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¡Estimados estudiantes, bienvenidos(as) a nuestra clase de hoy!


Espero se encuentren muy bien de salud y con las energías recargadas.

NOMBRE DE LA ACTIVIDAD: LA IGLESIA ENSEÑA LA MORAL CRISTIANA.

 Iniciamos con la oración poniéndonos en la presencia de Dios:

Señor te doy gracias por un día más de vida, porque nos das la salud y las fuerzas
para llevarlo adelante con bendición, con tu presencia en nuestras vidas. Gracias
porque con fe, podemos lograr las cosas porque tú eres el mismo que hizo cosas
hermosas que las hace aún y los hará por el amor que nos tienes y por tu fidelidad
que es maravillosa. Gracias Señor, por ser nuestro abrigo, por permitir vivir cerca de
ti, refugiados bajo tus alas de amor y buscando tu perfecta voluntad. AMÉN

 ¿Qué le pedimos a Jesús en la siguiente oración?


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INFORMACIÓN BASICA DE LA ACTIVIDAD


Competencias Capacidades Propósito Criterios
Construye su identidad como  Construye su identidad como  Completa el esquema sobre la
persona humana, amada por persona humana, amada por
En esta actividad el Iglesia enseña la moral
Dios, digna, libre y Dios, digna, libre y cristiana.
trascendente, comprendiendo la trascendente, estudiante conoce
 Propone acciones para difundir
doctrina de su propia religión, comprendiendo la doctrina cómo la Iglesia las enseñanzas de la Iglesia
abierto al diálogo con las que le de su propia religión, abierto enseña la moral sobre la moral cristiana en su
son cercanas. al diálogo con las que le son cristiana y a partir de familia, Institución educativa y
cercanas. ello propone cómo barrio.
Asume la experiencia del  Actúa coherentemente en difundirlos en su  Reflexiona sobre la enseñanza
encuentro comunitario con razón de su fe según los familia, institución de la Iglesia sobre la moral
Dios en su proyecto de vida en principios de su conciencia cristiana en su vida.
coherencia con su creencia educativa y en el hogar
moral en situaciones  Plantea las acciones a mejorar
religiosa. concretas de la vida. referente a la moral cristiana.

 Observo la imagen y respondo.

 Contesto las siguientes preguntas:

1. ¿Qué observas en la imagen?


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2. ¿A qué representan los personajes de la imagen?
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3. ¿Quién decidirá finalmente?
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 con atención la siguiente información:

I. VIDA MORAL Y MAGISTERIO DE LA IGLESIA.

La Iglesia, “columna y fundamento de la verdad” (1 Tm 3, 15), “recibió de los Apóstoles [...] este
solemne mandato de Cristo de anunciar la verdad que nos salva” (LG 17). “Compete siempre y en todo
lugar a la Iglesia proclamar los principios morales, incluso los referentes al orden social, así como dar
su juicio sobre cualesquiera asuntos humanos, en la medida en que lo exijan los derechos
fundamentales de la persona humana o la salvación de las almas” (CEC can. 747, §2).

El magisterio de los pastores de la Iglesia en materia moral se ejerce ordinariamente en la catequesis


y en la predicación, con la ayuda de las obras de los teólogos y de los autores espirituales. Así se ha
transmitido de generación en generación, bajo la dirección y vigilancia de los pastores, el “depósito”
de la moral cristiana, compuesto de un conjunto característico de normas, de mandamientos y de
virtudes que proceden de la fe en Cristo y están vivificados por la caridad. Esta catequesis ha tomado
tradicionalmente como base, junto al Credo y el Padre Nuestro, el Decálogo que enuncia los principios
de la vida moral en hechos concretos válidos para todos los hombres.

Desarrollamos nuestro tema tomando tres realidades concretas sobre las que la Iglesia nos comunica
el mensaje moral cristiano

II. LA VIDA MORAL DE LOS BAUTIZADOS.

La fidelidad de los bautizados es una condición primordial para el anuncio del Evangelio y para la misión
de la Iglesia en el mundo. Para manifestar ante los hombres su fuerza de verdad y de irradiación, el
mensaje de la salvación debe ser autentificado por el testimonio de vida de los cristianos. “El mismo
testimonio de la vida cristiana y las obras buenas realizadas con espíritu sobrenatural son eficaces para
atraer a los hombres a la fe y a Dios” (AA 6).
Los cristianos, por ser miembros del Cuerpo, cuya Cabeza es Cristo (Cf. Ef 1, 22), contribuyen a la
edificación de la Iglesia mediante la constancia de sus convicciones y de sus costumbres. La Iglesia
aumenta, crece y se desarrolla por la santidad de sus fieles (Cf. LG 39), “hasta que lleguemos al estado
de hombre perfecto, a la madurez de la plenitud en Cristo” (Ef 4, 13). Llevando una vida según Cristo,
los cristianos apresuran la venida del Reino de Dios, “Reino de justicia, de verdad y de paz”
(Solemnidad de Nuestro. Señor Jesucristo Rey del Universo, Prefacio: Misal Romano). Esto no
significa que abandonen sus tareas terrenas, sino que, fieles a su maestro, las cumpla con rectitud,
paciencia y amor.
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. III. PRINCIPIOS DE LA SEXUALIDAD HUMANA


a. El papel que la familia debe tener en la correcta educación de la sexualidad es irrenunciable, no solo
para evitar las situaciones dolorosas que por una mala concepción de la misma se producen, sino
sobre todo para llevar a plenitud a la persona humana en cada uno de los hijos. Precisamente porque
la familia es la célula primaria de la sociedad humana, todos debemos hacer un esfuerzo para que
llegue a todos una correcta formación en la sexualidad conforme al Plan originario de Dios.

b. La sexualidad humana es algo esencial en la concepción de la persona. El ser humano es sexuado y


la sexualidad es humana. Precisamente por ello, la sexualidad se orienta en el ser humano hacia dos
objetivos particularmente trascendentes: expresar la totalidad del amor entre un hombre y una mujer
y ofrecer las condiciones que en colaboración con el Creador den origen a una nueva vida humana.
En ambos casos, la sexualidad se orienta hacia el amor.

c. La sexualidad refleja siempre a la persona, por eso, no debe ser usada como un objeto sexual, “la
sexualidad es un elemento básico de la personalidad; un modo propio de ser, de manifestarse, de
comunicarse con los otros, de sentir, expresar y vivir el amor humano”. En todo acto o expresión sexual
está siempre en juego el valor de la persona. No se puede reducir la sexualidad a una simple función
biológica o a una mera fuente de placer.

d. La sexualidad es un bien, parte de la obra que Dios vio que era muy buena. Dios creó a la persona
humana a su imagen y semejanza, hombre y mujer los creó.

e. La sexualidad posee una carga de ambivalencia: se puede usar para la más alta expresión de amor o
para la degradación más dolorosa de la persona humana. La sexualidad humana se encuentra herida
y expuesta “a la fragilidad debida al pecado original y sufre, en muchos contextos socioculturales,
condicionamientos negativos y a veces desviados y traumáticos”. Sin embargo, la gracia de la
Redención del Señor, hace posible una vivencia recta de la sexualidad, no con actitud represiva, sino
como un don precioso y enriquecedor, como el del amor, con vistas al don de sí como ser humano.

f. Por todo lo dicho anteriormente, la sexualidad requiere ser integrada en la persona a través de una
oportuna educación, que va mucho más allá de la simple información funcional. Esta educación
comporta la formación de toda la persona: carácter, temperamento, hábitos, conocimientos, de modo
que se alcance la armonía entre la dimensión corpórea y espiritual de la persona.

IV. LA FAMILIA, “IGLESIA DOMESTICA” AL SERVICIO DEL REINO

La familia es el santuario de la vida. La vocación cristiana al matrimonio es un auténtico camino de


santificación donde la familia debe ser, ante todo, signo visible de la comunión que hay en Dios. La
familia cristiana, “pequeña Iglesia”, “Iglesia Doméstica”, está llamada a vivir del amor, a ser reflejo del
amor de Dios, está al servicio y a la realización del reino de Dios. Por eso el Señor Jesús quiso nacer y
crecer en el seno de la Sagrada Familia de José y María, para que tengamos como modelo la familia de
Nazaret en la que “los padres han de ser para sus hijos los primeros anunciadores de la fe con su
palabra y con su ejemplo y han de fomentar la vocación personal de cada uno y, con especial cuidado,
la vocación a la vida consagrada (LG 11). El hogar es así la primera escuela de vida cristiana (FC 16) y
“escuela del más rico humanismo” (GS 51).
Es en el hogar donde aprendemos el amor fraterno, el gozo del trabajo, la reconciliación, la paciencia
para la aceptación mutua y sobre todo el culto diario por medio de la oración, etc
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 Ahora desarrolla las actividades planteadas en la FICHA DE RECOJO DE EVIDENCIAS

 Realizamos la metacognición:
 ¿Por qué la Iglesia tiene que opinar en materia de moral?
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 ¿Encontré alguna dificultad en el desarrollo de actividad? ¿Cómo lo resolví?


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 ¿Qué principio de la moral me puede ayudar a vivir mejor mi vida?


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¡Bien! Ahora es momento que te autoevalúes.

Coloca una “x” de acuerdo con lo que consideres. Luego, escribe las acciones que tomarás para
mejorar tu aprendizaje.
Estoy en ¿Qué puedo hacer para
Lo logré
Criterios de evaluación proceso de mejorar mis aprendizajes?
lograrlo

 Completa el esquema sobre la Iglesia enseñan la moral


cristiana.
 Propone acciones para difundir las enseñanzas de la Iglesia
sobre la moral cristiana en su familia, Institución educativa y
barrio.
 Reflexiona sobre la enseñanza de la Iglesia sobre la moral
cristiana en su vida.
 Plantea las acciones a mejorar referente a la moral cristiana.

 Conociendo la enseñanza de la moral cristiana, ¿qué actitudes puedes mejorar?


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¡Felicito tu participación en la clase de hoy!

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