Está en la página 1de 1

Amado Padre celestial, hoy nos humillamos ante Ti, al igual que lo

expresamos en esta hermosa canción. Permítenos, Señor, estar


verdaderamente a tus pies, entregándote nuestras vidas, nuestras
preocupaciones y nuestras esperanzas. Que este momento de oración nos
una como hermanos y fortalezca nuestra fe. Abre nuestros corazones para
recibir la palabra de nuestro pastor, que nos guiará en el mensaje que tienes
preparado a través de tu siervo padre amado. En el nombre de Jesús, amén.

Querido Dios, en este momento, nos postramos ante Tu presencia con


corazones humildes y agradecidos. Así como la canción nos ha recordado a
postrarnos a Tus pies, te pedimos que nos guíes y fortalezcas en este
momento de unidad. Que nuestra comunidad sea un reflejo de Tu amor y
gracia. Concédenos la sabiduría y la inspiración a través de las palabras de
nuestro pastor, para que podamos seguir creciendo juntos en nuestra fe y en
nuestro compromiso contigo. En el nombre de Jesús, amén.

Amado Señor, en este momento especial, nos postramos ante Ti,


reconociendo Tu majestuosidad y amor incondicional. La canción que
acabamos de escuchar nos ha recordado la importancia de estar a Tus pies,
en completa adoración y sumisión.
Hoy, unidos como hermanos y hermanas en la fe, te pedimos que derrames
Tu Espíritu sobre nosotros. Fortalece nuestros lazos como comunidad, que
podamos ser un reflejo vivo de Tu amor en el mundo. Guíanos a cada uno de
nosotros en nuestro caminar contigo, capacitándonos para vivir de acuerdo a
Tu voluntad.
Te agradecemos por la palabra que pronto recibiremos de nuestro pastor.
Permítele ser un instrumento de Tu verdad y gracia, y que sus palabras nos
inspiren a seguirte más de cerca, a amarte más profundamente y a servirte
con todo nuestro ser.
Que este tiempo de comunión y reflexión fortalezca nuestra fe y nos acerque
aún más a Ti, Señor. En Tu nombre oramos, amén.

También podría gustarte