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BOGOTA - COLOMBIA
10-03-2023
Bosquejo
3. Definición de Canon
Tal vez no haya habido mayor ataque en el cristianismo que considerar cualquier
parte de la Biblia como si ella no fuera la palabra de Dios. Muchos opinan que es un
libro más que fue escrito por hombres, sin embargo, al comprender el proceso de su
Testamento, es por esta razón que el presente trabajo pretende realizar un análisis sobre
como Dios nos dio el N.T, ya que hay bastantes incógnitas en los creyentes, que usan
iglesia primitiva y los parámetros que usaron para poder definir que libros estarían
dentro de él, al hacer esto podemos estar seguros de que hoy contamos con el mismo
El Canon de las Escrituras comenzó cuando aún este no había sido formado y la
razón es porque comienza con una promesa, si bien el cristianismo nació ya con libros
cuando vemos las Escrituras mismas, Jesús es el cumplimiento de todo lo que ella es (Jn
5:39) y vemos también revelado aquí algo mayor que lo que fue revelado en el Antiguo
pacto (2 Cor 3:8). Jesús es la nueva revelación y el daría nueva revelación, esta promesa
de que tendríamos un recuerdo de lo que fue este mensaje fue dada a los discípulos por
Jesús, “Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque
no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber
las cosas que habrán de venir” Jn 16:13. Los discípulos aún no habían comprendido la
implicación de la revelación de Jesús, pero esta era la promesa, el Espíritu Santo los
guiaría a toda la verdad, por lo tanto, cuando ellos recibieran estas palabras, estas eran
las que habían de ser registradas y las que guiarían a la iglesia, por lo tanto, lo que debía
ser canonizado, eran las mismas palabras de Jesús y aquellas palabras que el Espíritu
No encontramos en la literatura ningún libro que haya sido escrito por Jesús, sus
palabras fueron atesoradas y repetidas por aquellos que le escucharon y luego fueron
repetidas y enseñadas a otros, para los que creían en Jesús sus propias palabras y las
trasmitidas por sus mensajeros tenían la misma autoridad que las palabras de Moisés y
los Profetas, estas fueron trasmitidas como el elemento más importante de lo que sería
la “tradición” del cristianismo antiguo, estas palabras fueron enseñadas por los testigos
oculares (1Jn 1: 1-3. 2; 2 Ped 1:16), y fueron recibidas por otros no solo como una
tradición oral sino como la confesión de fe1, estas palabras que trasmitían estos testigos
directos, eran también el cumplimiento al encargo de Jesús mismo, pues él les había
nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; 0 enseñándoles que guarden todas
las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el
dado por Jesús a sus apóstoles, ellos no parecen haber sentido la necesidad de tener otro
libro de texto sagrado aparte del Antiguo Testamento.2 Sin embargo como veremos a
continuación, la iglesia se vio obligada a esclarecer cuales de los libros que rondaban en
1
Frederick F. Bruce, El canon de la Escritura. Trad. Elena Flores Sanz (Barcelona: Clie, 2002), 18.
2
Gonzalo B. Camargo, Breve historia del canon bíblico 3° Ed (México: Iluminar, 1980), 35.
II. La urgencia de construir un canon
de la iglesia, pero en realidad en muchos casos vemos que esto fue una reacción, tal es
el caso del canon del Nuevo Testamento, este surgió por necesidad y en respuesta a
algo.
No podemos pensar o hablar del canon del Nuevo Testamento sin que traigamos
al asunto a Marción quien fue un líder religioso del siglo II y denominado por la iglesia
como un hereje.
notables era que el Dios del Antiguo Testamento era un Dios malo, él quería deshacerse
compuestos por judíos y libros con tal influencia. Marción compiló una lista de libros
que deberían ser, según él, las Escrituras cristianas. Estos libros eran el Evangelio de
Lucas y las epístolas de Pablo, puesto que Marción pensaba que Pablo era el único entre
iglesia tuvo que reaccionar y establecer un canon, antes de Marción no existía una lista
de libros cristianos, nadie había pensado antes en hacer una lista de libros que
3
Justo L. Gonzales, Historia del cristianismo. Tomo I (Miami, FL: Unilit, 1994), 83.
4
Gonzales, Historia, 84.
III. Definición de canon
Para las personas del común un canon puede entenderse básicamente como una
norma establecida por la cual se mide todo lo demás, esta definición es acertada y
Esta definición anterior nos ayuda a entender que es un canon, y que cuando
hablamos de canon bíblico nos referimos a la lista de libros que lo conforman, sin
embargo, es necesario hacer una aclaración sutil, y es que el canon no es definido por la
iglesia solo aceptado, si la iglesia fuera quien define el canon entonces ella seria la
definición de canon, las palabras de Calvino tal vez nos ayudan a entender esta
aclaración “Porque si la Iglesia cristiana fue desde el principio fundada sobre lo que los
que la aprobación de tal doctrina preceda y sea antes que la Iglesia, la cual ha sido
fundada sobre dicha doctrina; puesto que el fundamento siempre es antes que el
edificio.”6
cómo empezó a formarse, Bruce, menciona, como por ejemplo Tomas de Aquino dijo
5
Bruce, El Canon, 17.
6
Juan Calvino, Institución de la Religión cristiana, I, VII, III. 8° ed, vol. 1 (Barcelona: FELiRe, 2019),
37.
establecer los libros del canon, añade que ellos son proporcionados por la inspiración
Los primeros cristianos tal vez no sentían preocupación por establecer los
las Escrituras del A.T como suficientes y para confirmarla y entenderla se valían del
Algo que puede quedar claro es que cuando la Iglesia entró en el proceso de
establecer un Canon usó criterios para poder definir que libros estarían en el canon, hay
algunos de estos criterios que son universalmente aceptados, por ejemplo, en el libro El
canon del Nuevo Testamento por el erudito F.F. Bruce, encontramos los siguientes
Inspiración.9
El Dr Bear nos da los siguientes citeriores en forma de pregunta que cubre los
7
Bruce, El Canon, 18.
8
Bruce, El Canon, 259.
9
Bruce, El Canon.
A. Criterios de aceptación para los libros del Nuevo Testamento
apóstol?
Este criterio es llamado por F.F Bruce como Autoridad apostólica, la razón de que el
criterio sea autoridad y no autoría es que como notamos, no todo el N.T fue escrito por
los apóstoles, tal es el caso de Marcos, Lucas, Hechos, Judas, Santiago, si la iglesia
hubiera utilizado el criterio de autoría muchos de estos libros habrían quedado fuera,
sin embargo, vemos que estos libros se escribieron bajo la supervisión apostólica,
todos los libros cuentan con una autoría interna, es decir el libro o la carta no menciona
el autor, tal es el caso, del libro de Apocalipsis, Hebreos, Lucas Etc. El hecho de que
hoy sea claro para la mayoría la autoría de estos libros debe notarse que es parte del
proceso que hizo la iglesia para canonizar estos libros, aunque estos libros no tienen la
firma de los autores la tradición y quienes recibieron estos libros conocían tan
la tradición de que estos libros fueron escritos por algún apóstol o alguien bajo
necesita estar seguro que este apóstol era en verdad un apóstol y al igual que los
profetas del Antiguo Testamento encontramos que a los apóstoles se les fue dado el
poder para hacer señales, el Apóstol Pablo mismo, uno de los apóstoles más
cuestionado, se defendió a si mismo diciendo “Con todo, las señales de apóstol han sido
hechas entre vosotros en toda paciencia, por señales, prodigios y milagros” (1 Cor
12:12).
Otro de los parámetros que la iglesia usó para definir el canon era si el libro a evaluar
sarampión, no tenía problema con que una de las iglesias leyera esta carta, pero cuando
10
Bruce, El Canon, 261.
se enteró que el relato allí narrado tenía influencia del docetismo, decidió visitar a la
iglesia para corroborar que lo que se enseñaba allí no había incurrido en herejía .11
Una obra solo podía ser reconocida cuando contaba con un reconocimiento
universal12, este parámetro no admitía que cartas que se manejaban solo en ciertas
localidades o iglesias fueran instituidas como parte del canon, debía haber un
11
Bruce, El Canon, 264.
12
Bruce, El Canon, 265.
Bibliografía
Bruce, Frederick F., El Canon de la Escritura. Trad. Elena Flores Sanz. Barcelona:
Clie, 2002.
Calvino, Juan. Institución de la Religión Cristiana I, VII, III. 8° ed, vol. 1 Barcelona:
FELiRe, 2019.
Camargo, Gonzalo B. Breve Historia del canon Bíblico. 3° Ed. México: Iluminar, 1980.
Gonzales, Justo L. Historia del cristianismo. Tomo 1. Miami, FL: Unilit, 1994.
Thielman, Frank. Teología del Nuevo Testamento. Miami, FL: Vida, 2006.