Está en la página 1de 13

CONTRIBUCIONES

Mutismo Selectivo: Análisis Psicodiná-


mico desde la teoría de D. Winnicott
Selective Mutism: Psychodinamic analysis from Winnicott’s theory
Dr. Pedro Palma Vergara1

Resumen. El Mutismo Selectivo (MS) es un trastorno poco frecuente dentro de la psiquiatría


infantil. La prevalencia en estudios internacionales en niños entre 4 y 7 años va desde un 0,7
a un 2%, y la prevalencia es mayor en mujeres que en hombres. El desarrollo del MS ocurre
antes de la edad de 5 años y mas comúnmente entre los 2,5 y los 4 años. El objetivo del
presente es revisar algunos elementos de la evidencia actual acerca del MS y poder ampliar
la mirada desde un análisis psicodinámico en base a la Teoría de Winnicott.
Palabras claves: Mutismo selectivo, Winnicott, ansiedad, agresividad.

Abstract. Selective Mutism (SM) is a rare disorder in child psychiatry. The prevalence in inter-
national studies in children between 4 and 7 years old ranges from 0.7 to 2%, and the preva-
lence is higher in females than in males. The onset of SM occurs before the age of 5 years of
age and more commonly between 2.5 and 4 years of age. The objective of the present study
is to review some elements of the current evidence about SM and to be able to broaden the
view from a psychodynamic analysis based on Winnicott’s theory.
Key words: Selective mutism, Winnicott, anxiety, aggression.

INTRODUCCIÓN MS ocurre antes de la edad de 5 años y


mas comúnmente entre los 2,5 y los 4
El Mutismo Selectivo (MS) es un tras- años. Los pacientes con MS presentan
torno poco frecuente en psiquiatría in- altas tasas de comorbilidad, incluyen-
fantil, que está caracterizado por la di- do trastornos de ansiedad como fobia
ficultad persistente de hablar en situa- social (65-100%), trastorno de ansie-
ciones donde se esperaría socialmente dad por separación (17 a 32%,) fobias
que hablara, mientras que es capaz de específicas (30 a un 50%), historias de
hablar en otras situaciones 1. Esta di- trastornos de comunicación (50%) y
ficultad selectiva para hablar debería trastornos de eliminación (16 a 29%).
tener al menos un mes de duración. La La tasa de comorbilidad con trastornos
prevalencia en estudios internaciona- externalizantes, como trastorno opo-
les en niños entre 4 y 7 años va desde sicionista desafiante es menor (6 a un
un 0,7 a un 2%, y es mayor en muje- 10%), en comparación a los trastornos
res que en hombres. El desarrollo del ansiosos, según estudios científicos2.

1. Servicio de Psiquiatría Infanto-Juvenil . Hospital Militar de Santiago de Chile


Correspondencia: Pedro Palma Vergara. Avenida Cristóbal Colón 5185. Las Condes. dr.pedroignaciopalma@
gmail.com

Todos los derechos reservados Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 67
Contribuciones
La evidencia que existe en relación la fantil que ha recibido poca atención de
etiología del MS propone la interac- la investigación es la oposición, don-
ción de un conjunto de factores, que de algunos niños son más difíciles de
se pueden agrupar en los siguientes manejar porque no quieren cumplir
dominios: 1) Genes-Temperamento; con las reglas y condiciones estable-
2) Influencias Ambientales; 3) Factores cidas por los cuidadores4,12. Ford y su
del Neurodesarrollo, los cuales revisa- investigación de fenomenología (1998)
remos a continuación. evidenció que los niños con MS, ade-
más de mostrar síntomas de ansiedad,
1. Genes-Temperamento mostraban comportamiento oposicio-
nista, describiendo que una propor-
- Genes ción significativa de padres reportaba
La investigación ha documentado que comportamiento como ser “terco, hos-
el MS y los síntomas asociados ocu- co, irritable” (72%), “tiende a argumen-
rren a una tasa alta en las familias de tar mucho” (58%), “desobediente en la
niños con esta psicopatología. Se han escuela” (48%), “quejumbroso” (46%),
evidenciado antecedentes de MS en “pataletas o mal genio” (44%) 4,11. Ha-
padres y hermanos (9-18%)3, signos bría que ver si estos comportamientos
de reticencia extrema entre los padres reflejan comorbilidad, o si deberían
(44-51%) 3,4, así como altos niveles de verse como parte de la sintomatología
timidez , ansiedad social y mayor pre- que ocurre en niños que están expues-
ferencia por las actividades solitarias tos a situaciones de miedo, que son
de éstos.4,5,6. En un estudio de análisis explicaciones similares que se han pre-
de ADN de 99 familias que incluían al sentado para la co-existencia de sínto-
menos un niño con MS, mostraron que mas ansiosos y externalizantes. 4,14
una variación genética del gen CNT-
NAP2 podría estar involucrada en el 2. Influencias Ambientales
MS, ansiedad social y rasgos de ansie-
dad social, lo que vincularía a nivel ge- - Ansiedad-Control Parental
nético, el MS, con el espectro ansioso.4,8 Se han investigado eventos traumáti-
cos o importantes en la vida, como el
- Temperamento divorcio, el abuso, la hospitalización,
En la literatura, el temperamento inhi- el traslado y la muerte de un miem-
bido se ha asociado con los síntomas bro de la familia, pero falta evidencia
claves del MS, así como la timidez la convincente de una relación temporal
cual puede verse como variante social entre este tipo de trauma psicológico y
de la inhibición del comportamiento, la aparición de MS 4,9,15,16. Sin embargo,
estando presente en niños con MS, en un estudio observacional de Edison
porcentajes que oscilan entre el 68%- et.al (2011), mostró que los padres de
85% 4,9,10 . Ford. y col. (1998) señalaron los niños con MS, parecen ser signifi-
que los niños con MS, obtuvieron un cativamente más controladores y so-
puntaje alto en conductas de retirada y breprotectores. 4,17
bajos en adaptabilidad, indicando que
estos niños “no responden bien a estí- - Problemas en el ámbito escolar
mulos nuevos o inusuales” y “no mane- En el ámbito escolar se ha evidencia-
jan bien las transiciones y los cambios”. do que las dificultades en el habla y el
4,11
Otro aspecto del temperamento in- lenguaje (18-43%), trastornos de co-

68 Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 Todos los derechos reservados
Contribuciones
municación (38-50%) serían comu- cabulario receptivo, gramática y de
nes entre los niños con MS.4,10,11,18,19 conciencia fonológica, en compara-
Otro problema sería la dificultad de ción con los niños con trastorno de
las relaciones con los pares, síntomas ansiedad y niños de caso-control.4,19
de fobia social, rechazo de pares hacia - Retraso general en el desarrollo: Se
los niños con MS. Sin embargo, no se ha evidenciado que niños con MS
puede determinar causa-efecto en el presentaban con mayor frecuencia
sentido de que puede que los niños con problemas pre y perinatales y retra-
MS, no hablen debido a problemas aca- sos en la función motora fina y grue-
démicos y de interacción social, o que sa, en comparación con los niños
tales problemas surjan de no hablar en de caso-control. Al catalogarlos en
la escuela. relación al DSM-IV, el 17% de estos
niños tenían trastorno de coordina-
- Estado de Inmigrante ción del desarrollo, 32% de trastorno
En esta esfera destaca un estudio de de eliminación, 8% de retraso mental
Elizur y Perednik (2003), los que rea- leve y 7% de trastorno del espectro
lizaron entrevistas telefónicas a los autista. Por lo tanto, aunque está me-
maestros de preescolar en el oeste de nos investigado que los problemas
Jerusalén, Israel, para identificar a los de lenguaje y habla, hay evidencia de
niños con MS. Los resultados mostra- que el MS está asociado con la inma-
ron que la prevalencia de MS entre los durez del neurodesarrollo.4,18
niños inmigrantes era de 2,2%, que era - Anomalías neurológicas: Existen
más de cuatro veces la tasa de ocurren- estudios que reportan que el refle-
cia del MS en niños de familias nativas jo acústico del oído medio, el cual
(0,5%) 4,20. Parece que hay una tenden- sirve para enmascarar la propia voz
cia a que los niños en proceso de inmi- durante el habla y otro reflejos audi-
gración serían más propensos a desa- tivos, tendría una función anormal
rrollar MS, lo que podría estar relacio- en niños con MS y que esto resultaría
nado con la aculturación, adquisición en una experiencia subjetiva anor-
de un segundo idioma, discriminación, mal de la propia voz del niño 4,23,24,25.
rechazo de pares4,21, así como los nive- Es poco probable que las actividades
les elevados de miedo y ansiedad que eferentes auditivas reducidas repre-
los niños de grupos étnicos minorita- senten un mecanismo causal único
rios sufren. 4,22 del MS, pero su existencia, en com-
binación con la ansiedad (social), la
3. Factores Del Neurodesarrollo timidez y la inhibición del comporta-
miento, podrían contribuir a la etio-
Hay estudios que indican que los niños logía de esta afección.
con MS, tendrían:
- Problemas del lenguaje y del habla: En cuanto a la evolución del MS, se
Existen estudios donde a niños con evidencia en la literatura científica que
MS, se les ha diagnosticado trastor- los pacientes presentar un promedio de
no mixto del lenguaje receptivo-ex- duración de este trastorno alrededor de
presivo (17%), trastorno del lenguaje 8 años e incluso una vez que se resuelve
expresivo (12%), y / o trastorno fo- la sintomatología principal, las perso-
nológico (43%)4,23, así como también nas afectadas por MS continúan mos-
dificultades en habilidades de vo- trando deficiencias en las habilidades

Todos los derechos reservados Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 69
Contribuciones
de comunicación, el rendimiento esco- dentro de la psicopatología propia del
lar, las relaciones familiares y sociales y cuadro del trastorno propiamente tal,
tienen un mayor riesgo de desarrollar se podría destacar que aparece princi-
afecciones psiquiátricas en compara- palmente en niños pequeños, menores
ción con la población general.4 Con de 5 años, pudiendo verlo en cuadros
respecto al tratamiento, los niños pe- psicóticos donde prevalecen los sínto-
queños parecen responder mejor que mas de negativismo en el contexto de
los niños mayores, tanto a la Terapia Síndrome Catatónico, en estructuras
Cognitiva Conductual (TCC) como a psicóticas, como es en el caso de pa-
la medicación. En niños preescolares cientes con trastorno del espectro au-
se ha encontrado una alta tasa de res- tista (TEA), en cuadros conductuales
puesta a la TCC (78%), sin embargo, donde aparece el mutismo como una
en los primeros años escolares, la res- oposición al otro, así como también en
puesta a TCC es baja (33%). Por lo que cuadros anímicos y ansiosos donde la
se plantea en la literatura que en pre- inhibición o reacción ante un estímulo
escolares la TCC se debería considerar que provoca angustia o miedo, puede
como primera línea, reservando la far- provocar esta sintomatología. Se men-
macoterapia a aquellos que no respon- ciona esto, porque el trastorno del mu-
den a un largo ensayo de TCC. Para los tismo selectivo, expuesto anteriormen-
escolares se sugiere un enfoque combi- te, revisando la evidencia científica,
nado que incluye medicamentos luego está relacionado fuertemente con la an-
de un ensayo de TCC (por ejemplo 3 siedad, de hecho, está clasificada den-
meses, con evidencia de progreso limi- tro de los Trastornos Ansiosos (TA),
tado).26 Específicamente en la farmaco- sin embargo, existen múltiples factores
terapia, dado que el MS, se ha clasifica- relacionados con su etiología, que van
do como un trastorno de ansiedad, se más allá de la ansiedad. Se intentará
sugiere utilizar fármacos que apunten aportar al entendimiento del MS, des-
a los trastornos de ansiedad en general, de el análisis de los mecanismos subya-
como los ISRS.3,27 El uso de fluoxetina centes en base a la teoría Winnicottia-
y sertralina tienen resultados simila- na, con el objetivo de poder entender
res, a pesar de algunas mejorías, los más este trastorno, que es raro dentro
pacientes en estudios han permaneci- de la psiquiatría, pero de gran impacto
do fuertemente sintomáticos.28,29 Dado en la salud mental y de una clara ten-
que las  teorías explicativas no logran dencia a la cronicidad.
dar cuenta totalmente del origen y tra-
tamiento del M.S. se hace necesario Análisis Psicodinámico
explorarlo desde otra perspectiva, por
ello se propone revisar los fundamen- Desde una mirada Winnicottiana pa-
tos de la teoría de D. Winnicott, siendo rece interesante analizar cómo se cons-
el objetivo del presente trabajo. truye el individuo en su propio desa-
rrollo y desde esa base se relaciona con
DISCUSIÓN un otro. Para que suceda este proceso,
es importante que ocurran el holding,
Teniendo presenta las características handling y presentación de objeto, en
antes descritas, se podría analizar en un ambiente el cual es predecible y ru-
qué circunstancias clínicas y/ o cuadros tinario para el bebé, donde se propicia
clínicos aparece el síntoma mutista, y el proceso progresivo de integración

70 Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 Todos los derechos reservados
Contribuciones
percatamiento y relación con el objeto, (cuando es acariciado) comprendien-
donde el bebé va relacionándose con do que es una unidad, generando mo-
el mundo, pasando desde un estado de mentos de integración 31. Se plantea
unidad, de dependencia absoluta hacia que en este proceso de integración psi-
una dependencia relativa; siendo la co- que-soma, de percatamiento progresi-
municación la forma en la cual el niño vo, también se empieza a desarrollar la
se relaciona con el mundo, con un ob- comunicación, y en específico el len-
jeto externo, con un otro. 30,31 En rela- guaje; Meltzer,(1996) menciona que a
ción al proceso de construcción del in- través de la emisión de sonidos y bal-
dividuo, parece importante mencionar buceos que provocan un experimentar
cómo el sostén materno (holding), se el propio cuerpo, se va generando un
relaciona con la integración a través de lenguaje interno, para luego empezar a
dos procesos fundamentales que son 1) ocupar un espacio desconocido, el cual
las técnicas del cuidado, es decir que lo es un entre mamá hijo disolviendo la
tomen, que lo cambien, que lo abracen unidad y propiciando una separación,
y 2) las experiencias instintivas agudas. de lo que pudiera ser el espacio transi-
Luego este proceso de construcción del cional donde el niño vierte su sonido el
individuo, continúa con la personali- que se emite y es metabolizado en ese
zación, la cual está relacionada con el espacio y recibido por un otro el cual
handling (la acción concreta que hace genera una reacción con respecto a esa
la madre de contenerlo, de tocarlo, de emisión de sonido. 33,34
estar siendo atendido), proceso que
tiene que ver con lo psicosomático, En este contexto, según Meltzer (1996)
donde el bebé ocupa su propio cuerpo, la aparición del lenguaje se gesta desde
donde el cuerpo que ocupa le pertene- lo corporal a lo simbólico, y como
ce y puede manejarlo. Finalizando con mencionamos anteriormente, al ir apa-
la realización, en el cual se presenta reciendo este brote de lenguaje y ex-
el objeto, lo que es progresivo, transi- pandiendo en un espacio transicional,
tando desde la ilusión que la madre le en el cual también se inserta en lo sim-
permite al bebé tener la experiencia de bólico, el niño va tocando el mundo a
crear al pecho (omnipotencia), base de través de su lenguaje, lo va creando in-
la creatividad primaria, hacia la des- teriormente para que pueda vivir en él
ilusión de la madre que se retira pro- y con él a través de sus palabras, por lo
gresivamente y el niño puede iniciar su que el lenguaje no sólo implica el as-
contacto con la realidad.32 pecto cognoscitivo de su desarrollo,
sino que, sin duda, va asociado aspec-
En este punto en el cual el niño va tos emocionales que configuran cómo
constituyendo y relacionándose con el bebé se piensa a si mismo y cómo va
la realidad, nos referiremos al perca- percibiendo el objeto externo, por lo
tamiento, que según Winnicott es el que la función materna a través de los
proceso que ocurre en el bebé, en el procesos antes descritos por Winnico-
cual se “percata” que la madre objeto y tt, es fundamental para que este desa-
la madre ambiente es la misma; donde rrollo ocurra de manera natural. Si
puede empezar la vivencia que también todo va bien; el desarrollo de la comu-
él es el mismo cuando está en estados nicación y el contacto con el mundo
excitados, (movilizado, sobresaltado) externo sigue su curso. Llegamos al
o cuando está en estados de quietud, momento donde el niño cumple 2-3

Todos los derechos reservados Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 71
Contribuciones
años, que es la edad de más prevalencia traría experiencia y sería una amenaza
del MS, apareciendo hechos de gran re- para el bienestar del niño, tendiendo a
levancia: 1) a nivel neurobiológico: en tener experiencia en la medida que su-
los primeros 3 años de vida, existe un friera ataques del ambiente. Esta oposi-
peak de: densidad sináptica, de recep- ción que resulta en un contacto con el
tores de dopamina, tasa metabólica ce- otro, parece interesante ponerla nueva-
rebral 35, 2) a nivel conductual: ocurre mente de manera relevante en el desa-
la fase oposicionista del desarrollo, 3) a rrollo del niño, en la fase oposicionista,
nivel del lenguaje: el niño llega a nomi- donde se plantea que esta relación con
narse como yo. Como vemos desde lo la oposición se metamorfosea a lo largo
neurobiológico es una etapa de gran de cada época etaria, sin embargo es
importancia, se desarrollan las vías do- muy interesante poder verlo desde este
paminérgicas que tienen una gran rele- punto de vista del niño que tiene este
vancia en el estudio neurobiológico de comportamiento oposicionista, lleván-
la psicosis. Con respecto al oposicio- dolo a la frustración con la realidad,
nismo, es conveniente abordarlo desde buscando la resistencia del otro, donde
como entiende la agresividad Winni- se constituye o se va consolidando el
cott, planteando que la agresión “forma limite con el otro, su diferenciación y
parte de la expresión primitiva del su propia sensación de ser, es decir de
amor”, existe antes de la integración de su construcción yoica, desde su centro
la personalidad, el bebé da patadas, donde a través de su motilidad-agresi-
muerde el pezón, es decir en su origen, vidad va contactándose con el mundo;
para Winnicott, la agresión es un símil por lo que aparentemente la agresivi-
a motilidad.34 Incluso el describe la dad puesta en el oposicionismo, la
agresión en diferentes fases, (pre in- construcción del ser propio, la del
quietud-inquietud-ira), en la cual el mundo, la de la relación con el objeto
niño va transitando desde que no apre- en esta etapa es impresionantemente
cia que lo que ataca en estados excita- coincidente, simultánea y de grandísi-
dos es lo mismo que valora en sus esta- ma relevancia. Este componente agre-
dos de quietud, a poder sentir culpa al sivo constituye el mundo interior del
percatarse de que es la misma madre a niño, así como también por las satis-
la que ataca, hasta la fase de ira suscita- facciones instintivas que le hacen sen-
da por la frustración que puede llegar a tirse bien, se llena de lo que siente
un extremo llegando a la escisión de como bueno y esto mantiene e inicia su
objetos buenos y malos, en detrimento confianza en si mismo, pero también
del sentimiento de culpabilidad.34 En existen sus ataques de ira, que como
este desarrollo de la agresión como ele- consecuencia lo llenan de cosas malas,
mento evolutivo del desarrollo emo- malignas o persecutorias, que como
cional del niño, parece interesante pro- contraparte ataca su base de confianza.
fundizar en la necesidad de la oposi- 34
Por lo que el niño tiene la tarea de
ción, la que surge en los estados preco- dirigir su mundo interior, tarea que co-
ces de la agresividad, como delta de la mienza cuando logra darse cuenta del
fusión entre los erótico y la movilidad, adentro y del afuera, de la fantasía y de
siendo este delta no fundido entre lo lo real, entendiendo que su dominio
erótico y la movilidad, potencial de del mundo externo depende del domi-
movilidad, necesitado de una oposi- nio del mundo interno, y parece que
ción, la cual si no existiese, no se regis- este darse de cuenta de estos elementos

72 Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 Todos los derechos reservados
Contribuciones
tiene su fase peak alrededor de los 3 cluso viendo a la introversión como un
años, siendo la agresividad parte fun- potencial de agresión real. 34 El tercer
damental de su culminación. 34 Dado punto relevante en los 2-3 años, es
este contexto Winnicott, plantea la in- cuando el niño llega a nominarse como
troversión que es característica impor- yo, y solo puede decirse yo en la medi-
tante del MS, en lo que se ha revisado, da que esté sostenida la experiencia de
como fuente común e importante de continuidad del ser, el cual se puede
agresión real, ya que en este estado lo dar por una parte a través de una ma-
bueno se concentra dentro y lo malo es dre suficientemente buena es decir des-
proyectado, y para poder recuperarse de el aspecto madre-ambiente. En esta
de la introversión patológica, exige un continuidad de la existencia, que per-
vuelco del niño hacia un mundo lleno mite al niño llegar a nominarse como
de perseguidores, y en este punto de su yo, el oposicionismo cobra protagonis-
recuperación el niño por lo general se mo nuevamente, siendo la agresividad
vuelve agresivo, y si este comporta- del niño un hecho fundamental de su
miento agresivo es poco contenido por diferenciación y contacto con la reali-
los que cuidan al niño, éste vuelve nue- dad externa es un momento por ejem-
vamente a la introversión.34 Si estos plo donde las pataletas son frecuentes,
planteamientos se pudieran analizar poniéndose en juego la sobrevivencia
desde la perspectiva de le evidencia, del objeto (Sobrevivencia en el sentido
hay autores que han planteado que el de no ser retaliativo), ya que al intentar
MS, aparentemente va más allá que del destruirlo, el objeto queda fuera del
espectro ansioso. En un estudio de Co- control omnipotente del niño, y al so-
han et al. (2008), realizaron un análisis brevivir a este ataque, puede percibir al
de perfil latente de los informes de los objeto como un fenómeno exterior y
padres de niños con MS sobre la ansie- no propio de su proyección; es decir el
dad social, los problemas de conducta niño puede vivir en el mundo de los
y los retrasos en la comunicación e objetos, transitando desde la relación
identificaron los tres grupos de niños: de objeto al uso del objeto. En este sen-
exclusivamente ansioso, combinado tido se plantea que el niño a través de
ansioso - levemente oposicionista y an- esta conducta se relaciona con la ma-
sioso – retraso en la comunicación. Los dre objeto. En la medida que la madre
resultados fueron sorprendentes ya no sobreviva a estos ataques, para Win-
que se descubrió que los niños exclusi- nicott significa que hay un ataque a la
vamente ansiosos representaban el estructura , lo que afecta a la relación
grupo más pequeño (12%) y que la ma- con el mundo; por lo que si no sobrevi-
yoría de los niños se clasificaban en los ve, se establece la defensa por sobre la
grupos combinados de ansiedad-leve- comunicación con el mundo, y es en
mente oposicionista y ansiedad - retra- este sentido que se plantea que una de
so de comunicación (45 y 43%, respec- las situaciones que podría estar bajo la
tivamente) 4,13. Por lo tanto, pareciera aparición del mutismo, es que se esta-
ser que el MS, va más allá de la ansie- blezca como una 1) defensa ante la no
dad, y Winnicott da luces de la impor- sobrevivencia de la madre.36 Al no so-
tancia de la agresividad en el propio brevivir la madre, el niño tiene que
desarrollo emocional, así como la adaptarse, no hay ambiente que pueda
agresión como un intento curativo en cuidarlo, no hay un ambiente confia-
lo que plantea en la introversión e in- ble, por lo que tiende al replegamiento,

Todos los derechos reservados Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 73
Contribuciones
se engolfa hacia lo más propio, por lo genera niños psicóticos”. Y finalmente
que queda interrumpida su experiencia otro mecanismo que pudiera estar bajo
de seguir siendo, de continuidad del la generación del mutismo como de-
ser, donde no hay lugar para la oposi- fensa es debido a las 3) intromisiones
ción sana, sino para una oposición pa- maternas, cuya existencia conduce al
tológica, que surge de los ataques del niño a desarrollar un sentido de esci-
medio, hasta el extremo donde no hay sión defensiva del self, de autoprotec-
espacio para la movilidad ni la cons- ción, donde predomina el falso self, ge-
trucción del individuo, desarrollándo- nerándose sometimiento donde el niño
se más desde la cáscara que desde el no se puede diferenciar, el yo está com-
núcleo, predominando el falso self. pletamente arrasado y cuando la in-
Para Winnicott, en relación al desarro- trusión sucede demasiado, se produce
llo del bebé, esta falla materna condu- un quiebre donde el sujeto no vuelve a
ciría al bebé a vivenciar angustias de un estado de reposo, quedando en una
aniquilamiento, donde existe un quie- pauta reactiva persistente, generando
bre en la existencia, es decir a la desin- una recarga motora en el ámbito de lo
tegración, y esta vivencia y tendencia a destructivo, la que tiende a salir, lo que
la desintegración podría aparecer nue- implica la necesidad de la sobreviven-
vamente y aún más en esta etapa de los cia materna, generando un circuito de
2-3 años, debido a que se pone en jue- procesos psicodinámicos, que podrían
go nuevamente y como punto cúlmine estar bajo la presentación clínica del
del desarrollo mediante la agresividad mutismo. 38,39 Si se hiciese un parale-
propia de la etapa, la sobrevivencia de lismo de estos mecanismos planteados
la madre, que por características des- con lo anteriormente descrito de las fa-
critas de padre y madre (ansiosos, evi- milias y padres de estos niños, podría
tativos, controladores, sobreprotecto- considerar que por ejemplo la sobrevi-
res), resultaría dificultosa; por lo que el vencia de la madre, sobreidentificación
mutismo se plantea que aparecería materna con el niño y las intromisiones
como una defensa ante esta desintegra- maternas, se ponen en juego en aque-
ción.30,37 llas madres o padres o sistemas familia-
res donde predomina la ansiedad, que
Otra de las situaciones que también lle- tiende a presentar el mundo de manera
van a la desintegración y se cree posible amenazante, es decir tiende a la visión
considerar, pueda estar ligada a la apa- paranoide de éste, a ser sobreprotecto-
rición del mutismo como defensa, es la ras, controladoras. Además, se podría
que ocurre con la 2) sobreidentifica- agregar desde una observación clínica,
ción materna con el niño y refiriéndose que las familias presentan escasos es-
a la identificación materna con el niño, pacios de comunicación entre sus in-
como aquella conexión sensorial, que tegrantes, no propiciando un ambien-
genera la madre donde la madre inter- te contenedor, con baja tolerancia a la
preta el niño en base a la experiencia diferenciación de sus miembros, así
de ella; sin embargo la sobre-identifi- como a tolerar las muestras de agresi-
cación materna con el niño, estimula la vidad de éstos, sistemas tendientes a la
dependencia, y tiende a no tolerar el re- sumisión, rígidos, con riesgo de la exis-
chazo del niño, ya que interpreta estas tencia del secreto familiar, así como de
señales como un ataque hacia ella. En ejercer la autoridad, desde el autorita-
palabras de Winnicott “la súper madre rismo, con empleo incluso de castigos

74 Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 Todos los derechos reservados
Contribuciones
físicos. Es importante que estos proce- dero self solo pueda manifestarse como
sos se podrían ver en los pacientes con una negativa; Winnicott lo menciona
mutismo, cuadro que particularmente específicamente asociado a alimenta-
su mayor prevalencia se da en niños ción del bebé, sin embargo, en el cua-
preescolares, cobrando sentido por lo dro del mutismo selectivo también se
expuesto anteriormente que se de en podría ver el no comunicarse como la
esta edad, desde una visión integral de expresión de un verdadero self, donde
desarrollo evolutivo-neurobiológico- el control omnipotente del lenguaje
psicodinámico, pero también podrían intenta posibilitar un nuevo paso de
ocurrir casos en niños mayores o en relación al uso de objeto. En esta ex-
adolescentes, donde el mutismo, como presión del verdadero self a través de la
en los mecanismos antes descritos apa- negativa, pudieran coexistir la negativa
rece como un replegamiento, un en- de comunicarse con la de alimentarse,
capsulamiento y pareciera que volvie- como podría ser una anorexia nerviosa
ran a esta etapa, donde aparentemente con un mutismo selectivo. 40 Winnico-
el contacto principal se podría dar a tt señala que la gravedad de la escisión,
través del cuerpo, con el cuidado, po- irá desde no tener razón para vivir, lo
niendo en juego aspectos maternos en que en el espectro sintomático del mu-
la transferencia con el tratante y con su tismo podríamos asociarlo con cua-
familia que tienen que ver con el hol- dros psicóticos con sintomatología ca-
ding-handling y presentación de obje- tatónica, desde una escisión primaria,
to, en la cual la sobrevivencia de la ma- donde es tal la interferencia que no hay
dre (o sistema familiar), el manejo de razón para comunicarse con el mundo
la intromisiones maternas, y la sobrei- externo, hacia los grados menores de
dentificación materna adquieren una escisión, donde el síntoma mutismo y
gran relevancia, con el objetivo de que el trastorno de mutismo selectivo pro-
este estado de replegamiento a través piamente tal aparecería como una or-
del manejo de las funciones maternas ganización secundaria de la escisión
en la transferencia logre llegar a una que implicaría una regresión frente a
regresión clínica para poder re-editar las dificultades con que el niño se ha
los aspectos emocionales enquistados topado en su desarrollo emocional. 40
en esta defensa. Adicionalmente es Como expresión corporal de la esci-
importante considerar que el mutis- sión y el control del medio que hace
mo es un cuadro que se da en base a la el paciente a través de no comunicar-
escisión, y según Winnicott en base a se, me parece interesante mencionar
este mecanismo se pueden desarrollar que algunos autores plantean que el
dos clases separadas de relación con el “comportamiento de no hablar” de los
objeto: 1) la vida privada del bebé o el niños con MS esencialmente debe ver-
individuo, basándose en las relaciones se como una estrategia de regulación
más en su capacidad de crear que en emocional 4,41. Es decir, al permane-
el recuerdo de los contactos y por otro cer en silencio, estos niños reducen la
lado 2) el falso self que se desarrolla ansiedad u otras emociones negativas
sobre la base del sometimiento y se co- en situaciones estresantes o desafiantes
necta de forma pasiva con las exigen- (por ejemplo, en la escuela). En rela-
cias de la realidad externa. Winnicott ción a esta hipótesis, Young et.al (2012)
menciona que la explotación de este realizó un estudio interesante, en 35 ni-
falso self sometido, lleva que el verda- ños entre 5 y 12 años, los cuales se dis-

Todos los derechos reservados Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 75
Contribuciones
tribuían de la siguiente manera: 10 con personas que logren sostenerlos.
MS, 11 con fobia social, y 14 sin diag-
nóstico, participaron en dos tareas de CONCLUSIONES
interacción social: (1) un juego de ro-
les que el niño tuvo que responder a las El Mutismo sigue siendo una patología
declaraciones y preguntas formuladas poco frecuente dentro de la psiquiatría,
por un compañero de la misma edad y ocurre prevalentemente a una edad
(2) leer en voz alta frente a una peque- muy significativa en el desarrollo hu-
ña audiencia compuesta por un adulto mano, que es a los 3 años, hay pocos
y un compañero de la misma edad. Las estudios en relación a este trastorno
mediciones incluyeron calificaciones y los estudios que existen son de pa-
de ansiedad de niños y observadores, cientes acotados. Es un trastorno que
así como medidas psicofisiológicas tiende a la cronicidad y que presenta
(por ejemplo, actividad electrodérmi- una gran disfuncionalidad a largo pla-
ca, frecuencia cardíaca). Las clasifi- zo, siendo los tratamientos más efecti-
caciones de autoinforme de los niños vos propuestos la TCC y ISRS. En su
no revelaron diferencias significativas etiología existen elementos genético-
en la ansiedad entre los tres grupos. temperamentales, ambientales (fami-
Sin embargo, según las observaciones liar-educacional, estado migrante), y
de comportamiento, el grupo de MS del neurodesarrollo (alteraciones del
mostró los niveles de ansiedad más al- lenguaje, retraso del desarrollo, anor-
tos durante las tareas de interacción, y malidades neurológicas), que son muy
éstos fueron incluso significativamente importantes a tener en cuenta, para un
más altos que los del grupo de fobia so- diagnóstico integral y panificación de
cial. Inesperadamente, las medidas psi- tratamiento según las características
cofisiológicas indicaron que los niños de cada paciente para otorgarle mayo-
en el grupo MS experimentaron menos res oportunidades de recuperación. Sin
excitación que los otros niños mientras embargo, con la evidencia que existe,
realizaban las tareas de interacción so- se observa que el Mutismo Selectivo, va
cial. Sobre la base de estos hallazgos, mas allá de un trastorno ansioso (TA)
Young et al. (2012) postuló que la falta como lo plantea actualmente el DSM 5,
de habla en los niños con MS puede re- siendo el único TA, que en sus criterios
flejar “una estrategia eficaz de evitación diagnósticos no hay una referencia ex-
mediante la cual se puede disminuir la plícita al miedo o la ansiedad, sino más
angustia emocional y fisiológica» 4,42 bien se mantiene el criterio acerca de la
y desde Winnicott viene a reflejar la a falla en el hablar 3. Por lo que en este
gran escisión con el cuerpo que tienen escenario, a través de la teoría de Win-
estos pacientes también. Terminando nicott, se intenta dar un marco teórico
con respecto a lo selectivo, parece que permitiendo entender el Mutismo Se-
serán más selectivos o no, en la medi- lectivo, en base al desarrollo de como
da que los siguientes factores tiendan se integra el niño y como se va relacio-
a ser muy intensos o muy frecuentes: nando con los objetos y con el mundo
1) cuan amenazante es la presentación exterior, dando gran relevancia la edad
del mundo que le otorgan los padres a de 3 años, proponiéndose que la agre-
los niños, 2) intensidad de las angus- sividad propia del desarrollo emocio-
tias primitivas que sienten, 3) intensi- nal, es un elemento central de como
dad de la falla ambiental, 4) ambiente o entender la génesis del MS. Siendo el

76 Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 Todos los derechos reservados
Contribuciones
MS una organización defensiva, un re- children with selective mutism: A
plegamiento ante la 1) no sobreviven- case-control study. Journal of Ab-
cia de la madre, 2) sobreidentificación normal Psychology, 110, 648–652.
materna y la 3) intromisiones mater- 6. Kristensen, H., & Torgersen, S.
nas; que en estricto rigor va más allá de (2002). A case-control study of
la madre (Winnicott lo plantea desde EAS child and parental tempera-
el desarrollo del bebé), involucrando al ments in selectively mute children
sistema familiar donde se desarrolla el with an without a comorbid com-
niño. En esta forma de aproximarse al munication disorder. Nordic Jour-
MS, la escisión y las consecuencias de nal of Psychiatry, 56, 347–353.
ésta son fundamentales para entender 7. Chavira, D. A., Shipon-Blum, E.,
la gravedad del cuadro, para compren- Hitchcock, C., Cohan, S., & Stein,
der en la amplitud de cuadros donde M. B. (2007). Selective mutism and
puede aparecer el síntoma del mutismo social anxiety disorder: All in the
y como el trastorno de mutismo selec- family? Journal of the American
tivo se puede ir metamorfoseando ha- Academy of Child and Adolescent
cia otra sintomatología en su tendencia Psychiatry, 46, 1464–1472.
a la cronicidad (43). 8. Stein, M. B., Yang, B. Z., Chavira,
D. A., Hitchcock, C. A., Sung, S.
BIBLIOGRAFÍA C., Shipon-Blum, E., & Gelernter, J.
(2011). A common genetic variant
1. Association AP (2013) The Diag- in the neurexin superfamily mem-
nostic and Statistical Manual of ber CNTNAP2 is associated with
Mental Disorders: DSM 5. book- increased risk for selective mutism
pointUS and social anxiety-related traits.
2. Lang C., Nir Z., Ayelet G. et.al., Biological Psychiatry, 69, 825–831.
The outcome of children with se- 9. Kumpulainen, K., Räsänen, E.,
lective mutism following cogni- Raaska, H., & Somppi, V. (1998).
tive behavioral intervention: a fol- Selective mutism among sec-
low-up study. Eur J Pediatr (2016) ond-graders in elementary school.
175:481–487. European Child and Adolescent
3. Remschmidt, H., Poller, M., Her- Psychiatry, 7, 24–29.
pertz-Dahlmann, B., Hennighau- 10. Steinhausen, H. C., & Juzi, C.
sen, K., & Gutenbrunner, C. (2001). (1996). Elective mutism: An anal-
A follow-up study of 45 patients ysis of 100 cases. Journal of the
with elective mutism. European American Academy of Child and
Archives of Psychiatry and Clinical Adolescent Psychiatry, 35, 606–
Neuroscience, 251, 284–296. 614.
4. Muris P., Ollendick T., Children 11. Ford, M. A., Sladeczek, I. E., Carl-
Who are Anxious in Silence: A son, J., & Kratochwill, T. R. (1998).
Review on Selective Mutism, the Selective mutism: Phenomenologi-
New Anxiety Disorder in DSM-5. cal characteristics. School Psychol-
Clin Child Fam Psychol Rev (2015) ogy Quarterly, 13, 192–227.
18:151–169 12. Thomas, A., & Chess, S. (1977).
5. Kristensen, H., & Torgersen, S. Temperament and development.
(2001). MCMI-II personality traits New York, NY: Brunner/Mazel.
and symptom traits in parents of 13. Cohan, S. L., Chavira, D. A., Shi-

Todos los derechos reservados Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 77
Contribuciones
pon-Blum, E., Hitchcock, C., Child and Adolescent Psychiatry,
Roesch, S. C., & Stein, M. B. 46, 1187–1195.
(2008). Refining the classification 20. Elizur, Y., & Perednik, R. (2003).
of children with selective mutism: Prevalence and description of se-
A latent profile analysis. Journal of lective mutism in immigrant and
Clinical Child and Adolescent Psy- native families: A controlled study.
chology, 37, 770–784. Journal of the American Academy
14. Bubier, J. L., & Drabick, D. A. G. of Child and Adolescent Psychia-
(2009). Co-occurring anxiety and try, 42, 1451–1459
disruptive behavior disorders: The 21. Viana, A. G., Beidel, D. C., & Rabi-
roles of anxious symptoms, reac- an, B. (2009). Selective mutism: A
tive aggression, and shared risk review and integration of the last
processes. Clinical Psychology Re- 15 years. Clinical Psychology Re-
view, 29, 658–669. view, 29, 57–67.
15. Black, B., & Uhde, T. W. (1995). 22. Beidas, R. S., Suarez, L., Simpson,
Psychiatric characteristics of chil- D., Read, K., Wei, C., Conolly, S.,
dren with selective mutism: A pi- & Kendall, P. C. (2012). Contextual
lot study. Journal of the American factors and anxiety in minority and
Academy of Child and Adolescent European American youth pre-
Psychiatry, 34, 847–856. senting for treatment across two
16. Kopp, S., & Gillberg, C. (1997). urban university clinics. Journal of
Selective mutism: A population- Anxiety Disor- ders, 26, 544–554.
based study. Journal of Child Psy- 23. Arie, M., Henkin, Y., Lamy, D., Te-
chology and Psychiatry, 38, 257– tin-Schneider, S., Apter, A., Sadeh,
262. A., & Bar-Haim, Y. (2007). Re-
17. Edison, S. C., Evans, M. A., duced auditory processing capac-
McHolm, A. E., Cunningham, C. ity during vocalization in children
E., Nowakowski, M. E., Boyle, M., with selective mutism. Biological
& Schmidt, L. A. (2011). An inves- Psychiatry, 61, 419–421.
tigation of control among parents 24. Bar-Yaim, Y., Henkin, Y., Ari-
of selectively mute, anxious, and Even Roth, D., Tetin-Schneider,
non-anxious children. Child Psy- S., Hildesheimer, M., & Muchnik,
chiatry and Human Development, C. (2004). Reduced auditory effer-
42, 270–290. ent activity in childhood selective
18. Kristensen, H. (2000). Selective mutism. Biological Psychiatry, 55,
mutism and comorbidity with de- 1061–1068.
velopmental disorder/delay, anxiety 25. Muchnik, C., Ari-Even Roth, D.,
disorder, and elimination disorder. Hildesheimer, M., Arie, M., Bar-
Journal of the American Academy Haim, Y., & Henkin, Y. (2013).
of Child and Adolescent Psychiatry Abnormalities in auditory efferent
1994; 33:, 39, 249–256. activities in children with selective
19. Manassis, K., Tannock, R., Gar- mutism. Audiology and Neurotol-
land, J., Minde, K., McInnes, A., ogy, 18, 353–361.
& Clark, S. (2007). The sounds of 26. Oerbeck B., Stein M., Pripp A.Se-
silence: Language, cognition, and lective mutism: follow-up study
anxiety in selective mutism. Jour- 1 year after end of treatment. Eur
nal of the American Academy of Child Adolesc Psychiatry (2015)

78 Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 Todos los derechos reservados
Contribuciones
24:757–766. tions for selective mutism: A pilot
27. Manassis K., Oerbeck B.,Romving study. Can J Psychiatry 2008; 53:
K.The use of medication in selec- 700-3.
tive mutism: a systematic review. 36. Black B, Uhde TW. Treatment of
Eur Child Adolesc Psychiatry elective mutism with Fluoxetine: a
(2016) Jun 25(6)571-8. Manassis double-blind, placebo-controlled
K, D.W.Winnicott. “El Concepto study. J Am Acid Child Adolesc
De Falso Self ”. “El Hogar Nuestro Psychiatry
28. Punto De Partida” (1986).Editorial 37. D.W.Winnicott. “La integración
Paidos, Buenos Aires, 1996. 78-83 del yo en el desarrollo del niño”.
29. D.W.Winnicott. “La Distorsión Del “Los procesos de Maduración y
Yo En Términos De Verdadero Y El Ambiente Facilitador” (1965).
Falso Self ”.“Los Procesos De Mad- Editorial Paidos, Buenos Aires
uración Y El Ambiente Facilitador” 1993. 73-82. D.W.Winnicott. “In-
(1965). Editorial Paidos, Buenos tegración”. “Naturaleza Humana”
Aires, 1993. 182-199 (1988). Editorial Paidos, Buenos
30. D.W.Winnicott. “Establecimiento de Aires, 1993. 165-172
la Relación con la Realidad Externa”. 38. D.W.Winnicott. “Desarrollo Emo-
“Naturaleza Humana” (1988). Edito- cional Primitivo”. “Escritos de Pe-
rial Paidos, Buenos Aires, 1993.145- diatría y Psicoanálisis” (1958). Ed-
163. itorial Paidos, Buenos Aires, 1979.
31. Scott, S., & Beidel, D. C. (2011). 397-404
Selective mutism: An update and 39. D. Meltzer. “Sobre Lenguaje”. “Jor-
suggestions for future research. nada de Trabajo con el Dr. Meltzer
Current Psychiatry Reports, 13, 6/7/96”. “Transcripcion Jornadas
251–257. Asociación Bick España”. 1-12.
32. Young, B. J., Bunnell, B. E., & 40. D.W.Winnicott. “La Agresión en
Beidel, D. C. (2012). Evaluation el Desarrollo Emocional”. “Escri-
of children with selective mutism tos de Pediatría y Psicoanálisis”
and social phobia: A comparison (1958). Editorial Paidos, Buenos
of psychological and psychophysi- Aires, 1979. 275-293.
ological arousal. Behavior Modifi- 41. Gleason M., Link H.,Emily G.Psy-
cation, 36, 525–544. chopharmacological Treatment for
33. Mulligan, C.A. (2012). Selective Very Young Children: Contexts
mutism: Identification of subtypes and Guidelines. J. Am. Acad. Child
and influence on treatment. Phil- Adolesc. Psychiatry,46:12, Decem-
adelphia College of Osteopathic ber 2007.
Medicine Psychology Disserta- 42. D.W.Winnicott. “Sobre El Uso
tions, Paper 210. De Un Objeto”. “Exploraciones
34. D.W.Winnicott. “Objetos y Psicoanalíticas” (1989). Editorial
Fenómenos Transicionales”. “Real- Paidos, Buenos Aires, 1993. 275-
idad y Juego” (1971). Editorial Ge- 293. 261-272. 43. D.W.Winnicott.
disa, Barcelona 1992.17-45 “Replegamiento y Regresión”.“E-
35. Tannock R. Comparing interven- scritos de Pediatría y Psicoanálisis.

Todos los derechos reservados Rev. Chil. Psiquiatr. Neurol. Infanc. Adolesc. / Volumen 31, Nº 1, Marzo 2020 79

También podría gustarte