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¿Cómo afecta la intervención humana la calidad del agua de la quebrada La Iguaná?

La contaminación de la principal fuente hídrica de la región metropolitana, el río Aburrá-

Medellín, responde, en gran medida, a las afectaciones ambientales que se presentan en los
afluentes que llegan a él. Por ello, la Red de monitoreo ambiental en la cuenca hidrográfica
Aburrá-Medellín (RedRío) adelanta proyectos de investigación con el apoyo de estudiantes
de últimos semestres de ingeniería ambiental, civil y sanitaria en las principales quebradas
del Valle de Aburrá, con el propósito de determinar el impacto ambiental producido por la
zona urbana sobre las mismas y, a su vez, para entender la afectación que produce al río.

Uno de los proyectos de investigación desarrollados durante los años 2012-2013 se realizó
en la quebrada La Iguaná. Este afluente desciende por el occidente del municipio de Medellín
y su nacimiento se encuentra a 3100 msnm aproximadamente, más específicamente en el
cerro del Padre Amaya.

Para realizar la evaluación inicial del impacto, se realizaron dos jornadas de muestreo, una
en noviembre de 2012 y la otra en enero de 2013, en dos puntos de monitoreo ubicados en
zona rural del corregimiento de San Cristóbal (Iguaná 1) y en zona urbana cerca a la
desembocadura en el río Aburrá- Medellín, en inmediaciones del núcleo El Volador de la
Universidad Nacional (Iguaná 2).

La calidad del agua para cada punto se determinó mediante la aplicación del Índice de
Calidad General en Corrientes Superficiales – ICACOSU, indicador que permite, de manera
cualitativa, hacer un diagnóstico de la calidad del recurso hídrico.

Como se puede observar en la siguiente tabla, los resultados del ICACOSU en la parte alta
de la quebrada (estación Iguaná 1) evidenciaron una calidad del agua aceptable en las dos
campañas de monitoreo. En este punto, la corriente presenta poca turbiedad y el agua es
casi incolora; además, no se observan vertimientos o intervenciones importantes en los
alrededores, tal como se muestra en la Foto 1. Se considera que el principal aporte de
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contaminantes puede provenir de zonas de cultivos y excretas del ganado que pastorea
cerca a los bordes de la quebrada.

Resultado ICACOSU monitoreos de calidad quebrada La Iguaná

RESULTADO ICACOSUS DE LAS MUESTRAS COMPUESTAS

FECHA 8 NOVIEMBRE DE 2012 21 ENERO DE 2013

ESTACIÓN VALOR ICACOSU CLASIFICACIÓN VALOR ICACOSU CLASIFICACIÓN

Iguaná 1 0,87 Aceptable 0,71 Aceptable

Iguaná 2 0,44 Mala 0,43 Mala

Foto 1. Panorámica Estación Iguaná 1 (San Cristóbal). Vereda El Llano.

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Por otro lado, en la estación Iguaná 2 se observó un deterioro notable del recurso hídrico.
Los resultados del ICACOSU indicaron una mala calidad del agua en ambos monitoreos.

Como se puede apreciar en la Foto 2, en este punto, el color gris oscuro del agua indica que
está contaminada, lo que se debe a vertimientos de aguas residuales a lo largo de su
recorrido. Adicionalmente, la Foto 3 evidencia prácticas inadecuadas de disposición de
residuos sólidos en los taludes o márgenes de esta corriente, lo que indica la falta de
educación y conciencia ambiental de la comunidad aledaña a ella.

Foto 2.Panoramica Estación Iguaná 2 (cerca de la UNAL).

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Foto 3. Botaderos de basuras y escombros barrio Olaya Herrera y Blanquizal.

Uno de los puntos más críticos y representativos de la problemática de esta quebrada es el

correspondiente a la zona colindante con el barrio La Iguaná. En este tramo se observó una
gran cantidad de vertimientos de aguas residuales domésticas (ver Foto 4). Asimismo se ha
formado una cantidad importante de botaderos de todo tipo de residuos, los cuales en
muchas ocasiones son alcanzados por la corriente y arrastrados aguas abajo (ver Foto 5).

Foto 4. Descarga de aguas residuales barrio Foto 5. Concentración de basuras barrio

Iguaná. Iguaná.

Además de la falta de cultura y educación de la población asentada a lo largo de la

quebrada, hay otros factores que agudizan la problemática ambiental de este afluente, como
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la falta de cobertura y de obras de saneamiento que permitan conducir y tratar

adecuadamente todas las aguas residuales domésticas.

La recuperación ambiental de este cuerpo de agua, depende no solo de la voluntad y gestión

de las autoridades competentes, también necesita del compromiso de la ciudadanía para
proteger el recurso hídrico, reconociendo las quebradas y los ríos como parte de nuestro
ecosistema, riqueza y patrimonio y no como medios receptores de nuestros desperdicios, ya
que al afectarlos a ellos nos generamos perjuicios a nosotros mismos.

El Área Metropolitana del Valle de Aburrá hace una invitación especial a las comunidades de
la región metropolitana para que juntos hagamos un manejo adecuado de los residuos
sólidos y para proteger los recursos que la naturaleza nos da, con el fin de que convivamos
con ellos de manera que aseguramos su disponibilidad para las futuras generaciones.

¡El agua es un elemento fundamental para la vida!