Está en la página 1de 2

ENSAYO ASESINOS EN SERIE

El asesino que mata a un desconocido y sin ningún beneficio personal más allá de la satisfacción
de sus más profundas perversiones activa todas las alarmas del miedo tanto en el individuo como
en la sociedad. Por ello, proponemos aportar un poco de luz a este fenómeno tan complejo como
es el de aparentemente “matar simplemente por matar y disfrutar haciéndolo”.

El término asesino en serie fue planteado a finales de 1970 por Robert Ressier, agente del FBI y
experto en criminología, Ressier al reconocer un tipo de casos en los cuales los asesinos repetían
comportamientos y el nivel de agresión hacia las victimas aumentaba, intuyó que este tipo
especial de criminal con cada nuevo homicidio perfeccionaba su modus operandi e introducía
nuevos niveles de violencia, logrando refinar un perfil del asesino en serie prototípico. Para el
FBI la definición de asesino en serie es la persona que mata por lo menos en tres ocasiones con un
intervalo de tiempo de entre cada asesinato destacando en la mayoría de los casos, el evidente uso
de violencia sexual y la expresión de un carácter sádico sobre las víctimas. Ressler (2010),
también destaca que los dos factores más relevantes que generan un asesino en serie son los
paternofiliales, explicando que “En la infancia de muchos asesinos en serie se reproduce el
esquema de la figura paterna ausente y de una madre fría o distante” (Ibíd, 2010, p.280). Respecto
a las relaciones interfamiliares de los asesinos en serie suelen ser disruptivas. Así, un gran
número de asesinos en serie proceden de familias de clase media aparentemente normales pero
que en realidad tienen muchos problemas en la intimidad: los padres abusan del alcohol o drogas,
están implicados en actividades que no son legales, tienen antecedentes psiquiátricos y la mayoría
de ellos han abusado o maltratado a sus hijos. Por lo mencionado anteriormente los asesinos en
serie pueden padecer algún tipo de psicosis, preferentemente paranoide, presentan una o varias
parafilias, especialmente gerontofilia, paidofilia, sadismo y necrofilia. Así mismo según Holmes
y Burger (1985) aportan una tipología basada en la clasificación de asesinos en serie, como
organizados y desorganizados, diferenciando entre asesinos geográficamente estables en los que
el lugar de residencia y el lugar en el que lleva a cabo los crímenes no distan demasiado y
geográficamente transeúntes que viajan grandes distancias en busca de la víctima perfecta, al
asesino en serie organizado le gusta llevar el control y hacerlo notar, lleva todo planeado, el día de
la muerte y las armas que utilizará, e t c. Por lo tanto, los asesinos organizados suelen ser
psicópatas y los desorganizados, psicóticos. Con respecto a su modus operandi, eligen a sus
víctimas haciendo caso a sus fantasías, utilizando diversos recursos para la atracción de ellas y así
aprovecharse de sus momentos con mayor vulnerabilidad, esto sin dejar de lado que el modus
operandi va variando en cada homicidio para dificultar la búsqueda y captura. Igualmente, Canter
y Salfati (1999) incluyen en su clasificación la interacción que se da entre la víctima y el agresor
distinguiendo los siguientes tipos: instrumental-cognitivo: es un asesino planificador,
premeditado, que quiere conseguir un objetivo, el expresivo-impulsivo: este tipo de asesino se
mueve por las emociones, ya ´ sea de ira o de venganza y el instrumental-oportunista: también
presenta intencionalidad y espera obtener algún beneficio de la víctima.
Posteriormente, Holmes y Burger (1988) clasifican a los asesinos seriales en: visionarios,
misionarios, hedonistas y dominantes. En relación a la motivación, la mayoría de los asesinos
ocasionales, matan por razones explicables como el dinero, poder, venganza, celos, también para
sentirse vivos y se clasifican en emocionales, misionarios y por conveniencia Fox y Levin (en
Petherick, 2006).

En conclusión, un asesino en serie desde temprana edad deja rastros acerca de que las cosas no
están yendo del todo bien y lo demuestran de diferentes maneras, su proceder consigo mismo, con
los animales y en general la sociedad, es un aviso que se debe de tratar al instante, sí, recalco,
tratar, porque muchos famosos asesinos en serie desde su infancia estuvieron en el limbo, sin una
adecuada contención emocional. ”Diferentes tipos de maltrato en la infancia favorecen la
aparición de psicopatía asesina” Borja y Ostrosky-Solis, 2009; Craparo, Schimmenti y. Caretti,
2013)

REFERENCIAS

Holmes, R.M. y De Burguer, J. (1985). Perfiles del terror: asesinos en serie.


Libertad condicional federal, 39, 29-34.

Ressler, R. (2010). Dentro del monstruo: un intento de comprender a los asesinos en serie. Ed.
Aba Minus: Barcelona.
Safalti, G., y Canter, D. (1999). Diferenciando los extraños asesinatos. Perfil del asesino.
Características del estilo de comportamiento. Ciencias del comportamiento y derecho; 17, 391-
406.

Fox, J.A., y Levin, J. Asesinos en masa. En Eric Hickey (Ed.), Enciclopedia, crimen,
asesinato y violencia (pp. 296-299). Tousand Oaks, CA: Sage.

Díaz Galván, K. X., Ostrosky Shejet, F., Romero Rebollar, C., Pérez López, M. L. (2013).
Desempeño neuropsicológico orbito medial en psicópatas. Revista Neuropsicología,
Neuropsiquiatría y Neurociencias, 13, 43-58.

También podría gustarte