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Prácticas eoeficientes para un cuidar el medio
ambiente

Docente:

Alumno:

Codigo:

Grupo:
Indice
1. Reduce, reutiliza y recicla:
- Reduce el consumo de productos innecesarios y evita el desperdicio:
- Reutiliza objetos y envases en lugar de desecharlos:
- Recicla los materiales que sean aptos para ello, como papel, plástico, vidrio y metal:
2. Ahorra energía:
- Apaga luces y dispositivos electrónicos cuando no los estés utilizando:
- Utiliza bombillas de bajo consumo energético, como las LED:
- Aprovecha la luz natural y ventila los espacios de manera natural cuando sea
posible:
3. Conserva el agua:
- Cierra los grifos mientras te cepillas los dientes o lavas los platos:
- Repara las fugas de agua en tu hogar:
- Utiliza tecnologías eficientes, como duchas de bajo flujo y sistemas de riego por
goteo:
4. Promueve la movilidad sostenible:
- Utiliza medios de transporte más sostenibles, como caminar, ir en bicicleta o usar el
transporte público:
- Comparte el coche con otras personas cuando sea posible para reducir las
emisiones de carbono:
5. Opta por productos ecológicos:
- Elige productos biodegradables y ecoetiquetados que sean menos dañinos para el
medio ambiente:
- Prefiere alimentos orgánicos y de comercio justo para apoyar prácticas agrícolas
sostenibles:
6. Planta árboles y cuida de la vegetación:
- Participa en programas de reforestación y siembra árboles en tu comunidad:
- Cuida de los espacios verdes y evita la tala indiscriminada de árboles:
7. Educación y sensibilización:
- Infórmate sobre temas ambientales y comparte tus conocimientos con otros:
- Participa en actividades de concienciación y difunde mensajes sobre la importancia
de cuidar el medio ambiente:
8. Reduce el uso de plástico:
- Evita el uso de bolsas de plástico y lleva contigo bolsas reutilizables:
- Utiliza botellas de agua reutilizables en lugar de botellas de plástico desechables:
- Prefiere productos con empaques ecoamigables y evita los productos de un solo
uso:
9. Protege la fauna y flora:
- Respeta la vida silvestre y sus hábitats naturales:
- No compres productos derivados de especies en peligro de extinción:
10. Participa en acciones de limpieza:
- Únete a jornadas de limpieza de playas, ríos y parques para contribuir a la
conservación del medio ambiente:
Una buena práctica ambiental se refiere a cualquier acción o comportamiento
que promueve la protección, conservación y sostenibilidad del medio ambiente.
Estas prácticas buscan minimizar el impacto negativo de las actividades
humanas en el entorno natural y fomentar un uso responsable de los recursos
naturales.

Algunas características de una buena práctica ambiental incluyen:

1. Sostenibilidad: Las prácticas ambientales deben tener en cuenta la capacidad de
regeneración y recuperación de los recursos naturales, evitando su agotamiento o
degradación irreversible.
2. Reducción de impactos negativos: Las buenas prácticas ambientales buscan minimizar los
impactos negativos de las actividades humanas en el entorno natural, como la
contaminación del aire, agua y suelo, la generación de residuos, la deforestación, entre
otros.
3. Uso eficiente de los recursos: Promueven la utilización eficiente y responsable de los
recursos naturales, como el agua, la energía y los materiales, evitando su desperdicio y
favoreciendo prácticas de conservación.
4. Conservación de la biodiversidad: Las buenas prácticas ambientales tienen en cuenta la
importancia de la conservación de la flora y fauna, protegiendo los ecosistemas y las
especies en peligro de extinción.
5. Educación y concienciación: Fomentan la educación ambiental y la sensibilización de las
personas, promoviendo el conocimiento y la comprensión de los problemas ambientales y
la importancia de tomar medidas para su solución.
6. Colaboración y participación: Las buenas prácticas ambientales implican la colaboración
de diferentes actores, como individuos, empresas, organizaciones no gubernamentales y
entidades gubernamentales, trabajando juntos para alcanzar objetivos ambientales
comunes.

¿Qué es una buena

práctica ambiental?
Reduce, reutiliza
& recicla

Reduce el consumo de productos innecesarios y evita el

desperdicio:

Antes de realizar una compra, piensa si realmente necesitas el producto y si puedes

encontrar alternativas más sostenibles.
Planifica tus compras y elabora listas para evitar comprar productos de forma
impulsiva.
Evita el desperdicio de alimentos planificando tus comidas, almacenando
adecuadamente los alimentos y aprovechando sobras en nuevas recetas.

Reduce el consumo de productos innecesarios y evita el

desperdicio:

Opta por productos duraderos y de calidad que puedas utilizar durante

mucho tiempo.
Repara objetos y electrodomésticos en lugar de desecharlos cuando
presenten fallas menores.
Da una segunda vida a los envases de vidrio, plástico o metal
utilizándolos para almacenar alimentos u otros objetos.

Recicla los materiales que sean aptos para ello, como

papel, plástico, vidrio y metal:

Separa los materiales reciclables en contenedores específicos y

asegúrate de seguir las indicaciones de reciclaje de tu localidad.
Asegúrate de que los materiales estén limpios y libres de
contaminantes antes de depositarlos en los contenedores de
reciclaje.
Infórmate sobre los puntos de recogida selectiva de tu comunidad
y participa activamente en el proceso de reciclaje.
 Apaga luces y dispositivos electrónicos cuando no los
estés utilizando:

Al salir de una habitación, asegúrate de apagar las luces.

Utiliza iluminación natural siempre que sea posible.
Desconecta los dispositivos electrónicos cuando no los estés
utilizando. Incluso en modo de espera, muchos aparatos
siguen consumiendo energía.

Utiliza bombillas de bajo consumo energético,

como las LED:

Reemplaza las bombillas tradicionales por aquellas que

tienen mayor eficiencia energética, como las bombillas
LED.
Las bombillas LED consumen hasta un 80% menos de
energía y tienen una vida útil más larga que las
bombillas convencionales.

Aprovecha la luz natural y ventila los espacios

de manera natural cuando sea posible:

Abre las cortinas y persianas durante el día para

aprovechar la luz natural y reducir la necesidad de
encender luces artificiales.
Ventila los espacios abriendo ventanas y puertas
energía:

para permitir la circulación de aire fresco en lugar de

utilizar sistemas de ventilación o aire acondicionado.
Ahorra
 Cierra los grifos mientras te cepillas los
dientes o lavas los platos:

Al cepillarte los dientes, cierra el grifo mientras te

enjabonas y enjuágate con un vaso de agua en lugar de
dejar el grifo abierto.
Al lavar los platos a mano, llena un recipiente con agua
para enjabonarlos y luego enjuágalos todos juntos en
lugar de lavarlos bajo el chorro constante de agua.

Repara las fugas de agua en tu hogar:

Revisa regularmente grifos, duchas y tuberías en

Conserva

busca de fugas y repáralas de inmediato. Una

pequeña fuga puede desperdiciar una gran
cantidad de agua con el tiempo.

Utiliza tecnologías eficientes, como duchas de bajo

flujo y sistemas de riego por goteo:

Instala duchas de bajo flujo que reducen el

consumo de agua sin comprometer la presión y
calidad del baño.
el agua:

Utiliza sistemas de riego por goteo en tu jardín

para regar las plantas de manera eficiente y evitar
el desperdicio de agua.

NOTA
Al implementar estas prácticas de
conservación del agua, estarás contribuyendo
a preservar este recurso vital. Recuerda que
cada gota cuenta, y con pequeñas acciones
diarias podemos marcar la diferencia en la
protección de nuestro medio ambiente.
 Utiliza medios de transporte más sostenibles, como
caminar, ir en bicicleta o usar el transporte público:

Opta por caminar o andar en bicicleta para distancias

cortas y utiliza el transporte público, como autobuses o
trenes, para desplazamientos más largos. Estas opciones
generan menos emisiones de carbono y contribuyen a
una mejor calidad del aire.

Comparte el coche con otras personas cuando sea

posible para reducir las emisiones de carbono:

Fomenta el uso compartido de vehículos mediante

la organización de viajes conjuntos con amigos,
familiares o compañeros de trabajo. También
puedes utilizar plataformas de carpooling o
aplicaciones que facilitan el compartir el coche con
otras personas que realizan trayectos similares.
movilidad sostenible:
Promueve la

NOTA
Al utilizar estos medios de transporte sostenibles, estás reduciendo la
emisión de gases de efecto invernadero, disminuyendo la congestión
del tráfico y promoviendo una movilidad más saludable y respetuosa
con el medio ambiente. Además, podrás ahorrar dinero en
combustible y contribuir a la creación de una ciudad más sostenible y
habitable. Recuerda siempre elegir la opción más adecuada para
cada situación y adaptarla a tus necesidades y posibilidades.
Opta por productos
ecológicos:

Elige productos biodegradables y ecoetiquetados que sean menos

dañinos para el medio ambiente:

Busca productos que cuenten con certificaciones o etiquetas que demuestren su

impacto ambiental reducido. Estas etiquetas suelen indicar que el producto ha sido
fabricado utilizando procesos más sostenibles y que es biodegradable o compostable,
lo que significa que se descompone de forma natural y no genera residuos
perjudiciales para el medio ambiente.

Prefiere alimentos orgánicos y de comercio justo para apoyar

prácticas agrícolas sostenibles:

Los alimentos orgánicos se producen sin el uso de pesticidas sintéticos,

fertilizantes químicos y organismos modificados genéticamente, lo que
reduce el impacto en los ecosistemas y promueve la salud del suelo y la
biodiversidad. Además, elige productos de comercio justo, que
garantizan condiciones laborales justas para los agricultores y
promueven prácticas agrícolas sostenibles.

NOTA
Al optar por productos ecológicos, estás apoyando la conservación
de los recursos naturales, reduciendo la contaminación y
promoviendo prácticas más sostenibles en la cadena de suministro.
Además, al elegir alimentos orgánicos y de comercio justo, estás
contribuyendo a la salud de tu cuerpo y apoyando un sistema
alimentario más equitativo. Recuerda leer las etiquetas, investigar
sobre las marcas y tomar decisiones informadas para elegir los
productos más sostenibles disponibles en el mercado.
 Participa en programas de reforestación y siembra
árboles en tu comunidad:

Infórmate sobre programas locales de reforestación y participa

en ellos. Estas actividades te permitirán contribuir directamente al
aumento de la cobertura forestal y a la restauración de
ecosistemas degradados. También puedes organizar jornadas de
siembra de árboles en tu comunidad, involucrando a vecinos,
amigos y organizaciones locales.

Cuida de los espacios verdes y evita la tala

y cuida de la vegetación

indiscriminada de árboles:

Mantén un cuidado adecuado de los árboles y vegetación en

Planta árboles

tu entorno. Evita la tala indiscriminada de árboles y denuncia

cualquier actividad ilegal relacionada con la deforestación. Si
notas árboles en peligro, busca asesoramiento profesional
para su preservación. Además, promueve la educación
ambiental para generar conciencia sobre la importancia de
los árboles y la vegetación en la salud del ecosistema.

NOTA
Recuerda que los árboles desempeñan un papel crucial en
la regulación del clima, la purificación del aire, la
conservación del agua y la preservación de la
biodiversidad. Al participar en programas de reforestación
y cuidar de la vegetación, estás contribuyendo a la
mitigación del cambio climático y la conservación de los
ecosistemas. ¡Cada árbol cuenta!
Educación y
sensibilización:

Infórmate sobre temas ambientales y comparte tus conocimientos

con otros

Mantente actualizado sobre los problemas ambientales actuales, como el cambio

climático, la contaminación, la pérdida de biodiversidad, entre otros. Investiga
fuentes confiables y busca información basada en la ciencia. A medida que
adquieras conocimientos, compártelos con tus amigos, familiares y comunidad a
través de conversaciones, redes sociales, blogs u otros medios de comunicación.

Participa en actividades de concienciación y difunde mensajes

sobre la importancia de cuidar el medio ambiente:

Únete a organizaciones ambientales, grupos comunitarios o

iniciativas locales que promuevan la concienciación ambiental.
Participa en eventos, charlas, talleres o campañas de
sensibilización para compartir información y fomentar acciones
positivas. Utiliza tus habilidades creativas para crear contenido
visual, como carteles, infografías o videos, que transmitan
mensajes claros y motivadores sobre la importancia de proteger
el medio ambiente.

NOTA
Recuerda que la educación y la sensibilización son poderosas
herramientas para inspirar a otros y generar cambios de
actitud y comportamiento. Al informarte y compartir tus
conocimientos, estás contribuyendo a crear una sociedad más
consciente y comprometida con la protección del medio
ambiente.
 Evita el uso de bolsas de plástico y lleva
contigo bolsas reutilizables:

Cuando vayas de compras, lleva contigo bolsas de

tela o bolsas reutilizables para evitar el uso de bolsas
de plástico desechables. Estas bolsas son duraderas,
prácticas y pueden ser utilizadas varias veces.

Utiliza botellas de agua reutilizables en lugar

de botellas de plástico desechables:

Opta por llevar contigo una botella de agua

reutilizable hecha de materiales seguros y duraderos,
Reduce el

como acero inoxidable o vidrio. De esta manera,

podrás llenarla con agua potable en cualquier lugar y
uso de plástico:

evitarás el consumo de botellas de plástico de un solo

uso.

Prefiere productos con empaques ecoamigables

y evita los productos de un solo uso:

Al hacer tus compras, elige productos que tengan

empaques sostenibles, como cartón reciclado o
materiales biodegradables. Evita los productos que
vienen en envases de plástico innecesarios o que
sean de un solo uso, como pajitas, cubiertos
desechables y envoltorios individuales.

NOTA
Recuerda que cada pequeña acción cuenta. Al reducir el
uso de plástico, estás contribuyendo a disminuir la
cantidad de residuos plásticos que terminan en nuestros
océanos, ríos y ecosistemas, ayudando a preservar la vida
marina y reducir la contaminación ambiental. ¡Cada
elección que hagas marca la diferencia!
 Respeta la vida silvestre y sus hábitats
naturales:

Cuando estés en espacios naturales, como parques

nacionales o reservas naturales, asegúrate de respetar la
vida silvestre y sus hábitats. No molestes ni interfieras con
los animales, observa desde una distancia segura y no
dejes basura o contaminantes en su entorno.

No compres productos derivados de especies

Protege la

en peligro de extinción:

Evita adquirir productos elaborados a partir de especies

en peligro de extinción, como marfil, pieles de animales
fauna y flora:

protegidos, conchas marinas y productos derivados de

la caza furtiva. Al hacerlo, contribuyes a reducir la
demanda de estos productos y proteges a las especies
en peligro.

NOTA
Recuerda que la biodiversidad es fundamental para el
equilibrio de los ecosistemas y para nuestra propia
supervivencia. Cada especie desempeña un papel importante
en el funcionamiento del ecosistema, por lo que es crucial
respetar y conservar la vida silvestre y sus hábitats naturales.
Además, al evitar la compra de productos derivados de
especies en peligro de extinción, estás contribuyendo a
detener el comercio ilegal y proteger la diversidad biológica
de nuestro planeta.
Participa en
acciones de limpieza:
Únete a jornadas de limpieza de playas, ríos y parques para
contribuir a la conservación del medio ambiente:

1. Infórmate sobre las jornadas de limpieza: Mantente atento a las iniciativas

locales, organizaciones ambientales o grupos comunitarios que organicen
jornadas de limpieza en playas, ríos y parques. Puedes consultar las redes
sociales, sitios web de organizaciones ambientales o contactar directamente a
entidades locales para conocer las próximas actividades.
2. Participa activamente: Regístrate y participa activamente en las jornadas de
limpieza. Sigue las instrucciones y recomendaciones proporcionadas por los
organizadores. Asegúrate de llevar ropa y calzado adecuados, así como
guantes y bolsas para recolectar la basura.
3. Recoge y clasifica la basura: Durante la jornada, recoge la basura que
encuentres en el área asignada. Separa la basura según su tipo (plásticos,
vidrios, metales, etc.) si es posible. Esto facilitará su posterior reciclaje y
disposición adecuada.
4. Sé consciente de tu entorno: Mientras participas en la jornada de limpieza,
mantén la atención en tu entorno. Observa y aprende sobre los impactos de la
contaminación en el medio ambiente y la importancia de mantenerlo limpio y
saludable.
5. Difunde y comparte tu experiencia: Después de la jornada de limpieza,
comparte tu experiencia con amigos, familiares y en tus redes sociales. Motiva
a otros a unirse a estas actividades y genera conciencia sobre la importancia de
cuidar nuestro entorno.