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Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de la Nación

Dirección Nacional de Gestión Curricular y Formación Docente


Área de Desarrollo Profesional Docente

Seminario internacional La escuela media hoy. Desafíos, debates, perspectivas.


Del 5 al 8 de abril de 2005 en Huerta Grande, Córdoba. Panel: Brecha social, diversidad cultural y
escuela.

Sociedad y crueldad

Por Fernando Ulloa*

Este tema de la crueldad, tan complejo, tan invalidez, el otro se ensaña sin que nadie del
arduo y, además, tan cotidiano, es asunto público intervenga. Esto configura una
obsceno y no fácil de exponer, entre otras situación típica del dispositivo de la crueldad
cosas por lo que señalo. En general, me al que habré de denominar “encerrona
resulta fácil la tarea cuando hablo de la trágica”, y que resulta el núcleo central de
crueldad y como analista interesado en el este dispositivo. Esta encerrona cruel es una
campo de la salud mental-porque me situación de dos lugares sin tercero de
permite ajustarme a un código más apelación -tercero de la ley- sólo la víctima y
específico que cuando debo hacerlo - como el victimario. Hay multitud de encerronas de
en esta ocasión- ante un público procedente esta naturaleza, dadas más allá de la atroz
de otros campos. tortura. Ellas se configuran cada vez que
alguien, para dejar de sufrir o para cubrir sus
Empezaré por presentar una primera
necesidades elementales de alimentos, de
contradicción que plantea la crueldad, en
salud, de trabajo, etc., depende de alguien o
tanto flagelo que acompaña al hombre desde
algo que lo maltrata, sin que exista una
el inicio de la civilización. Un
terceridad que imponga la ley. Lo que
acompañamiento paradojal, ya que a lo largo
predomina en la encerrona trágica no es la
de la civilización la humanidad siempre ha
angustia, con todo lo terrible que esta puede
tratado de acotar la expresión instintiva de la
llegar a ser; predomina algo más terrible aún
agresión tratando de consolidar los derechos
que la angustia: el dolor psíquico, aquel que
de los individuos y de los pueblos. Pero es
no tiene salida, ninguna luz al final del túnel.
obvio que la civilización ha ido sofisticando,
La angustia puede tener puntos culminantes
al mismo tiempo, los dispositivos
pero también momentos de alivios; en
socioculturales necesarios para el despliegue
cambio, el dolor psíquico se mantiene
de la crueldad. Insistiré en que la crueldad
constante en el tiempo. La salida parece
siempre implica un dispositivo sociocultural.
identificarse con la muerte. Es que la
En esto hay una diferencia sustancial con la
crueldad siempre aparece estrechamente
agresión, heredad instintiva del hombre. El
amarrada a la muerte, ya sea porque éste es
instinto no es de por sí cruel. Está sujeto a la
su desenlace o porque la muerte ya está
ley de la sobrevivencia y por eso puede llegar
instalada en el mismo sujeto de la crueldad.
a ser feroz, pero no cruel. El paradigma del
dispositivo de la crueldad, es la mesa de En los comienzos de la humanidad, próxima
torturas, pero el accionar cruel no está a los primates, la agresión era herramienta
acotado solamente al ámbito puntual del instintiva de sobrevida, pero lo específico del
tormento, sino que debe estar sostenido por sujeto humano es la pulsión. Resulta
círculos concéntricos, logísticos, políticos, complejo presentar sintéticamente la noción
desde ya incluyendo a los beneficiarios de de pulsión, pero sin ella es difícil avanzar en
las políticas que se pretenden instaurar por el la comprensión de la crueldad. Al respecto,
terror. En cambio, la agresión de dos por el momento, sólo diré que la pulsión
automovilistas que chocan en la esquina y se (literalmente impulso) es una suerte de
agarran a trompadas no es en sí cruel “mutación” del instinto –producción de
aunque pueda ser reprochable, llegaría a naturaleza biológica- como efecto del
serlo si frente a uno de ellos reducido a la accionar de la cultura. A su vez la pulsión, irá
“trabajando” al infantil sujeto consolidando su su vez cabe insistir en que el nivel pulsional
condición psíquica. Lo paradójico es que este será límite al instinto. Una precaria
nivel pulsional, que coexiste con el nivel pulsionalización, por fracaso de los
instintivo, será una bisagra donde opere la suministros tiernos, tendrá como
cultura para mantener acotada la agresión consecuencia la no represión instintiva, esa
del instinto. Cuando por precario mermada herencia que acompaña la
establecimiento de lo pulsional (índice de un inmadurez biológica con que nace el niño.
fracaso de los suministros de la ternura) no Mermada pero potencialmente activable si
se establece una buena frontera entre lo las condiciones son de sobrevida. Además, si
pulsional, ‘haciendo techo al piso instintivo’. el nivel pulsional es precario establecimiento
Entonces el instinto se “pulsionaliza” y la no sólo no marcará el límite con lo instintivo,
pulsión es afectada por la agresión instintiva. sino que terminará “corrompiendo al instinto”.
De ahí que la crueldad es una patología ‘de Mucho se ha escrito en relación a esto,
frontera’ más establecida. La civilización acerca de la civilización y la barbarie, pero lo
supone la prevalencia de lo pulsional sobre el que aquí quiero rescatar es que la crueldad,
nivel instintivo, sin que la agresión sea ajena así entendida, es patología de fronteras entre
tampoco a la pulsión. No obstante, hay una el instinto y lo pulsional entremezclados.
diferencia substancial entre ambos niveles: Bastará la oportunidad del necesario
los dos parten de una fuente somática desde dispositivo sociocultural para que esta
la cual el instinto irá en busca de un mismo mezcla bárbara advenga cruel.
objeto siempre por el mismo recorrido, en
La coartación implica desde la perspectiva
tanto que en la pulsión son posibles caminos
psicoanalítica -ya lo adelanté- cierta estación
y objetos alternativos. Por ésto el instinto es
elemental de sublimación que dará origen a
de índole metonímico, mientras la pulsión
dos producciones ejes de la ternura. Por un
esboza la metáfora, anunciando el reino de la
lado, la “empatía” que garantiza el suministro
misma en la palabra. La palabra será el polo
de lo necesario para el niño. La segunda
de la cultura como el instinto lo es de la
producción es el “miramiento” en su
natura. Entre ambos la pulsión hace bisagra.
significado de mirar con considerado interés,
El escenario donde el cachorro humano se con afecto amoroso, a quien habiendo salido
va constituyendo sujeto pulsional es el de la de las propias entrañas, es reconocido sujeto
ternura. Cuando se habla de la ternura, uno distinto y ajeno. Si la empatía garantiza los
tiene la sensación de que, si bien es una idea suministros necesarios a la vida, el
valorada, la misma aparece dudosamente miramiento promueve el gradual y largo
articulada sólo a lo blando del amor. Sin desprendimiento de este sujeto hasta su
embargo, la ternura es el escenario condición autónoma. Es más, el miramiento
formidable donde el sujeto no sólo adquiere acota la empatía para evitar sus abusos. La
estado pulsional, sino condición ética. De ahí ternura supone tres suministros básicos: el
que hablar de la ternura en la Casa de las abrigo, el alimento y el “buen trato”. Después
Madres, evocar la epopeya de estas mujeres de pensar mucho acerca de cómo nombrar el
de la Plaza, el momento en que surgieron y afecto de ternura, terminé definiéndolo como
la lucha sostenida que mantienen, es un buen trato, como trato pertinente. Pero
ejemplo de lo que representa la firmeza de la fundamentalmente un trato que alude a la
ternura en la organización y defensa de los donación simbólica de la madre hacia el niño.
valores éticos del sujeto social. Si la crueldad En la medida que la madre, y demás dadores
excluye al tercero de la ley, en la ternura este de la ternura, desde la empatía y el
tercero siempre resulta esencial, lo que no miramiento, decodifican las necesidades
supone necesariamente una presencia traduciéndolas en satisfacción merced a los
concreta, ya que a lo largo de la civilización, suministros adecuados, estas necesidades
esa terceridad se ha ido incorporando en la satisfechas, irán organizando un código
estructura psíquica del dador de la ternura, comunicacional presidido por la palabra. El
prevalentemente en la madre. Cuando esto infante irá tomando palabra, construyendo
no es así, puede que la ternura claudique. Es una lengua. Por supuesto que buen trato
el tercero social el que acota la “libertad” alude al sentido generalizado de la ternura
pulsional del adulto y de ahí el surgimiento, como referente al amor. Un buen trato del
cuasi sublimado, de la ternura materna que derivan todos los “tratamientos” que el
responsable de la pulsionalización del hijo. A sujeto recibe a lo largo de la vida, en relación

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a la salud, la educación, el trabajo, de hecho a murmullos. Una verdad murmurada que al
al amor. También de buen trato proviene mismo tiempo que se impone, se intenta
‘contrato’ social, el solidario que preside toda recusar a través de la renegación. En
relación humana. psicoanálisis a este mecanismo se lo
describe como negar y negar que se niega.
Tal vez por todo lo anterior cada vez que
Una verdadera amputación del aparato
tengo que enfrentar una actividad de
psíquico que configura uno de los riesgos
derechos humanos: un peritaje, el
mayores a que están sometidos los niños
tratamiento de una víctima directa o indirecta
que han pasado años en ese entorno
de la represión, quizá de la mortificación de
siniestro; en ellos puede instaurarse una
la que luego hablaré, e incluso cuando debo
renegación cronificada, creándoles serios
escribir un texto teórico o hacer una
problemas afectivos con la verdad, puesto
transmisión como ésta, intento siempre
que no sabiendo a qué atenerse, pueden
establecer el telón de fondo de la ternura
terminar teniendo que atenerse a las
para confrontar y destacar nítidamente el
consecuencias, antigua fórmula para definir
insulto mayor de la crueldad.
la posición del idiota antes que esto
Aludiré ahora, a la idea de “lo cruel”, que constituya un insulto o un cuadro
luego retomaré más extensamente, como neuropsiquiátrico. Esto se incrementa frente
una manera de señalar que el entorno de la a un entorno infamiliar de naturaleza cruel.
ternura es el ámbito de “lo familiar”, palabra
Voy ahora, casi hablando esquemáticamente,
que por supuesto remite a familia. Sabido es
a presentar las principales formas de la
que familia es un término que se las trae.
crueldad. En primer lugar aquello que un
Proviene de famulus, designando el conjunto
tanto paradójicamente, suelo denominar
de siervos y esclavos que pertenecían a un
como vera-crueldad. Paradójicamente,
amo. La familia se fue perfeccionando, como
porque si la palabra vera remite a verdad,
concepto y como institución, merced a la ley
resulta que el agente mayor de la crueldad,
del parentesco, una ley que alcanza a todos
para el caso un torturador, es totalmente
y en primer término a los padres, en tanto
ajeno a la verdad. En la crueldad mayor, su
éstos no son arbitrarios hacedores de la ley,
ejecutor se abroquela en la pretensión de
sino sus representantes. La ley también los
impunidad, en el desconocimiento de toda
involucra. De este ámbito surge la noción de
ley. Ya no se dan, al menos en forma
lo familiar, algo dado incluso por fuera de la
rotunda, los efectos de la represión integral,
familia. Lo familiar puede ser descrito de
tan extendidos hace pocos años, pero lo que
muchas maneras, pero me interesa señalar
no desapareció es la pretensión de
aquella situación, donde bajo la impronta de
impunidad de quienes cometieron crímenes o
la ternura, un sujeto no es solamente
se beneficiaron en complicidad con ellos.
hechura de la cultura sino que es hacedor de
Esta pretensión sigue instaurada como algo
la misma. Esto ocurre en la familia y en
propio del sujeto maligno.
cualquier contexto que merezca definirse
como familiar. Si el sujeto sólo es hechura de Diré algo más sobre la vera-crueldad, en
la cultura y no su hacedor, peligra como cuanto saber canalla. Cada vez que algún
sujeto. Tal vez es objeto de una situación saber o alguna cultura distinta, amenazan
infamiliar. El paradigma de ésto se da cuando conmover su precaria estructuración
un niño, ignorando explícitamente su psíquica, el cruel despliega tres acciones: la
situación, vive con sus apropiadores. Ahí se exclusión de lo que considera distinto, el odio
produce lo que denominaré “el efecto y, cuando puede, la eliminación lisa y llana
siniestro”. Estos niños, poniendo en juego la no sólo del saber contradictorio, sino de
formidable captación infantil, habrán de quien lo sostiene. Este “saber eliminador”
registrar, a través de vacilaciones y pretende conocer toda la verdad acerca de la
contradicciones, la naturaleza cruel del verdad, a esto es lo que se llama saber
ámbito que los rodea. Un registro tan terrible canalla, negación de todo saber curioso
que es rechazado, nunca con eficacia total, atento a lo distinto, a lo extraño.
por el niño, produciéndose el efecto siniestro,
Existen otras formas de la vera-crueldad, por
equivalente a lo “infamiliar”. “Secretear” lo
desgracia muy frecuentes en nuestros
que de por sí ya aparece como secreto,
tiempos. En la vera-crueldad el sobreviviente,
terminará siendo un secreto si no a voces, sí

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que ha atravesado un dispositivo social convive con ella como un elemento
marcadamente cruel, apenas si sobrevive. La “normalizado”. Entonces, lo que retrocede es
muerte ya está instalada en él y despojado la intimidad, esa resonancia íntima necesaria
de los recursos elementales de lo familiar: para que cuando alguien expresa algo válido,
abrigo, alimento, buen trato, la única ética tal vez en relación a la situación, encuentre
posible es la violencia, aunque escandalice resonancia en el otro, un interés no
esta extensión del término ética. Este sujeto necesariamente coincidente, puede ser en
sobreviviente ejemplifica lo que antes decía disidencia. Esa resonancia, cuando existe,
acerca de un nivel pulsional precariamente promueve respuestas que van creando una
establecido, capaz de corromper este esbozo producción de inteligencia lúcida y colectiva.
instintivo con que viene a la vida un sujeto Así es posible el debate de ideas. En cambio
humano. Esbozo instintivo que habrá de en la intimidación, quien legítimamente tiene
desarrollarse en función de la necesaria algo que alertar, algo que denunciar, suele
agresión para sobrevivir. encontrarse con un desierto de oídos sordos,
entonces es posible que su discurso se
Una tercera forma más universal de la
degrade al de un predicador que siempre
crueldad que retomo es “lo cruel”. Aquí lo
dice lo mismo sin ninguna eficacia. Por
esencial de la crueldad aparece velado por el
supuesto esa comunidad está atenta y
acostumbramiento. Se convive
predispuesta a los embaucadores electorales
cotidianamente con lo cruel y muchas veces
de turno, en tanto éstos tienen la astucia de
en connivencia, sobre todo cuando esta
decir a las gentes lo que necesitan escuchar,
palabra, alude a ojos cerrados y aún a guiño
para acrecentar su renegación como espurio
cómplice. Si algo propio de la ternura es que
refugio. Uno se pregunta: ¿cómo puede ser
vela la sexualidad, abriendo el campo del
que una comunidad tan mortificada, tan
erotismo, y cuando esto no ocurre la
lastimada, no reaccione? Es que en estas
sexualidad puede llegar a la obscenidad, este
condiciones la queja nunca arriba a protesta,
velamiento no se justifica con la crueldad. Si
más bien se apoya en las propias debilidades
el velo de la sexualidad deviene intimidad
intentando despertar la piedad del opresor.
erótica, en la crueldad no hay nada que velar.
No se afirma en las propias fuerzas, tal vez
Hay que develarla, evidenciarla. Cuando se
endebles fuerzas, pero fuerzas al fin. En esa
vela la crueldad, cuando se hace cultura del
comunidad tampoco la infracción apunta a
acostumbramiento, se llega a configurar lo
trasgresión. La infracción es ventajera,
que denomino “la cultura de la mortificación”
oportunista, a lo más se arregla con una
a la que me referiré muy brevemente. En
multa o se presta a la coima. La trasgresión
esta cultura, el término mortificación no sólo
no es así, ella siempre funda algo: funda la
remite a muerte, sino principalmente a
teoría revolucionaria o la ruptura
mortecino, a apagado, a sujetos que no son
epistemológica, tal vez la toma de
hacedores de la cultura sino enrarecidas
conciencia, o quizá funda la fiesta. En las
hechura de la misma, próximos a la posición
comunidades mortificadas no hay tal
del idiota que no sabe a qué atenerse.
acontecer ya que la gente acobardada pierde
Podemos ver esta situación no ya en las
su valentía al mismo tiempo que su
masas más marginadas, sino en las que aún
inteligencia. Pero sobre todo pierde el
permanecen mortificadas y en el centro. En
adueñamiento de su cuerpo y las patologías
ellas impera, como decía antes, hablando del
asténicas abundan anulando la acción. El
efecto siniestro, la renegación. ¿Qué se
cuerpo se ha hecho servil. En esas
reniega en esa familia, en esa fábrica, en esa
comunidades mortificadas con frecuencia he
comunidad? En términos amplios, se reniega
observado - por ejemplo en agrupaciones a
la intimidación como un elemento constante
cargo de la salud que tienen que realizar una
que se ha hecho costumbre. Una intimidación
actividad que obliga a desarrollar
que forma parte de la cultura, no ya del
pensamiento- lo que terminé llamando el
fecundo “malestar de la cultura”, del que nos
síndrome SIC, una sigla integrada por
habla el psicoanálisis, donde hay una tensión
“saturación”, “indiferenciación”, “canibalismo”.
entre el sujeto hacedor y el sujeto hechura de
El ejemplo lo tomé de lo que acontece en una
la cultura, una tensión entre el deseo singular
jaula de monos cuando hay demasiados
y el compromiso solidario. Aquí el malestar
congéneres. Entonces empiezan a devorarse
de la cultura se ha trocado en cultura del
canibalísticamente entre sí, sin ningún tipo de
malestar. Se reniega la intimidación y se

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diferenciación, ya se trate de padres o de sobre los propios discutidores, por lo que
hijos, o de cualquier otro congénere. El suelen merecer el tilde represivo de delito de
síndrome SIC, aplicado al contexto social, no opinión. Fácil es entender que cuando el
necesariamente coincide con un exceso de cuerpo se recupera para la acción
personas, sino que habitualmente es movilizadora, la condena será mayor aún,
disparado por la indiferenciación, ya que en implicando la categorización de delito de
la mortificación suele no haber normativas, movilización. Estas instancias represivas
sino que prevalece la anomia. Esa pueden serlo verdaderamente o quedar sólo
indiferenciación provocará una saturación de en calificaciones administrativas, depende de
la actividad pensante que se hace qué tiempos corran.
indiscriminada; las ideas, los entusiasmos,
los proyectos, resultan entremezclados
devorándose unos a otros. Incluso puede * Este texto de 1999 presenta la síntesis de una charla-
ocurrir, con alguna frecuencia, una cosa debate acerca de la crueldad. Corresponde a una de las
treinta y tres presentaciones realizadas con distintos
curiosa: cuando se pretende instaurar un públicos en el marco de una investigación acera del
debate de ideas, so pretexto de denunciar la tema.
impunidad, el debate tiende a juicio público.
Sabido es que el juicio público pretende,
cuando esto está validado por las
circunstancias, denunciar la impunidad. Pero
en esta ocasión lo que se denuncia son
situaciones en general intrascendentes,
apartadas de lo que verdaderamente
interesa. Se diría que ahí reina el narcisismo
de las pequeñas diferencias. La cosa puede
pintar aún como juicio popular, aquel en que
se busca no ya la denuncia, sino la sanción
de la impunidad. Vale decir que en nombre
de la impunidad se promueve grotescamente
un acto impune. Por supuesto que el juicio
público tiene su razón histórica de ser, y lo
mismo vale para el juicio popular en ámbitos
y en situaciones donde resulta un accionar
legítimo, para una comunidad oprimida
donde toda instancia jurídica ha dejado de
existir. Pero en estos ámbitos a los que hago
referencia se trata de una suerte de parodia
grotesca, con efectos canibalísticos.
Voy a terminar señalando que cuando una
acción, provenga de donde provenga (en
todo caso yo hablo de mi trabajo como
psicoanalista, que intenta abordar la
numerosidad social) comienza a tener
efectos positivos, suele ocurrir algo a tomar
en cuenta. Siempre, en una situación
mortificada, esto es obvio, existe algún grado
de represión. Entonces cuando la gente
empieza a juntarse para discutir, cuando
comienza a promover un verdadero debate
de ideas, es posible que desde alguna
instancia administrativa estos
comportamientos sean calificados como
delitos de asociación. Por supuesto esta
gente empieza a pensar y este pensamiento
ya no tiene efectos canibalísticos, sino que
son críticamente eficaces sobre el campo y

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