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Sobre ética y derecho en la filosofía de Kant

On Ethics and Law in the philosophy of Kant


Cristóbal Arteta Ripoll*
Universidad del Atlántico, Colombia
DOI: http://dx.doi.org/10.15648/am.27.2016.6

RESUMEN

Estas reflexiones sobre algunos aspectos de la filosofía de uno de los pensadores más profundos de
la modernidad pretenden mostrar cómo el propósito de Kant fue crear una ética racional radical-
mente distinta de la ética empírica de los pensadores ingleses y franceses del siglo XVIII.
En tal sentido, su reflexión fue el resultado no del estudio y observación directa del hombre y sus
actos sino del ejercicio de la razón, toda vez que estructuró su filosofía racionalista utilizando como
núcleo el ideal del bien supremo como fundamento determinante del fin último de la existencia del
hombre. Es en su gran obra: Crítica de la razón pura (1781), en donde expone con claridad que es
este el ideal al que siempre la humanidad debe aspirar.
La filosofía moral, expuesta magistralmente por Kant, principalmente en dos de sus grandes obras:
Crítica de la razón práctica y Metafísica de las costumbres, es el fundamento de su filosofía del
derecho y de la interesante relación que establece entre la ley moral y la libertad.

Palabras clave: Ética racional, Ética empírica, Filosofía racionalista, Kant.


ABSTRACT

These thoughts on some aspects of the philosophy of one of the deepest thinkers of modernity
intend to show how Kant’s purpose was to create a radically different rational ethics. An ethics
radically differet to the empirical ethics of English and French thinkers of the eighteenth century.
In this sense, his thought was the result of the exercise of reason and not of the study and direct
observation of man. His racionalist philosophy was structured using as core the Ideal of the Highger
Good as the determining ground of the existence of mankind. It is in his great work: Critique of
Pure Reason (1781), in which he clearly states that this is the ideal to which humanity must always
aspire.
Kant exposed brillitanty the moral philosophy in two of his greatest works: Critique of Pure Reason
and Metaphysics of Morals. The moral philosophy is the foundation of his philosophy of law and of
the interesting relationship that establishes the moral law and the freedom.

Key words: Rational ethics, Empirical ethics, Rationalist philosophy, Kant.

Recibido: 9 de julio de 2015 Aceptado: 11 de noviembre de 2015


* Docente, Universidad del Atlántico y Universidad Libre seccional Barranquilla. Asesor de Investigadores,
Universidad Simón Bolívar. Correo electrónico: cristobalarteta@yahoo.es

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El jesuita español Francisco Suárez, principio metafísico: “el ego cogito


con la publicación y posterior recep- cartesiano”, que durante esta época
ción de la obra: Disputaciones me- había desplazado al teocentrismo me-
tafísicas (1597), tuvo una decisiva dieval para dar paso al antropocentris-
influencia en el proceso que condujo mo de la época moderna. Pero a pesar
a la preeminencia de lo teológico en de los 150 años de influencia moderna
la metafísica, durante la Edad Media, transcurridos, entre Meditaciones me-
y que convirtió a la filosofía en “sir- tafísicas de Descartes y Crítica de la
vienta de la teología”, sobre todo, en- razón pura, Kant no pudo deshacerse
tre los siglos IX y XV. de la influencia escolástica. Sin em-
bargo, seríamos injustos con Kant si
A lo largo de los siglos XVII y XVIII afirmáramos que la metafísica medie-
el libro de Suárez fue el texto básico val no fue transformada con su filoso-
de la educación universitaria alemana fía. En efecto, bajo el influjo de Des-
y fue la clave para que por fin España cartes la vieja metafísica general se
pudiera ir más allá de los Pirineos con convierte en trascendental, la cual si-
su influencia filosófica, logrando, por gue preguntando como aquella por el
fin, lo que ya otros pueblos europeos ser de los entes en general, pero con-
habían alcanzado con el desarrollo de siderando como causa última creado-
la filosofía. ra no un fundamento divino, sino la
subjetividad humana. Es decir, la pre-
Al comienzo de sus estudios en la gunta por el ser de los entes se con-
Universidad de Konisberg, Kant se vierte a partir de Kant en la pregunta
puso rápidamente en contacto con la por la objetividad de los objetos. Esto
metafísica de la filosofía dogmática hace posible que la experiencia jue-
alemana influenciada por Suárez. Allí gue papel importante en la relación
su profesor de filosofía fue Martín sujeto-objeto para el conocimiento de
Knutzen, quien ejerció gran influencia la realidad objetiva.
en su pensamiento, la cual fue com-
plementada con la recibida a partir Una de las premisas de la esencia de
de los cursos de teología dictados por la filosofía trascendental kantiana se-
Franz Albert Schultz, discípulos de ñala que sin la actividad de la sensibi-
Cristian Wolf, a quien Kant llamaba lidad y del entendimiento no existe un
“el más grande de todos los filósofos mundo objetivo con sentido, porque
dogmáticos”. sin la sensibilidad las categorías son
vacías y sin las categorías la sensibili-
Pero no fueron esas las únicas in- dad es ciega.
fluencias recibidas por Kant. Al mis-
mo tiempo recibía el influjo de la mo- Esa premisa ha traído algunas confu-
dernidad bajo el impacto de un nuevo siones, pues en la segunda mitad de

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la Crítica de la razón pura, integrada posible. De allí que la existencia de


por La dialéctica trascendental y La la realidad objetiva, Dios y el alma
doctrina trascendental del método, inmortal sigan siendo cuestiones sin
sobre todo en la Dialéctica, Kant pa- solución, es decir antinomias o para-
rece degradar la experiencia, apartan- logismos.
do los datos que ofrece la sensibilidad
y dándole solo importancia al diálo- Con esos argumentos es fácil enten-
go de la razón consigo mismo. Para der por qué cuando se refiere a la me-
Kant la experiencia está limitada solo tafísica dice que mientras las demás
a aspectos parciales del mundo, por lo ciencias progresan incesantemente, la
tanto, el mundo como un todo no pue- metafísica da siempre vueltas alrede-
de ser objeto de la experiencia. De la dor de un mismo punto, sin avanzar
misma manera, el hombre y Dios es- un solo paso. Es posible encontrar
tán fuera del campo de la experiencia. aquí el origen de la animadversión
El primero como alma inmortal, pues
que genera Kant en algunos círculos
no existe ni puede existir un dato sen-
escolásticos y religiosos. Aunque dice
sible más allá de la muerte. Y con el
el filósofo colombiano Danilo Cruz
segundo ocurre lo mismo como fun-
Vélez que semejante actitud frente a
damento absoluto de todo lo existen-
Kant carece de fundamento,
te. Son tres conceptos dice Kant que
solo existen mentalmente, es decir,
“porque al fin lo que se propuso
no como seres fuera de mí, sino como
pensamiento en mí. Kant fue una justificación y una
reconstrucción de la metafísica,
Al considerar el soberano bien en sus buscando nuevos caminos y diri-
reflexiones morales considera que, giendo la atención a la sola razón
debido a la imposibilidad de la
“no es posible, si no se le supone metafísica de ser una ciencia em-
tres conceptos teóricos (a los cua- pírica” (Cruz, 2001).
les no se puede encontrar intuición
correspondiente, y, por tanto, teó- Para Kant, el horizonte conocido
ricamente, de realidad objetiva, a priori por las ciencias es posible
porque son conceptos de la razón), porque la razón, utilizando sus tres
a saber, la libertad, la inmoralidad intermediarios: Dios, el mundo y el
y Dios” (Kant, 2008, p.184). hombre, realiza su función unificante,
sistematizadora, arquitectónica y heu-
Lo que no puede ser objeto de la expe- rística haciendo un trabajo regulativo
riencia solo se hace accesible al mero en el funcionamiento adecuado del
pensar y, por lo tanto, su verificación conocimiento científico de la realidad
con la realidad objetiva se vuelve im- objetiva, pero sin constituir objetos

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reales. Es decir, el trabajo de la razón la ruptura radical implementada por


aunque esencial no es otro que darle Nietzsche, hacia finales del siglo XIX.
un punto de apoyo al saber de la ex-
periencia. La filosofía moral, expuesta magis-
tralmente por Kant, principalmente en
Kant intenta superar los enredos es- dos de sus grandes obras: Crítica de
peculativos de la razón y sus contra- la razón práctica y Metafísica de las
dicciones sin solución, mediante un costumbres, es en palabras de Ortega
nuevo interés de la razón: el interés y Gasset como parte de su filosofía
práctico. Este interés lo conduce en general,
su proceso investigativo a publicar
como complemento de la Crítica de “una de esas adquisiciones eter-
la razón pura (1781) dos obras fun- nas, que es preciso conservar para
damentales: Fundamentación de la poder ser otra cosa más allá” (Or-
tega & Gasset, 2008, p.9).
metafísica de las costumbres (1785) y
Crítica de la razón práctica (1788).
El propósito de Kant fue crear una
Kant entiende el interés práctico
ética racional radicalmente distinta
como una fuerza interior que impul-
de la ética empírica de los pensadores
sa al hombre a actuar en dirección de
ingleses y franceses del siglo XVIII,
sus fines supremos suprasensibles: la
y en tal sentido, su reflexión fue el
libertad, Dios y la inmortalidad.
resultado no del estudio y observa-
ción directa del hombre y sus actos
Los dos pasos de Kant: el de la me- sino del ejercicio de la razón. Y debió
tafísica dogmática de la razón teórica ser así porque su filosofía racionalis-
y el de la metafísica dogmática de la ta como sistema se estructuró en El
razón práctica son la expresión más ideal del bien supremo como funda-
acabada de un “un eterno retorno” al mento determinante del fin último de
racionalismo dogmático y a la metafí- la razón, título de uno de los aparta-
sica teológica de las que surgió y a las dos fundamentales de su gran obra:
cuales quiso superar. Crítica de la razón pura (1781), en
donde expone con claridad que el fin
Los dos horizontes: –tanto el egológi- último de la existencia del hombre es
co de la filosofía moderna como el de el Bien supremo, ideal al que siempre
la filosofía occidental plena dominada debe aspirar.
por el principio teológico medieval–
los lleva Kant a su madurez y máxi- La noción central de la Crítica de la
ma sistematización, pero alcanzan su razón práctica es la buena voluntad,
mejor esplendor con Fichte, Schelling la única que puede proporcionar nor-
y Hegel, continuadores de Kant, hasta mas de acción absoluta. Para Kant la

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moral no es, en ningún sentido, ma- puede ser un más o menos correcto o
teria de una ciencia social, sino que conveniente, tiene que excluir todo lo
se trata de una disciplina racional que contingente. Es la autonomía de la vo-
sustenta el proyecto filosófico de la luntad lo más importante.
razón pura. La moral se asienta única-
mente en el deber impuesto por nues- “La autonomía de la voluntad es
tra razón. el único principio de todas las le-
yes morales y de todos los debe-
En consecuencia, res que a ella son conformes: toda
heteronomía de la voluntad, por el
“la voluntad, en la medida que contrario, no solamente no funda
está sometida a la obligación de obligación alguna, sino que aún es
la moralidad, no es buena por ser opuesta al principio de la obliga-
dadivosa o sacrificada, sino por su ción y a la moralidad de la volun-
tad” (Kant, 2008, p.57).
obediencia al mandato de la razón.
La forma a priori de todo juicio
La buena voluntad parece constituir
moral es, pues, el deber” (Kant,
la condición indispensable, inclusive
2008, p.11).
para que valga la pena ser feliz. La
buena voluntad es buena por su que-
Y más adelante señala,
rer, es decir en sí misma. Este postu-
lado no es posible encontrarlo en una
“Pero, para un ser en quien la ra- ética de los bienes. Lo único que se
zón es el único principio deter- puede considerar sin restricciones
minante de la voluntad, esta regla como bueno es la buena voluntad,
es un imperativo, o una regla que dice Kant, igualmente, en la Fun-
se traduce en un deber ser, el cual damentación de la metafísica. De la
designa la necesidad objetiva de buena voluntad se desprende “la con-
la acción; es decir, que, si la ra- ciencia del deber ser” que es propio
zón determinase completamente del entendimiento de todo ser que tie-
la voluntad, la acción sería infa- ne razón y libertad. Por lo tanto, es un
liblemente conforme a esta regla” imperativo categórico y como tal es
(Kant, 2008, pp.38-39). un ejercicio de la razón pura, porque
no procede de la experiencia, tiene
Para el pensador alemán únicamen- un valor absoluto y es incondicional.
te merecen el calificativo de morales El deber tiene para Kant un carácter
los actos que se asientan en la bue- sagrado, en el cual se manifiesta la
na voluntad y sin restricciones. La última racionalidad de lo moral. La
moralidad absoluta solo compete a racionalidad última del deber es la ra-
los imperativos categóricos, no a los cionalidad que confiere al hombre su
imperativos hipotéticos. La moral no humanidad.

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Interesante la relación que establece cueste a nos ocasione...” (Kant,


Kant entre ley moral, libertad y deber 2008, pp.115-117).
ser,
El imperativo categórico del “deber
“La ley moral determina, ante ser” contiene la esencia de la idea de
todo, objetiva e inmediatamente la justicia en Kant, entendida esta como
voluntad en el juicio de la razón; el reconocimiento de la igualdad de
pero la libertad, cuya causalidad derechos para todos.
debe ser determinada únicamente
por la ley, tiene precisamente por De toda esa concepción ética raciona-
carácter la restricción de todas las lista desprende Kant como ley funda-
inclinaciones, y, por consiguiente, mental de la Razón pura práctica, la
la estimación de la persona misma, siguiente sentencia:
a la observancia de su ley pura…”.
“Obra de tal suerte que la máxima
“…La conciencia de una libre su- de tu voluntad pueda siempre ser
misión de la voluntad a la ley, pero considerada como un principio
acompañada, sin embargo, de una de legislación universal” (Kant,
violencia inevitable, ejercida sobre 2008, p.53).
todas nuestras inclinaciones y so-
licitaciones por nuestra propia ra- Y de ella deriva otras máximas inte-
zón, es, pues, el respeto a la ley. La resantes:
ley que inspira y exige también el
respeto no es otra, como se obser- Obra de tal modo que emplees
va, que la ley moral (porque solo la humanidad, tanto en tu perso-
esta tiene el privilegio de excluir na, como en la de cualquier otro,
todas las inclinaciones y solicita- siempre al mismo tiempo como un
ciones de la influencia inmediata fin y nunca como un medio.
que ejerce sobre la voluntad)...”.
Debes respetar tu propia libertad
“…La acción, que es objetiva- y la de los demás no solamente
mente práctica, según esta ley, y cuando esperas sacar de ella un
que excluye todo principio de de- placer o un provecho, sino siempre
terminación deducido de la incli- y en todas las circunstancias por-
nación, se llama deber, y el deber, que la libertad es un bien absoluto
a causa de esta exclusión misma, y por sí sola constituye una finali-
implica el concepto de una coac- dad. Todo lo demás no es más que
ción práctica, es decir, de acciones un medio.
a las cuales debemos determinar-
nos, sea cualquiera la pena que nos En cumplimiento de esos princi-

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pios es necesaria la virtud, como Kant considera, además, la posibili-


constancia de la buena voluntad en el dad de un Derecho Cosmopolita, fun-
cumplimiento de las acciones, dado en la idea racional de una per-
petua asociación pacífica de todos los
“Asegurarse este progreso inde- pueblos del mundo. No se trata de ver
finido, hasta hacerle constante y si se puede aplicar alguna vez, sino
creciente, según máximas inmuta- más bien de darse cuenta de su carác-
bles, es la virtud; y la virtud es el ter moralmente obligatorio, el cual se
más alto grado que puede alcanzar deduce de la razón moralmente prác-
una razón práctica finita, porque tica. Esta razón, es la que produce un
esta, al menos como facultad ad- veto irrevocable: no debe haber nin-
quirida naturalmente, jamás puede guna guerra ni entre los individuos
ser perfecta; y, en caso semejante, ni entre los Estados. Por lo tanto, no
la convicción es muy peligrosa y se trata de ver si la paz perpetua es
la certidumbre jamás es apodícti- una cosa real o sin sentido, debemos
ca” (Kant, 2008, p.57). obrar como si fuera posible y buscar
los mecanismos que parezcan más ap-
En la primera parte de La fundamen- tos para alcanzarla. Además, veía la
tación de la metafísica de las costum- suprema garantía de paz en el respeto
bres (1785) expone Kant algunas de de los gobernantes a las máximas de
sus ideas sobre la Doctrina del Dere- los filósofos y en el acuerdo honesto
cho. Para Kant la legislación jurídica entre política y moral.
admite como motivo de la acción un
impulso distinto de la idea del deber. Como Montesquieu, distingue tres
Los deberes de la legislación judicial poderes: Legislativo, Ejecutivo y Ju-
son todos impuestos desde afuera, es dicial, y, como Rousseau, atribuye el
decir son externos. Muy distintos, por Poder Legislativo solo a la voluntad
lo tanto, a los de la legislación ética. colectiva del pueblo. Este poder debe
ser tal, que no pueda absolutamente
Distingue Kant entre diferentes tipos cometer injusticia contra ninguno.
de Derecho: el innato, que es indepen- Pero a pesar de la importancia que
diente de cualquier acto jurídico y el le da a la voluntad popular, niega la
adquirido que nace de un acto jurídi- legitimidad de la rebelión del pueblo
co. El único derecho humano innato contra el soberano legítimo y condena
es la libertad. El derecho adquirido la revolución inglesa y francesa que
es público, cuando define la legitimi- procesaron y ejecutaron a sus sobe-
dad y posesión de las cosas externas, ranos. Kant distingue la pena natural
y, privado, cuando considera la vida del castigo jurídico: En la pena natu-
social de los individuos en una comu- ral el vicio se castiga así mismo. El
nidad jurídicamente ordenada. castigo jurídico debe aplicarse al reo,

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no como un medio para alcanzar un lo insinuó en su artículo Por la paz


bien sino únicamente porque ha co- perpetua (1795) era una constitución
metido un delito. Esto debido a que republicana fundada, en primer lu-
el hombre nuca debe emplearse como gar, sobre el principio de libertad de
ejemplo para los demás, pues no es un los miembros de una sociedad, como
medio, siempre es un fin. Si se le apli- hombres; en segundo lugar, en el
ca un castigo, es porque debe conside- principio de independencia de todos,
rársele merecedor de él antes de que como súbditos; en tercer lugar, sobre
pueda pensarse en sacar del castigo la ley de igualdad como ciudadanos.
algún provecho o utilidad. En este escrito, abogó por una Fede-
ración de los pueblos que se ocuparía
Después de sus tres Críticas (Crítica de conseguir una pacífica existencia
de la razón pura, 1781; Crítica de entre las naciones. La creación de una
la razón práctica, 1788; Crítica del sociedad de esa naturaleza en el hori-
juicio, 1790), –a través de las cuales zonte utópico de Kant, implica que la
sintetizó tanto el trabajo de la tradi- razón práctica de los hombres impon-
ción racionalista cartesiana, como el ga a los Estados su salida de ese esta-
de la tradición empirista de Hume–, do natural, causante de muchas gue-
introdujo un cambio en su concepción rras, e imponga un nuevo sistema de
ética y va a sostener, en La religión derecho internacional que las impida.
dentro de los límites de la mera razón
(1793), que el amor a lo moral no pue- El rigorismo ético kantiano acabó con
de residir en el hombre mismo sino en el libertinaje que había encontrado
el amor a lo divino, ni puede basarse justificación en la filosofía del siglo
en el provecho, la utilidad y la felici- XVIII e inauguró una nueva época
dad. Este cambio ha sido blanco de la para la ética, a pesar de que seguía
crítica filosófica. moviéndose entre lo egológico y lo
teológico.
Pero lo importante, es el papel deci-
sivo que desempeña la razón y no el Hay quienes critican a Kant por no
sentimiento en la lucha interior del haber sido demasiado contundente al
hombre, entre lo que es moral y lo momento de defender, desde la pers-
que no lo es, porque la razón está por pectiva de la propia naturaleza huma-
encima del sentimiento y del entendi- na, los derechos fundamentales de los
miento ya que va mucho más allá del pueblos, pues siempre acudió a un ser
límite de lo que contienen los senti- superior para explicar su descenden-
dos y lo que ellos nos pueden propor- cia a diferencia de cómo lo habían
cionar. hecho Rousseau y los enciclopedis-
tas franceses. Aunque lo importante
El ideal político de Kant, tal como es en sí, la defensa que hizo Kant de

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sus ideas de justicia, paz y libertad, en axiológicas que se viven. Pero vale la
una época caracterizada por la falta de pena abandonar esta práctica y obrar
visión clara sobre las contradicciones como si fuera posible con la idea ra-
en que se debatiría el futuro del mun- cional de que no debe haber ninguna
do capitalista. guerra ni entre los individuos ni entre
los Estados. Es decir, con el firme con-
Esas ideas se siguen proyectando has- vencimiento de que la suprema garan-
ta nuestros días, a pesar de la presen- tía de paz en el mundo es el respeto de
cia de las más disímiles concepciones los individuos y de los gobernantes a
éticas en el mundo filosófico: la éti- la dignidad humana y sustento de las
ca utilitarista de Jeremías Bentham y relaciones honestas entre la política y
Stuart Mill, la positivista de Augusto la moral.
Comte, la científico-natural de Darwin
y Spencer, la de los continuadores de Cuánta falta le hace a la humanidad
Kant: Fitche, Schelling y Hegel, la que los gobernantes y políticos en el
ruptura epistemológica de Nietzsche, mundo entiendan con suficiente cla-
la ética materialista de Marx y la de ridad la necesidad de lograr un gran
las distintas corrientes filosóficas de acuerdo entre política y moral. De tal
los siglos XX y XXI. manera, que se comprenda, como di-
ría Kant, que el amor a lo moral no
La posibilidad de una perpetua aso- puede residir en el hombre mismo
ciación pacífica de todos los pueblos sino en el amor a lo divino, ni puede
del mundo, fue un gran ideal en la basarse en el provecho, la utilidad y la
filosofía kantiana. Como utopía el felicidad individual. Es el bien común
proyecto no era ver si se podía aplicar lo que debe primar en la cabeza de
alguna vez, sino más bien implemen- un político y de un gobernante. Aquí
tarla por tener un carácter moralmente juega un papel decisivo el ejercicio de
obligatorio inducido por la razón mo- la razón y no del sentimiento. Porque
ralmente práctica. en la lucha interior del hombre entre
lo que es moral y lo que no lo es, la
La necesidad de la paz en el mundo razón está por encima del sentimiento
nadie la discute, es un imperativo ca- y del entendimiento ya que va mucho
tegórico. Pero hay quienes nada ha- más allá del límite de lo que contienen
cen por ella por considerar que es un los sentidos y lo que ellos nos pueden
imposible debido a los innumerables proporcionar.
intereses contradictorios de los indi-
viduos y de las potencias en conflicto. La creación de una sociedad pacífica
Ese sentimiento pesimista es posible en el horizonte utópico kantiano, en
que se acentúe hoy con las dificulta- donde la razón práctica de los hom-
des financieras, políticas, culturales y bres exija a los Estados su salida de

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ese mundo natural causante de mu- defensa y protección de la dignidad


chas guerras e imponga un nuevo humana, pero como individuos no
sistema de derecho internacional que podemos delegar en el Estado nues-
las impida, sigue teniendo una vita- tras propias responsabilidades. Es un
lidad extraordinaria. Pero para que deber indelegable el respeto del indi-
este ideal político, tal como lo insinuó viduo a los demás. Pero este respeto
Kant, en su artículo La paz perpetua pasa primero por el respeto a nosotros
(1795), genere una pacífica existen- mismos. Como dice el filósofo espa-
cia entre las naciones se requiere del ñol Fernando Savater,
respeto irrestricto a los principios del
derecho internacional: la dignidad “el amor y respeto a sí mismo, es
humana, la libertad de los individuos condición indispensable para amar
como hombres, la independencia de y respetar a los otros. Quien no se
todos como súbditos, la igualdad de respeta y ama a sí mismo no po-
derechos como ciudadanos, y, por su- drá jamás respetar y amar a los de-
puesto, la no intervención de ningún más” (Savater, 1998).
Estado en los asuntos internos de otro,
bajo ningún pretexto. Referencias bibliográficas

Colombia, la patria que tanto ama- Cruz, D. (2001). Filosofía sin supues-
mos, es hoy vista en el mundo como tos. Colombia: Universidad de Cal-
el prototipo de lo que no debe ser un das.
país en materia de respeto a los de-
rechos humanos, por las violaciones Kant, E. (2008). Crítica de la razón
constantes y permanentes a que estos práctica. Madrid: Ediciones Mestas.
son sometidos. Si la situación conti-
núa agravándose, bajo el convenci- Ortega & Gasset, J. (2008). Prólogo
miento absoluto de que es el Estado el Crítica de la razón práctica. Madrid:
único obligado a protegerlos y a ga- Ediciones Mestas.
rantizarlos, nos iremos todos al pre-
cipicio. Es cierto que la razón política Savater, F. (1998). Ética como amor
del Estado, tiene como eje central la propio. Barcelona: Editorial Grijalbo.

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