Está en la página 1de 11

¡UN CAPO ESE STANISLAVSKI!

de Eduardo Goldman

LIVING CONFORMADO POR UN SOFA FRENTE AL PUBLICO Y DETALLES. MUEBLE A UN COSTADO


CON VASOS DE WHISKY Y BOTELLAS. ROLO SENTADO CON LA CARA ENTRE LAS MANOS,
INCLINADO HACIA ADELANTE, PENSATIVO, INMOVIL. LUEGO DE UNOS SEGUNDOS LANZA UNA
CARCAJADA, SE PEGA EN LA RODILLA. PARECE RECORDAR ALGO DIVERTIDO. CALLA DE GOLPE. SE
PONE SERIO. MENEA LA CABEZA.

ROLO: Muy lavada, no.

QUEDA MIRANDO EL INFINITO. SERIO. PENSATIVO. HASTA QUE ESTALLA EN UNA CARCAJADA
SALVAJE, CON AMPLIOS MOVIMIENTOS DE BRAZOS. DE GOLPE VUELVE A QUEDAR SERIO.

ROLO: No, no. Re trucha.

PENSATIVO. VUELVE A REIR, AGARRANDOSE LA PANZA. RISA NATURAL, DE ESAS QUE RESULTAN
CONTAGIOSAS. POR DETRÁS ENTRA BELÉN CON ROPA DE CALLE. LO MIRA SORPRENDIDA. DEJA LA
CARTERA. SE ACERCA A EL. EMPIEZA A REIR TAMBIEN, CONTAGIADA. SE SIENTA AL LADO. ÉL ESTA
TAN SUMIDO EN SU RISA QUE NO ADVIERTE LA PRESENCIA DE ELLA.

BELEN: ¿Qué pasó?

EL SE PONE SERIO DE GOLPE. LA MIRA, TIMIDO.

ROLO: Nada. ¿Por qué?

BELEN: ¿Cómo nada? Te estabas riendo, Rolo. Te pregunto de qué te reías.

ROLO: Ah, de nada. Estaba ensayando.

BELEN: (CONFUSA) ¿Qué?

ROLO: Ensayaba risa. Un buen actor tiene que saber reír. Tiene que convencer al público de que
sucede algo cómico.

BELEN: (DECEPCIONADA) Ah. Era eso.

ELLA SE LEVANTA Y HACE ALGO. ÉL LA SIGUE.

ROLO: Claro. La semana que viene practico llanto. Un buen actor tiene que saber reír, pero
también llorar. Vas a ver, cuando sea famoso, los diarios van a decir que soy el Alfredo Alcón de la
nueva generación de actores… El nuevo de Sbaraglia del cine y de la tele.

ELLA LO MIRA CON PENA.

BELEN: Mi hermanito, el iluso.


ROLO: ¿Iluso? ¿Por qué iluso?

BELEN: ¿Volvemos a tener la misma conversación? ¿Vos te creés que no me duele verte así?

ROLO: ¿Así cómo?

ELLA DUDA, SE DECIDE Y LO ENFRENTA.

BELEN: Soñando despierto con algo que nunca va a pasar.

ROLO: ¿Cómo que no? Yo quiero ser actor, un gran actor. Practico risa, Belén. Y cada día rio mejor.
A ver, decí algo, una palabra.

BELEN: ¿Qué palabra?

ROLO: Cualquiera, la que se te ocurra. La que te salga del alma.

BELEN: Tarado.

ROLO SE ECHA A REIR COMO LOCO.

ROLO: ¡Buenísimo! ¡Buenísimo tu chiste! (SONRIE) ¿Ves? ¿Ves qué bien me río, Belén? Es porque
ensayo. Me estoy preparando muy bien.

BELEN: ¿Preparando dónde? ¿Aquí? ¿Solo? Te ofrecí pagarte un curso de actuación, y nunca
quisiste.

ROLO: (TIMIDO) No… es que… no estoy preparado para empezar un curso.

BELEN: Nadie está preparado para empezar un curso, Rolo. Por eso la gente empieza cursos, para
estar preparada.

ROLO: No necesito empezar nada. Mirá. (AGARRA UN LIBRO) ¿Ves? El método actoral. Es re
bueno. Busco una cosa graciosa que me haya pasado en la vida… y la uso para reírme cuando
actúo. ¿Sabés en qué pensé hoy? En la vez que nos caímos del tobogán. ¿Te acordás? Yo me había
lastimado la rodilla y lloraba… y vos te matabas de la risa. Y te reías tanto que me hiciste reír a mí.
¿Te acordás?

BELEN: (SONRIENDO) Cómo no me voy a acordar. Me embarré todo el vestido y mamá me dio una
paliza, furiosa estaba. Pero yo no paraba de reírme (RIEN LOS DOS).

ROLO: ¿Ves? De esto se trata el método. De volver a reírte cuando actuás. ¡Un capo ese
Stanislavski!

ELLA LO MIRA CON TERNURA Y LE ACARICIA UNA MEJILLA.


BELEN: Mi hermanito, el soñador. (SUSPIRA) Haceme caso, Rolito. Ya tenés veintitrés años.
Buscate un trabajo. Cualquier cosa. Delivery si querés. Y estudiá. Una carrera. Un oficio. Vos sabés
que Damián y yo te vamos a apoyar en todo.

EL APARTA LA MANO DE ELLA, MOLESTO.

ROLO: ¡No me vengas con Damián! Tu marido… o lo que sea… no me apoya ni medio.

BELEN: ¿Cómo que no? Damián te quiere.

ROLO: Se burla de mí, todo el tiempo se burla.

BELEN: Eso no es verdad. Él… bromea. Siempre hace chistes. Vos sabés cómo es él.

ROLO: (MURMURA) Un hijo de puta es.

BELEN: (ENOJADA) ¿Qué dijiste?

ROLO: Nada.

BELEN: ¿Cómo nada? ¡Lo insultaste, Rolo! ¡No tenés derecho a decir algo así!

ROLO: (EXPLOTA) ¡Y él no tiene derecho a pegarte!

BELEN SE TURBA. INSTINTIVAMENTE SU MANO CUBRE UNA DE SUS MEJILLAS.

BELEN: No digas tonterías. ¿De… de dónde sacaste que me pega?

ROLO: Belén… No soy tarado. Tengo ojos, ¿no? Y oídos. Escucho los gritos. Te veo llorar a
escondidas. Y también cuando corrés al baño para maquillarte la cara, para que no se note el
cachetazo… Es un hijo de puta, Belén. Admitilo.

BELEN: Últimamente… tuvo muchos problemas… Por eso está nervioso.

ROLO: Siempre estuvo nervioso. Cuando nació le pegó a la partera.

BELEN: (SE REHACE) Bueno, basta. Antes de hablar mal de Damián… deberías agradecerle. Él es
quien te mantiene, quien te da de comer. Quien te da una cama y paga la ropa que te compro.
¡Jn…! ¡Mi hermanito el desagradecido!

ROLO: No es eso.

BELEN: Si no fuera por él… ¿qué sería de nosotros? ¿Eh? ¿Qué sería? ¿Vos te creés que a mí me
alcanza con lo que gano en la agencia?

ROLO: Es una agencia de publicidad. Deberías ganar más.

HABLAN SIN ADVERTIR QUE ENTRA DAMIAN, DE TRAJE. TRAE UN ATTACHE.


BELEN: Gano lo que me pagan. Punto. Soy una empleada común y silvestre, Rolo. Ese es mi techo.

ROLO: ¡Pero no el mío! ¡Yo voy a triunfar! ¡Vas a ver!

DAMIAN: (SARCASTICO) Bueno bueno bueno. ¿A quién tenemos aquí? ¡Leonardo di Caprio en
persona! (RIE) ¿Me das un autógrafo, Leo?

ROLO PONE CARA DE CULO Y DEJA EL LIBRO EN SU LUGAR. BELEN DISIMULA SU TURBACION Y
CORRE A DARLE UN BESO EN LA MEJILLA A DAMIAN.

BELEN: ¡Damián! ¿Cómo estás? ¿Te… fue bien hoy?

DAMIAN: (CON DESDEN) ¿Te pregunto yo cómo te fue en esa miserable agencia donde trabajás?

BELEN: (INTIMIDADA) No… no… Preguntaba nomás… Yo… ¿Te preparo algo para merendar?

DAMIAN: Ya sabés cuál es mi merienda. (A ROLO) ¿Qué esperás, mantenidito?

ROLO SE LA TRAGA. SACA UN VASO, AGARRA UNA BOTELLA DE WHISKY Y SIRVE UNA BUENA
MEDIDA.

BELEN: (A DAMIAN) Hoy me felicitaron. Digo… El jefe me felicitó. Encontré una falla en el balance,
un número equivocado del contador. Imaginate. Encontrar un error del contador.

DAMIAN: (DESPECTIVO) No me digas. ¿Y qué? ¿Te pagaron por eso? ¿Te dieron una recompensa
traducida en billetes?

BELEN: No… no. Plata no. Pero el jefe me dijo…

DAMIAN: ¡Te dijo las pelotas! ¡Ni un mango! ¿No ves que te toman por boluda? ¡Alma de
esclavacha tenés! (RECIBE EL VASO POR PARTE DE ROLO. DAMIAN MIRA EL VASO CON DISGUSTO)
¿Y el hielo?

ROLO: Es que… descongelé la heladera… para que funcione mejor. En un rato se congela y…

DAMIAN: Y en un rato los cubitos te los metés ya sabés dónde. (MENEA LA CABEZA) Siempre te
faltan diez para el peso a vos. (BEBE A DISGUSTO)

BELEN: Bueno… Yo me voy a hacer las compras… (A DAMIAN, SUMISA) ¿Qué querés que te
prepare para cenar?

DAMIAN: (LA MIRA) Decime Belén, ¿cuánto hace que vos y yo estamos juntos?

BELEN: (SONRIE) Y… van a hacer tres años… Justo tres años el…

ROLO: El 29 de abril.

BELEN: ¡Cierto, Rolito! El 29 de abril. ¿Cómo te acordaste?


ROLO: (MIRA A DAMIAN) Fácil. Es el día del animal.

DAMIAN ABORTA UN TRAGO Y LO FULMINA CON LA MIRADA. BELEN SE APRESURA A INTERVENIR.

BELEN: Tres años, Damián. (ROMANTICA) Ya tres años viviendo juntos. Parece mentira que haya
pasado tanto.

DAMIAN: Lo que parece mentira… es que todavía me estés preguntando qué quiero comer. ¡Tres
años! ¡Y ni siquiera aprendiste que lo único que como es carne! ¡Al horno, a la cacerola, a la
parrilla…!

ROLO: Cruda.

DAMIAN: Cru… (SE CORTA Y MIRA A ROLO)

ROLO: Quiero decir, jugocita. Es la dieta paleo. La que… comían los dinosaurios.

DAMIAN: Decime, estúpido. ¿Vos me estás cargando?

BELEN: (BUSCANDO ROMPER EL HIELO) Bueno, bueno… me voy a comprar. Carne al horno con
papas. ¿Eh, querido? Vas a tener una cena riquísima. (RECOGE LA CARTERA) Ya vengo.

BELEN VA HACIA PUERTA. PERO DAMIAN NUNCA HA DEJADO DE MIRAR A ROLO,


AGRESIVAMENTE.

DAMIAN: ¡Contestame! ¿Vos me estás cargando?

BELEN SE FRENA EN SECO.

BELEN: Rolito… ¿Por qué no vas a arreglar tu cuarto?

ROLO: Ya lo arre… (MIRA A DAMIAN) Ah, sí. Ya voy.

DAMIAN: ¡No vas un carajo! ¡Hace rato que tengo que hablar con vos!

ROLO: ¿Conmigo? Sí, claro. ¿Sobre qué tema?

DAMIAN: Sobre mi paz mental. ¡Quiero que armes tu valija y te vayas de esta casa! ¡De mi casa!

BELEN: ¿Qué?

ROLO: ¿Qué?

DAMIAN: (IMITANDO A UN GALLO) ¡Quequerequé! (A BELEN) Fui bien clarito. Quiero que se
mande a mudar.

BELEN: Pero… ¿qué estás diciendo, Damián? Es mi hermano.


DAMIAN: Es un vago. Y ya estoy harto de mantenerlo. Que se vaya y aprenda a ganarse la vida,
como hice yo desde los diez años.

SILENCIO. ROLO QUEDA MAL. BELEN REACCIONA.

BELEN: Rolo… andá a tu cuarto. Yo voy a hablar con él.

DAMIAN: No hay nada que hablar. Está decidido. Tu hermanito se va. (A ROLO) Tenés dos horas
para salir de aquí.

ROLO: ¿Dos horas?

DAMIAN: (MIRA SU RELOJ) Una hora y cincuenta y nueve minutos.

BELEN: (MUY ANGUSTIADA) No podés hacer esto. Él… no tiene a dónde ir. No tiene. Desde el
accidente… Desde que papá y mamá… Estamos solos en el mundo… Por favor, Damián… ¿Dónde
dormiría? ¿En la calle? ¿Qué comería? Sería como matarlo.

DAMIAN: Tu hermanito lo hubiera pensado antes. Hubiera buscado un trabajo para ayudar con las
cuentas, en vez de estar paveando todo el día, haciéndome burlas.

ROLO: ¿Yo? ¿Burlas yo? ¿Y vos, que siempre me tratás de inútil?

DAMIAN: Te trato como lo que sos. Un bueno para nada. Un inservible. ¿Por qué tengo que
alimentarte? ¿Qué sos mío vos?

BELEN: Es… tu cuñado.

DAMIAN: ¡Es un carajo! Vos y yo no estamos casados. No quiero tener hijos, y mucho menos
cuñados.

ROLO: (ORGULLOSO) No te preocupes, Belén. Voy a hacer mi valija.

BELEN: Pero… ¿a dónde vas a ir?

ROLO: No te preocupes. Ya me voy a arreglar.

ROLO SALE A INTERIORES. QUEDA BELEN MIRANDO ATONITA A DAMIAN, QUE SE SIENTA Y BEBE.
ELLA NO SABE QUE HACER. SE SIENTA JUNTO A EL.

BELEN: (SUPLICANTE) Damián…

DAMIAN: Ni se te ocurra.

BELEN: Pero…

DAMIAN: (LA CORTA DIRIGIÉNDOLE UNA FRÍA MIRADA) ¿Me vas a dejar tomar mi whisky en paz?
EL SIGUE BEBIENDO. ELLA NO SABE QUE HACER. SE LARGA A LLORAR. EL MIRA AL CIELO, HARTO.
SUSPIRA Y LE PASA LA MANO SOBRE LOS HOMBROS.

DAMIAN: A ver, tranquila. Tampoco es para ponerse así. (ELLA LLORA MAS FUERTE, EL SE
IMPACIENTA UN POCO) Belén, pará de llorar, me vas a mojar la alfombra. (ELLA PARA PERO SIGUE
MAL) ¿Por qué te ponés así? ¿No te doy todo lo que una mujer puede desear? Un techo, seguridad
económica, sexo semanal… ¿Qué más querés? Dale, decime y te lo doy.

BELEN: Yo… mi hermano… no tiene a dónde ir… Me muero si se va mi hermano…

DAMIAN: (SUSPIRA) Bueeeno. Está bien. Para que veas lo bondadoso que soy… le voy a dar otra
oportunidad.

BELEN SE LANZA A DARLE BESITOS EN LAS MEJILLAS.

BELEN: Gracias… Gracias, mi amor… Gracias…

DAMIAN: Eso sí. No lo quiero ni ver. Cuando llegue a casa… quiero que deje mi whisky preparado…
con cubitos… y desaparezca de mi vista… ¿Está claro?

BELEN: Sí… sí…

DAMIAN: Quiero que sea una sombra… No quiero ni sentir su olor en la casa. ¿Entendido?

BELEN: Claro, mi amor… Sí… Lo que vos digas…

DAMIAN: Y sobre todo… que se busque un trabajo. Que pague las expensas, la luz, el gas y Netflix…
por lo menos.

BELEN: Sí… hecho… ya se lo digo… Se va a poner re contento…

BELEN SE PARA ENTUSIASMADA Y CUANDO VA PARA SALIDA A INTERIORES SE FRENA PORQUE


VIENE ROLO CON SU VALIJA.

BELEN: ¡Rolo! ¡Rolito! ¡Buenas noticias! ¡No te vas nada!

ROLO: (CONFUSO) ¿Qué?

BELEN: ¡Que no te vas! ¡Damián te deja quedarte! (ROLO NO RESPONDE) ¿No entendiste, Rolo?
Dejá esa valija. No te vas.

ROLO: Sí me voy.

BELEN: ¿A dónde? ¿Estás loco?

ROLO: A la calle si es necesario.


BELEN: ¿Qué decís? ¡La calle es un infierno! ¡Está llena de ladrones, de criminales! ¡Son capaces de
clavarte un cuchillo para robarte las zapatillas!

DAMIAN: ¿Sabés lo que pasa? Seguro que este pendejo nos escuchó, escuchó lo que dije, que
tenía que trabajar. Por eso se escapa. Es un vago.

BELEN: ¡No!

DAMIAN: ¡Es un vago! ¡Mejor que se vaya! ¡Su lugar es la calle!

BELEN: ¡Lo van a matar!

DAMIAN: ¡Iremos al velorio!

BELEN: Por favor, Damián. Sé que tenés problemas económicos. Pero todo se va a arreglar. Estoy
segura. Decile que se quede.

DAMIAN: Pará pará pará. ¿Qué dijiste? ¿Qué tengo problemas económicos? ¿Yo?

BELEN: (CON DIFICULTAD) Sé que… hace dos meses que no trabajás en la empresa… No quise
hablarte de eso porque sé lo orgulloso que sos y…

DAMIAN: (CON BRONCA) ¿Quién mierda te contó? ¿Quién?

BELEN: Bernardez…tu compañero… Llamó para ver cómo estabas y me contó todo… Que te
echaron por violento… Te agarraste a piñas con un cliente.

DAMIAN: Era un tipo agresivo, un maleducado.

BELEN: También te peleaste con el gerente, y con el contador.

ROLO: ¿Con el cadete no?

DAMIAN: ¡Vos cállate y tomatelás!

ROLO: ¡Y claro que me voy!

BELEN: ¡No! (A DAMIAN) Por favor, Damián. Que no se vaya. Te prometo que voy a buscar un
trabajo más, dos si es necesario.

DAMIAN: (FURIOSO) ¿Pero qué te pensás? ¿Qué me vas a mantener? ¿Vos? ¿A mí?

BELEN: (MOLESTA) Por un tiempo, hasta que consigas algo. ¿Qué tiene de malo?

DAMIAN: (LA IMITA, BURLON) ¿Qué tiene de malo? (LA ENCARA) ¡Ninguna fracasadita me va a
tener de hijo! ¿Entendiste?

BELEN: (MUY TENSA) ¡No me llames más así! ¡No me digas fracasadita! ¡No lo soporto!
DAMIAN: (BURLON) ¿En serio? Qué lástima, porque eso es lo que sos. ¡Una fracasada! ¿O qué se le
puede decir a una empleaducha de treinta años? ¡Perdedora! ¡Vos y tu hermano se pueden dar la
mano! ¡Una verdadera familia de inservibles!

BELEN: (INDIGNADA) ¿Y vos quién te crees que sos? ¿Eh? ¿Quién carajo te creés que sos? ¿Mi
héroe? ¿Mi salvador? ¿Me protegés de algo vos? ¡Ni siquiera podés protegerme de vos mismo!
¿Sabés qué? ¡Morite! ¡Y el sexo semanal… te lo podés meter en el culo!

DAMIAN LE DA UN CACHETAZO Y ELLA CAE EL PISO. ROLO SUELTA LA VALIJA QUE CAE CON RUIDO.

ROLO: ¡Sos un hijo de puta!

DAMIAN: (A ROLO) ¡Rajá de acá! ¡Rajá y llevate a esta arrastrada!

BELEN SE LEVANTA FURIOSA Y VA HASTA EL MUEBLE. AGARRA UN VASO Y LO LLENA DE WHISKY.

ROLO: ¿Qué hacés, Belén? ¡Si vos no tomás!

BELEN: Empiezo hoy. (VA A TOMAR Y ROLO LE VUELCA EL VASO) ¡Dejame!

DAMIAN: Eso… Dejala… Que aprenda el gusto amargo del whisky. A ver si se hace mujer.

BELEN LO MIRA INDIGNADA Y SE SIRVE MÁS. VA A BEBER Y ROLO LE TIRA EL VASO.

ROLO: ¡Nooo!

BELEN: ¿Me querés dejar en paz?

ROLO: No podés tomar eso. El whisky tiene veneno.

DAMIAN Y BELEN LO MIRAN.

BELEN: (CONFUSA) ¿Qué?

ROLO: Hace una semana que lo mezclé con veneno para cucarachas.

DAMIÁN: ¿Qué dijiste, basura? ¿Veneno? ¿Para cucarachas?

ROLO: ¿Preferías otro veneno?

DAMIAN SE ABALANZA A ROLO.

DAMIAN: ¡Yo te mato, hijo de puta!

ROLO SE APARTA.

ROLO: ¡Mejor no lo hagas, porque te podés morir ya!

DAMIAN: (SE FRENA) ¿Qué decís?


ROLO: La actividad física hace circular la sangre, y potencia el veneno. Mirate, estás pálido. Es la
primera señal. (DAMIAN AZORADO, SE TOCA LA CARA) Pronto te va a doler la panza. (DAMIAN SE
TOMA LA PANZA) Y vas a terminar con las patitas para arriba… como la cucaracha que sos.

DAMIAN: (DOBLANDOSE, CON VOZ AHOGADA) ¡Basura! ¡Asesino!

ROLO: ¿Un consejo? Yo que vos me voy al hospital para que te hagan un lavado de estómago. En
una de esas te salvás, aunque quedes medio tarado.

DAMIAN VA A LANZAR UNA MALDICION PERO NO LE SALEN LAS PALABRAS, SALE CORRIENDO
HACIA CALLE. BELEN MIRA A ROLO, MUY PREOCUPADA.

BELEN: ¿Estás loco? ¿Qué hiciste?

ROLO: Lo apropiado para defenderte.

BELEN: ¡No entendés! ¡Vas a ir preso, por intento de homicidio!

ROLO: Homicidio, si tenemos suerte.

BELEN: ¡Escapate! ¡Salí del país! ¡Andate a donde sea mientras haya tiempo!

ROLO: ¿Te acordás cuando rompiste ese jarrón que mamá tanto quería, y yo me eché la culpa? ¿Te
acordás que le mentí para salvarte?

BELEN: Sí. ¿Pero a qué viene eso ahora? ¿Querés que ahora me eche la culpa yo?

ROLO: No, boba. Lo que te digo es que, tomé ese recuerdo de mi mentira… para recrearlo… y
hacerle creer a Damián que lo envenené.

ELLA LO MIRA, CONFUSA.

BELEN: ¿Cómo?

ROLO: Hice el papel de envenenador. ¿No merezco un aplauso?

BELEN: ¿Qué decís? Pero… entonces… ¿no envenenaste el whisky?

ROLO: Claro que no. Fue pura actuación. (AGARRA EL LIBRO Y SE LO MUESTRA) ¡Un capo ese
Stanislavski!

ELLA RESPIRA AGITADA. SE DERRUMBA EN EL SOFA, SE APANTALLA LA CARA CON LA MANO.

BELEN: Todavía estoy temblando. Ay, Rolo. Casi me matás del susto.

ROLO: (SE LE ACERCA) Oíme. Cazá la valija y rajemos de este manicomio. Nos vamos antes de que
vuelva ese loco. A una pensión, a lo que sea. Voy a buscar trabajo. Nos vamos a arreglar.
BELEN: (SONRIE) Sí, sé que nos vamos a arreglar. Cualquier cosa es mejor que esto. (SE LEVANTA Y
VA A SALIR HACIA INTERIORES. SE FRENA Y LO MIRA) De veras me la tragué, Rolo. Pensé que lo
habías… (PIENSA. VA HACIA SU CARTERA Y SACA EL CELULAR. BUSCA UN NÚMERO. MURMURA
MIENTRAS BUSCA) Germán… Germán…

ROLO: ¿Quién es Germán?

BELEN: Un compañero de la agencia. Es uno de los creativos y está armando un casting para un
comercial. Vos lo harías genial.

ROLO: No, pará. ¿Qué hacés? Todavía no estoy preparado para eso.

BELEN: Sí lo estás. Sos muy bueno, Rolo. Muy bueno.

ROLO: (EMOCIONADO) ¿En serio lo decís? Decime que es en serio.

ELLA SE ACERCA Y LE ACARICIA LA MEJILLA, ORGULLOSA.

BELEN: Mi hermano… el actor.

ROLO LA ABRAZA. ELLA LO ABRAZA A SU VEZ, MANTENIENDO CON UNA MANO EL CELULAR EN
ALTO.

FIN

También podría gustarte