Está en la página 1de 12

IGLESIA LA ASUNCIÓN, IZALCO; SIRVIÓ COMO FOSA COMÚN PARA

SEPULTAR A LAS VÍCTIMAS DE 1932. (11)

• El levantamiento campesino de 1932. (Un poco de historia)


• Fue una combinación entre protesta e insurrección en los que algunos califican como
etnocidio.

“Tras la llegada de los españoles a territorio salvadoreño. Los indígenas fueron


victimas de todo tipo de abuso y tropello. Luego de la independencia de el
salvador los gobiernos fueron propiciando la creación de un sistema desigual,
el cual dejaba alejadas del progreso a las poblaciones nativas de los
territorios del Señorío de Cuzcatlán. El Salvador, sumido en una profunda
crisis económica por la caída de los precios del café y la crisis de 1929, se
enfrentó a una oleada de protestas y rebeliones contra el sistema desigual
de tenencia de tierras, lo cual se agudizo con las reformas presidenciales
que despojaban a los campesinos de sus tierras ejidales para darlas a los
grandes terratenientes. Los campesinos e indígenas se levantaron contra el
gobierno y atacaron instalaciones militares en el occidente del país,
coincidiendo con una rebelión organizada por el Partido Comunista
Salvadoreño (PCS) tras unas elecciones fraudulentas.” 1

El resultado fue una respuesta militar del gobierno de Maximiliano Hernández Martínez, quien
ordenó la ejecución de todo aquel que se alzase contra el régimen. Algunos autores estiman
una cifra cercana a los 25, 000 fallecidos. Entre indígenas, campesinos, comunistas e inocentes
Hasta la fecha, se sigue conmemorando los hechos como uno de los episodios más
emblemáticos y determinantes en la historia de
El Salvador, por sus secuelas políticas,
económicas y ante todo, culturales.
El malestar social en el salvador había crecido
desde la década de 1920 a causa de los
abusos por parte de la clase política y la amplia
desigualdad entre los terratenientes y
campesinos. Dicho malestar se vio agudizado
por la tremenda baja de los precios del café y
el creciente desempleo. También debe tenerse
en cuenta que durante las dos últimas décadas
del siglo XIX y las primeras tres décadas
del siglo XX, la economía salvadoreña se sostuvo gracias al cultivo del café. de tal forma que
dicha época se conoce como la «república cafetalera». En tal sentido, la caída de los precios
del café significó el despido masivo de varios campesinos y el cierre de varias haciendas, lo
cual llevaría a una crisis económica muy profunda.

“El sector cafetalero nacional había surgido por la acumulación de riquezas por
parte de un pequeño grupo de hacendados y comerciantes, los cuales,
aprovechando el negocio cafetalero, habían acaparado una gran cantidad de
terrenos, dando empleo a campesinos, buena parte de ellos indígenas. Sin
embargo, debe tenerse en cuenta que el empleo brindado por los hacendados
fue deformándose hasta convertirse en explotación, ya que la paga era muy
poca y el trato hacia los campesinos era despótico.” 2
Para finales de 1930, la paga en las haciendas consistía en dos tortillas y dos cucharadas
de frijoles salcochados al inicio y al final de la jornada. Como agravante, las fichas (monedas
locales) con que se pagaba en las haciendas, solo podían ser cambiadas por productos en la
tienda que pertenecía al mismo dueño que el
cafetal, por lo cual existían monopolios locales
que encarecían el alimento. Se calcula que la
alimentación en la época para un jornalero no
sobrepasaba el costo de $0.01 al día, por lo cual
los beneficios de los hacendados eran bastante
considerables. De hecho, para 1924, la
producción total de café variaba entre 32 y 53
millones de kilogramos. El precio por cada
quintal (46 kilogramos), oscilaba entre
42.55 colones.
En el occidente de El Salvador la crisis era más aguda puesto que las políticas de los
presidentes Pío Romero Bosque y Arturo Araujo habían llevado al casi total despojo de las
tierras a los campesinos locales, generando gran malestar, lo cual se unía a las acciones
militares que de manera tácita amedrentaban a los campesinos para que se abstuviesen de
protestar. Dicha zona estaba altamente poblada por indígenas de origen pipil. Los indígenas,
sistemáticamente separados del escaso progreso económico, intentaron obtener ayuda de las
autoridades reconocidas por su centenaria tradición jerárquica. Pese a que las leyes no
concedían ninguna prebenda o reconocimiento oficial a los caciques , los indígenas respetaban
y obedecían a su autoridad. Por otro lado, la clase política había buscado el acercamiento a los
caciques para obtener el apoyo de sus gobernados en elecciones y consultas populares, por lo
que tenían alguna posibilidad de ser escuchados por las autoridades gubernamentales.
Para disminuir la crisis económica los indígenas se habían organizado en asociaciones de
cooperación, mediante las cuales se brindaba empleo a los indígenas que no lo poseían. A
cambio de que ellos colaborasen en las festividades católicas, los encargados de dirigir estas
asociaciones eran los caciques quienes representaban a los desempleados. Ej: Feliciano Ama,
era unos de los caciques mas activos y estimados por la población indígena. había hecho
gestiones de ayuda económica con el presidente Romero a cambio de la colaboración en su
candidatura. Por otro lado, la crisis se agudizaba por el conflicto permanente entre las
poblaciones indígenas y los habitantes de la zona que no pertenecían a su etnia.
Evidentemente, las poblaciones de «no indígenas» estaban mejor relacionadas con las urbes
gubernamentales, por lo cual, cuando ocurrían revueltas o combates, el ejército arrestaba a los
líderes indígenas y se les condenaba a muerte.
Otro elemento que antecedió a la rebelión campesina fue la
inestabilidad política del país. Durante las elecciones de 1931,
fue elegido Arturo Araujo, quien redujo los salarios en más
de un 54 %.Tras diversas acciones de rebelión militar, el
presidente Arturo Araujo fue derrocado y sustituido por
un Directorio cívico; este golpe de Estado consistió en una
sangrienta revuelta debido a que varios campesinos estaban
inconformes con la reforma agraria hecha por el presidente
Araujo ya que no beneficiaba a la mayoría de campesinos
esta rebelión fue conocida como la Revuelta de Izalco que
dejó el saldo de 24 000 víctimas en su mayoría campesinos, militares golpistas e indígenas luego se
dio la llegada al poder del General Maximiliano Hernández Martínez en diciembre de 1931, la cual
marcó el inicio de lo que se conoce como «dictadura militar»

Dictadura de Maximiliano Hernández Martínez y su matanza;

El General Martínez El régimen de Martínez


constituyó un importante cobertizo de agua en la
política de El Salvador, marcando el control
inicial de la nación por los militares y el origen de
la alianza entre los militares y los terratenientes
que dominaban la política en esa nación por
muchas décadas. El levantamiento campesino
fracasado que le permitió consolidar el poder
también polarizó su nación entre las clases
superiores e inferiores. Estos legados iban a
seguir afectando a la política de El Salvador
durante décadas después de que Martínez
abandonara el poder. Lectura recomendada:
https://d.docs.live.net/fe184906eec
En diciembre de 1931, Maximiliano Hernández Martínez lanzó 3c32e/Documentos/Iglesia%20la%
un golpe de estado que derrocó al presidente Arturo Araujo. Al 20Asunción.docx
obtener el poder, Hernández Martínez estableció una dictadura
militar. Las tensiones entre los indígenas, los campesinos, los terratenientes y la guardia civil
aumentaron justo cuando el partido comunista se volvía más activo. Cansados de la inestabilidad y
corrupción política y la desigualdad económica y social, Agustín Farabundo Martí y Feliciano Ama
de Izalco encabezaron una insurrección campesina.

El 22 de enero de 1932, miles de indígenas armados con


machetes se rebelaron contra los terratenientes y la guardia civil
en el oeste del país. El epicentro del levantamiento fue Izalco.
Partidarios de la ideología comunista, en el sentido que los
campesinos luchaban por la igualdad y por un fin a su
explotación, la sublevación indígena fue vista como una
amenaza que tenía que ser neutralizada. Ante el levantamiento,
el presidente Maximiliano Hernández Martínez ordenó la matanza de todo aquel que pareciera
indígena. Ante esta amenaza, los indígenas ocultaron su vestimenta, y se alejaron de su idioma y
costumbres por temor a ser ejecutados. Más de 30 mil indígenas/campesinos fueron fusilados en lo
que llegaría a ser “la matanza” y en algunos casos hasta pueblos enteros desaparecieron. El grupo
indígena más afectado fue la población pipil, el grupo indígena más grande del país. Poblaciones
indígenas también sufrieron de modo desproporcional durante la guerra civil salvadoreña entre 1979-
1992, y hoy día muy poca gente de estas comunidades habla un idioma o llevan traje indígena.

En 1934, el gobierno estadounidense reconoció el régimen de Martínez a pesar de que no había


obtenido el poder legítimamente. Bajo Martínez, el poder del
ejército aumentó y, como consecuencia cuando Martínez perdió
la elección en 1944, el ejército tomó el poder del país hasta 1979.
El ejército protegía los intereses de la oligarquía y, a cambio, los
terratenientes ayudaban al ejército a mantener el control del país.
A partir de la década de los 60, Estados Unidos también apoyó a
los gobiernos militares salvadoreños. Desde el punto de vista
estadounidense, proteger a los gobiernos anticomunistas era más Cadáveres de la matanza del
ejército salvadoreño en 1932.
importante que defender los derechos del pueblo. Incluso, en
muchos casos, la clase élite sacó ventaja de no diferenciar entre
comunistas e indígenas. Ambos eran una amenaza a su poder. Derrotar las facciones comunistas
fue usada como una excusa para formar una alianza entre los terratenientes, el ejército y los
gobiernos dictatoriales. Sin embargo,
el eje del conflicto entre V Vlos grupos
guerrilleros y el ejército no era el
comunismo, sino una larga historia de
abusos y desigualdad entre los
indígenas/campesinos y los
terratenientes/gobiernos.
En Izalco se produjo una matanza que
Los alzados lograron apoderarse de las diezmó a la población indígena local,
ciudades de Juayúa, Nahuizalco, Izalco, motivo por el cual es considerado un
Sonzacate, Tacuba y Salcoatitán. En las etnocidio. En El Llanito es en donde cada
zonas controladas por los rebeldes, la año se hacen los actos de
mayoría de los establecimientos Los restos de varias victimas fueron conmemoración de la
comerciales fueron saqueados. masacre. Se ha identificado la
enterrados en una fosa común
zona con esta placa y una
situada en las ruinas de la iglesia de gruta.
la Asunción, lugar que también es conocido como “El Llanito”.

JUSTICIA RESTAURATIVA

Durante la guerra civil de Guatemala mujeres indígenas q’eqchi fueron sometidas a esclavitud sexual
y doméstica en el destacamento militar Sepur Zarco. La tropa militar las obligaba a servir, cocinar,
lavar y limpiar sin un salario, además de ser sujetas a abusos sexuales continuos. Desde 2011,
quince de ellas iniciaron una batalla legal en el Tribunal Supremo de Guatemala, hasta lograr la
justicia restaurativa en febrero de 2016.

La resolución condenó a dos exmilitares y resolvió 18 medidas de reparación para las mujeres
sobrevivientes y su comunidad. Este hito se convirtió en la primera experiencia de justicia
restaurativa en la que un tribunal nacional enjuició el delito de violencia sexual y esclavitud durante
un conflicto armado.

Las abuelas de Sepur Zarco, como son conocidas, son un referente de lucha por la justicia para las
diferentes personas, comunidades y organizaciones que luchan en Centroamérica para lograr justicia
restaurativa.
Según Kenny Sibrian, comunicador institucional del Instituto de Derechos Humanos de la UCA
(IDHUCA), la justicia restaurativa es aquel tipo de justicia que busca reparar a las víctimas y se centra
en cuatro enfoques: verdad, se busca que se sepa lo que pasó, quién o quiénes cometieron el hecho,
cuándo, cómo, dónde y porqué ocurrió; justicia, obtener justicia para las víctimas y enjuiciar a la o
las personas que cometieron el hecho delictivo; reparación, busca medidas de reparación
psicosocial, económica, de educación, de salud, de acceso a la atención psicológica, etc. y garantías
de no repetición, es decir, qué debe hacer o cambiar el Estado para que este hecho delictivo no
vuelva a ocurrir.

Para las abuelas de Sepur Zarco estas medidas de reparación incluyen educación para las niñas y
niños de su comunidad, acceso a la tierra, una clínica sanitaria, entre otras. Pero, también implica
creerles a las víctimas, como explica Judith Erazo del Equipo de Estudios Comunitarios y Acción
Psicosocial (ECAP), ya que durante el proceso judicial, uno de los obstáculos que enfrentaron fueron
las campañas de desprestigio en las que decían que ellas mentían, que sus declaraciones eran
pagadas. “Pero en la resolución a ellas se les cree. Se validan sus testimonios, su sufrimiento, su
verdad. Eso también fue reparador para ellas”, manifiesta Erazo.

Como en el caso de Sepur Zarco, El Salvador carga con la impunidad desde la guerra civil, incluso
de antes. Han transcurrido 30 años desde la firma de los Acuerdos de Paz, en los que casos como
el de la Masacre del Mozote no han logrado justicia por parte del Estado. Diferentes organismos se
han pronunciado a favor de dar verdad, justicia y reparación a las personas y familiares de la masacre
ocurrida en diciembre de 1981, en la que batallones del Ejército de El Salvador realizaron
ejecuciones sistemáticas contra poblaciones del norte del departamento de Morazán: El Mozote, La
Joya, Los Toriles, Jocote Amarillo y Cerro Pando. La Corte Interamericana de Derechos Humanos
(CIDH) consideró responsable al Estado salvadoreño por las violaciones de derechos humanos
contra la población civil, en su mayoría niñas y niños. En respuesta a la negativa del Estado
salvadoreño de impartir justicia sobre las graves violaciones de derechos humanos ocurridas en el
contexto del conflicto armado, se crearon mecanismos (en su mayoría desde la sociedad civil) para
acompañar a las poblaciones afectadas por estos crímenes. Matilde comenta que uno de ellos son
los tribunales simbólicos, que surgen en 2009, diseñados por la Coordinadora Nacional de Comité
de Víctimas, con el Instituto de Derechos Humanos de la UCA.

Diez años después, se han realizado 11 ediciones


de los tribunales simbólicos como una medida de
reparación, donde se pone la atención en la
víctima. Ellos y ellas narran lo que les sucedió:
cómo se vivió, cómo lo vivió su familia, cómo lo
vivió la comunidad. En este sentido, no se pone en
duda el testimonio de la víctima, mientras que en
el sistema de justicia actual las víctimas son
cuestionadas para saber si no están mintiendo. “En
el tribunal de justicia restaurativa no se desacredita
a las personas”, explica Sibrian.

Este proceso está conformado por jueces


internacionales: expertos en derechos humanos y en derecho internacional. Las víctimas también
son escuchadas por la comunidad y demás asistentes. Kenny agrega que han tenido casos donde
la gente ha dicho: “ahora puedo morir en paz porque ya conté mi versión”. Generalmente, las víctimas
de estos hechos son personas de la tercera edad y no han tenido la oportunidad de ser escuchadas.

• Mujeres y El Mozote
Según la profesional de derecho, en el caso de las mujeres en El Mozote se identifica un patrón que
también se utilizó en otros países de la región: identificar al enemigo interno, y la forma cómo tratarlo:
aterrorizar a la población. En esas acciones, se causaba terror a través de la utilización de los
cuerpos de las mujeres, como instrumento para enviar mensajes a los oponentes o enemigos. De
ahí parte la violencia sexual que se cometió contra ellas,
dejando también explícita la agresión que habían sufrido, como
sucedió con las mujeres en Sepur Zarco.

“Ahora, las demandas de las mujeres que piden justicia


comprenden múltiples aspectos, uno de los más retadores es
entender cómo darles justicia partiendo desde su proyecto de
vida, independientemente de su edad y los contextos
particulares de cada una de las mujeres, ya que muchas de
Lectura recomendada: 1 ellas son adultas mayores y los mecanismos de reparación
https://revistalabrujula.com/2022/01/31/ju
sticia-restaurativa-un-anhelo-en-el- deben de responder a la realidad de las víctimas”,
salvador/#:~:text=La%20justicia%20resta
urativa%20coloca%20en,no%20se%20fa “Las víctimas tenemos la esperanza que nuestra voz se
vorezca%20la%20impunidad. escuche y que el rostro que ustedes ven hoy, en este lugar
sagrado, no lo olviden y puedan con nosotras trabajar por la
justicia y porque nunca más se repita el horror y la impunidad que nosotras hemos vivido”.

María Dorila Márquez, presidenta de la Asociación de Derechos Humanos de El Mozote,


(ISDEMU. La Memoria de las Luciérnagas, El Salvador 2013).

• La justicia se ve más lejos

El caso de El Mozote tiene grandes similitudes con el de Sepur Zarco. No obstante, en El Salvador
muy poco se ha avanzado. Y en el contexto político actual la justicia se ve más lejos.

Aunque la resolución en el caso de las abuelas de Sepur Zarco ha sido un hito. Judith Erazo de
ECAP dice que el reto siempre es el cumplimiento, aún hay medidas que no se han implementado y
parece que el contexto político al igual que en El Salvador es desfavorable.

• Deudas de posguerra en El Salvador: el caso de Manuela

El derecho a la verdad es uno de los enfoques de la justicia restaurativa, que las víctimas tengan la
oportunidad de contar su versión de los hechos y se les escuche. Pero en El Salvador muchas de
las personas vulneradas no fueron escuchadas y al contrario se les condenó. Cómo sucedió con
Manuela.
A nivel mundial El Salvador es uno de los pocos países que penaliza de manera absoluta el aborto.
Manuela fue víctima de esta ley que repercute en los cuerpos y vidas de las mujeres, pero sobre
todo de las empobrecidas. Ella nunca tuvo acceso a educación y salud de calidad. El 26 de febrero
de 2008, sufrió una emergencia obstétrica en su casa. Sintió un fuerte dolor abdominal y se desmayó
en la letrina. Su padre la llevó a un hospital en busca de ayuda. Pero en el hospital, en lugar de
brindarle atención médica, la denunciaron por “aborto”. Fue condenada a 30 años de prisión acusada
de homicidio agravado. La policía obligó a su padre que no sabía leer ni escribir a firmar un
documento donde acusaba a Manuela, situación que a la actualidad lo llena de tristeza.

La última vez que Manuela vio a sus dos hijos y a su madre fue en la audiencia de condena. En
menos de dos años la salud de Manuela se deterioró. De manera tardía le diagnosticaron cáncer
linfático. “Mamá, yo de aquí ya no voy a salir. Mejor cuide a mis hijos, por favor” fueron las últimas
palabras que la madre de Manuela recuerda de su hija. Manuela murió en 2010, esposada en la
camilla de un hospital, sin la a compañía de un familiar. Las organizaciones que acompañaron el
caso fueron enfáticas en denunciar que el Estado violó todos los derechos humanos de Manuela.
Sara García, de la Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto, manifestó que la
violación a los derechos humanos de Manuela incluyó el agravio a su familia. La ausencia de una
madre para sus hijos y la sobrecarga que tuvieron que asumir los padres de Manuela en el cuidado
y la manutención, sin ningún apoyo del Estado. Como consecuencia, durante el proceso jurídico la
familia de Manuela tuvo que vender una parcela de tierra que era parte de sus ingresos y alimentos,
lo que significó menos recursos y deudas para la familia, quienes viven en una comunidad de
recursos escasos.

• Fallo histórico: justicia para Manuela

El 29 de noviembre de 2021 la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó al Estado


salvadoreño por criminalizar a Manuela tras sufrir una emergencia obstétrica, este fallo llega después
de 10 años de proceso en la Corte. Las palabras de su hijo mayor se repitieron: “Estoy feliz porque
se ha limpiado el nombre de mi madre”.

Esta resolución llena de esperanza a las organizaciones y personas que trabajan porque en El
Salvador no se siga condenando a las mujeres que enfrentan emergencias de salud durante su
embarazo. Pues entre las medidas está desarrollar un protocolo de actuación para la atención de
mujeres que requieran asistencia médica de urgencia por emergencias obstétricas. Y, algo
fundamental: adecuar su regulación relativa a la prisión preventiva.
1921 →GENERAL RAFAEL ANTONIO
GUTIÉRREZ,
• Biografía

El general Rafael Antonio Gutiérrez nació el 24 de octubre de


1845 en Ilobasco, departamento de cabañas, el salvador.
Falleció el 9 de enero de 1921, Barrio San Jacinto, san
salvador ( El Salvador).

Sus padres fueron un español y su madre doña Marcela


Gutiérrez. Fue casado con la señorita Carlota Mejía, sus
hijos fueron: Rafael Antonio, Carlos, Carlota, Tulio,
Marcela, Rosa, Bernardo y María. Marcela fue casada con
un hijo del General Fernando Figueroa, Héctor Figueroa,
y sus nietos de este matrimonio fueron Fernando Figueroa
Gutiérrez, Rosa Elizabeth Figueroa Gutiérrez, Yolanda Figueroa Gutiérrez y Nohemí Figueroa
Gutiérrez.
Entre los célebres Cuarenta y cuatro (que derrocaron al presidente Carlos Ezeta) se destacó
mucho, el 10 de junio de 1894, tras una sangrienta revolución asumió el poder presidencial
como un gobernante provisorio hasta el 1 de marzo de 1895 fecha desde la cual gobernó como
presidente de la república hasta el 14 de noviembre de 1898.
Promotor de la unidad centroamericana, firma con Honduras y Nicaragua el Pacto de Amapala,
conformando la República Mayor de Centroamérica, más tarde los Estados Unidos de
Centroamérica. Tomás Regalado disolvería este Pacto, terminando con el esfuerzo unionista.
• Presidencia
Revolución de los 44, gobierno en Santa Ana

Tras haberse desconocido al gobierno de Ezeta en Santa Ana durante la revolución de los 44 asumió
el poder ejecutivo en el 1 de mayo de 1894, estando aún asentado en el poder el general Ezeta
en San Salvador. Desde esta fecha tuvo como ministro general al general Estanislao Pérez y como
secretario general interino al doctor Cornelio Lemus.

Tras haberse desconocido al gobierno de Ezeta en Santa Ana durante la revolución de los 44 asumió
el poder ejecutivo en el 1 de mayo de 1894, estando aún asentado en el poder el general Ezeta en
San Salvador. Desde esta fecha tuvo como ministro
general al general Estanislao Pérez y como secretario
general interino al doctor Cornelio Lemus.

Uno de sus primeros actos como presidente fue el


nombramiento de Pedro José Escalón como
Administrador de rentas de Santa Ana en el mismo 1 de
mayo. Al siguiente día nombró Auditor general de guerra
al doctor Miguel Chacón, el doctor Prudencio Alfaro pasó
a ser nombrado su secretario privado y el coronel Mariano
Morán fue nombrado Gobernador y Comandante general
del departamento de Santa Ana. Para sostener las finanzas del Ejército Libertador, comisionó al
general Simón Vides, Hilario Interiano y Santiago Meléndez para que por vía de contrata o empréstito
voluntario reúnan la cantidad que se estime suficiente para continuar la guerra.
En el 12 de mayo nombró Oficial Mayor del Ministerio General al doctor Francisco Catarino Alarcón
y como escribientes a Rafael Paz, Enrique Chacón y Francisco B. Salazar. El siguiente día facultó al
general Aquilino Duarte y Máximo Cerna para que en Metapán y demás poblaciones donde llegue la
comisión contraten empréstitos con base al decreto del 2 de mayo. En el 19 de mayo nombró
comandante local de Opico al teniente coronel Alejandro Melhado. En el 24 de mayo nombró.
comandante de las poblaciones Chalatecas de Nueva Concepción y Agua Caliente al capitán Narciso
Portillo. En el 28 de mayo nombró comandante de la población fronteriza de Citalá a don Rafael
Cartagena y como segundo jefe del distrito de Metapán al capitán Mariano Guerra. En el 26 de mayo
concedió un subsidio de 500 pesos a la Cruz Roja para aliviar el aumento de gastos en el hospital y
en el 28 concedió otro subsidio de 300 pesos al Hospital General de Santa Ana. Ascendió al grado
de General de División al General de Brigada Joaquín Pérez en el 1 de junio.

• Presidencia provisional
En el 16 de junio de 1894, el gobierno por medio del Secretario de Relaciones Exteriores, Instrucción
Pública y Justicia Jacinto Castellanos envió un mensaje al cuerpo diplomático cerca del gobierno
salvadoreño explicando la situación política en El Salvador, el siguiente día mandó circulares a los
gobiernos de Centroamérica y a los gobiernos extranjeros explicando la situación del país que leía
como sigue.

en el 25 de agosto de 1894, el presidente decretó el establecimiento del Hospital de Dementes y


organizó una junta directiva interina compuesta del gobernador de San Salvador y alcalde municipal
de San Salvador, el fiscal de hacienda como representante del establecimiento y un individuo de
cada una de las juntas directivas del Hospital General, el Hospicio y Asilo de Indigentes de la ciudad.
El manicomio inició su construcción el mismo año. Su esposa donó un par de aretes valorados en
10,000 colones para la elaboración de los planos para la construcción, se comprarían 60 manzanas
de terreno donde hoy se encuentra el Instituto Nacional Francisco Menéndez. El doctor Genaro
Muñoz fue el encargado de dicho hospital. En el 30 de junio de 1897 se formó el reglamento
provisional para el régimen interior del manicomio, aprobado por el gobierno en el 21 de julio.

• Presidencia constitucional
Deseando proteger a las empresas periodísticas, su gobierno eximió a estas del pago de las
conexiones telefónicas que pidieran para asuntos relativos a sus periódicos tanto para el interior
como el exterior de la capital por medio de un acuerdo ejecutivo del 7 de junio de 1897.

Poseía como característica una quemadura como recuerdo en el cuero cabelludo, al recibir un
disparo que le dejó su marca al lado derecho.

Se caracterizó por su escrupulosa honradez en el manejo de la Hacienda Pública, creó las Escuelas
Normales para hombres y mujeres, y fue un hombre querido.

Traicionado por su mejor amigo, el Gral. Tomas Regalado responsable del golpe de Estado que
derrocó su gobierno.

El General Gutiérrez murió a los 76 años de edad, el 9 de enero de 1921,


a las 10:00 de la noche en el Barrio San Jacinto.
1929 → AYER FUE DESCUBIERTO EL COMPLOT PARA ASESINAR AL
PRESIDENTE PÍO ROMERO BOSQUE
• Biografía
Pio Romero Bosque nació el 13 de marzo de 1861 en Suchitoto, departamento de Cuscatlán. Murió
el 10 de diciembre de 1935 en nicaragua, a los 74 años de edad.

• Trayectoria Política
En 1892 fue electo Diputado a la Honorable Asamblea Nacional; luego la Corte Suprema de Justicia,
le nombra Juez de 1era Instancia.

Fungió como suplente del departamento de San Salvador en 1889 y pocos meses después Juez en
Propiedad del Distrito de Zacatecoluca cargo que desempeñó durante dos años. Fue nombrado
magistrado de la Corte Suprema de Justicia, de la que
llegó a ser presidente durante el gobierno de Quiñones
Molina (1923-1927), desempeñando los cargos de
ministro de la Guerra y vicepresidente de la República.

Pio Romero Bosque marcó el final de la Dinastía


Meléndez-Quiñones y fue elegido como presidente de la
República y tomó posesión del cargo el 1 de
marzo de 1927, en medio de un clima de represión
política, su gobierno se caracterizó por la honestidad en
la gestión administrativa y el decidido impulso al progreso
de la nación, fue un conservador que anuncio importantes leyes laborales a favor de los obreros, una
de las cuales fue la legalización de los sindicatos, permitió también la libertad de prensa.

Durante su administración permitió la organización de sindicatos rurales e industriales. Como El


Salvador dependía mucho de la economía estadounidense, esta crisis repercutió en el país e implicó
una dramática caída de los precios del café.

En 1930 fundó el Partido Comunista Salvadoreño. Romero Bosque reprimió duramente las protestas,
pero al final de su mandato, organizó unas elecciones consideradas libres y entregó el poder al
candidato ganador, Arturo Araujo el 1 de marzo de 1931.

En la historiografía política sobre El Salvador, el régimen de Pío Romero Bosque ha sido


caracterizado como un régimen de transición hacia la democracia, expresado en un mayor respeto
a los derechos civiles y políticos del país.

• Legado
Tiene fama de ser uno de los pocos, si no el único, presidente salvadoreño
que fue capaz de alcanzar un equilibrio político en el gobierno durante su
administración. Este equilibrio se conoce a menudo como el "Mix natural",
un equilibrio entre la concesión a las demandas de los diversos
componentes de la sociedad y la represión de la misma en un país
determinado. Fue un vástago de la dinastía Meléndez-Quiñones, que en lugar de imponer su
propio heredero como Presidente, permitió una democratización del país con sus
primeras elecciones libres en 1931.
DOÑA MERCEDES RAMÍREZ VIUDA DE MELÉNDEZ

Mercedes Ramírez de Meléndez cofundadora del ingenio azucarero El Ángel y la


Fundición Mercedes, esta empresaria fue madre de los presidentes salvadoreños Carlos
y Jorge Meléndez y suegra del también mandatario Dr. Alfonso Quiñónez Molina.
Tomado del historiador salvadoreño C. Cañas.
BIBLIOGRAFIAS

• acerca de Iglesia la Asunción, Izalco; sirvió como fosa común para sepultar a las víctimas
de 1932. Tomado de ;
https://es.wikipedia.org/wiki/Levantamiento_campesino_en_El_Salvador_de_1932
• Acerca del tema justicia restaurativa. Tomado del la revista:
https://revistalabrujula.com/2022/01/31/justicia-restaurativa-un-anhelo-en-el-
salvador/#:~:text=La%20justicia%20restaurativa%20coloca%20en,no%20se%20favorezca
%20la%20impunidad.
• Acerca del tema 1921 →GENERAL RAFAEL ANTONIO GUTIÉRREZ,. Tomado de la pag.
Web: https://es.wikipedia.org/wiki/Rafael_Antonio_Guti%C3%A9rrez
• Acerca del tema 1929 → AYER FUE DESCUBIERTO EL COMPLOT PARA ASESINAR AL
PRESIDENTE PÍO ROMERO BOSQUE. Tomado de: https://es.wikipedia
.org/wiki/P%C3%ADo_Romero_Bosque

También podría gustarte