UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS

Facultad de Letras y Ciencias Humanas

Escuela Profesional de Arte

Asignatura:

Mitología Andina

Docente:

Magaly Patricia Labán Salguero

Presentado por:

Urquizo Andia, Camila Anais

Sánchez Camus, Diana Amelia

Ventura Olivera, Ana Valeria

Velarde Vásquez, Fabiola

Lima

2023
 Mito de Huiracocha

- Estructura

La estructura del Mito de Huiracocha está basada principalmente en la versión de Sarmiento

de Gamboa por ser esta la más extensa. Nos presentan una división de treinta secuencias

simplificando el relato mítico; mientras que, la estructura narrativa se encuentra dividida en

dos fases (La primera desde la creación y destrucción del mundo; mientras que, la segunda

fase va desde la creación definitiva hasta la desaparición de Huiracocha). Asimismo, el relato

se presenta de una forma no lineal debido a que cuenta con diversas interrupciones a lo largo

del mito.

Por otro lado, se hace uso de diferentes fórmulas para realizar la explicación del mito, como

es el caso de la fórmula de Lévi- Strauss, la cual se utiliza para explicarnos las funciones que

tiene el universo (muerte, vida, etc.). También se aplican fórmulas de causa-efecto para

explicar de forma concisa que el crear el mundo incompleto dentro del mito nos dará un

mismo resultado. Así también, se toma en cuenta la funcionalidad de los actores y la

estructura semántica del mito, siendo divididas y agrupadas en categorías funcionales que

expliquen todas las secuencias no lineales del contenido del relato mítico.

- De la adoración al olvido de Huiracocha

Huiracocha fue para los incas un Dios supremo y creador del mundo que ocupaba el papel

central en la religión inca, esto se veía reflejado en la agricultura, siendo algo importante para

los incas, ya que Huiracocha era asociado con la fertilidad de la tierra y el control del clima,

factores cruciales para la agricultura en los Andes. Su relación con la naturaleza abarcaba la

conexión con el agua, la lluvia y el clima, enmarcando una profunda relación de los incas con

la naturaleza, su capacidad para proveer agua y fertilidad era fundamental para la

supervivencia de la civilización inca en un entorno montañoso. La moralidad y justicia de

Huiracocha no solo era de un dios creador, sino también de un guardián de la moralidad y la

justicia, es así que la religión inca tenía un fuerte componente ético, que esperaba que la

sociedad viviera de acuerdo con ciertas normas y valores. Las ofrendas y sacrificios que los

incas realizaban en honor a Huiracocha como parte de su práctica religiosa, era una forma de

mantener una relación armoniosa con el dios supremo y asegurarse su favor. Es con la llegada

de los españoles y la imposición del cristianismo, que las creencias y prácticas religiosas

incaicas, incluyendo la adoración de Huiracocha, sufrieron una transformación radical o

desaparecieron. Entonces, se puede decir que Huiracocha era una figura fundamental en la

mitología y la religión incaica, ya que representa la creación, la fertilidad y la justicia. Su

papel refleja la profunda relación de los incas con la naturaleza y su enfoque en la agricultura.

Pero con la llegada española y la imposición del cristianismo, la adoración de Huiracocha y

otras creencias incaicas se vieron afectadas significativamente, marcando un cambio cultural

y religioso en la región. Uno de los aspectos más notables de este proceso fue la destrucción

de templos y objetos religiosos indígenas, así como la construcción de iglesias cristianas

sobre los sitios sagrados indígenas.

- Contradicciones

La creación del mundo a partir del diluvio es el inicio del cuestionamiento sobre el poder que

ejerce Huiracocha en la tierra, tras dicha acción inicia el surgimiento de los hombres

coexistiendo con la naturaleza. Esto indica el poder de creación y benevolencia del dios, sin

olvidar que antes de ello ya existía la vida, por lo que este hecho convierte a Huiracocha en

un dios de la destrucción antes que uno creador. A medida que pasa el tiempo, Huiracocha

deja en claro su aprecio por la vida humana, otorgándoles un hogar para vivir al igual que

plantas y animales de los cuales alimentarse. Se muestra la imagen de un dios bondadoso y

protector ante su creación; sin embargo, tras alguna transgresión o incumplimiento de sus
normas por parte de los hombres, los castiga severamente pagando con su vida o la de todo

un grupo, ocasionando que regrese la imagen de un dios destructor.

Por otro lado, se entiende que a través de algunos escritos que Huiracocha acepta las

diferencias de clase sociales como algo natural en la vida, sin importar que otros padezcan

tras esas reglas impuestas entre los propios hombres. No obstante, no permite lo mismo

cuando el hombre lo incluye en su plan de obtención de poder, acepta la supervivencia y el

crecimiento del hombre por su propia voluntad, pero sigue pidiendo una sumisión y

dependencia de este, logrando una dictadura que nunca tendrá fin. A su vez, en un inicio se

tenía presente que el poder de la creación reside en un dios que no poseía un nombre fijo, era

llamado como “Illa Tici, “Con Tici”, “Pachayachachic” y “Pachacamac”.

Aunque, los mismos nombres tomaron otros significados, convirtiéndolo más allá de un

creador o como el que anima el mundo, como el del trueno que ayudaría a crear esta imagen

del destructor, todo ello después pasaría a forjar a Huiracocha que pasaría a ser la nueva

presentación de todo lo anterior. Por último, podríamos decir que la contradicción de

Huiracocha se debe a que desea preservar un balance entre la vida y la muerte, algo que

antiguamente no se pudo realizar y ocasionó que termine en destrucción, es por ello que a

través de la muerte busca apreciar la vida y a través de la sumisión busca el deseo de seguir

preservándola.