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PARCIAL DE INVESTIGACIÓN
La investigación educativa está orientada a resolver problemas desarrollados en el
ámbito. Tiene como objetivo “la descripción, explicación, predicción o el control de
fenómenos educativos” (Techera y Questa-Torterolo, 2022, pp. 10), con la finalidad de
mejorar la educación ya que las investigaciones realizadas tienen impacto en las prácticas
docentes y en las políticas educativas. Está definida dentro del campo de los estudios
científicos, lo que quiere decir que es factible que utilice el método científico para asegurarse
la obtención de información precisa y confiable (p. 10).
Se busca comprender y explicar la forma en que se produce el aprendizaje y cómo
este es afectado por los contextos de la educación. Esta investigación sigue un método
determinado que depende del enfoque que se haya seleccionado para la investigación, ya que
depende del problema a investigar si se elige un enfoque cuantitativo, cualitativo o mixto.
Citando a Fraenkel y Wallen, las autoras establecen una serie de pasos que sigue el
método científico. Estos elementos que acompañan la investigación son: primero formular
una pregunta o identificar un problema. Así surgen todas las investigaciones, primero debe
definirse algo a investigar antes de comenzar. En segundo lugar, está el explicar el problema,
entiendo que se refiere a determinarlo y explicarlo. Tercero, determinar aquella información
que se necesita e identificar una forma para obtenerla. En cuarto lugar, esa información es
organizada y por último, se interpretan aquellos resultados obtenidos.
Aun sirviéndose del método científico, las investigaciones educativas no siempre son
capaces de abarcar todas las variables que rodean al objeto de estudio, ya que depende, en
cierta medida, de lo que el investigador seleccione. Por lo tanto, la visión que proporciona
sobre los fenómenos siempre es parcial.
Sobre el método científico, las autoras dicen que no es más que un conjunto de
tácticas que se utilizan en la construcción del conocimiento, y, una de las competencias que
un buen investigador debe tener, es la de saber aplicar las distintas opciones que le presenta
dicho método y entender cuál debe aplicar según las necesidades del problema a estudiar.
Para finalizar con la conceptualización de investigación educativa, las autoras distinguen
entre cinco tipos diferentes: la investigación básica (aquella centrada en generar
conocimiento contribuyendo a la teoría), la investigación aplicada (enfocada en la resolución
de problemas del mundo real), la investigación de evaluación (evalúa el valor, el mérito o la
calidad de los programas de intervención), la investigación-acción (como su nombre lo dice,
tiene foco en la resolver aquellos problemas a los que se enfrentan los profesionales en el
ejercicio de la profesión) y la investigación orientativa (cuyo foco es reducir inequidades y
proporcionar una voz a aquellos que son menos privilegiados).
El docente debe tener una formación en competencias investigativas para conocer los
diferentes procedimientos y prácticas para poder aplicar el método científico de una manera
válida y así ser capaces de “desarrollar estudios de calidad metodológica y ética” (p. 13). El
rol del docente radica principalmente en la capacidad de reflexionar a partir de las nuevas
problemáticas a las que se enfrenta la educación, identificando las mismas e investigando a
partir de ellas para poder aplicar los avances obtenidos y contribuir a la innovación
educativa.
Es a partir de la investigación, que logrará acompañar al estudiante en los nuevos
desafíos que presenta el mundo globalizado y con un avance en la tecnología muy marcado.
Los estudiantes deben poder posicionarse frente a este nuevo mundo, con cuestiones que
giran en torno a la ciudadanía digital y a las brechas que vienen también incluidas en este
nuevo mundo, en el cual las minorías también sufren la desigualdad.
La ética de la investigación radica en contemplar algunos aspectos a la hora de
realizar la investigación. El primero de ellos consiste en comunicar a los participantes de la
investigación sobre lo que se está haciendo y recibir un consentimiento de su parte para ser
partícipes de la misma; el segundo dice que se deben seguir protocolos que garanticen el
anonimato de los involucrados y, por último, que los datos que se reciban de su parte van a
ser confidenciales.