CLASE DÍA 06-08-2021

Preguntas de repaso.
1. ¿Cuáles son las premisas de la terapia narrativa?
2. ¿Qué rol cumplen las historias en la vida de un sujeto?
3. ¿Cuál es la posibilidad que te brinda la terapia narrativa?
4. ¿Cómo se crea una historia alternativa?
5. Para ti ¿qué es lo más destacable de la terapia narrativa?
6. Define qué es la logoterapia.
7. ¿Qué es la neurosis noógena?
8. Define la Derreflexión.
9. ¿Qué es el sufrimiento significativo y cuál es el sufrimiento inútil?

Ejercicio:
Preguntar a 3 personas 3 palabras con las que nos describen. (pareja, familiar y
compañeros de trabajo o amigos).
Ejercicio:
1. Verse durante 2 minutos frente al teléfono o espejo
Escribir lo que sentí, puedo describirme físicamente, o bien lo que mi propia
imagen me hizo sentir durante la contemplé. Al menos 10 frases de cómo
me describo.
Me vi frente al espejo y pude ver mi sonrisa, mis dientes, mis ojos maquillados,
mis lentes, me sentí bien, relajada, me siento inteligente, bonita, un poco tímida,
etc.
1. Bonita sonrisa
2. Lindos ojos
3. Persona inteligente
4. Relajada
5. Tímida
6. Uso lentes y me quedan bien
7. A veces enojada
8. Muy paciente
9. Entusiasmada
10. Feliz
Yo soy una persona inteligente, inteligente porque no me doy por vencida
fácilmente, porque a pesar de tener muchos obstáculos en mi vida he logrado
alcanzar muchos de mis objetivos. Soy inteligente porque he sabido
sobreponerme a todas aquellas veces que no he podido alcanzar lo que deseo, he
aprendido a cambiar mi perspectiva, he aprendido a llevar la vida de una manera
más relajada, más tranquila. He aprovechado oportunidades que le han dado giros
radicales a mi vida, las cuales me han hecho dudar de mí misma, pero que al final,
tienen una buena proyección a futuro, he aprendido a confiar más en mí y en mi
capacidad de tomar las decisiones por mi propia cuenta. Soy inteligente porque,
aunque al principio muchos no creían en que mis sueños se podían hacer
realidad, hoy soy evidencia viviente de que si nos proponemos una meta y
trabajamos constantemente en ella podemos hacerlo posible. Soy inteligente
porque tengo la capacidad de aprender y la disponibilidad de, a pesar de que las
cosas no vayan bien, puedo aprender de ellas y encontrar su razón de ser. Soy
inteligente porque la inteligencia es eso, la capacidad de aprender y el aprendizaje
no tiene límites.

Este ejercicio nos permite evaluar las etiquetas que nos han puesto y con la que
hemos creado nuestra propia identidad. Identidad basada en lo que los otros dicen
que somos, cuando en realidad nos corresponde personalmente crear lo que
queremos ser, tenemos esa capacidad, pero por la influencia de otros muchas
veces nos limitamos a darle ese cambio necesario a nuestra vida. No somos lo
que dicen que somos, somos lo que creemos que somos, excluyendo de esta
manera la forma tan vaga que tiene la gente de hacer concepciones nuestras
desde un poco de información que demostramos de nosotras mismas.

Ejercicio 2:
Escriba un Epitafio (mi propio epitafio), es en sí el resumen de la vida de cada uno
de nosotros, es el punto final y cuál fue el sentido de nuestra vida.
MI EPITAFIO:
Viví plenamente, no me arrepiento de todo lo que permití en mi vida, hoy me
transformé y me fui a averiguar qué hay más allá de este cuerpo, de estos
pensamientos y de esta manera de ser.
 INTELIGENCIA EMOCIONAL
“cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con la
persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito
justo, y del modo correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo” (Aristóteles).
Inteligencia emocional:
¿Es distinta a la inteligencia emocional del coeficiente intelectual?
El coeficiente intelectual nos viene dado de manera genética y se desarrolla
cuando somos niños. Una vez llegados a la edad adulta el CI se mantiene como
se ha definido y no se puede desarrollar.
La inteligencia emocional no nos viene marcada por carga genética, sino que se
empieza a desarrollar a lo largo de toda la vida. Sobre todo, si trabajamos en ello.
Mientras que el coeficiente intelectual es un número obtenido de una prueba
estandarizada (test de inteligencia) que representa las habilidades cognitivas y las
habilidades para resolver y comprender mediante el razonamiento, la inteligencia
emocional se considera poco medible, más intangible.
No todas las personas intelectuales cuentan con inteligencia emocional.
La inteligencia emocional si se puede desarrollar y entrenar.
Una persona emocionalmente inteligente es aquella capaz de gestionar
satisfactoriamente las emociones para lograr resultados positivos en sus
relaciones con los demás.
¿qué es la inteligencia emocional?
Sus pilares:
- Entender o conocer las propias emociones
- Regular las emociones
- Confianza en uno mismo (auntomotivación, pilar principal)
- Conocer las emociones de los otros
- Establecer relaciones sociales positivas.

Cómo desarrollar cada uno:

Conocer las propias emociones:
El principio de Sócrates “conócete a ti mismo” se refiere a esta pieza clave de la
inteligencia emocional: tener conciencia de las propias emociones; reconocer un
sentimiento en el momento que ocurre. Una incapacidad en este sentido nos deja
a merced de las emociones incontroladas.
Todos nos vemos afectados por nuestras emociones que influyen decisivamente
en nuestra conducta y en nuestras relaciones interpersonales. Si no sabemos qué
emoción no está empujando en un sentido u otro, vamos a tener muchas
dificultades para llegar a buen puerto. Es como conducir un carro sin indicador de
gasolina. Si no sabemos cuánta nos queda,

Entender las propias emociones

1. Identificar las emociones que uno va sintiendo.
2. Identificar la conexión entre las propias emociones y lo que está pasando
o lo que uno está pensando.
3. Darse cuenta de cómo la emoción está afectando la conducta de uno
mismo.
4. Conocerse a uno mismo: los deseos, objetivos, anhelos y los puntos
fuetes y débiles.

Que seamos capaces de conocer cómo reaccionamos ante nuestras emociones,

no significa que tengamos que afectar de manera negativa a los demás ni en mi
comunicación con ellos y menos en mi relación con ellos.
Lo que podemos hacer cuando sabemos que tendemos a ser agresivos es lo
siguiente:
- Pedir que me den mi espacio mientras me regulo
- Aislarme si es necesario
- Compartir mi necesidad de estar sola para no dañar a otros
- Aclarar: si en algún momento mientras mi reacción emocional daño a
alguien, prometo tratar de reparar el daño más tarde y de antemano
discúlpenme, estoy trabajando en mí misma.
- Explicar mis posibles reacciones para que me puedan comprender.

Conocer las emociones de los otros:

Entender las emociones de los otros requiere la voluntad de poner atención a esos
sentimientos, descifrarlos interpretando gestos, las expresiones faciales, los tonos
de voz y las cosas que dicen los otros. Implica empatizar con su situación,
entender lo que necesitan y genuinamente desear lo mejor para los demás.
Reconocer las emociones de los demás: es un don de gentes, la empatía es
fundamental, la cual se basa en el conocimiento de las propias emociones. La
empatía es la base4 del altruismo. Las personas empáticas sintonizan mejor con
las sutiles señales que indican lo que los demás necesitan o desean.
Comenzar a comprender como funcionan las emociones de los demás, lo que
para mí puede ser algo insignificante, puede ser que para otros no lo sea en lo
absoluto.
El conflicto y los malos entendidos entre las personas surgen de la falta de
empatía. Gracias a esta capacidad las personas pueden establecer lazos de
unión, para compartir experiencias y ofrecerse ayuda mutua. Rompe con el
egoísmo y el egocentrismo, producto de una sociedad competitiva y cada vez más
individualista. Que seamos más empáticos nos une para que desarrollemos
nuestras fortalezas.
En muchas ocasiones hemos pensado que la empatía supone “ponerse en la piel
de otra persona” sin embargo, esto no es posible porque cada uno de nosotros va
cargado con su propia experiencia, emociones y forma de ver las cosas. No es
posible que vivenciemos exactamente cómo ha vivido la otra persona una
experiencia específica. Lo que sí podemos hacer es tratar de entenderla,
comprender sus emociones y liberarnos de algún modo de nuestro modo de
pensar para no caer en los prejuicios, y entender que esta persona va cargada de
unas vivencias que le hacen sentir de otra forma.
Debemos tratar de comprender su contexto personal para saber por qué eso que
para mí me parece poca cosa, para ella es fuerte. Después de entender ese
contexto personal podemos establecer un juicio.
Capacidad de entender las emociones de otras personas
1. Capacidad de estar atento e interpretar adecuadamente los gestos, tonos
de voz, lenguaje corporal, palabras y otras pistas que transmiten otras
personas.
2. Capacidad de escuchar
3. Sensibilidad
4. Empatía

Establecer relaciones positivas

Las relaciones interpersonales están presentes desde nuestro nacimiento hasta el
fin de nuestros días, en cualquiera de los ámbitos en los que nos movemos. Nos
permiten sentirnos competentes en las más variadas situaciones y obtener una
gratificación social que nos aporta equilibro y felicidad. Necesitamos hacer nuevos
amigos y mantener las amistades, compartir nuestras experiencias con los demás
y empatizar con los que viven otros. Sentirse solo y aislado ocasiona un
sufrimiento psicológico muy difícil de manejar para cualquier persona.
Entre las habilidades sociales que aprendemos desde niños se encuentran las
destrezas para hacer amistades y para abordar los sentimientos. Acciones como
presentarse, establecer una conversación, participar en actividades comunes,
pedir u ofrecer ayuda, hacer cumplidos o disculparse, así como expresar afecto,
son básicas para poder comunicarnos de manera satisfactoria en nuestro entorno
más inmediato. Asimismo, desde pequeños se nos debe enseñar otras técnicas,
como el autocontrol, pedir permiso, saber responder ante signos de hostilidad,
evitar problemas o abordar situaciones algo más límites, como un problema, una
pelea, una acusación o una negociación.
Existen unos pilares básicos para que generemos la posibilidad de mantener
relaciones positivas con las personas que nos rodean.
En primer lugar, teneos que desprendernos de la idea que consiste en quien ien te
quiere te hará sufrir. Las relaciones que están basadas en el amor y el cuidado no
tienen nada que ver con el sufrimiento.
Las vinculaciones positivas tienen más que ver con: un apego sano.
El apego es la necesidad que tenemos de estar con la otra persona. Cuando esta
necesidad se vuelve dependiente, ya no estamos con la otra persona por elección
propia, sino porque entendemos que el ser con el que nos relacionamos está ahí
para satisfacernos, atendernos y resolver nuestras carencias. Un apego lo
suficientemente sano supone reciprocidad y una vinculación enriquecedora para
ambas personas, sin exigencias que cohíben la libertad.

Capacidad de establecer relaciones positivas

1. Capacidad de comunicar efectivamente
2. Asertividad
3. Capacidad de buscar acuerdos
4. Apertura a las ideas de los otros
5. Interés por las otras personas
6. Capacidad de cultivar y mantener relaciones afectivas genuinas
7. Capacidad de cooperar con otros.

Regular las emociones:

Hemos de tener en cuenta que las emociones empujan a la acción. Es dificilísimo
no dejarse llevar por ellas, porque cuando actuamos como nos pide el cuerpo,
experimentamos mucha satisfacción.
Por ejemplo, cuando vemos a alguien que hace algo que nos desagrada, nos da
gran satisfacción afearle a esa persona sus actos, criticarle, y a veces incluso,
insultarle. Cuando estamos furiosos, gritar, o golpear algo o a alguien, libera la
tensión y produce placer.
Si dejamos que nuestras emociones se apoderen de nuestro ser, nuestra mente
dejara de funcionar racionalmente, estaremos a merced de lo que sintamos en
cada momento, tomando decisiones completamente impetuosas y nada reflexivas.
Además, cabe destacar que aprender a controlar nuestras emociones también
proporcionará herramientas sociales; y es que cuando uno comprende de donde
nacen las emociones y cómo manejarlas, desarrolla también una habilidad de lo
más interesante, la empatía. Así, en un futuro, cuando identifiquemos una emoción
determinada en otra persona sabremos cómo comportarnos con ella y como
aconsejarle o consolarle.
La persona que sabe regular sus emociones no las esconde ni las reprime, pero
encuentra la forma adecuada de expresarlas, evitando caer en enfrentamientos
continuos y crearse una legión de enemigos.

Capacidad de regular las emociones

1. Controlar las reacciones impulsivas
2. Mantener la calma en situaciones estresantes
3. Pensar con claridad y mantenerse concentrado en momentos de tensión.

Confianza en uno mismo:

La confianza en nosotros mismos nos ayuda a sentirnos preparados para hacer
frente a las experiencias de la vida. Cuando estamos seguros de nosotros
mismos, tendemos a acercarnos a la gente y a las oportunidades, no a alejarnos
de ellas. Y si las cosas no funcionan al principio, la seguridad en nosotros mismos
nos ayuda a probarlo de nuevo.
Cuando una persona carece de seguridad en sí misma, ocurre justamente lo
contrario. Es mucho menos probable que pruebe cosas nuevas y qe3 trate de
comunicarse con un desconocido. Si fracasa en algo la primera vez, es muy poco
probable que lo vuelva a intentar. Una falta de seguridad o de confianza en uno
mismo puede impedir que una persona alcance su plano potencial.
La falta de confianza se refleja en nuestras limitaciones.
Esta confianza en uno mismo y motivación para llevar adelante los proyectos e
ideas propios es importante para conseguir resultados y llegar donde queremos
llegar. Unida a la capacidad de entender las emociones propias y ajenas es un
arma de extraordinaria potencia.
 Capacidad de confiar en uno mismo y estar motivado
1. Conocer los puntos fuertes y débiles de uno mismo
2. Capacidad de tomar decisiones y asumir riesgos
3. Capacidad de expresar opiniones contrarias a las predominantes en un
grupo social
4. Capacidad de aceptar la crítica sin adoptar posiciones defensivas
5. Deseo de conseguir metas ambiciosas
6. Deseo de aprender y mejorar

La persona que carece de confianza de sí mismo, tiende a tomar las críticas con
posturas defensivas.
CÓMO SE DESARROLLA LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
- La teoría más generalizada es que incrementar el cociente intelectual es
prestamente imposible. Por eso la mayoría de cursos y terapeutas han
apostado por aumentar la inteligencia emocional, aparentemente mejorable
con la práctica.

- La capacidad para gestionar nuestras emociones y las de los demás no

varía mucho durante nuestra vida. Según la evidencia científica, los factores
más determinantes parecen ser la educación recibida, genes, y
experiencias infantiles.

- No es que no puedas desarrollar tu inteligencia emocional, pero hacer

cambios profundos deberás dedicarle tiempo y esfuerzo.

- Leso sí, la inteligencia emocional parce mejorar con los años ¡de ahí el
dicho de que la gente madura con la edad!

- Requiere de mucha, mucha práctica. Es como cuando aprendimos a

manejar bicicleta, requiere de muchas caídas para lograr el objetivo.

TIPS PARA REGULAR LAS EMOCIONES

Tristeza
Ejercicio: pregunta a un familiar o amigo su opinión sobre la tristeza.
Qué cosas le ponen triste y qué hace cuando se siente triste y que reacciones
tiende a tomar.
Luego, pedimos al paciente que describa en otro cuadro su propia opinión
respecto al a tristeza, qué cosas lo ponen o cómo reaccionan cuando triste y qué
hace cuando está triste.
Los expertos dicen:
- La tristeza es la emoción que sentimos cuando hemos perdido algo
importante, cuando nos ha decepcionado algo o cuando ha ocurrido alguna
desgracia que nos afecta a nosotros o a otra persona. Cuando nos
sentimos solos a menudo nos sentimos tristes.
- La tristeza es el sentimiento negativo caracterizado por un decaimiento en
el estado de ánimo habitual de una persona, que acompaña de una
reducción significativa en su nivel de activación cognitiva y conductual, y
cuya experiencia subjetiva oscila entre la congoja leve y la pena intensa
propia del duelo o de la depresión.
Tarjeta de las emociones
Qué es para ti la tristeza, ¿cómo
reaccionas ante ella, como te sientes y
haces al respecto? (responde un amigo)
Qué es para mí la tristeza, cómo
reacciono al respecto, cual es mi
comportamiento cuando estoy triste?
¿cómo me siento cuando estoy triste?
Qué pasa con mi cuerpo
Cómo la expreso, ¿qué pasa con mi
comportamiento?
¿Qué pienso?

¿Con quién lo comparto?

Compartiendo mi experiencia
¿qué hago cuando siento tristeza en…
1. Escuela
2. Comunidad
3. Casa
Estos ejercicios permiten que la persona se dé cuenta de lo que siente y cómo lo
siente, si la persona expresa únicamente sus emociones en casa, es una prueba
de que sí puede regular emociones porque no puede hacerlo en otro lugar.

Ejercicio para desarrollar la empatía

Soy otro
El objetivo de este ejercicio es: aprender a reconocer sentimientos y emociones de
otros. Trabajar las diferencias, las similitudes y los conflictos que pueda haber en
el grupo, reforzando actitudes de buena convivencia, respeto y tolerancia.
- Desarrollo: cada participante escogerá una prenda de ropa o complemento
(abrigo, bufanda, bolso, gafas, guantes, pañuelo, etc.) de otra persona y se
lo pondrá encima.
- Con la prenda puesta le pediremos que nos describa lo que siente, qué
sensaciones tiene y que nos hable sobre qué saben de su compañero (a).
En consultorio:
- Se le pide al paciente que lleve al consultorio una prenda de su hermana,
papá, mamá, o cualquier miembro de la familia. Todo menos ropa íntima.
- Se le pide que se ponga la prenda y se comporte como esa persona es. se
le pregunta, por ejemplo, qué le enoja, qué le gusta, qué hace cuando está
ante una emoción fuerte, etc.
- Se le pregunta tu hermana ¿qué opinión tiene sobre ti, o sobre la vida?
- Tu pareja qué opina de tus problemas. Qué opinas tú de sus problemas.
- Qué cosas te molestan, qué cosas te hacen sentir triste?
Elige una persona al azar e intenta imaginar lo que la nueve a hacer lo que hace y
cómo lo hace.
- Un momento para este tipo de ejercicio es cuando paseas, cuando estás en
un trasporte público, de compras en unos grandes almacenes o centros
comerciales, en una estación etc. Estos lugares son ricos en escenas que
nos pueden servir para poner en practica nuestra empatía. Fíjate en alguien
o en un grupo, observa lo que hacen e imagina que hay detrás de esa
conducta, piensa en las dificultades que puede tener en su día a día, en
cuales pueden ser sus miedos.