Soberanía de Dios y nuestro libre albedrío

¿La inevitabilidad se cumplirá siempre el plan de Dios, hasta donde puedo yo

elegir que pasará y hasta donde Dios hará su voluntad en mi vida?
 Ejemplo del Barco.

La soberanía de Dios, vamos a ver 2 aspectos principales:

La voluntad de Dios determinada o soberana es la que se hará absolutamente,

sus planes inevitables, inmutables decididos y completos le traerán gran
alabanza y gloria. Ël no solamente hace planes mundiales, o nacionales,
también hace planes individuales. Salmo 139:16. El Señor nos prepara a cada
uno para ciertas tareas y nos da habilidades o dones con los cuales podemos
hacer un impacto en este mundo para él. 1 Corintios 12:7

La voluntad de Dios deseada o permisiva es donde usted y yo vivimos cada

día. Dios nos da opciones para que podamos ejercer nuestro libre deseo o
albedrío. Dios nos da este espacio para probar si nuestros corazones realmente
le reconocen.
Así entonces podemos decir que la voluntad determinada del Señor es
inevitable e impredecible, aparte de lo que se revela en su palabra
Y la voluntad deseada del Señor se puede conocer en las circunstancias que
experimentamos.
Debemos recordar que Dios está totalmente involucrado en todo su plan. Él no
lo pierde de vista, si nuestro corazón realmente quiere cumplir su voluntad el
nos promete que El nos mostrará lo que debemos hacer. Mateo 7;7-8
él quiere que pidamos, busquemos y llamemos, para que él pueda dar, revelar,
abrir y proveer lo que es bueno para nosotros. Mateo 7;11.

8 formas de descubrir la voluntad de Dios

A medida que continuamos en nuestra búsqueda por comprender y perseguir

la voluntad suprema de Dios para nuestras vidas, las siguientes son ocho
maneras en que el Padre nos ayuda a descubrir su voluntad y los planes que
tiene para nosotros.

1. Comunión con Dios a través de las escrituras  — A través de su

palabra, Dios nos enseña cómo debería ser la vida cristiana como lo
 que ya no nos queda como sus hijos, y cómo evitar las trampas de la
vida (2 Tim. 3:16-17). En otras palabras, la Biblia nos enseña que el
Padre desea para nosotros hacer y nos ayuda a lograrlo. En su libro de
instrucciones para vivir. Y nunca nos guiará ni nos dirá nada que
contradiga lo que ha escrito en su Palabra.
2. Circunstancias de la vida — Dios nos habla a través de las
circunstancias de la vida—Donde el nos pone, las situaciones en las
que nos encontramos y personas que nos rodea. Él continuamente
está trabajando en nuestras vidas momento por momento para
dirigirnos en su voluntad y lograrlo a través de nosotros (Rom. 8:28).
3. Consejo — Dios habla a través del consejo piadoso de otros creyentes.
A veces necesitamos ayuda de otros cristianos para saber qué hacer en
áreas a las que nos estamos acostumbrando. Es por esto que las
escrituras nos amonestan a enseñarnos unos a otros con amor, buena
conciencia y una fe sincera (1 Tim. 1:5).
4. Conciencia — Otro factor para discernir la voluntad de Dios es a través
de nuestra conciencia, que es nuestra voz interior que actúa como un
filtro moral. Es la alarma que suena dentro de nosotros cuando
estamos tentados a hacer algo que no está bien o cuando nos
dirigimos en la dirección equivocada (Rom. 2:14-15).
5. Sentido común — El creyente controlado por el Espíritu de Dios debe
usar su mente y sentido común al discernir la voluntad de Dios (Tito
2:11–12)
6. Compulsión — El Señor nos da el fuerte deseo o el impuso de hacer Su
voluntad de acuerdo con los impulsos de Su Espíritu Santo (Fil. 2:13).
7. Contentamiento  — Discernimos la voluntad de Dios a través del
contentamiento o tranquilidad que sentimos cuando procedemos en
una acción. Cuando trabajes contra el Señor, sentirás una fricción
espiritual que te hará sentir incomodo; cuando estés en el centro de la
voluntad de Dios, sentirás paz con Él (Fil. 4:7).
 8. Comunicación con Dios a través de la oración — Al llevar nuestras
preguntas y preocupaciones a Dios en oración, Él promete dar sentido
a lo que estamos experimentando y nos ayudará a entender cómo
desea que procedamos (Salmo. 119:105).

Dios está desplegando continuamente sus recursos en nuestro nombre. Él es

quien usa todas las formas mencionadas anteriormente para mostrar su
maravillosa voluntad para nuestras vidas. No tengas miedo de perderte la
voluntad del Padre o de malinterpretar lo que está tratando de decir. Él puede
hablar con usted claramente y lo capacitará para que haga lo que le pida.

Todo lo que tienes que hacer es asegurarte de prestar atención, escuchar y

luego obedecer.