiste, era el primer lar-
esa gente tan llevada. gometraje de una nueva era del cine colom-
biano, una historia que escribieron entre
Claro, eso era, y realmente funcionó, y eso Luis Ospina y Alberto Quiroga. Realmente
fue lo más importante, además Agarrando fue un gran reto para todo el equipo, con
pueblo puede ser una de las tres películas un montón de condiciones y era, supues-
colombianas más recordadas de todos los tamente, la película con la que íbamos a
tiempos. madurar (Risas), pues ya teníamos muchas
responsabilidades. Teníamos un director de
Hay mucha gente, críticos incluidos, que la fotografía cubano-francés que se llamaba
consideran la mejor película colombiana, por Ramón Suárez, teníamos un sonidista grin-
encima de otras más taquilleras o premiadas. go, que vino a cubrir esta faceta, pues si re-
cuerdas, el cine colombiano tuvo una gran
La primera película argumental de la época falencia en gran parte de su historia por

92
culpa del sonido. En resumen: teníamos que le dieron bastante duro. Hoy, cuarenta años
una gran responsabilidad con esta pelícu- después, es una película referente en el cine co-
la, pero de todos modos nosotros sabíamos lombiano, considerada por la mayoría de la
trabajar rumbiando o rumbiabamos cuando crítica como una obra de culto, no solo por su
estábamos trabajando, no sé bien cómo era temática sino porque fue le cimiento de lo que
(Risas), pero la hicimos, y la película que- después se llamó gótico tropical. ¿Por qué con-
dó muy bacana, y se juntó toda esa gente de sideras que es una de las grandes películas de la
Cali. Imaginate, Carlos Mayolo, Humberto historia del cine colombiano?
Arango, que también era caleño, Luis Os-
pina, la dirección de arte la hizo Karen La- Primero que todo, todas las películas tie-
massone, una caleña por adopción que era nen espectadores a los que les fascina y
la esposa de Luis en ese momento. Toda otros a los que no les causa ningún entu-
la gente, los extras, había un ambiente de siasmo, esa es una vaina muy valorativa, y
lo que llamo home movies, cine de familia, yo ahí no me meto; pero sí, es verdad, Pura
porque toda la gente que sale en Pura sangre, sangre en su momento no tuvo el éxito que
eran amigos, o familia, desde la empleada se esperaba; sin embargo, la película fue
de Luis, o los mismos suegros de Poncho, madurando y el público también va madu-
todas esa personas, los niños que secues- rando y apreciando de mejor manera el tra-
tran en la calle, eran hijos de los actores, de bajo de los directores y los vaivenes de su
manera que estábamos en un círculo fami- trayectoria, pues para ese momento ese era
liar. el primer largometraje argumental de Pon-
cho, y que inclusive después hizo otro largo
de ficción, Soplo de vida (1999), que tampoco
funcionó, pero ya cuando Ospina se enca-
...además Agarrando pueblo puede ser
una de las tres películas colombianas rriló en el género documental, creó una es-
más recordadas de todos los tiempos. cuela, dejó una escuela que muchos imitan
en Colombia a la hora de hacer sus docu-
mentales. Luis tenía una manera, un estilo,
En el momento del estreno de Pura sangre, a ya sus películas son parte de su vida, parte
la película le llovieron palos de todos los fren- de su historia, de su maduración como ar-
tes, sobre todo de parte de un sector de la crítica, tista, y eso hace que la gente las aprecie, las

93
entienda y las disfrute como se debe. época se conservaba con todas sus vainas
tradicionales.
Ahora quiero que me cuentes tu participa-
ción en esas otras dos películas que conforman ...ya cuando Ospina se encarriló en el
el gótico tropical: Carne de tu carne (1983), y género documental, creó una escuela,
La mansión de Araucaima (1986), las dos di- dejó una escuela que muchos imitan
rigidas por Carlos Mayolo. ¿Cómo fue tu expe- en Colombia a la hora de hacer sus do-
riencia de trabajar con este crazy, y cuál fue la cumentales.
cosecha que recogiste de haber estado en estas
otras dos producciones que ya también son mí- ¿Esa no es la casa que aparece al final de Todo
ticas? comenzó por el fin, cuando don Luis está des-
haciendo los pasos en Cali?
Si no estoy mal, la idea original de Car-
ne de tu carne fue de Andrés Caicedo, y re- Claro, esa es la casa a la que llegamos des-
cuerdo que la rodamos cerca de la montaña pués de caminar una loma con Karen La-
donde ahora vivo, en una casa de la familia massone y Luis, ya está muy cambiada por-
de Mayolo, una casa con mucha tradición y que la familia de Mayolo prácticamente se
mucha historia, una casa que según cuen- acabó, pues ya no queda sino un hermano
tan, era la primera estación que las mulas que creo que vive en Alemania, y una her-
recorrían cuando no había carretera entre mana que sé que vive en Estados Unidos,
Buenaventura y Cali, por esas lomas era que pero las tías, los tíos, los primos, ya no que-
salían hacia el puerto, creo que el paraje se dan muchos, la casa incluso la vendieron.
llamaba San Antonio, y allí estaban acu- Ya luego hicimos La mansión de Araucaima,
muladas todas las cosas viejas de la familia que fue rodada en Santander de Quilichao,
Mayolo, y nosotros nos reuníamos los fines allá en el Cauca, en una finca llamada Japio,
de semana y nos veníamos a escarbar todos muy antigua, de una familia Garcés. Esa
esos baúles y papeles, tan bien ambientada casa si era puro gótico tropical, y la película
estaba la casa que no hubo que traer esce- también es la más gótica tropical de todas.
nografía ni nada de Cali, se usó la casa como Yo creo que es una película muy buena, muy
era, con todos esos objetos y muebles. Es bella, y creo que hasta ganó premios en Sao
una casa que aún existe, pero en nuestra Paolo y en otros festivales.

94
Santa, en Popayán, y que los acompañé en
Una película con un reparto internacional, varios días de rodaje. Esa fue básicamen-
con José Lewgoy y Pitanga… te mi experiencia con ellos, y entonces yo
aproveché para hacer también unas fotos
Claro, sobre todo por Jose Lewgoy que era de registro de su trabajo, que me parece que
un actor que había trabajado con directo- es súper importante en la historia del cine
res de la talla de John Ford, de John Hus- político en Colombia, y en Latinoamérica,
ton, y Antonio Pitanga, que todavía vive, y tal vez el cine más combativo que se ha he-
los otros actores y actrices como Vicky Her- cho en nuestro país.
nández, Alejandro Buenaventura, Luis Fer-
nando Montoya, David Guerrero, Adriana Y ya desde tu labor como fotofija, ¿cómo se
Herrán, que repitió junto con David, porque modifican los criterios, los tiempos y las diná-
los dos habían protagonizado Carne de tu micas de un trabajo de ficción y otro documen-
carne. tal, o son iguales?

Aparte de tus trabajos con la gente del Gru- No, no, son totalmente diferentes, pero
po de Cali, participaste en otras producciones bueno, como igual mi trabajo es una especie
por fuera de su órbita, y el primero que quie- de reportería de detrás de cámaras, que es lo
ro mencionar es Campesinos (1982), con Jorge que más me gusta, más que la labor de foto-
Silva y Marta Rodríguez. ¿Cómo fue que termi- fija que determine un productor, entonces
naste trabajando con estos otros dos referentes hacerlo en un trabajo de ficción o uno do-
del cine colombiano? cumental se pueden llegar a parecer, pero
realmente son muy diferentes, comenzan-
Para esa época yo conocía a Jorge Silva do por toda la parafernalia de la ficción,
y Marta Rodríguez por el cine político que con sus luces, sus decorados, sus perchas
realizaban, y personalmente desde alguna de sonido, micrófonos, escenografías, mi-
visita mía a Bogotá. Ya a comienzos de los les de cables y las demás vainas. Entonces
ochenta ellos pasaban para el Cauca y es- te puedo decir que en ese aspecto el docu-
taban necesitando un ayudante, creo que mental es mucho más fresco, más accesi-
era un camarógrafo, y me buscaron y me ble, se puede conversar, en cambio el rodaje
fui con ellos, recuerdo que era una Semana de un largometraje de ficción es mucho más

95
riguroso y controlado. gente porque había escenas de manifesta-
ciones políticas, que tenía muchas locacio-
nes, pues estuvimos en Salamina, en Villa
de Leiva, en Ráquira, en Bogotá. Entonces,
Para esa época yo conocía a Jorge Silva
y Marta Rodríguez por el cine político como te estaba contando, Beatriz Caballero
que realizaban, y personalmente des- tuvo una crisis y renunció, y estaban nece-
de alguna visita mía a Bogotá. Ya a co- sitando una persona encargada de reclutar
mienzos de los ochenta ellos pasaban todo ese montón de gente en cada pobla-
para el Cauca y estaban necesitando un
ción. Acepté, e igual, como siempre cargo
ayudante, creo que era un camarógra-
mi equipo de fotografía para todas partes,
fo, y me buscaron y me fui con ellos,...
aproveché para ser el fotofija de la película.
Mi trabajo consistía en llegar en una avan-
Tu trabajo abarca tantas producciones y épo- zada a los pueblos, contratar un promedio
cas, que tuviste la fortuna de estar en el primer de doscientas personas para cada manifes-
largometraje de la era Focine, y también en uno tación; pero, ya a la hora del rodaje, le entre-
de los últimos, María Cano, de Camila Lobo- gaba los extras a una persona de producción
guerrero, en donde participaste no solo como y me dedicaba a actuar o a hacer la fotofija.
fotofija, sino también como actor, con un pa- En resumen: tuve tres roles en María Cano:
pel con buena presencia en pantalla y buenas reclutador de extras, fotofija y actor, en el
líneas. papel de Aligator, que fue el que organizó la
masacre allá en el Magdalena.
Realmente yo no llegué a María Cano
como fotofija, yo terminé trabajando en Respecto a este tipo de personajes, ya te he
esta producción porque Karen Lamassone visto como matón en María Cano, como cura
estaba haciendo la dirección de arte, y mi en Alguien mató algo, y también como cascón
esposa Claribel estaba en el trabajo con el en Lavaperros, unos personajes todos malucos,
vestuario; entonces un día yo fui a visitar- por decir lo menos...
las a Bogotá en el preciso momento en que
hubo una crisis con Beatriz Caballero, que Nunca me han dado un personaje bonda-
era la persona designada para hacer el cas- doso, sino todos malucos (Risas).
ting. Era una película que necesitaba mucha

96
¿Y no será que sientes predilección por este
tipo de personajes, como Fassbinder que siem-
Siempre ha sido así: de matón, de cura,
de bandido, personajes todos rayados,
pre se escogía el personaje más gonorrea para
pero tengo que reconocer que me gus-
interpretarlo? tan bastante. Lo que yo creo es que me
sientan bien.
Siempre ha sido así: de matón, de cura,
de bandido, personajes todos rayados, pero
tengo que reconocer que me gustan bastan-
te. Lo que yo creo es que me sientan bien. Y pasó mucho tiempo para que en Cali se vol-
viera a rodar otro largometraje, ya en el siglo
Después de María Cano y otro par de pro- XXI con El Rey (2004), la película de Antonio
ducciones más, durante los años noventa hubo Dorado.
un bache muy grande en la producción de cine
colombiano, liquidaron Focine, y el mismo país Claro, ya cuando comenzaban a despuntar
estaba caotizado, prácticamente en hilachas. las nuevas generaciones de cineastas como
¿En esa época tan dura, con tan escasas pro- Dorado y Óscar Campo, que venía de atrás,
ducciones, a qué te dedicaste, cómo hacías para y Jorge Navas y Carlos Moreno, y ahora sí
llegar a final de mes? que hay muchos más, toda esa cochada de
directores y técnicos que han salido de la
Yo nunca dejé de trabajar en publicidad, Universidad del Valle, como directores de
con Luis Ospina y Carlos Mayolo teníamos fotografía, sonidistas, directores de arte,
una pequeña empresa para rodar comercia- que ya están trabajando profesionalmen-
les, prácticamente hacíamos todos los co- te hace mucho tiempo, o que ya no son tan
merciales de las empresas caleñas, de todas muchachos como Navas y Carlos Moreno,
las agencias y multinacionales, si recuer- que cuando estaban empezando asistían a
das Cali estaba llena de empresas gringas, nuestros rodajes, hay fotos en las que están
que eran las que gastaban en comerciales y ellos, o Antonio Dorado, Óscar Campo, Ós-
publicidad. Hicimos mucha publicidad en car Ruiz Navia, que estaban de curiosos en
blanco y negro, en 16 milímetros para te- el set de grabación.
levisión.
Y pese a lo que mencionamos antes, de la es-

97
casez de producciones en los noventa, también pesadas, cuando llegaba el momento del
estuviste en otra de las películas más legen- trabajo, Víctor, con ese trato tan especial
darias de nuestro cine, rodada precisamente que tenía con los muchachos, con ese pater-
al final de la década: La vendedora de rosas nalismo y esa forma de hablar y comunicar-
(1998), de nuestro Víctor Gaviria. ¿Cómo lle- se con ellos, de protegerlos y envolverlos,
gaste a rodar en Medellín, y cómo la pasaste ro- en el mejor de los sentidos, eso hacía que le
deado de este montón de locos, algunos de ellos copiaran mucho a Víctor, entonces la situa-
geniales, y otros bastante peligrosos? ción estaba controlada por ese lado, desa-
parecía toda esa tensión de estar pensando
Recuerdo que la productora se llamaba a toda hora que algo iba a pasar o a estallar,
Silvia Vargas, y que estaba buscando un fo- pero no, nunca pasó, Víctor manejaba muy
tofija y que me ubicó por medio de Sandro bien a los actores, él es un gran director de
Romero Rey, que era amigo de ella. Enton- actores, ya lo han dicho mucho pero yo lo
ces me fui para Medellín a rodar con Víctor repito: no creo que haya en el mundo quien
y comprobé que, así como todas las pelícu- logre hacer lo que ha hecho Víctor con esos
las son diferentes, también todos los roda- muchachos.
jes son únicos, y este en particular fue un
rodaje muy especial, yo creo que ni siquiera Entonces me fui para Medellín a rodar
esas películas brasileras de los niños de la con Víctor y comprobé que, así como
calle han sido tan logradas como La vende- todas las películas son diferentes, tam-
dora de rosas. bién todos los rodajes son únicos, y
este en particular fue un rodaje muy
especial,...
Y desde tu labor específica como fotofija,
¿cómo te adaptaste a esta nueva situación de
trabajar con actores naturales que no maneja- Sobre tus métodos de trabajo has revelado
ban los protocolos de un set de grabación? que te gusta llegar a los sets de grabación con
mucho tiempo de antelación, antes de que ins-
Lo principal era que la relación que había talen las luces, preparen las escenografías y que
establecido Víctor con los muchachos, que arribe el resto del equipo, porque, entre otras
hacía que todo fuera muy diferente, y que cosas, te fascina observar el trabajo del director
pese a que las atmósferas se sentían muy de arte, que muchas veces pasa desapercibido

98
en el rodaje o directamente en la película. ¿Por qué momento las hiciste”, y yo las tomo, las
qué te gusta trabajar de esa forma tan particu- revelo, y nadie se da cuenta en qué momen-
lar, y que resultados te ha dado? to las hago. Por eso es que llego al set antes
que todo el mundo, porque me da tiempo de
Primero, porque me gusta acompañar a empaparme de todo lo que está pasando o
todas las personas que van llegando al set va a pasar.
de rodaje, primero los de las luces, después
los de arte, vestuario, maquillaje; entonces ¿Y tu predilección por el blanco y negro, y tu
uno se va formando un concepto, va des- negativa a usar flash o zoom?
cubriendo la trama de la iluminación, los
detalles del arte, entonces uno se forma un Yo jamás he utilizado un zoom o la luz de
concepto claro de las partes de la que está un flash. Nunca, siempre me he defendido
conformada una película, y ya después eso con la luz natural o de algunas fuentes ar-
me ayuda a saber cómo voy a encuadrar, tificiales, siempre he encontrado la mane-
de qué manera me voy a mover por el set, ra. Tampoco me ha gustado utilizar las luces
cómo voy a evitar cosas que entorpezcan el del rodaje, porque ellas están graduadas de
rodaje, cuidando de no generar sombras o acuerdo al punto de luz que necesita la cá-
pisar un cable, cómo no distraer a los acto- mara de cine; es decir, la cámara está em-
res, porque los actores se ponen complica- plazada en tal sitio y ellos iluminan para
dos si usted se desplaza por el lugar en don- que esa luz sea adecuada para el lente que
de están ensayando o actuando. Es un arte está utilizando la cámara; en cambio, yo le
realizar bien la labor de fotofija, sobre todo saco partido de otra manera a la ilumina-
porque yo nunca pido un tiempo delimitado ción del rodaje; por ejemplo, si quiero rea-
para hacer mi trabajo, porque normalmente lizar un contraluz, o aprovecho unos halos
a los fotofijas nos dan un tiempo límite para de luz bien preciosos, yo juego mucho con
hacer nuestra faena, pero yo nunca, es decir la luz del director de fotografía, pero no de
nunca lo hice, siempre he odiado eso, que la manera que él la está utilizando para lo
me dijeran que contaba con cierto tiempo. específico de su labor, sino que la uso para
No, yo nunca pido un tiempo determinado, mí, le sacó jugo, otro tipo de jugo.
yo hago las fotos sin que nadie se dé cuenta,
y ya después me dicen: “uyyy, qué fotos, en Y ahora que estamos hablando de la parte téc-

99
nica, aprovecho para preguntarte por la transi- y los personajes que lo habitan, tan similar en
ción, o mejor dicho, el salto del análogo al di- muchos aspectos a barrio Triste, el barrio don-
gital, tanto en las cámaras de cine como en la de fueron rodadas algunas de las escenas de La
fotografía. ¿De qué manera te has adaptado a vendedora de rosas. ¿Por qué te atraen tanto
este nuevo escenario, o seguiste trabajando a la estos lugares con esa decrepitud y ese ambiente
vieja usanza? tan heavy?

La verdad es que fue un cambio muy brus- Primero que todo son lugares visualmen-
co, y a mí me tocó la primera vez cuando te muy ricos, y fuera de eso tiene una vaina
hice la fotofija de la primera película de Jor- emocional muy fuerte, que a mí me impactó
ge Navas, La sangre y la lluvia, una pelícu- demasiado. Por ejemplo, en el barrio San-
la muy bonita, y realmente para mí fue un tafé, cuando estábamos en esas calles en la
poco chocante cambiar de tener dos cáma- madrugada, cuando llegaban los del aseo a
ras colgadas del cuello, y haciendo una foto barrer y a ventiar agua con esas máquinas,
allí, después otra allá, y más tarde otra por con todos esos travestis en las calles, y eso
allá más atrás, a obturar un aparato que pa- había que registrarlo, y por eso me dediqué
recía una metralleta, era una vaina aterra- en ciertos momentos del rodaje a documen-
dora porque la memoria de una cámara de tar La sangre y la lluvia, sobre todo con los
esa época podía alojar 1.500 fotos, entonces ambientes y este tipo de personajes que me
fue un cambio muy abrupto, y ya después encontraba en las calles a las cuatro o cinco
caí en cuenta que no se podía abusar de ese de la mañana, viendo a las prostitutas y a
facilismo del formato digital, ahora inclu- los travestis amanecidos. Eso era una cosa
sive estoy retornando al análogo, porque dura, dura, pero visualmente muy hermosa.
se ha vuelto otra vez moda el viejo sopor-
te, y se consiguen también los químicos y Yo jamás he utilizado un zoom o la luz
los papeles fotográficos. La verdad le perdí de un flash. Nunca, siempre me he de-
mucho interés a la fotografía digital. fendido con la luz natural o de algunas
fuentes artificiales, siempre he encon-
Y de La sangre y la lluvia te quedó también
trado la manera. Tampoco me ha gus-
tado utilizar las luces del rodaje,
el recuerdo del rodaje en una Bogotá noctur-
na, vampiresca, en especial del barrio Santafé

100
tas, cinéfilos, estudiantes de cine.
Ya para ir terminando, a lo largo de tu carrera
siempre estuviste al lado de Luis Ospina, des- Contaste la última vez que estuviste en Mede-
de sus primeros trabajos hasta Todo comenzó llín que has estado muy poco activo en tu faceta
por el fin. ¿Qué recuerdos te dejó como cineas- como fotofija, pero, en cambio, has estado muy
ta, como amigo y como colega? enfocado en la digitalización de tu trabajo. ¿En
qué fase te encuentras con este proceso?
Poncho no solo significa para mí, sino
para los de mi generación y para las nue- Ya digitalizamos todos los negativos de
vas generaciones, un referente al que le de- las principales películas en las que parti-
bemos mucho, en todos los sentidos, pero cipé, pues quería ante todo preservar estos
en especial en el cinematográfico. Es más, materiales, y te cuento que no solo se trata
después de más de tres años de muerto, de digitalizar sino de catalogar e identifi-
convoca todavía a mucha gente, no más car a cada una de las personas que apare-
ahora que se le organizó ese homenaje a los cen en cada fotografía. Entonces imagínate
cuarenta años del estreno de Pura sangre, y la cantidad de trabajo, pues son alrededor
no más fue poner el nombre de Poncho para de treinta mil negativos, no sé si más, que
que el auditorio se llenara, fue una locura, hemos alcanzado a contar con Camila, que
una cosa impresionante, no cabía la gente es una asistente que me está ayudando. Ha
en el sitio. Hicimos una charla con Sandro sido una labor muy larga, ya que llevamos
Romero, Karen Lamassone y Elsa Vásquez, tres años en eso.
y después una proyección de la película res-
taurada, y fue un despelote, yo creo que fue Y la idea con ese material es...
el evento que más espectadores convocó
en todo el Festival de Cali 2022, la gente no Sacar un libro, en un tomo, o varios cua-
se quería ir, comenzó a las 5:30 de la tarde dernillos con cada una de las películas. To-
y eran las 10 de la noche y la gente estaba davía no lo tengo muy claro, además, cada
como hipnotizada. día todo está más costoso, y es muy difícil
financiar un proyecto de semejantes carac-
La gente ya conoce la obra de Poncho y cual- terísticas.
quier actividad relacionada con él atrae a artis-

101
trabajo, de la misma evolución de uno en el
oficio, pues si se pudiera ver ahora mismo
Poncho no solo significa para mí, sino
para los de mi generación y para las las fotos de mis primeros trabajos, y cómo
nuevas generaciones, un referente al eran de primitivas, a los cambios que han
que le debemos mucho, en todos los tenido de la mano de las transformaciones
sentidos, pero en especial en el cine- tecnológicas, de las cámaras, de las luces,
matográfico.
que no solo han llegado a la fotografía, sino
a todo el cine.

En octubre de 2022 recibiste un homenaje en


los premios Macondo por Vida y Obra. ué sen- SITIO WEB

saciones te dejó este homenaje de la comunidad


cinéfila, además de las nuevas generaciones
que reconocen y admiran tu trabajo, y bueno,
así como decía tu amigo don Luis Ospina: “Es CONTENIDO SITIO WEB
mejor un reconocimiento póstumo en vida a
que nadie se acuerde de uno”?

Me pareció muy especial porque general-


mente estos reconocimientos se los hacen
a los directores o a los actores consagrados,
pero a un fotofija nunca me imaginé que le
fueran a dar un Macondo a este oficio, pero
bueno, al fin a y al cabo la fotofija es la his-
toria gráfica del cine, porque las películas
quedan en la memoria, pero la mayoría se
quedan sin saber quiénes trabajaron en la
producción, quiénes hicieron las esceno-
grafías, cómo eran los tiempos muertos en
medio de los rodajes. La fotofija es un re-
portaje a los personajes, a las formas de

102
ENTREVISTA A JERÓNIMO ATEHORTÚA ARTEAGA
SIEMPRE HAY ESPACIOS EN BLANCO PARA QUE OBRE
LA IMAGINACIÓN
Óscar Iván Montoya

Los años veinte del siglo XX, fueron la dé- (1924), El amor, el deber y el crimen (1926),
cada del auspicioso despegue del cine co- Como los muertos (1925) y Garras de oro (1926),
lombiano, en la que se fraguaron pelícu- que auguraban un promisorio arranque del
las ya legendarias como Aura o las violetas cine nacional, proyecto que se fue a pique a

103
finales de la década con la dañina irrupción de la época, e introduciendo en medio de
en el escenario cinematográfico de la em- su trama episodios apócrifos que resuenan
presa Cine Colombia, y el crack de la bolsa con mucha modernidad. Es un collage ci-
de Nueva York, que destruyeron los inci- nematográfico que contribuye a consolidar
pientes cimientos de una posible industria nuestra intermitente historia audiovisual,
nacional. como lo refiere su director Jerónimo Ate-
hortúa: “Mudos testigos viene a demostrar
Fue un cine muchas veces realizado de que ello no es cierto, que sí hay una historia
manera primitiva, con actores sin pre- y que, aunque exigua, está llena de matices
paración, y en lugares poco idóneos para y promesas aún por explorar. Por eso, es
su rodaje, aun así, algunas de ellas fueron una película utópica, pues al trabajar sobre
grandes éxitos de taquilla como Aura o las la memoria cinematográfica se insufla nue-
violetas, que fue filmada, según Hernando va vida a la historia”.
Martínez Pardo, en “un solar que quedaba
al final del salón Olympia, en una especie
de escenario se colocaron los bastidores de Antes de embarcarte en este proyecto con Luis
cañamaso (sic), forrados en papel de col- Ospina, de trabar una amistad con él, tenías una
gadura, que sirvieron para filmar los ángu- relación previa con su obra, pero has contado
los de las diferentes escenas de la película, que en un primer momento no fue un flecha-
que comenzaba a rodarse diariamente a las zo cinematográfico ni un amor a primera vis-
cuatro de la tarde, debido a que, por falta de ta, sino que te tocó hacer un largo rodeo, hasta
lámparas eléctricas, era el momento más llegar a épocas posteriores en que le diste otra
aprovechable para filmar naturalmente las perspectiva al trabajo de don Luis. ¿Cuál fue el
escenas, pues el sol ya estaba bajo y su luz resorte emocional, o artístico, o intelectual, que
no era demasiado fuerte”. te brindó ese nuevo enfoque sobre su obra?

Mudos testigos (2023), dirigida por Jeróni- Soy una persona que ha tenido gustos ci-
mo Atehortúa y el finado Luis Ospina, es una nematográficos cambiantes, y eso me en-
película armada con fragmentos de estas y orgullece, no soy para nada nostálgico, en-
otras películas, utilizando de manera muy tonces no suelo atesorar a los autores que
vanguardista los noticieros y documentales me gustaban en mi juventud, o cuando

104
comencé a estudiar cine, época en que me Y ya en la conexión con su obra en parti-
gustaban autores bastante canonizados, cular me gusta mucho, como a todo el mun-
yo no diría mainstream, pero sí muy cano- do, Agarrando pueblo (1977), y diría que mi
nizados. Después fui profundizando y me película favorita colombiana es Pura sangre
fueron gustando otros cineastas de otros (1982), y también me gusta mucho Un tigre
lugares del mundo, de otros lugares de la de papel (2007). Cuando mi hermano y yo
enunciación, de otros lugares simbólicos, terminamos Pirotecnia (2019), Luis la vio y
y eso me pasó exactamente con la obra de le gustó mucho, y ya una vez en un festi-
Luis, porque cuando yo comencé a estudiar val nos encontramos y ahí trabamos amis-
cine, por supuesto que lo conocía, él era ya tad conversando sobre cine, charlando so-
una institución en Colombia, pero yo no te- bre los gustos comunes, también sobre las
nía como una gran fijación con su obra, y cosas a las que nos queríamos oponer en el
sobre todo lo digo por su obra en lo referen- cine, también encontramos “enemigos co-
te al lugar en el que uno se reconoce como munes” entre comillas, porque enemigos
cineasta y cuáles son las tradiciones que a no tenemos, o por lo menos creemos que
uno le interesan, pues yo trato de pensar el no, y así surgió la amistad pues había unas
cine en términos de tradiciones, y bueno, afinidades en las ideas que teníamos sobre
por esas cosas que le pasan a uno en la vida, el cine.
en ciertos momentos uno no se recono-
cía en ciertas tradiciones del cine nacional;
pero, entonces, cuando fui profundizando ...ahí fue donde apareció Luis Ospina,
y entendiendo, que si yo quería hacer cine, con una luz muy inspiradora, porque
era muy importante inventar otras formas sobre todo cuando se ve el cine de él,
de producción, ahí fue donde apareció Luis se asiste es a la invención de una forma
Ospina, con una luz muy inspiradora, por-
de producir las películas y de habitar el
cine.
que sobre todo cuando se ve el cine de él,
se asiste es a la invención de una forma de
producir las películas y de habitar el cine. ¿Y personalmente que te impactó de Luis Os-
Ahí empecé a tener un cariño por la obra de pina, pues yo te confieso que me impactaba
Luis Ospina. mucho su presencia vampiresca, con su gran
estatura y, sobre todo, ese humor tan demole-

105
dor que manejaba ese tipo, sus famosos “ca- sobre cine, de la vida de Luis en París y de
limbur”, qué así llamaba a sus constantes jue- la mía como estudiante de cine en Bosnia
gos de palabras y apuntes súper agudos? Herzegovina. Creo que el arte de la conver-
sación que practicaba era de maravilla.
Ya lo dijiste Óscar: el sentido del humor
de Luis era una cosa que yo valoro mucho, Y en este proyecto en particular de Mudos
mucho. Yo creo que una parte muy impor- testigos, ¿de qué manera te propuso que parti-
tante del arte colombiano está como muy ciparas en él, y habías sentido antes un interés
afectado de cierta solemnidad, y siento que por este periodo en particular del cine colom-
el cine de Luis carece de ese lastre, y eso es biano, 1922-1938?
algo que me llamó siempre la atención. Por
otro lado, él siempre me pareció, inclusive Mi interés en este periodo en particular
cuando no era tan aficionado a sus pelícu- del cine colombiano se lo agradezco a mi
las, un cineasta punk, con esa idea del punk hermano Federico y a su película Pirotecnia,
de “Do it yourself”: “Hazlo tú mismo”. Y que tiene mucho que ver con los orígenes
eso también me parecía fascinante, y des- del cine nacional, y esa película yo la escri-
pués está eso que todo el mundo repite, y bí con la intención de inventarme una tra-
de verdad que es así, y tiene que ver con dición, porque la invención, por lo menos
el trato, yo creo que Luis era una persona para mí, no se realiza en el vacío, siempre
encantadora, a toda persona que trataba se hace con materiales preexistentes, y no
quedaba como encantada por su forma de es que Pirotecnia se invente cosas o cineas-
ser, con sus chistes, era un gran conver- tas que no existieron, sino que los identifica
sador, que ese es un gran valor que no po- y articula en un relato, y se ubica a sí misma
seen todos los cineastas, y ni se diga todas en esa tradición inventada. A mí me pare-
las personas; entonces, eso facilitó mucho ció eso un gran gesto, y me parece que los
para establecer lazos, la conversación para cineastas, escritores y artistas que apuntan
mí es muy importante, es algo que sirve de hacia ese objetivo, son los que más me in-
punto de entrada. Recuerdo que Luis y yo teresan. De ahí me viene esa inquietud de
nos hicimos amigos en el festival de cine dónde viene uno, de dónde vienen las pe-
de Las Palmas, ya nos conocíamos, pero ahí lículas que se producen en nuestro país, y
fue que nos hicimos amigos, conversando cómo, aunque uno lo ignore, esas películas,

106
esa tradición igual está hablando por uno, después de Todo comenzó por el fin, ya había
esos síndromes, esas neurosis, esos con- dicho lo que tenía que decir; sin embargo,
flictos, están muy presentes en muchas de enseguida agregó, tengo una idea ya hace
esas películas, o están latentes, sino es que algunos años, y creo que es el momento de
están de manera manifiesta. hacerla, y consiste en hacer una película sin
filmar absolutamente nada.
Entonces, al realizar Pirotecnia, me quedó
ese interés por los orígenes del cine colom- Me contó que cuando había salido la co-
biano, y a Luis, como te conté antes, le en- lección de DVD del cine silente colombiano
cantó Pirotecnia, y de ahí surgió mi partici- de Patrimonio Fílmico, se le había ocurrido
pación en Mudos testigos. No sé si él estaba hacer una película a lo Mark Rapaport o una
esperando para proponérmelo un día en película de compilación, no tenía muy cla-
particular o fue circunstancial, pero se dio ro todavía qué quería hacer exactamente,
que yo estaba en BAFICI, en Buenos Aires, pero en los últimos días había ido tomando
en la sección work in progres, no con algún más forma hacer una película que contara
proyecto sino de espectador, y saliendo de una historia de amor dándole un montaje a
algún evento allí estaba Luis, yo me le acer- estas películas. Me lo contó así muy vaga-
qué y lo saludé y le pregunté qué andaba mente, y luego dijo: “y creo que vos debe-
haciendo por allá, y él me contestó que an- rías ser el productor”, porque, además, yo
daba buscando películas para su festival en ya había producido Pirotecnia, y le parecía
Cali, y que hasta el momento no había visto muy pertinente. Yo lo que pensé fue, pues
nada que lo entusiasmara, por eso decidi- imagínate producirle una película a Luis
mos irnos a almorzar, y ya durante la con- Ospina, me sentí dichoso, y Luis lo que me
versación en el restaurante yo le pregunté dijo fue que, aunque le pareciera raro, para
si estaba planeando una nueva película, que él era muy difícil conseguir productores, y
muchos estábamos esperando alguna cosa que tampoco era que se llevara muy bien
más de su autoría, y Luis me respondió que con ellos. Entonces creo que mi participa-
no, que no se quería embarcar en la reali- ción en Mudos testigos tiene que ver con esas
zación de una nueva película porque sentía conversaciones y esas afinidades, entonces
que ya no tenía energías suficientes para ahí nació esta colaboración.
afrontar un nuevo rodaje, que sentía que

107
Recuerdo que Luis al principio tenía la Garras de oro. Hay un poquito de El Valle del
duda si la película iba a ser un corto o un Cauca y su progreso (1926). Nosotros usamos
largo, pero yo rápidamente me di cuenta todas las películas del periodo silente del
que ahí había un largo. Ya luego nos invita- cine colombiano, de cada una de las pelícu-
ron a la zona industrial del festival de Mar- las se conservan imágenes en Mudos testi-
sella, y fuimos allí con el proyecto, que para gos, por lo menos de los trabajos de ficción,
ese momento ya teníamos como a cinco de las películas de los hermanos Acevedo,
minutos editados y con un principio de ha- de los noticieros y documentales, solo hay
cía dónde se dirigía la trama. Tuvimos una de algunos pasajes. Después, en paralelo a
presentación ante el público y terminamos la película desarrollamos un cortometraje
ganando en ese mercado. Fue un momen- que esperamos estrenar pronto, que se lla-
to muy bello, estuve toda esa semana con ma La novela familiar, y que está hecho en su
Luis, compartimos bastante, y ahí fue don- mayoría con imágenes de Bajo el cielo antio-
de Mudos testigos terminó de cuajar. queño (1925) y Alma provinciana (1926). Pero
bueno, en Mudos testigos también hay imá-
genes de Entre los muertos, Madre (1925), La
...Luis me respondió que no, que no se
quería embarcar en la realización de tragedia del silencio (1923) y María (1922), los
una nueva película porque sentía que pequeños fragmentos que quedan.
ya no tenía energías suficientes para
afrontar un nuevo rodaje, que sentía Tengo especial curiosidad por la armazón del
que después de Todo comenzó por el
guion, porque mencionaste en alguna parte que
fin,...
tenías conciencia de que el guion tenía que ser
algo muy orgánico, y que por lo tanto había ma-
Y a manera de ilustración, ¿cuáles son las pe- teriales que se sentían atraídos hacia la órbita
lículas que utilizaron de este periodo en especí- de Mudos testigos, y que otros, por el contrario,
fico para hacer esta nueva película? eran repelidos. ¿Cómo estructuraron la historia
a partir de las peripecias y los personajes de es-
La columna vertebral de Mudos testigos está tas obras que acabaste de mencionar?
compuesta por cuatro películas: El amor, el
deber y el crimen, Aura o las violetas, Colombia Hay que mencionar que cuando comenzó
victoriosa (1933), y también hay bastante de este proyecto había que aplicar a fondos,

108
entonces uno tiene que escribir un guion, y instrumento de comunicación con el resto
esta película era un poco difícil de clasificar, del equipo, para poder hacer un rodaje más
porque no se sabe si es una ficción o un do- o menos eficiente y saber cómo gastar los
cumental, entonces en ficción no clasifica- recursos, pero me parece que el guion ha
ba porque no tenía rodaje, y en documental generado algunos mitos en la conciencia de
no tenía espacio porque no era un registro algunos cineastas, que suelen citar la fra-
de la realidad; entonces, cuando uno está se de Billy Wilder, que pese a ser de Billy
en esa frontera es muy difícil, de hecho, la Wilder no deja de ser tonta, y que dice más
película no tuvo ningún apoyo del FDC, a o menos que las tres cosas que se necesi-
pesar de que fuimos finalistas varias veces, tan para hacer una película son el guion, el
pues los jurados no terminaban de conven- guion y el guion.
cerse de que la película era adecuada para
recibir una ayuda. Entonces, cuando co-
menzamos a pensar en la financiación, yo le Hay que mencionar que cuando co-
decía a Luis que para buscar plata había que menzó este proyecto había que aplicar
escribir un guion y él me decía que después a fondos, entonces uno tiene que es-
de Soplo de vida (1999), no había vuelto a es- cribir un guion, y esta película era un
cribir guiones, y que le parecía, la verdad,
poco difícil de clasificar, porque no se
sabe si es una ficción o un documen-
que los guiones mataban un poco las pelí-
tal,...
culas, por lo menos las películas que él hizo,
y esa era una idea que yo venía intuyendo
desde hacía un tiempo, de hecho yo toda- Para mí, hay algo fundamental y es que
vía escribo guiones, y tengo varios escritos, cuando uno va a realizar una película, se
pero yo sí sospecho mucho del guion, sobre tienen unos materiales que pueden ser hu-
todo cuando se lo concibe como el único ca- manos, o no humanos, como los archivos o
talizador de la imaginación en el cine, no el los animales, como en el caso de El azar de
único pero sí el principal. Baltasar (1966) de Bresson, o la misma na-
turaleza. Entonces lo primero es delimitar
Yo creo que el guion es una carta de nave- esos materiales, y después hay que saber
gación, pero el guion no es un instrumen- que todos esos materiales están llenos de
to fundamental, el guion es más bien un potencia y hablan. Yo lo que creo impor-

109
tante es saber escuchar los materiales, oír rece Patrimonio Fílmico en los créditos como
esos objetos que tienes al frente, y ni ha- uno de los apoyos?
blar cuando son personas; entonces la la-
bor en el guion de Mudos testigos estaba en Las imágenes que nosotros utilizamos
escuchar esos archivos y, por supuesto, de son de dominio público, lo que pasa es que
esa escucha surgieron ideas que después los derechos de autor tienen unos puntos
se plasman en el papel. Pero lo primero ciegos, y es que, por ejemplo, yo que doy
es no encarar el material con una agenda, clases en la universidad sobre archivos, y
aunque hay que decir que uno siempre se lo primero que le digo a los alumnos es que
acerca a las cosas con una idea vaga, con es muy costoso financiar un rodaje o crear
alguna sensación, pero después el mismo imágenes nuevas, pero para eso tenemos la
material te va marcando el camino, yo le alternativa que es hacer películas con imá-
voy entregando cosas al material y el ma- genes que ya están hechas, pero ahí es don-
terial me lo va devolviendo, en un proceso de entra la institucionalidad y te dice no,
que yo llamaría dialéctico, una dinámica de no, no, hay una cosa que se llama propie-
ida y vuelta; entonces pasó eso, nosotros dad intelectual, y eso también vale plata.
veíamos las películas, y nos parecía que nos Entonces, por ese lado tampoco es barato.
relataban una forma de entender el mundo, La cosa es más o menos así: las imágenes
una tradición que a la que nosotros le que- son de dominio público, pero las copias no
ríamos dar la vuelta, queríamos generar en están en dominio público, las copias son
algunos lugares con mucha transparencia, y de alguien, y esas copias las custodia Pa-
en otros con mayor opacidad; pero siempre trimonio Fílmico, y digamos que está bien
desde la escucha al material y ejecutando lo que sea así porque ellos son los encargados
que nos dictaba, y sobre todo, teniendo en de que esas imágenes se conserven, porque
cuenta que siempre hay espacios en blanco muchas de esas imágenes las hemos per-
para que obre la imaginación. dido, y hay que velar para que eso no siga
sucediendo, y que las imágenes se conser-
Precisamente en estos momentos que esta- ven en unas condiciones idóneas para las
mos hablando de los materiales preexistentes, generaciones venideras, y hay que entender
¿cómo fue la gestión ante Patrimonio Fílmico que esa labor es costosa, y bueno, te cuen-
para acceder a estos materiales, y por qué apa- to que nosotros llegamos con el proyecto y

110
ellos manejan unas tarifas para el uso de las tos frágiles y, sobre todo, insustituibles. Es
imágenes, y finalmente nosotros tampoco como cuando se está realizando una inves-
queríamos utilizar las digitalizaciones o las tigación forense, no todo el mundo tiene
versiones de los DVD, sino que queríamos acceso a una escena de un crimen, al me-
enfrentarnos a la mejor copia disponible, nos que pueda demostrar su pertinencia o
que son unas copias de exhibición que ellos seguir unos pasos. Entonces fue un proceso
tienen, y entonces, cuando el proyecto ya se que llevó su tiempo, mientras el proyecto
encaminó y adquirió cierta solidez finan- obtuvo solidez financiera, que adquirió una
ciera, Patrimonio Fílmico nos dio acceso a dirección fácilmente contable a cualquiera
las copias, con la ayuda también de la Ci- que lo estuviera escuchando, que se estruc-
nemateca Distrital de Bogotá, que aparece turó su universo.
igual en los créditos.
Ya cuando delimitamos qué tipo de pelí-
cula queríamos hacer, en ese punto hicimos
un inventario de cuáles eran las mejores
...es muy costoso financiar un rodaje o
crear imágenes nuevas, pero para eso versiones que se conservaban, y en dónde
tenemos la alternativa que es hacer pe- estaban, luego era pedirla, haga todo un
lículas con imágenes que ya están he- enlistamiento, que eso fue lo que hizo Pa-
chas, pero ahí es donde entra la insti- trimonio Fílmico, y luego se pasaban a la
tucionalidad y te dice no, no, no, hay
Cinemateca de Bogotá, que fue el lugar en
una cosa que se llama propiedad inte-
donde se hicieron las digitalizaciones; en-
lectual, y eso también vale plata.
tonces te cuento que para esta película te-
nemos imágenes que nadie más ha visto
Entonces estoy muy agradecido a Patri- antes, porque uno puede ver las películas
monio Fílmico por abrirnos las puertas y en YouTube, pero no en esta calidad.
permitirnos acceder a las imágenes, pues
me parece que todo el mundo debería tener La película se denomina genéricamente “me-
acceso a esas imágenes, pero por supuesto lodrama de archivo”, y cuenta básicamente la
que uno entiende que no pueden ser obje- historia de amor de Alicia y Efraín, pero tiene a
tos ahí expuestos para que todo el mundo mi entender unos elementos que le dan un to-
le meta mano, pues de entrada son obje- que muy interesante, y es un contexto histórico

111
y social bastante convulso, y también unas ra- maneja esa dualidad de que no le paramos
mificaciones hacia el presente muy vanguar- a Estados Unidos en la raya, pero, al mismo
distas. Se pueden ver imágenes del gobierno de tiempo, vamos a reprimir de manera feroz
Olaya Herrera, del accidente de Carlos Gardel, los reclamos que se estaban haciendo al sur
pero a la vez, están insertos unos episodios que del país, derivados de la explotación eco-
yo no dudaría en llamar apócrifos, como las de nómica; entonces, me parece, que si noso-
la insurrección campesina y la declaratoria de tros acudimos a los archivos buscando las
guerra de parte de Colombia a los Estados Uni- potencias que contienen, justamente aten-
dos. ¿Por qué quisieron darle estas ramificacio- diendo y preguntándonos qué puede ser, y
nes sociales al relato, y por qué incluyeron estos ese poder ser puede estar planteado en tér-
episodios inventados? minos de lenguaje, pero también puede ser
planteado en términos de una historia es-
Creo que eso tiene que ver con el mis- peculativa, y nos interesaba jugar con otros
mo material, a nosotros nos llevó adelan- posibles procesos causales del país, otras
te cierta pulsión narrativa, de contar una posibles derivas, pero igual tratando de no
buena historia, y esa historia queríamos perder la esencia de lo que estábamos con-
que fuera melodramática, pero que tam- tando, que tenía que ver con nuestras tradi-
bién tuviera un componente histórico, por- ciones, contando los nudos fundamentales
que a esa historia en particular la atravie- de nuestra historia social y política.
sa la Historia, con H mayúscula, y también
un componente de aventuras; entonces el Tal como lo planteamos con Luis, esta
material te brinda unas posibilidades, y en forma de contar la historia anticipa el sur-
esa imaginación que está muy delimitada gimiento de los grupos insurgentes varias
por lo que las imágenes ofrecen, existen un décadas antes, pero en otras versiones es
montón de mundos posibles, entonces en- claro que esas luchas estaban latentes an-
tre esta cantidad de mundos posibles está tes de Marquetalia, ya estaban las guerrillas
esta posible guerra con Estados Unidos, con liberales, ya durante las guerras civiles del
esta idea de que el país se levanta y recla- siglo XIX circulaban las ideas de izquierda,
ma su dignidad frente a una potencia que el país no existía de espaldas a la Revolu-
claramente nos podía aplastar en dos se- ción Mexicana, o a la Revolución Rusa, eran
gundos; pero igual sigue siendo Colombia y también ideas que llegaban acá, que por su-

112
puesto influenciaban al proletariado, y esa reflejo de ese salpicón de ideas que había en
es una historia que a nosotros no nos han la época, lo que se llama desde hace tiem-
contado, pero como dicen por ahí: “No ten- po “el sancocho nacional”, algo así como
go muchas pruebas, pero tampoco dudas”, la combinación de una gente súper goda
de que estas ideas rondaban en la cabeza de con otros de orientaciones claramente es-
las personas segregadas y oprimidas, y me talinistas, entonces hay unos artículos que
gustó contarlo a la manera como dice Saer, parecen escritos para el país más neolibe-
de una antropología especulativa. ral del mundo, y otros que parecen redac-
tados por una izquierda recalcitrante, y esa
misma situación me parece que se replica
al interior del país; entonces nos parecía
...y nos interesaba jugar con otros po-
sibles procesos causales del país, otras chévere jugar con el noticiero, que tenía su
posibles derivas, pero igual tratando dosis de actualidad, como el registro de la
de no perder la esencia de lo que está- muerte de Carlos Gardel, y luego esa idea de
bamos contando, que tenía que ver con que Colombia unida se cansa de la actividad
nuestras tradiciones, contando los nu-
colonizadora de Estados Unidos y responde,
dos fundamentales de nuestra historia
arriesgándose a una posible guerra con una
social y política.
súper potencia, y a la vez estaba esa idea de
la represión que hoy quiere ser reescrita y
No hay que olvidar que en los años veinte del negada a los movimientos campesinos y a
siglo XX, hubo grandes luchas sociales, comen- las reivindicaciones de los trabajadores. Yo
zando por las que desembocaron en la masa- creo que cualquier historia, por ficcional
cre de las bananeras, en 1928, que la senadora que sea, y a mí no es que me interese mu-
María Fernanda Cabal afirma que nunca su- cho el artificio por el artificio, pues estoy
cedió, que eso es un episodio inventado por los convencido que el arte auténtico sí conver-
comunistas de la Cortina de Hierro... sa con el mundo, que es algo que me parece
fundamental, y lo tiene que hacer por sus
Exacto. Justamente cuando estábamos propios medios, y por eso era importante
haciendo estos episodios del gobierno re- que los episodios apócrifos resonaran en
cordábamos mucho la Constitución de 1991, medio de la verdad histórica del país.
que si uno se pone a ver, es claramente un

113
¿Y por qué es tan pertinente darles esta nueva objetos del mundo están llenos de poten-
dimensión a los archivos, en no dejarlos enga- cia, de relaciones, de puntos de contacto, y
vetados, sino que hay que airearlos, manipu- eso mismo sucede con los archivos, puesto
larlos, y que sirvan para contar de otra forma que los archivos tienen una aproximación
la Historia, más allá de la manera como está gótica, y nos corresponde a nosotros, como
plasmada en los manuales y directrices de la buenos vampiros, ir y sacarles la vida, que a
academia? diferencia de otro tipo de vampirismo, no le
vamos a extraer la vida y a dejarlos zombifi-
Ahora está muy de moda un autor que se cados, sino que vamos a sacar la esencia de
llama Mark Fisher, que a mí me gusta mu- ellos, pero van a seguir vivos y produciendo
cho, y se reeditó hace poco su tesis docto- más vida, porque son objetos bastante vir-
ral donde acuña el término de materialismo tuosos, entonces habría una aproximación
gótico, y es un poco la reedición del marxis- a ellos como quien está buscando cierta vi-
mo tamizado por filósofos contemporáneos talidad en las cosas que están allí alrededor.
como Deleuze y Guattari. Pero lo que me
interesa de esta conexión es que una de las Yo creo que es muy importante la apro-
mayores invenciones de nuestra tradición ximación poética a los objetos del mundo,
cinematográfica es, precisamente, el góti- porque los objetos no tienen una única uti-
co tropical; entonces yo conectaba ese con- lización, y están allí para ser apoyo de los
cepto de Fisher de hablar de materialismo historiadores que quieren ver imágenes de
gótico como de una especie de marxismo cómo lucían las ciudades en décadas pasa-
que pone atención a la vida de los objetos, das, y también para realizar la labor de re-
y por eso se llama de esa manera, porque construcción de un monumento, pero yo
supuestamente el gótico es el género que estoy convencido que también existen otras
más especula con la idea de que los obje- formas igual de válidas de relacionarse con
tos tienen vida en sí mismos, que los obje- el pasado, y sobre todo con el futuro, y es
tos no son materia inerte, y esa es una idea que esos objetos sigan siendo útiles, que no
que cada día cobra más fuerza, hay incluso salgan de circulación, que sigan producien-
unos filósofos que han querido ir más allá. do sentido, y en un mundo que está obsesio-
Lo que me interesa a mí de esta corriente es nado por lo nuevo, que no tiene que ver con
que los objetos humanos, o por lo menos los lo simbólico, sino con lo nuevo en el sentido

114
del extraccionismo, con la explotación ma-
terial y de recursos, tal vez sea interesan- La película está dividida en tres partes bien
te encontrarse con una especie de cineasta delimitadas, con las dos primeras muy atadas
ecológico, que no produce tantas imágenes al esquema melodramático: El amor fou y Días
sino que las reutiliza, en especial, porque de ira, y ya una tercera parte llamada El diario
una imagen no vale solo por ella, una ima- de Efraín. Viendo la última parte recordé tu li-
gen vale es por las relaciones que genera, y el bro Los cines por venir, en donde sostienes que
cine es un juego de relaciones, por ejemplo, uno de los principales rasgos de la modernidad
hay cineastas a los que les gusta el teatro cinematográfica es la deriva de los persona-
filmado, y se cranean una historia, y luego jes, su vagabundeo, la misma dislocación del
busca una forma de rodarla, y pone después yo, que se nota mucho en la tercera parte y que
un plano después del otro en el montaje, y conecta muy bien con nuestra época. ¿Por qué
esa es una posibilidad, está buenísima, a mí le quisiste dar a Mudos testigos ese carácter de
me encanta y me gustaría algún día hacer vanguardia, de contemporaneidad, de película
una película así, pero existen otras mane- de los años veinte, pero del siglo XXI?
ras, y estas existen para los que no hacemos
cine con una lógica absolutamente mono- Es una muy buena pregunta, porque me
pólica, hegemónica o sustractiva, en donde sugiere inmediatamente otra pregunta que
si hacemos determinada cosa lo demás no complementa la tuya, y es más bien por qué
tiene cabida. Así no pensamos. Creo que la hicimos las dos primeras partes con un es-
forma de comportarse de una manera polí- tilo muy clásico, y luego en otro tono, si es
tica y disputar el estado de las cosas, es re- que aspiraba a ser una película contemporá-
significando estas imágenes. nea. Esto desde el principio fue una pulsión
muy extraña y pedagógica que tiene Mudos

...los objetos del mundo están llenos testigos, y es que nosotros queríamos contar
de potencia, de relaciones, de puntos una historia dentro de la historia, y en ese
de contacto, y eso mismo sucede con sentido sin lograrlo del todo, aunque con
los archivos, puesto que los archivos toda la intención, y mimetizar estos ele-
tienen una aproximación gótica, y nos mentos pedagógicos en el relato cinemato-
corresponde a nosotros, como buenos
gráfico. Nuestra película es muy lúdica, de
vampiros, ir y sacarles la vida...
hecho, nos divertimos mucho haciéndola,

115
pero a su manera también es muy pedagó- Lo que sucede en la tercera parte es que
gica, y eso yo lo asumo con mucho orgullo, comienza un viaje que parece más interior
pues uno de mis directores favoritos es Go- que físico, aunque el personaje se mueve,
dard, y no conozco un director más pedagó- de hecho se mueve mucho más que en las
gico que él. Nosotros queríamos contar una otras dos partes, pero es un viaje más in-
historia del cine con sus propias imágenes, terno, porque ahí, el personaje más que ac-
pero nos interesaba contar una historia tuar, se vuelve un observador del mundo, y
emotiva, una historia que se contara a tra- tal vez eso tenga que ver con el tiempo en el
vés de las sensaciones y de los sentimientos que estamos, en el que debemos actuar pero
que despiertan las imágenes del cine, y en- más bien oír, por eso lo que cuenta la pelí-
tonces, para lograr ese propósito, primero cula al final es el surgimiento del sonido, de
teníamos que camuflarlos, porque la ver- la capacidad de oír de los espectadores, eso
dadera pregunta no es como la formulaste, era muy importante, que la película gene-
sino que es al revés: ¿por qué no toda la pe- rara la posibilidad de escuchar las cosas del
lícula no es como la tercera parte?, y tiene mundo.
que ver con esa pulsión de poder contar la
evolución cinematográfica, y de nuevo, en ...¿por qué no toda la película no es
no hacer una lectura lineal de la historia, como la tercera parte?, y tiene que ver
porque la acción cinematográfica como la con esa pulsión de poder contar la evo-
articula el periodo clásico no está jubila- lución cinematográfica, y de nuevo, en
da, de hecho es la predominante; entonces
no hacer una lectura lineal de la histo-
ria, porque la acción cinematográfica
nos parecía interesante articular primero
como la articula el periodo clásico no
la trama en términos de acción y reacción, está jubilada,...
de causalidad, de montaje incluso por mo-
mentos analítico, y un montaje que gene-
rara continuidad y desencadenamientos, y Me encantó que me hayas hecho esa pre-
luego mostrar cómo todo eso hace parte de gunta, porque la película narra el tránsito
una invención que ha generado una idea de de la acción causal a una acción que se en-
cómo es el mundo; pero, en realidad eso no tiende de una forma más compleja, y que ya
es más que una fantasía. no puede ser únicamente en términos de
encadenamientos causales, y en donde van

116
a tener cada vez más importancia estos ele- ve si genera dinero y riqueza, todo lo que
mentos como el vagabundeo, la deriva y la está por fuera de ese universo está ahí para
disolución del yo, en donde el relato sigue brindar enseñanzas morales, comenzando
siendo fundamental, no hemos terminado por la protagonista atendiendo a los cam-
con el relato, pero el relato no puede serlo pesinos, impartiendo lecciones de amor, y
todo. le toca hasta hacer de celestina. Es un mun-
do sin fisuras, o, mejor dicho, las fisuras
Dentro de las películas que se utilizaron como están, pero la película las presenta con una
materiales de Mudos testigos está Bajo el cielo especie de pátina de idilio. Entonces, si mi-
antioqueño, una película del canon, que cual- ramos bien, las grietas están ahí, y lo que
quier estudiante de cine la tiene referenciada, corresponde es lijar la pátina de sociedad
pero que si se la mira con detalle tiene elemen- ideal, la que deja cromadita la superficie, y
tos muy chocantes, y que has puesto sobre la entonces comienzan a aparecer las grietas,
mesa en algunas de las declaraciones que has grietas que son huecos, agujeros negros. Y
hecho recientemente, como que Bajo el cielo lo que hace Bajo el cielo antioqueño es lo mis-
antioqueño parecía financiada por miembros mo que hace el Centro Democrático, que es
del Centro Democrático, y que era una repre- minimizar y negar el conflicto interno, la
sentación perfecta del paraíso uribista. ¿Por lucha de clases, negar la historia como el
qué te disgusta tanto la ideología de Bajo el episodio que mencionaste de la masacre de
cielo antioqueño? las bananeras, conciben el mundo como la
lucha entre la virtud y la inmoralidad, es
Gonzalo Mejía, aparte de ser un pionero y un mundo ahistórico, y esa película estaba
empresario de cine, fue uno de los mayores construida con ese espíritu, en esa misma
terratenientes de su tiempo, y Bajo el cielo lógica de ¡Ah, Antioquia, estas tierras ma-
antioqueño es claramente una película que ravillosas, el mejor vividero del mundo!
contiene un modelo de sociedad, un pro-
yecto hay que decirlo, de sociedad moral, Al principio estuve saboteando un poco con
y donde la principal virtud está asociada el aspecto vampiresco de Luis Ospina, pero más
con el dinero, y donde el mundo por fuera allá de la charla, él se identificaba mucho con
de la burguesía pujante, basada en la ética este personaje literario y cinematográfico, y
del trabajo, pero del trabajo que solo sir- está muy bien condensada en una frase que yo

117
le escuche alguna vez a don Luis, pero que tam- para que lo repliquen otros, nosotros hicimos
bién se la oí a Jean Cocteau y a Jean Luc Godard, esta historia, pero otros, hasta con el mismo
y es más o menos: “ser inmortal y después mo- material, pueden contar historias diferentes.
rir”, y que tiene que ver mucho con ese espíritu
de vampiro de don Luis, inclusive, con la misma Y lo que hace Bajo el cielo antioqueño es
planteamiento vampírico de Mudos testigos. lo mismo que hace el Centro Democráti-
¿Es esta película una especie de resurrección de co, que es minimizar y negar el conflicto
don Luis Ospina, que vuelve a la vida después interno, la lucha de clases, negar la histo-
de muerto? ria...

Exacto, Luis Ospina vuelve estos días a la Yo creo que lo de Luis y su vampirismo tie-
vida después de extraer la savia vital de todas ne que ver con una forma muy sofisticada de
estas películas del cine mudo colombiano, pensarse también con el pirata que era, por-
además, es un vampirismo bastante produc- que la figura del pirata ya no ocupa el espacio
tivo, en el sentido de que uno puede percibir que ocupaba en décadas pasadas, sobre todo
estas imágenes como muertas, y que estaban en el siglo XX, pues en la literatura, en las his-
en esta condición para ser objetos y reliquias torietas, en el cine, los piratas eran héroes o
del pasado, y este es un vampirismo bueno en villanos, eran personajes fascinantes, hoy ya
el sentido de que el vampiro cuando te chu- no tanto, pero el vampiro sí, y creo que la fi-
pa la sangre, y dependiendo de la película, te gura sirve mucho para pensarlo de la manera
muerde y te vuelve vampiro y te convierte en positiva como lo planteamos nosotros en Mu-
uno de su estirpe, y los otros que te atacan y te dos testigos, pero también existen otras formas
matan. Luis vendría a ser de los primeros. Lo de ese vampirismo en el cine extractivista, o
que pasa con estas películas es que son súper en términos simbólicos, o en forma de porno-
modernas de una manera involuntaria, en las miseria, en distintos elementos que atañen a
que no intervino la voluntad de los hombres, la estética de las películas. Entonces la figura
pero cuando nosotros vamos y extraemos del vampiro tiene mucha potencia, sobre todo
energía de esas películas para hacer nuestra en lo que tiene que ver con las relaciones que
propia película, y para que Luis vuelva a la todos tenemos con el entorno, y con las for-
vida, esas películas al mismo momento están mas de obtener nuestra vitalidad en el trato
volviendo a ser puestas en valor, y es un acto con los otros, y como esa extracción puede

118
infundir más vitalidad o puede realizarse en le bastaba. Ahora, nosotros olvidamos el lu-
términos de una lógica expropiatoria, que es gar, no sabemos cómo prender el fuego, y no
la versión que rechazamos. sabemos la oración, pero podemos contar la
historia, e igual funciona. Es muy enigmática
En tu libro Los cines por venir, en la entrevis- y muy fascinante esta historia, porque tiene
ta con don Luis, le planteas la hipótesis de Pe- que ver con el poder restituyente que tiene la
dro Adrián Zuluaga, de que él era el San Pablo de narración, poder contar el cuento; entonces,
Andrés Caicedo y del Grupo de Cali, porque había el lugar, el fuego, la oración, podemos inclu-
sido él el que le había infundido ese aire de leyen- so cuestionar que existan, porque el solo he-
da. Ahora yo le doy vuelta a la pregunta de Pedro cho de contar su historia hace que vuelvan a
Adrián y te pregunto Jerónimo ¿te vas a conver- la vida, y eso era lo que me parecía tan inte-
tir en el San Pablo de Luis Ospina, o en su Bram resante cuando veía Todo comenzó por el fin,
Stoker o su Murnau, ahora que estamos hablando y yo me decía, esta sensación tan épica del
de vampiros y resucitados? (Risas) Grupo de Cali es en gran parte una invención
de Luis, pero no es porque no hay pasado, no
Sucede que a mí la figura de San Pablo me nos confundamos, es porque esa dimensión
parece fascinante, y uno se pregunta si el cris- misteriosa viene atada al poder de contarla, y
tianismo es realmente una creación de Jesu- justamente ahí es donde está el poder de Luis
cristo o de San Pablo. Existe una leyenda judía como narrador, porque, por ejemplo, ¿por qué
muy buena, que cuenta que cuando nuestro lo que se ha hecho en Bogotá no ha sido tan
bisabuelo tenía una petición o una dificultad, legendario?, porque no hay quien lo cuente
iba a un lugar en el bosque, encendía un fuego como lo contó Luis Ospina. Entonces necesi-
y rezaba una oración, y se cumplía su deseo. tamos más San Pablos.
A continuación, cuando nuestro abuelo tenía
un problema y se le había olvidado el lugar Sucede que a mí la figura de San Pablo me
en el bosque, pero recordaba cómo prender el parece fascinante, y uno se pregunta si el
fuego y rezar la oración, el problema se solu- cristianismo es realmente una creación
cionaba. Mucho después, nuestro padre tenía de Jesucristo o de San Pablo
una necesidad que suplir, pero no recordaba
el lugar, se le había olvidado cómo prender
CONTENIDO SITIO WEB
el fuego, pero recordaba la oración, y con eso

119
ENTREVISTA A FABIÁN HERNÁNDEZ
CUANDO SE HA VIVIDO EL REALISMO
Redacción Canaguaro

¿Cómo llegó a ese universo de un joven mar- miné desde niño y como adolescente, son
ginal y su contexto, qué fue lo que le interesó de barrios y calles que conozco muy bien. Aquí
eso y cómo fue el proceso de investigación para no hubo el contrato de un director de loca-
captarlo de esa manera? ciones, ni un investigador que llegara como
en un tono antropológico a ubicar cómo se
La película se desarrolla en localidades filman unos niños o gente salvaje de la pe-
donde crecí, en los barrios y calles que ca- riferia, ni hubo un director de casting con-

120
tratado para que me fuera a buscar unos clichés a los que estamos sometidos todo el
niños que se vieran ñeros y que se vieran tiempo en estas localidades, a donde vienen
tremendos para que salieran en una pelícu- a filmar lo de siempre: la bazuca, el robo,
la, no, esto es un trabajo que es el resultado los niños matándose a cuchillo entre ellos y
de un proceso de vida de discernimiento so- como si nada, sin un duelo, sin una sexua-
bre mi pasado y la concepción social y polí- lidad, sin todas esas cosas que me la pasé
tica de un machito en ese contexto como lo viendo todo el tiempo y también experi-
fui, como lo quise ser, como muchos de los mentando en esa época, entonces ese fue el
muchachos con los que crecí, que ya mu- deseo y la aproximación.
chos de ellos no están vivos en ese mandato
de buscar el poder, de buscar la visibilidad, A la hora de filmar fue igual, fue hablar
de buscar el conflicto con tal de buscar las con uno de esos pocos amigos que todavía
herramientas del poder, que muchas veces quedan vivos en el Sanber [Barrio San Ber-
son las armas. Entonces la investigación no nardo] y decirle “Hermano, quiero filmar
fue realmente que dije que la iba a ser, sino una película aquí en el barrio” y él me dijo:
que fue un análisis muy autorreferencial de “La única condición que le pongo es que no
las situaciones del pasado, pero también me traiga ningún policía, ningún ejército,
quise ver el contexto contemporáneo, qui- ni seguridad privada, y filmen acá”. Y lis-
se ver también qué estaba pasando con los to, porque él es un “saya” [Sayayin: capo de
muchachos en los barrios en este momen- la delincuencia en Bogotá], y así filmamos,
to. sin policía, sin seguridad privada, haciendo
un trabajo con la comunidad, bajo la tute-
Entonces fue más fácil ingresar a ese univer- la y complicidad de los socios del pedazo.
so… ¿Qué estrategias aplicaron? Entonces fue un rodaje muy tranquilo, muy
ameno, sin ningún problema, ni un robo.
Ingresar al universo tampoco fue muy De hecho, la pasamos muy bien, y sí, a la
complejo. Yo llevé al equipo de produc- hora de la investigación fue eso: memoria
ción a ver las calles donde yo crecí, y sabía a partir de mi discernimiento con unos te-
exactamente dónde poner la cámara, dón- mas, que tienen que ver con la masculini-
de quería filmar… quería hacer una pelícu- dad. Me han interesado muchos los estu-
la que escapara de los estereotipos y de los dios feministas, de género, esas cosas me

121
parecen muy importantes, no porque esté eso parece siempre quedarse en un discurso
de moda, no porque todo el mundo esté ha- académico, entre profesores o especialistas,
blando ahora del tema cuir, sino porque me y creo que acá es muy importante entender
parece que en realidad sí es importante, es nuestras dinámicas y por eso creo que esas
algo que debería saber todo el mundo, que lecturas y esos análisis sobre los estudios de
son temas de actualidad tan importantes género ayudan a generar tolerancia, ayudan
como saber quién es el presidente. Es muy a generar paz, ayudan a genera conviven-
importante saber de género, a mí me abrió cia. Por eso la película se plantea de esa for-
mucho la cabeza para entender muchas di- ma, es una película que se llama Un varón,
námicas sociales y para entender muchas que habla de masculinidades, que habla de
dinámicas que me había construido a mí, de ambigüedades, de deseo, de inquietud y de
cierta forma, como ser humano en el mun- llanto y de miedo en un contexto en que a
do. los muchachos les cuenta hablar de eso, por
eso creo que es pertinente la película, por-
que pone sobre el terreno un diálogo que no
es el de siempre, que no vamos a mostrar a
Entonces fue un rodaje muy tranqui-
los muchachos pandilleros y locos, sino que
lo, muy ameno, sin ningún problema,
ni un robo. De hecho, la pasamos muy acá hay otra cosa que es más profunda y que
bien, y sí, a la hora de la investigación me parece necesaria, que es hablar de paz y
fue eso: memoria a partir de mi discer- de construcción de tolerancia.
nimiento con unos temas, que tienen
que ver con la masculinidad.
Es clara en la película esa línea de poner en
cuestión el género y sus convenciones tradicio-
¿Siempre le han interesado esos temas? nales, incluso desde el mismo título. ¿Se puede
decir que jugó con esa ambigüedad del título, el
Esos temas yo los vengo leyendo desde cual puede hacer referencia a dos cosas:al gé-
hace varios años, porque tampoco es una nero en términos de identidad, pero también
improvisación, porque llevo varios años aludiendo al machismo y de la valentía?
estudiando esto, me parece que son proble-
mas que tienen que llegar a sectores socia- La idea con el título de entrada sí era re-
les donde casi no se habla de esto, porque apropiarse de esa expresión coloquial muy

122
colombiana, latinoamericana también, de cisiones alrededor de su propia existencia,
“compórtese como un varón, como un ma- como el hecho de matar o no. Es como una
cho, como un hombre”. Como también se propuesta para estrellar a la gente y que di-
han reapropiado de la palabra cuir, que era gan, “bueno, no todos los muchachos de
un injurio, una apelación negativa y grose- calle son niños salvajes, locos o angelitos
ra, y se la reapropiaron para hacer una cosa vistos poéticamente, porque eso es lo otro
visible. Y yo quería reapropiarme de la ex- raro, que los venden como angelitos poéti-
presión “un varón” para ponerla en cues- cos, cuando en realidad lo muchachos tam-
tión. Para debatir ese término ¿Qué es un bién tienen una potencia y tienen un dis-
varón? Y sí, se plantea desde varias aristas. cernimiento cobre muchas cosas.
Ese mandato de compórtese como un ma-
cho acá se vuelve discutible y la película Llama mucho la atención el tipo de realismo
aborda el cómo se desintegra un poco ese que propone su película. Es distinto a casi todo
mandato social, cómo alrededor de esa ex- lo que se ve en el cine colombiano y latinoame-
presión existe justamente la ambigüedad, ricano, es como más simple y austero. ¿Cómo
la inquietud, la no certeza de qué es ser un pensó asumir el realismo como tal y en relación
varón. Me parece que es un título que pue- con los referentes conocidos?
de llamar la atención porque puede relacio-
narse también al nuevo varón del barrio, Realismo y realidades hay muchas y muy
el nuevo varón narco, y ese puede ser un diversas y yo he hecho el ejercicio de filmar
gancho que puede atraer público para que cosas que conozco o que me han pasado en
se estrellen con la película. Porque la gen- la vida. No estoy acá mirando unos niños
te puede pensar en ese título, en chicos de desde la ventana del carro y diciendo que
calle y decir “esto va a estar buenísimo”. Y quiero hacer una película sobre ellos porque
llegan con esa expectativa y se estrellan con me causan algo, no, este es un proceso muy
una película en la que no hay ni un muerto, personal. Entonces, en medio de esto, tam-
no hay ni un balazo, no hay sangre tirada bién he querido no caer en juego de sensa-
en el piso, no hay uno echando bazuca a lo cionalizar a las personas y al público, creo
loco, y lo que sí hay es sensibilidad, inquie- que se ha hecho mucho en el cine colom-
tud, deseo, duelo y personajes inteligentes biano, sensacionalizar por las vías poéticas
que reflexionan, que dudan, que toman de- o por las vías violentas. No sé qué pasa ahí,

123
hay como un acuerdo muy raro entre el pú- ces yo he tratado de hacer una película que
blico y los cineastas, que la mayoría son de se anclara en unos temas que tuvieran que
una clase social media alta, de gente prepa- ver con la realidad que yo más o menos he
rada, que ha estado en universidades y que vivido y he concebido, respetando también
llegan a filmar en unos barrios que uno dice a los personajes, no queriendo catapultarlo
“¿Pero a qué horas?” Y casi siempre caen en o asesinarlos porque sí, porque me parece
lo mismo, que es como el niño mugriento o que son muchachos que vale la pena que
el niño violento o el niño con unos sueños estén en vida y que construyan ideas.
no sé qué y eso es justamente lo que yo que-
ría evitar porque, viniendo de ahí, creo que Entonces esa ha sido mi línea, hacer un
hay muchas cosas más de lo qué hablar, y proceso juicioso, no queriendo impresionar
no todo es eso. a la gente con una estética tampoco, porque
no es una película que romantice la margi-
nalidad ni que poetice ni que pretenda es-

...expectativa y se estrellan con una pe- tetizar la violencia. Para qué hacer eso. Yo
lícula en la que no hay ni un muerto, no no caigo en ese juego que parece que se ha
hay ni un balazo, no hay sangre tirada hecho mucho en el cine latinoamericano,
en el piso, no hay uno echando bazuca una cosa violenta impresionante. Parece
a lo loco, y lo que sí hay es sensibilidad, que en los festivales europeos y gringos les
inquietud, deseo, duelo y personajes
gusta mucho ver cómo son los latinoame-
inteligentes...
ricanos de salvajes allá. Creo que no nece-
sariamente una película que venga desde la
marginalidad tenga que caer en ese juego
Los personajes en mi película, lo reitero, nuevamente. Por eso yo trabajo de esa for-
tienen la palabra y toman decisiones. Tie- ma, porque también he estado muy cerca de
nen una sexualidad, algo que me parece tan ello. Cuando su cuerpo ha sido atravesado
importante… yo, cuando era pelao, me la por la violencia, créame que usted deja de
pasaba en el Santa Fe o allá en el Voto Na- ver la violencia de esa forma, deja de ser
cional, y había una inquietud sexual todo el algo chévere, deja de ser algo pop y se vuel-
tiempo, una ambigüedad, una cosa que no ve algo que no es delicado, que no es lindo,
era tan fácil de describir y tan obvia. Enton- que no es para poetizar.

124
que no hicieran nada.
Para llegar esta concepción visual desde el
realismo ¿Qué directrices le dio a la directora de
fotografía? Cuando su cuerpo ha sido atravesado
por la violencia, créame que usted deja
Yo ya tenía muy claro la película en mi de ver la violencia de esa forma, deja de
cabeza, ya cada plano lo tenía en la mente. ser algo chévere, deja de ser algo pop y
Entonces yo no hice story board ni nada, de se vuelve algo que no es delicado, que
no es lindo, que no es para poetizar.
hecho, no ensayamos mucho, sino que fue
contarle a Sofía (Oggioni) cómo yo me ima-
ginaba cada encuadre y contarle cómo que-
ría cada movimiento de la cámara, incluso ¿Supongo que el casting también fue diferen-
la angulación de cada cuadro, yo tenía todo te al conocer tan bien el sector? Y en relación
eso interiorizado. Esa calle donde el chino con eso, ¿qué tanto hay de Felipe Ramírez, el
coge el revólver y sigue al otro, esa calle yo actor, en Carlos, el personaje?
me la anduve muchas veces; y por la calle
por donde él viene golpeado, por esa calle El casting fue yo ir al barrio –mis papás to-
yo salí golpeado una vez, muy mal herido. davía viven allá– y salir a buscar, eso fue en
Y yo no quería tampoco caer en ese juego o el 2017. Y había un concierto de break dance
esa tendencia del cine de querer expresar el con cinco muchachos enormes y en medio
vértigo a través de la cámara. Yo quería te- Pipe bailando break. Yo lo vi y me acordé
ner tiempo y quería tener espacio y que los mucho de cómo yo performaba la masculi-
personajes respiraran, que tuvieran tiempo nidad hace tiempo. Yo era un muchacho ra-
para no hacer nada. Y es que en los barrios pero y braker, hice parte de grupos en Bo-
y en lo parches hay un montón de tiempos gotá y bailé mucho. Yo era muy flaquito, me
muertos, no todo es acción. Y en las pelí- decían Ñero Flac, y cuando lo veo a él tan
culas de los muchachos siempre hay una flaquito, con tanta energía y con tanta fuer-
demanda como de querer mostrar los mo- za y en medio de esos cinco muchachos bai-
mentos violentos o la acción todo el tiem- lando con alegría y con potencia, entonces
po. Y yo quería eso, que tuvieran tiempo yo dije: “Uy, este pelao es el protagonista
para que pensaran, para que dudaran, para de esta película.” Hablé con él y con mi te-

125
léfono lo gravé en un par de preguntas –no cas y sociales, como las tenía Pipe. Tampo-
fue un casting para nada– y vi que quería co quería cuartar su verbo, eso tan rico que
trabajar con él porque performaba esa idea tienen los muchachos que es la lengua, eso
de masculinidad que yo quería desarrollar tan rico que es el lenguaje de calle.
en la película, esas ideas que tienen que ver
con la construcción social de performati- Un elemento que parece muy significativo en
vidad de Judith Butler, que se acercaban a la película son esos espacios en ruinas, tanto
mi línea de investigación, y Pipe lo encar- interiores como exteriores donde se mueve el
naba. Los cinco muchachos que bailaban en protagonista. ¿Su elección fue producto del rea-
el grupo son los cinco muchachos que salen lismo o también se buscaba hacer un comenta-
en los primeros términos de la película. rio más profundo con ellos?

Me interesó también, no solo porque se Desde que soy pequeño me he encontrado


parecía, sino porque había un interés artís- en el sector mucho con las ruinas. Yo cre-
tico en él. No era como gente así a la loca, cí en el Barrio San Bernardo y ahí existía el
sino que a ellos les gusta el arte, la danza, Cartucho, ese era un paso obligado para mí
las cosas escénicas, y ese fue un argumento cuando era niño o para mi papá ir a traba-
importante para mí. Y empezamos a ensa- jar. Entonces el Cartucho se destruyó, yo
yar, pero en realidad muy poco. vi las ruinas y luego se generó esta vuelta
del Bronx, donde parché mucho de adoles-
Y de Pipe en relación con Carlos, ese per- cente, y de hecho allá fue que me atacaron
sonaje es el resultado entre mi pasado y el una vez muy fuerte. Y esa calle se también
presente de Pipe. Hay mucho de él, pero es volvió ruinas, porque políticamente parece
un personaje construido, hicimos un pro- que la solución siempre ha sido la destruc-
ceso de preparación. Pero tampoco quería ción. El Cartucho fue un proceso de expul-
cuartar la libertad expresiva de Pipe y de- sión de mucha gente, a lo mal hecho, con
cirle que se aprendiera unos diálogos, que retroexcavadoras, y en la Ele fue lo mismo,
se moviera de aquí allá, como un robot, no, destruyeron y destruyeron y la población se
yo no quería un robot. A mí me gustan las desplegó, pero eso no ha acabado, esa pro-
actuaciones encarnadas, que los personajes blemática de la población del centro de Bo-
sean complejos, que tengan ideas políti- gotá, la gente se ha desplazado, ahora vi-

126
ven en el Sanber, que es donde viven mis identidad y presión social, sobre ese man-
papás, y ahí está pasando lo mismo, están dato machista, esa masculinidad hegemó-
destruyendo muchas casas. Ahora la mitad nico tóxica que opera en el sector. No era
del barrio está arrasado por unos edificios una película de rapers. Yo en este momento
que serán impagables para la gente que vive estoy escribiendo una serie de rapers, pero
en el barrio. Entonces yo quise retratar un lo de esta película era un tema social, po-
poco el barrio que conocí. Muchas de las ca- lítico, que me parece importante, entonces
lles que salen en la película ya no existen, quería poner toda mi atención ahí, por eso
por eso para mí era importante dejar ese no hice acento sobre los rapers porque de
registro de esas calles. Otra cosa que pasaba pronto se iba por otro lado la película. Que-
ahí sí tenía que ver con el proceso interior ría dar cuenta de algo poco visto, porque
del personaje, el proceso de derrumbe y de películas de rapers hay, de ñeros hay, de
construcción de él, de su identidad, enton- pelaos que se matan hay. Y ahí está el reto
ces el espacio también se anclaba mucho a de la película, en tratar de que la gente en-
ese diálogo con el personaje. tienda que es otra cosa, que no es lo mismo
de siempre, que tiene otra perspectiva, más
allá de lo ya visto de la marginalidad en el

A mí me gustan las actuaciones encar- cine.


nadas, que los personajes sean com-
plejos, que tengan ideas políticas y so-
ciales, como las tenía Pipe. Tampoco
quería cuartar su verbo, eso tan rico
CONTENIDO SITIO WEB
que tienen los muchachos que es la
lengua, eso tan rico que es el lenguaje
de calle.

Lo musical en la película es importante, pero


de acuerdo con su pasado de rapero y braker,
incluso del actor, no está presente, ¿Por qué?

El objetivo era hablar sobre masculinidad,

127
Biblioteca
CUADERNOS DE CINE COLOMBIANO NO. 32
DIVERSIDADES, DISIDENCIAS Y PLURALIDADES
Verónica Salazar

Colombia es, indiscutiblemente, un país ciones de todos los grupos que habitan el
diverso. En consecuencia, se esperaría que país, y mucho menos en el campo audio-
su capital cultural y lo que aquí nos congre- visual. Como lo señala Marta Cabrera en la
ga –el cine– lo fueran también. Sin embar- edición 32 de Cuadernos de cine colombiano,
go, no siempre hemos tenido representa- el cine naacional comenzó desde un punto

129
muy masculino, blanco-mestizo y hetero- no, lo que de cierta forma les da cohesión.
normado, que luego fue transformándose
gracias a las representaciones y al recono- En una edición dedicada a la diversidad
cimiento de la identidad. también está Marlon Brando en Cartagena.
¿Cómo? En una película italiana neorrea-
Cabrera realiza un recorrido cronológico e lista con visión racista y clasista pero acep-
identitario del audiovisual en Colombia que tada en su época. Quemada, de Gillo Pon-
nos permite tener una imagen amplia para tecorvo, es la película que trajo al laureado
luego adentrarnos en ejemplos muy pun- actor a filmar a Colombia. Pero en el artí-
tuales del sector, como lo son el campesi- culo ¿Dónde ponemos a Evaristo? se habla de
no, el indígena, lo queer y los movimientos otro tema más importante. Narra, en forma
feministas, todos estos encargados de dejar de crónica, cómo Pontecorvo se enamoró de
ver la diversidad que habita el país a través Evaristo Márquez, un local cartagenero que
de las autorrepresentaciones. contrató para ser su protagonista como ac-
tor natural. Además de esto, para el filme se
En el artículo Locas de pueblo, por Guiller- contrataron 737 extras palenqueros que re-
mo Correa, entendemos la base teórica que cibieron un trato diferente al que se les dio a
dio pie a la trilogía documental homóni- los extras de la sociedad blanca cartagene-
ma. Fue resultado de la investigación Locas ra. Con el ejemplo de la exotización de Eva-
de pueblo: historias de vida y resistencia en el risto como actor natural y Cartagena como
departamento de Antioquia. Con claridad se locación principal de la película y otras in-
explica cómo fue el acercamiento a las his- tenciones mencionadas en el artículo, se
torias de la comunidad LGBTI+ en zonas explica cómo hoy Cartagena ha llegado a ser
profundamente binarias y machistas, como el destino turístico ideal para las personas
lo son los pueblos antioqueños. Se hace de mirada colonial, incluso, en parte a esto
una exploración teórica de las identidades se debe que el Festival de Cine Colombiano
que Locas de pueblo representa; las locas, tenga lugar en esta ciudad. A pesar de que
las maricas, las trans, todas son categorías Quemada fue realizada sin la intención de
diferentes que se construyen desde aspira- exotizar, se puede considerar que su rodaje
ciones sociales muy propias, y todas atra- fue extractivista, clasista y con un resulta-
vesadas por el conflicto armado colombia- do que muestra la estructura sociorracial de

130
Cartagena que hoy, más de cincuenta años visibilizado, cada vez más, a partir de eve-
después, sigue vigente. tos políticos como el Paro Agrario de 2013,
cuando se comenzaron a hacer piezas idíli-
No es posible hablar de diversidad sin cas que no sólo abordaban el ambientalis-
mencionar la representación femenina en mo sino que le daban identidad al territorio
el sector audiovisual. Si bien antes se veía y superaban esa visión blanca que predo-
poca, hoy vemos que, no sólo hay más mu- minó en los siglos XIX y XX. Dentro de las
jeres haciendo cine sino que hay una in- comunidades encontramos a la mujer cam-
tención de ver el cine femenino desde otros pesina, que tuvo que enfrentarse a la discri-
puntos de vista, como el académico, el crí- minación por ser mujer, por ser pobre y por
tico y en otros departamentos que no sean ser analfabeta. Entre realizaciones sobre los
sólo la dirección. Hay mujeres haciendo, territorios encontramos poco a poco unas
viendo y hablando sobre cine. En esta edi- que dejan ver ideas en busca de la escucha,
ción de Cuadernos de cine colombiano co- que estudian y exploran la identidad; todo
nocemos la historia de la colectiva Octo- esto, haciendo contraparte a las imágenes
pi, que nace de la necesidad de reflexionar de poder desde las cuales se narró el campo
acerca de un reportaje que salió acusando a a través de un lente homogéneo, racializado
un reconocido director de cine de abuso se- y patriarcal.
xual. Mencionando la participación de otras
iniciativas como Mujeres al Borde, REC Sis-
ters y el Ciclo Rosa, la colectiva se compone
En esta edición de Cuadernos de cine
de seis mujeres que han llevado, principal-
colombiano conocemos la historia de
mente de la cotidianidad y la academia, la la colectiva Octopi, que nace de la ne-
discusión alrededor de los acontecimientos cesidad de reflexionar acerca de un
como el mencionado pero también han he- reportaje que salió acusando a un re-
cho veeduría a los espacios audiovisuales conocido director de cine de abuso se-
xual.
del país, velando por que haya representa-
ción femenina.

Otro actor fundamental en la diversidad Así mismo hemos visualizado a las co-
colombiana es el campesinado. Y este se ha munidades indígenas colombianas, que no

131
solamente han sido tratadas como objeto ten conocer iniciativas como el ciclo de Cine
de uso y paisaje para muchas piezas audio- Rosa, Mujeres al Borde, El Wi Da Monikongo
visuales, sino que su participación ha sido y el proceso de archivo de cine indígena. Sus
en el marco del concepto de derechos de representantes: Carmen Millán de Benavi-
autor, uno con el que no coinciden las rea- des, Ana Lucía Ramírez, Clau Corredor, Li-
lizaciones, pues los pueblos indígenas ar- liana Angulo, Pablo Mora y Óscar Guarín. Es
gumentan que todo viene de la naturaleza una oportunidad para adentrarse en cómo
y vuelve a ella. Todo es colectivo. Hoy hay Carmen Millán de Benavides pasó de discu-
una nueva generación de comunicadores y tir la “mujerología” a liderar y construir un
comunicadoras indígenas por todo el país ciclo de cine nacional que además llegó en
que están cambiando el lente con el cual un momento coyuntural, dotándolo de una
se crean producciones cinematográficas. carga simbólica fundamental en el contexto
La mayor diferencia es que ya no estamos de Colombia y su diversidad. Por su parte,
frente a acercamientos antropológicos que Mujeres al Borde tiene escuela audiovisual y
parten del ojo blanco, sino que vemos nue- festival internacional de cine, que nacieron
vas formas de cine y nuevos protagonistas; como respuesta a la necesidad de existir de
ahora los indígenas no son objetos de es- otras formas posibles y desde lo comunita-
tudio sino sujetos que nos sugieren formas rio, cuando tener acceso a una cámara au-
de ver, como por ejemplo, una toma del río diovisual era un privilegio. Desde allí hubo
con una voz en off correspondiente al río una construcción de memoria colectiva que
mismo, pues la perspectiva nueva nos su- hoy persiste. Por su parte, el Consejo Au-
giere que el río tiene vida, el aire tiene vida, diovisual Afrodescendiente de Colombia,
el sol, la tierra y todo lo que nos rodea tie- Wi Da Monikongo, reúne todo tipo de parti-
ne su espíritu. Aquí nos encontramos con cipantes audiovisuales afro que buscan fo-
autorrepresentaciones que rompen con lo mentar la creación, discusión y el consumo
establecido y se parecen más a un cine et- de contenido afro, es decir, las comunida-
nográfico hecho por los sujetos que miran des negras, afrocolombianas, palenqueras y
–se miran–. raizales. El Wi Da, además, lidera el Festi-
val Internacional de Cine Comunitario Afro
Por último, Cuadernos de cine colombiano Kunta Kinte. Finalmente, hay una reflexión
cierra con cuatro entrevistas que nos permi- alrededor del ejercicio de archivo que hacen

132
Pablo Mora y Óscar Guarín con las obras Niwi
Umukin ante el tiempo (Pablo Mora) y La
Amazonía (des)cinematografiada 1910-1950
(Óscar Guarín), piezas muy diferentes entre
sí pero que comparten su base en imágenes
de archivo documental en territorio indíge-
na colombiano. De nuevo, realizaciones que
buscan convertir al objeto ne sujeto.

Cuadernos de Cine Colombiano No. 32. Di-


versidades, disidencias y pluralidades. Ci-
nemateca de Bogotá – IDARTES. Bogotá,
2022.

CONTENIDO SITIO WEB

133
Documentos
UNA HISTORIA COMÚN Y PARTICULAR DEL
CINE COLOMBIANO
EL FRACASO DE UNA ILUSIÓN*
Luis Ospina

“La historia del cine colombiano es la histo- Hermanos Lumière hacen la primera pro-
ria de un fracaso.” yección pública del cinematógrafo en Pa-
Fernando Vallejo (Años de indulgencia, 1988)
rís. Un año y cuatro meses después, el 14
de abril de 1897, la Compañía Universal de
Un Día de los Inocentes del año 1895 los Variedades del prestidigitador Balabrega

135
presenta cine por primera vez en territorio que la dificultad residía en la deficiencia del
colombiano en el puerto de Colón, hoy re- servicio de energía por no estar funcionan-
pública de Panamá. do la planta eléctrica, “circunstancia ex-
traña a la voluntad de este empresario”, y
Dos meses más tarde, también por Pana- razón por la cual “las vistas que se exponen
má, nos llegaría el cinematógrafo Gabriel a la mirada de los espectadores no produ-
Veyre, uno de los operadores entrenados cen, en su mayor parte, el efecto que es de
por Lumière, quien al parecer hizo las pri- desearse”. Y añade el comentarista: “Ma-
meras filmaciones en Colombia. ravilloso también es el descubrimiento he-
cho con motivo del cinematógrafo: nuestro
Bucaramanga y Cartagena compiten, por público pierde su cultura habitual cuando
un día de diferencia en agosto de 1897, el desaparecen las luces del teatro”.
haber sido testigos de la primera función
de cine en nuestro territorio actual. En Bu- El primero de septiembre de 1897 un co-
caramanga el empresario venezolano Ma- nocido empresario barranquillero de espec-
nuel Trujillo presentó títulos de la casa Edi- táculos, Ernesto Vieco, presentó el cine por
son pero el espectáculo fue desafortunado. primera vez en Bogotá, en el Teatro Muni-
Según el periódico local El Norte “el señor cipal, con un programa de vistas del catálo-
Trujillo tuvo que suspender su exhibición go de Lumière. En el periódico local El Rayo
con gran pena del público porque se re- X se comentó que fue “algo imperfecta la
ventó la cinta de celuloide donde están las reproducción de los objetos, sea por falta
fotografías”. Por primera vez se rompió la de luz, por no colocarse ésta en exacto foco,
ilusión. Luego vendrían otros fracasos. por imperfección del aparato o por cual-
quiera otra causa... esta exhibición es más
El 22 de agosto del mismo año, un des- apropiada para un salón que para un teatro.
conocido empresario presenta la primera Los gritos y vocerío del miércoles en el Mu-
función en Cartagena, con un vitascopio nicipal no son una invitación a volver”.
Edison. El comentarista del diario El Porve-
nir se admira ante “el sorprendente espec- El primer registro de proyección de vistas
táculo”, pero critica la poca habilidad del tomadas en tierras colombianas se encuen-
“manipulador”. El empresario respondió tra en el periódico El Ferrocarril de Cali del

136
16 de junio de 1899, con comentarios a la como tantos otros dictadores latinoameri-
velada en el Teatro Borrero, cuyo progra- canos, contrató a un camarógrafo francés
ma incluyó vistas de la ciudad de Cali: “el para el engrandecimiento de su imagen.
puente, ¿por qué no se vieron las grandes
ceibas?... la iglesia de San Francisco, ¿por La primera década del siglo XX vio nacer
qué no su frontis o su interior?” El cronis- una exhibición colombiana propia y unos
ta aconsejó “aumentar un poco la intensi- escasos pero significativos intentos de pro-
dad del foco eléctrico” y se quejó porque las ducción. Personajes claves son los Herma-
vistas “no han sido tomadas con bastante nos Vincente y Francesco Di Domenico. En
arte. 1910, los Di Domenico partieron de Italia
con el fin de buscar fortuna en Colombia
con dos proyectores, un generador y pelícu-
las para exhibir. El éxito fue tal que en 1912
El primero de septiembre de 1897 un
construyeron el Salón Olimpia, un palacio
conocido empresario barranquillero de
espectáculos, Ernesto Vieco, presentó en el estilo de los que por entonces comen-
el cine por primera vez en Bogotá, en zaron a surgir en todas las grandes ciuda-
el Teatro Municipal, con un programa des. De acuerdo con un esquema empleado
de vistas del catálogo de Lumière. entonces, el telón estaba en el centro. Los
espectadores que estaban en la parte de
atrás (y que pagaban menos), veían los tí-
A pesar de estas primeras funciones falli- tulos escritos al revés y debían leerlos con
das la ilusión del cine conquistó al público un espejo, o con la ayuda de espectadores
colombiano. especialistas en leer de atrás hacia adelan-
te.
La Guerra de los Mil Días (1899-1902) y la
separación de Panamá (1903) fueron res- La distribución y la exhibición siempre
ponsables de la primera muerte del cine co- fueron y han sido el eslabón fuerte del cine
lombiano, que cual ave fénix ha surgido de en Colombia, superando –y casi siempre
las cenizas entre conflictos y guerras desde bloqueando– los escasos intentos de pro-
sus inicios. Sin embargo existen reportes ducción. El primer intento de hacer cine
sin confirmar que el general Rafael Reyes, nacional, como alternativa a la competencia

137
extranjera, tuvo lugar en 1913 con la crea- director técnico, y Alfredo del Diestro, di-
ción de SICLA (Sociedad Industrial Cinema- rector escénico, fundan con empresarios
tográfica Latino Americana). Para esta em- caleños la Valle Film Company y filman en
presa Francesco Di Domenico filmaba en 1921 María, el primer largometraje colom-
las calles su Diario colombiano, imágenes biano, inspirados en la inmortal novela de
documentales que procesaba con el fin de Jorge Isaacs. La película, estrenada en Buga
que pudieran ser exhibidas al día siguiente. en 1922, se constituyó en el primer gran éxi-
Pero el público colombiano, acostumbrado to continental del cine colombiano en toda
al cine americano y europeo, reclamaba el su historia. Hoy lamentablemente sólo so-
cine de ficción. Se produjeron, entonces, breviven cuatro planos de esta película, lo
varias películas argumentales con temas que nos dio pie al archivista Jorge Nieto y a
costumbristas e históricos. mí para realizar, 63 años después, el docu-
mental En busca de “Maria” (1985), resca-
El drama del 15 de octubre resulta apasio- tando del olvido esta primera huella muda
nante hoy por su temática y por su forma y del cine colombiano.
es una verdadera lástima que no haya so-
brevivido (como no sobrevivieron la mayo-
ría de las producciones de esta época). Se El drama del 15 de octubre resulta apa-
trataba de un drama histórico de “actuali- sionante hoy por su temática y por su
dades reconstruidas”, entre documental y forma y es una verdadera lástima que
ficción, sobre el asesinato del general Ra- no haya sobrevivido (como no sobrevi-
fael Uribe Uribe. Los propios asesinos se
vieron la mayoría de las producciones
de esta época).
prestaron a recrear su crimen. Desde ahí en
adelante el cine y el crimen estuvieron ínti-
mamente ligados en Colombia.
Ante el éxito de María los hermanos Di
La década de los veinte es la única en la Domenico respondieron con una adapta-
historia del cine colombiano en que se pue- ción de Aura o las violetas del popularísimo
de hablar de una industria cinematográfica novelista José María Vargas Vila. Ni cortos
estable y rentable. Y Cali tiene el honor de ni perezosos los Acevedo, Arturo y sus hi-
ser su cuna. Los españoles Máximo Calvo, jos Alvaro y Gonzalo, rodaron La tragedia

138
del silencio, melodrama sobre la lepra. Poco campo y la gran ciudad. Desencantado con
después la empresa de los Di Domenico es el cine, Félix J. Rodríguez se suicida poco
adquirida por un nuevo grupo empresarial, después a la edad de 34 años. Pero no todo
conocido desde entonces como Cine Co- quedó en el olvido; tanto Bajo el cielo antio-
lombia, que hasta el presente es la princi- queño como Alma provinciana, los únicos dos
pal cadena de exhibición y distribución. largometrajes que sobrevivieron a la vein-
tena que se produjeron en ese período, han
Por aquellos días, más que nunca, las es- sido restauradas recientemente por la Fun-
peranzas de una industria cinematográfica dación Patrimonio Fílmico Colombiano.
estable estuvieron vivas, si bien no faltaron
los problemas. Comenzaron a surgir quejas En 1926, una compañía que tomó el nom-
sobre la “mala imagen del país” que es- bre de Cali Films y de la que no se tienen
taba dando el cinematógrafo y la sociedad más datos, encargó la producción de nues-
pacata colombiana impedía que las jóvenes tra primera película anti-imperialista Ga-
colombianas se prestaran a aparecer en la rras de Oro, atribuida a un tal P.P. Jambri-
pantalla diabólica. La Colombia Film Com- na (posiblemente un seudónimo), rodada
pany de Cali optó, entonces, por importar casi totalmente en Italia. Esta “cine-novela
de Italia divas, directores y escenografías para defender del olvido un precioso episo-
para un par de melodramas mudos a la ita- dio de la historia contemporánea” se refie-
liana que tuvieron poco éxito y de los cua- re al rapto de Panamá por parte de Estados
les sólo nos quedan de testigo un puñado de Unidos, al que se menciona como “yanqui-
fotos. landia”. Esta película insólita, la única de
nuestro cine con escenas pintadas a mano,
En Medellín el empresario Gonzalo Mejía fue perseguida por el Departamento de Es-
produce en 1925 la primera superproduc- tado porque, según ellos, era injuriosa para
ción del cine colombiano, Bajo el cielo an- los intereses de los Estados Unidos. Se sabe
tioqueño, cuadro de costumbres de la clase que fue exhibida sólo dos veces: en Mede-
alta de la ciudad. El año siguiente Félix J. llín y Buenaventura y nunca se volvió a sa-
Rodríguez, quien de muy joven trabajó en ber de ella hasta que un cinéfilo encontró
Hollywood, produce, dirige y filma Alma casi todos sus rollos en una antigua cabina
provinciana, drama de contrastes entre el de proyección de Cali.

139
Cali, siempre a la vanguardia del cine co- El éxito le fue esquivo al cine colombiano
lombiano, también fue la cuna del primer hasta que en 1943 Roberto Saa Silva realiza
cine parlante. La primera película sonora la comedia costumbrista Allá en el trapiche,
de largometraje hecha en Colombia, reali- con el popular cómico radial Tocayo Ce-
zada en fecha tan tardía como 1941 (el mis- vallos. La ilusión de crear una “fábrica de
mo año de la revolución sonora de El Ciuda- sueños nacional” llevó a la Ducrane Films
dano Kane y 14 años después de la primera a emprender la construcción de unos es-
película parlante de Hollywood The jazz sin- tudios de cine en una finca en Sasaima que
ger), fue Flores del Valle del pionero Máximo nunca llegaron a feliz término. Las malas
Calvo. Testarudo, como buen español, Cal- lenguas dicen que porque se gastaron todo
vo insistió en inventar lo que ya estaba in- el dinero haciendo una piscina para las to-
ventado y, con medios muy rudimentarios, mas submarinas.
captó imágenes costumbristas de bailes y
canciones con pésimo sonido. El público, Y aquí el cine colombiano naufraga de
ya acostumbrado al cine parlante de Ho- nuevo y sólo será salvado de las aguas con
llywood, se hizo el de los oídos sordos y no la aparición de Camilo Correa, pionero de la
fue a ver la película. La siguiente y última crítica de cine y experto en fracasos y em-
incursión de Calvo en el cine de largome- presas quiméricas. Correa fundó dos com-
traje fue tres años después con El castigo del pañías en Medellín: Pelco en 1945 y Procinal,
fanfarrón que ni siquiera vio la oscuridad de constituida como sociedad por acciones, en
las salas comerciales. 1950. Después de varios intentos fallidos
de largometraje Camilo Correa finalmen-

...tanto Bajo el cielo antioqueño como te pudo producir Colombia linda, que fue
Alma provinciana, los únicos dos lar- un desastre comercial. Acusado de quiebra
gometrajes que sobrevivieron a la vein- fraudulenta, Camilo Correa tuvo que pasar
tena que se produjeron en ese período, ocho meses en la cárcel y luego se exiló en
han sido restauradas recientemente Hollywood.
por la Fundación Patrimonio Fílmico
Colombiano.
Ante el fracaso del proyecto industrial
surge en Colombia la necesidad de hacer un

140
cine de autor. En 1954 en Barranquilla se llermo Ribón Alba y producida en Cali por
reúnen varios intelectuales, que luego se- el relojero Tito Sandoval, con relativo éxi-
rían famosos como Gabriel García Márquez, to local pero con pésimas críticas. Cuarenta
Enrique Grau y Álvaro Cepeda Samudio, años después me encontré y filmé en Cali
para realizar La langosta azul, el primer cor- a Sandoval, recién llegado de Venezuela,
to experimental colombiano, influenciado país al que tuvo que emigrar después de la
por la vanguardia europea de los veintes y quiebra de la Down Bayer Films. El desafor-
el underground norteamericano. tunado productor, después de haber aban-
donado a su familia y haber perdido su casa
Con los años cincuenta y sesenta comien- con piscina y su negocio, cuyo lema era “Si
zan a llegar compañías extranjeras a fil- su reloj anda mal se lo arregla Sandoval”,
mar en Colombia. Hollywood por fin llega buscaba desesperadamente en todos los
al país. En 1955 Andrew Marton rueda en juzgados y en todas las estaciones de policía
las minas de esmeraldas colombianas Fue- la única copia de La gran obsesión, perdida
go verde, con Grace Kelly y Stewart Granger. en un pleito. Nunca la encontró.
Los mexicanos y los españoles no se queda-
ron atrás y filmaron varias películas, pocas Resumiendo la historia del cine colombia-
de ellas memorables. no hasta ese momento, el escritor y direc-
tor Fernando Vallejo, exagerando un poco
como es costumbre en él, escribió que “...ni
Ante el fracaso del proyecto indus-
una sola película, pero ni una en cincuenta
trial surge en Colombia la necesidad
de hacer un cine de autor. En 1954 en años se había podido terminar a cabalidad,
Barranquilla se reúnen varios intelec- hasta la exhibición al público. Las unas se
tuales, que luego serían famosos como quedaban en la filmación, las otras en el
Gabriel García Márquez, Enrique Grau copión, las otras en la edición, las otras en
y Álvaro Cepeda Samudio, para reali-
la sonorización... A medias todas, incon-
zar La langosta azul,...
clusas, como coitus interruptus... Y truncas
se quedaban, atrancadas, porque a quienes
En 1955 la gran ilusión del cine colombiano las hacían se les acababa en el camino la
se convierte en La gran obsesión, la primera fe, el impulso, el optimismo, el fluido vi-
película nacional en color, dirigida por Gui- tal, la plata: la plata, don dinero, para sa-

141
lir del atolladero. Pues en efecto: vendida
la casa, el carro, la finquita, y quemado en Raíces de piedra (1961) y Pasado el meridiano
unos cuantos días de filmación el esfuerzo (1965-7) de José María Arzuaga contienen
de toda una vida, el patrimonio de la mujer en sus mejores momentos una visión in-
y los hijos, ¿de dónde sacar más para conti- édita del hombre urbano colombiano, quizá
nuar?” (Años de indulgencia, 1988). por eso fueron prohibidas por la censura en
su momento. Sin embargo son las mejores
El naïf Enoc Roldán fue otra figura pinto- “películas imperfectas” de nuestro cine.
resca del cine colombiano. Con una cámara
casera de 16 mm. y película reversible, rea-
lizó él sólo en 1963 el melodrama histórico La tendencia neorrealista del español
El hijo de la choza, sobre los orígenes humil- José María Arzuaga y la tendencia ci-
des del presidente Marco Fidel Suárez. Pero nema novo del bogotano Julio Luzardo
más interesante que la película misma fue le cambiaron el curso al cine nacional.
el sistema de distribución y exhibición de
su compañía Error Films. Don Enoc recorría
pueblos y veredas en un carro con altavoz, El tema de La Violencia, frecuente en la
promocionando y proyectando él mismo su literatura colombiana más no en el cine,
película, a la manera de los tradicionales irrumpe por primer vez en El río de las tum-
vendedores y culebreros. Este sistema pri- bas (1964) de Julio Luzardo. Egresado de
mitivo fue exitoso y le permitió ser de los UCLA y secundado por el camarógrafo bra-
pocos realizadores que en Colombia obtu- sileño Helio Silva, Luzardo se aparta del
vieron una buena respuesta económica con costumbrismo y se enfrenta al drama de un
su trabajo. pueblo acosado por la violencia política.

En los años sesenta otras corrientes co- A finales de los sesenta y comienzos de los
menzaron a influenciar a los nuevos rea- setenta, el largometraje desaparece prácti-
lizadores. La tendencia neorrealista del camente del panorama del cine nacional y
español José María Arzuaga y la tendencia la producción se divide en dos: el cine mar-
cinema novo del bogotano Julio Luzardo le ginal, con sus documentales independien-
cambiaron el curso al cine nacional. tes de contenido político y social, y el cor-

142
tometraje de sobreprecio, apoyado en una cado por ciertas tendencias de vanguardia
ley de exhibición obligatoria. A este último y, a diferencia del marginal bogotano, por
no nos vamos a referir, ya que a pesar de una crítica con toques surreales, sarcástica
que hubo más de 150 directores y más de y distanciada. Oiga Vea (1972), de Ospina y
600 cortometrajes, es poco lo que se puede Mayolo, fue una interesante aproximación
rescatar. Pero eso sí, muchos fueron los ci- de contrainformación a propósito de los
neastas que se enriquecieron a costillas del Juegos Panamericanos de Cali... Agarrando
Estado y del público colombiano. pueblo (1978), de Carlos Mayolo y Luis Ospi-
na, es un ácido e inteligente comentario a la
En 1967 Diego León Giraldo, influenciado llamada pornomiseria, que estaba cundien-
por el cine cubano, rueda el primer filme do en la producción cinematográfica del
militante: Camilo, un cortometraje sobre el país, sirviéndose de la moda tercermun-
cura guerrillero Camilo Torres. Carlos Álva- dista y particularmente latinoamericanista,
rez continúa esta misma línea con los cor- entonces viva en Europa.”
tos Asalto y ¿Qué es la democracia?, que lo ha-
cen merecedor de varios meses de prisión. No quiero aquí, por discreción, referirme
al fracaso de mis colegas contemporáneos.
Si bien estas obras y otras que le siguie- Que cada cual cargue su cruz de Malta. En-
ron son coyunturales y responden a una tonces de aquí en adelante me limitaré a
urgencia política, los cineastas Jorge Silva relatar sólo el mío porque yo también soy
y Marta Rodríguez optaron por un cine an- víctima de esa ilusión llamada cine colom-
tropológico de reflexión política al realizar biano.
Chircales en 1972, después un largo perío-
do de investigación y observación partici- Después de Agarrando pueblo emprendí,
pante. Tanto los films de Álvarez como los con Alberto Quiroga, la escritura del guión
de Silva-Rodríguez cosecharon premios en de Pura sangre. Escogimos el género de ho-
importantes festivales internacionales. rror como punto de partida para crear la
primera película de vampiros colombiana,
En cuanto a mis inicios en el cine de los inspirada en noticias de crónica roja miti-
años setenta le cedo la palabra al crítico ficadas por la imaginación popular. No se
Luis Alberto Álvarez: “Su cine está mar- trataba, entonces, de recrear la figura le-

143
gendaria del vampiro con colmillos sino subdesarrollado sino una imagen negativa?
subvertirla e introducirla en nuestra vena.
Al respecto dice el crítico Sandro Romero:
Sin embargo, Pura sangre no dio en la vena “Volvamos al tema de la buena y de la mala
del público y sólo me dejó un saldo en rojo imagen. Este conflicto maniqueo ha ron-
en el banco. Y la sombra de una deuda con dado siempre la interpretación de nuestro
el Estado que me persiguió y me cerró las cine. En pocas ocasiones, nos hemos de-
puertas del cine, como a muchos durante la tenido a analizar los valores o problemas
famosa lista negra de Hollywood, obligán- de nuestras películas desde una perspecti-
dome a abandonar mi carrera como reali- va específicamente cinematográfica. Casi
zador para dedicarme al montaje de varios siempre, la lectura que hacemos de las imá-
largometrajes y cortometrajes, algunas ve- genes en movimiento tienen que ver con las
ces con seudónimo. equivalencias: si el cine muestra bien o mal
lo que somos o lo que debemos ser. Otra
vez, la lectura oficial se centra en lo que va-
mos a proyectar –ojo con la palabrita– en el
No quiero aquí, por discreción, refe-
rirme al fracaso de mis colegas con- espectador con lo que tenemos que repre-
temporáneos. Que cada cual cargue su sentar. Es curioso, pero podríamos atrever-
cruz de Malta. nos a decir que las películas colombianas
que representan la mala imagen de nues-
tro país, son las más interesantes. Las de la
Hasta que en 1985 rodé lo que pensé sería buena imagen, poco a poco, se va quedando
mi canto de ci(s)ne, cuando codirigí con Jor- en el baúl del olvido.”
ge Nieto el documental En busca de “María”
sobre la primera película muda colombia- Sólo 16 años después de En busca de “Ma-
na, hoy lamentablemente perdida. El cine ría” pude volver al cine, cuando mi herma-
en Colombia sólo ha dado pérdidas. Por eso no Sebastián se ganó el Premio Nacional
tengo una imagen negativa del cine colom- de Cine por su guión de cine negro Soplo de
biano cuando todo el mundo pide una ima- vida. Entonces me acordé de la anécdota de
gen positiva del país. En términos cinema- Billy Wilder: “Cuando uno dirige el primer
tográficos, ¿qué más puede esperar un país largometraje es como si le dijeran a uno:

144
‘Súbase a ese edificio y tírese del segundo dad total. Los colombianos vivimos una pe-
piso.’” Uno por las puras ganas de hacer lícula de cine negro todos los días. Así como
cine se bota y hasta sobrevive. Pero hacer la Prohibición dio pie al cine de gangsters
la segunda película es ya otra cosa. Ahí es en Estados Unidos, el tráfico de drogas pro-
cuando le dicen a uno: “Bueno, ya que so- picia el cine negro en Colombia. Desde que
brevivió al tirarse del segundo, ahora sú- Pablo Escobar nos maleducó al enseñarnos
base al sexto y tírese”. Y me lancé al vacío, las primeras líneas de cocaína, los colom-
al “estrellato”. Empecé, entonces, un lar- bianos no nos hicimos de (d)rogar y perdi-
go viacrucis. Recorrí desde la Meca del cine mos todas las aspiraciones. Del olfato para
hasta la Ceca, moviendo el tarro con la espe- el negocio pasamos al negocio del olfato. De
ranza ilusa de encontrar el millón de dóla- lavar platos en Estados Unidos pasamos a
res que le hace falta al director colombiano lavar plata. Nuestra imagen, sobre todo en
para filmar su película. Después de mendi- el exterior, no puede ser peor. Somos el país
gar en el exterior con poco éxito recurrí a la más violento del mundo. Somos el imperio
generosidad de mis amigos y, gracias a ellos del mal. Y el cine es nuestra imagen y se-
y a algunos aportes del Ministerio de Cultu- mejanza.
ra de Colombia y del Fonds Sud de Francia,
Soplo de vida se pudo filmar en 1997 y se es-
trenó con poco éxito de público en el 2000.
...por aquellas ironías de la vida y del
Sin embargo la película se exhibió en más
cine, Soplo de vida hizo más especta-
de 25 festivales internacionales y se estrenó dores que en Colombia. Nadie es per-
comercialmente en Francia, en donde, por fecto... en su tierra.
aquellas ironías de la vida y del cine, Soplo
de vida hizo más espectadores que en Co-
lombia. Nadie es perfecto... en su tierra. Es en momentos tan oscuros como los que
vivimos actualmente cuando los que traba-
¿Por qué accedí a hacer una película de jamos la imagen podemos encontrar nue-
cine negro en Colombia? Razones no me vas luces para crear un cine negro nacio-
faltaron. Crimen organizado. Políticos co- nal. Después de más de 25 años de cultivos
rruptos. Prohibición de sustancias. Ajustes ilegales, ya tenemos la suficiente madurez
de cuentas. Terrorismo. Masacres. Impuni- para recoger los frutos podridos de esta co-

145
secha roja. divertir al pueblo. ¡Que los divierta su ma-
dre!”
Siempre se ha dicho que el cine es la fábri-
Fuentes
ca de sueños. Eso podrá ser muy cierto para
el público pero no para el realizador. Lo que Álvarez, Luis Alberto. “Cine colombiano: mudo
para el espectador es un sueño para el ci- y parlante” en Gran Enciclopedia de Colombia.

neasta es una pesadilla. El director de cine Tomo 6. Editorial Círculo de lectores. Bogo-
tá.1993.
se vela, revela y desvela por el espectador.
Duque, Edda Pilar. La aventura del cine en Me-
Y el sueño del director produce monstruos. dellín. Universidad Nacional de Colombia / El
Por eso una película es tan sólo la huella Ancora Editores. Bogotá, 1992.
El’Gazi, Leila. “Cien años de la llegada del cine
de un deforme, como bien se lo recuerda el
a Colombia” en Revista Credencial Historia. No.
crítico de cine al director en 8 1/2. 88. Bogotá. Abril 1997.
Martínez Pardo, Hernando. Historia del cine
colombiano. Editorial América Latina. Bogotá.
¿Y qué se gana a cambio? Cito mi diario:
1978.
“Hoy, día 21 de abril (el mes más cruel) y Nieto, Jorge / Rojas, Diego. Tiempos del Olympia.
casi dos semanas después de haber termi- Fundación Patrimonio Fílmico. Bogotá. 1992.
Rojas, Diego. “Cine colombiano: primeras noti-
nado Soplo de vida, estuve donde el médico.
cias, primeros años, primeras películas” en Re-
¿Por qué? Porque tenía el corazón destro- vista Credencial Historia. No. 88. Bogotá. Abril
zado, los nervios de punta y el estómago 1997.
Romero, Sandro. “A imagen y semejanza de Co-
vuelto mierda. Y sin un peso en el bolsillo.
lombia” en Revista Cuadernos de Nación. Bogo-
¿Por qué? Por pendejo, por tratar de hacer tá. 2001.
cine en Colombia. En Colombia no hay cine, Salcedo Silva, Hernando. Crónicas del cine co-

hay películas. ¿Por qué? Porque en Colom- lombiano 1897 – 1950. Carlos Valencia Editores.
Bogotá. 1981.
bia nunca ha existido una industria de cine.
Cada película es un esfuerzo aislado. En Publicado en Kinetoscopio No 62. 2002
Colombia uno comienza a hacer la película
*Texto de una conferencia del director colombiano
que quiere y termina haciendo la que pue-
en la Filmoteca de la Generalitat de Catalunya, Bar-
de. Para aliviar este mal incurable del cine celona, el 19 de marzo de 2002.
el médico me formuló dos drogas: Prozac,
para la depresión y el insomnio y Floratil,
para la flora intestinal. ¿Y todo por qué? Por CONTENIDO SITIO WEB

146
FESTIVALES

147
LA EVOLUCIÓN DEL PROYECTO CULTURAL DEL
FESTIVAL CINE EN LA ISLA
EL ÁRBOL QUE CAMINA
Felipe Montoya Giraldo

Curador de cine y gestor cultural

“¿Por qué cuando me voy de este lugar lo de sus habitantes. Esa energía me permitió
sigo pensando tanto?”, me cuenta Jota*, disfrutar intensamente de Isla Fuerte y del
quien con esa pregunta se dio cuenta de que 9° Festival Cine en la Isla en enero de 2023.
se estaba enamorando de Isla Fuerte tras sus
primeras visitas como turista. Más de una Existen muchos modelos de festival de
década después, afirma que la isla tiene una cine alrededor del mundo. Uno bastante
energía especial, alimentada por el mar que popular es elegir un destino turístico, fre-
la abraza, la memoria de los corales en su cuentemente junto al mar, para convocar
suelo, los árboles que caminan y el talento a cinéfilos e integrantes del sector audio-

148
visual a conocer y premiar lo más reciente micas de creación, promoción y conserva-
de la producción nacional e internacional ción del patrimonio cultural de la comuni-
y, de paso, hacer contactos y negocios. Bajo dad que lo acoge.
este modelo, aunque se estimula la econo-
mía del lugar, fácilmente se descuida la in- Isla Fuerte es un corregimiento insular
teracción de la población local con la oferta de Cartagena de Indias ubicado frente a las
del festival. También se ha desarrollado un costas de Córdoba, con una población en
modelo de festivales de cine comunitarios, su mayoría afrodescendiente. Desde 2012,
producidos de manera participativa y que tras cultivar relaciones con sus habitantes,
destacan visiones de trabajo alternativas a Jota, junto a algunos artistas y colectivos
las dinámicas tradicionales de la industria de Medellín y Antioquia, organizaron pe-
cinematográfica. Estos no han sido sufi- queñas proyecciones y talleres de produc-
cientemente estudiados y están, desafortu- ción audiovisual para niños, y produjeron
nadamente, muy desconectados del circui- varios cortometrajes con la comunidad.
to de la misma industria, ya sea por falta de Sin embargo, fue Juancho, el cuidador de
difusión o por su programación, lo que difi- un centenario árbol llamado El Tun Tun, y
culta potenciales caminos para el progreso su variopinto grupo de amigos, quienes les
de los cineastas locales. compartieron el misticismo de la relación
entre el monte y el mar e inspiraron el me-
He tenido la oportunidad de visitar festi- diometraje La muerte del Camajón. En 2015,
vales de cine muy diferentes y trabajar para los colectivos K-minantes Cámara Nóma-
proyectos culturales de diversa magnitud e da, Lalo y Anamnésico Colectivo Teatral,
impacto. Por ello pienso que un festival de decidieron organizar un evento que sirviera
cine exitoso es aquel que cultiva una perso- como estreno de la película, el cual convocó
nalidad diferencial y que, mientras celebra a más de cuatrocientas personas para ver la
la imagen en movimiento, fomenta diná- magia de Isla Fuerte en una pantalla gran-
micas para la producción de más películas. de debajo de El Tun Tun. Con la proyección
Sin embargo, la experiencia en el Festival de otras películas y la realización de activi-
Cine en la Isla me permitió descubrir un dades de formación, esa se convirtió en la
modelo de evento cinematográfico para el primera edición del Festival Cine en la Isla.
que el verdadero impacto es generar diná-

149
Para las siguientes ediciones, el equipo tínez y Nelys Méndez, señoras que desde el
de trabajo del festival buscó financiación principio pusieron a disposición sus casas y
aplicando a estímulos gubernamentales, brindaron servicios de alimentación para el
estableciendo alianzas con instituciones e equipo de trabajo del festival, en parte por
incluso organizando rifas, con lo que con- la confianza que le tenían a Jota, y porque
siguieron consolidar procesos de formación creían en las oportunidades que el festival
audiovisual, musical, teatral y de protec- ofrecía a la isla. Muchos otros habitantes
ción del territorio; diseñaron un modesto también estaban atentos a las necesidades
plan de asistencia para visitantes externos; del festival, a ofrecer mejores condiciones
y fortalecieron la programación con pelícu- para la recepción de visitantes y participar
las más diversas e invitados. Se establecie- de las múltiples actividades.
ron las secciones Marejada, una selección
oficial de cine afro, Raíces de mangle, que
presenta cortometrajes colombianos, Al- ...el cuidador de un centenario árbol
tamar, una muestra de cortometrajes in- llamado El Tun Tun, y su variopin-
ternacionales, y Pez Loro, especializada en to grupo de amigos, quienes les com-
obras para público infantil y juvenil. partieron el misticismo de la relación
entre el monte y el mar e inspiraron el
mediometraje La muerte del Camajón.
“Así fue como se inició un proceso que
muy bien podríamos llamar de Revolución
Cultural, porque además de intentar inte- La organización se enfrentó a retos sig-
grar las artes, el turismo, la afrocolombia- nificativos por la magnitud de la tercera
nidad y la ecología, se enfrenta a la adver- edición del festival, lo que llevó a la trans-
sidad ideológica de personas que visionan formación del equipo de producción y a una
la finanza comercial inmediata, como única búsqueda por reafirmar el propósito de ha-
fortaleza de la economía local”, escribe Mi- cer del festival un canal para visibilizar las
guel Góngora, gestor cultural de Isla Fuer- problemáticas de la comunidad, especial-
te, en el catálogo de la cuarta edición del mente mostrando el resultado de los pro-
festival. Sin embargo, ese proceso no ha- cesos creativos llevados a cabo por isleños.
bría sido posible sin el abrazo de personas Para ello, se creó Arrecife: Escuela de desa-
como Miguel y las familias de Amalfi Mar- rrollo cultural y ambiental de Isla Fuerte. En

150
2018, la recepción de una maleta de pelícu- do más que para su sostenibilidad, a pesar
las (parte de un programa gubernamental de los esfuerzos de la misma por informar
de circulación de cine colombiano) les dio la continuamente sobre la administración de
oportunidad de extender la presencia de la los recursos que lograban conseguir. Esos
organización en la isla para desarrollar un recursos casi siempre han sido inferiores a
programa de apreciación cinematográfica lo realmente necesario para la producción
con proyecciones más frecuentes y, sobre del festival; se buscan alternativas para el
todo, realizar más talleres de producción ahorro y el equipo base y colaboradores in-
audiovisual. vitados donan su trabajo. Por otro lado, se
puede identificar un creciente deterioro del
La escuela se ha convertido en un pun- tejido social por las condiciones económi-
to de encuentro de los más jóvenes, que cas del territorio; cada vez más personas
cuenta con una biblioteca, acceso a Internet están vendiendo sus propiedades en la isla
(escaso en una población que no tiene un y buena parte de la población adulta no está
servicio de energía eléctrica pública cons- interesada en procesos creativos y de pro-
tante), actividades de formación periódicas tección de la biodiversidad de Isla Fuerte.
y el acompañamiento de los integrantes del
equipo de la ahora Corporación FECISLA Debido a los altibajos en la relación entre
(figura jurídica que organiza el festival) y la organización y la población, las trasfor-
sus talleristas invitados, quienes se alojan maciones sociales y económicas del terri-
temporalmente en la casa donde funciona torio, la consolidación de Isla Fuerte como
Arrecife y que han desarrollado bastantes destino ecoturístico del Caribe colombiano,
y estrechos lazos con los habitantes de Isla y por los efectos de la pandemia del CO-
Fuerte. VID-19, la organización ha seguido trans-
formando el festival con responsabilidad
Por la misma época, tras el diseño de pla- y creatividad, siempre con el objetivo de
nes turísticos para asistir al festival como fortalecer su trabajo desde y para la comu-
estrategia de financiación, y sus buenos re- nidad. Por eso, el festival que viví en 2023
sultados, un sector de la población comenzó es el fruto de un proceso de constante de
a desconectarse de la visión del evento por aprendizaje.
creer que la organización se estaba lucran-

151
En los últimos años, en el área de la pro- El alma quiere volar, Cantos que inundan el río,
gramación cinematográfica, optaron por Nocaut y El árbol rojo, y los cortometrajes de
reducir la cantidad de escenarios y funcio- la sección Raíces de mangle, resaltaron la
nes de exhibición, ante el limitado acceso a importancia de generar diálogos generacio-
energía eléctrica y la poca asistencia de los nales sobre el rol de la mujer en la familia,
isleños a las funciones diurnas. Aunque la la diversidad sexual, los efectos del conflic-
sección Altamar de cortometrajes interna- to armado colombiano, la realización pro-
cionales era un orgullo para el equipo cura- fesional de los jóvenes y la conservación de
torial, sintieron que realmente no resonaba tradiciones culturales. La proyección de es-
con las necesidades e intereses de la comu- tas películas al aire libre, en un campo de
nidad (y que además consumía recursos de fútbol junto a una ceiba gigantesca llama-
producción considerables), por lo que fue da La Bonga, cada noche fue un encuentro
eliminada y se trabajó más en desarrollar emocionante de niños y adultos, muchos
una curaduría que refleje las problemáti- locales y algunos turistas, muy reactivos a
cas sociales y la naturaleza cultural de Isla todo lo que sucedía en pantalla.
Fuerte. Además, dejaron de separar las pro-
ducciones afro para integrarlas a todas las La producción de cortometrajes con la co-
secciones y establecer Marejada como una munidad se ha limitado por falta de finan-
sección de largometrajes colombianos. ciación, sin embargo, los habitantes siem-
pre han pedido que el festival se convierta
en un epicentro de manifestaciones artís-
ticas y culturales, por lo que la organiza-
...tras el diseño de planes turísticos
para asistir al festival como estrategia ción potencia el talento local con procesos
de financiación, y sus buenos resulta- de formación en diferentes disciplinas, lle-
dos, un sector de la población comenzó vando formadores especializados a ofrecer
a desconectarse de la visión del evento talleres de danza, clown, percusión, com-
por creer que la organización se estaba
posición y producción musical, mostacilla,
lucrando más que para su sostenibili-
macramé, muralismo, cianotipia, acrobacia
dad,...
aérea en telas, fotografía y animación. Adi-
cionalmente, en la franja Historias de mar
En la pasada edición, largometrajes como y monte, convocan al público a escuchar

152
sentidas conversaciones entre locales sobre la última se visitaron las huertas de tres fa-
sus orígenes, oficios y experiencias de vida, milias locales, como un reconocimiento de
como un ejercicio para nutrir la tradición la diversidad agrícola del territorio y de su
oral isleña. labor como ejemplo de soberanía alimenta-
ria.
FECISLA también reconoce el valor y fra-
gilidad del territorio de Isla Fuerte, par-
ticularmente tras la consolidación de una La organización decidió limitar el al-
industria turística y las problemáticas de- cance de sus iniciativas de planes turís-
rivadas de esta actividad económica, como ticos para visitantes, ha dejado de usar
el consumo desproporcionado de recursos papel para la publicidad del festival,
para la construcción, el transporte y la ali- promueve en sus piezas promocionales
la responsabilidad de todos los asisten-
mentación. La organización decidió limitar
tes con el uso de recursos en la isla...
el alcance de sus iniciativas de planes tu-
rísticos para visitantes, ha dejado de usar
papel para la publicidad del festival, pro- Son muchos los motivos por los que Jota
mueve en sus piezas promocionales la res- y el equipo del festival están comprometi-
ponsabilidad de todos los asistentes con el dos con su trabajo en Isla Fuerte. El colec-
uso de recursos en la isla y ha desarrollado tivo K-minantes, con quienes Jota hizo sus
y acompañado programas de protección de primeros cortometrajes allí, tenía un fuer-
su fauna y flora. te compromiso político y buscaba hacer un
cine de carácter antropológico y sociológi-
Entre estas estrategias están las Rutas co muy influenciado por el trabajo de Mar-
Agroecológicas, guiadas por isleños y or- ta Rodríguez y Jorge Silva. La isla y su co-
ganizadas en 2023 en alianza con la plata- munidad les brindaron un espacio propicio
forma Espora - Semillas originarias. En una para la reflexión y la construcción teórica y
de ellas se identificaron las fuentes hídricas práctica, con lo que pudieron fortalecer sus
de la isla y se aprendió a hacer un biofiltro creencias cinematográficas. Otra fuente de
casero; otra estuvo dedicada a la recolec- inspiración constante para el equipo es la
ción de semillas de mangle como parte de oportunidad de explorar la isla a través de
un programa de rehabilitación costera, y en los ojos de los niños y niñas, quienes crecen

153
allí con una libertad inaudita, experimen- a la apropiación y celebración de sus tradi-
tándola permanentemente de manera casi ciones culturales. Los procesos de creación
anárquica. y de apreciación audiovisual les han abierto
el mundo a numerosos jóvenes, que ahora
Sin embargo, han identificado que la po- se encuentran en diversos caminos de pro-
blación tiende a subestimar la riqueza del fesionalización para seguir trabajando por
territorio que habita y de sus manifestacio- la isla o encontrar mejores oportunidades
nes culturales, debido a la precariedad de las de vida.
condiciones de vida en el lugar. Por eso Jota,
Carolina Mejía, María Vásquez y Jaír Pérez, Pero lo más importante, es la memoria.
quienes son el equipo base actual de FECIS- En el abundante registro audiovisual y fo-
LA, y una gran cantidad de colaboradores, tográfico del Festival Cine en la Isla, en
lo que quieren es brindar herramientas a la los murales, las canciones y los collares de
comunidad para que construyan sus pro- mostacilla, está plasmado un impresionan-
pios relatos. “No estamos creando nada, no te proceso de creación colectiva. En las pelí-
estamos salvando a nadie; estamos cogien- culas hechas por los isleños y la corporación
do lo que la gente tiene e intentando darle FECISLA, habitan las enseñanzas de viejos
mayor visibilidad, adentro del territorio y que ya no están y los sueños de niños que
hacia afuera”, dice Jota, pues FECISLA tam- ahora son adultos activos en su comunidad.
bién ha trabajado por la circulación nacio- Todo esto constituye un patrimonio cultural
nal e internacional de obras producidas en invaluable que la gente de Isla Fuerte puede
Isla Fuerte y ha hecho muestras periódicas disfrutar y seguir alimentando.
en Medellín.

Los procesos de creación y de apre-


Así se han producido alrededor de cuaren- ciación audiovisual les han abierto el
ta cortometrajes, entre documentales, cor- mundo a numerosos jóvenes, que aho-
tos de ficción, piezas animadas y videoclips, ra se encuentran en diversos caminos
dirigidos y protagonizados por niños, jó- de profesionalización para seguir tra-
bajando por la isla o encontrar mejores
venes, mujeres y ancianos: artistas de Isla
oportunidades de vida.
Fuerte, que han contribuido a la transfor-
mación del imaginario sobre su territorio y

154
la gestión cultural; en que el cine es mucho
El Festival Cine en la Isla ha estado en más que imagen en movimiento sobre pan-
evolución permanente, desarrollando cua- tallas; y en la sabiduría de los árboles que
lidades de diferentes modelos de festival de caminan lento, convirtiendo sus ramas en
cine y experimentando con diferentes es- raíces, para crecer con su entorno.
trategias para la consolidación de un pro-
yecto cultural. Ha conseguido integrar en la * Juan David Mejía Vásquez
programación cine colombiano que nutre la Cineasta antioqueño y director de la Cor-
apreciación del público local, mientras dig- poración FECISLA, organizadora del Festi-
nifica la producción comunitaria. Ha desa- val Cine en la Isla.
rrollado estrategias de conexión con otras
disciplinas y creadores activos en el sector
artístico nacional, para cultivar la diversi-
dad creativa de la población y relaciones de
trabajo enriquecedoras. Esto lo ha hecho
CONTENIDO SITIO WEB
sabiendo controlar su magnitud y alcance,
no solo por la disponibilidad de recursos
económicos, equipos de producción audio-
visual e incluso la capacidad hotelera de la
isla, sino por tomarse el tiempo de escuchar
y diseñar su propio modelo de la mano de la
comunidad. Ha priorizado las necesidades
de la misma sobre los indicadores de la in-
dustria, midiendo el impacto como un estí-
mulo efectivo sobre las dinámicas de crea-
ción y conservación del patrimonio cultural
de Isla Fuerte.

Esta isla, su gente y su festival me deja-


ron pensando en la necesidad de una ree-
valuación de la producción de impacto en

155
FICCI 62
EL PUENTE ESTÁ QUEBRÁNDOSE, ¿CON QUÉ LO CURAREMOS?
David Guzmán Quintero

Asistir a un festival de cine puede parecer quién fue el que dijo que la prueba de que
un acto de terca insistencia y que ni siquiera el cine ha muerto es que constantemente
la misma gente que asiste podría justificar lo están intentando resucitar con las tec-
por qué lo hace. A estas alturas, un festival nologías para hacer más sofisticado el en-
de cine la tiene complicada a la hora de in- tretenimiento: el 3D, los efectos especiales,
tentar que aquello no parezca la celebración etcétera. Al cine también lo mata el ser tan
fúnebre de un arte cuya vida amenaza con susceptible, tan vulnerable, estar tan ex-
extinguirse constantemente. No recuerdo puesto, más que cualquier otra manifesta-

156
ción artística (incluso más que la música), gue preocupándose por traer propuestas ci-
quizá al ser igualmente la más costosa, a nematográficas provocadoras y atractivas.
la basura farandulera, a las tendencias, et- Eso no quiere decir que considere “buenos”
cétera. Por lo que insistir en un cine vivo y todos los filmes (vi un par de bodrios como
no en un cine resucitado (aunque en esta- Memento mori), sino que, de una u otra for-
do vegetal) cada vez más parece que es ju- ma, es importante mostrarlos e incluirlos
gar de visitante, con el marcador en contra en la conversación.
y con menos jugadores que el otro equipo;
parece entrar quedando, un juego en el que El festival abrió con Memento mori, de
uno, como sea, está destinado a perder. Y es Fernando López Cardona (el año pasado la
peor cuando cada vez se suman más a esa de inauguración fue La roya… ha de ser al-
actividad de despertar al cine a la fuerza. guna estrategia del festival para que, sea
Es tal vez debido a eso que, a pesar de que lo que sea que uno vaya a ver después, sea
constantemente he escuchado que uno no mejor). Y entre los largometrajes colom-
va a festivales de cine a ver cine, insisto en bianos de ficción exhibidos también estu-
esos espacios como portales a través de los vieron Cristina, de Hans Fresen, Entrevista
cuales uno puede acceder a propuestas di- laboral, de Carlos Osuna, Herida abierta, de
ferentes a lo que llegan a las carteleras de Lina Rodríguez, Lo peor hasta el momento,
cine o, incluso, a las plataformas de strea- de Iván Garzón Mayorga, Puentes en el mar,
ming. de Patricia Ayala Ruíz y Un varón, de Fabián
Hernández. Eso sin contar los que hicieron
El FICCI es de esas comuniones cinema- parte de secciones como “De indias”, “Tie-
tográficas de las que, dada su importancia a rra adentro” o los filmes documentales que
nivel latinoamericano, podemos sacar pe- solo corroboran que es este género el que
cho en Colombia. Creo que podemos decir está haciendo las mejores propuestas cine-
que hace mucho tiempo ya el FICCI dejó de matográficas en el país los últimos años. Es
ser un evento sin utilidad y una sorpresa ex- una verdadera lástima que algunos de estos
clusivamente dirigida a la burguesía local y relatos no lleguen después a salas de cine,
ahora es, verdaderamente, una ventana de ni siquiera a las alternativas. El año pasado
exhibición importante. El trabajo que hace recuerdo muy especialmente filmes como
el equipo de curaduría y programación si- La forma que tienen las nubes o Toro, que han

157
encontrado un público solamente en festi- cinematográfico, del retorno a un cine de-
vales. centralizado que no responda a las exigen-
cias industriales y comerciales y de volver a
darle importancia a la experimentación y al

Y entre los largometrajes colombianos redescubrimiento constante del cine y no a


de ficción exhibidos también estuvie- ese eruditismo reglamentario de la indus-
ron Cristina, de Hans Fresen, Entre- tria y las escuelas, que el cine puede man-
vista laboral, de Carlos Osuna, Herida tenerse vivo.
abierta, de Lina Rodríguez, Lo peor
hasta el momento, de Iván Garzón Ma-
Así mismo, el traer a colación a los viejos
yorga, Puentes en el mar, de Patricia
Ayala Ruíz y Un varón, de Fabián Her- maestros del cine puede constantemente
nández. recordarnos los verdaderos límites que tie-
ne el cine: ninguno. En esta edición hubo
Igualmente hubo presencia de gran cine dos secciones de clásicos (que para mí es
latinoamericano (que sí que menos va a un verdadero privilegio poder verlos en una
llegar a nuestras salas en un futuro) en la pantalla grande) que comprendieron cine
programación del festival, como el último italiano con dos de los más hermosos re-
Bize, que es un solo plano secuencia que latos de Vittorio de Sica (sección que contó
tiene una perspectiva bastante interesante con otros dos relatos de los últimos años:
sobre la maternidad. Y los que también para Ennio: The maestro, de Giuseppe Tornatore
mí son imperdibles son los de la categoría y La mano de dios, de Sorrentino) y una re-
“Omnívora”, que son un verdadero descan- trospectiva de Godard, que recién falleció el
so del cine en general, filmes provocadores, pasado septiembre.
verdaderas rarezas que te ponen a mirar el
cine en otras mil direcciones; en esta edi- Como siempre, al final, uno queda con la
ción, estuvo el último Stathoulopoulos, que sensación de no poder haber visto todo lo
es algo que nadie puede dejar pasar si es que que se hubiese querido, aun renunciando al
podemos tener acceso a él en algún futuro. mar y a las caminatas alrededor de las mu-
Esta categoría es sumamente importante, rallas.
pues creo que es a través de la redisposición
de los recursos que refrescan el lenguaje Ahora, lo anterior respecto a esa parte de

158
la palabra “festival” que denota una reivin- rante seis años; no pongo en tela de juicio la
dicación de la vida (del cine). Ahora pase- habilidad interpretativa que pueda llegar a
mos a los actos mortuorios: tener Natalia Reyes, pero el tipo de conver-
sación que moderó con Lelio hacen pensar
No se puede dejar pasar el hecho (casi a que la única razón por la cual ocupa ese car-
manera de alerta) de que el festival podría go es por “fama”. Si hablamos de rostros
estar entrando en decadencia a causa de la visibles, constantemente me he pregunta-
farándula. Esto puede verse en la progra- do por qué un cargo de este peso, no solo
mación académica. Gran parte de las mas- en cuanto a cine, sino extensible a cargos
terclasses estuvo enfocada a redes sociales similares en otras artes (como el caso del
(cuya importancia no niego, pero sí cues- Festival Iberoamericano de Teatro, que en
tiono si un festival de cine es el espacio para su momento significó resistencia a la vio-
esas discusiones o un espacio en el que se lencia de los años noventa a través del arte
les dé tanto peso): “De Aristóteles a Tik- y que ahora está en crisis desde la muer-
Tok”, “La presunta gratuidad de las redes te de Fanny Mikey) no es ocupado por una
sociales”, “Creadores y creadoras de conte- personalidad como Vicky Hernández. Pue-
nido con impacto social”, “Lo que necesitas den cambiar el nombre si lo desean, pero
saber sobre tendencias de contenido […]”. a lo que me refiero es a una persona que
El hecho de que hayan traído como “invi- haya recibido las coces del arte en Colombia
tado especial” a un director de cine cris- y cuyo amor, respeto y afán por dignificar
petero como Tim Miller o que hayan des- su oficio la haya llevado a alzar la voz (de
aprovechado de una forma casi insultante forma insistentemente molesta, dirían al-
la presencia de un director como Sebastián gunos) atacando a las instituciones, aunque
Lelio con un masterclass (no sobra decirlo: eso les signifiquen afrontar todos los vetos
a eso del mediodía, al aire libre, con un so- imaginables.
lazo encima que, literalmente, imposibilitó
la permanencia del público) moderado por Y tercero, y quizá un reproche meramente
Natalia Reyes, que ocupa el cargo de Presi- personal, una publicación que hicieron vía
denta de la Academia Colombiana de Artes Instagram que encontré bastante desagra-
y Ciencias Cinematográficas, tras la salida dable: “Cuota femenina en el FICCI”, lo que
de Consuelo Luzardo que ocupó el cargo du- genera desconfianza en la razón por la cual

159
homenajearon a Paula Gaitán y a Alejandra nera más desigualdad y más indiferencia.
Borrero y Juana Acosta en los India Catali-
na, el que el sesenta por ciento de los filmes
seleccionados fuesen dirigidos por mujeres Si hablamos de rostros visibles, cons-
y una sección de películas titulado “Cine tantemente me he preguntado por qué
de España, mujeres”. ¿De verdad sus tra- un cargo de este peso, no solo en cuan-
bajos son dignos de reconocimiento o solo to a cine, sino extensible a cargos simi-
hacen parte de la Edición por “cuota”? Esa lares en otras artes...
ha sido una de las discusiones que han sos-
tenido algunas cineastas, pues resulta, en Lo inmediatamente anterior es algo fran-
vía opuesta, reafirmando el machismo: es camente condenable, pues quienes nos re-
como si la única forma en la que el trabajo fugiamos en espacios como el FICCI para
de una mujer puede hacer parte de estos es- descansar de los Premios a Mejor Sucursal
pacios es haciéndoles una categoría especial de Crispetas (hay quienes los llaman “Os-
a ellas, como si no pudieran estar a la altura car”), nos encontramos con que están ca-
de los trabajos de hombres y la única forma yendo en ese mismo discurso. Esperemos,
en que las mujeres pueden ser reconoci- ahora que está a tiempo, que el festival no
das es excluyéndolos de “la competencia”. se deje llevar por esos aspectos plásticos
Y ahora la sociedad está inundada de este que tanto mal le han hecho al cine, que ya
tipo de estrategias que tergiversan de for- suficiente tenemos con la estupidización y
ma peligrosísima los movimientos étnicos, la complacencia malintencionada de Ho-
cuir y feministas, creyendo que la igualdad llywood y sus esbirros como para que los
que exigen se logra mediante la concesión espacios que uno espera que se tomen el
de cierto impulso de condescendencia por cine en serio, también resulten dejándose
parte de la misma élite que les han oprimi- llevar por esas payasadas propias del show
do históricamente, como si clamaran por business.
una suerte de prerrogativa de su parte. No
se puede hacer agenda política con el fin de
satisfacer estas demandas como si fueran
meros caprichos, pues resultan cayendo en
CONTENIDO SITIO WEB
el discurso contrario que, a largo plazo, ge-

160
Sala cortos

161
CUANDO LA LLANURA ENCUENTRA EL PIEDEMONTE,
DE JONAS RADZIUNAS
CARTAS A UN AMIGO SOBRE EL ENCUENTRO CON LA NATURALEZA
Y UN CINE
Daniel Tamayo

27 de enero de 2023 rales, las fuerzas de la naturaleza o como


Querido Jonas, podamos decirles son misteriosos, nos lla-
man la atención y también pueden asustar-
Vi tu corto y rápidamente me vino una nos (por actitudes nuestras o por cualida-
idea común: la naturaleza, los entes natu- des suyas). Aunque quizás no tanta gente lo

162
cree en realidad. Sería bueno que dicha idea escuchados.
hiciera parte del sentido común, ¿no?
Creo que fue eso lo que te propusiste en
Tal vez tú lo crees o así lo quisieras. Sea esta ocasión. Pero más que dejar un mensa-
cual sea el caso, te propusiste ir al encuentro je –que igual sí tuviste la intención, me pa-
con lo natural desde tu natal –y para mí to- rece–, quisiste crear una experiencia sen-
davía desconocida– Yopal. Cuando la llanura sible, por ejemplo, estar bajo el agua de un
encuentra el piedemonte (2023) es un grupo río. Puede que fuera de algunas convencio-
de encuentros o contactos reales, oníricos, nes se trate de una situación poco moderna y
poéticos entre seres humanos y seres na- poco capitalizada, y aun así tú y con quienes
turales… Aunque el humano también lo es, hiciste la película nos permiten sentirla en
¿cierto?, pero parece que nos hemos desna- la pantalla (con la que se tiende a moder-
turalizado. A lo mejor eso quisieras decir- nizar y capitalizar). Ahí las fuerzan se en-
nos a tus espectadores, mas eres conscien- trelazan, las del capital y las del cine. Pero
te de que probablemente no escucharíamos jalan en diferentes sentidos, lo que resulta
tus palabras en medio de los ruidos propios un poco ambiguo…
de la modernidad. Un abrazo,
Dani
Y a pesar de ello te la juegas por un dispo-
sitivo de origen moderno: el cine. Este ha
sido acaparado por su modo de producción 30 de enero de 2023
industrial y un cierto carácter impositiva- Amigo,
mente narrativo. Parece que te fastidia ese
cine, pero no puedes evitar amar un otro. Repetí tu Cuando… Es ahí que he dado con
Tú te las ingenias para moverte entre esas una de las potencias de tu cine (o el que te
maneras canónicas de realizarlo y desde propones hacer). Una que no se pierde a pe-
adentro lo dinamitas con tu poética (visual sar de que entras (así sea tangencialmente)
y sonora) y tus sueños (como aquellos apa- en la dinámica de la industria y la circula-
cibles bajo el sol). Percibes que el cine, aun ción mercantil. El contacto con la naturale-
en su forma dominante, tiene capacidades za puede sobrevivir ante el contacto con la
para transmitir mensajes que pueden ser institucionalidad. Pero su fuerza sí resulta

163
ambigua si nos fijamos en que se trata de nuestra humanidad moderna, lo que abru-
encuentros con espacios naturales por me- ma pero sería emocionante.
dio de la imagen digital y cinematográfica.
Se trata de una ambigüedad semejante a la El contacto con la naturaleza puede
que, intuyo, se te presenta en tu cultura lla- sobrevivir ante el contacto con la ins-
nera, cultura de la que sé más que nada de titucionalidad. Pero su fuerza sí resulta
sus estereotipos (tengan ellos algo de ver- ambigua si nos fijamos en que se trata
dad o no). A pesar de ser tu amigo no sé si de encuentros con espacios naturales
por medio de la imagen digital y cine-
he podido conocer más de ella, pues tú me
matográfica.
pareces un llanero muy peculiar. En eso se
asemeja tu corto a ti. Da la impresión de que
esa llanura que encuentra el piedemonte Sin embargo, temo que yo no logre sen-
es al mismo tiempo tradicional y alterna, tir y disponerme igual que como, aparente-
como tú y tu cine. Están entre polos: mo- mente, lo pudieron hacer las personas que
dernización y «renaturalización», tradi- ¿actuaron? en tu filme. Dudo al pensar que
ción y novedad, pasado y futuro. fueron más sus personajes los que pudieron
en verdad encontrarse con la naturaleza que
En esa tensión polar creo que se hallan ellas y ellos mismos. E incluso si sí, me in-
tanto la oportunidad como el peligro para el quieta que la brevedad de la experiencia que
potencial de tus ficciones experimentales. me permitiste vivir no llegue convertirse
Esta en particular en que se puede llegar a en acontecimiento suficiente para sacudir
sentir más de cerca el agua, el sol y los árbo- mi –aunque también corta– más extensa
les me generó curiosidad y una sutil espe- vida. Jonas, me pregunto qué tanto depen-
ranza. Imaginaba que quienes la viéramos de de mis capacidades y qué tanto de la obra
pudiésemos sentirnos atraídos, por ejem- misma poder asimilarla de tal modo que me
plo, a querer saber más nombres de árboles mueva en la dirección que tú nos señalas.
que de marcas de celular o, quizás, a estar Aunque bueno, ¿qué dirección es esa?
dispuestos a escuchar un río como hipno-
tizados hasta caer dormidos. A lo mejor así Ahora saldré de viaje y espero que esa le-
nos dispondríamos, aunque temiésemos janía me ayude a encontrar respuesta. Pro-
al sol imponente o a la pérdida de parte de bablemente esto suena «clichesudo» y

164
pretencioso, pero no por ello falso. Lo malo solo fuera por algunas horas– playas, ríos,
es que uno impone expectativas y tal vez desiertos y montañas. No digo “fortuna”
cierra más que lo que abre. Intentar lo con- solo para referirme a estas experiencias (no
trario, con la conciencia de lo primero, es siempre fáciles de apreciar) que pude vivir a
igualmente soberbio. Ya veremos. manera de maravillas, sino que me pareció
Un saludo y suerte, que hay un aspecto de azar cuando se pre-
Dani senta una tal vivencia; y que alguien pueda
llegar a asimilarla de modo que la aprecie
depende, también fortuitamente, de la di-
14 de febrero de 2023 rección que termine hallando a medida que
Hola nuevamente, Jonitas, se mueve hacia lo profundo o por la super-
ficie. El tiempo que se permanezca en los
Volví hace tres de días de mi viaje. Me lugares también es un factor que determi-
encuentro vital pero débil. Suena confuso, nante. No es lo mismo estar por unas horas
pero de hecho me siento con unos impulsos que por semanas o que por ratos, de mane-
clarificadores. Puedo imaginarme alguna ra reiterada, en algunos meses. Igualmente
frase que ayude a entender: habitar la ambi- pesa con quién más se está ahí o si la perso-
güedad permite dar con caminos concretos. na se encuentra sola.
Tal vez comprendamos de forma semejante
si habitamos –sin saber bien cómo– tu fic-
ción experimental. ...Creo que son muchas las direcciones
que se señalan en tu película. Y son
Volviendo a la pregunta que te dejé en la muchas más las posibles en los entor-
carta pasada… Creo que son muchas las nos naturales donde rara vez los cami-
direcciones que se señalan en tu pelícu-
nos son tan demarcados...
la. Y son muchas más las posibles en los
entornos naturales donde rara vez los ca-
minos son tan demarcados (por lo menos Lo repito: en tu película la naturaleza se nos
para buena parte de nosotros los huma- muestra tanto intimidante como atractiva, en-
nos). Caí en cuenta de ello en días pasados, tre otras muchas facetas. Que uno pueda verse
ya que tuve la fortuna de habitar –aunque afectado por tales o cuales o por más de una para

165
poder contrastar, obedece a la situación con- Es también un cúmulo de recuerdos que nos
creta del encuentro o encuentros. Ahí entran a transmites y que, como muchas de las memo-
jugar las propias capacidades y disposiciones, rias individuales y colectivas, son parcialmente
la historia personal, las rutas que halle y las que producto de la capacidad imaginativa (poética)
tome, el clima, el insecto que estaba sobre una u que tenemos los humanos. Es igualmente una
otra planta, la cantidad de nubes, si el calor del invitación, además de al encuentro ya obvio, a
sol llega a agobiar y qué tan profundo se hunde uno con un cine.
uno en el agua. Pienso que pasa de forma similar
con el cine: que un encuentro con él sea afortu- Claro, puede que la invitación no sea corres-
nado depende de que cada quien “haga lo suyo” pondida o que aún al aceptarla y seguirla, “no
y “las cosas se den”. pase nada”. Y es que no es evadible la tensión
entre el peligro y la oportunidad de proyectos
En mi caso puedo afirmar que el haber vis- vitales como el tuyo, pero estos en parte tie-
to tu corto y rumiar a partir de él –además para nen sentido por existir bajo riesgo en un mun-
terminar de escribir esta carta– tuvieron parte do que nos sobrepasa al mismo tiempo que lo
en la forma en que viví y reflexioné sobre esas sentimos carente. Seguramente tampoco evi-
experiencias con la naturaleza y que todavía si- taremos encuentros con la naturaleza o el cine
guen en mi memoria de forma vívida. No sé si que nos presentas, pero ellos pueden llegar a
así permanezcan, a lo mejor dejen una huella en ser más o menos brutales o indiferentes según
mi cuerpo y me conduzcan por nuevos caminos, nos dispongamos y la suerte que tengamos. En
o quizás no. En tu caso pudo ser que tu historia, ese sentido, ya has hecho más que suficiente y
el ir y venir entre la llanura y el piedemonte y, aun así queda mucho por hacer. Probablemente
por qué no, ver una o varias películas, te permi- continúes si sigues creyendo en tu magia. Espe-
tieron asimilar los encuentros de tal modo que ro que así sea, entre otras cosas, porque creo que
quieres que más personas los vivan. me hace bien a mí. Confío en que también a ti.

Me da por pensar que tu película es testimo- Gracias por todo,


nio, memoria e invitación. Allí nos atestiguas Dani
experiencias que son posibles dentro y fuera del
cine –o al menos eso quisiera creer– al recons-
CONTENIDO SITIO WEB
truirlas audiovisualmente con otras personas.

166
Crítica de cine, cine colombiano,
nuevos medios, cómics,
artículos y ensayos.

Suscríbase a la crítica de la semana

También podría gustarte