SÍNTESIS

Economía de la Educación a Nivel Macroeconómico

ECONOMÍA POLÍTICA DE LA EDUCACIÓN

UNIVERSIDAD DEL GOLFO
Ing. Flor Judelkis Torres Torres
Economía De La Educación A Nivel Macroeconómico

Tristemente, en nuestro país, el sistema educativo presenta notorias

deficiencias económicas, aunado a que, es necesaria una inyección de recursos
para mejorar la infraestructura escolar, la calidad docente y el acceso a los niveles
básico y medio superior.

La educación, visto como un gasto público, ineficiente y limitado no puede ni

debe admitirse en un país que subsiste con carencias sociales y económicas,
enfrentando un escenario de recursos públicos escasos. El sistema educativo no se
basa en la obtención de buenos o malos resultados y no existe información para
valorar la eficiencia de un buen desempeño educativo, así como tampoco, criterios,
indicadores o reglas que regulen el uso eficiente de los pocos recursos que se
otorgan a favor de la educación.

Actualmente, la infraestructura y el equipamiento en la mayoría de todas las

escuelas del país, es deficiente. De igual manera existen zonas marginadas donde
no existe cobertura y el desplazamiento de muchos educandos es motivo de
deserción. Así mismo, se necesitan recursos adicionales que permitan ampliar las
opciones en la educación para elevar la calidad en todos los niveles educativos.

El gasto educativo, se basa en dos tipos de financiamiento: el gasto público,

referido a los recursos que destina el gobierno federal, el estatal y el municipal a la
educación pública, sin embargo la mayor parte de este financiamiento se encuentra
comprometido con el pago de servicios personales.
Otro, es el gasto privado, que son los recursos que destinan los particulares
como usuarios directos de estos servicios educativos a variedad de instituciones
públicas y privadas.
 También hay que tomar en cuenta que, las familias mexicanas pagan un
costo por la educación, sea a manera de inscripciones, libros, exámenes, etc. Por lo
tanto, la educación pública no es gratuita. Ante esta situación, hagamos incapie en
que, en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su artículo
tercero dice que: “Toda la educación que el estado imparta será gratuita.” Mientras
que la Ley General de Educación, en el artículo sexto cita que, “Las donaciones
destinadas a dicha educación en ningún caso se entenderán como
contraprestaciones del servicio educativo”.

El gasto privado en la educación, en los años de 1992 a 2001 creció

considerablemente ante el gasto público, lo que implicó que, la evolución de la
educación mexicana presenciara la expansión de las escuelas particulares a pesar
de la calidad del servicio educativo con las que se cuenta, además, algunos hogares
mexicanos tomaron la decisión de enviar a sus hijos a las escuelas particulares
debido a la reducción del apoyo económico que la educación recibió ante el
gobierno de Carlos Salinas de Gortari.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE),

menciona que en México la mayor parte del gasto nacional en educación está
estrechamente comprometida con el gasto corriente, para mantener a flote el
sistema educativo del país.
Estos gastos corrientes, como lo son los salarios de los docentes y demás
trabajadores de la educación, libros de texto y el diverso material didáctico
empleado para el desempeño docente absorben la mayor parte del gasto nacional,
dejando de lado el mantenimiento y equipamiento de las instalaciones educativas,
provocando un acelerado deterioro y en corto plazo una perdida.

Esta falta de recursos origina eventualmente que los padres de familia

aporten al gasto corriente para mantener la escuela a la que asisten sus hijos,
hecho que, existen muchas comunidades donde se carece de recursos para estas
cuotas, volviendo al punto inicial, donde existe deterioro y perdida en algunas
instituciones educativas.

Está claro que es imposible que las necesidades sociales, enfatizando en la

educación; sea sostenida únicamente con fondos públicos. El gobierno esta
obligado a buscar alternativas para apoyar económicamente a las instituciones
educativas.
En relación a la aplicación de los recursos, el gobierno no debe permitir que
el gasto corriente deje al sistema educativo prácticamente sin recursos para el
mantenimiento y equipamiento, al contrario, se debe gestionar aún mejor para
obtener mayores recursos y así equipar las instituciones educativas que en muchos
casos, ni siquiera una infraestructura apropiada tienen.

Actualmente, ante la situación de la pandemia por COVID-19, para un

regreso a clases seguro, se pedía a las instituciones educativas diferentes medidas
de sana distancia y cuidado de la salud, como ejemplo, el adecuar lavabos para que
los alumnos lavaran sus manos periódicamente, pero, existen escuelas donde el
vital líquido no les llega. Otro ejemplo también, se pide una distancia de 1.5 metros
entre alumno y alumno, en aulas de 50mtrs cuadrados aproximadamente con más
de 35 alumnos. Son situaciones que nos rebasan y que rebasan la economía de las
diferentes instituciones educativas en las que cada una, posee sus propias
problemáticas, necesidades y carencias.

En términos generales, para que una economía tenga crecimiento sostenido

y equidad, es decir, sea una economía exitosa, se requiere de tres factores
decisivos: el arreglo institucional, estabilidad del marco macroeconómico y por
último, continuidad a la acumulación de capital humano mediante un sistema
educativo de calidad.
 Una propuesta planteada se basa en, definir el papel del gobierno, es decir,
que en vez de ofrecer directamente el servicio educativo, mejor garantice la igualdad
de oportunidades de acceso a la educación.
Ante esta situación, seria benéfico que, se evaluara el desempeño de los
docentes, tanto del sector público como privado para que la educación que ofrecen
sea de calidad y que propiamente, los recursos destinados para el sector educativo
sean los necesarios y que se aprovechen apropiadamente.
Bibliografía

Dra. Santibáñez Lucrecia; Mtra. Campos Mariana; Mtra. Jarillo Brenda. “10 puntos
para entender el gasto educativo en México: consideraciones sobre su
eficiencia”. Reporte elaborado por México Evalúa con base en el documento
Gasto en Educación: La Eficiencia del Financiamiento Educativo en México,
2010.

López Suárez, Adolfo; Morales Hernández, Ignacio; Silva Beltrán, Elvia E. “El
sostenimiento de la educación en México”, Papeles de Población, vol. 11,
núm. 44, abril-junio, 2005, pp. 239-254 Universidad Autónoma del Estado de
México Toluca, México.

Grupo Financiero Bancomer. “Educación para el Crecimiento Económico”. El

Entorno Institucional del Sistema Educativo Nacional. GFB, Agosto 1999.