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l\JINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION

SUBSECHETARIA DE CULTURA

INFORMES
DEL INSTI1,,UTO NACIONAL
DE ANTROPOLf)GIA

RELEVAMIENTO CULTURAL DE LA
PROVINCIA DE MISIONES

INSTITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGIA - BUENOS AIRES - REPU.BLICA ARGENTINA - 1974.


INSTI iU TO NACIONAL DE AN TROPOLOGIA
3 de Febrero 1370/78 ·
tel. 783-6554 Buenos Aires
RepC.blica Argentina
MINISTERIO DE CULTURA Y EDUCACION
SUBSECHETARIA DE CULTURA

INFOllMES
DEL INSTITU1.,0 NACIONAL
DE ANTROPOLOGIA

RELEVAMIENTO CULTURAL DE LA
PROVINCIA DE MISIONES

I:\"STITUTO NACIONAL DE ANTROPOLOGIA - BUE~OS AIH.ES - REPUBLICA ARGENTINA - 1974


Excma. señora .Presidente de la República Argentina
Doña MARIA ESTELA M.A.RTINEZ DE PERON

S.E. el señor ministro de Cultura y Educación


Dr. OSCAR IVANISSEVICH

S.Sa. el señor Secretario de Estado de Cultura


Profesor CARLOS FRA TTINI

s. Sa. el señor Subsecretario de Cultura


Profesor FELIX COLUCCIO

Señor Director del lnsti tu to Nacional de Antropología


Don JULIAN CACERES FREYRE
3

INDICE

Presentaci6n, por Julián Cáceres Freyre.......................... 5

Colonias europeas en territorio misionero, por Martha Mercedes


Gros so 8

Monumentos y ruinas hist6ricas, por Diana Rolandi de Perrot....... 31

Síntesis geográfica de la provincia de Misiones, por M6nica Marta


Cr an we 11 • • • . • • • • • • • • • • • . . . . . • . • . . • • • • • • • • • . • • • • • • • • • • . • • • • • • 45

Síntesis !~gropecuaria de la provincia de Misiones, por Catallina


Saugy . . . . . . • • • • • • • • • . • • . • . . . . . . . • . . • . . . . . . . . . . . . . . . . . • . • . . . 65

Cultura, educaci6n y recreación, por Silvia Garda de Rossi • . • • • • 81

Grupos indígenas de 1a provincia de Misiones, por Sara Josefina


Newbery . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93

Los medios de comunicaci6n masiva en la provincia de Misiones, por


Erci 1i a Moreno Chá. . . . . . . . • . . . . . . . . . . . • . • . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 107

Relaciones interétnicas y motivaciones migracionales en algunos gr~


pos étnicos de la provincia de Misiones, por Martha Blache.... 129

Artesanías de Misiones, por Catalina Saugy....................... 143


45

SINTESIS GEOGRAFICA DE LA PROVINCIA DE MISIONES

Mónica Marta Cranwell

Sumario
Misiones está llamada a desempeñar un activo papel en el marco económi-
co social argentino. Su privilegiada posición geográfica le permite diversificar
ampliamente su agricultura en una serie de productos que le son exclusivos. Su
condición de provincia fronteriza ha condicionado su historia y su presente dán-
dole una fisonomía que le es propia. Hoy se advierten una serie de síntomas que
anuncian una crisis de envergadura, que es necesario conjurar para lograr su in
tegración a una economía sólida y de bienestar. -

Situación y límites.

La provincia tiene una extensión de 29. 801 km2. Su forma es alargada,


en un sentido NE-SO, siendo su eje máximo de 375 km y su ancho mínimo de 70
km. Misiones se encuentra comprendida en latitudes netamente tropicales, ya
que su extremo norte dista poco más de 200 km del Trópico de Capricornio; y tam
bién está relativamente cerca del océano, con lo cual se ve favorecida por la in.:-
fluencia moderadora del mar. Conjuntamente con Corrientes y Entre Ríos, inte-
gra la Mesopotamia Argentina.
Las fronteras de Misiones tienen una extensión de 1200 km, de los cuaies
1080 son límites internacionales. Esta condición marginal, de cuña entre países
extranjeros, ha condicionado buena parte de su historia y de su estructura actual.
Permanentemente ha recibido la influencia tanto paraguaya como brasileña. Las
fronteras internacionales son casi exclusivamente fluviales. Al N. el río lguazú
la separa de Brasi 1; al este, los ríos San Antonio y Pepirí Guazú, la separan tam
bié:"I de Brasil; al sudeste y sur, el río Uruguay, la divide de Brasil; al S. limita
con la provincia de Corrientes por los arroyos ltaembé y Chimi·ray; y al Noroeste,
el río Paraná se interpone entre Misiones y Paraguay.

2 Relieve.

La morfología de la provincia presenta el aspecto de una meseta aboveda-


da. Sus formaciones son continuación de los relieves de las zonas vecinas. Mi-
siones está recorrida por un cordón central de sierras cuya altura va aumentan-
do de SO, a NE, desde 150 m hasta los 805 m en el cerro Rincón, culminación
de todo el territorio provincial.
El sistema orográfico comienza con la Si erra de Imán, de unos 30 km de
recorrido; al SO encontramos la Sierra de Apóstoles, y la Sierra de San José
y la Sierrita de San José. El cordón principal de la provincia es la Sierra Cen
tral, cuyo recorrido es de 180 km; es el relieve más importante que además con-:
tiene la divisoria de aguas entre las grandes colectores. Al NO de la provincia
se halla la Sierra de Santa Victoria, que al atravesar el curso del río lguaz6,
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forma las cataratas del mismo nombre. Paralela a esta sierra, se encuentra
la Morena, que se extiende hasta el arroyo Uruguaí.
Las característiéas actuales del relieve misionero tienen su explica-
ción, en un reciente movimiento epirogénico positivo que reactivó la erosión
fluvial en toda 1a red de drenaje superficial de la provincia •. Estos han recor
tado la meseta, dejando al 'descubierto el manto volcánico, y dando lugar a la-
formación de saltos y rápidos, con valles trasversales :·encajonados y escal2
nados. · ·

2. 1 Erosión.

Uno de los más graves problemas que pueden afectar a los suelos en
Misiones, e·s el de la erosión. Si bien este es. un proceso natural e inevitable,
que no solo los ataca a ellos, sino también a las rocas quf' afloran, puede ser
un factor desencadenante de los mismos. Cuando la destrucción se acelera por
la ruptura del equilibrio entre la erosión y sedimentación el terreno afectado
está condenado a de-;apar ..,cer. El factor principal de este proceso lo consti-
tuyen las precipitaciones. Así se produceL.nadoblepérdida; por un lado, la
del agua que no puede ser aprovechada por las piantas, ·y por el otro la del tra~
porte de las capas superficiales que son arrastradas por la corriente de agua.
La frecuencia e intensidad de las lluvias, la intensa insolación, las
al tas temperaturas reinantes, los desniveles del terreno, su constitución, son
factores que inciden en la destrucción de tos suelos. Sin embargo el equi li-
brio logrado por la naturaleza a través de la cubierta vegetal, hace que siem-
pre haya un sal do positivo para el terreno, evolucionando estos positivamente,
a lo largo de los años. La vegetación atenúa la fuerza e intensidad de la 1lu-
vi a, y el agua que no es absorbida, se va deslizando paulatinamente intercep-
tadti.:por ra~ces y restos vegetales que le impiden cumplir su labor.,destructora.
Cuando ingresa en el medio geográfico el hombre, traF- en muchos ca-
sos la ruptura del equilibrio logrado. El agricultor y el ganadero eliminan la
cubierta vegetal por desmontes, pastoreos abusivos o rozados, quitando la fue!l
te de materia orgánica que el suelo posee. A esta pérdida se suman los efec-
tos desvastadores de la excesiva insolación; con lo cual el terreno se vuelve
más compacto e impermeable, y su poder de absorción de agua merma. Si es
te suelo es rotulado en tales condiciones el cuadro empeora. Si a lo antedi=
cho se le suma una lluvia torrencial, cada gota disgrega el suelo, facilitando
..su transporte. Una vez que el proceso se ha iniciado, obra rápidamente, y si
no se toman medidas urgentes, el daño ocasionado puede tardar muchos años
en ser subsanado.
Sor difíc: les de ad.,;ertir los primeros síntomas de erosión, con lo
·-c:Jal los daoos s·.,elen ser graves. Si bien combatir este proceso es una nece-
sidad, no es el único problema que afecta a la productividad de los suelos mi-
sioneros. Otro 'más grave es la disminución de la fertilidad potencial a ni ve
les bajos como con.secuencia de la descomposición de la materia orgánica, cuan
d_o el suelo se ve despojado de la vegetación natural para destinarlos a cul ti-
.V.QS.
47

2.2 Posible utilización de la lateritas misioneras.

El suelo de la provincia está consti tufdo principalmente por lateri tas, o


sea del producto de la descomposición de los basaltos que cubrieron la región di:!.,
rante el triásico. Debido al alto contenido de 6xido de hierro presentan un color
rojo intenso que le es característico.
Los suelos laterfticos misioneros encierran un potencial sobre el cual se
han encendido arduas polémicas. Mucho se dijo sobre la posible utilización del
contenido de hierro y aluminio que estos suelos poseen. Las tierras rojas no ti~
rien aiGmina libre que es el mineral de mayor rendimiento económico y de más fáci 1
explotaci6n. La totalidad del aluminio presente se encuentra en estado de mono-
s!'· catos del grupo de la caoli ta. No existen por lo tanto mineral es bauxíticos en
proporciones recomendables para su explotación. Los porcentajes de aluminio se
encuentran entre el 15 al 30%, con un promedio del 23, 5 %. Asociados a este m.l.
neral hallamos hierro y titanio, cuyas proporciones van aumentando en profundi-
dad. Estas reservas poseen una importancia apreciable, si bien la cantidad de ml
neral en existencia es inferior a aquellos que en la actualidad son considerados
aluminíferos. A lo ya citado debemos sumar las dificultades derivadas de su es-
tado silicatado. Sin embargo actualmente, existen procesos para explotaciones
de este tipo de minerales, como el de Scott, que solucionan lo& inconvenientes de
ese estado de la materia prima.

La obtención de aluminio, requiere abundante disponibiU:dad:. · de agua y


de energía hidroeléctrica. Misiones brinda excelentes perspectivas al respecto,
como las que ofrecen los ríos Urugu-f y Piray GuazlJ; sin tener que recurrir a
ríos internacionales con las consiguientes negociaciones compartidas para su a-
provechamiento. Si bien la allJmina misionera no tiene estado libre y posee una
ley inferior a los balJxíticos, tiene la ventaja de estar asociada a óxidos de hie-
rro y de titanio, que podrfan ser aprovechados en forma conjunta, aumentando el
nivel económico de los yacimientos. A su vez no requieren mayor trabajo de mo-
1i enda.

La expjotación de los niveles superiores evita el peligro de inundación de


la zona de labores, pues fácilmente, se alcanzarfa el nivel de la capa freática.
Debido a la existencia de un convenio entre el Instituto de Geología y Minería y
la Comisión Permanente del Planeamiento del Desarrollo de los Metales Livia-
nos, se está estudiando con buenas posibilidades de éxito, la perspectiva de su
explotación.
Las razones aludidas en el pedido de investigaciones son las siguientes:
Espesor aparentemente adecuado de los suelos, con ausencia de afloramientos
de los basal tos subyacentes.
2 Leyes de aluminio semejantes a superiores a las verificadas con anterioridad
en otras zonas de la provincia en el área el egida de Wanda.
3 Acceso fá.ci 1 al lugar a través:::de la ruta Nacional Nº 12 y el camino que une
Puerto Península con lguazú.
4 Inexistencia de plantaciones y colonias agrícolas. Localización en terrenos
pertenecientes a una futura reserva forestal del Ejército Argentino.
5 La vecindad de una vía de agua importante como el río Paraná, con los puertos
fácilmente accesibles, contando uno de los mismos (lguazú), con instalacionelit
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de cierta i mpor tanci a.


6 Disponibilidad de energía hidroeléctrica.
Ante las buenas perspectivas de encontrar yacimientos de aluminio en Ml
siones, debiérase considerar como medida de primera prioridad el estudio com-
pleto de factibilidad,, reservas, etc. Esta posibilidad cobra una mayor impor-
tancia si tenemos en cuenta que la producción de aluminio en nuestro país, e•
hasta el momento, nula. Si bien pr6ximamente entrará en funcionamiento la plan
ta elaboradora de Pto. Madryn, la misma no abastecer& las necesidades totales-
del país y deberá. proveerse de materia prima extranjera con el con sigui ente en
carecimiento de las costos. La implantación de un complejo siderúrgico, en muy
ven@jo§>as condiciones, abre un panorama promisorio, que la provincia tiene
e 1 deber de no dejar pasar.

3 Hidrología.
'
Misiones se encuentra recorrida por una ~bundante red hidrográfica,
que constituye el desague natural de las abundantes lluvias que caen en su terrj
torio. Esta red parte de un eje orográfico central, hasta los colectores que sir
ven de límite a la provincia, o sea, los ríos Paraná y Uruguay. El levantami en
to epirogénico general de la meseta brasileña y del territorio de Misiones, du-
rante el terciario, influenció directamente en la configuración actual de la red
de drenaje superficial • Después de la efusión de la gran capa de meláfiros la
zona fue sometida a una intensa.erosión. Los ríos habían dibujado su curso fun
dando las bases más importantes del actual sistema hidrológico. Sin embargo,-
la intensa desvastación de la zona, 1lev6 a los cauces casi", a lograr su nivel
de base, dando a toda la morfología una ·imagen de senilidad.
Sin embargo faltaron algunos; de los elementos,en esta etapa de madurez;
como las plaricies aluvionales en el curso terminal de los afluentes, las terra-
zas en el curso superior, y los cuerpos de agua estancada, de lo cual no queda
ningún indicio. El nivel de base del sistema era el contacto directo entre los
mantos superficiales del complejo ef1.Jsivo y los terrenos sedimentarios que al
o~ste de la línea de frontera iban formando la llanura correntina. El ascenso
<!el sector misionero aumentó la magnitud de la falla de separación entre lazo-
na elevada del complejo efusfvo y la llanura aledaña, bajando el nivel de base
de los ríos Paraná y Uruguay. Este fenómeno, permitió en ambos casos, el re
trc5ceso de· la rup'tura de pendiente; localizada al comienzo en el límite occiden
tal. del manto
, basáltico;
. , hasta su ubicación actual en los saltos de la Guayra en
el Parana y del Moconé'.1 en el Uruguay.
En los grandes colectores, el retroceso de su ruptura de pendiente, pr.2.
voca variantes de su aspecto. El valle del río afectado aguas abajo de la cata-
ra.ta, adquiere un aspecto encajonado, que conserva en la medida que el proce-
so. .subsi gui ente de modelado del perfi 1 trasversal va ganando terreno desde aguas
abajo, con mayor lonti tud que el retroceso de la catarata. El cauce del río apa
rece con hoyos, que son un vestigio, junto con los rápidos y roquerías, de un -
salto que no fue borrado en su totalidad. Los afluentes, a medida que retroc~
de la ruptura de la pendiente de su colector, se ven privados de su nivel de ba
se-r- Como resultado de este hecho se produce una reactivación de su poder er.2.
sivo en búsqueda de su perfi 1 de equilibrio que ya estaba a punto de lograr. Los
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primeros afluentes afectados, son los del oeste de la meseta misionera, para lue
go continuar el proceso de oeste a este, a medí da que la catarata del colector se
va desplazando en igual sentido por erosi6n retrocedente. Por el lo, los dos cer
canos a Posadas, presentan un perfil de senilidad; mientras que aquellos que se-
encuentran más al oeste, no han tenido tiempo suficiente para hacer desaparecer
los rasgos juveniles de sus cauces, mostrando numerosos . ...:.aitos.
Muchos de los afluentes han ido borrando los sucesivos escalones rocosos
próximos a sus nacientes; otros se encuentran cerca de finalizarlo, y otros como
el lguazú y el Pepirí Guazú, hace poco que lo han iniciado. De acuerdo con el pro
ceso erosivo, observamos en parte de la hidrografía misionera, rasgos juveniles;-
con gran vitalidad destructiva, meandros encajonados; con una superposición visi-
ble de caracteres de un ciclo maduro. Uno de los mayores y más majestuosos tes
timonios de este proceso, es el que brinda el río lguazú. Desde el momento en que
la acción erosiva del Paraná llevó su ruptura de pendiente más hacia el N. de la
desembocadura del río 1guazú, este se vio privado de su nivel de base, formándo-
se una catarata, que solo ha recorrido 20 km aguas arriba. En igual lapso, el río
Paraná llevó su desniivd a 194 km al N de la desembocadura del río' lguazú. Los
rasgos juveniles de la morfología de este río, están caracterizados poc un cañón
recto, con al taa barrancas cin sus ori 1Jas. ·

Aguas arriba de las cataratas del lguazú, los afluentes y su colector co-
rren por una superficie plana en la cual la erosión parece haber encontrado una
val la insalvable. En este sector del al ti plano existe la amenaza de: la prosecuci6n
del trabajo erosivo de los más cercanos tributarios del río Paraná, aguas a bajo
de la confluencia con el lguazú. El límite de avance de la disecci6n a patir del Pa
raná es la Sierra de Santa Victoria y por lo tanto la línea de su culminación es eT
borde del altiplano de San Pedro. Esta línea orográfica se constituye también en
la divisoria de aguas entre el Paraná y el lguazú, poniendo término a la zona afee
tada por la erosión regresiva de los afluentes del río Paraná. -
El río Uruguay se caracteriza por una mayor cantidad de meandros de los
que presenta el río Paraná. Los procesos de erosión fluvial de su curso, no han
adquirido los caracteres agudos que tuvieron en el otro gran colector, y probable
mente el ascenso epirogéni co de 1a meseta misionera, lo afectó en una etapa de n1a
durez en la que ya se incluía la constitución de un cauce meandroso en el Uruguay
y en sus afluentes. El fenómeno del rejuvenecimiento de un ciclo de erosión, en
un relieve ya maduro produjo un modelado muy particular. En un paisaje de coli-
nas redondeadas, e 1 río co 1ec tor 1abró su cauce meandro so, formando e 1evaci ones
aisladas de superficies muy suaves (relieve maduro) y laderas inferiores empina-
das (relieve juvenil). Es posible prever para el futuro que se den varios fenóme-
nos de captura que podrán dilucidarse a favor de los afluentes del Uruguay, por t~
ner estos una mayor pendí ente.

4 Clima:

Misiones se halla comprendida en su totalidad en el dominio del clima sub-


tropical sin estación seca; caracterizado por las elevadas temperaturas, ·y por la
c:rr:-tinuidad en las precipitaciones. La diferencia de registr•os entre enero y julio
alcanza a 11° C.; o sea enero: 27° C. y 1 6° C. para julio. Notamos una 1eve di s-
50

minución de las marcas térmicas en la zona elevada de las sierras.

Las heladas se registran en los meses de invierno, aumentando .también


su frecuencia en las zonas más al tas. La presencia de este fenómeno impide la
realización de cultivos tropicales, como el café. En el sector sur y muy ocasio
nalmente el centro se han registrado nevadas. Los vientos predominantes son -
del E 1 . NEJo<y SE. La relativa poca distancia que la separa del mar, y la ine-
xistencia de v1a barrera climática permite la fácil llegada de la influencia marí
tima que se traduce en la moderación de las temperaturas y en la abundancia de
las precipitaciones. L;as lluvias disminuyen de E. a o,: regi strá.ndose en lgu~
zú 1700 mm; en Bernardo de lrigoyen 2000 mm y en Posadas 1500 mm. Es una
de las pocas zonas del país que no soportan un defici t de agua.

4. 1 Zonas climáticas misioneras.

1. PLANICIE DE APOS TOLES: Es la zona que posee menor can ti dad de pre-
cipitaciones, lo que unido a la elevada temperatura provoca balances hídricos
negativos en los meses de verano. Los coeficientes de aridez se acercan a los
de los climas semi-secos. Es la zona más afectada por la erosión hídrica en
los suelos. ·
2. COSTA DEL RIO PARANA: Se caracteriza por estar influenciada directa
mente por los vientos cálidos y húmedos del noroeste, por lo tanto es la que r~
gistra un mayor número de precipitaciones, y promedios térmicos más elevados.
Las brumas que rodean al río Paraná aumentan el procentaje de humedad y de
nubosidad, reduciendo las horas de heliofanía. Debido a los altos promedios
térmicos y de nubosidad, se trata de un sector de la provincia menos afectado
por las heladas. Posadas posee un promedio de heladas de 17. Es posible que
en localidades situadas más al N estos promedios se reduzcan considerablemelJ..
te.
3 • .ZONA DE LAS SI ERRAS: Posee condiciones climáticas algo atemperadas
por la altura, con promedios térmicos inferiores a las zonas anteriores. Posee
lluvias abundantes, sumando las propias del lugar y las ocasionat:taS;por el re-
Ueve. Los promedios de insolación son también superiores a los de las costas
c;l.e los grandes ríos colectores. Tiene un mayor número de heladas al año y al-
·gunos excepcionales registros de nevadas. De estas condiciones se deduce un
medio propicio para la ~egetación, caracterizado por un crecimiento acelerado
y una mayor proporción de materia orgánica que se descompone en mayor tiem-
po.
4. ALTIPLANICIE DE BERNARDO DE IRIGOYEN: Ocupa la zona NE. de la
provincia. Se caracteriza por tener máximos registros de precipitaciones a lo
:.... ·'.·se añade el rocío como factor de humedad en el suelo. Las temperaturas
relativamente bajas favorecen a una irradiación. nocturna. Se halla esta sec-
ción en el l~mite posible de nevadas, con menos de una nevada al año.
5:· FRANJA COSTANERA DEL RIO URUGUAY: No se poseen registros conti-
nuados y lo suficientemente abundantes como para reulizar promedios climáti-
cós. Sin embargo podemos decir que se trata de una zona de cualidades más
moderadas a las imperantes en la costa del Paraná. Protegida por el cordón
··e:e-ntral de sierras, presenta temperaturas más bajas y menor cantidad de pre-
dpi taciones.
51

5 Biogeografía.

5. 1 Fiora: La provincia presenta dos formaciones fitogeográficas diferentes, la


selva y ei parque. La selva ocupa la5 4/5 partes del territorio hasta aproximad~
mente una línea que l:fle laa. local idade& de San Javier y San Ignacio. Correspon
de a ia zona de mayores precipitaciones. Es una continuaci6n de las for.rnaciones
br-asi leñas. Posee una gran diversidad de especies. Los árboles pueden alcanzar
uno.::; 40 m. Sobre ellos se encuentran gran cantidad de plantas epffitas como las
orquídeas y los fi lodendros. Debajo de este techo vegetal ha llamo& formaciones ar
b6reas:.41e menor porte, arbustos y herbáceas en estr9tos o pi sos. Alguna• de 1as-
e:::ipeci -.::~mas caracterfsticas son la~ araucaria o pino de Mi~iones, la yerba mate,
el ombú; varias especies de helechos arborecentes, lianas y enre<;laderas, tacua-
ras y bamb~seas en general. Estas última• en la• márgene§i de los r~os.

El parque est& separado de la selva por una zona de transici6n donde van
mermando las formaciones arbóreas, que puedan relegadas a las.; márgenes de los
ríos. El terreno es cubierto por una capa herbácea continua y algunos arbustos.
Las variantes obedecen fundamentalmente a la disminución de las temperaturas,
lluvias, y en especial a la acci6n destructiva del hombre mediante técnicas de el!!.
tivo inadecuadas que contribuyen a la erosión hídrica del suelo.

5. 2 Fauna: Si queremos ubicar al territorio de Misiones zoogeográficamente de-


bemos localizarla dentro de la región neotroptcal que se extiende desde México ha
cia el sur. Dentro de esta región la situamos en la subregión guayano brasileña·
en el subdistrito misionero. Este subdistrito abarca la meseta misionera, o sea
el distrito de las selvas mixtas. Esta zona es solo una prolongación dei Paraguay
y del sur del Brasi 1, siendo por lo tanto su pobJaci6n animal muy semejante.

fPor la exuberancia del medio ambiente, es posiblemente el distrito más rl


co del país. Entre las fami 1ias mejor representadas podemos citar: los primates,
por cuatro especies de monos; 1as aves, por más de doscientas c 1ases; 1os felinos,
por el jaguar o tigre americano y un gran número de gatos de menor tamaño; los
quirópetros, por varias especies de murciélagos y vampiros; los marsupiales, por
la comadreja; los roedores, los angulados, los desdentados, los ofidios y los in-
sectos.

La zona sur de la provincia está ocupada por el subdistrito correntino.


La disminución de las precipitaciones, provoca un cambio paulatino en la vegeta-
ción que se hace más abierta. E' avance del hombre ha contribuido también a me,r
mar notoriamente la cantidad y variedad de especies. Otras que encontrábamos en
el anterior subdistrito son más sensibles a las condiciones ecológicas y por lo tan
to faltan en el sur de la provincia. A su vez notamos un aumeñtó de las varieda- -
des corredoras, en detrimento de las especies de hábitos arborícolas.

5. 3 Situación de la fauna y la flora misionera.

El avance paulatino del hombre, con la lógica realización de las tareas a--
gropecuarias, trae una continua reducción del área ocupada por la vegetación na-
tural y la fauna silvestre. Los rozados, y posteriores cultivos, van transforman
do el paisaje. Estos fenómenos, ~on inevitables en la dinámica de la ocupación del
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suelo por el hombre. Sin embargo, no por el lo debe descuidarse la conservación


de un equilibrio perfecto logrado por la naturaleza, que también está al servicio
del hombre y que puede volverse en su contra si es alterado. Mucho se ha escrl
to sobre la necesidad de mantener los ecosistemas, y sobre los desvastadores ~
fectos causados por el mal uso de la naturaleza. Misiones tiene una riqueza fau
nística y florístic:a 1'.mica en nuestro país, y por lo tanto es necesario cui<ilar que
no se destruya. Muchas de las especie• que allí encontramos, son exclusivas de
la zona y faltan en el resto del país.

La vegetación es destruída, ya sea por el hacha o por el fuego, se pue-


den observar terrenos desprovistos de plantas, con lo cual se dejan abiertas las
puertas a los agentes erosivos. Las lluvias ;torrenciales, propias de la zona,
lavan el suelo, arrastrando con toda facilidad las capas enriquecidas con humus,
con lo cual ese terreno tardará muchos años en recuperar su capacidad producti
va, quedando marginado de cualquier proceso económico. Este fenómeno se ve-
favorecido por los frecuentes desniveles en el territorio de la provincia. El sol
y el viento contribuyen a completar el ciclo erosivo. También podemos encon-
trar terrenos desgastados por falta de uti lizac:ión de téi:;:iicas adecuadas de cul-
tivo. Es posiblemente la zona sur de la provincia la más afectada por esta causa.

En los departamentos marginales, algo alejados y .iabandonados de cual-


quier tipo de control, se dan explotaciones de madera o para efectuar cultivos,
sin intención de una actividad agrícola permanente, efectuando una auténtica ec.Q_
nomía depredatoria y destructiva. Núcleos familiares, en muchos casos prove-
nientes del Brasil, ocupan tierras fiscales o particulares sin la correspondien-
te autorización; talando la vegetación natural, perdiendo muchos ejemplares apro
vechables económicamente, para después realizar cultivos anuales por un corto -
período de tiempo, y luego volver a su país de origen, o continuar la misma tarea
en otro lugar. Estos núcleos generalmente no tienen acceso a informaciones de
carácter técnico; con lo cual usan modos inadecuados que perjudican irremedia-
blémente las tierras aptas. Inspectores y funcionarios de varios organismos han
efe.ctuado denuncias al respecto, sin encontrar el eco que ponga remedio a tal si
tuación. -

La trasformación del medio natural, por la ocupación del hombre trae la


lógtca disminución de las áreas de varias especies de la fauna silvestre. A es-
to ~e suma la caza indiscriminada de ejemplares de la población animal, ponien-
do--a varias especies al borde de la desaparición de nuestro territorio. No exis
ten--estudios, ni siquiera parciales, del área, costumbre, densidad, etc., de ni!:!
guna familia, ni en especial de aquellas que es de interés protejer, con lo cual
la legislación destinada a evitar su extinción, debe fundarse en términos no pre-
cisos; restándole efectividad. En los últimos meses, la Dirección Provincial de
Turismo ha emprendido una campaña de protección a la fauna silvestre, actuali-
zando en la medida de lo posible, la legislación vigente. Asimismo comenzó una
intensa persecución de los infractores.

Sin embargo esta actividad es ins:.;-Jiciente. No se cuenta con los medios


necesarios para efectuar un eficaz control de las contravenciones a los decre-
tos _de regulación de las actividades de caza y pesca. A esto sumamos el desco-
nocimiento ya señalado de los modos de vida de cada una de las especies que se
pretende resguardar. La zona norte de la provincia, en especial los departame.!J.
53

tos de San Pedro y General Bel grano, aún se mantienen en condiciones quepo-
dríamos decir originales, con grandes extensiones de tierras fiscales. Son por
lo tanto sitios ideales para la creación de un área de reserva faunfstica y florfs
tica, a modo de un auténtico santuario natural. Si bien la provincia wenta ya -
con el Parque Nacional lguazú, el mismo cumple so lo parcialmente los fines de su
creación. El desarrollo de un complejo turfstico en creciente expansión, cami-
nos, infraestructura en general, sin un adecuado control, no le permite resguar-
dar como debí era el tesoro de la fauna silvestre. Por intermedio de organismos
competentes se deben favorecer los urgentes estudios sobre las especies seria-
mente amenazadas.

6 Geografía humana.

La población misionera tiene todas las características de una región ru-


ral. Su dinámica y estructura demográfica; su colll>osición ocupacional y los de
más elementos cnoocidos deben ser interpretados teniendo en cuenta este hecho-
principal. Sin embargo Misiones se mantuvo ajena al éxodo que caracteriza a to-
das las poblaciones del pafs de habi tat disperso. Es posible que esta situación
no se mantenga en los mismos índices c¡ue fija !~1 censo de 1960, p;Jes factores S.2,
cío-económicos están atentando contra la estabilidad del productor agrícola, te-
niendo el mismo que suben:qjlearse en centros urbanos o trasladarse directamente
hacia ellos. Solamente la entrada de inmigrantes brasileños y paraguayos en gene
ral, compensan en parte el éxodo rural. Al aporte constante de población de los-
países vecinos, se suma un crecimiento vegetativo sostenido, por ello los índices
de aumento de población son superiores en Misiones que en gran parte del país.
La proporción que reside en la provincia en relación al total de la Argentina, no
solo se ha mantenido, sino que fue ... aumentando. En'1895, era de O, 8%; en 1914
de 1,5%, en 1947de 1,6%, en 1960de 1,8o/o,y,em1970de 1,9%.

La composición por sexo refleja una población rural con fuertes aportes
migratorios. Las tasas de masculinidad, salvo en el departamento de Capital,
son superiores a 100. Sin embargo, desde 1895 han ido disminuyendo paulatina-
mente. De acuerdo al último censo nacional, las cifras de varones y de mujeres
se encuentr.an casi parejas; teniendo una leve diferencia a favor del sector mas-
culino. Este hecho se debe en gran parte a la merma del número de inmigrantes
y a una mayor participación del sector femenino en el fenómeno de las migracio-
nes internas e internacionales. El ingreso de mano de obra, proveniente de otras
provincias y de otros paíse~, asegura un considerable aporte de personas jóvenes
y de niPios. La estructura de edades refleja un al to índice de natalidad, con esca
Iones inferiores anchos y superiores muy angostos. La composición de la pobla-:
ción muestra a los grupos de edades inferí ores y rnedi as muy abultados, y el de an
cianos muy disminuí do. Si bien por la merma de migraciones hacia Misiones, 1.... -
pirámide tiende a tomar formas más regulares; la tasa de natalidad permanece aún
elevada.

Son frecuentes en la provincia las familias numerosas, característica pro


pia de una población rural. El promedio de mierrt>ros de cada grupo familiar es -
de 5. Misiones participa de una característica común a todo el país, la disminu-
ción de la proporción de extranjeros en la composición de su población. Esta mer
54

ma es come.in a todas las provincias, pero en Misiones se hace menos marcada,


por la continuidad del aporte de población proveniente de los países ·limítrofes.
En las edades adultas y ancianas, los extranjeros son todavía numerosos, per9
los emigrantes provenientes de Europa y aún de los países vecinos van enveje-
ciendo como grupo. Los saldos migratorios son casi nulos, y por lo tanto ef sec
tor de·no nativos, no se renueva en los escalones inferiores de la población. La·
proporción de argentinos va aumentando; ·haciendo a la población más homogénea.
Si· en 1947 el porcentaje de extranjeros era de 30%, en 1970 se había reducido
a t 6, 4% ~'·'' Integran núcleos importantes los brasi lefios, paraguayos, s;tólacos,
alemanes, etc. El aporte de población de provincias vecinas, también ha dismi
nuído. En 1947, el 12% de los ~esidentes en Misiones habían nacido en otras ju
risdicciones del país; pero en 1960 esa cifra había bajado al 8,5%. Lógicamen-:
te el mayor aporte es el de Corrientes, por vecindad geográfica. Para el censo
de 19&0 habí& 15. 336 correntinos en Misiones. Este hecho se puede deber a dos
causas: mejoramiento del nivel de vida en la provincia emisora de población, o
al deterioro de la situación económica social en la provincia receptora. Nos in
clinamos a pensar que fue la segunda, la causa de esta variación. -

El censo de 1895 arrojó un 87% de población rural. Este porcentaje se


mantuvo más o menos estable hasta 1947 en que empezó a declinar, para llegar
en 1960 al 68, 1 %, y es de esperar que en el último censo el porcentaje haya dis
minuído más aún. El éxodo rural es un fenómeno que afecta a la dinámica de po-
blaci6n en todo el mundo. Los atractivos que brinda la ci4dad (asistencia hos.:-
pi tal aria, escuelas, la mayor posibilidad de una remuneración fija, las diverSi,2
nes); la paulatina mecanización del agro que hace que el hecho de agregar más·
mano de obra a las tareas del campo no signifique un aumento de producción son
los factores más importantes para explicar el movimiento de poblacibn de zonas
rurales, hacia los centros poblados. Si a esto sumamos una crisis económica
en los productores rurales, la falta de una política de asistencia crediticia que
permita aumentar y alentar la producción, podemos tener un cuadro más comple·
-
to del fenómeno.
.
-

-- Misiones tiene una densidad de población de ~4, 9 h/km2; pero lbgicamen,


te-con marcadas diferencias entre lo·s distintos departamentos. Una mayor con
eentración se observa en el sur de la provincla; teniendo cifras muy inferiores
los-distritos del norte, como General Bel grano~ Guaraní y San Pedro. Tampo-
co-~os inmigrantes extranjeros o de otras pro, '.ne iao;; se distribuyen de manera
preporcional en todo el territorio. Los extranjeros se agrupan en mayor medi-
da-en los departamentos de: Capital, El dorado, General Bel grano, Guaraní, 1-
guazCJ, 25 de Mayo, etc. Los nativos de otras provincias se agrupan preferen-
temente en la ciudad Capital, siendo por lo tanto mucho más urb&na que aquellas
que proviene de otros países. La provincia posee el 34% de su población ac~i- ·
va. La agricultura es la principal de las actividades correspondiéndole el 50%
de. la población activa. El 16% corresponden a las ac:tivi dades secundari·as;. y
eLresto a las terciarias. Los cambios más significativos desde 1914, se han
producido en el sector secundario y terciario, mi entras que la proporción para
las.actividades primarias har. permanecido casi estable. Hubo un notable incr~
mento entre las personas dedicadas a las actividades industriales, y sobre to-
do al comercio y a los servicios.

La futura evolución de la población misionera, depende en gr.an medida


55

del desarrollo económico y social, más que de los factores demográficos propi_§!
mente dichos. La estructura actual ha conservado un considerable potencial;
pues su. ta.sa· de na.talidad descendió en menor escala, que la del resto del país y
dada fa. es.tructura de edades de la población, con un elevado porcentaje de men2
res y jóvenes; es de esperar que esta tendencia no se altere mucho. Enccambio,
el cuadro demográfico puede variar por factores económicos y sociales. El me-
joramiento del nivel de vida de la población, en espedal de un sector medio, ya
sea rural como urbano asegurarán el futuro de la provincia.

6. 1 Población nativa y extranjera.

El análisis de la composición de la población de acuerdo a su lugar de n.2_


cimiento, adquiere en esta provincia una importancia singular. El porcentaje de
extranjeros existentes, fue y es muy importante. Toda la historia de la provin-
cia se ha visto ligada, desde sus orígenes, a la instalación de núcleos foráneos
provenientes primer·> de Europa, y en los últimos años de los pa~ses limítrofes,
en un mayor número. Misiones sigue siendo una de las provincias argentinas que
r . egi stra el mayor número de extranjeros. Su proceso no fue semejante al del P.2.
ís en general. La provincia registra el máximo de no nativos para su primer Ce.!J.
so, en 1895, con el 50, So/o; para.luego ir descendiendo conti.nuamente. En cam-
bio el total del país registra el máximo. para 1914. Sin embargo los porcentajes
obtenidos en Misiones son siempre[superiores a los de la Argentina en general.
El descenso paulatino de la proporción de extranjeros se debe no sólo a la di smi
nución de los aportes migratorios, sino también al crecimiento de la población ñ.2.
ti va.

Por razones de espacio disponible, en la presente síntesis, debemos re-


ducirnos a analizar el problema en los Ciltimos años. Los extranjeros han deseen
di do al 16, 4%. Si bien no disponemos de los datos correspondientes a 1970 dis--
criminando el origen de los mismos podemos suponer que habrá un aumento de aqu!:.
l los ele origen americano en detrimento al grupo europeo. Notamos en los últimos
años, ya sea a nivel nacional, como de la provincia que estamos considerando, la
casi total paralización de la emigración de origen europeo, donde los sal dos son
negativos para nuestro país. Al desaparecer las causales que originaron estos
movimientos desde el Viejo Mundo hacia nuestro país, el intercambio ha cesado.
No sólo podemos notar una falta de política que aliente la llegada de contingentes
extranjeros sino también la finalización de grandes conflictos económicos y políti
cosque originaron grandes desplazamientos de población. A esto debemos agre.:-
gar un notable incremento en el nivel de vida de Europa que lleva a una cierta es
tabi lidad en su población. -

En cambio es claro advertir,el notable aumento que han tenido en nCimero y


en proporción, la migración de los países limítrofes. Los bajos ingresos de sus
pobladores, la falta de fuentes de trabajo y de medios de vida, originan desplaza-
mientos continuos de población hacia nuestro país. Es de esperar que en los pró-
ximos años esta situación vaya en aumento. Los núcleos fronterizos mantienen ín-
dices decrecimiento vegetativo mucho más elevados que nuestro país. Argentina
ofrece además un vasto territorio generoso en riquezas, para ·qui en desee traba-
jar lo, mayor nivel de vida, fuentes de trabajo más seguras y abundantes, mejores
leyes sociales, etc. Todas estas son razones, que si bien pueden no estar en su
56

totalidad claras para los núcleos de migrantes, son notorias para el panorama
americano. Por el lo esperamos que en los próximos años aumente la presión
demográfica en nuestras fronteras. E& necesario encauzar este fenómeno en
provecho del país.

En Misiones ~olamos la importancia de los nCicleos de origen paraguayo


y brasileño. Los primeros ingresan generalmente en forma legal a nuestro pa-
ís, pero permanecen en él más del plazo permitido. Son generalmente mano de
obra inestable que se emplea en tareas rurales o en sus industrias derivadas.
Algunos pueden afincarse y logran un trabajo es&able, pero un núcleo muy impo.!:,
tan.te se constituye en migraciones golondrinas. Distinto es el panorama que o-
frecen los brasileños. La mayoría se establece en la zona fronteriza con el. Rfo
Uruguay, por lo general en forma clandestina. E&to se ve favorecido por la ca
si in~xi.stencia de un control limítrofe, y ademág por las dificultades en realizar
1os ~~·Fimi tes de radicación, poco accesibles a mi gran tes de escasos recursos cu 1
t~ra!es y económicos. Cruzan el río, efectúan un rozado, ya sea en tierra fis--
cai o particular, sin la autorización correspondiente¡ efectúan cultivos anuales,
sin ninguna técnica adecuada, con lo cual agotan o.erosionan el terreno hacién-
dole perder su productividad. A los pocos años se .trasladan a otra zona repi-
tiendo la operaci~>n, o regresan a su país de origen.

Existen denuncias de funcionarios· oficial es d de particulares que no han


encontrado el eco deseado. Este tipo de migración·. no favorece para nada a nue_!
tro país; ~a que no sólo realizan una economía tlepredativa sino que no parti'ci-
pan en ningún proceso de integración. Producen para su autoabastecimi en to o
para vender en el Brasi 1, viven en condiciones precarias, de salud y de educa-
ción manteniéndose al margen de la comunidad misioneca. También encontramos
b~asileños radicados como obreros rurales o industriales, y si bien pudieron ha
bAr entrado ilegalmente, pueden regularizar su si tuaci6n. Es necesario lograr
una integración del sector de la costa del río Uruguay, al quehacer naciaial;
en especial de San Javier hacia e 1 r:.or te, donde falta toda la infraestructura b&
siéa para unirla al resto de la provincia y favorecer así a su colonización. La
prTmer tarea a tal efecto es la construcción· de una ruta paralela al río Uruguay,
que facilite las comunicaciones con otras localidades¡ para luego continuar por
otf"'as obras complementarias.

Dadas las características de una operación censaría, podemos intuir la


retatividad de las cifras dadas para extranjeros; pues tenemos una abundante
mano de obra golondrina que atraviesa continuamente la frontera, y además a
qui·enes se nieguen a declarar su nacionalidad (entrados ilegalmente al país).
También debemos tener en cuenta el grado de integraci6n de esas comunidades
extranjeras, y de sus inmediatos descendí en tes, fenómeno que presentará múl-
ti.ples variantes, sobre todo en los grupos de origen europeo. No tratamos e_!
te punto, por ser tema del trabajo de la Prof. Marta Grosso.

7 Infraestructura.

Podemos advertir en·el mapa correspondiente, una característica común


a. todos los rubros de la infraestructura básica de servicios; la costa del Para-
ná y el sur de la provincia se encuentran cubiertos por.una densa red de servi-
57

cios, en coincidencia con la zona m'ás densamente poblada y que reúne la mayor
cantidad de la actividad económica. La parte central, le sigue en importancia,
con una red relativamente abundante. El área de la frontera seca y del río Uru
guay al norte de San Javier, se encuentra totalmente abandonada, sin contar con
los servicios ir-idispensables para desarrollar el potencial que posee. Si bien el
informe pPesentado analiza cada uno de los puntos, en la presente publicación de
bo incluir únicamente el análisis de la infraestructura vial por ser la más impo;:.
tante y a su vez un claro ejemplo de la situación en general. Los datos comple-
tos están en el trabajo inédito.

7. 1 Infraestructura vi al.

La provincia cuenta con una red vial bastante desarrollada. El sistema


consta de dos rutas principales; una de el las pavimentada casi en su totalidad,
que recorre la costa del río Paraná (Ruta Nacional Nº 12); y la otra, que une las
localidades central es, siguiendo el eje de divorcio de aguas de la provincia (Ru-
ta Nacional nº 14}, Sin embargo, la falta de suficientes vías pavimentadas, uni-
do a las difi cu 1tades el i mit. ti cas (lluvias intensas y prtlongadas, relieve acciden-
tado), hacen que los caminos no puedan llegar a satisfacer, oi en lo más mínimo.
las necesidades de las modernas comunicaciones. La red fundamental está unida
al resto del litoral. Sin embargo, por sus características, por la distancia que
se debe recorrer no puede suplir con eficacia, el alejamiento de los principales
centros consumidores.

El camino es fundamental para el tránsito interno de la provincia, ya de


pasajeros como de mercadería, desde los centros productores hasta los lugares
de despacho y procesamiento. También debemos acotar, las dificultades existen
tes para construir una red caminera. El número considerable de arroyos y ríos,
con caudales torrentosos durante buena parte del año, encarecen el tendido de la
red vial, por el gran número de puentes que deben realizarse; y hacen también di
fícil su conservación. Los caminos deben cumplir la función fundamental de comu
ni car. Dos de los pi lares fündamentales de la economía misionera; el té y la yer
ba mate, necesitan ser transportados en el perentorio término de 24 hs., desde-
el lugar de su cosecha hasta los secaderos que deben efectuar su procesamiento.
Sobrepasado este término el producto recolectado con el esfuerzo del agricultor
se pierde. Fácil es deducir los efectos nefastos de las lluvias en las calzadas n2_
turales de la provincia que aislan por el término de varios días a los productores
de los centros industriales.

De la simple observación del mapa carretero correspondiente, podemos


advertir la ircegularidad en su distribución. La zona sur de la provincia, y la
costa del río Paraná está recorrida por una red más o menos densa de caminos
secundarios y principales. Muy· distinto es el panorama al N, de Misiones y en
la costa del río Uruguay. Los caminos que unen las escasas localidades allí e-
xistentes, son en extremo precarios o faltan por completo. La importancia de la
vía de comunicación, cobra su real dimensión, en un suelo cubierto por espesas
selvas. El factor indispensable para la colonización de este territorio, es la e-
xistencia de rutas fácilmente transitables. Si nos preocupa la penetración que
sufre la costa del río Uruguay; para lograr integrarlo es necesario que se comu-
nique con el resto de la provincia y por el la a todo el país; y no dejarlo en el se-
miaislami ento en que se encuentra hoy.
58

Está prevista la construcción de la ruta nacional que continúe la provin-


cial N• 2, hasta Bernardo de lrigoyen. Sin embargo la concreción da..: esta obra
fundamental económica y estratégicamente, choca con dificultades presupuesta-
rias difíciles de superar. Para esta obra 5e han realizado los trabajos de in-
fraestructura b~si ca: fotografías aéreas, rel evami en to topográfico, estudio po-
sible de trazado, posibilidad de usar tramoa:de ruta5 provinciales, costos, etc.
Sin embargo la realización de esta obra está sufriendo postergaciones consider.2_
bles.

'1. 2 Infraestructura de transporte aéreo.

La incorporación del servicio aéreo en Misiones es de capital importan-


cia, pues le permite comunicarse en forma rápida con Buenos Aires y los demás.:
centros del país. Las características geográficas del territorio de Misiones y
la precariedad de las comunicaciones terrestres, serran un justificado motivo pa
ra la construcción de una mayor cantidad de aeródromos en el interior de la pro
vincia. Existen solo tres aeropuertos dependiente~ de la Fuerza Aérea Argen:-
tina para aviones de pasaje y de carga, con el correspondiente apoyo logístico;
son: Posadas, Eldorado y Puerto lguazú.

8 Geografía económica.

8. 1 Evolución agraria de la provincia.

El tema correspondiente al presente trabajo ha sido compartido con la


Lic. Catalina Saugy la cual desarrolla los siguientes puntos: Té, tabaco, yer-
ba mate y ganadería, limitándome por lo tanto a tratar los demás temas del ca~í
tu!o de Geografía Económica. -

El desarrollo agrario de Misiones pasó por varias etapas de caracterís


ticas diferentes. El período de co Ionización efectiva, con la consiguiente ocu-:.
paci6n del territorio y !a expansión del área cultivada la podemos iniciar en
1881, fecha de formación de la gobernación de Misiones. La extensión de la
fr.ontera agrícola sufrió un rápido incremento durante los primeros años, supe
r.ando al mismo crecimiento de población, para luego invertirse el proceso. Du
r.ante los últimos años del siglo pasado se dan en la provincia una serie de cul-
tLvos incipientes destinados a la supervivencia. En general se trata de plantas
a_nuales como el maíz, el poroto o la caña de azúcar, sin trascender el marco~
conómico de Misiones. Solamente el tabaco inicia un ciclo de economía comer-
ciable. Para ,1,910 el 90% de la superficie cultivable, era dedicada a las plan-
tas anuales. En los primeros años de nuestro siglo aparece el cultivo de la yei:_
ba mate, primero en formaciones natural es, para luego pasar a las plantaciones.
Además aparece el arroz que enseguida totaliza el 47% de la producción del país.

En la década del 30 observamos el rápido incremento del área cultivada


con la introducción de especies que renuevan el panorama agrícola de la provin.
cia, con el tung, el té, la soja, los cítricos, etc. Tenemos en este período un
notable incremento de la producción de yerba mate. Los altos precios obtenidos
59

por estos cultivos perennes produjo una verdadera fiebre que ! levaría a un in-
controlado aumento de la superficie plantada con la consiguiente superpcpduc-
ción tras vario& afl\o• de crecientes rendimiento& en las plantaciones.

El tung, uno de los cultivos tradicionales de la provincia, fue introduci


do en Misiones en 1928, en el NE de Corriente• y en El dorado. Para el censo
agropecuario de 1937, ya se había colocado en segundo lugar en la producción
de la provincia; en e¡¡pecial después de las restricciones i.rnpue&tas a la recolec
ción de yerba mate. El área cultivada de esta CJltima representa el 40% y el tuñg

importantes .en la producción. Le &iguen en i~ortancia el t•


de'I 15 al 20Ja para l¡¡i década del 40• El tabaco y la mandioca mantienen l·ugares
y la soja.

En los últimos af\os los cultivos anuales son el 19, 7% del tirea cu 1tivada
y los permanentes el 80, 30/o, con lo cual los porcentajes iniciales se han inver-
tido. Es de esperar en los próximos af\os se logre un paulatino incremento de
las especies anuales en detrimento de las perennes que se encuentran en crisl&
(té, tung y yerba mate). Las dificultades de un proce~o distorsionado en la agri
cultura de la provincia ha llevado a un díf~ci 1 trance ~ los pequef\os y me di ar.ios -
productores. Es necesario dotarlos de un sistema credi licio ági 1, de un buen a-
poyo t~cnico, para permitirles erradicar los cultivos que ya no son rendidores,
por otros que encuentren buenos precios en el mercado. En sínte&is podríamos
afirmar qu~ la evolución agraria en la provincia está marcada por la incorpora-
ción de nuevas &reas al proceso productivo sin plan¡'ficación y control adecuado,
alentados por los altos precios obtenidos por algunos productos. No se tuvo en
cuenta cuajes eran las causales, muchas veces transitorias que provocaban una .
gran demanda en el, mercado. ,

S. 2 Cítricos,

La cosecha de cftr i cos· alcanza 1. 350. 000 t, esp er&ndo se 11 egar a


1. 500. 000 t para 1980. El c:onsumo de fruta alcanzará para esa fecha 1. 400. 000
t. Para la industrialización se logrará una duplicación de la demanda en concen
trados y jugos envasados, no así para ·otros derivados. Oe los cítricos elabora
dos, el 70% corresponde a bebidas gaseosas y jugos concentrados. Por lo tél'l:-
to, el futuro de esta fJxplotación agrícola no e$t& en la explotación directa de la
fruta fresca que encuentra co111>etidores europeos localizados en mucho mejores
condiciones. t,as mejores perspectiyas son para la producción industrial, cuy.o
monto podrá ser cjnco veces superior al actual. La recolección de cítrico~ en
Mi si enes ti ene un )ugar· destacado en la riqueza agrícola, si bien posee un carác
ter complementario en relación a otr-as zonas más cercanas al gran mercado coñ
sumidor. · · -

La rápida expansión de este cultivo en la provincia data de 1960 por las


dificultades de orden el im&tico o sanitario que tienen otros sectores del pafs y
por el gran aumento de la demanda de frutas para jugos y concent.rados. El área
de producción es de 9000 ha, notándose un claro incremento 'tiJ:.$·-~ltimos años.
Es de esperar que se dé en este caso, una orientación para los agric;u.ltores, ya
que se requiere para este rubro, una inversión a largo plazo, muy difícil de re-
traer despu~s de efectuada. El último Censo Nacional Agropecuario de 1969, in
60

dica: 13.531 ha plantadas, tendiéndose a aumentar rápidamente. La.producción


destinada al consumo directo, mantiene una demanda estable. Se prevé la expor
tación de jugos y concentrados al exterior con el cual se absorberá el· incremen
to en la producción. La demanda en este rubro supera a la oferta," con lo cual
se alienta la posibilidad de una ampliación de las plan taso industrial es.

El cultivo principal lo constituyen las naranjas tardías. En los últimos


años se han introducido con éxito algunas variedades de tempranas. Las plan-
taciones misioneras tienen baja productividad por las siguientes razones: a} em
pobrecimi en to gradual del suelo, b) debi lldad de las pi antas, c} mal estado sanl
tario de las plantaciones, d) falta de información adecuada para la difusión de -
las técnicas apropiadas de cultivo, e) falta de úso de abonos, f) insuficiencia
de tratamientos sanitarios, g) inadea.iado uso del agua, h) pie y ramas al descu
bierto, ¡) plantacione& mal efectuadas. La obtención ds variedades tempranas-
faci lita la colocación de la producción en el mercado metropolitano. Sin embar
go, en los últimos años se ha notado· una pesadez en la demanda, por la super_-
producción~ Esto ha reducido los beneficios para lo& productores que ven en-
carecer su producto por ur. flete costoso, que no afrontan otras área• abastece.~
doras más cercanas al mercado consumidor. Lo& hechos enunciados provocan-
también un endurecimiento en el sector industrial que se traduce en una reduc-
ción de los precios y en atraso en los pagos a sus proveedores. El 60% de la
producción se destina a la elaboración industrial. De esta manera es fáci 1 ims_
ginar, la· dependencia del productor a la demanda de la industria, cuando hay,
una superproducci ~n.

Las formas de comercialización se estructuran de acuerdo al destino de


la producción. Las plantas industriales demandan frutas para elaborar. Los
productores o las cooperativas realizan la selección y embalaje de la fruta pa-
ra su comercialización en estado fresco. Entre la5 principales industrias pode
mos citar: TRINARA.NJUS, CI TREX, CI TRI COLA GAFUPA, COOPERATIVA
DE ELOORADO, etc.

8. 3 Tung.

Este arbusto oleaginoso, ti ene requerimiento ecológicos si mi lares a la


yer_ba mate, por lo cual FU área de dispersión es semejante a este cultivo. Más
del 90% de la superficie a.iltivada con tung, se encuentra en Misiones. Las pri
meras plantas de tung fueron introducidas al noreste de Corrientes y noreste de
M.isiones. La producción ocupó durante mue~ años una condicion el.e marginal
y se~undaria en la economía misionera, hasta la década del cuarenta. El au¡::¡~
de este cultivo se debe en gran parte a la coincidencia con.la primera crisis de
la yerba mate que incide en la búsqueda de una diversificación de la producción.
A su vez la Segunda Guerra Mundial impidió:que los paises importadores se pue
dah abastecer en China. Con la finalización del conflicto, este país cambia su-
slstema de gobierno, adoptando el sistema ·socialista quedando así," al margen
del mercado occidental. La falta de producto para los importadores provocó
un brusco aumento en los precios que llegó al 270%.

Los agricultores misioneros llegaron así a encontrar un poderoso ali-


ciente para efectuar plantaciones en forma desmedida, aumentando diez veces
el área sembrada. Esto llev~ a una producción de 605 t. (1938-39) a 180. 000 t.
61

en 1950-55. Argentina se transformó en el primer exportador mundial. Hacia


1960, se comienzan a advertir los primeros síntomas de la crisis. ~· precios
comi er·z.n1 a sufrir fuertes variaciones. Dice Raddavero: 11A partir de 1950, el
con<=u•.-.c' iota! tierde a decaer a un nivel muy bajo. Los problema• de cosecha en
el h&n:::~'"'r'io est~~a ausencia de suficientes.~s.tocks 11 hicierQtLelevar el pi-e-
clo de· p;itoducto a oiveles extraordinario&. Eil volumen co.-sumido no .5e ha al_te
rado :::- g dicativamente pero se encuentra a niveles mti.s bajos de. post_ 9-1erra. La
¡ nestabi 1 ¡dad de los precios y de la oferta y la competencia de los producto& si rite
ticos, ha eliminado toda poiiibilidad de recuperacibn del com;umo a SU5 niveles '3!J.
tiguos. La profunda declinación ulterior de los precio• tuvo mayores complicacio.
nes, pues significó-menores ingresos;; a lo• productore• y parte de la industria sf
bredil]1ensionada quedó en capacidad ociosa". ·

Ante la crisis del mercado internactonal, los principales importadores co-


mo EE.UU., Japón y Reí no Unido, austi tuyen el aceite de tung por productos sin-
téti cos, y en el caso de EE.UU. protegen con ·impuesto• aduaneros, su producci·ón
interna floreciente. A la crítica situación existente se sumb la competencia de la-
producción paraguaya, que ingreiiil al mercado internacionai a menores precios.

a. 4 Producción forestal.

El bosque natural ocupa en la provincia una extensión de 1.aoo.000 ha,


totalizando el 60% de la superficie de la provincia. Se mantiene una reserva de
bosques del orden de las 295. 000 ha, cuya explota~ión est~ reglamentada por las
leyes y ordenanzas de la gobernación y de la Dirección de Bosques, que iodica
las condiciones mínimas de diámetro a talar, regímenes de propiedad, etc. Den-
tro de !a reserva ·se halla la más gran extensión de conffera nativa, la del Pino
Paraná, que ocupa una extensión de 200. 000 ha, con una superficie total de
120. 000 ha. El potencial productivo del bosque mi &ionero puede estimarse, ex-
cldda la leña en 7. 000. 000 de m3; para las existencias de: la leña pueden calcu-
1ar se en 70. 000. 000 i113. El bosque misionero es heterogéneo con una exi stenc-l a
superior a noventa especies Clti les, de las cuales por lo menos veinte, tienen uso
comercial. La ampliación del número de especies explotal:>Lfs estar~a dado por la·
mayor receptividad del mercado de árboles no usados con lo cual la r.entabi lidad ·
del bosque se vería notablemente mejorada.

Misiones cuenta con la mayor &rea de coníferas implantadas, alcanzando


esta a 71.000 ha, para 1981. De ellas 23.000 corresponden al pino de Brasil y
48. 000 ha a pinos resinosos de origen europeo. El área total iza el 80% de los
bo.:;ques implantados. En los últimos años se nota una clara preferencia hacia los
pinos resinosos, por su crecimiento más acelerado,por la calidad de su fibra y
sus caracter~sticas reconocidas como madera de obra. Ambas fibras largas ob-
tenidas de estas dos especies, permiten u~·"a producción complementaria.

Las plantaciones forestal,es gozan de promociones fiscale!S y crediticias.


Las sumas invertidas en tareas de forestación son deducibles de gravámenes de
réditos, así como también es desgravable el 70% de las inversiones efectuadas
en empresas forestales. Los mayore• costos para la forestación &on en la ;¡¡ona
norte de la provincia debido a la necesidad de eliminar previamente la densa cu-
bierta vegetal que lo cubre para la posterior reimplantación del terreno. Loe m~
62

yores costos de producción se ven compensados por los relativo• bajos precios
de las tierras y condiciones ecológicas y decrecimiento óptimas. Dado que la
erogación total financiera en concepto de tierra y costo de forestaci~n es apr~
ciablemente igual a todas la5 zonas forestales del país, y teniendo en cuenta que
en otras regiones el valor de la tierra es mucho más 'elevado que en Misiones,
surgen el aramente 1as ventajas de forestar en la provincia en razón del mayor
monto desgravable de réditos y los más cortos plazo& de crecimiento que impli-
can una más rápida rentabilidad de la· parcela. Debido a laa excelente& condi-
ciones que ofrece la provincia para el desarrollo de la actividad forestal, el Se.r.
vicio Forestal Nacional la señala como polo de forestación, y cuenca futura de
abastecí miento de madera de coníferas para aserradero&~ la industria del papel
y de los terciados. ·

Las industrias que se alimentan de la materia prima de los bosques son


varias. Misiones cuenta con 450 aserraderos que producen anualmente
70. 000. 000 de pies cuadrados, lo que total iza el 30 % de la producción nacional
de madera de aserradero, v el 14% del consumo del paf s. En 1969 Misiones
produjo el 20% de los rollizos consumidos en el país, o sea 385.000 m3 que fu~
ron procesados en la provincia. La producción de ·Pino Brasi 1 no alcanza a C_!:!
brir la demanda del mercado argentino por los que se debe importar una buena
proporción, tendí endo esta cifra a reducirse lentamente por un aumento en la
producci6n argentina. Existen en Misiones diecinueve fábricas de terciados
con una producci~ anual de 38. 572 m3, total izando el 77, 1 % del total del paf s.

Las extensas &reas de bosques implantados alimentan dos plantas indus


triales de gran importancia que son Celulosa Argentina S.A. y Papel Misione=
ro S.A. destinadas a la elaboración de papel. La planta de Celulosa Argenti-
na S.A. está ubicada en Puerto Pi'ray, cuenta con:una capacidad de producción
diaria de 120 t de pasta de bisulfito de sodio, con proyección a 140 t, lo cual
implica un consumo diario de madera de araucaria agustifolla de aproximadamen
te-·630 t, o sea 220. 000 t. de madera de dicha especie al año. La planta no coñ
sume madera de pinos resinosos; no obstante, la empresa cuenta con.~un proyec
to·J?.lara la instalación de una planta de sulfato con una producción de 350 t, que
si91ifican 1. 800 t diar-..ias adicionales de madera, la cual consumir~a araucaria
y ·Pi no resinosos.

La planta de Papel Misionero S.A. está ubicada en las cercanías de Puer


to Mineral. El surgimiento de la actividad maderera en la provincia a niveles
muy importantes llevó a la necesidad de crear una ind.lstria que absorbiera la
m~dera proveniente de los raleos efectuados en las plantaciones de araucaria o
de pino el loti. Además, el mercado argentino se encontraba y se sigue encontran
do.en una gran falta de papel. La posibilid~d de obtener materia prima a costos-
reducidos, hizo nacer la idea de instalar una planta productora de celulosa de
fibra larga para la obtención de papel de alta resistencia. En el país existen
es~ablecimientos dedicados' a este tipo de papel,pero la materia prima para el lo
se importa en un 100%. La planta se encuentra montada en su totalidad y se
h~IJ realizado las pruebas con buenos resultados. Sin embargo, dificultades
financieras han. par:alizado la producción dejando estéril el fruto de grandes
esfuerzos. Si tenemos en cuenta la situación del mercado interno e internacio
n~! podemos apreciar la_urgente necesidad de:poner en marcha este importante
complejo industrial.
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En la provincia se crearon varios parquee y reservas para resguardar


los bosques naturales. Estas; ~reas est&n en proyecto de ser ampliadas con otras
nuevas. Misiones cuenta con excelentes· condiciones ecológicas para desarrollar
la explotación de madera; a lo cual debemos sumar buenas· comunicaciones, en re
lación a otras zonas forestales del país. La demanda del producto será constan-:
te y 'en aumento, siendo por lo tanto una de las actividades económicas de mejor
futuro para la provincia. ·

Por razones de espacio disponible me veo en la necesidad de no considerar


en este resumen otros aspectos importantes de la economía de la provincia que se
encuentran desarrolladas en el informe inédito.

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