APUESTA CON EL DIABLO Leyenda

lojana

Personajes:
Presentadora – Madre . Chontillo- Diablo – Amigo 1- Amigo 2

PRESENTADORA: Hola amigos y amigas:

Los que no me conocen se preguntarán quien soy y qué hago aquí. En cambio quienes ya me conocen, dirán: “Otra vez la vieja metiche esa.

Pero me importa un bledo lo que piensen, igual les voy a recordar a los que no saben que : soy lojana de cepa, viuda, jubilada y bisabuela de
varias generaciones. Nací hace un montón de años, en esta Loja, la capital musical del Ecuador, la tierra del repe, el tamal y la cesina; la tierra
del Zamora y el Malacatos, en cuyos hogares, nunca falta por lo menos un ciudadano que canta, toca la guitarra, que cuenta un chiste, un
cacho o una leyenda.
Y ya que hablo de leyendas, bueno´pes, sepan que para eso mismo estoy aquí, para contarles otra leyenda de nuestro pueblo .

Así es que relájense por favor; cierren el celular, cancelen el facebook, abran las orejas, y presten mucha atención.

Como ya les he contado el “Cura sin cabeza”, “El caballero de las espuelas de oro”, y “Devuélveme mis tripas” , hoy les traigo ésta que se
llama : Apuesta con el diablo

TARAREANDO:
Esta nueva leyenda
de la Argelia hasta la Paz
a fin de que se la aprendan
se la cuento en un tas tas

Comenzamos:
Hace muchos años atrás en Loja, existía un tal Luis a quien apodaban "Chontillo", o venad,o por la agilidad de sus piernas. Como su padre había
muerto, desde los 6 años de edad, vivía con su señora madre, a quien debió ayudar a mantener el hogar. Y generalmente lo hacía lustrando
zapatos durante el día, mientras por la noche asistía a la escuela.

Chontillo siempre fue muy generoso con su madre; siempre le llevaba el dinero que ganaba en la calle, hasta que empezó a juntarse con la
pandilla de lustrabotas que entre lustrada y lustrada, se reunían a jugar naipes en la plaza, y a hacer apuestas. El juego por lo tanto se volvió
un vicio que le traería serias complicaciones al Chontillo, como la de no tener dinero para su madre.

MADRE: Hola, mijo ¿Cuanto traes hoy?

CHONTILLO: Ni medio, mamita

MADRE: ¿Cómo que ni medio?... ¿Qué pasó?

CHONTILLO:Pues que el trabajo está malo, el clima no ayuda para nada; y hay mucha competencia.

MADRE: (ENOJADA) ¿Competencia? …. Competencia te voy a dar en el trasero!. Eres el colmo de la desconsideración y del descomedimiento.
Seguro que te gastaste la plata en tu famoso vicio de las cartas. ¡Ya me han contado!
CHONTILLO: ¡Pero vieja!
MADRE: ¡Vieja tu… malacrianza! … (SOLLOZANDO) Eres un mal hijo… No te da pena mi sufrimiento… No te condueles de que soy una pobre
viuda… buuu… ¡Ah si tu padre viviera!.... Holgazán… Indolente… Vicioso!....

PRESENTADORA: No le quedó más remedio al Chontillo que abandonar el hogar. Por las noches dormía en cualquier callejón, junto a su cajón
de lustrar, con el que ganaba algo para comer, pero también para seguir en las apuestas con sus amigos.

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Pero cierta ocasión al no tener más dinero para seguir apostando, su gallada lo hizo de lado y no quisieron saber más de él.

CHONTILLO: (REZANDO DEVOTAMENTE, PREPARANDOSE PARA DORMIR EN ALGUN RINCON DE LA CALLE) Santo fuerte, santo
inmortal , líbrame de todo mal… Santo fuerte, santo inmortal..…! (CAMBIANDO DE ACTITUD; CON ENERGIA) .. Qué Santo fuerte ni que
ceviche de arvejas… Mejor le voy a pedir ayuda al diablo!

DIABLO: ¡Hola jovencito ¿Me llamabas?

CHONTILLO: ¿Y tú quién diablo eres...?

DIABLO: ¿Diablo? … Jejejeje…caliente , caliente… Pues yo soy aquél que cada noche te persigue; yo soy aquel que estando lejos ya no vive…
Eh.. Perdón me equivoqué de libreto: Yo soy aquel a quien has invocado y vengo a ayudarte.

CHONTILLO: (TEMEROSO) ¿Eres el diablooo...?

DIABLO: ¡Qué inteligente! … pues el mismo que viste y calza. Dime :¿cuánto necesitas?... Yo te lo daré de inmediato.

CHONTILLO: (ASUSTADO, PERSIGNANDOSE) ¡No, no quiero nada! Vete…Vete… Sal de mi vista!... (EN ACTITUD DE ORACION) Santo
Fuerte…santo inmortal… Líbrame de todo mal… Santo fuerte…

DIABLO: (DESAPARECIENDO) Jajajajaja

CHONTILLO: (APRESURADO, NERVIOSO) Diosito, Virgencita, auxílienme; lí…librenme del cachudo. Pro…prometo dedicarme a trabajar
honradamente , y cua…cua…cuando tenga mis ahorros, regresar a casa con mi mamá!.

PRESENTADORA: Pero esta decisión fue puramente emocional ; solamente duró hasta que lo atrapó otra vez la tentación del juego con sus
amigotes, ante quienes hizo alarde de que iba a conseguir mucho dinero. Por ello hasta subió el monto de las apuestas a cifras elevadísimas,
seguro de que las pagaría al siguiente día … ¿Al siguiente día? Jha!....

CHONTILLO: ¡Oh…no puede ser! ….creo que se me fue la mano en esto del juego. Tengo deudas por todo lado; necesito más plata , y estoy
chiro. ¿Qué hago?... ¿qué hago Señor de la Buena Esperanza? (CAMINANDO) ¡Oh sí… ya recuerdo… el cachudo, el cachudo… El otro día me
hizo una oferta; no me queda otra que aceptársela.

CHONTILLO: (SE DETIENE EN UN SITIO SOLITARIO, OSCURO; SE ACURRUCA Y LLAMA) Don Sata… Don Sata…!

DIABLO: ¿Y ahora qué diablos quieres? ¡Para qué me llamas?

CHONTILLO: (TITUBEANTE)¿Para proponerte un trato

DIABLO: ¿Un trato?... ¿sobre qué? No me gusta hacer tratos con humanos, porque en su mayoría son tramposos.

CHONTILLO: El trato es así: Tú me das plata suficiente como para pagar mis deudas, seguir apostando y vivir a lo grande durante un año. Al
finalizar el año, nos encontramos en el parque y echamos una carrera, desde allí al cementerio. Si tú me ganas, te entrego mi alma en ese
mismo instante. Si yo te gano, no te debo nada. Igual, si cualquiera de los dos se retira, pierde la apuesta. ¿Qué te parece?

DIABLO: Por las barbas apestosas de mi abuelo Belcebú… ¡Claro que acepto!. Toma, aquí tienes tu dinero (LE ARROJA UNA BOLSA, Y
SALE)

PRESENTADORA: Al otro día se fue el Chontillo a alquilar un cuarto; abrió un hueco en el piso y allí escondió el dinero, desde donde iba
sacando poco a poco para pagar sus deudas de juego, comprar ropa, comer, costearles a sus amigos, y sobre todo, seguir jugando y
apostando.

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El dinero de la bolsa que le entregó el diablo, por el momento parecía no agotarse.

AMIGO 1: Oye… disculpa la pregunta ¿de dónde sacas tanta mullapa?

CHONTILLO: Ese es problema mío!

AMIGO 2: Pero ¿qué pasa, Chontillo? ¿Es que ya no somos de confianza?

CHONTILLO: Yo te hago una pregunta: ¿Estás contento con la comida que les doy gratis?

AMIGO 1: Seguro que sí

CHONTILLO: Tú, ¿estás contento con la bebida que les doy gratis?

AMIGO 2: Por supuesto!

CHONTILLO: Y ustedes ¿están contentos de ganarme las apuestas y que yo les pague sin chistar?

AMIGO 1 y 2 (EN CORO) Estamos felices!

CHONTILLO: Entonces hagan el favor de no joder; de seguir comiendo y bebiendo gratis; y de seguir cobrando las apuestas, pero sin preguntar.
O me veré obligado a cambiar de amigos

AMIGO 1: No, no, no… ¡Tú sabes cuánto te apreciamos!

AMIGO 2: Más que aprecio: te consideramos, y te respetamos

AMIGO 1 y 2 (CORO) Más que respeto!... te queremos incondicionalmente!

CHONTILLO: (CON IRONIA) Sí, claro… incondicionalmente… Oportunistas!... (PENSANDO PARA SI MISMO) Ay diosito… lo que siento es que
el tiempo pasa rapidísimo y el día de la apuesta con el diablo se acerca. Tendré que ejercitarme si deseo ganarle la carrera. Sí, eso haré…

(REALIZANDO EJERCICIOS DE CALENTAMIENTO) Faltan 3 meses…

(FLEXIONES DE PECHO) Puff, pufff …Faltan 30 días

(AFLOJANDO MUSCULOS) …Falta una semana

(TROTANDO, ANGUSTIADO) …Faltan dos días!

(CAYENDO AL PISO CANSADO) Oh no!...hoy es el gran día!!!... Estoy frito!!. Yo corro veloz, pero Satanás debe ser un diablo para correr.

(CAMPANADAS Y CARCAJADAS DIABOLICAS)

DIABLO: Muy bien jovencito ¿Cuáles son tus últimas condiciones...?

CHONTILLO: (CON UN DEJO DE TRISTEZA) Eh… las mismas; no han cambiado. Más bien señala tú el sitio exacto donde será la meta en
el cementerio. Y ya sabes: el que llega primero, gana; y el que llega después o se retira, pierde.

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DIABLO: (CON SATISFACCION) jajaja ¡Veo que eres hombre de palabra ¡Odio los hombres de palabra, pero dadas las circunstancias, me
empiezas a simpatizar. … Pues bien, la meta será frente al tumba Nro 14 del bloque central; allí estará encendida una hoguera. ¡Allí nos
veremos!... Así es que vamos: da tú la señal de partida.

CHONTILLO: Muy bien: (CONTANDO) A la una…. ¡Oh no!…. a las dos…. Me tiemblan las piernas… y a las… a las…tres! (EMPIEZAN A
CORRER)

(CARRERA DE AMBOS… A VECES CHONTILLO SE ADELANTA, EN OTRAS EL DIABLO LO PASA Y ASI…. HASTA ACERCARSE A UNA
CRUZ DE PIEDRA UBICADA POR EL SECTOR)

CHONTILLO: (AGOTADO ABRAZANDOSE CON DESESPERACION A LA CRUZ) ¡Jesús , por favor , ten piedad de mi!

DIABLO: (DANDO FUERTES ALARIDOS , ENTRE HUMO Y MALDICIONES) ¡Oh.. nooooo!!!. Eso no se vale!!!… No debiste nombrarme a ese
tipo!!!… no debiste nombrarlooo!!!!….. (DESAPARECE)

CHONTILLO: (ENTRE SOLLOZOS) ¡Santo fuerte, santo inmortal… eres lo máximo!

PRESENTADORA: Y así el diablo perdió su apuesta, regresando a la casa paterna, allá en el averno. Mientras el Chontillo regresó a su casa
materna, acá en la tierra.

CHONTILLO: (CORRIENDO HACIA SU MADRE) Mamita, mamita.. Perdóname por mis desatinos!.. Te amo… nunca más te haré sufrir… nunca
más jugaré a las cartas… nunca más apostaré!

MADRE: ¿Estás seguro hijo mío?

CHONTILLO: ¡Claro que sí!... ¿Cuánto le vamos?.. ¡Eh digo.. claro que estoy seguro! Desde hoy cambiaré! Seré un hombre correcto y ejemplar!...

MADRE: Hijo de mis entrañas, ven a mis brazos!...

PRESENTADORA: Allí tienen: es una leyenda real; yo no la inventé… Y si no me la creen , podemos apostar. ¿Qué tal una carrerita de aquí al
cementerio? ¿Ahhh? … jejejeje.

Hasta la próxima.

…………..

Libretos:

William Brayanes