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Ashley Sánchez Alcántara. ID: 10141509.

Psicología Jurídica (1134).


Lunes 13 de junio, 2022.

El abuso sexual infantil: La retractación de la víctima menor de edad.

El abuso sexual infantil ocurre con la interacción sexual entre una persona mayor
de 18 años y un menor de edad, en donde el niño es utilizado para estimular
sexualmente a la persona abusadora, y se considera abuso sexual sin importar de
que el niño sepa o no la consecuencia de los actos a los que está siendo obligado
a practicar, esta definición es una rápida construcción de la idea en mi cabeza que
he podido formular gracias a la lectura de la investigación realizada por la Dra.
Romina Monteleone.

Ahora bien, puedo complementar la definición dada en el preámbulo con lo


planteado por los doctores Ruth Kempe y Henry Kempre, quienes plantean que ‘’El
abuso sexual implica actividades sexuales que el niño no comprende por ser
inmaduro e incapaz de dar un consentimiento informado’’. Dicho esto, no es de
mucha dificultad deducir en base a lo anterior que precisamente por la inmadurez y
desconocimiento de lo ocurre por parte de la víctima, los casos de abuso sexual
infantil se tornan complicados de resolver y peor aún cuando el menor se retracta.

Por lo general, el abuso sexual no es algo que el menor de edad suele mencionar,
es más, es común que muchos de estos casos no salgan a la luz debido a diversas
razones, como el miedo a que se deshaga el núcleo familiar, miedo gracias a
amenazas verbales o físicas por parte del agresor, sentimientos de culpa por parte
del menor, entre otras razones. Lo que si es notorio es que, en todo abuso sexual,
especialmente en el abuso sexual infantil, radica el miedo. Y es la razón, sobre todo
en los casos en los que el agresor suele tener una relación cercana con la víctima,
por la que ocurre la retractación del menor en el proceso judicial.

Durante el proceso judicial de la denuncia del abuso sexual, el menor puede pasar
por distintas etapas, sea desde el comienzo o finalizando el proceso; etapas las
cuales son descriptas de manera cronológica por Ronald Summit en su ‘’teoría de
la adaptación’’, las cuales mencionaré de manera detallada a continuación.
Ashley Sánchez Alcántara. ID: 10141509.
Psicología Jurídica (1134).
Lunes 13 de junio, 2022.

o La primera etapa de la teoría de Summit es el secreto. De esta etapa


podemos derivar una explicación sencilla y coherente. El menor suele tener miedo
de las consecuencias que podría sufrir él o su agresor en caso de que los demás
descubriesen lo que pasa. Como mencioné ut supra, en la mayoría de casos, el
menor conoce al abusador y tiene una relación directa con esa persona, ya sea
porque se trata de un familiar o algún otro cercano como un amigo íntimo de la
familia, algún maestro, niñero, etc. Esto provoca que el menor llegue a sentir que
es mejor guardar el secreto porque en caso de contarlo, nadie va a creerle dado a
quién es el agresor.
o Otra de las etapas es la desprotección. Esta desprotección se manifiesta por
parte de los padres. El adulto tiene autoridad sobre el menor, lo cual genera que
el menor sienta que no existe manera alguna de evitar o parar el abuso sexual. La
costumbre es que, en un hogar, el adulto es la autoridad y los niños son educados
con la costumbre de siempre respetar y obedecer al mayor. En los casos de abuso
sexual infantil, debido a esta razón, muchas veces las victimas prefieren callar y
esto permite que ‘’el abuso se reitere en el tiempo’’ (p.2).
o La tercera etapa es la adaptación o acomodación. Esta etapa es muy común.
Como he mencionado reiteradas veces, el menor conoce a su agresor, lo cual junto
al hecho del sentimiento de que no puede hacer nada para detener el abuso,
conlleva a un cierto tipo de adaptación a este tipo de actos. Es tanto así, que la
víctima puede hasta llegar a sentir culpa de lo es sometido, por lo que termina
aceptándolo. El menor no logra comprender de manera concreta lo que sucede,
por lo que a veces deduce simplemente que es su culpa y que el agresor no tiene
intención de herirlo porque lo ama.
o La penúltima etapa es la revelación tardía, que puede ser tanto conflictiva
como poco convincente. Cuando el abuso sexual ocurre a muy temprana edad, los
familiares no suelen descubrirlo hasta años más tarde cuando el menor se hace
adolescente y tiene un mayor conocimiento de lo ocurrido, y por ende, tiene la
capacidad de revelar lo que ocurre o ocurrió, lo cual torna la situación menos
creíble ante los familiares y los tribunales. A esto se añade que debido a los
Ashley Sánchez Alcántara. ID: 10141509.
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Lunes 13 de junio, 2022.
abusos, las víctimas suelen adoptar conductas depresivas y suicidas, las cuales
contribuyen a que sus relatos sean menos creíbles, a pesar de ser ciertos. Estos
desordenes de conducta son en su mayoría los que permiten que se descubra el
abuso sexual, ya que normalmente el menor de edad no menciona el abuso,
especialmente si es por parte de un familiar.
o La última etapa, pero no menos importante de esta teoría, siendo también el
foco de este ensayo, es la retractación. Este hecho ocurre cuando el menor,
durante el proceso, se retracta de su relato. La retractación no es un indicador de
que el menor mintió, si no más bien que siente culpa y se siente abrumado por
todo lo que sucede, por lo que se siente obligado a retractarse. Muchas veces, la
familia no ofrece un apoyo sustancial a la víctima, dado a que se siente presionada
al tener que encarcelar un familiar, la familia o el menor se sienten muy expuestos,
entre otras razones. Además de que el menor puede llegar a sentirse incomodo y
cohibido ante tantas personas, tener que hablar ante distintos auxiliares de la
justicia, etc. Lo cual puede culminar con la retractación del menor para eludir el
proceso legal.

Para un menor de edad, atravesar un proceso legal no es fácil, por lo que muchos
incurren a la retractación, lo cual complica el caso. De esto es posible plantear que
como el abuso sexual infantil involucra a un menor, debe ser considerado como un
caso especial ante las legislaciones, y el proceso debe ser extremadamente
cuidadoso, y procurar que el menor se sienta cómodo al momento de ofrecer sus
declaraciones, además de que es vital evitar que se siente sobreexpuesto. Es
evidente que revivir este tipo de sucesos para cualquier persona es difícil, y lo debe
ser aún más para el menor de edad, por lo que, si se innova la metodología de llevar
este tipo de procesos, se puede efectivizar que el menor no se retracte y se sienta
seguro de revelar el abuso.

Bibliografía
-Kempe Ruth S. y Kempre C. Henry. “Niños maltratados” Ediciones Morata, Madrid. Año 1979 .
-Monteleone R. ‘’ABUSO SEXUAL INFANTIL: la rectractación de la víctima y sus consecuencias
procesales’’. Año 2008.

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