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Tema 1. Apartado 1.2.3.

“Apoyo al aseo personal”


Alumno: LAURY BORJA
María es una paciente de 68 años con Alzheimer que está ingresada en la residencia
geriátrica "Las cumbres". La semana pasada sufrió una caída en el comedor de la
residencia que le provocó una pequeña fractura de cadera. Está inmovilizada en una
cama y necesita ayuda para movilizarse dentro de ella y para el baño o aseo diario.

Indique el procedimiento de aseo personal que se debe realizar a María, precisando los
productos materiales y las ayudas técnicas que se emplearán, en función de su estado
de salud y sus necesidades.

María ha sufrido una caída con una pequeña fractura de cadera. El ejercicio no nos lo indica,
pero entendemos que la prescripción del servicio médico del centro sociosanitario consiste en
mantenerse encamada, al menos hasta que la fractura mejor y el servicio médico autorice que
pueda levantarse.

Al estar María encamada, todas las acciones dirigidas a conservar y mantener su higiene diaria
deberán realizarse en la cama para lo cual haremos uso de las diferentes técnicas de higiene
para pacientes encamados.

Dado que María sufre de Alzheimer debemos planificar adecuadamente el baño para realizarlo
en algún momento en que se encuentre tranquila y no tenga sobresaltos.

Aunque siempre es importante informar a los residentes de todas las acciones que se van a
realizar en el caso de María deberemos tener una mayor amabilidad y respeto, e incluso un
poco de paciencia para transmitirla confianza y serenidad y que para ella el momento del baño
resulte algo placentero y cómodo. Por ello explicaremos a María el procedimiento con
paciencia y tranquilidad, explicando bien aquellos pasos que puedan generar mayor
desconfianza o ansiedad por su parte. Llegado el caso, puede ser interesante probar la
posibilidad de poner algún tipo de música que a María le resulte relajante.

En primer lugar prepararemos previamente todo el material necesario para realizar el baño. En
concreto se necesitará el siguiente material: guantes, dos palanganas (una con agua limpia y
otra con agua jabonosa), dos esponjas (una para el cuerpo y otra para la región genital), jabón
neutro, champú para el pelo, empapador, gasas estériles, cepillo o peine, crema hidratante,
camisón y lencería para la cama.

Una vez que nos hayamos asegurado de que tenemos todo el material preparados
procederemos a hablar con María para que explicarla que vamos a hacer las labores de baño
en la cama. La ofreceremos también la posibilidad de poner la cuña.

Colocaremos todo el material que habíamos preparado en el primer paso bien ordenado y a
nuestro alcance.

Llenaremos las dos palanganas con agua templada (aproximadamente 38 C) y en una de ellas
echaremos jabón líquido neutro. Durante el baño procederemos a renovar el agua de las
palanganas cuantas veces sea necesario.
Realizamos higiene de nuestras manos y procedemos a colocar guantes.

A continuación colocaremos a María en posición decúbito supino. Si es posible retiraremos la


almohada y procedemos a desvestir a María. Para preservar la intimidad de María cubriremos
su cuerpo con una sábana o toalla limpia.

Tras estos pasos previos podemos proceder al propio baño en si mismo. Comenzaremos por la
cara siguiendo el siguiente proceso: enjabonado, aclarado, secado y aplicación de crema
hidratante. En el caso de los ojos procederemos a limpiar cada uno de ellos por separado con
una gasa húmeda o usando suero salino. Siempre debemos hacerlo desde el lagrimal hacia
fuera para evitar infecciones en el conducto lacrimal.

Para la higiene de oídos usaremos una gasa para cada uno de ellos.

Tras la cara pasaremos a limpiar cuello, hombros, axilas y manos. En el caso de los brazos
comenzaremos con el brazo más próximo. Para ello colocamos la toalla pequeña debajo del
brazo. Sostenemos el brazo por encima de la muñeca y a continuación procedemos a la
limpieza completa del brazo comenzando por el hombro, axila y brazo. Siempre se sigue el
mismo proceso: enjabonado, aclarado, secado y aplicación de crema hidratante.

Tras la limpieza del brazo, colocamos la palangana de agua jabonosa sobre la cama y
procedemos a la higiene de la mano, que es una parte muy importante. Sumergimos con
cuidado la mano en la palangana y procedemos a enjabonar muy bien. Es necesario prestar
especial atención a la correcta higiene y lavado de las uñas y las zonas interdigitales.
Procedemos a aclarar, secamos y aplicamos crema hidratante. Durante el secado hay que
asegurarse de que los espacios interdigitales quedan bien secos.

Procedemos a hacer lo mismo con el otro brazo.

Durante el proceso conviene ir informando a María de lo que estamos haciendo porque al


tener Alzheimer necesita un continuo esfuerzo por nuestra parte para que esté tranquila y
relajada.

Tras la higiene de cara y brazos, procederemos con la limpieza del pecho, siguiendo la
secuencia habitual: enjabonado, aclarado, secado y aplicación de crema hidratante.
Prestaremos especial atención a la limpieza por debajo de los pechos de María y a secar
cuidadosamente los pliegues debajo del pecho.

A continuación tapamos el pecho con una toalla o sábana y procedemos a la limpieza del
abdomen, siempre con la secuencia habitual de enjabonado, aclarado, secado y aplicación de
crema hidratante.

Tras la finalización del abdomen procederemos a la limpieza de la pierna más próxima.


Colocamos una toalla por debajo de la pierna y procedemos a la secuencia habitual. Hacemos
lo mismo con la otra pierna.

Procedemos a colocar a María en decúbito lateral colocando la espalda mirando hacia el lado
en el que nos encontramos. Nos aseguramos de que la posición decúbito lateral es sólida y
firme y procedemos a colocar una toalla de protección sobre la cama. Aquí iniciaremos el
lavado e higiene de espalda y nalgas. Realizamos la secuencia habitual: enjabonado, aclarado,
secado y aplicación de crema hidratante.
Tras la limpieza de espalda y nalgas, retiramos la toalla de la cama y procedemos a colocar a
María en posición decúbito supino para proceder a la limpieza de genitales.

Para la limpieza de genitales, procederemos a realizar un cambio de agua y además


necesitaremos los siguientes materiales, que previamente tendríamos preparados: palangana
con agua jabonosa a temperatura correcta, cuña, jarra, empapador, solución antiséptica,
guantes y gases estériles, esponja y toalla limpia.

Procederemos a colocar a María en posición ginecológica y colocaremos un empapador por


debajo. Además colocaremos la cuña.

El lavado comienza desde los labios mayores, dejando al descubierto los labios menores.
Procederemos al lavado con agua jabonosa y solución antiséptica. Tras esto se procede al
secado con gasas estériles siempre de zona limpia a zona sucia, es decir desde la uretra y
finalizando en la región perineal.

Tras esto, procedemos a vestir a colocar a María un pañal y un camisón limpio y procedemos a
realizar el cambio de lenceria de cama. Finalizamos el procedimiento realizando el peinado de
María.

Tras esto retiramos toda la ropa y lencería sucia en los sacos correspondientes, que son
trasladados al carro de ropa sucia. Durante la retirada de ropa de cama sucia debemos prestar
especial atención a que esta ropa no toque nuestro uniforme.

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