PERIÓDICO DIOCESANO NÚMERO 55 DICIEMBRE 2016

SECCIÓN LEYES DE LA IGLESIA

(He tratado que sea lo más sintético posible y aprovechar el espacio para el diseño editorial,
aumentar el tamaño de la foto).

¿Cómo se reconoce un Santo? –Proceso de canonización-

Pbro. Lic. Netzahualcoyotl H. Xochitiotzin Ortega.

Facebook y Youtube: PadreNetza H Xochitiotzin Ortega.

Para que alguien, en la Iglesia Católica se le reconozca oficialmente como Santo, es

necesario todo un proceso judicial muy específico con leyes que tienen origen hace cientos
de años .En síntesis éste es el procedimiento.
El primer paso lo dan los católicos al reconocer la vida cristiana ejemplar del candidato y lo
comunican al Obispo del lugar. Entonces se forma una comisión que reúne todos los
testimonios, escritos de la persona y biografía, y se mandan al Vaticano a la Congregación
para las causas de los Santos.
El segundo paso se realiza en el Vaticano donde historiadores y teólogos trabajan juntos
para reconstruir una biografía exacta de la persona, incluyendo su espiritualidad y signos de
heroísmo en sus virtudes: fe, esperanza, caridad, justicia, fortaleza, templanza y prudencia.
Esta etapa puede durar años pues debe ser estudiada y confirmada como cierta. Existen
casos como el de San P. Pio de Pieltrecina fallecido en 1968 donde fueron más de cien
volúmenes que recopilaron su biografía, escritos, sermones, testimonios y toda su
documentación confirmada.
Como la santidad es la unión entre Dios y la persona, por ello se requiere de un milagro
para la beatificación y otro para la canonización, estos milagros deben ser muy evidentes
realizados por intercesión de esta persona como signo que ya está en el Cielo. Los milagros
deben ser confirmados por varios médicos especialistas que no pueden ser elegidos por los
interesados y los médicos deben ser reconocidos ante las autoridades vaticanas. Los
médicos especialistas no necesariamente deben ser católicos.
La beatificación es el primer paso y concede que sea venerado en su diócesis o zona de
origen. Para la canonización se necesita la aprobación de un segundo milagro. Una vez que
el Papa declara un santo, éste puede ser venerado en todo el mundo.
El caso de los que son considerados mártires es especial, ya que lo más importante es
probar que verdaderamente murieron en nombre de Dios. Si es así, no se necesita un
milagro para la beatificación, sino sólo uno para la canonización.
La ley especial que establece este procedimiento la conocemos con el título de “Sanctorum
Mater” y tiene más de 150 artículos legales. Hay gente que sin conocer pudiera imaginar
que todo es una farsa, recordemos que la ignorancia es atrevida. ¡El proceso de
canonización es algo muy serio y todo consta por escrito!
Recordemos que los Santos son hermanos que han vivido ejemplarmente su vida de entrega
a Dios y a los hermanos y nos alientan para que también nosotros seamos fieles al llamado
de Dios por construir su Reino aquí en la tierra.
Como católicos tlaxcaltecas tenemos el gran regalo de tener a nuestros beatos los niños
mártires Cristóbal, Antonio y Juan, oremos que el Señor nos conceda verlos venerados en
todo el mundo, es decir, canonizados. Oremos que nuestro Dios realice algún milagro por
intercesión de ellos y así se culmine este deseo para mayor Gloria de Dios.