Está en la página 1de 49

CONCEPTO Y

CARACTERIZACIÓN DE LA
VICTIMA
Concepto y caracterización de “víctima”.

Una de las principales implicaciones de las violaciones


graves a los Derechos Humanos, es que crean una
nueva condición psicosocial para todas aquellas
personas que son sus receptoras.

Esta es la condición de “víctima”.

2
Concepto y caracterización de “víctima”.

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los derechos


Humanos (1985) refirió que víctimas son:

“…las personas que, individual o colectivamente, hayan sufrido


daños, inclusive lesiones físicas o mentales, sufrimiento emocional,
pérdida financiera o menoscabo sustancial de los derechos
fundamentales, como consecuencia de acciones u omisiones que
violen la legislación penal vigente en los Estados Miembros, incluida
la que proscribe el abuso de poder.”

3
Concepto y caracterización de “víctima”.

Además:

2. “Podrá considerarse "víctima" a una persona, con arreglo a la presente


Declaración, independientemente de que se identifique, aprehenda, enjuicie o
condene al perpetrador e independientemente de la relación familiar entre el
perpetrador y la víctima. En la expresión "víctima" se incluye además, en su
caso, a los familiares o personas a cargo que tengan relación inmediata con la
víctima directa y a las personas que hayan sufrido daños al intervenir para
asistir a la víctima en peligro o para prevenir la victimización”.

4
Concepto y caracterización de “víctima”.

Se considera que una “víctima”, es toda aquella persona


receptora de un acto delictivo o violento, sus familiares,
amigos, equipos de emergencia y todos aquellos que
entren en contacto directo o indirecto con el hecho y su
receptor.
La victimización, es un fenómeno complejo y de alto
impacto en el contexto individual, familiar, comunitario y
social.

5
Concepto y caracterización de “víctima”.

Refieren Montenegro y Piper (2009) que a partir de los


diversos hechos de violencia en distintos lugares de América
Latina, la categoría de víctima ha servido como un eje
articulador en torno a las luchas de Derechos Humanos.

Esta categoría se sostiene en dos conceptos centrales, la


reparación y la reconciliación.

6
Concepto y caracterización de “víctima”.

Entendiendo que derivado de actos de violencia social, se genera un trauma


social, en el que no solo se ven afectados los receptores directos, sino la
sociedad en su conjunto, entendiéndose dentro de esta lógica que el trauma
debe ser reparado, partiendo de que esto permitiría de alguna manera la re-
conciliación social, asumiendo que esta favorecería la re-construcción de la
convivencia pacifica.

Para que los estados realicen de manera efectiva y adecuada la reparación, y


sea posible la reconciliación, es necesario delimitar a quién se considera una
víctima de violaciones a los derechos humanos.

7
Concepto y caracterización de “víctima”.

Las marcas de violencia que han quedado sobre las víctimas,


constituyen un elemento de articulación y construcción de identidad;
generándose distintas categorías dentro de este amplio grupo de
experiencias.

La identidad de víctima, se ha constituido como eje articulador de


diversos procesos sociales, en los que se involucran tanto acciones
del estado, cómo de víctimas organizadas para obtener un
reconocimiento a su situación y una justa reparación del daño.

8
Concepto y caracterización de “víctima”.

Esta categórica identitaria, tiene un efecto de fijación de la condición de la persona como un


sujeto dañado, lo que paradójicamente dificulta su emancipación de esta situación que
objetiviza.

Uno de los riesgos: “una fijación en que todas las personas catalogadas como
pertenecientes a la categoría en cuestión, quedan envueltas en una misma definición” (Ema,
2006; en Montenegro y Piper, 2009); con la consecuente perdida de individualidad en la que
pareciera que todas las experiencias y perdidas de la violencia, son la misma.

Otro: Tomar la reparación como bandera política, en cada acto reivindicatorio, no exista una
re-elaboración de la categoría social e institucional de víctima, dejando inalterada la
concepción identitaria y las posibilidades de movilidad sociopolítica de los miembros de
esta categoría.

9
Concepto y caracterización de “víctima”.

En no pocas ocasiones, las víctimas no solo deben luchar contra su


situación, sino además contra la criminalización judicial y social,
además de des-estigmatizarse de los calificativos de subversivo o
enemigo público.

La representación social de víctima, incluye aspectos emocionales,


cognoscitivos y actitudinales; con variaciones estos entre las víctimas
primarias, secundarias o terciarias.

10
Concepto y caracterización de “víctima”.

Desde el imaginario colectivo, las victimas son vistas como frágiles y


vulnerables, incluso dejándose engañar en ocasiones por inocentes;
mirándolas desde una perspectiva humanitario-victimista, en el que
son merecedoras de consideración y receptoras de ayuda.

Las víctimas primarias se asumen como parte de una sociedad


dañada, sin sentimientos de autoconmiceración, a diferencia de las
secundarias o las transgeneracionales, que presentan una alta carga
de miedo, dolor y autocompasión.

11
Concepto y caracterización de “víctima”.

Paniagua-Solórzano (2010): Que las personas se perciban o


consideren como víctimas, siempre está atado a un contexto histórico
y social específico; por lo que esta condición es un proceso
netamente psicosocial (NO CLÍNICO).

La asunción de víctima, tiene una relación directa con las secuelas


que circulan en la población, o por procesos de exclusión o
vulnerabilidad propiciados por los discursos en torno a las victimas y
su condición.

12
Concepto y caracterización de “víctima”.

Los recuerdos y elaboraciones de las situaciones de violencia no tienen una


normativa espontanea, sino que en diversas ocasiones las personas las han
dirigido hacia la satisfacción de necesidades o carencias específicas; ya sean
políticas o económicas; generando esto una inscripción en la memoria colectiva
y social de lo traumático en el cuerpo de aquellos que lo enuncian; “La
víctimidad”.

VICTIMIDAD es construida a partir de varios elementos que le permiten


sostenerse en la realidad y el imaginario social; uno de estos es el arraigo de
las personas víctimas a las perdidas, ya sean de familiares, posesiones o
tierras.

13
Concepto y caracterización de “víctima”.

Este arraigo, genera un importante nivel de ganancias secundarias; de ahí que las
personas en condición de victimidad, lleguen a valorar su identificación como
víctimas, a pesar de costos cómo la estigmatización, la exclusión y el sufrimiento
mental emocional; elementos que paradójicamente la refuerzan.

Un elemento fundamental para la verdadera reparación del daño, sea que aquellas
actividades que se emprendan para esto, tengan un importante componente de des-
escencialización de la victimidad.

Las personas que hayan sido receptoras de violencia, vayan reconstruyendo su


subjetividad como sujetos sociales, alejándose paulatinamente de la categoría de
víctima.

14
Concepto y caracterización de “víctima”.

Es claro que para la atención por fines prácticos, las


instituciones generalicen y homologuen la atención; de ahí
que parte de los procesos de atención, considere que la
persona no es una víctima, sino alguien que estuvo expuesto
a una experiencia vital de violencia.

15
Re-victimización o Victimización
secundaria
Re-Victimización o Victimización secundaria.

Surge a partir de que la persona que ha vivido una


experiencia traumática, y al entrar en contacto con
las autoridades o instituciones del estado, es
receptora de tratos injustos e incluso puede ser
criminalizada por el mismo acto del que fue receptora
(Martorella, 2011).

Nueva vulnerabilidad.

17
Re-Victimización o Victimización secundaria.

Laguna-Hernández (2007: victimización secundaria, como


una variable que consolida la cronificación de las secuelas
psicológicas de la Violación de Derechos Humanos (VDH) o el
acto violento.

Derivada del choque entre las expectativas de la víctima y la


realidad institucional con que se encuentra, por lo que en
general se considera que produce efectos más dañinos que
el evento victimizante primigenio.

20
Re-Victimización o Victimización secundaria.

Factor cronificante y dañino, se debe a la ambigüedad en que el


sistema instala a la víctima (en caso de personas que han
experimentado violaciones a sus derechos humanos, sería una segunda
ambigüedad).
El que debe cuidar, proteger y restablecer, deja nuevamente al sujeto
en situación de fragilidad, vulnerabilidad y exclusión,
experimentando muchas veces un primer o segundo estigma.

Indicador de las características revictimizantes de las instituciones


de un estado, las cifras negras, de impunidad y de percepción de
seguridad y confianza.
21
Re-Victimización o Victimización secundaria.

La victimización secundaria, puede ser


perpetrada por las personas (ya sean servidores
públicos o miembros de ONG´s) que brindan
algún tipo de atención a los agraviados, o por
las instituciones encargadas de brindarla.

22
Re-Victimización o Victimización secundaria.

Instituciones públicas:

• Falta de pericia o entrenamiento respecto al trato y cuidado.


• Desgaste emocional por deficientes dinámicas laborales o
interpersonales.
• Identificación psicopatológica, revive su propia situación
traumática (Castañeda, 2010).
• “Victimización terciaria”, que es “…la estigmatización que la
sociedad realiza luego sobre la víctima…” (Martorella, 2011).

Elaboró: Dr. José Manuel Bezanilla 23


Re-Victimización o Victimización secundaria.

Puede presentarse una completa negación de los derechos


humanos, debido a la falta de tacto y respeto de aquellos
implicados en el proceso jurídico y a su completo desdén de la
experiencia de la víctima (Oficina de Derechos Humanos y Justicia
de Córdoba, 1987).
También revictimizan: las escuelas, los hospitales, instituciones
religiosas y medios de comunicación y de atención a víctimas.

Tomando una posición de autoridad, llegan completamente a


desestimar el discurso de la víctima en valor de otros medios de
recabar información.

24
Violencia Institucional.
Aquella que se encuentra cargada de una
dimensión moral, al caracterizarse por una
objetivación y desconsideración hacia la
persona, presentando fundamentalmente
un carácter simbólico y administrativo
(Pereyra, 2015).

25
Violencia Institucional.
Manifestación de la violencia estructural
se ubica en el lugar intermedio de las
luchas simbólicas, en la frontera entre lo
tolerable y lo intolerable; lo que es
causante de sufrimiento social, colectivo,
grupal, familiar e individual.

26
Violencia Institucional.
Rene Käes (1989): Las instituciones pueden ser
causantes de sufrimiento, a partir de la existencia
de un choque entre la realidad psíquica
institucional y el psiquismo de las personas, al
generar una externalización de lo interno, donde se
sacrifica una fracción de la unicidad consciente e
inconsciente, para la conformación de una
colectividad co-consciente y co-inconsciente.

27
Violencia Institucional.
La institución:
como el conjunto de formas y estructuras sociales
instituidas por la “Ley” y la costumbre, que regulan
las relaciones interpersonales, pre-existe a los
sujetos, se impone e inscribe en la permanencia
psíquica (Idem.).

28
Violencia Institucional.
La institución:
para el adecuado funcionamiento institucional, es
menester que se mantenga un equilibrio sinérgico
entre lo instituyente y lo instituido.
Entre su función simbólica y la manera de ser de la
institución; cuando se mantiene este equilibrio esta
es un continente concreto de imaginarios que
funcionan en conjunto.

29
Violencia Institucional.
Las instituciones de asistencia y atención victimológica:
• Su objetivo es la rehabilitación o reivindicación de las
personas.
• Reciben una significativa carga de demanda material y
afectiva.
• Se obligan a generar elementos dinámicos, estructurales y
simbólicos que contengan y canalicen estas.
• Desarrollen mecanismos defensivos, que subordinen su
función, a procesos burocráticos.
• Lo instituido, suplante a lo instituyente y se conformen
como instituciones violentas y causantes de sufrimiento.
30
Violencia Institucional.
Kaës (2004): La noción de espacio institucional es
compleja, y se ve caracterizado por el objetivo con
el que un colectivo de personas se agrupa para
cumplir con una función social encomendada, este
se ve permeado por los parámetros de su
organización y legislación en el campo de las
relaciones sociales.

31
Violencia Institucional.
Las características del objeto de tarea primaria
genera zonas específicas de sufrimiento.

Por ejemplo: cuando el mandato es “La atención y


reparación de las víctimas”, el núcleo del
sufrimiento, se encuentra en la pertenencia o no
pertenencia a la categoría social de “víctima”.

32
Violencia Institucional.
Crea zonas de perturbación, identificación y
conflicto.
Detonando dispositivos de distinción (yo no soy
víctima ó tú no eres víctima), protección (frialdad,
indiferencia, tortuguismo y agresión) y
diferenciación contra el riesgo de contaminación,
transformación o depositación.

33
Violencia Institucional.
Al no tener la estructura ni los medios adecuados
para la tramitación y canalización de la demanda.

Generará que tanto la institución, cómo sus


miembros, desarrollen actitudes defensivas contra la
demanda ya sean de manera activa (actitudes y
comportamientos agresivos), o pasiva (omisión de
funciones, perdida de documentos, etc.)

34
Violencia Institucional.
• Las instituciones de cuidado, convocan al deseo y poder de
curación y reparación.
• Las coloca ante la posibilidad de un ejercicio de poder sobre la
vida y la muerte, la rehabilitación o la exclusión.
• Conforma el nudo de conflicto primario entre el deseo de
curación y el prohibido de destrucción.
• De la manera como se dirima este conflicto, se conformará la
estructura y funcionamiento de la institución.
• Manifestándose en una manera de consciencia sobre la realidad
psíquica y el trato a los usuarios y beneficiarios.

35
Violencia Institucional.
• Si no se resuelve al interior de la institución el conflicto
patogénico.
• Comienza a actuar de manera sintomática.
• Ejecuta tareas desviadas o subsidiarias.
• Como una compensación de la falta.
• Sus miembros como resultado de la alienación y los usuarios a
consecuencia de la agresión, manifestarán el conflicto.
• Actuándolo en la interacciones que tengan al interior y al
exterior.
• Genera una fuente de sufrimiento y potencialmente de
victimización secundaria.

36
Violencia Institucional.
• “El rasgo más corriente del sufrimiento de
origen institucional es que es producido por
un mal funcionamiento de la institución
misma… su organización instaura una
distancia insuperable entre la tarea, la
formación que exige y los medios
disponibles para realizarla…” (Idem.).

Elaboró: Dr. José Manuel Bezanilla 37


Violencia Institucional.
Kaës, divide los procesos institucionales generadores de
sufrimiento psíquico en:
• a) La inversión del objetivo institucional.

• b) El incremento patológico de la institución.

• c) El mimetismo patológico.

38
Violencia Institucional.
a) La inversión del objetivo institucional; cuando la
institución se desvía de su meta y termina
promoviendo exactamente su opuesto.
Por ejemplo, una institución que se dedique a la
atención y apoyo a víctimas que termine
provocando revictimización y generando más
víctimas.

39
Violencia Institucional.
b) El incremento patológico de la institución; la
institución refuerza o crea patología entre
pacientes, usuarios y trabajadores, en la medida
en que hay una crisis en la relación dinámica de
los mismos.
Por ejemplo, el trato durante la entrevista a
víctimas, la falta de sensibilidad y especialización
teórico-práctica puede provocar el incremento de
angustia y malestar de la persona.
40
Violencia Institucional.
c) El mimetismo patológico; cuando la institución
mantiene la misma problemática que pretende tratar.
• Es decir, todas las instituciones afectadas por un
“Estado” violento, cuyas únicas soluciones giran en
torno al maltrato al que son sujetos sus miembros en el
día a día, actúan conforme a lo que su cotidianidad les
ofrece.
• ¿qué provoca? Que permanezca renovándose el ciclo
revictimizante y de violencia.

41
Violencia Estructural.
Parra y Tortosa (2003): Resultante de los procesos de
estructuración social originados desde el sistema como
totalidad, bajando hasta las mismas bases de población sin
requerir ningún acto directo para ser efectiva sobre las
condiciones de vida y posibilidades de desarrollo de las
personas.

42
Violencia Estructural.

Privación elemental de necesidades humanas, que se


encuentra presente de manera continua y sistemática
mediante la organización y funcionamiento de las
instituciones (Pérez-Mendoza, 2013), con una amplia
capacidad para confundir a los individuos, debido a su
complejidad invisible (ibídem).

43
Violencia Estructural.
Privación elemental de necesidades humanas, que se encuentra
presente de manera continua y sistemática mediante la
organización y funcionamiento de las instituciones (Pérez-
Mendoza, 2013), con una amplia capacidad para confundir a los
individuos, debido a su complejidad invisible (ibídem).

44
Violencia Estructural.
Esta manifestación profunda y casi siempre normalizada e
invisibilizada forma de violencia tiene las siguientes
características:
•Impide a las personas el ejercicio pleno de sus derechos humanos y la satisfacción
de sus necesidades básicas.

•Es la que por su forma y propiedades, genera las condiciones para que se ejerza la
violencia directa e institucional.

•Permite introducir los mecanismos de ejercicio del poder como causantes de


exclusión y deprivación de necesidades básicas, derivado de sus prácticas y
políticas.
45
Violencia Estructural.
Es a partir de las dinámicas de interacción cotidiana que colocan a
un tipo específico de persona en una posición de falta, debilidad y
vulnerabilidad, que se manifiesta la violencia estructural; es por ello que
en el caso de víctimas de violencia social y VDH, las instituciones
encargadas de su atención inmediata, la investigación de los hechos y la
reparación del daño, deben ser sumamente cuidadosas, ya que esta se
manifestará mediante diversas formas de violencia institucional, al
considerarse que se encuentra incrustada en el núcleo fundante del
estado, por lo que se potencializa de manera exponencial la suma de
victimizaciones.

46
Prevenir la revictimización.
La revictimización se prevendrá con un trabajo de
acompañamiento e intervención que provea las herramientas
suficientes para que la persona puede articular la situación
traumática, recupere la capacidad para ejercer sus
derechos, se vea reconocida y reivindicada, así como con la
posibilidad darle un sentido dentro de su proyecto de vida
mediante el conocimiento de la verdad de los hechos y
acceso efectivo a la justicia.

47
Prevenir la revictimización.
• Visibilizar la violencia estructural.

• Conformar instituciones de atención a víctimas con un


sentido reparador y no compensador.

• Preparación especializada, supervisión y autocuidado


del personal que provea la atención y el
acompañamiento.

48
Prevenir la revictimización.
• Conocimiento personalizado del contexto socio-cultural de la
situación traumática y la persona con la que se trata.

• La intervención implica también una construcción en base a


la propia subjetividad del individuo, sin recurrir a factores
“generalizados” que provoquen situaciones que mantengan o
agraven los síntomas de la revictimización.

• Fortalecimiento de los procesos y dinámicas grupales y


colectivas.
49

También podría gustarte