Somos la primera generación consciente del nuevo riesgo global que enfrenta la

humanidad, por lo que recae sobre nosotros cambiar nuestra relación con el
planeta para asegurar que dejaremos un mundo sostenible a las
futuras generaciones".

Nuestro país cuenta con un gran potencial para el desarrollo de energía

renovables debido a nuestra posición geográfica. Pero asi mismo nuestra posición
geográfica es desproporcional y extremadamente vulnerable en relación con el
cambio climático. Aunque ya convivimos con las consecuencias que nos afecta a
todos, tenemos el compromiso el reto de alcanzar soluciones viables,
desarrollando un cambio de actitud con acciones concretas para garantizar un
equilibrio ambiental. A medida que vamos adquiriendo interés fortalecemos las
capacidades a través de oportunidades que nos ofrecen las energías renovables.
En nuestro país con la cantidad de recursos favorables, tenemos todo el potencial
para tomar el desafío y afrontar el reto de una transición energética con el objetivo
más ambicioso de alcanzar lo que marca el Acuerdo París, posicionando al mundo
en una trayectoria de 1´5°C.

Pero conocemos en realidad ¿Qué implica esta transformación? Necesitamos y

anhelamos, una transición energética eficaz, es una transición oportuna hacia
un sistema energético más inclusivo, sostenible, asequible y resiliente que nos
proporcionará soluciones a los desafíos mundiales relacionados con la energía.

El consumo responsable de energía es la clave para la promoción de esta

sostenibilidad asociada al cambio de comportamiento de nosotros los panameños
como consumidores energéticos, buscando la incorporación de tecnologías
renovables no convencionales, menos contaminantes trayendo consigo beneficios
para el desarrollo de nuestro país en ámbitos económicos.
Lo principal para enfrentar esta problemática es la solidaridad y sensibilidad con
nuestro entorno, para ser capaces de recuperar y resguardar el valor de nuestra
biodiversidad, estamos en la década de la restauración ambiental de las Naciones
Unidas, en la década de Acción. ¡Es hora de hacer un cambio! ¡Necesitamos una
transformación! ¿Cómo vamos a lograr este cambio? Dejando atrás las energías
basadas en petróleo, ya que aportan una gran cantidad de huellas de carbono a
nuestra atmosfera de manera que este factor acelera el impacto negativo,
incorporando la movilidad sostenible, sabemos que el transporte de Panamá ha
dependido totalmente de los combustibles fósiles siendo uno de los principales
culpables de las emisiones de gases de efecto invernadero. Por ello sector debe
orientarse a una transición eficiente hacia una descarbonización abriendo una
generación de energía renovable mediante hidrogeno verde, el cual reduciría
millones de toneladas de CO2, siendo una fuente energía limpia que solo emite
vapor de agua y no deja residuos en el aire, a diferencia del carbón y el petróleo.