Kotosh es un sitio arqueológico ubicado en el distrito, provincia y departamento de Huánuco, en Perú. Se compone de una serie de edificios superpuestos con 6 periodos de ocupación continua que datan desde el Arcaico Tardío hasta el Intermedio Temprano. El más famoso de sus recintos, que se encuentra expuesto actualmente al público, es el Templo de las Manos Cruzadas, llamado así por tener dos altorrelieves en barro en forma de sendos brazos cruzados, cuya antigüedad se remonta al 1800 a. C. (fase Kotosh-Mito). Entre los investigadores y arqueólogos que han estudiado este sitio arqueológico se encuentran Javier Pulgar Vidal, Julio César Tello y Seiichi Izumi (este último fue el descubridor del Templo de las Manos Cruzadas). ● Descripción Kotosh está conformado por una serie de edificios construidos de piedra canteada con barro, de plantas cuadrangulares y sobre plataformas rellenadas con tierra de cantos rodados, piedras canteadas y barro. Estos recintos son relativamente pequeños, de entre 4 y 6 m de largo, aunque también hay de más de 10 m de largo. Todos carecen de ventanas y probablemente tenían techos planos. En el interior de cada recinto se aprecia un piso cuadrangular que consta de dos niveles: uno más bajo, en forma de piso hundido, rodeado por otro nivel más alto a modo de banqueta. El nivel bajo contiene al centro un pequeño pozo que servía de fogón, conectado a un pequeño conducto subterráneo de ventilación. Las paredes internas (y a veces las del piso hundido) tienen nichos de diversos tamaños, y en algunos casos pinturas sencillas o relieves en forma de brazos cruzados, como es el caso del Templo de las Manos Cruzadas. Tradición Kotosh o Mito Esa tendencia de hacer estructuras ceremoniales en forma de piso hundido con un fogón al medio (donde seguramente se quemaban las ofrendas) ha sido denominada Tradición Religiosa Kotosh, Tradición Mito o Tradición de los Altares del Fuego Sagrado. Sin embargo, hay ejemplos más antiguos, como los hallados en La Galgada (Pallasca, Áncash) de hace 2380 a. C. y Huaricoto (Marcará, Áncash), con una antigüedad de 2796 a. C. Se han hallado también vestigios en Tantamayo (Huanuco), en Caral (Supe) y en Huacaloma (Cajamarca), por lo que debió ser una tradición muy extendida en los Andes norcentrales del Perú, desde la Costa hasta la ceja de Selva. Representación de unas manos cruzadas, modelada en terracota, hallada en Kotosh. Como ya se anotó, el Templo de las Manos Cruzadas es el más célebre de los recintos ceremoniales hallados en Kotosh. Tiene forma rectangular y mide 9.5 m de largo por 9.3 m de ancho. Se ingresaba por una portada de 2.15 metros de alto. Sus muros, de 2.4 a 2.8 m, fueron enlucidos con una fina capa de barro color blanco-crema y engalanados con nichos y hornacinas grandes de forma trapezoidal. Debajo de dos de estos nichos se descubrieron las famosas manos cruzadas modeladas en terracota, que los arqueólogos tuvieron sumo cuidado de no dañarlo. El significado de esta representación es un misterio. Los investigadores japoneses dijeron que podía significar amistad, acercamiento, bondad. Otros estudiosos opinan que las manos fueron el elemento fundamental en el templo, pieza básica de un rito de la que sería la primera gran religión americana. Es más bien probable que el relieve pudiera ser parte de una efigie mayor, que ya no se conserva.