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Monitoreo y Rider
Introducción.......................................................................................................3
Desarrollo............................................................................................................4
Conclusión...........................................................................................................5
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Introducción
3
Desarrollo
4
Diagrama 1:
Posicionamiento de los monitores. (Todos los monitores estarán en 45° apuntando al
musico del cual corresponda).
Mezcla:
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Conga: filtro pasa alto hasta 500 hz, realce de frecuencias en 5kHz
Bajo: Filtro pasa bajo hasta 9kHz, eq peaking bell reducción de 9db en 910Hz, realce
de 3 db en 150hz
Guitarra: Filtro pasa bajo 150Hz, realce en 6Khz
Teclado: Filtro pasa bajo 300Hz
Trompeta 1: Filtro pasa bajo hasta 600Hz, realce de 4 db en 10kHz
Trompeta 2: Filtro pasa bajo hasta 600Hz, realce de 4 db en 10kHz
Trombón 1: Realce de frecuencias 4kHz
Trombón 2: Realce de frecuencias 4kHz,
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Diagrama 3: (Los colores tienen el mismo significado que en el diagrama 1)
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Diagrama 4:
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Conclusión**
En conclusión, el trabajo realizado en la ejecución del rider técnico para un evento en
vivo es esencial para garantizar una distribución adecuada del sonido y satisfacer las
necesidades de los músicos en el escenario. En particular, la distribución de sidefills,
in-ears y drumfills desempeña un papel crucial en la calidad de la experiencia auditiva
para los músicos y su rendimiento en el escenario.
El uso estratégico de sidefills, que son altavoces colocados a los lados del escenario,
ayuda a proporcionar una imagen de sonido completa y equilibrada para los músicos.
Ubicados de tal manera que ofrezcan una cobertura uniforme en el escenario, y
permitan que los músicos escuchen claramente tanto su propia interpretación como la
de los demás miembros de la banda.
Los in-ears, o monitores personales, son esenciales para brindar a los músicos un
control individualizado sobre su mezcla y permitirles escuchar con claridad los
elementos musicales clave. La distribución adecuada de los in-ears, asegurando que
cada músico reciba su mezcla personalizada, mejora la comunicación y la
interpretación en el escenario.
Por último, los drumfills, que son monitores especiales para el baterista, son
esenciales para asegurar que el baterista pueda escuchar claramente su propio
desempeño y mantener la cohesión rítmica con el resto de la banda.
En general, al satisfacer las necesidades individuales de los músicos y garantizar una
mezcla equilibrada y clara, se crea un entorno sonoro propicio para un rendimiento
musical exitoso y una experiencia auditiva satisfactoria tanto para los músicos como
para el público.