Está en la página 1de 80

1

Falsas verdades durante la campaña electoral de 2018 en México.


Mario Ortega Olivares, UAM-Metropolitana, ortegaoli@gmail.com

Introducción.
El desgaste de los partidos políticos en México favorece la recurrencia a todo
tipo de trampas y artimañas para obtener el poder.
INCLUIR AQUÍ LA INTRODUCCION Y UN COMENTARIO DE LA
ESTRUCTURA DEL ARTICULO.
En la campaña presidencial de 2018 abundaron la difusión de falsas verdades
y las agresiones cibernéticas para reducir el rating del competidor. En este
artículo se analizan ejemplos de ello: a) las campañas de difamación a través
de los medios de comunicación y b) agresión a la imagen de López Obrador
encubiertas bajo el anonimato de las redes virtuales, que
aunque se ha concentrado en el representante del partido Morena, también
afecta a candidatos de otros países.

La difamación siempre ha existido, sin embargo ahora encuentra una inmensa


caja de resonancia en las redes sociales, el daño se replica y permanece pues
no caduca en Internet. En el acoso cibernético uno o más agresores ejercen
violencia psicológica sobre otra persona en las redes sociales, a fin de
desprestigiarla y excluirla. Las relaciones sociales mediadas por ordenador
permiten cosificar y despersonalizar a la víctima. El acosador reduce a los
individuos en su imaginario a simples cosas, susceptibles de ataque y
manipulación. La tecnología digital empodera al agresor y a sus seguidores
bajo un contexto de invisibilidad con la consecuente descolocación y
confusión de la víctima. La distancia entre emisor y receptores obscurece las
reacciones emocionales de la víctima. El agresor disfruta el ejercicio helado y
cruel de maltratar sin sentir culpa. La audiencia colabora en el daño, hasta los
desconocidos pueden leer la difamación y replicarla sólo “por bromear”. El
efecto desinhibidor de las redes llega a estimular a víctimas tímidas para que
respondan a las agresiones, como no lo harían cara a cara. El resultado es
contraproducente, los ataques del perverso se agravan y se agudiza la
victimización.

Semblanza biográfica
Andrés Manuel López Obrador (AMLO) nació en 1953 en Macuspana,
Tabasco. En la segunda década de 1960, estudió la licenciatura en Ciencia
Política y Administración Pública en la Universidad Autónoma de México. Su
participación política se inició en 1976 cuando apoyó la campaña electoral del
2

poeta Carlos Pellicer, para la senaduría de Tabasco por parte del Partido
Revolucionario Institucional PRI (Bedolla, 2016: XXII).
García comenta en su artículo La construcción de un liderazgo: esbozo
biográfico de Andrés Manuel López Obrador. Que AMLO fue director del
Instituto Indigenista de Tabasco durante 1977. Donde se comprometió al igual
que Pellicer con la defensa de los indígenas de la Chontalpa. “Sus proyectos
más sobresalientes fueron la edición de libros en lengua indígena y el
establecimiento de los camellones chontales (chinampas)” (García, 2007:
XXII y XIII). De acuerdo con García, José Eduardo Beltrán Hernández
introdujo a AMLO con la pareja de Enrique González Pedrero y Julieta
Campos. Desde 1978 hasta 1982 fue delegado de la Coordinación General del
Plan Nacional de Zonas Deprimidas y Grupos Marginados. Donde se
sensibilizó ante la situación de los grupos marginados. En dicho puesto,
impulsó una afortunada campaña de “crédito a la palabra” que atrajo recursos
federales al instituto indigenista local.
Enrique González Pedrero, candidato priísta a gobernador en Tabasco en
1982. Comisionó a Mauricio Merino, actual docente del Centro de
Investigación y Docencia Económica, para buscar a AMLO en Nacujaca e
invitarlo a participar en su campaña. Merino recuerda que: “Vivía en una
casita y lo acompañé un par de veces a recorrer los camellones chontales, que
él creo para que se pudiera sembrar. Conocía a toda la gente” (Delgado,
2019b: 15). En 1983 siendo presidente del PRI en Tabasco, Obrador promovió
la renovación de sus comités seccionales y les impartió cursos de capacitación
para vigilar el trabajo de los munícipes locales. “Los agravados se quejaron
con González Pedrero de que Andrés Manuel se comportaba con ellos como
contralor y les fiscalizaba el cumplimiento de sus promesas de campaña”
(García, 2007: XXIII).
En 1984 fue designado director de Promoción Social del Instituto Nacional del
Consumidor, bajo la coordinación de Clara Jusidman. Ese mismo año,
Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo fundaron la Corriente
Democrática, a la que se unió López Obrador. Porque ya era imposible la
permanencia de los nacionalistas revolucionarios al seno del Revolucionario
Institucional. En agosto de 1988 fue lanzado como candidato a gobernador de
Tabasco por parte del Frente Democrático Nacional (Bedolla, 2016: 171), pero
no lo logró por un fraude electoral que denunció. “A raíz de la derrota publicó:
Tabasco, víctima de un fraude. Este libro anunció la batalla campal que tiene
contra el PRI” (García, 2007: XXIII). El 20 de noviembre de 1991 encabezó
un Éxodo por la democracia hacia la Ciudad de México. En protestar por otro
fraude, ocurrido durante las elecciones en Cárdenas, Tabasco. Tras arribar al
3

Zócalo en compañía de cinco mil manifestantes fue recibido por cerca de


veinte mil simpatizantes.
En 1994 pierde las elecciones para gobernador en Tabasco frente a Roberto
Madrazo Pintado. Las vicisitudes de dicha campaña fueron comentadas en su
libro Entre la historia y la esperanza. “Un informe de los consejeros
ciudadanos Santiago Creel Miranda y José Agustín Ortiz Pinchetti confirmó
irregularidades en el 78% de las casillas que se analizaron” (García, 2007:
XXIV). De nueva cuenta, organiza una “Caravana por la Democracia” el 22
de abril de 1995. Pero fue el 7 de febrero de 1996 cuando AMLO alcanzó su
mayor radicalización política, al movilizar a indígenas de la Chontalpa para
tomar cincuenta pozos petroleros de Tabasco, en lucha contra la corrupción.
Luego sería Presidente del Partido de la Revolución Democrática, cargo que
ocuparía hasta marzo de 1999. El 15 de noviembre del mismo año, Obrador
fue propuesto por el PRD como candidato a Jefe de Gobierno del Distrito
Federal. Tras ganar los comicios con el 37.5% de los sufragios, asumió dicha
jefatura el 2 de junio del 2000.
Los diputados del PAN y del PRI aprobaron el 7 de abril de 2005, despojar a
López Obrador de la inmunidad jurídica que gozaba en su calidad de Jefe de
Gobierno. Para obstaculizar su previsible candidatura a la presidencia de la
República. Se aludió el desacato de una orden judicial expedida contra de
Rosario Robles -su predecesora- por la expropiación de un pequeño terreno en
2001. Tan burda maniobra política desató el descontento popular. Más de un
millón de personas asistieron a la Marcha del Silencio en protesta por el
desafuero. Temiendo una generalización del descontento, el presidente Fox
aceptó la renuncia de Macedo de la Concha, el procurador general ejecutor del
infundio. La Procuraduría General de la República se desistió de la acción
penal contra Obrador el 4 de mayo de dicho año. Quedó abierto así el camino
a su candidatura presidencial.
AMLO rindió protesta como candidato presidencial el 11 de noviembre de
2005, para contender frente a Felipe Calderón por el PAN y Roberto Madrazo
por el PRI. Quienes mantuvieron “visiones confrontadas respecto a la política
económica y la mejor manera de alcanzar el desarrollo económico a largo
plazo… López Obrador cuestionó la utilidad del libre mercado y de las
políticas económicas neoliberales en la generación de desarrollo económico”
(Benton, 2006: 70). Cuando casi finalizaba la campaña electoral presidencial
manchada por spots de odio contra Obrador, “se llevó a cabo el segundo
debate, llevando la campaña sucia hasta esta instancia, logrando un viraje a
favor del candidato de izquierda y provocando que las encuestas se cerraran de
cara al proceso electoral. Ante esto el Consejo Coordinador Empresarial lanzó
una campaña en contra del ex jefe de gobierno capitalino” (Bedolla, 2016:
4

174). Luis Carlos Ugarte anunció el 6 de julio de 2006, que “el candidato que
había obtenido más sufragios en la elección presidencial era Felipe Calderón,
con 15 millones 284 sufragios, contra 14 millones 756 mil 350 votos de López
Obrador. Su ventaja, de apenas el 0.58%, es decir 243 mil 934 votos, es la más
pequeña que haya obtenido cualquier candidato presidencial ganador” (García,
2007: XXVIII). En medio de acusaciones por un escandaloso fraude electoral,
Felipe Calderón fue declarado presidente el martes 5 de septiembre de 2006.
López Obrador lo desconoció y fue promovido como “presidente legítimo”
por la Convención Nacional Democrática el 20 de noviembre de tal año
(Bedolla, 2016: 175).
“Hasta 2006, las directrices propuestas por López Obrador fueron bien
aceptadas en la mayoría de las corrientes del PRD, con la excepción de NI
(Nueva Izquierda), la que mostró grandes diferencias con él… Esto se hizo
evidente tanto en la lucha poselectoral de 2006, como en lo relativo a la
reforma energética de 2008” (Bolivar, 2014: 29). Por lo que Andrés Manuel
cambió su estrategia rumbo a las elecciones presidenciales del 2012,
“comenzó con la formación de comités locales de lo que llamó el Movimiento
de Regeneración Nacional (MORENA), presente en los dos mil 456
municipios del territorio nacional y que a la postre terminó constituido como
partido político” (Bedolla, 2016: 175).
Los Estados Unidos sufrieron un crack financiero en 2008 que se agudizó en
2012. Sus efectos se potenciaron en México por las desregulaciones, las
privatizaciones y los recortes a derechos aplicadas en México desde el
régimen de Carlos Salinas de Gortari. La llamada guerra al narcotráfico de
Felipe Calderón elevó la tasa de homicidios en México de 7.8 a 22.6 por cada
cien mil habitantes. Lo que combinado con la percepción popular de la
corrupción desencadenó una crisis política (Rivas-Otero, 2019: 227-228).
Andrés Manuel López Obrador volvió a ser candidato presidencial en las
elecciones del 1 de julio de 2012 por el Movimiento Progresista, en
competencia con Enrique Peña Nieto candidato del PRI. Pero “Leonardo
Valdez, consejero presidente del IFE, salió a informar los resultados del
conteo rápido contratado por el órgano electoral. Con una muestra de 7,500
casillas y un margen de error de medio punto porcentual, el conteo adelanta
que Peña Nieto terminaría con un margen de 37,93% a 38,55% de la votación;
mientras que López Obrador acabará en un sólido segundo lugar, con una
votación entre el 30,90% y 31,86% de los sufragios” (Camarena, 2012). En
esta ocasión, Obrador denunció la compra de cinco millones de votos por
parte del Partido Revolucionario Institucional. “…esta supuesta financiación
ilegal de la campaña priista se realizó a través de la triangulación de recursos
mediante empresas fantasma, con hombres de paja como principales
5

accionistas, que inyectaban fondos a la entidad financiera Monex. Según el


abogado Jaime Cárdenas, varias empresas relacionadas entre sí y un particular
transfirieron más de 108 millones de pesos a Monex para adquirir miles de
tarjetas prepago y de otras modalidades con el fin de comprar votos y pagar a
los operadores políticos del PRI durante los tres meses de campaña electoral”
(Prados, 2012).
Tras la agudización de los perniciosos efectos de las reformas económicas
neoliberales y la agudización de la violencia por el narcotráfico a lo largo del
país. Por fin en los comicios federales de 2018 ganó la Presidencia de México
bajo la consigna “Por el bien de todos, primero los pobres”. Los contendientes
reconocieron su triunfo a solo 45 minutos del cierre de las urnas, Al haber
obtenido más de la mitad de los sufragios, El diario Excelsior reportó el jueves
5 de julio de 2018 que: “Andrés Manuel López Obrador ganó la elección con
53.17% de los votos, seguido por Ricardo Anaya con 22.26%, José Antonio
Meade con 16.43% y Jaime Rodríguez Calderón 5.23%” (Zepeda, 2018).
El partido MORENA y los sus aliados de la “Coalición Juntos Haremos
Historia”, obtuvieron mayoría calificada en el congreso. AMLO advirtió
entonces que: “El Estado dejará de ser un comité al servicio de una minoría y
representará a todos los mexicanos, a ricos y pobres, a pobladores del campo y
de la ciudad, a migrantes, a creyentes, y no creyentes, a seres humanos de
todas las corrientes de pensamiento y de todas las preferencias sexuales”
(Ahmed y Villegas, 2018). Antonio Sola, quien diseñó la campaña de miedo
contra López Obrador en 2006, explicó la razón de su triunfo en 2018: “Hoy
AMLO es un político de centro mucho más moderado que gobernará a la
comunidad empresarial con la mano derecha, y a los sectores y programas
sociales con la izquierda… La gran diferencia entre aquel entonces y ahora es
que la emoción dominante entre los votantes es la ira, dijo Sola. Y la ira es
mucho más fuerte que el miedo” (Ahmed y Villegas, 2018).

Verdad, mentira y engaño.


Al decir adiós al totalitarismo, se nos escapó el pensamiento crítico.
Tras el desplome del Muro de Berlín, la academia occidental rehuyó a las
formas de pensamiento holístico, por su asociación con poderes dictatoriales.
Para Derrida, la des-totalitarización del mundo moderno, requiere “eliminar la
nostalgia del todo y su unidad” (Arias, 2017: 3). La ruptura con el
totalitarismo de tipo soviético, conllevó el abandono de los grandes relatos de
emancipación, de cualquier ideología que los sustituyera. Y hasta del método
crítico, por considerarlo intolerante y políticamente incorrecto. Porque los
filósofos al servicio del totalitarismo consideraron al pensamiento como un
arma de cambio y no como una luz: “su función, nos dicen, no es revelarnos lo
6

real, es decir lo que es, sino ayudarnos a modificarlo, a transformarlo


guiándonos hacia lo que no es” (Derrida, 1995: 18). Derrida en su “Historia de
la Mentira”, advierte que los regímenes totalitarios casi no se interesan por la
verdad objetiva. Pues al sentirse más fuertes que los dioses, “transforman a su
placer el presente y hasta el pasado” (Derrida, 1995: 19). Tal como ocurrió
con el discurso estalinista. Arendt en “Los orígenes del totalitarismo”
identificó al seguidor ideal del nazismo o comunismo, como alguien para
quien la distinción entre hecho o ficción, entre verdad y mentira ha dejado de
existir (Kakutani, 2018; 11). El hombre totalitario está impregnado por la
mentira en cada instante de su vida (Derrida, 1995: 17). Al respecto, “Koyré
sugiere que los regímenes totalitarios y sus análogos de toda especie, nunca se
situaron verdaderamente más allá de la distinción entre la verdad y la mentira.
Pues miente en el interior de esa tradición… para poner en acción el engaño
(Derrida, 1995: 19).
¿El “mundo verdadero” es una fábula?
Aparici y García-Marín discuten el papel de las fábulas como punto de partida
de las mentiras, pues con sus encantos atrapan al lector en las redes del engaño
(Aparici y García-Marín, 2019: 228). Derrida coincide con Nietzsche al
sospechar que el platonismo, el kantismo y el positivismo mintieron cuando
intentaron hacernos creer en un “mundo verdadero” (Derrida, 1995: 2). Para
entenderlo recurre a la “Historia de un Amor” incluida en el libro “El ocaso de
los dioses”. Donde Nietzsche relató en una sola página de seis episodios:
“Como el mundo verdadero terminó por convertirse en una fábula”. Es decir,
que ahí no se narra una fábula, sino como se tramó dicha fábula. “Tal como si
fuera posible un relato verdadero… de una fabulación que, precisamente, no
produce otra cosa que la idea de un mundo verdadero” (Derrida, 1995a). Pues
para Nietzsche la verdad solo es una componente del fuerza, “el poder de
dominar la manera en que pensamos la realidad, que deviene lucha de poder
sobre la manera de describirla” (Bianco: 2). Según Derrida la verdad es un
problema del testimonio, no de la objetividad, “la verdad tanto como realidad
no es un objeto dado de antemano que solo se trataría de reflejar
adecuadamente. Es una problemática del testimonio, por oposición a la
prueba…” (Derrida, 1995: 19). Como diría Braudillard, la función más
elevada del signo es desaparecer la realidad y enmascarar al mismo tiempo
dicha desaparición (Bianco: 3). El propio Vladislav Surkov, asesor de Putín ha
reconocido a Derrida como su maestro en el arte de la mentira, pues si el
lenguaje no es fiable y la relación entre palabras y sentido es inestable, la
noción occidental de verdad destaca por su candidez (Kakutani, 2018: 160-
161).
El gran libro del mundo.
7

Derrida concibe al libro como una condensación de la “metafísica de la


presencia”. Muñoz cae en un cierto agnosticismo, al considerar que el texto
implica en tanto negatividad radical, la imposibilidad de la experiencia, la
imposibilidad de su superación y apropiación por parte de los sujetos
soberanos de sentido (Muñoz, 2018: 48).
Según Derrida, la escritura de un libro con unidad de sentido, exige mantener
en silencio el punto de vista desde el cual redacta el autor. Texto que “avanza
de manera sinuosa, nunca recta entre líneas (Muñoz, 2018: 46). Pero que se
asemeja rasgo por rasgo al libro. Un texto que el libro esconde, pero que cuya
puesta en reserva lo hace posible (Muñoz, 2018: 46). ¿Cómo se puede
entonces leer lo ilegible de un libro? Transitando del libro escrito al texto, algo
así como ir del ser rumbo al más allá.
Según Derrida: “Si ser legible supone exhibir conformidad plena con la
gramática del gran libro que llamamos ‘mundo’ o ‘realidad’, entonces la
legibilidad del libro supone que haya algo prescrito, un sentido en cierto modo
“natural” que lo precede y que el libro repite. Que se encuentra en el origen y
fin de la escritura. Desde esa perspectiva, la ilegibilidad sería el fracaso de la
escritura al redactar un libro, esto es de producir una unidad coherente y total
cuya organización responde a un sentido exterior, a un significado
trascendental” (Muñoz, 2018: 45). El texto oculto en tanto negatividad radical
implicaría la imposibilidad de la experiencia, la imposibilidad de su
superación y apropiación por parte de los sujetos.
Para comprender un escrito debemos poner a un lado el texto enmascarado.
“A ese residuo, a eso que permanece en reserva, como totalmente otro libro y
no obstante es residual a él, es a lo que Derrida se refiere como su textualidad”
(Muñoz, 2018: 46). Si el libro escrito se revela dividido, escindido al abrigar
un texto, algo de lo que el mismo nunca llega a apropiarse. Entonces Derrida
debe explicar cómo leer el sinsentido del texto.
La deconstrucción del sentido.
Para conocer la intención del autor al escribir, es necesario deconstruir al libro
en función de los prejuicios que soporta. Si no sabemos a ciencia cierta lo que
un autor quiso decir realmente con el libro que escribió, debemos
despedazarlo para ser analizado en función de los supuestos que se esconden
detrás de él. Al deconstruir el libro para desmontar su unidad de sentido se
revela el texto. Derrida concibe a la deconstrucción como si fuera una
operación textil donde se descose al libro. “Al desmontar la pretensión de
unidad y totalidad de sentido que lo comanda, el texto simultáneamente se
cose” (Muñoz, 2018: 45). La deconstrucción pone al desnudo aquello
silenciado por la fuerza del sentido. “Reabre los saltos y espacios vacíos que,
pese al dispositivo del libro, interrumpen la continuidad de la línea de sentido
8

en su escritura” (Muñoz, 2016: 46). Deconstruir es leer lo ilegible, desnudar la


narrativa que el libro esconde y que en su ocultamiento lo posibilita. En
consecuencia se diversifican las interpretaciones del escrito y la misma noción
de verdad queda en entredicho, al final todo son narrativas elaboradas desde
particulares puntos de vista.
Como el lector competente fracasa al intentar comprender la unidad de sentido
de un libro. Sólo es posible acceder al texto enmascarado, leyendo el escrito
contra su propio sentido. Por ello, Derrida distingue la lectura monosémica
que constriñe la escritura al principio de la unidad de sentido; a diferencia de
la lectura diseminal que “se instala en la apertura del libro, esa que
llamaríamos ilegibilidad radical, para resistir a toda tentación de totalización y
unidad” (Muñoz, 2018: 47).
Posmodernidad y narrativas.
Tanto para Foucault como para Derrida la verdad es relativa, porque el sentido
de todo escrito obedece al específico punto de vista del autor. Si cualquier
declaración de que algo es verdadero, solo refleja la ideología de la persona
que la enuncia. Solo se comprende un escrito al considerar las creencias de un
autor. Por ello, “las intenciones de los autores en el discurso no pueden ser
incondicionalmente aceptadas. Esto multiplica el número de interpretaciones
legítima de un texto” (Lechte, 1994). Para los humanistas la relativización de
las grandes verdades holísticas, fue como liberarse de una camisa de fuerza.
Las tesis de la postmodernidad abrieron horizontes para la comprensión de los
otros en la academia. Se ampliaron los márgenes de tolerancia hacia los
desiguales y diferentes. Todas las narrativas, adquirieron validez, por
responder a la respetable pluralidad de las opiniones. Parecía trivial afirmar
que existen múltiples formas de leer un texto o que uno no puede entender un
escrito sin tener en cuenta las creencias políticas del autor (Lacy, 2015). Nadie
sospecho que el impulso posmoderno de la década de 1990. No sería seguido
por un avance del progresismo tolerante, sino por el más explícito y duro
anuncio del cataclismo conservador de las noticias falsas. Según McIntyre la
posmodernidad dio un giro irónico, pese a haberse originado por pensamiento
progresista, sus tácticas y retórica fueron adoptadas con éxito por la derecha
más radical, lo que nos condujo al drama de la viral difusión de la posverdad
en redes y medios. Christopher Domínguez considera que el antiautoritarismo
de la filosofía posmoderna derivó en un horror, por su empeño de denunciar al
lenguaje como “un fascismo veleidoso disociado de toda veracidad”
(Christopher, 2018: 43). Por ello nos convoca a recuperar el pensamiento
crítico, no por nostalgia, sino como una urgente necesidad política.
McIntyre advierte que la relativización de la verdad había comenzado tiempo
atrás. Cuando las empresas de tabaco o las que utilizan carbón, contrataron a
9

“expertos propios” para generar falsa evidencia, de que fumar no provoca


cáncer o negar la influencia de la polución en el cambio climático.
Katukani considera que la deconstrucción por su profundo nihilismo implica
en términos prácticos, “que ha sido fútil toda la obra de periodistas e
historiadores capaces de ofrecernos verdades demostradas gracias a la
evidencia” (Katukani, 2018: 60). Bajo la posmodernidad el exceso de
neutralidad ha permitido la libre circulación de infundios en medios y redes
sociales. “El resultado es la libre circulación de bullshit que Harry Frankfurt
definió como una táctica persuasiva que se desentiende de la verdad (Arias,
2017: 2). Discutamos ahora el concepto de verdad.
Verdad factual y veracidad discursiva.
Arendt reconoce un espacio de “verdad factual”, que como en el caso de la
verdad científica, debe ser convalidada intersubjetivamente. A diferencia de
Foucault, para quien “la verdad depende casi siempre del punto de vista de
quien la formula y deriva de un proceso de construcción -o de imposición-
social más que de su correspondencia con una realidad exterior al ser humano”
(Arias, 2017: 1).
Como que las estrategias discursivas desdibujan la frontera entre la verdad
factual y los discursos veraces. La primera termina por no ser fácil de
reconocer (Ponce, 2018: 7). Los diversos poderes atacan la verdad factual,
fabrican sus propios hecho y esparcen la calumnia. Por ello: “Las
posibilidades de que la verdad factual sobreviva a la embestida feroz del
poder son muy escasas; siempre corre el peligro de que la arrojen del mundo,
no sólo por un periodo sino potencialmente para siempre” (Arendt, 1968: 353-
354). El que la verdad factual termine por no ser fácil de identificar, implica
un problema tanto político como moral (Ponce, 2018: 7).
Posverdad y ocultamiento.
Steven Tesich escribió primera vez de la posverdad en 1992 en un artículo de
la revista The Nation. Según Bianco la posverdad es “un eufemismo para
definir una verdad aparente o que, quitando este maquillaje, se encuentra una
voluntad autoritaria y demagógica decidida a disfrazar la verdad en la forma
de la mentira (Bianco: 4), La posverdad se presenta como una lectura
alternativa más de la realidad, ocultando su malicia (Aznar, 2018: 8). El uso
de la mentira al servicio del poder, se muestra con diferentes ropajes como
“posverdad”, “hechos alternativos”, “regímenes de posverdad”, sociedad post-
factual y pospolítica. (Ponce, 2018: 1).
Según Aparici y García Mora la posverdad es la construcción cognitiva de una
serie de creencias y estereotipos que son substanciados y concretizados por las
fake news dotando de relato a los infundios. Se entiende por fake news o
noticias falsas, a mentiras encubiertas como verdades, que se lanzan a la
10

circulación por las redes sociales, a fin de desinformar y generar percepciones


equivocadas sobre lo que es cierto o no lo es (Villanueva, 2018).
“Para que el cocinado de la noticia falsa sea efectivo, debe existir el caldo de
cultivo previo en forma de posverdad… se puede producir también en el
sentido inverso (Aparici y García-Mora, 2019a: 3189). El error, el fraude, el
relato ficticio no son equivalentes a la mentira. “Estas categorías son
irreductibles entre sí, pero ¿qué pensar de situaciones tan frecuentes donde de
hecho, en verdad, se contaminan tan recíprocamente y no permiten una
delimitación rigurosa? ¿Y si este contagio marcara a menudo el espacio
mismo de los discursos públicos, sobre todo en los medios? (Aparici y García-
Mora 2019: 241). Tal complejidad es conocida como un régimen de
posverdad, es un régimen de ocultamiento.
Tesich recuerda que todas las dictaduras se han esforzado por suprimir la
verdad, “pero la importancia para la actualidad del término radica en que se
trata de un fenómeno que ocurre, manipula la opinión pública y suprime la
verdad con notable eficacia política, en nuestras democracias de masas”
(Ponce, 2018: 11). El resultado es que ya no se confía en nadie y se desconfía
hasta de lo hechos. Si no confías en nadie, por qué tienes que confiar en los
hechos. Si nadie hace nada por mí, por qué he de creer en nadie. Se admite
que las interpretaciones le den sentido a los hechos. “Las interpretaciones por
encima de los hechos, que querían superar el mito de la objetividad, no nos
han llevado a esa emancipación que filósofos modernos como Richard Rory
esperaban” (Bianco, 2017: 3). Más bien el mundo reducido a un reality show,
nos desbarrancó en un abismo de populismo mediático. De acuerdo con Ponce
“la historia lo demuestra, los hechos (la verdad factual) pueden ser borrados,
olvidados o bien deformados por un efecto del poder, desde el poder público
(Ponce, 2018: 9). Surge una duda, ¿por qué la gente no denuncia la falsedad
de la posverdad? Cárdenas y Serrano responden que el proceder de las
personas tiende a seguir el de los suyos. Como depende de su grupo de
pertenencia, “primero eligen tribu, después adoptan los principios de ésta y
finalmente eligen aquellos datos que apoyan esas posiciones” (Cárdenas y
Serrano, 2019: 2680). Terminando por preferir la información que refuerza sus
opiniones.
Las redes empoderan a la ignorancia.
Las redes sociales lucran con nuestras emociones, refuerzan nuestras
ignorancias y amenazan a los posibles desertores digitales con el aislamiento
social. Cuando Google privilegia a unas páginas web y discrimina a otras,
determina cuales serán más consultada y las posiciona como significativas
ante la opinión pública. O lo que es lo mismo: fabrica una realidad alterna
(Aparici y García-Marín, 2019: 3218). Los algoritmos de las redes destacan
11

aquella información con más probabilidad de agradar y discrimina lo menos


popular (Aznar, 2018: 5). Los datos reciben el mismo trato que las opiniones y
se descartan los que generan desafectos (Aznar, 2018: 8).
Aunque para muchos adolescentes el “meme” es considerado un divertimento.
Tal concepto se refiere a una expresión cultural y simbólica, una unidad de
significación ilimitada. Que es replicada socialmente, a la manera como se
reproducen los genes biológicos (Contreras, 2018: 37). “Es la rapidez con la
cual circulan los flujos de información en la red lo que posibilita que el meme
electrónico pueda amplificarse a niveles planetarios. Esto ha sido aprovechado
recientemente por las áreas de publicidad y mercadotecnia para promocionar
ciertos productos o ideas mediante la viralidad” (Contreras, 2018: 37). Las
víctimas del acoso cibernético no pueden detener la circulación de un meme
infamante, pues los servicios de red no condicionan la emisión de la
información a un determinado usuario final.
Un meme con difamaciones puede parecer real y verdadero, gracias al apoyo
de las imágenes que lo acompañan. “Existe una tendencia a creer en la
verosimilitud de lo audiovisual por mostrarse como una testificación, una
demostración de algo que en verdad está sucediendo. ‘Yo lo he visto’, afirma
el engañado ciudadano cuando lo que realmente ha visto no es sino algo
construido, elaborado artificialmente, un relato ad hoc para servir a los
intereses ideológicos de un sector o de otro. Una mentira” (Aparici y García-
Marín, 2019b, 3159). Como ocurrió con en Cataluña durante el referéndum de
independencia del 1 de octubre de 2017, cuando se fusionaron imágenes reales
con imágenes falsas para engañar y manipular a los usuarios de las redes.
Las redes sociales agrupan a los individuos en racimos, en base a
“informaciones acomodaticias que ratifican entre sí sus creencias mientras
rechazan los datos no concurrentes con sus ideas; los datos reciben de este
modo el mismo tratamiento que las opiniones, descartándose subjetivamente
aquellos que no se comprometen o disgustan sobre la base de esa sola razón”
(Aznar, 2018: 6).
La circulación digital de las mentiras.
Las redes digitales encierran a la audiencia dentro de espacios informativos
coincidentes con su ideología preferida. El fácil acceso y la amplia difusión
ofrecida por las herramientas de Internet, permite que los opositores a las
vacunas o quienes niegan el cambio climático, expongan sus elucubraciones a
escala global. Como sus prejuicios son reforzados al escuchar el eco de sus
correligionarios digitales, cuando recibe el famoso like o la mano con el
pulgar levantado del “me gusta”. Son una suerte de ignorantes empoderados
(Lacy 2015).
12

Aparici y García-Marín denuncian que la verdad y la mentira son


equivalenciadas por las redes sociales. Hechos y ficción, mentiras y verdades,
contenidos contrastados y bulos circulan bajo un régimen de isonomía
(igualdad de apariencia) tanto en las redes digitales como en los otros medios
de comunicación (Aparici y García-Marín, 2019: 241).
Mientras que las emotivas narrativas de la posverdad se masifican o viralizan
con rapidez y gran impacto, los desmentidos de sus mentiras no se viralizan
por apelar a la razón y resultar poco atractivos (Aznar, 2018: 9).
La eficacia realizativa de la posverdad.
Mike Cernovich envenenó la campaña electoral de 2016 en los Estados
Unidos con calumnias viralizadas por las redes digitales. Que mostraron como
las mentiras de la llamada posverdad puede alcanzar eficacia realizativa. El
bloguero ultra derechista alcanzó notoriedad por el escándalo #PizzaGate.
Cernovich difamó a Hillary Clinton, acusándola de participar en un inexistente
culto sexual pedófilo, que supuestamente se reunía en una pizzería de la
capital norteamericana. El infundio alcanzó tal difusión en las redes sociales,
que un ultraconservador desquiciado fue al restaurant para tirotear a los
supuestos implicados. Mike Cernovich justificó la falsedad de calumnias,
presentándolas como “hechos alternativos”. Porque “gracias al
posmodernismo aprendido en la universidad, se había enterado –Jacques
Lacan mediante- de que todo es simplemente narrativa” (Kakutani, 2018: 41).
Christopher considera al relativismo que ha predominado en la academia
durante las últimas décadas, como responsable parcial de la actual era de la
posverdad (Christopher, 2018: 40). El evangelio del posmodernismo
prefigurado por Nietzsche decretó la “inexistencia de verdades universales
contra el imperio de las pequeñas verdades personales” (Kakutan, 2018: 18).
Según Christopher Domínguez, la derecha conservadora impuso en los
Estados Unidos el llamado “efecto Rashomon”, según el cual todo punto de
vista depende mi punto de vista (Christopher, 2018: 41)

Mentiras y falsas verdades contra Obrador.

Obrador impulsó la construcción del segundo piso del periférico de la Ciudad


de México. Obra que agilizó la circulación vehicular y generó en un lapso de
solo tres años 32 mil 250 empleos directos y 96 mil 750 indirectos. Además
aceleró la llamada locomotora económica de la construcción, al consumir 302
mil 523 metros cuadrados de concreto y 81 mil 331 toneladas de acero (Serur,
2018) para la vía elevada. Así se posicionó como uno de los mejores
candidatos a la presidencia de la república para el 2006. La preocupación
13

cundió entre la clase política. Panistas y priístas superaron sus diferencias,


para celebrar una alianza que le cerrara el paso.
El escándalo por el intento de desafuero.
Rosario Robles, quien antecedió a Obrador en la Jefatura de Gobierno del D.F.
Había expropiado el 9 de noviembre de 2000, una pequeña porción del terreno
conocido como “El Encino” en Cuajimalpa, para permitir el acceso a un
hospital privado. Ante lo cual, el propietario afectado demandó al Distrito
Federal el 11 de marzo de 2001, alegando una expropiación incorrecta y
solicitó un amparo para frenarla. Los estrategas del PRI y el PAN
aprovecharon el asunto para inculpar sin fundamento al tabasqueño. Quien
habría desobedecido una orden judicial con pleno conocimiento, aunque el
conflicto hubiera ocurrido durante la anterior administración del gobierno del
Distrito Federal.
Lo que en todo caso era un falta menor.
El presidente Fox solicitó que la Procuraduría General de la República enviara
el caso al Congreso de la Unión en 2004. Desde marzo de 2005, se desató una
campaña de difamación contra López Obrador en la televisión y otros medios
de comunicación. Con los votos de 360 diputados de Acción Nacional y del
Revolucionario Institucional se aprobó el 7 de abril de 2005 el desafuero por
mayoría del tabasqueño. Sólo 127 diputados del PRD votaron en contra. El
diario Washington Post había advertido desde el día anterior, que tal desafuero
sería un retroceso de la democracia en México. También el diario New York
Times lamentó que la campaña presidencial mexicana para el 2006, arrancara
con un tufillo de los viejos malos tiempos (Balboa, 2005). Hasta el The
Financial Times lo consideró una mala decisión.
López Obrador abandonó su despacho el 8 de abril y quedó temporalmente a
cargo de Alejandro Encinas. AMLO comenzó a realizar asambleas en plazas
públicas desde el 15 de abril, donde denunciaba el atropello de las libertades
democráticas. Ante la creciente respuesta popular: “El 24 de abril se efectuó la
marcha del silencio, convocada por el jefe de Gobierno del Distrito Federal,
concentró a alrededor de un millón 200 mil personas en su apoyo… Como
corolario, el 27 de abril el presidente Vicente Fox anunció la renuncia del
procurador general de la República, general Macedo de la Concha, uno de los
principales ejecutores del proceso contra el mandatario capitalino, y anunció
que se revisaría de manera exhaustiva el expediente” (Balboa, 2005). Con la
enorme marcha popular se vislumbró una crisis política, que pondría en juego
la estabilidad nacional, por lo que las autoridades coludidas dieron marcha
atrás al proceso y lo declararon improcedente (Rodríguez, 2006: 149). Daniel
Francisco Cabeza de Vaca Hernández, en su calidad de nuevo procurador
determinó que no se ejercería acción penal contra el jefe de gobierno
14

capitalino. Villamil considera que: “La estabilidad política del país se jugó por
menos de 100 metros de calle en un expediente que tuvo más que ver con su
antecesora Rosario Robles que con el propio Obrador… el desafuero convirtió
a López Obrador en una víctima de la clara alianza entre el PRIAN, surgió un
movimiento social inédito en apoyo al jefe de gobierno capitalino y el
tabasqueño se volvió el protagonista central de la contienda de 2006”
(Villamil, 2018). De acuerdo con Rodríguez, la estrategia seguida por el jefe
de gobierno, al apelar a su inocencia y denunciar la injusticia que sufría, fue
un acierto comunicacional. Lo absurdo del desafuero y la desproporción entre
la falta y la sanción, “lograron permear en el estado de ánimo de la opinión
pública” (Rodríguez, 2006: 148).
Incertidumbre y Bolsa de valores
López Obrador se proponía en 2006, incrementar el papel del Estado para
crear empleos, oportunidades de inversión y crecimiento. Y orientar el gasto
gubernamental hacia programas sociales, de educación e infraestructura. Los
fondos para tales proyectos, se generarían combatiendo la evasión fiscal y
reduciendo el gasto económico redundante, de acuerdo con su programa. “De
esa manera, ahorrando recursos despilfarrados, él obtendría los recursos
adicionales para pagar tales prioridades del gasto” (Benton, 2006: 76). La
insistencia en reforzar el gasto benefactor y su negativa a emprender las
reformas estructurales neoliberales, generó preocupación entre los
inversionistas. Allyson Lucinda Benton lo pudo constatar al conversar con
gerentes de portafolios y analistas de mercado. Sin embargo, la investigadora
reportó un hallazgo inusual, en su artículo ¿Quién está preocupado por López
Obrador?: “La incertidumbre electoral aumentó la volatilidad de los
mercados, mientras que el incrementó en la certidumbre lo reducía, sin
importar que fuera López Obrador o Calderón quien tuviera más
probabilidades de ganar… parece curioso que aumentos en el apoyo a
cualquiera de los dos candidatos reduzca la preocupación de los mercados”
(Benton, 2006: 83). Por ello concluyó que durante la campaña electoral del
2006, los inversionistas ya se estaban preparando para una eventual victoria
electoral del candidato de la izquierda o del candidato de derecha. Pero no
para la incertidumbre política o el fantasma de la inestabilidad social producto
de una contienda cerrada (Benton, 2006: 83-83).
La campaña de mentiras.
“Andrés Manuel López Obrador estuvo muy cerca de ganar la elección
presidencial de 2006, pero durante su campaña vivió la más aguerrida
campaña electoral que se recuerde en la historia de México… también han
sido las más polémica debido al presunto fraude electoral contra el
tabasqueño” (Nación321, 2018). El Partido de Acción Nacional patrocinó una
15

guerra sucia de infundios a través de los medios. A fin de difamar al candidato


de la Coalición por el Bienestar de México, como un “peligro para México”.
Fernando Rudy arriesgó una hipótesis, a cinco años de distancia de los hechos.
Para tratar de comprender la campaña difamatoria de 2006: “la imagen de
López Obrador presentada en los comicios negativos del PAN no fue
construida con base en evidencia y argumentos claros que aumentaran la
información disponible para el electorado. Por el contrario, aquellos
emplearon la repetición incansable de su mensaje para suplir la falta de
evidencia sólida, así como los recursos propios del medio (video) para crear
una imagen de miedo que predispusiera al espectador a aceptar
irreflexivamente dicha imagen” (Rudy, 2011: 716).
Los anuncios falsos que asociaban sin razón a López Obrador con Hugo
Chávez, el presidente radical de Venezuela, lograron su cometido. Rudy
encontró evidencia empírica, del vuelco en las preferencias electorales del
2006 en la “Encuesta de encuestas”. Ocurrido tras la difusión de los anuncios
falsarios que manipulaban el proyecto económico del candidato opositor. Pues
se le mostraba como un político que financiaba sus obras a través de un
endeudamiento excesivo, lo cual conduciría a una crisis económica como las
sufridas en sexenios pasados. A principios de “marzo, 31% de los encuestados
señalaron que López Obrador inspiraría más confianza para invertir en el
país… Sin embargo, para la segunda quincena de abril 33% señaló que López
Obrador provocaría que el país cayera en una crisis económica” (Rudy, 2011:
729). La encuesta Panel 2006, también mostró que el temor a que Obrador
pudiera desatar una crisis, tuvo un impacto relevante en el electorado.
Fernando Rudy atribuyó tal giro, a la campaña sucia en la televisión, al menos
en forma parcial.
Spots de la campaña difamatoria contra Obrador.
Felipe Calderón inició su falsaria campaña contra López Obrador, desde su
primer discurso como candidato del 19 de enero de 2006. Cuando lo calificó
como “un peligro para México”. Campaña de mentiras a la que se uniría un
grupo de empresas y organismos del sector privado, financiando spots de
televisión ilegales, pero tolerados por el Instituto Federal Electoral (García,
2007: XXVIII). Recordemos que un spot es un breve mensaje televisivo fácil
de recordar, donde se hacen afirmaciones valorativas no sustentadas, ni
explicadas, que se repiten sistemáticamente (Rudy, 201: 725).
La línea estratégica calderonista exponía a López Obrador como un actor
político proclive a endeudarse sin medida, amenazando el bienestar
económico de la gente (Rudy, 2011: 725). El llamado spot del ladrillo
ejemplifica muy bien el sentido de tal campaña. En él, una voz masculina
proclama con voz apremiante: “Este es el segundo piso de la Ciudad de
16

México, ¿cómo pagó López Obrador por él? Se endeudó. ¿Las pensiones? Se
endeudó. Triplicó la deuda del D.F. Si llega a presidente nos va a endeudar
más y vendrá una crisis económica, devaluación, desempleo. En ese momento,
una mano coloca ladrillos con las inscripciones ‘crisis’, ‘devaluación’,
‘desempleo’, ‘embargos’, finalmente, la construcción se desmorona
estrepitosamente y se escucha de nuevo una voz masculina: ‘Estos son los
grandes planes de López Obrador, un peligro para México’” (Rudy, 2011:
732).
Dick Morris un desaseado mercadólogo estadounidense, contribuyó
sustancialmente a la victoria de Felipe Calderón en 2006. Al polarizar la
sociedad mexicana mediante una campaña de difamación contra Obrador.
Morris ya había metido su mano negra en México tiempo atrás, para que
Vicente Fox sustituyera al PRI en Los Pinos.
Dick Morris, quien estudió en la Facultad de Arte de la Universidad de
Columbia. Ha sido un exitoso asesor político, a quien se atribuye la reelección
de Bill Clinton en 1996, el triunfo de los gobernadores Bill Weld por
Massachusetts y Peter Wilson por California. También llevó a la victoria a
Fernando de la Rúa en Argentina y al uruguayo Jorge Batlle en 1999. Sin
olvidar a Viktor Yushchenko en Ucrania el año de 2005. Además asesoró a 12
diputados del Partido Independentista en Londres.
Morris regresó a México en 2005, cuando propuso a Felipe Calderón una
campaña de ataque a AMLO, que lo ligaría falsamente a un personaje tan
polémico como Hugo Chávez. A partir de entonces dirigiría tras bambalinas la
promoción de la campaña de mentiras contra Andrés Manuel López Obrador,
presentándolo como un riesgo para México. Según Daniel Land, “la presencia
de Morris en la campaña de Calderón se hizo evidente a finales de febrero,
cuando el panista cambió de estrategia y se montó en una campaña de
descrédito hacia López Obrador, quien para entonces llevaba una ventaja
considerable en las encuestas de preferencia electoral” (La Redacción, 2006).
Horacio Bernal estratega de Francisco Labastida en el 2000, coincide con
Land. La mano negra de Morris dejó su impronta en la intensa campaña
televisiva contra el candidato de la coalición Por el Bien de Todos (La
Redacción, 2006). Morris procuró ser invisible, hasta que su mano experta en
campañas negras destacó en los mensajes televisivos que señalaban a AMLO
como un peligro. Así como en los de “Consejo Coordinador Empresarial que
comparaban al tabasqueño con el presidente de Venezuela” (La Redacción,
2006). El propio Dick Morris desnudó su intervención en las elecciones
mexicanas, al publicar su artículo Amenaza contra México en el diario New
York Times. Donde denunció sin pruebas a Obrador, por haber recibido apoyo
económico de Hugo Chávez. Tal como lo había comentado Jan Kolbe, el
17

representante republicano por Arizona, ante congresistas mexicanos (La


Redacción, 2006). Dick Morris publicó otro artículo después de los comicios
intitulado: Elección en México: la derrota de la izquierda latina, fechado el
10 de junio de 2006. Donde “afirmó que con la victoria del centrista Felipe
Calderón, el electorado mexicano ha evitado que la alianza entre Hugo Chávez
y Fidel Castro tenga éxito en su intento por dominar el futuro político de
Latinoamericano con líderes y políticas de izquierda. México ha tomado la
primera medida para pararlos, agrega Morris…” (La Redacción, 2006).
El español Solá en colaboración con Morris: “diseñó una campaña donde el
miedo era el principal ingrediente y podíamos escuchar palabras como
devaluación, desempleo y dictadura. El PAN unió fuerzas con el Consejo
Coordinador Empresarial, entonces dirigido por José Luis Barraza y también
se dedicaron a difundir sus propios spots, por ejemplo mostraban a Andrés
López Obrador como ‘algo distinto’ y una persona en la que no se podía
confiar” (Nación321, 2018). El Instituto Brasileño de Opinión Pública
contratado por el Instituto Federal Electoral publicó los resultados de su
monitoreo en las campañas de radio y televisión mexicanas. En él se acredita
que el Consejo Coordinador Empresarial pagó 136 millones de pesos en
promocionales sincronizados con la campaña difamatoria desplegada por
Calderón y Acción Nacional: “Calderón y el PAN recibieron apoyo del CCE,
de Jumex -que gastó 13 millones y de Pepsi Corporation” (García, 2007:
XXVIII).
La amplia campaña de falsas verdades contra López Obrador minó su imagen,
Javier Treviño Rangel al analizar la encuesta de Paramétrica en mayo de 2006.
Encontró que el 71% de los entrevistados conocían del spot “ladrillos” y un
82% recordaba otro llamado “intolerancia”. “Así mismo, de la misma encuesta
se desprende que la opinión negativa sobre López Obrador aumentó 20% a
raíz del spot ‘ladrillos’ y 31% a causa de ‘intolerancia’” (Ruby, 2011: 729).
Neoliberalismo, pobreza y populismo.
América Latina en 2006, ya había padecido veinte años de reformas
neoliberales y por ello contaba con 214 millones de pobres: “casi el 43 por
ciento de la población latinoamericana, vivía en la pobreza en el año 2001. De
ellas 18.6 por ciento (92.8 millones) se encontraban en la indigencia”
(Márquez, 2006: 95). De los 41.5 millones de personas que integraban la
población económicamente activa, sólo 25.6 millones laboraba con
prestaciones, en cambio 11.3 millones trabajaba sin contrato laboral (Márquez,
2006: 91). Como respuesta a tan agraviante situación “la región tomó una
dirección hacia la izquierda, con su arribo al poder en Argentina, Brasil,
Venezuela, Panamá (Márquez, 2006: 91-92).
18

Los beneficiados por el neoliberalismo pese a tan apremiante situación, han


recelado de los líderes populistas, por intentar alterar un orden que los ha
beneficiado (Paredes, 2016). Los líderes neoliberales preocupados más por la
estabilidad macroeconómica que por el bienestar de su población, fueron
rechazados. Quizá por ello, los neoliberales han calificado a los presidentes
latinoamericanos emergentes como populistas. Termino que por ambiguo se
presta a varias interpretaciones. Rosendo Bolivar por ejemplo, define al líder
populista, como aquel con una gran influencia social y popular, que conoce los
problemas de la gente porque los ha vivido. “El pueblo lo reconoce como uno
de los suyos, lo sigue y lo defiende de sus detractores. Sus propuestas son
claras, simples, y su lenguaje coloquial. Su principal bandera es la justicia
social, acabando con los vicios del sistema que concentra la riqueza en unos
cuantos que viven a expensas del sacrificio del pueblo” (Bolivar, 2014: 31).
Krauze por otro lado, considera al populismo como una desviación de la
democracia. Donde los caudillos latinoamericanos tejen vínculos directos con
la población, saltándose las leyes y las instituciones. El caudillo secuestraría la
iniciativa del pueblo desde su punto de vista. “El líder es el agente primordial
del populismo. No hay populismo sin la figura del personaje providencial que
supuestamente resolverá, de una buena vez y para siempre, los problemas del
pueblo” (Krauze, 2012). Zuckerman -desde su punto de vista- también
reclama a los políticos latinos, que por buscar la popularidad niegan la
realidad objetiva del mercado: “Quizás lo que mejor resuma esta definición es
una recomendación de un gobernante populista sudamericano a un colega
suyo de otro país, por ahí de mediados del siglo pasado: ‘Si los trabajadores te
piden dinero dales. Si te piden más dales más. Al fin y al cabo la economía es
flexible’” (Zuckerman, 2012). El columnista subraya el error de que los
populistas tiendan a financiar su medidas benefactoras mediante el
endeudamiento. Puede ocurrir que tras las medidas populistas, la economía
siga funcionando. Pero en algún momento, alguien tendría que pagar los
costos y por lo general sería la población. Como este tipo de narrativas, se
sobrecargan con juicios de valor. Ignoran la posibilidad de que decisiones
bien recibidas por la sociedad, fortalezcan la economía de un país. Como
ocurrió en los Estados Unidos luego de la depresión por la crisis de 1929.
Cuando el presidente Roosevelt recuperó la economía de su país de una
profunda crisis de sobreproducción, estimulando el empleo y el consumo
popular.
No se pudo falsear la verdad en 2018.
López Obrador volvió a inconformarse por las elecciones presidenciales de
2012, denunciando que Enrique Peña Nieto habría comprado los comicios. Al
cambiar tarjetas bancarias a cambio del voto. Pese a ello y a espaldas del
19

tabasqueño, el propio Partido de la Revolución Democrática firmó un Pacto


por México con el PRI, el PAN y otras pequeñas fuerzas. Andrés López
Obrador tuvo que anunciar el 9 de septiembre de 2012, la conversión de la
asociación civil MORENA en un partido político.
Bajo tal contexto: “El propio López Obrador admitió que la guerra sucia y el
fraude de 2006 lo desprestigiaron. Y que su impacto alcanzó hasta su siguiente
campaña por la presidencia de la república en 2012. ‘Nos costó mucho trabajo
remontarlo… fueron años muy difíciles después de 2006, de mucho rechazo
porque nos bombardearon, nos satanizaron y aguantamos’” (Nación321,
2018). Obrador tuvo que girar hacia las posiciones de centro político, en busca
del voto de las capas medias.
José Antonio Meade, candidato del PRI en los comicios presidenciales de
2018. Intentó revivir la campaña difamatoria desplegada por el PAN contra
López Obrador en 2006. En dos videos difundidos por YouTube aparecían
mujeres preocupadas: “porque el Peje gané la elección del 1 de julio pues,
según dicen, buscará ‘sacar a los narcos a la calle’ y ‘quiere echar atrás la
reforma (educativa)’” (Vanguardia.Mx, 2018). Sin embargo esos videos no
tuvieron gran impacto en un público, que doce años después de la campaña
difamatoria del 2006, se informaba más a través de redes sociales como
Twitter y Facebook que por domesticada televisión.
Las posverdades durante la campaña electoral mexicana del 2018.
López Obrador advirtió la emergencia de novedosas formas de difamación,
durante su campaña presidencial de 2018. Como la página web pejeleaks.org,
sitio de Internet sin contacto alguno, que admitía su interés en difundir la
faceta más oscura y desconocida del candidato de MORENA. Como ahora se
sabe, las redes sociales al permitir el anonimato, favorecen el lanzamiento de
mensajes maliciosos, para golpear al oponente o posicionar temas en la agenda
de la opinión pública (Naveja y Naveja, 2018: 20).
Durante la campaña presidencial de 2018, las redes influyeron de gran manera
a la población mexicana de entre 18 y 35 años. Se estimaba que 40 millones
de jóvenes electores habían migrado a plataformas como Twitter, Facebook e
Instagram, hastiados de la manipulación y las falsas verdades difundidas por
televisión. “Su mundo es el streaming, sus fuentes de información están en las
redes sociales, sus líderes de opinión son completamente diferentes a las de
sus antecesores. Al mismo tiempo, hacen su aparición las fake news, el
espionaje desde la red” (Naveja y Naveja, 2018: 20). Protegidos por el
anonimato proliferaron sitios web mercenarios, creados para desinformar. El
20 de junio de 2018 en el marco del último debate de los candidatos
presidenciales, Alejandra Barrales difundió una supuesta encuesta de Televisa
y Publimetro, donde aparecía en empate técnico con Claudia Sheinbaum,
20

candidata a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Pero: “Después


de que este supuesto estudio empezara a propagarse Televisa se deslindó en
twitter de la encuesta, mientras que Publimetro asumió haberla publicado, más
no su realización. Incluso menciono que es autoría de la empresa
Megamhetryk” (Rencillas, 2018: 8).
En mayo del 2018 apareció el sitio retroceso.com. Donde se difundió la falsa
verdad de que Andrés Manuel López Obrador -el candidato puntero- se
proponía desaparecer al ejército. El falaz sitio lanzó otras 12 noticias
maliciosas, pero fue detectado. “Según VerificadoMX, el dominio de la
página fue comprado el 26 de mayo, y está registrado en Oregón, EU, bajo un
servicio de privacidad que oculta la identidad de quien lo contrata” (Rencillas,
2018: 8). Otro esfuerzo por descreditar a López Obrador fue el lanzamiento
del falsario portal Pejeleaks experto en divulgar posverdades injuriantes. “El
17 de abril, Etcétera desentrañó la trama que pretendía vincular a López
Obrador con el narcotráfico, la cual se construyó con testimonios, documentos
apócrifos y la amañada concatenación de sucesos inconexos” (Rencillas, 2018:
11).
Durante la campaña electoral presidencial del 2018, circularon por Internet
muchos mensajes o memes subidos no solo por usuarios comunes y corrientes
de las redes, sino por: “casas de campaña, agencias de marketing y
simpatizantes de algún partido o candidato. Estos memes liquidaron el
pensamiento crítico. Por lo general intentaron imponer una visión de la
realidad” (Contreras, 2018: 40). Tal epidemia de posverdad conllevó el
menosprecio de la evidencia, de la objetividad de los hechos y el contexto para
desorientar al electorado. Pues el relativismo posmoderno de corte neoliberal,
suele cobijar a los “hechos alternativos” y la posverdad. Provocando, que “el
monólogo triunfe sobre el diálogo; la gesticulación elocuente sobre los
argumentos; las pasiones más bajas por encima de las razones y el marketing
desprovisto de sentido sobre la política democrática” (Raphael, 2018). La
manipulación de la verdad ha llegado a grados extremos de manipulación.
Ricardo Raphael advierte: “Cuando lo verdadero y lo falso pueden ser
confundidos masivamente llegó el momento de preocuparse por la
civilización” (Raphael, 2018).
Ante la inundación del ciberespacio con falsas verdades, rumores e infundios,
diversos medios periodístico entre los que destaca la revista Proceso.
Impulsaron la creación por Internet del sitio Verificado 2018. Encargado de
monitorear y contrastar la información difundida a través de las redes
digitales. Tal iniciativa denunció un falso documento que circulo digitalmente,
sobre las primeras acciones que realizaría el gobierno de López Obrador. Que
entre otras falsedades afirmaba: “‘El servicio de internet será manejado por el
21

Estado’, ‘el gobierno tendrá la facultad de eliminar cualquier noticia falsa,


tendenciosa o difamatoria’; ‘empleados del sector privado no podrán ganar
más de 15 mil pesos’; no se podrán vende vehículos de más de cuatro
cilindros’” (Redacción de La Jornada, 6 de julio de 2018). Algo muy lejano a
la política de comunicación social comprometido por Obrador en su programa
de campaña.
Populismo en América Latina, el fracaso de una compleja trama.
La imagen pública de López Obrador enfrentó en 2018, otra campaña
difamatoria contra su imagen pública. Populismo en América Latina fue el
título de una serie de programas documentales orientados a construir un falsa
imagen del candidato opositor, que lo calificaba como un “redentor
furibundo”. Con tal fin se tejió un complejo esquema conspirativo que violó
el modelo legal de comunicación política. Para influir negativamente en la
percepción de Obrador como candidato presidencial, se utilizaron recursos del
sector privado y hasta recursos públicos del Estado de México. El estreno de
la serie fue publicitado en autobuses públicos, en promocionales de televisión,
en entrevistas y en cintillos audiovisuales. Todo ello encubierto bajo el manto
de la libertad de expresión (Redacción, 2019). Una empresa de Alejandro
Quintero Iñiguez, quien posicionó la imagen de Enrique Peña Nieto cuando
todavía era gobernador del Estado de México: “obtuvo casi 45 millones de
pesos en ingresos a través del dinero privado que empresas inyectaron a la
producción y publicidad de la serie, en donde el ahora presidente Andrés
Manuel López Obrador era catalogado junto a líderes latinoamericanos como
Hugo Chávez y Lula da Silva” (Villamil, 2019). Pese a que en México el
capital privado no puede financiar propaganda electoral. Pues el artículo 41
constitucional establece que ninguna persona física o moral puede contratar
propaganda dirigida a influir en las preferencias electorales, ni a favor ni en
contra de los partidos políticos o sus candidatos. (Redacción, 2019).
Aunque se especuló que la serie documental falsaria sería transmitida por los
canales de paga, ni los canales de televisión abierta la quisieron difundirla por
su burda manipulación. Al final fue proyectada a través de Amazon Prime (un
servicio de video que transmite vía streaming) en junio de 2018. En abierta
violación a las leyes electorales y a sólo unos días de los sufragios
presidenciales.
El infundio del redentor furioso.
“El redentor furioso”, título del quinto y último capítulo de Populismo en
América Latina, sintetizó el contenido de toda la serie documental. Donde se
vinculó tendenciosamente a López Obrador con presidentes izquierdistas del
subcontinente como Fidel Castro. El capítulo se orientó a desprestigiar la
carrera política de AMLO, por haberla iniciado en las filas del Partido
22

Revolucionario Institucional. Omitiendo la ruptura del propio Obrador y los


demás integrantes de la Corriente Democrática con el PRI. En el documental
se llegó a cuestionar sí en realidad AMLO tenía una posición de izquierda o
seguía sosteniendo la añeja doctrina priísta. Graco Ramírez, el cuestionado ex
gobernador del estado de Morelos por el PRD. Declaró ante las cámaras, que a
Obrador “le fue muy difícil dejar al PRI. Estoy convencido que nunca lo ha
dejado”.
El plantón instalado en 2006, para demandar el recuento de votos casilla por
casilla tras los cuestionados comicios presidenciales. Fue descalificado en el
documental como una “reacción típicamente populista al no reconocer la
legitimidad de un organismo que no le concede la razón, en este caso, el
Instituto Federal electoral” (Infobae, 2019). En ese último capítulo también se
le reclamó haber dividido a la izquierda mexicana, para crear un partido sujeto
a su liderazgo como MORENA. Omitiendo el giro a la derecha de la corriente
hegemónica del Partido de la Revolución Democrática, que se completaría con
la firma de un Pacto por México con el PRI y el PAN que abriría el paso a la
aprobación de las llamadas reformas neoliberales. La compleja campaña para
desvirtuar la verdad desplegada durante las elecciones presidenciales de 2018,
no dio los resultados esperados. Pues hasta Antonio Solá, el creador de la frase
“Peligro para México”. Admitió que ya no era vigente, porque “López
Obrador ha evolucionado mucho en los últimos años” (Vanguardia.Mx, 2018).
Estilo de dirección
AMLO manifestó en Tabasco, desde su arranque en la participación política,
su vocación por la defensa de indígenas y marginados, su lucha contra la
corrupción del Estado y su compromiso con la democracia. Si bien militó en el
PRI lo hizo cobijado por el nacionalismo revolucionario de las filas
cardenistas. A quienes acompañó en la ruptura con el priísmo y en la creación
del entonces progresista Partido de la Revolución Democrática. Aunque ya
había encabezado movilizaciones de protesta en Tabasco contra la corrupción
y el desaseo electoral. Fue hasta 2006 cuando la campaña de difamación
instrumentada por Acción Nacional y el fraude electoral, lo condujeron a la
radicalización política. La iniciativa de instalar un plantón a lo largo del Paseo
de la Reforma para solicitar un conteo de votos. Fue bien recibido al principio,
sin embargo tras cuarenta y siete días de caos vial se generó gran descontento
ciudadano. Resultó tan difícil superar el desprestigio de inducido de la imagen
del morenista, que sus efectos persistieron hasta la campaña presidencial de
2012. López Obrador describe la situación con sus propias palabras. “Nos
costó mucho trabajo remontarlo… fueron años muy difíciles después de 2006,
de mucho rechazo porque nos bombardearon, nos satanizaron y aguantamos
(Nación321, 2018).
23

La sistemática difamación en los medios de comunicación de la imagen de


AMLO tuvo efectos profundos en ciertos ciudadanos. Aunque López Obrador
ganó la elección a la presidencia mexicana con 30 millones de votos, un
53.17% de los sufragios emitidos. Y la oposición al tabasqueño quedó tan
debilitada, que en un mitin contra Obrador convocado por diversas
organizaciones de la derecha, sólo pudo reunir unas mil quinientas personas en
septiembre de 2029 (Román, 2019). Todavía en 2019, una piloto de la
aerolínea Interjet difundió por redes sociales un mensaje cargado de odio.
Sugiriendo: “dejar caer una bomba en el Zócalo durante el desfile del 16 de
septiembre” (Galván, 2019: 6). Ello desató una oleada de mensajes por
Twitter rechazando lo expresado por la piloto Ximena García; pero también se
develó una pequeña corriente de opinión favorable a acciones violentas contra
Obrador y sus seguidores. Un lector preocupado por el escándalo de Interjet
comentó: “el daño que a la sociedad mexicana han infligido e infligen las
campañas negras desde 2006, es un hecho consumado tan grave que ha
dividido, quizá irremediablemente, por lo menos una generación de
mexicanos, inoculando con cantidades exorbitantes de recursos y por todos los
medios imaginables, un odio irracional contra AMLO” (Ramírez, 2019: 40).
Obrador reconoció el daño a su imagen, cuando le preguntaron si una guerra
de mentiras similar a la del 2006, volviera a repetirse en 2012. Pero aprendió
la lección, aunque los golpes mediáticos fueron contundentes. Comprendió
que la mejor forma de alcanzar sus objetivos para proteger a los desposeídos,
no era la radicalización. Sino la inclusión de todos, la búsqueda de consensos.
Su narrativa dejo de buscar la confrontación como en el pasado. El ritmo de su
conversación se hizo lento, para poder reflexionar y corregir cualquier erro.
Ahora reconoce el derecho que todos tienen a expresar opiniones diferentes a
la suya, aunque siempre busca elementos de consenso por limitados que sean.
El propio Enrique Krauze, tan crítico con el populismo reconoció en 2012.
Que algo había cambiado en el estilo personal del López Obrador. “El tono y
la actitud se han suavizado, el mensaje se ha vuelto conciliatorio y -en sus
propias palabras- amoroso. Se ha atenuado la belicosa prédica contra el ‘no-
pueblo”, pero muchos perplejos ciudadanos, legítimamente se preguntan: ¿Le
ha ocurrido una conversión religiosa? ¿Se trata de una táctica electoral? ¿O el
cambio obedece a un proyecto política ya alejado del populismo? (Krauze,
2012). Krauze deconstruye en la mansedumbre narrativa de Obrador, una
conversión tolstoyiana. Por su renuncia a la confrontación y el giro de 360
grados desde la flamígera indignación a la persuasión amorosa. Todo ello con
la intención de atraer votos de las capas medias.
Descifrar el pensamiento de Obrador no es sencillo. Según Basave es portador
de un amasijo doctrinario: “abomina de las privatizaciones y reivindica al
24

Estado, pero al mismo tiempo repudia la prolijidad burocrática que caracteriza


al aparto estatal… Y es que practica… la equiparación de burocracia
corrupción y la renuncia al endeudamiento, el presupuesto deficitario y, sobre
todo, el aumento de los impuestos” (Basave, 2019). Merino, quien conoció a
Obrador durante al principio de su carrera política, desmiente a quienes lo
acusan de fingir. Les “digo que no: cada cosa que dice es porque de verdad lo
cree. Eso puede que no produzca acuerdo, pero produce confianza. La gente le
cree” (Delgado, 2019b).
José Manuel Rivas-Otero publicó en 2019, los resultados de un estudio
comparativo entre el estilo de adecuación política seguido por López Obrador
tras la campaña difamatoria de 2006, y el pragmatismo en las decisiones
tomadas por Pablo Iglesias de PODEMOS y Albert Rivera de CIUDADANOS
en la vida política española. Rivas-Otero concluye que en los tres casos
analizados “el estilo de liderazgo y los atributos que lo conforman responden a
un comportamiento estratégico que cambia en función del contexto” (Rivas-
Otero, 2019: 245). Cuando alguno de estos tres líderes resiente la presión de
los medios de comunicación por acciones irregulares o falta de experiencia,
rebajan su tono discursivo y se muestran como gestores. Cuando acceden a
esferas de poder institucional, su narrativa se flexibiliza para alcanzar
consensos. Y cuando descienden sus preferencias electorales, hacen a un lado
la autoconfianza y renuevan el discurso hacia sus seguidores.
En conclusión, la campaña de difamación lanzada contra López Obrador en
2006 no sólo daño su imagen, además lo llevó a cambiar de estrategia. Su
narrativa como candidato fue readecuada, atrás quedaron los llamados a la
movilización radical. Para abrir paso a un discurso conciliador e incluyente
que se sintetiza en la frase: “Por el bien de todos, primero los pobres,”. Que
ajusta su compromiso con los desposeídos, con la responsabilidad de un
presidente que debe atender a todos los ciudadanos, incluso a los
privilegiados. Queda en el aire la pregunta, qué tanto lo podrá llevar a la
práctica, en un mundo donde predomina el egoísmo individual sobre el bien
común.

Referencias:

Ahemed, Azam y Paulina Villegas (2018) López Obrador gana la presidencia


de México con una victoria aplastante. The New York Times ES, 2 de julio.
https://www.nytimes.com/es/2018/07/02/eleccion-2018-amlo-lopez-obrador/
6 de septiembre de 2019
Balboa, Juan (2005) El desafuero, doce meses que marcaron la cronología del
caos. La Jornada, 5 de mayo.
25

http://www.jornada.com.mx/2005/05/05/Index.php?
section=politica&article=006n1pol
Consultado el 22 de agosto de 2019.

Basave, Agustín (2019) Descifrando a AMLO, el liberal. Proceso, núm. 2210,


10 de marzo. Pp. 12-13.

Bedolla Santos, José Trinidad (2016) El ciclo de vida del Producto Político.
Estudio de Caso Andrés Manuel López Obrador como candidato a la
presidencia de México”. En Espacios Públicos, vol. 10, núm 45, enero-abril,
2016, pp. 163-181)

Benton, Allyson Lucinda (2006) ¿Quién está preocupado por López Obrador?
Las respuestas del mercado a las tendencias electorales durante la campaña
presidencial mexicana del 2006. En Colombia Internacional, núm. 64, julio-
diciembre, pp. 68-95.

Bolivar, Rosendo (2014) El Partido de la Revolución Democrática en crisis,


entre la dirigencia de la corriente de Nueva Izquierda y la salida de Andrés
Manuel López Obrador. En Estudios Políticos, vol. 9, núm. 33, septiembre-
noviembre, pp. 27-50.

Cansino, Cesar (2012) Populismo en México: Recuento de daños. Letras


libres, 7 de abril.
https://www.letraslibres.com/mexico/populismo-en-mexico-recuento-de-daños

Camarena, Salvador (2012) López Obrador se niega a reconocer de inmediato


el triunfo del PRI. El País Internacional, 2 de julio.
https://elpais.com/internacional/2012/07/02/actualidad/
1341209022_384580.html
6 de septiembre de 2019.

Cantú, Jesús (2012) “Jaque a AMLO”. En Proceso, México, número 1872, 16


septiembre, pp. 64-65.

Castañeda, Jorge G. (2018) Para AMLO y México hay problemas en el


horizonte. New York Times ES, 1 de diciembre.
https//www.nytimes.com/es/2018/12/02/jorge-castaneda-amlo/
26

Delgado, Álvaro (2019) Rasgos de autoritarismo. Proceso, núm. 2210, 10 de


marzo. Pp. 10-11.

Delgado, Álvaro (2019b) “El poder cambia a la gente”. Proceso, núm. 2210,
10 de marzo. Pp. 14-17.

Galván, Enrique (2019) Dinero, La Jornada, 19 de septiembre, p. 16

Gándara, Gabriela (2018) Diagnóstico y pronóstico: el gobierno que viene.


Este País, número 331, noviembre. Pp. 6-13)

García, Moisés Sinuhé (2007) La construcción de un liderazgo: esbozo


biográfico de Andrés Manuel López Obrador. El Cotidiano, vol. 21, núm. 141,
enero, pp. XXI-XXX

González, Claudio X (2019) Motivos de preocupación. Proceso, núm. 2210,


10 de marzo. Pp. 28.

Hernández, Julio (2019) Astillero. La Jornada, 19 de septiembre, p. 8.

Krauze, Enrique (2012) Populismo en México, Letras libres, 16 de abril.


https://www.letraslibres.com/mexico-espana/populismo-en-mexico
31 agosto 2019.

La Redacción (2006) Dick, el Sucio. Proceso, 10 de septiembre.


http://www.proceso.com.mx/94771/dick-el-sucio
Consultado el 20 de agosto de 2019.

Márquez Cabrera, María Rosa (2006) ¿Por qué Andrés Manuel López
Obrador? En Bajo el Volcán, vol. 6, núm. 10, pp. 91-96.

Martínez, Fabiola (2019) Confirma el TEPJF campaña negra contra AMLO.


La Jornada, 15 de agosto, p. 8.

Paredes, Alfredo (2016) “Estilos de liderazgo político I y II”, en


www.forbes.com-mx/estilos-de-liderazgo-politico Consultado el 23 de
noviembre.

Prados, Luis (2012) López Obrador pide a los mexicanos pruebas del fraude
del PRI. El País Internacional, 21 de julio.
27

https://elpais.com/internacional/2012/07/20/actualidad/
1342811309_897934.html
6 de septiembre de 2019.

Ramírez, Armando (2019) Advierte el daño de las campañas negras. La


Jornada, El Correo Ilustrado. 19 de septiembre, pp. 2 y 40.

Redacción (2018) ¿De dónde salió que AMLO era un “peligro para México”?.
Nación 321, 12 de febrero.
https://www.nación321.com/elecciones/de-donde-salio-que-amlo-era-un-
peligro-para-mexico
Consultado el 30 de agosto de 2019.

Redacción (2019) Promete INE “investigación completa y exhaustiva” en


torno a la serie “Populismo en América Latina”. Aristegui noticias, marzo 14.
https://aristeguinoticias.com/1403/mexico/se-requiere-coordinacion-de-
autoridades-para-juntar-hallazo-en-torno-a-la-serie-populismo-en-america-
latina-san-martin/

Redacción (2019) Serie “Populismo en América Latina” sí fue campaña negra,


se sancionará a realizadores. Tribunal Electoral. Aristegui noticias, 15 de
agosto.
https://aristeguinoticias.com/1508/mexico/serie-populismo-en-america-latina-
si-fue-campaña-negra-se-sancionara-a-realizadores-tribunal-electoral
Consultado el 30 de agosto de 2019.

Redacción (2019) Tribunales deben determinar si campaña negra contra


AMLO configura algún delito: Cossio, Aristegui noticias, marzo 19.
https://aristeguinoticias.com/1903/mexico/campana-contra-amlo-seria-delito-
solo-si-hubo-recursos-ilicitos-ya-hay-un-proceso-por-medios-judiciales-
cossio/
31 agosto 2019

Redacción (2019) Campaña de desprestigio contra AMLO podría demostrar


uso de dinero privado en campañas políticas: #MesaPolítica. Aristegui
noticias, marzo 18.

Rivas-Otero, José Manuel (2019) Evolución del estilo de liderazgo de los


nuevos partidos políticos en México y España. Andrés Manuel López
28

Obrador, Pablo Iglesias y Albert Rivera (2014-2016). En Revista Mexicana de


Ciencias Políticas y Sociales, vol. LXIV, núm. 235, pp. 221-253.

Rodríguez, Gabriela (2006) Discurso público en la televisión mexicana. El


caso interesado del desafuero de Andrés Manuel López Obrador. En Espacios
Públicos, vol. 9, núm. 17, febrero, pp. 141-150.

Román, José Antonio (2019) Marchan del Ángel contra el gobierno de López
Obrador. La Jornada, 1 de septiembre de 2019.
https://www.jornada.com.mx/ultimas/politica/2019/09/01/sale-del-angel-marcha-contra-el-
gobierno-de-lopez-obrador-7990.html
23 septiembre 2019

Rubio, Luis (2005) Recuerdos encontrados del populismo. Publicaciones, 22


de mayo.
http://luisrubio.mx/wp/?p=1542

Rudy Hiller, Fernando (2011) En busca del voto del miedo: la construcción
mediática de López Obrador como un peligro para México, durante la
campaña presidencial de 2006. En Foro Internacional, vol. LI, núm. 4,
octubre-diciembre, pp. 715-748.

Serur, José (2018) El origen. Una historia del segundo piso del Periferico. El
Semanario, 6 de abril.
https://elsemanario.com/colaboradores/jose-serur/257687/origen-una-
historia-del-segundo-piso-del-periferico/
9 septiembre 2019.

Ugalde, Luis Carlos (2019) Austeridad y combate a la corrupción en la 4T.


Este País, número 339, julio. Pp. 7-14.

Vanguardia Milenio (2018) ‘Refritea’ Meade estrategia del miedo contra


AMLO usada por Calderón, Milenio, 9 de abril.
http://vanguardia.com.ms/articulo/refrutea-meade-estrategia-del-miedo-
contra-amlo-por-calderon
Consultada el 21 de agosto de 2018.

Villamil, Jenaro (2018) El desafuero de AMLO y el #Anayagate. Proceso, 6


de marzo, www.homozapping.com.mx
29

Zepeda, Aurora (2018) INE termina resultados finales de conteo contra


presidente. Excelsior, 5 de julio, https://www.excelsior.com.mx/nacional/ine-termina-
resultados-finales-de-conteo-para-presidente/1250540

Zuckermann, Leo (2012) El populismo de López Obrador. Excelsior, 24 de


enero.
https://www.excelsior.com.mx/opinion/2012/01/24/leo-zuckermann/
804647
2 septiembre 2019.

XXXXXXXXXXx
Dos puntos… la erradicación de la corrupción, mediante un conjunto de
medidas para la organización de la administración pública, y la disminución
de la desigualdad social, a través de una serie de programas sociales.
(Gándara, 2018: 6)

No se puede negar la desigualdad en el país, la existencia de un alto porcentaje


de la población que vive en extrema pobreza, la concentración extrema de la
riqueza, los gastos superfluos y desperdicios por parte de los diferentes niveles
de gobierno, la presencia de la corrupción y una larga lista de agravios que
asolan al país. (Gándara, 2018: 7)

Sin embargo, hay otras medidas que son absurdas. Que se reduzca 70% la
estructura del personal de confianza significa un alto riesgo, afirma Elizondo,
porque “los que tienen experiencia en el sector público saben que los
empleados de confianza son los que soportan la actividad de la administración
pública, no sólo porque la mayoría de los sindicalizados están en los niveles
medios y bajos, sin también porque la propia estructura sindical complica que
respondan a las solicitudes del trabaj de forma óptima”. (Gándara, 2018: 7-8)

…la reducción de 50% al salario de altos funcionarios no es fuente


significativa de ahorro y si una pérdida importante de capital humano, sobre
todo en algunas dependencias que requieren de gente especialista y de
experiencia en el ámbito que manejan. (Gándara, 2018: 8)

De acuerdo al Programa de Austeridad Republicana… hay margen para


ahorrar alrededor de 500 mil millones de pesos, mediante la eficiencia en su
asignación y la eliminación de la corrupción… Los programas sociales y
algunos de los proyectos de inversión pública que se han propuesto requieren
un financiamiento equivalente a entre 1.8 y 2% del PIB. (Gándara, 2018: 9)
30

En lo relacionado con el ahorro en salarios directos e indirectos (eliminación


de plazas, disminución de salarios y cancelación de seguros médicos) se
obtendría un ahorro de 68 mil millones de pesos. Sí, adicional a esto, se
considera el buen manejo de las compras de bienes y adquisiciones de
servicios, el ahorro podría alcanzar los 130 mil millones de pesos. (Gándara,
2018: 9)

El equipo de transición estima que la disminución del salario de los


trabajadores de alto nivel -cuyos ingresos anuales superen el millón de pesos-
significará un ahorro de 56 mil millones de pesos, mientras que los analistas
calculan que sólo será de cinco mil millones de pesos, debido a que la
cantidad de trabajadores que se encuentra en esta situación no es la que
supone el equipo de López Obrador. De acuerdo con el censo nacional sobre
empleados públicos (INE, 2018), en 2017 había 12 mil trabajadores en tal
situación, aproximadamente 0.8% del total. El ahorro que se podría obtener
por este concepto está muy lejos de lo calculado… (Gándara, 2018: 9)

…los dos programas sociales prioritarios (adultos mayores y jóvenes


Construyendo el Futuro) tendrán un costo aproximado de 130 mil millones de
pesos, que no se cubren con el ahorro por concepto de salarios y buen manejo
de compras públicas. Incluso representan 63% del total del ahorro del gasto
del sector público, considerando también la reorientación de recursos, la
diminución de fideicomisos y otros rubros, de alguna manera, tendrían que
ser suficientes para hacer frente a las propuestas de inversión pública en
infraestructura. (Gándara, 2018: 12)

…salvo que estos proyectos (NAICM, Tren Maya, etc.) se concesionen por
completo a la iniciativa privada, no son realizables con el presupuesto
disponible, ni siquiera, una vez más considerando los ahorros. Según el Plan
Maya, no había recursos públicos comprometidos para llevarlo a cabo y se
financiará con el impuesto al turismo estatal, sobre todo en Quintana Roo.
(Gándara, 2018: 12)

Las propuestas de López Obrador tienen similitudes con algunas


implementadas en otros países de América Latina, con gobiernos que han
fracasado en dos sentidos: la estabilidad macroeconómica y el diseño de los
programas públicos. Para Carlos Elizondo Mayer-Serra, esos gobiernos de
izquierda han mostrado incapacidad para mantener la estabilidad
macroeconómica y financiera que conlleva problemas de inflación y recesión
31

como los que vivió México en los años ochenta o, más tarde, Brasil (a partir
del 2000 y hasta hoy) o incluso los que está viviendo Venezuela. El segundo
gran reto sería, entonces, el diseño mismo de los programas. (Gándara, 2018:
12)

…en mayo de 2019, el presidente emitió un memorándum dirigido a la SFP y


a la SHCP para aplicar nuevas medidas de austeridad. Se estipuló ahí que se
reduciría 30% el monto para materiales, combustibles, viáticos y pasajes
aéreos nacionales, así como para estudios e investigaciones. También una
reducción del 50% en viáticos y pasajes aéreos internacionales, exposiciones,
alimentación, asesorías para operación de programas, sucontratación de
servicios con terceros y congresos, entre otros. En materia de comunicación
social se reducirían 30% los servicios de monitoreo, difusión de mensajes y
actividades gubernamentales y de mensajes comerciales para promover la
venta de productos o servicios. Estos se traduce en un ahorro de poco más de 6
mil 583 millones de pesos, 0-14% del presupuesto total aprobado en 2019.
(Ugalde, 2019: 11)

López Obrador… rasura parejo… no puedes mejorar la calidad en la provisión


de servicios públicos ni la planeación para el desarrollo si reduces la
burocracia planificadora al extremo de dejarla en sus huesos. No hay forma de
que tus programas sociales sean localizados o que incrementes tu producción
petrolera o que revitalices el desarrollo del sureste, sin la fuerza y pericia
humana para hacerlo con eficacia y eficiencia, esa maldita palabra neoliberal
que se ve con sospecha pero que es esencial si quieres que el dinero alcance
para más. (Ugalde, 2019: 12)

Asemeja una operación a machete abierto, derribar estructuras, correr gente y


bajar salarios sin diferenciar entre lujo y necesidades… Otro ejemplo, durante
la crisis de incendios forestales en mayo de 2019, que provocó contingencias
ambientales en la Ciudad de Mëxico, los senadores de oposición reclamaron la
reducción del presupuesto que sufrió la Comisión Nacional Forestal en $1,229
millones de pesos (30.8%) y que redujo la capacidad para responder a los
siniestros. (Ugalde, 2019: 13)

Cuando la austeridad se vuelve un instrumento de política pública para


redireccionar el gasto, la cualidad se vuelve un defecto, porque la austeridad
draconiana de la 4T amputa piernas y destruye capital humano para generar
ahorros marginales destinados al gasto corriente. (Ugalde, 2019: 14)
32

…Woldemberg afirma que López Obrador “desprecia y mucho, a las


instituciones del Estado y a sus funcionarios, desprecia a los órganos
autónomos y desprecia a las organizaciones de la sociedad civil. Y esto no
presagia nada bueno”. (Delgado, 2019: 10)

…decisiones autoritarias, como las consultas. Las organizadas para cancelar el


nuevo aeropuerto y sobre la termoeléctrica de Huexca, reprueba, no son
constitucionales, ni siquiera encuestas con muestras representativas. “Son más
bien caprichos donde el poder se ve en el espejo y el espejo le dice que al
poder lo que éste quiere oír… (Delgado, 2019: 10)

El presidente Andrés Manuel López Obrador se considera un liberal. Aunque


muchos lo ven como populista o como nacionalista revolucionario, él se
identifica con el liberalismo…AMLO posee los ideales del socialismo
utópico, el binarismo marxista, el instinto populista, el atavismo del
nacionalismo revolucionario y sí, también el influjo liberal, pero de un corte
distinto al que él concibe… AMLO alberga, a no dudarlo, un amasijo
doctrinario. Cohabitan en él, vgr., una fascinante mezcla de estatismo y
neoliberalismo económico, abomina las privatizaciones y reivindica el Estado,
pero al mismo tiempo repudia la prolijidad burocrática que caracteriza al
aparato estatal, una paradoj que yo aplaudo y por cuya conciliación hago
votos. Y es que práctica, tal vez inconscientemente, ciertos usos y costumbres
neoliberales: la simplicidad de los esquemas redistributivos -tipo negativa
income de Friedman-, la equiparación de burocracia y corrupción y la
renuencia al endeudamiento, al presupuesto deficitario y, sobre todo, al
aumento de los impuestos. (Basave, 2019: 12-13)

Andrés Manuel López Obrador vivía en una choza en la zona indígena de


Nacujaca hace 38 años, cuando Mauricio Merino lo conoció en Tabasco.
(Delgado, 2019b: 14)

Y esta concentración de poder que ya tiene López Obrador, anticipa Merino,


se incrementará en la medida en que se consoliden sus programas sociales
basados en la entrega directa de recursos a los beneficiarios. . (Delgado,
2019b: 14)

Fue precisamente éste (Enrique González Pedrero) quien lo mando buscar a


López Obrador para incorporarlo a su campaña, hacia 1981. “Vivía en una
casita y lo acompañé un par de veces a recorrer los camellones chontales, que
33

él creo para que se pudiera sembrar. Conocía a toda la gente. . (Delgado,


2019b: 15)

Merino advierte sobre el estilo de López Obrador: “Andrés Manuel cree lo que
dice y dice lo que cree, las dos cosas son ciertas. Cuando a mi me dicen que
finge, digo que no: cada cosa que dice es porque de verdad lo cree. Eso puede
que no produzca acuerdo, pero produce confianza. La gente le cree. .
(Delgado, 2019b: 16)

Esta medida de repartir dinero es neoliberal. Espero que corrija. . (Delgado,


2019b: 16)

Incompetencia. El presidente nombra a incondicionales, no a profesionales.


Por ello, los errores se multiplican: la cancelación del NAIM, el desabasto de
combustible… la cancelación de las estancias infantiles… La ineptitud no será
un fenómeno pasajero; la aversión del gobierno por la técnica, la experiencia y
la evidencia lo garantiza. Si se me permite permanecerán costosas ocurrencias
como Santa Lucía, el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas. (González,
2019: 28)

Xxxxxxxxxxxxxxxxxxxx

Semblanza biográfica
Nace 1953 en Macuspana
Nació en Macuspana, Tabasco en 1953, es Licenciado en Ciencia Política y
Administración Pública por la Universidad Nacional Autónoma de México
(UNAM) (Bedolla, 2016: 171)

Estudia Ciencia Política en la UNAM, años sesenta


…a mediados de los años sesenta viajó a la Ciudad de México e ingresó en la
Universidad Nacional Autónoma de México en donde recibió el titulo de
licenciado en Ciencia Política y Administración Pública.
(García, 2007: XXII)

Apoyo a Pellicer en 1976


…inició su vida política en 1976 cuando apoya la candidatura del poeta
tabasqueño Carlos Pellicer para Senador.
(Bedolla, 2016: 171)
34

En 1976 regresó a Tabasco, como uno de tantos políticos de la izquierda,


comenzó en el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Se inició apoyando
la candidatura de Carlos Pellicer (+1997) para senador (García, 2007: XXII)

Dirige al INI en 1977


…en 1977 López Obrador asumió la dirección del Instituto Indigenista de
Tabasco. Durante su estancia en el Instituto trabajó, al igual que su maestro, a
favor de los indígenas de la Chontalpa. Sus proyectos más sobresalientes
fueron la edición de libros en lengua indígena y el establecimiento de los
camellones chontales (chinampas)… José Eduardo Beltrán Hernández…
introdujo a Andrés Manuel en la casa de Enrique González Pedrero y Julieta
Campos…
(García, 2007: XXII y XXIII)

De 1978 a 1982 delegado de COPLAMAR


Entre 1978 y 1982 fungió como delegado de la Coordinación General del Plan
Nacional de Zonas Deprimidas y Grupos Marginados de la Presidencia de la
República (COPLAMAR). Ahí afianzó su experiencia con grupos marginados.
Una de sus principales aportaciones… fue el “crédito a la palabra”, que
permitió que el Instituto Indigenista recibiera del Gobierno Federal relevantes
recursos económicos. (García, 2007: XXII a XXIII)

González Pedrero candidato gobernador Tabasco


Después de esa reunión en 1982…. González Pedrero asumió la candidatura
para gubernatura de Tabasco. (García, 2007: XXII y XXIII)

Presidente del PRI en Tabasco 1983


En 1983 AMLO asumió la presidencia del Revolucionario Institucional en
Tabasco. Renovó los comités seccionales y los capacitó para vigiar el trabajo
de las autoridades municipales… Los agraviados se quejaron con González
Pedrero de que Andrés Manuel se comportaba con ellos como contralor y les
fiscalizaba el cumplimiento de sus promesas de campaña… Concibe a la
participación ciudadana a partir de pequeños grupos vecinales, de una manera
recuerda a las estructuras de la izquierda revolucionaria. (García, 2007: XXIII)

Dirige Instituto del Consumidor 1984


Andrés Manuel regresó a la Ciudad de México en 1984, donde asumió la
Dirección de Promoción Social del Instituto Nacional del Consumidor,
dirigido entonces por Clara Jusidman. Durante el gobierno de Cárdenas en el
DF sería nombrada Secretaría de Desarrollo Social. (García, 2007: XXIII)
35

Se una a la Corriente Democrática 1984


En 1984 López Obrador se unió a la Corriente Democrática encabezada por
Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo, ambos disidentes del Partido
Revolucionario Institucional… En agosto de ese mismo año, se le nombró
candidato para la gubernatura de Tabasco por el Frente Democrático
Nacional… A raíz de la derrota publicó: Tabasco, víctima de un fraude. Este
libro anunció la batalla campal que tiene contra el PRI. (García, 2007: XXIII)

Se une a Cuauhtémoc en 1988


En 1988 se une a la corriente izquierdista junto a Cuauhtémoc Cárdenas y en
agosto de ese año es postulado como candidato a gobernador de Tabasco.
También en 1994 fue candidato, sin lograr la gubernatura.
(Bedolla, 2016: 171)

Éxodo por la democracia 1991


Su primera marcha a la capital se hizo en protesta por el supuesto fraude
llevado a cabo en las elecciones municipales de Tabasco, durante el año de
1991, específicamente en el municipio de Cárdenas. El 20 de noviembre de
ese año, encabezó “el éxodo por la democracia”. Salió de Villahermosa con
ciento cincuenta personas y llegó al DF el 11 de enero de 1992 con cinco mil.
Otras veinte mil ya lo esperaban en el Zocalo. Manuel Camacho Solís era
regente del Distrito Federal y Marcelo Ebrard colaboraba con él. (García,
2007: XXIV)

En 1994 perdió la gubernatura de Tabasco con Roberto Madrazo Pintado…


Las impugnaciones presentadas por López Obrador quedaron registradas… en
su libro: Entre la historia y la esperanza… Un informe de los consejeros
ciudadanos Santiago Creel Miranda y José Agustín Ortiz Pinchetti confirmó
irregularidades en el 78% de las casillas que analizaron. (García, 2007: XXIV)

Caravana por la democracia abril de 1995


El 22 de abril de 1995 emprendió la “caravana por la democracia”. Unos días
antes Ernesto Zedillo había respaldado públicamente a Madrazo (García,
2007: XXIV)

Toma pozos petroleros 1996


La política radical de AMLO llegó a su clímax el 7 de febrero de 1996.
Encabezó una movilización de agrupaciones indígenas organizadas en la
36

Chontalpa para tomar más de cincuenta pozos petroleros en protesta por el


desvió de recursos. (García, 2007: XXIV)

Presidente del PRD 1996


En el año de 1996, Andrés Manuel López Obrador asumió el cargo de
Presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del Partido de la Revolución
Democrática. Permaneció en este puesto hasta marzo de 1999. (García, 2007:
XXIV)

Precandidato Jefe Gobierno DF 1996


Del 20 de octubre al 14 de noviembre de 1999, Andrés Manuel fue
precandidato a Jefe de Gobierno del Distrito Federal. El 15 de noviembre de
ese año asumió la candidatura del PRD… Andrés Manuel López Obrador
compitió con el poco carismático y ex secretario de Gobernación Santiago
Creel Miranda y con Jesús Silva Herzog. El 2 de julio del año 2000 López
Obrador se convirtió en el nuevo Jefe de Gobierno del Distrito Federal
(García, 2007: XXV)

Presidente del PRD (1996-1999)


Fue presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) de
1996 a 1999, logrando un auge para su partido político, ganando la primera
elección para jefe de Gobierno del Distrito Federal y la gubernatura de
Zacatecas, además ganar 125 curules en la Cámara de Diputados… En 2000
es electo con 37.5% como jefe de Gobierno del Distrito Federal… (Bedolla,
2016: 171)

2005 candidato presidencial


Rumbo al proceso electoral del 2006 para elegir presidente de la República.
Felipe Calderón rindió protesta como candidato presidencial del PAN el
domingo 4 de diciembre de 2005, el viernes 9 de diciembre lo hizo Roberto
Madrazo y el domingo 11 tomo protesta Andrés Manuel López Obrador.
(García, 2007: XXVII)

Obrador vs Calderón
Los dos principales contendientes, Felipe Calderón Hinojosa del partido de
derecha, el Partido Acción Nacional), y Andrés Manuel López Obrador del
partido de izquierda… mantuvieron visiones confrontadas respecto a la
política económica y la mejor manera de alcanzar el desarrollo económico a
largo plazo… López Obrador cuestionó la utilidad del libre mercado y de la
37

políticas económicas neoliberales en la generación de desarrollo económico.


(Benton, 2006: 70)

Desconoce a Calderón 2006


El martes 5 de septiembre de 2006 se declaró presidente electo al candidato
panista Felipe Calderón Hinojosa… El resultado fue desconocido por López
Obrador. (García, 2007: XXIX)

Presidente legitimo
Como se había anunciado se efectuó la Convención (Nacional Democrática) y
como se tenía previsto fue declarado por unanimidad Andrés Manuel López
Obrador presidente legítimo de México… acordaron que tomara posesión el
20 de noviembre y se reiteró el desconocimiento de parte de la Convención
para Felipe Calderón Hinojosa. (García, 2007: XXX)

Presidente legitimo
Convención Nacional Democrática (CND), que dio pasó al “gobierno
legitimo”, del cual él fue el dirigente, ostentado el cargo de “Presidente
legitimo” que tomó posesión el 20 de noviembre de 2006 en el Zócalo
capitalino, desconociendo a Felipe Calderón y denominándolo como
“Presidente espureo” (Bedolla, 2016: 175)

Empate Obrador-Calderón
A unas semanas de llevarse a cabo la jornada electoral las preferencias
ciudadanas le daban un empate técnico a Andrés Manuel López Obrador, de la
Coalición por el Bien de Todos, y Felipe Calderón Hinojosa, del Partido
Acción Nacional, con el 34% del sufragio. (García, 2007: XXVII-XXVIII)

Otorgan triunfo a Calderón por un 0.58%


…el 6 de julio Luis Carlos Ugarte Ramírez anunció que el candidato que
había obtenido más sufragios en la elección presidencial era Felipe Calderón,
con 15 millones 284 sufragios, contra 14 millones 756 mil 350 votos de López
Obrador. Su ventaja, de apenas el 0.58%, es decir 243 ml 934 votos, es la más
pequeña que haya obtenido cualquier candidato presidencial ganador. (García,
2007: XXVIII)

Consejo Coordinador Empresarial en campaña contra Obrador


A un mes de finalizar la campaña electoral para la presidencia de la república
se llevó a cabo el segundo debate, llevando la campaña sucia hasta esta
instancia, logrando un viraje a favor del candidato de izquierda y provocando
38

que las encuestas se cerraran de cara la proceso electoral. Ante esto el Consejo
Coordinador Empresarial lanzó una campaña en contra del ex jefe de gobierno
capitalino (Bedolla, 2016: 174)

Nueva Izquierda se aleja de Obrador 2006


Hasta 2006, las directrices propuestas por López Obrador fueron bien
aceptadas en la mayoría de las corrientes del PRD, con la excepción de NI, la
que mostró grandes diferencias con él… Esto se hizo evidente tanto en la
lucha poselectoral de 2006, como en lo relativo a la reforma energética de
2008. (Bolivar, 2014: 29)

MORENA 2009
En 2009, AMLO comenzó con el fortalecimiento de sus estrategias de cara a
las elecciones del 2012, en donde comenzó con la formación de comités
locales de lo que llamó el Movimiento de Regeneración Nacional
(MORENA), presente en los dos mil 456 municipios del territorio nacional y
que a la postre terminó constituido como partido político. (Bedolla, 2016: 175)

Desafuero 2005
Obrador inocente desafuero
La estrategia del alcalde de apelar a su inocencia y a la injusticia que se estaba
cometiendo en su contra resultó ser un mérito comunicacional, pues el absurdo
jurídico-técnico del desafuero y la desproporción entre la ilicitud de la
conducta y la sanción que se pretendía aplicar lograron permear en el estado
de ánimo de la opinión pública. (Rodríguez, 2006: 148)

Desafuero retirado por temor a inestabilidad


…todo esto condujo a que se previera o vislumbrara una crisis que pondría en
juego la estabilidad nacional, lo que hizo que las autoridades implicadas en el
desafuero dieran marcha atrás al procedimiento y lo declararan improcedente.
(Rodríguez, 2006: 149)

Desisten del desafuero


Doce meses exactos transcurrieron desde que la Procuraduría General de la
República (PGR) que encabezaba Rafael Macedo de la Concha, solicitó el
desafuero en contra del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel
López Obrador, y el nuevo procurador, Daniel Francisco Cabeza de Vaca
Hernández, determinó no ejercitar acción penal contra el gobernante
capitalino. (Balboa, 2005)
39

Proceso de desafuero
El 6 de abril el diario estadounidense Washington Post expresó que la
maniobra política en México podría minar y marcar un retroceso en la
evolución de la democracia mexicana. Por otra parte, el periódico The New
York Times señaló que la campaña presidencial para 2006 había tomado el aire
de los viejos malos tiempos. Críticas coincidentes se publicaron en varios
rotativos de Europa… El 7 de abril la mayoría de la Cámara de Diputados
aprobó el desafuero del jefe de Gobierno del Distrito Federal y permitir que el
Ministerio Público Federal solicitara a un juez el inicio de un proceso penal…
Por la mañana se concentraron en el Zócalo capitalino decenas de miles de
mexicanos para repudiar el desafuero.
En ese contexto, el 15 de abril Andrés Manuel López Obrador decidió recorrer
el país para realizar asambleas en plazas públicas e informar a México “sobre
el atropello a las libertades ciudadanas”… El 24 de abril se efectuó la marcha
del silencio, convocada por el jefe de Gobierno del Distrito Federal, concentró
a alrededor de un millón 200 mil personas en su apoyo… Como corolario, el
27 de abril el presidente Vicente Fox anunció la renuncia del procurador
general de la República, general Macedo de la Concha, uno de los principales
ejecutores del proceso judicial contra el mandatario capitalino, y anunció que
se revisaría “de manera exhaustiva” el expediente”.
Ayer, 4 de mayo, la PGR determinó no ejercer acción penal contra Andrés
Manuel López Obrador, aunque lo sigue considerando responsable de
desacato. (Balboa, 2005)

Obrador victima del desafuero


El desafuero de 2005 en contra del entonces jefe de gobierno capitalino,
Andrés Manuel López Obrador, representó hace 13 años el momento
“cumbre” de la sociedad política entre el PRI y el PAN. El gobierno de
Vicente Fox, con el claro apoyo del PRI, del expresidente Carlos Salinas de
Gortari, de los “servicios” legislativos de Diego Fernández de Cevallos y el
cabildeo del presidente de la Suprema Corte, Mariano Azuela, pretendió llevar
a la cárcel a López Obrador por haber desacatado una orden judicial sobre una
calle abierta en Santa Fe.
La estabilidad política del país se jugó por menos de 100 metros de calle en un
expediente que tuvo más que ver con su antecesora Rosario Robles que con el
propio López Obrador.
Todos sabemos lo que sucedió después: el desafuero convirtió a López
Obrador en una víctima de la clara alianza entre el PRIAN, surgió un
movimiento social inédito en apoyo al jefe de gobierno capitalino (la última
marcha en contra del desafuero tuvo más de 1 millón de ciudadanos que
40

salieron a las calles) y el tabasqueño se volvió el protagonista central de la


contienda de 2006. (Villamil, 2018)

Spots de odio
Campaña de odio 2006
Una serie de empresas y organismos del sector privado alentaron y financiaron
el miedo y el odio que el candidato del PAN, Felipe Calderón anunció desde
su primer discurso de campaña emitido el 19 de enero de 2006. Así se
desarrolló la campaña en contra del denominado “el peligro para México”,
Andrés Manuel López Obrador y sus simpatizantes, identificados como los
“violentos” se financió con abundantes recursos del PAN y mediante
patrocinios ilegales tolerados por el IFE. (García, 2007: XXVIII)

Guerra Spots 2006


La guerra de spots puede dividirse en tres momentos; el primero va desde la
emisión del anuncio panista, “ladrillos López Endeudador” (12 de marzo),
hasta la emisión del anuncio positivo obradorista “ayudar no es peligro” (16
de mayo)… La segunda etapa corre desde la emisión del spot obradorista
“informativa 1” (16 de mayo), en que se sugiere que Calderón firmó el
Fobaproa, hasta la emisión del spot panista “miente Obrador propuesta IVA”
(5 de junio), en el que se desmiente el spot que afirmaba que Calderón
porponía aumentar el IVA a las familias más pobres. Esta etapa se caracteriza
por la entrada de lleno de la campaña obradorista a la campaña negativa, ya
que emitió varios mensajes para acusar a Calderón de ser participe del “fraude
más grande de la historia” (el Fobaproa) y de pretender aumenta el IVA; por
su parte, la campaña calderonista respondió a ambos ataques y cotinuó su
línea estratégica de presentar a López Obrador como un político propenso a
endeudarse.
La tercera y última etapa no empieza con un spot, sino con el debate del 6 de
junio, en el cual López Obrador acusó a Calderón de haber otorgado contratos
a su cuñado, Diego Zavala, en su paso por la Secretaría de Energía… La etapa
concluye con el fin mismo de las campañas, el 28 de junio de 2006. Este tercer
momento se caracteriza por los anuncios en los que se aportan pruebas de los
negocios ilícitos del “cuñado incómodo” de Calderón y por los spots panistas
que las refutan o ridiculizan (como el spot “cajas vacías”), así como por la
insistencia de la campaña obradorista en los ataques relativos al Fobproa y al
PAN.. Persiste también la campaña calderonista en su línea estratégica, a
saber: exponer a López Obrador como un político que se endeuda sin medida,
añadiendo, en varios spots, que ello representa una amenaza para el bienestar
41

económico personal (por ejemplo, el riesgo de perder la casa, el trabajo o los


electrodomésticos comprados a crédito) (Rudy, 2011: 725)

Brevedad de spots
En los spots no se explica, sólo se afirma y sobre todo, se repite un mensaje
breve y fácil de recordar. (Rudy, 2011: 741)

Spot ladrillos
Javier Treviño Rangel señala, con base en una encuesta de Parametría de
mayo de 2006, que 71% de los encuestados conocían el spot “ladrillos”
(analizado más abajo), mientras que 82% conocía el spot “intolerancia”, en el
que se comparaba a López Obrador con Hugo Chávez. Asimismo, de la misma
encuesta se desprende que la opinión negativa sobre López Obrador aumentó
20% a raíz del spot “ladrillos” y 31% a causa de “intolerancia”. (Rudy, 2011:
729)

Spot ladrillo
Spot “ladrillo”… Una voz masculina explica en tono apremiante: “Éste es el
segundo piso de la Ciudad de México, ¿cómo pagó López Obrador por él: Se
endeudó. ¿Las pensiones? Se endeudó. Triplicó la deuda del D.F: si llega a
presidente nos va endeudra más y vendrá una crisis económica, devaluación,
desempleo”. Es ese momento, la mano coloca ladrillos con las inscripciones
“crisis”, “devaluación”, “desempleo”, “embargos”; finalmente, la construcción
se desmorona estrepitosamente y se escucha de nuevo una voz masculina:
“Estos son los grandes planes de López Obrador, un peligro para México”.
(Rudy, 2011: 732).

Consejo Coordinador empresarial gastó 136 millones campaña de odio


Tal como lo acredita el Instituto Brasileño de Opinión Pública (IBOP),
contratado por el IFE para monitorear las campañas de radio y televisión, el
Consejo Coordinador Empresarial (CCE) gastó 136 millones de pesos y el
Centro de Liderazgo y Desarrollo Humano (Celiderh) pagó 30 millones 600
mil pesos en promocionales sincronizados con los de Calderón y del PAN. La
transnacional Pepsico, subsidiaria de Sabritas, que difundió promocionales
claramente identificados con el candidato del PAN. Pero esto se hizo en
violación del Cofipe y de la propia Constitución… el artículo 48 del Cofipe,
fracción primera, dispone: “Es derecho exclusivo de los partidos políticos
contratar tiempos en radio y televisión para difundir mensajes orientados a la
obtención del voto durante las campañas electorales… No obstante, Calderón
42

y el PAN recibieron apoyo del CCE, de Calderón, de Jumex -que gastó 13


millones y de Pepsi Corporation. (García, 2007: XXVIII)

Spots del PAN y Consejo Coordinador Empresarial


La idea de Morris fue vincular a López Obrador con Hugo Chávez, el
entonces presidente de Venezuela porque representaba según los asesores, la
intolerancia idea de ultraizquierda.
La campaña estuvo reforzada con un artículo especial que el propio Morris
escribió el 3 de abril de 2006 y el cual difundió en diversos blogs de política.
El texto titulado Menace in Mexico, abordaba la manera en que Chávez
financiaba a López Obrador y que el triunfo de este en las elecciones sería
clave para expandir la izquierda en Latinoamérica y “poner de rodillas as
Estados Unidos”… Además, Solá diseño una campaña donde el miedo era el
principal ingrediente y podíamos escuchar palabras como devaluación,
desempleo y dictadura. El PAN unió fuerzas con el Consejo Coordinador
Empresarial, entonces dirigido por José Luis Barraza y también se dedicaron a
difundir sus propios spots, por ejemplo, mostraban a Andrés Manuel como
“algo distinto” y una persona en la que no se podía confiar. (Nacion321: 2018)

Incertidumbre y Bolsa de valores


Incertidumbre electoral y volatilidad de la Bolsa.
Los resultados demuestran que los cambios en los niveles de apoyo para el
candidato de la izquierda no afectaron el comportamiento de la Bolsa
Mexicana de Valores, pero su volatilidad. El incremento de incertidumbre
electoral, es decir, un margen angosto en las preferencias electorales que
presentaban las encuestas, aumentó la volatilidad del mercado, mientras que
aumentos en la certeza electoral, sin importar si el incremento en el apoyo era
para López Obrador o para Felipe Calderón (PAN), redujeron la volatilidad en
la bolsa. (Benton, 2006: 69)

Preocupación Scotiabank por Obrador


…la ola de victorias cosechada por los candidatos de izquierda en América
Latina generó, tanto en México como en el extranjero, la sensación de que el
renombre de López Obrador podría ser algo típico de la región… Cambios
recientes hacia políticas de estilo populista en Argentina, Bolivia, y Venezuela
estaban frescos en la memoria de los inversionistas… En este contexto, no
parece sorprendente que hubiera inversionistas preocupados por la victoria de
López Obrador durante el curso de la campaña presidencial del 2006
(observación basada en conversaciones con gerentes de portafolios y analistas
43

de mercado mexicano pertenecientes a Scotiabank Inverlat de la Ciudad de


México. (Benton, 2006: 70-71)

Reforma fiscal para programas sociales, Obrador


Calderón y su equipo aseguraron su apoyo para las reformas fiscal, energética,
laboral y de seguridad social, no obstante, por otra parte, el equipo de
Calderón dedicó mucho tiempo a asegurar a los votantes que no se privatizaría
Petróleos Mexicanos… ni las dos paraestatales de la electricidad. (Benton,
2006: 75)

Ahorrar en despilfarros para programas sociales


Al contrario de Calderón, López Obrador abogó por un incremento del papel
del Estado en la economía para fortalecer la creación de empleos e
incrementar las oportunidades económicas y el crecimiento. También declaró
que él reorientaría e incrementaría el gasto gubernamental hacia gasto en
programas sociales, educación y desarrollo de infraestructura, y que podía
generar los fondos para tales cambios tomando medidas enérgicas para evitar
la evasión fiscal por negocios y por parte de las elites, así como a través de
una reducción significativa en el gasto gubernamental redundante. De esa
manera, ahorrando recursos despilfarrados, él obtendría los recursos
adicionales para pagar tales prioridades del gasto. (Benton, 2006: 76)

…el énfasis de López Obrador respecto al papel del Estado en algunos


aspectos de la economía, combinado con su negativa a emprender las reformas
estructurales, aumentaron la preocupación entre los inversionistas, aún a pesar
de las declaraciones de su equipo de trabajo en reuniones privadas con
inversionistas en donde aseguraban que este no era el caso. (Benton, 2006: 76)

…muy pocos investigadores se han concentrado en cómo es que la


incertidumbre que rodea al proceso electoral afecta los mercados, durante las
campañas y a las estructuras e instituciones políticas existentes. Dado que los
inversionistas toman decisiones en un mundo de incertidumbres y
constantemente hacen cálculos probabilísticos sobre el futuro de las
tendencias económicas y políticas, más allá de lo que ellos conocen
verdaderamente acerca de las características estructurales de las economías y
la política, parece importante estudiar hasta qué grado este mundo
probabilístico afecta sus estrategias de inversión y por tanto las tendencias de
mercado. (Benton, 2006: 73)
44

Los altibajos de la elección presidencial mexicana fueron retratados en la


prensa internacional y se mantuvieron frescos en la mente de los
inversionistas… Algunos como JP Morgan escribieron amplios reportes
acerca de las tendencias de las preferencias electorales con la finalidad de
justificar sus predicciones acerca del resultado final de las elecciones… La
BMV también mostró considerable volatilidad durante este periodo. Los
mayores cambios registrados en comportamiento y volatilidad comienzan a
aparecer a principios de abril y continuaron hasta el viernes 30 de junio (2006)
antes de las elecciones. (Benton, 2006: 79)

Incrementos en el apoyo a cualquier candidato alivia a Mercados.


Este artículo examinó el efecto de los resultados de las encuestas de opinión
pública durante las campañas presidenciales de 2006 sobre la BMV. Se
encontró que las encuesta no afectan los retornos del mercado, pero si
afectaron la volatilidad del mercado. También se tuvo un hallazgo inusual, se
encontró que la incertidumbre electoral aumentó la volatilidad de los
mercados, mientras que un incremento en la certidumbre lo reducía, sin
importar que fuera López Obrador o Calderón quien tuviera más
probabilidades de ganar… parece curioso que aumentos en el apoyo para
cualquiera de los dos candidatos reduzca la preocupación de los mercados.
(Benton, 2006: 83)

Inversionistas preparados para victoria de izquierda


Sin embargo, tales hallazgos de acuerdo como la experiencia demoscópica,
sugieren que los inversionistas estaban preparados para una victoria del
candidato de la izquierda López Obrador, o para una victoria del candidato de
derecha, pero no para la incertidumbre pos-electoral, especialmente para la
incertidumbre asociada al amplio riesgo político y a disturbios promovidos por
el candidato perdedor. Los hallazgos indican que la comunidad de
inversionistas estaba dispuesta o por lo menos preparada para aceptar a un
candidato de izquierda, al menos en México, pero no para la incertidumbre
política o el fantasma de disturbios e inestabilidad social asociados a una
contienda cerrada. (Benton, 2006: 83-84)

Elección 2012
Crisis 2008-2012
La dimensión económica de la crisis comenzó con el crack financiero de 2008
y se acentuó a partir de 2012, por el efecto de contagio de Estados Unidos y la
caída de los precios de las materias primas. La crisis social fue resultado de las
reformas neoliberales -desregulaciones, privatizaciones y recortes de los
45

derechos económicos y sociales- que se implementaron en el país desde la


presidencia de Carlos Salinas de Gortari. La crisis moral fue el resultado de la
corrupción -83.1% de los mexicanos creía que la corrupción estaba
generalizada entre los funcionarios (LAPOP, 2014)- y la inseguridad con “la
guerra contra el narcotráfico”, iniciada durante la presidencia de Felipe
Calderón, la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes en México pasó
de 7.8 en 2007 a 22.6 en 2011 (Banco Mundial, 2016a). Aunque con el
regreso del PRI al gobierno esta tasa se rebajó, la percepción de inseguridad se
mantuvo alta, en 2014 más de la mitad de los mexicanos se sentían algo o muy
inseguros en sus barrios (LAPOP, 2014). Por último, la crisis política fue fruto
de la desafección de los mexicanos hacia la clase política tradicional, en 2014,
66.1% de los mexicanos afirmaba tener poca o ninguna confianza en los
partidos (LAPOP, 2014). (Rivas-Otero, 2019: 227-228)

Campaña electoral 2012


Su campaña electoral comenzó el 30 de marzo de 2012, sus competidores en
esta ocasión fueron Josefina Vázquez Mota por el PAN, Enrique Peña Nieto
por la Alianza compromiso por México del Partido Revolucionario
Institucional (PRI) y el Partido Verde Ecologista de México (PVEM)
(Bedolla, 2016: 176)

Obrador en segundo lugar 2012


El PRD junto con el PT y Movimiento Ciudadano (hasta 2011 Convergencia),
sus aliados en la contienda electoral de 2012, con quieres conformó la
coalición Movimiento Progresista llegaron a las elecciones federales de 2012
con un notable racha de derrotas en comicios estatales e intermedios. Producto
de la desconfianza hacia estos partidos por parte de la ciudadanía que se
identifica con la izquierda, a raíz de la disputa por los espacios de control de
los partidos y el manejo de los recursos económicos… En las elecciones
presidenciales, la coalición Movimiento Progresista encabezada por López
Obrador quedó en segundo lugar, cuestionando su resultado, argumentando
que la coalición ganadora denominada Compromiso por México, encabezada
por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Verde
Ecologista (PVEM), que postuló a Enrique Peña Nieto, había “comprado” la
elección. (Bolivar, 2014: 32)

Peña Nieto compra elección 2012


El PRD junto con el PT y Movimiento Ciudadano (hasta 2011 Convergencia),
sus aliados en la contienda electoral de 2012, con quieres conformó la
coalición Movimiento Progresista llegaron a las elecciones federales de 2012
46

con un notable racha de derrotas en comicios estatales e intermedios. Producto


de la desconfianza hacia estos partidos por parte de la ciudadanía que se
identifica con la izquierda, a raíz de la disputa por los espacios de control de
los partidos y el manejo de los recursos económicos… requirieron de
MORENA, el movimiento social construido por López Obrador… En las
elecciones presidenciales, la coalición Movimiento Progresista encabezada por
López Obrador quedó en segundo lugar, cuestionando su resultado,
argumentando que la coalición ganadora denominada Compromiso por
México, encabezada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el
Partido Verde Ecologista (PVEM), que postuló a Enrique Peña Nieto, había
“comprado” la elección. (Bolivar, 2014: 31)

#YoSoy132 fortalece Obrador


La campaña de AMLO tomó un segundo aire cuando se creó el movimiento
#YoSoy132, un movimiento apartidista, surgido a raíz de la infructuosa
participación de Enrique Peña en un foro juvenil y estudiantil en la
Universidad Iberoaméricana. Para el 27 de mayo el vuelco a su campaña fue
contundente (Bedolla, 2016: 177)

Votos por carisma de Obrador


Haciendo una comparación entre las propias elecciones de 2012, se observa
que López Obrador obtuvo casi 2.2 millones de votos más que los candidatos
del Movimiento Progresista al Senado y casi 2.4 millones más que los
diputados federales de la misma coalición, por lo que al menos entre el 14 y el
15% de los casi 15.9 millones de votos obtenidos por él no se los debe a los
simpatizantes o afiliados a los tres partidos que lo postularon, sino a su
trabajo, su proyecto y su carisma personal (Cantú, 2012: 64-65). (Cantú en
Bolivar: 32).

Obrador abandona al PRD


La decisión de López Obrador de abandonar las filas del PRD se dio una vez
emitido el fallo inapelable del TEPJF que daba como ganador a Peña Nieto…
optó por mirar hacia adelante y hacer un movimiento de izquierda
diferenciado a los ya existentes… En una asamblea realizada el 9 de
septiembre de 2012 en el zócalo de la ciudad de México, López Obrador
esbozó el nuevo rumbo de MORENA: transitar de asociación civil a partido
político. (Bolivar, 2014: 36)

AMLO rechaza Pacto por México


47

Previo a que se firmara el Pacto por México y aún antes de que tomara
posesión del cargo Enrique Peña Nieto, López Obrador recibió ofrecimientos
de firmar dicho pacto e incluir su propuestas de campaña, condicionado a
reconocer como presidente al ex candidato del PRI-PVEM. Su respuesta fue
negativa (Bolivar, 2014: 39)

Chuchos impulsan al pacto por México


El Pacto por México nació por un acuerdo inicial entre el priísta José Murat y
el perredista Jesús Ortega. La idea fue de este último… El argumento de
Ortega fue que el PRI y Peña no podrían gobernar solos ante un Estado sin
control de los territorios, con instituciones en crisis y los monopolios
controlando la economía. (Bolivar, 2014: 39-40)

Registro del partido Morena en 2014


La crisis multidimensional en México provocó el surgimiento de nuevos
partidos, entre los que destaca el Movimiento de Regeneración Nacional
(Morena), debido a su impacto electoral y a su proyección política. Su líder,
López Obrador perteneció al PRI y fue dos veces candidato a la presidencia
por el PRD. Morena se conformó en 2011 como una asociación política,
impulsada tras la segunda derrota de López Obrador como candidato
presidencial y en 2014 se registró como partido para competir en las
elecciones nacionales. (Rivas-Otero, 2019: 228)

Obrador candidato de MORENA


Con MORENA hecho partido, López Obrador asegura su candidatura
presidencial para 2018. (Bolivar, 2014: 48)

Neoliberalismo en pobreza
Desigualdad por neoliberalismo en AL
Durante las dos últimas décadas se han registrado cambios significativos en
las políticas sociales y económicas de Latinoamérica, el origen de los mismos
se encuentra en los programas de ajuste y en las reformas estructurales de
carácter neoliberal que han desmantelado el Estado de bienestar y han
agudizado la desigualdad y la pobreza en nuestros países. (Márquez, 2006: 91)

Desempleo y pobreza
En ese marco las políticas sociales, de salud y de educación, sólo actúan como
mero complemento de medidas macroeconómicas, lo cual se traduce en la
reproducción de la pobreza y crecimiento de la iniquidad. En materia de
empleo, las condiciones de trabajo son precarias y las reglas del mercado
48

laboral arrojan a la desocupación y la informalidad a porciones inmensas de la


población económicamente activa (20 por ciento de la población
económicamente activa constituida actualmente por 41.5 millones de personas
de las que 25.6 millones -61%- labora si prestaciones y 11.3 millones -27%-
sin contrato de trabajo. (Márquez, 2006: 91)

Alternativas al neoliberalismo AL
El crecimiento de los países de América Latina durante 1900-2000 fue inferior
a la tasa de 5 por ciento… En la búsqueda de alternativas, hace unos años la
región comenzó a dar un giro, después de dos décadas de gobiernos cuyo
rasgo distintivo ha sido su apuesta por el neoliberalismo.
El triunfo de proyectos alternos ha dado frutos en Latinoamérica. En su
búsqueda de respuestas, hace algunos años la región tomó una dirección hacia
la izquierda, con su arribo al poder en Argentina, Brasil, Venezuela, Panamá.
Esta tendencia se ha acentuado en el año 2005 con el triunfo del líder del
Movimiento al Socialismo (MAS), Evo Morales, en Bolivia (Márquez, 2006:
91-92)

En resumen, 20 años de neoliberalismo han dado como resultado, de acuerdo a


cifras de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL),
que 214 millones de personas, casi el 43 por ciento de la población
latinoamericana, viva en la pobreza en el año 2001. De ellas 18.6 por ciento
(92.8 millones) se encontraban en la indigencia. Las proyecciones de la
Comisión Económica para 2002 pronosticaban un aumento de la pobreza en
alrededor de siete millones de personas, de la cuales seis millones serían
indígenas. (Márquez, 2006: 95)

Populismo
Liderazgo populista
También se encuentran características del tipo de liderazgo populista. Quien
posee estas características, es un influyente líder popular y social que conoce
la problemática nacional porque la ha vivido. El pueblo lo reconoce como uno
de los suyos, lo sigue y lo defiende de sus detractores. Sus propuestas son
claras, simples, y su lenguaje coloquial. Su principal bandera es la justicia
social, acabando con los vicios del sistema que concentra la riqueza en unos
cuantos, que viven a expensas del sacrificio del pueblo. (Bolivar, 2014: 31)

Recelo fifis al populismo


49

Los sectores beneficiados del sistema ven al líder populista con mucho recelo,
pues para ellos es quien desea alterar el orden de cosas existente que los ha
beneficiado (Paredes, 2016).

Populismo instrumento retórico


...en descargo del populismo, casi siempre se ha recurrido a él después de
gobiernos grises y mediocres en su desempeño. Parece que el populismo
aparece y reaparece pendularmente, impulsado por experiencias precedentes
apagados o deslucidas, pues bien empleado constituye un poderos instrumento
retórico para reavivar el interés social, reponer las bases de apoyo de los
gobernantes y neutralizar las demandas populares. (Cansino, 2017)

Populismo en México
La presencia recurrente del populismo en México, tanto en el viejo régimen
autoritario como en la incipiente democracia postautoritaria, se debe sobre
todo a la pobre modernización de su sistema político, la cual se refleja en: (1)
escasa regulación de la institución presidencial, que abre la puerta al
voluntarismo del l ider, (2) una cultura política propicia para el paternalismo y
el victimismo, (3) un sistema que fomenta la concentración del poder en el
vértice, (4) una débil secularización social respecto del Estado, (5) ausencia de
un Estado de derecho democrático y (6) escasa aceptación del valor de la ley
erga omnes. (Cansino, 2017)

Populismo de Cárdenas
Cárdenas articuló con maestría la noción de soberanía nacional con la de
soberanía popular bajo la potente estructuración ideológica del nacionalismo
revolucionario, que sería definitivamente enmarcada en la muy famosa
política de masas del cardenismo. En los hechos, el populismo de Cárdenas
significó la cancelación de cualquier atisbo de individualismo, por eso se
presentaba como una creación antidemocrática y antiliberal. (Cansino, 2017)

Populismo de Obrador, etiqueta para desprestigiarlo


México se encontraría hoy nuevamente en la antesala de un gobierno
populista, pues el actual sexenio de Felipe Calderón no solo ha sido incapaz de
conectar con la sociedad sino que es percibido por muchos como el principal
responsable de la actual debacle que padece el país… Este caudillo existe, se
llama Andrés Manuel López Obrador, pero, a diferencia de hace seis años, ya
no cuenta con el arrastre de entonces. Hoy las tendencias lo colocan en un
lejano tercer lugar entre los candidatos que aspiran a la presidencia. Quizá el
populismo de López Obrador ha sido más una etiqueta para desacreditarlo que
50

una realidad, a juzgar incluso por su desempeño como jefe de Gobierno del
Distrito Federal. (Cansino, 2017)

Tribunal electoral sanciona campaña negativa


La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación
(TEPJF) calificó y amplió las sanciones que la Sala Especializada había
impuesto a los creadores de la serie “Populismo en America”, luego que el
contenido del material pretendiera generar una campaña negativa en contra del
entonces candidato a la presidencia Andrés Manuel López Obrador.
(Redacción, 2019)

Populismo y economía
Hay diferentes definiciones de “populismo”. Una de ellas tiene que ver con el
uso político de la economía. Con tal de ser popular ante la población, un
político niega las realidades del mercado. Quizás lo que mejor resuma esta
definición es una recomendación de un gobernante sudamericano a un colega
suyo de otro país. Por ahí de mediados del siglo pasado: “Si los trabajadores te
piden, dales. Si te piden más, dales más. Al fin y al cabo la economía es
flexible”. Es un error porque la economía no tiene nada de flexible. Al revés,
es inflexible e implacable.
Puede ser que una política populista funcione durante algún tiempo. Pero al
final del día alguien acaba pagando los costos y generalmente es la sociedad.
Los gobiernos populistas suelen financiar con deuda las medidas “populares”.
Por ejemplo, incrementan los subsidios pero no aumentan los impuestos para
financiarlos (lo cual sería impopular). No queda otra más que endeudarse. Los
pasivo se acumulan y, en la medida en que un país se sobregira, sube el riesgo
de pagar y el costo del endeudamiento. La gran cantidad de deuda acaba por
estrangular la economía de un país, inevitablemente llega el momento de
apretarse el cinturón. Las sociedades acaban pagando un costo carísimo por el
populismo. Suelen terminar peor de lo que estaban antes de que comenzara la
fiesta populista. (Zukermann, 2012)

Populismo define precios


En lugar de los precios de los bienes y servicios los determine su escases
relativa, el político, desde su escritorio, los define, para ser popular; los pone
por debajo del precio de mercado, otorgándole un subsidio a la población,
subsidio que tiene que pagarse de alguna forma. Si no se incrementan los
impuestos, lo único que queda es aumentar la deuda publica. (Zukermann,
2012)
51

Definición de Populismo, Krause


¿Ha habido en México gobiernos populistas? El populismo es una alteración
de la democracia. Lo que el populismo busca -al menos ha sido la experiencia
latinoamericana- es establecer un vínculo directo con el pueblo, por encima, al
margen o en contra de las instituciones, las libertades y las leyes. La iniciativa
no parte del pueblos sino del líder carismático que define a “el pueblo como
una amalgama social opuesta al “no pueblo”. El líder es el agente primordial
del populismo. No hay populismo sin la figura del personaje providencial que
supuestamente resolverá, de una buena vez y para siempre, los problemas del
pueblo. (Krause, 2012)

Campaña Peligro para México


Peligro para México
…comprender la dinámica de la “guerra de spots” que se desató entre el
Partido de Acción Nacional (PAN) y la Coalición por el Bien de todos (CBT)
durante la contienda presidencial de 2006 en México. Principalmente, se trata
de averiguar como fue construida, con anuncios negativos emitidos en
televisión por el PAN, la imagen de Andrés Manuel López Obrador (AMLO),
candidato de la CBT, como un “peligro para México”… ¿las campañas
negativas favorecen la generación de un electorado más informado? Este
trabajo arrojó una respuesta negativa, la cual está basada en la siguiente
hipótesis: las campañas negativas buscan presentar al candidato rival como
incompetente en uno o varios aspectos que los propios spots o anuncios, hacen
relevantes para el electorado (el cual debe estar predispuesto a atender estos
aspectos). Por ejemplo, se puede cuestionar la capacidad del rival para
gestionar la economía. Sin embargo, los anuncios no ofrecen evidencia que
respalde sus asertos, sino que aprovechan mecanismos propios del medio en
que se transmiten (radio o televisión) para persuadir (o, según algunos,
manipular) al electorado por medios extra racionales. (Rudy, 2011: 715-716).
¿cómo se construyó la imagen de López Obrador como “un peligro para
México” en términos económicos en los anuncios negativos transmitidos en
televisión por el PAN durante la campaña de 2006?.. dos aspectos
relacionados: por un lado, los elementos principales que componen dicha
imagen; por otro, los mecanismos semánticos (esto es, creadores de
significado, tanto visuales como auditivos, verbales y narrativos) que
emplearon los anuncios para construirla y la medida en que esos mecanismos
sustentaban las afirmaciones contenidas en los spots.
La hipótesis de trabajo es que la imagen de López Obrador presentada en los
anuncios negativos del PAN no fue construida con base en evidencia y
argumentos claros que aumentaran la información disponible para el
52

electorado. Por el contrario, aquellos emplearon la repetición incansable de su


mensaje para suplir la falta de evidencia sólida, así como los recursos propios
del medio (video) para crear una atmósfera de miedo que predispusiera al
espectador a aceptar irreflexivamente dicha imagen, la cual fue generada por
dichos anuncios. (Rudy, 2011: 716).

Miedo de electores
…existe evidencia empírica de que el vuelco en las preferencias electorales
durante la campaña de 2006 se debió principalmente a la activación del voto
económico en un segmento importante de los votantes independientes que, o
bien estaban satisfechos con el estado de la economía, o bien eran adversos al
riesgo de haber contraído créditos de diversos tipos. (Rudy, 2011: 715-717).

Morris y la campaña negra


El mercadólogo estadounidense Dick Morris contribuyó decisivamente a la
victoria de Felipe Calderón, aun a costa de polarizar a la sociedad con la feroz
campaña negativa contra Andrés Manuel López Obrador. Todavía están por
verse las graves consecuencias sociales de que el candidato panista cumpliera
su objetivo “haiga sido como haiga sido”, como él mismo dijo.
En el año 2000, Dick Morris fue pieza clave para que Vicente Fox sacara al
PRI de Los Pinos; hoy el controvertido consultor estadounidense vuelve a ser
pieza fundamental en el polémico triunfo de Felipe Calderón, pues entre
bambalinas fue el constructor de la campaña negativa contra Andrés Manuel
López Obrador, en la que se difundió que era un peligro para México y se le
vinculó con Hugo Chávez.
Daniel Lund, encuestador desde hace 18 años y presidente de la empresa
Mund Americas, sostiene que la presencia de Morris en la campaña de
Calderón se hizo evidente a finales de febrero, cuando el panista cambió de
estrategia y se montó en una campaña de descrédito hacia López Obrador,
quien para entonces le llevaba una ventaja considerable en las encuestas de
preferencia electoral. (La Redacción, 2006).

Morris polariza por televisión


Horacio Bernal, estratega de la campaña presidencial de Francisco Labastida
en 2000, confirma las apreciaciones de Lund. Conocedor de la forma en que
Morris y Ron Allyn operaron la campaña de Vicente Fox en el 2000, observa
la huella que Morris deja en cada uno de sus trabajos: la polarización de la
sociedad por la intensa campaña sucia en los medios, principalmente en
televisión, como la que se dirigió contra el candidato de la coalición Por el
Bien de Todos. (La Redacción, 2006).
53

Morris intenta ligar a Obrador con Chavez


Pero Morris fue más allá y comenzó a prestar sus servicios a Calderón con
base en una idea que vino a venderle desde el otoño de 2005: atacar a López
Obrador acusándolo de estar ligado con Hugo Chávez. (La Redacción, 2006).

Morris, Obrador peligro para México


El PRD sería un desastre para México, porque el país iría en el sentido que
Chávez o Castro. Sería tal vez la última elección que podrían tener.
Daniel Lund señala al respecto que Morris mostró entonces la esencia de lo
que sería la campaña de Calderón: comparar a López Obrador con Chávez,
estableciendo que el tabasqueño es un peligro y que si ganaba, México
perdería todo lo que había logrado sobre todo en el campo económico. (La
Redacción, 2006).

Morris conspirador invisible


Morris siguió la ley de todo consultor extranjero: la invisibilidad. Su mano
experta en campañas negativas sólo se notó cuando Calderón sacó de su
equipo a Francisco Ortiz, a quien por ese entonces se le descubrió un lujoso
departamento en Miami. Pero sobre todo, la sombra del consultor
estadounidense apareció en la serie de mensajes televisivos del equipo de
campaña calderonista en que se acusaba a López Obrador de ser un peligro
para México, así como los del Consejo Coordinador Empresarial que
comparaban al tabasqueño con el presidente de Venezuela. (La Redacción,
2006).

Articulo Obrador peligro para México


El 3 de abril, Morris corroboró implícitamente su trabajo para Calderón,
considera Lund, pues escribió un artículo en el periódico New York Times
titulado: Menace in Mexico (Amenaza en México), en el cual acusó:
…Los rumores han corrido por meses en el sentido de que la campaña de
López Obrador ha recibido grandes fondos del presidente Hugo Chávez de
Venezuela. Y el mes pasado, el representante Jim Kolbe (de Arizona), un
republicano moderado, dijo a algunos legisladores mexicanos que tenía
reportes de inteligencia detallando el apoyo de Hugo Chávez al Partido de la
Revolución Democrática (PRD) de AMLO.
Chávez es un firme aliado de Fidel Castro, presidente de Cuba. López Obrador
bien podría ser la pieza que faltaba en sus planes para poner de rodillas a
Estados Unidos ante la emergente izquierda latinoamericana. (La Redacción,
2006).
54

Morris asocia a Obrador con Chávez


El 10 de julio, Dick Morris publicó otro artículo: Mexico Election: The Defeat
of The Latin Left (Elección en México: la derrota de la izquierda latina), en el
cual afirmó que con la victoria del centrista Felipe Calderón, el electorado
mexicano ha evitado que la alianza entre Hugo Chávez y Fidel Castro tenga
éxito en su intento por dominar el futuro político de Latinoamérica con lideres
y políticas de izquierda. México ha tomado la primera medida para pararlos,
agrega Morris… (La Redacción, 2006).

Currículo de Morris
Egresado de la Facultad de Arte de la Universidad de Columbia, Morris tiene
en su haber varios logros como asesor político: la reelección presidencial de
Bill Clinton en 1996, la elección de los gobernadores Bill Weld
(Massachussets) y Peter Wilson (California) y la elección y reelección de más
de 30 legisladores federales y estatales, tanto del Partido Demócrata como del
Republicano.
Fuera de Estados Unidos, Morris colaboró en los triunfos electorales del
mexicano Vicente Fox (2000), del argentino Fernando de la Rúa (1999), del
Uruguayo Jorge Batlle (1999) y del ucraniano Viktor Yushchenko (2005). Se
le reconoce también su participación en el triunfo de 12 diputados del Partido
Independentista de Gran Bretaña en los comicios de 2004. (La Redacción,
2006).

PRI revive campaña de miedo del 2006


El equipo de campaña de la coalición Todos por México, que encabeza José
Antono Meade, revivió un ‘miedo’ del 2006: al ‘Peje’
En los spots más recientes del candidato priísta se ve a personas atemorizadas
porque Andrés Manuel López Obrador llegue a la Presidencia.
Los dos videos, publicados ayer en su cuenta de YouTube, se titulan Confía en
mi,y tiene poco más de 11 mil y 15 mil reproducciones respectivamente. En
ambos se ven mujeres preocupadas porque el Peje gane la elección del 1 de
julio pues, según dicen, buscará “sacar a los narcos a la calle” y “quiere echar
atrás la reforma (educativa)”.
Al final de cada comercial, aparece José Antonio Meade diciendo “confía en
mí, voy a ser tu Presidente”. (Vanguardia Milenio, 2018)

AMLO, Calderón y la campaña “Un peligro para México”.


Obrador triplicaría deuda, meter miedo
55

Los nuevos spots de José Antonio Meade recuerdan la campaña que el PAN
hizo en 2006, cuando Felipe Calderón era el candidato.
En los videos se señalaba a López Obrador como “un peligro para México” y
criticaban las decisiones que tomó durante su gestión como jefe de Gobierno
del entonces Distrito Federal.
Uno de los videos más recordados destacaba que el morenista “triplicó la
deuda del DF. Si llega a Presidente se va a endeudar más”. (Vanguardia
Milenio, 2018)

Obrador ya no es peligro para México, creador de la frase.


La frase “un peligro para México” fue ideada por los especialistas en
comunicación política Antonio Solá, de origen español, y el estadounidense
Dick Morris.
En febrero de este año, el propio Solá dijo en entrevista a medios de
comunicación que “ya no es vigente” la frase peligro para México, pues
“López Obrador ha evolucionado mucho en los últimos años”. (Vanguardia
Milenio, 2018)

Obrador y Chavez intolerantes


Otros spots que destacaron hace más de una década, fueron aquellos que
relacionaban al ex perredista con el entonces presidente de Venezuela Hugo
Chávez, en un video en el que se hacía una comparativa entre López Obrador
y el extinto mandatario sudamericano, a quienes se les calificaba de
“intolerantes” (Vanguardia Milenio, 2018)

Fraude contra Obrador en 2006


Andrés Manuel López Obrador estuvo muy cerca de ganar la elección
presidencial de 2006, pero durante su campaña vivió la más aguerrida
campaña electoral que se recuerde en la historia de México… también han
sido las más polémicas debido al presunto fraude electoral en contra del
político tabasqueño. (Nacion321: 2018)

Campana negra contra Obrador


Por mayoría de votos, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la
Federación (TEPJF) concluyó que durante el proceso electoral del año pasado
(2018) hubo una campaña negra en contra del ahora presidente Andrés
Manuel López Obrador, a partir de la difusión de la serie Populismo en
América Latina, material en el que se le calificaba al entonces candidato como
“redentor furioso”.
56

El hecho, advirtió el TEPJF, se presentó bajo la “fachada” del ejercicio de la


libertad de expresión; sin embargo, violó el modelo de comunicación política
que prohíbe la contratación de espacios en radio y televisión con fines
electorales. (Martínez, 2019: 8)

Se afecto imagen de Obrador


En el proyecto aprobado ayer por la sala superior del tribunal, luego de una
discusión de más de dos horas, se advirtió que la producción afectó la imagen
de López Obrador, y se acreditó un despliegue de publicidad para influir en la
preferencias electorales. (Martínez, 2019: 8)

Campaña de odio disfrazada de libertad de expresión


El magistrado presidente, Felipe Fuentes, ponente del proyecto… Para mí,
agregó, se llega a la conclusión de que “sí existió una estrategia de
comunicación que, simulando un autentico ejercicio de libertad de expresión,
pretendió influir en la pasada contienda electoral para elegir al presidente de la
República, y para mí esto es violatorio del modelo constitucional de
comunicación política”.
En contra votaron los magistrados Janine Otálora y Reyes Rodríguez, quienes
-con distintos matices- sostuvieron que no se comprobó la contratación ilegal
(de publicidad) y que el material se enmarcó dentro del ejercicio de libertad
periodística. (Martínez, 2019: 8)

Campaña negra integral


En el proyecto se documenta la existencia de publicidad en camiones,
teléfonos celulares, promocionales en televisión, entrevistas y cintillos en
medios audiovisuales “para generar una campaña integral negativa” hacia el
entonces candidato.
La información e investigación realizada por el Instituto Nacional Electoral y
la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Haciendo mostraron el
“complejo esquema integrado por personas físicas y morales destinado a
violar el modelo de Comunicación Política para, con recursos presupuestales
privados, intentar influir negativamente en la percepción pública de un
candidato presidencial en el proceso electoral federal del pasado 2018
mediante una campaña negra”, advirtió el tribunal. (Martínez, 2019: 8)

Populismo-endeudamiento-crisis
…desentrañar lo que llamo la vertiente económica de la imagen negativa de
López Obrador, es decir, aquella en la que éste es presentado como un político
que financia sus obras de gobierno mediante el endeudamiento excesivo y
57

cuyos proyectos, aplicados a nivel nacional desembocarían en una terrible


crisis. En esa sección se investigan simultáneamente el contenido de la imagen
negativa de López Obrador y los mecanismos empleados en los spots para
construirla. (Rudy, 2011: 718).

Campaña negra y descenso en preferencias


…en la “Encuesta de encuestas” (gráfica 1), en la que se aprecia un claro
descenso de López Obrador en las preferencias electorales que coincide con la
puesta en marcha de la campaña negativa panista, así como un aumento
correspondiente en las preferencias por Calderón. (Rudy, 2011: 728)

Miedo económico
…a principios de marzo, 31% de los encuestados señalaron que López
Obrador inspiraría más confianza para invertir en el país, frente a 26% que
opinó que Calderón lo había. Sin embargo, para la segunda quincena de abril
33% señaló que López Obrador provocaría que el país cayera en una crisis
económica, frente a 7% que opinó que Calderón provocaría ese resultado.
Puesto que el tema central de la campaña negativa en su vertiente económica
era que López Obrador provocaría una crisis económica, el cambio
mencionado puede atribuirse (al menos en parte) a dicha campaña. (Rudy,
2011: 729)

Obrador provocaría una crisis


La encuesta Panel 2006 también arroja evidencia de que el mensaje central de
la campaña negativa del PAN, a saber, que en caso de ganar López Obrador se
desataría una crisis económica, tuvo un impacto relevante en el electorado…
Un resultado más llamativo es el siguiente: de acuerdo con un modelo de
votante independiente promedio, la creencia de que López Obrador provocaría
una crisis aumentaba 28% las posibilidades de que un votante de este tipo
eligiera a Calderón y disminuía 38.4% las probabilidades de que eligiera a
López Obrador. (Rudy, 2011: 730)

Guerra sucia contra Obrador en 2006 por TV


En 2006 López Obrador fue banco de una campaña que el mismo llamó
“guerra sucia”, en la que adversarios principalmente del PAN y su candidato
Felipe Calderón, difundieron la idea de que el entonces perredista era un
“peligro para México”… Hace 12 años la influencia de la TV era incluso
mayor sin la presencia de redes sociales como Facebook o Twitter.
58

Y aunque tiempo después el Tribunal Electoral declaró ilegales este tipo de


propaganda, esos mensajes llegaron a ser transmitidos en televisión abierta y
como dicen por ahí el daño ya estaba hecho. (Nacion321: 2018)

Obrador se corre al centro por guerra sucia


“En 2012 tuvimos que enfrentar todo el desprestigio que se produjo por la
guerra sucia y por el fraude de 2006, la del peligro para México impactó hasta
el 12, esto nos costó bastante trabajo remontarlo, si les funcionó la guerra
sucia, fueron años muy difíciles después de 2006, de mucho rechazo porque
nos bombardearon, nos satanizarón y aguantamos”, dijo el jefe de gobierno.
Según López Obrador, la estrategia del PAN le hizo cambiar la propia para
irse un poco más al centro y tratar de conseguir votos de la clase media.
Pero, de acuerdo con la segunda entrega del estudio Voto Milenial de
Nación321 la mayoría de los jóvenes nacidos entre 1980 y 2000 considera
como falso que López Obrador sea un “peligro para México”. (Nacion321:
2018)

Transparencia frente a campañas sucias


…el precandidato de Morena consideró que la difusión de información veraz
es clave para contrarrestar cualquier campaña que implique “guerra sucia o
meter miedo”, ya que los jóvenes están miy despiertos, muy avispados”. En
esta elección podrán aparecer nuevas formas de “guerra sucia” como la página
pejeleaks.org un sitio de internet que no está identificado y no tiene contacto
alguno, donde aseguran que buscan dar a conocer la “faceta más oscura y
desconocida de López Obrador. (Nacion321: 2018)

Rusia y Obrador?
…los intentos de vincularlo con el gobierno de Vladimir Putín, incluso, los
detractores de López Obrador han dicho que recibe dinero por parte de los
rusos y que ese gobierno podriá interferir en las elecciones mexicanas como
supuestamente lo hizo en Estados Unidos. (Nacion321: 2018)

Década perdida en la memoria


En la memoria colectiva del mexicano, las crisis cambiarias no tienen nada
que ver con los años de aparente prosperidad, aunque esa disociación sea
enteramente artificial. Lo años duros de los ochenta, periodo al que con
frecuencia se califica como la década pérdida, se explican no por la naturaleza
del gobierno o gobernante en turno, sino por las enormes cuentas del pasado
que se pagaron en ese entonces (Rubio, 2005)
Sancionar Populismo en América
59

…la magistrada Mónica Soto Fregoso destacó la importancia de privilegiar


que las contiendas electorales transcurran en condiciones de equidad y evitar
inejerencias de actores ajenos pretendan incidir en los resultados de las
elecciones.
Por su parte, el creador del proyecto, el magistrado presidente Felipe Alfredo
Fuentes Barrera, indicó que sí existió una estrategia de comunicación que
simuló un ejercicio de la libertad de expresión para difundir en la pasada
contienda electoral “y para mi esto sí es violatorio del modelo constitucional
de comunicación política”.
De ese modo y por mayoría de votos se concluyó evaluar la ampliación de
las sanciones de manera individualizada a Piña Digital S.A. de C.V.,
Javier García Mota, Grupo T.V. Promo S.A. de C.V.; T.V. Promo S.A. de
C.V; Virna Gómez Piña; Alejandro Quintero Iñiguez y Mónica Bolaños
Cacho Albarrán. Además se determino dar vista a la Unidad de Fiscalización
del Instituto Nacional Electoral (INE), el Servicio de Administración
Tributaria (SAT) y la Fiscalía Especializada en la Atención de Delitos
Electorales (FEPADE) a efecto de que realicen las investigaciones para
observar actos que podrían significar otro tipo de conductas ilegales.
(Redacción, 2019)

Complejidad de la campaña negra


“La información e investigaciones realizada por el Instituto Nacional Electoral
(INE) y a Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda,
dieron cuenta de un complejo esquema dirigido por personas físicas y
morales destinado a violar el modelo de Comunicación Política para, con
recursos presuntamente privados, intentar influir negativamente en la
percepción política de un candidato presidencial, en el proceso electoral
federal del pasado 2018, mediante una “campaña negra”, indicó el
Tribunal en un comunicado. (Redacción, 2019)}

Capital privado no puede financia propaganda electoral


“El artículo 41 de la constitución establece que ninguna persona física o moral
puede contratar propaganda dirigida a influir en las preferencias electorales de
los candidatos, ni a favor ni en contra de los partidos políticos o de candidatos.
Lo que los denunciados violaron a través de un esquema de publicidad integral
ilegal” (Redacción, 2019)

No se sanciona la libertad de expresión, sino el financiamiento ilegal


“Ninguno de los medios de comunicación que transmitió la publicidad
referente al serial arriba descrito, está siendo sancionado, pues en su momento
60

no conocían de los alcances e intención de la campaña negativa arriba


señalada”, concluyó.
Por lo que la Sala Superior garantiza la libertad de expresión en los Medios,
pero sienta un precedente para que actores no realicen en lo futuro
campañas negativas” (Redacción, 2019)

Campaña de desprestigio delictiva


El ministro en retiro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN),
José Ramón Cossio, señaló que con base en lo estipulado en el artículo 18 de
la Ley General en Materia de Delitos Electorales, la campaña de desprestigio
contra el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, sería un delito
(Redacción, 19 marzo 2019)

Populismo en América Latina, Pejelaks, Coppel


…el espacio donde se debe resolver todo lo relacionado con la campaña de
desprestigio, tanto el documental Populismo en América Latina, el caso
Pejeleaks y los señalamientos en contra de empresarios como Fernando García
Ramírez y Agustín Coppel, deben ser los tribunales. (Redacción, 19 marzo
2019)

Guerra sucia 2006


“La serie tenía todos los ingredientes de la guerra sucia de 2006, es decir,
señalar a un personaje como una amenaza para el país”, aseguró el periodista
Jenaro Villamil. (Villamil, 2019)

Financiamiento privado de Populismo en America Latina


…el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, diera a
conocer durante la conferencia matutina de este jueves, que empresas privadas
estuvieron detrás del financiamiento de la serie “Populismo en América
Latina” (2018), misma que tuvo un impacto electoral, “debemos comenzar una
investigación completa y exhaustiva, haciendo uso de todas nuestras
atribuciones, superar el secreto bancario fiscal, fiduciario par poder emitir una
resolución (Villamil, 2019)

Prohibición de financiamiento privado


“Hay reglas muy claras en nuestro sistema electoral respecto a cómo se puede
y no financiar las campañas electorales, es decir la propaganda a favor o en
contra de un partido político y uno de los contendientes”, explicó y destacó
que en lo dicho por Nieto está el tema de la preponderancia del financiamiento
61

público que hay sujetos que expresamente tienen prohibido financiar las
campañas electorales. (Villamil, 2019)

Quintero recibió 45 millones por campaña sucia


…la empresa de Alejandro Quintero Iñiguez quien estuvo detrás del plan de
trabajo para hacer de Enrique Peña Nieto un personaje conocido cuando aún
era gobernador del Estado de México, obtuvo casi 45 millones de pesos en
ingresos a través del dinero privado que empresas inyectaron a la producción
y publicidad de la serie en donde el ahora presidente Andrés Manuel López
Obrador era catalogado junto a líderes latinoamericanos como Hugo Chávez
y Lula da Silva. (Villamil, 2019)

2019 repite guerra sucia de 2006


…Jenaro Villamil, quien aseguró que “la serie tenía todos los ingredientes de
la guerra sucia de 2006, es decir, señalar a un personaje como una amenaza
para el país. (Villamil, 2019)

Ilícito financiar campañas sucias


…las contiendas electorales no pueden ser el mercadeo de las productoras o de
grupos empresariales que esconden la mano para intoxicar el debate electoral.
No se vale utilizar los tiempos mediáticos para promocionar campañas
sucias”, resaltó Villamil. (Villamil, 2019)

Poder compra intelectuales


“Quienes detentan el poder y manejan el presupuesto se han especializado en
seducir o intentar seducir y corromper intelectuales que se presten a sus
intereses políticos” denunció Sergio Aguayo…. Y desde su punto de vista, la
situación es mucho mayor en el caso del historiador Enrique Krause pues “no
sólo es buen y prestigiado historiador” también “tiene una presencia enorme
no sólo por si mismo sino por el grupo que encabeza Editorial Clio, que puede
transmitir en Televisa sus videos y documentales que le dan una enorme
fuerza. (Redacción, marzo 18 2019)

Coppel financia campaña negra de Krauze


Sobre la operación supuestamente encabezada por el historiador Enrique
Krauze y el empresario Agustín Coppel, que buscaba desprestigiar a Andrés
Manuel López Obrador antes de llegar a la presidencia… los analistas Sergio
Aguayo y Lorenzo Meyer coincidieron en que podría tratarse de una maniobra
ilegal que puede probar: el uso de dinero privado en campañas políticas.
(Redacción, marzo 18 2019)
62

Dinero ilegal en campañas electorales


“Santiago Nieto presento una denuncia ante la Fiscalía y dado que este nuevo
caso involucra dinero ilegal en las campañas tengamos por seguro que la
FEPADE entrará al ruedo (Aguayo) (Redacción, marzo 18 2019)

Obrador distante de la campaña negra


Lorenzo Meyer, consideró que el presidente hace bien en no opinar a fondo
sobre esta campaña de desprestigio (Redacción, marzo 18 2019)

Estilo de dirección

Carisma de Obrador
…el liderazgo de López Obrador está sustentado en el carisma... Como lo
establece Max Weber la situación de un liderazgo carismático es, por su
propia naturaleza, específicamente inestable. (García, 2007: XXI)

De González Pedrero, López Obrador aprendió el impacto de las obras


públicas en el electorado (García, 2007: XXIII)

Impugna elección, campamentos


López Obrador anunció que impugnaría la elección del 2 de julio y convocó a
sus simpatizantes a congregarse en el Zócalo el sábado 8 de julio… En la
tercera Asamblea Informativa desarrollada el 20 de julio… destaca la
implementación de una Asamblea permanente y mantenerse desde la Plaza de
la Constitución hasta la Fuente de Petróleos, en espera de que el Tribunal del
Poder Judicial de la Federación se pronunciara sobre el resultado de la
elección (García, 2007: XXVIII-XXIX)

Nueva estrategia Obrador


…en los casos analizados (Obrador, Iglesias, Albert Rivera), el estilo de
liderazgo y los atributos que lo conforman responden a un comportamiento
estratégico que cambia en función del contexto. Cuando los medios de
comunicación presionan al líder y su entorno por actuaciones irregulares o
falta de experiencia, éste rebaja el tono discursivo o trata de mostrarse como
un gestor; cuando el partido del líder accede a cargos de responsabilidad
institucional, la necesidad de alcanzar acuerdos con otros grupos provoca un
cambio en la estrategia discursiva; por último, cuando se publican datos sobre
proyección electoral del líder o su partido, cambia la autoconfianza y la forma
en que se apela al grupo de seguidores. (Rivas-Otero, 2019: 245)
63

Krauze: Conversión amorosa de Obrador


Hace poco más de una década, liquidado el sistema que imperó por setenta
años, apareció un líder social -Andrés Manuel López Obrador- que, desde el
cargo de Jefe de Gobierno del Distrito Federal y más tarde en su campaña
presidencial, siguió el libreto populista. De haber triunfado, hubiese sido el
primer presidente populista (y aún mesiánico) de la historia mexicana.
Han pasado casi seis años desde aquella elección y López Obrador es, de
nueva cuenta, el candidato de la izquierda. Pero algo ha cambiado
recientemente en su estilo personal. El tono y la actitud se han suavizado, el
mensaje se ha vuelto conciliatorio y -en sus propias palabras- amoroso. Se ha
atenuado la belicosa prédica contra el “no pueblo”, pero muchos perplejos
ciudadanos, legítimamente, se preguntan: ¿Le ha ocurrido una conversión
religiosa? ¿Se trata de una táctica electoral? ¿O el cambio obedece a un
proyecto político alejado ya del populismo?
López Obrador parece haber experimentado una conversión tolstoyiana (en
sentido estricto, leyendo a Tolstoy, siguiendo su ejemplo). De allí su renuncia
a la confrontación y su cambio diametral de prédica de la indignación
flamígera a la persuasión amorosa. Por otra parte, el viraje tiene un obvio
sentido electoral: AMLO sabe bien que sin el apoyo de las clases medias
difícilmente alcanzará los votos necesarios para triunfar. Lo que no está claro
es la naturaleza política de su cambio. Y no lo está porque no ha hablado de
ella. (Krause, 2012)

Obrador se transformó
López Obrador tiene que lidiar con esta situación. Y no será sencillo. Está
limitado por la izquierda y su nacionalismo revanchista a la vieja usanza, por
su base radicalizada y por la percepción en México de que Peña Nieto fue
demasiado complaciente con Washington, muy a menudo. También está
presionado por la derecha, encarnada en políticos preocupados por una
economía que se debilita -un peso golpeado y una bolsa de valores que
languidece-, en integración don Estados Unidos y la vulnerabilidad del país
ante cualquier represalia trumpiana por pecados reales o percibidos.
(Castañeda, 2018)

Xxxxxxxxxxxx
Ciberacoso y falsas verdades durante la campaña electoral de 2018 en México

Dr. Mario Ortega Olivares, Universidad Autónoma Metropolitana-Xochimilco


64

Al decir adiós al totalitarismo, se nos escapó el pensamiento crítico.


Tras el desplome del Muro de Berlín, la academia occidental rehuyó a las formas de
pensamiento holístico, por su asociación con poderes dictatoriales. Para Derrida, la des-
totalitarización del mundo moderno, requiere “eliminar la nostalgia del todo y su unidad”
(Arias, 2017: 3). La ruptura con el totalitarismo de tipo soviético, conllevó el abandono de
los grandes relatos de emancipación, de cualquier ideología que los sustituyera. Y hasta del
método crítico, por considerarlo intolerante y políticamente incorrecto. Porque los
filósofos al servicio del totalitarismo consideraron al pensamiento como un arma de cambio
y no como una luz: “su función, nos dicen, no es revelarnos lo real, es decir lo que es, sino
ayudarnos a modificarlo, a transformarlo guiándonos hacia lo que no es” (Derrida, 1995:
18). Derrida en su “Historia de la Mentira”, advierte que los regímenes totalitarios casi no
se interesan por la verdad objetiva. Pues al sentirse más fuertes que los dioses, “transforman
a su placer el presente y hasta el pasado” (Derrida, 1995: 19). Tal como ocurrió con el
discurso estalinista. Arendt en “Los orígenes del totalitarismo” identificó al seguidor ideal
del nazismo o comunismo, como alguien para quien la distinción entre hecho o ficción,
entre verdad y mentira ha dejado de existir (Kakutani, 2018; 11). El hombre totalitario está
impregnado por la mentira en cada instante de su vida (Derrida, 1995: 17). Al respecto,
“Koyré sugiere que los regímenes totalitarios y sus análogos de toda especie, nunca se
situaron verdaderamente más allá de la distinción entre la verdad y la mentira. Pues miente
en el interior de esa tradición… para poner en acción el engaño (Derrida, 1995: 19).
¿El “mundo verdadero” es una fábula?
Aparici y García-Marín discuten el papel de las fábulas como punto de partida de las
mentiras, pues con sus encantos atrapan al lector en las redes del engaño (Aparici y García-
Marín, 2019: 228). Derrida coincide con Nietzsche al sospechar que el platonismo, el
kantismo y el positivismo mintieron cuando intentaron hacernos creer en un “mundo
verdadero” (Derida, 1995: 2). Para entenderlo recurre a la “Historia de un Amor” incluida
en el libro “El ocaso de los dioses”. Donde Nietzsche relató en una sola página de seis
episodios: “Como el mundo verdadero terminó por convertirse en una fábula”. Es decir,
que ahí no se narra una fábula, sino como se tramó dicha fábula. “Tal como si fuera posible
un relato verdadero… de una fabulación que, precisamente, no produce otra cosa que la
idea de un mundo verdadero” (Derrida, 1995a). Pues para Nietzsche la verdad solo es una
componente del fuerza, “el poder de dominar la manera en que pensamos la realidad, que
deviene lucha de poder sobre la manera de describirla” (Bianco: 2). Según Derrida la
verdad es un problema del testimonio, no de la objetividad, “la verdad tanto como realidad
no es un objeto dado de antemano que solo se trataría de reflejar adecuadamente. Es una
problemática del testimonio, por oposición a la prueba…” (Derrida, 1995: 19). Como diría
Braudillard, la función más elevada del signo es desaparecer la realidad y enmascarar al
mismo tiempo dicha desaparición (Bianco: 3). El propio Vladislav Surkov, asesor de Putín
ha reconocido a Derrida como su maestro en el arte de la mentira, pues si el lenguaje no es
fiable y la relación entre palabras y sentido es inestable, la noción occidental de verdad
destaca por su candidez (Kakutani, 2018: 160-161).
El gran libro del mundo.
Derrida concibe al libro como una condensación de la “metafísica de la presencia”. Muñoz
cae en un cierto agnosticismo, al considerar que el texto implica en tanto negatividad
radical, la imposibilidad de la experiencia, la imposibilidad de su superación y apropiación
por parte de los sujetos soberanos de sentido (Muñoz, 2018: 48).
65

Según Derrida, la escritura de un libro con unidad de sentido, exige mantener en silencio el
punto de vista desde el cual redacta el autor. Texto que “avanza de manera sinuosa, nunca
recta entre líneas (Muñoz, 2018: 46). Pero que se asemeja rasgo por rasgo al libro. Un texto
que el libro esconde, pero que cuya puesta en reserva lo hace posible (Muñoz, 2018: 46).
¿Cómo se puede entonces leer lo ilegible de un libro? Transitando del libro escrito al texto,
algo así como ir del ser rumbo al más allá.
Según Derrida: “Si ser legible supone exhibir conformidad plena con la gramática del gran
libro que llamamos ‘mundo’ o ‘realidad’, entonces la legibilidad del libro supone que haya
algo preescrito, un sentido en cierto modo “natural” que lo precede y que el libro repite.
Que se encuentra en el origen y fin de la escritura. Desde esa perspectiva, la ilegibilidad
sería el fracaso de la escritura al redactar un libro, esto es de producir una unidad coherente
y total cuya organización responde a un sentido exterior, a un significado trascendental”
(Muñoz, 2018: 45). El texto oculto en tanto negatividad radical implicaría la imposibilidad
de la experiencia, la imposibilidad de su superación y apropiación por parte de los sujetos.
Para comprender un escrito debemos poner a un lado el texto enmascarado. “A ese residuo,
a eso que permanece en reserva, como totalmente otro libro y no obstante es residual a él,
es a lo que Derrida se refiere como su textualidad” (Muñoz, 2018: 46). Si el libro escrito se
revela dividido, escindido al abrigar un texto, algo de lo que el mismo nunca llega a
apropiarse. Entonces Derrida debe explicar cómo leer el sinsentido del texto.
La deconstrucción del sentido.
Para conocer la intención del autor al escribir, es necesario deconstruir al libro en función
de los prejuicios que soporta. Si no sabemos a ciencia cierta lo que un autor quiso decir
realmente con el libro que escribió, debemos despedazarlo para ser analizado en función de
los supuestos que se esconden detrás de él. Al deconstruir el libro para desmontar su unidad
de sentido se revela el texto. Derrida concibe a la deconstrucción como si fuera una
operación textil donde se descose al libro. “Al desmontar la pretensión de unidad y
totalidad de sentido que lo comanda, el texto simultáneamente se cose” (Muñoz, 2018: 45).
La deconstrucción pone al desnudo aquello silenciado por la fuerza del sentido. “Reabre los
saltos y espacios vacíos que, pese al dispositivo del libro, interrumpen la continuidad de la
línea de sentido en su escritura” (Muñoz, 2016: 46). Deconstruir es leer lo ilegible,
desnudar la narrativa que el libro esconde y que en su ocultamiento lo posibilita. En
consecuencia se diversifican las interpretaciones del escrito y la misma noción de verdad
queda en entredicho, al final todo son narrativas elaboradas desde particulares puntos de
vista.
Como el lector competente fracasa al intentar comprender la unidad de sentido de un libro.
Sólo es posible acceder al texto enmascarado, leyendo el escrito contra su propio sentido.
Por ello, Derrida distingue la lectura monosémica que constriñe la escritura al principio de
la unidad de sentido; a diferencia de la lectura diseminal que “se instala en la apertura del
libro, esa que llamaríamos ilegibilidad radical, para resistir a toda tentación de totalización
y unidad” (Muñoz, 2018: 47).
Posmodernidad y narrativas.
Tanto para Foucault como para Derrida la verdad es relativa, porque el sentido de todo
escrito obedece al específico punto de vista del autor. Si cualquier declaración de que algo
es verdadero, solo refleja la ideología de la persona que la enuncia. Solo se comprende un
escrito al considerar las creencias de un autor. Por ello, “las intenciones de los autores en el
discurso no pueden ser incondicionalmente aceptadas. Esto multiplica el número de
interpretaciones legítima de un texto” (Lechte, 1994). Para los humanistas la relativización
66

de las grandes verdades holísticas, fue como liberarse de una camisa de fuerza. Las tesis de
la postmodernidad abrieron horizontes para la comprensión de los otros en la academia. Se
ampliaron los márgenes de tolerancia hacia los desiguales y diferentes. Todas las narrativas,
adquirieron validez, por responder a la respetable pluralidad de las opiniones. Parecía trivial
afirmar que existen múltiples formas de leer un texto o que uno no puede entender un
escrito sin tener en cuenta las creencias políticas del autor (Lacy, 2015). Nadie sospecho
que el impulso posmoderno de la década de 1990. No sería seguido por un avance del
progresismo tolerante, sino por el más explícito y duro anuncio del cataclismo conservador
de las noticias falsas. Según McIntyre la posmodernidad dio un giro irónico, pese a haberse
originado por pensamiento progresista, sus tácticas y retórica fueron adoptadas con éxito
por la derecha más radical, lo que nos condujo al drama de la viral difusión de la posverdad
en redes y medios. Christopher Domínguez considera que el antiautoritarismo de la
filosofía posmoderna derivó en un horror, por su empeño de denunciar al lenguaje como
“un fascismo veleidoso disociado de toda veracidad” (Christopher, 2018: 43). Por ello nos
convoca a recuperar el pensamiento crítico, no por nostalgia, sino como una urgente
necesidad política.
McIntyre advierte que la relativización de la verdad había comenzado tiempo atrás. Cuando
las empresas de tabaco o las que utilizan carbón, contrataron a “expertos propios” para
generar falsa evidencia, de que fumar no provoca cáncer o negar la influencia de la
polución en el cambio climático.
Katukani considera que la deconstrucción por su profundo nihilismo implica en términos
prácticos, “que ha sido fútil toda la obra de periodistas e historiadores capaces de
ofrecernos verdades demostradas gracias a la evidencia” (Katukani, 2018: 60). Bajo la
posmodernidad el exceso de neutralidad ha permitido la libre circulación de infundios en
medios y redes sociales. “El resultado es la libre circulación de bullshit que Harry Frankfurt
definió como una táctica persuasiva que se desentiende de la verdad (Arias, 2017: 2).
Discutamos ahora el concepto de verdad.
Verdad factual y veracidad discursiva.
Arendt reconoce un espacio de “verdad factual”, que como en el caso de la verdad
científica, debe ser convalidada intersubjetivamente. A diferencia de Foucault, para quien
“la verdad depende casi siempre del punto de vista de quien la formula y deriva de un
proceso de construcción -o de imposición- social mas que de su correspondencia con una
realidad exterior al ser humano” (Arias, 2017: 1).
Como que las estrategias discursivas desdibujan la frontera entre la verdad factual y los
discursos veraces. La primera termina por no ser fácil de reconocer (Ponce, 2018: 7). Los
diversos poderes atacan la verdad factual, fabrican sus propios hecho y esparcen la
calumnia. Por ello: “Las posibilidades de que la verdad factual sobreviva a la embestida
feroz del poder son muy escasas; siempre corre el peligro de que la arrojen del mundo, no
sólo por un periodo sino potencialmente para siempre” (Arendt, 1968: 353-354). El que la
verdad factual termine por no ser fácil de identificar, implica un problema tanto político
como moral (Ponce, 2018: 7).
Posverdad y ocultamiento.
Steven Tesich escribió primera vez de la posverdad en 1992 en un artículo de la revista The
Nation. Según Bianco la posverdad es “un eufemismo para definir una verdad aparente o
que, quitando este maquillaje, se encuentra una voluntad autoritaria y demagógica decidida
a disfrazar la verdad en la forma de la mentira (Bianco: 4), La posverdad se presenta como
una lectura alternativa más de la realidad, ocultando su malicia (Aznar, 2018: 8). El uso de
67

la mentira al servicio del poder, se muestra con diferentes ropajes como “posverdad”,
“hechos alternativos”, “regímenes de posverdad”, sociedad post-factual y pospolítica.
(Ponce, 2018: 1).
Según Aparici y García Mora la posverdad es la construcción cognitiva de una serie de
creencias y estereotipos que son substanciados y concretizados por las fake news dotando
de relato a los infundios. Se entiende por fake news o noticias falsas, a mentiras
encubiertas como verdades, que se lanzan a la circulación por las redes sociales, a fin de
desinformar y generar percepciones equivocadas sobre lo que es cierto o no lo es
(Villanueva, 2018).
“Para que el cocinado de la noticia falsa sea efectivo, debe existir el caldo de cultivo previo
en forma de posverdad… se puede producir también en el sentido inverso (Aparici y
García-Mora, 2019a: 3189). El error, el fraude, el relato ficticio no son equivalentes a la
mentira. “Estas categorías son irreductibles entre sí, pero ¿qué pensar de situaciones tan
frecuentes donde de hecho, en verdad, se contaminan tan recíprocamente y no permiten una
delimitación rigurosa? ¿Y si este contagio marcara a menudo el espacio mismo de los
discursos públicos, sobre todo en los medios? (Aparici y García-Mora 2019: 241). Tal
complejidad es conocida como un régimen de posverdad, es un régimen de ocultamiento.
Tesich recuerda que todas las dictaduras se han esforzado por suprimir la verdad, “pero la
importancia para la actualidad del término radica en que se trata de un fenómeno que
ocurre, manipula la opinión pública y suprime la verdad con notable eficacia política, en
nuestras democracias de masas” (Ponce, 2018: 11). El resultado es que ya no se confía en
nadie y se desconfía hasta de lo hechos. Si no confías en nadie, por qué tienes que confiar
en los hechos. Si nadie hace nada por mí, por qué he de creer en nadie. Se admite que las
interpretaciones le den sentido a los hechos. “Las interpretaciones por encima de los
hechos, que querían superar el mito de la objetividad, no nos han llevado a esa
emancipación que filósofos modernos como Richard Rory esperaban” (Bianco, 2017: 3).
Más bien el mundo reducido a un reality show, nos desbarrancó en un abismo de populismo
mediático. De acuerdo con Ponce “la historia lo demuestra, los hechos (la verdad factual)
pueden ser borrados, olvidados o bien deformados por un efecto del poder, desde el poder
público (Ponce, 2018: 9). Surge una duda, ¿por qué la gente no denuncia la falsedad de la
posverdad? Cárdenas y Serrano responden que el proceder de las personas tiende a seguir el
de los suyos. Como depende de su grupo de pertenencia, “primero eligen tribu, después
adoptan los principios de ésta y finalmente eligen aquellos datos que apoyan esas
posiciones” (Cárdenas y Serrano, 2019: 2680). Terminando por preferir la información que
refuerza sus opiniones.
Las redes empoderan a la ignorancia.
Las redes sociales lucran con nuestras emociones, refuerzan nuestras ignorancias y
amenazan a los posibles desertores digitales con el aislamiento social. Cuando Google
privilegia a unas páginas web y discrimina a otras, determina cuales serán mas consultada y
las posiciona como significativas ante la opinión pública. O lo que es lo mismo: fabrica una
realidad alterna (Aparici y García-Marín, 2019: 3218). Los algoritmos de las redes destacan
aquella información con más probabilidad de agradar y discrimina lo menos popular
(Aznar, 2018: 5). Los datos reciben el mismo trato que las opiniones y se descartan los que
generan desafectos (Aznar, 2018: 8).
Aunque para muchos adolescentes el “meme” es considerado un divertimento. Tal concepto
se refiere a una expresión cultural y simbólica, una unidad de significación ilimitada. Que
es replicada socialmente, a la manera como se reproducen los genes biológicos (Contreras,
68

2018: 37). “Es la rapidez con la cual circulan los flujos de información en la red lo que
posibilita que el meme electrónico pueda amplificarse a niveles planetarios. Esto ha sido
aprovechado recientemente por las áreas de publicidad y mercadotécnia para promocinar
ciertos productos o ideas mediante la viralidad” (Contreras, 2018: 37). Las victimas del
acoso cibernético no pueden detener la circulación de un meme infamante, pues los
servicios de red no condicionan la emisión de la información a un determinado usuario
final.
Un meme con difamaciones puede parecer real y verdadero, gracias al apoyo de las
imágenes que lo acompañan. “Existe una tendencia a creer en la verosimilitud de lo
audiovisual por mostrarse como una testificación, una demostración de algo que en verdad
está sucediendo. ‘Yo lo he visto’, afirma el engañado ciudadano cuando lo que realmente
ha visto no es sino algo construido, elaborado artificialmente, un relato ad hoc para servir a
los intereses ideológicos de un sector o de otro. Una mentira” (Aparici y García-Marín,
2019b, 3159). Como ocurrió con en Cataluña durante el referéndum de independencia del 1
de octubre de 2017, cuando se fusionaron imágenes reales con imágenes falsas para
engañar y manipular a los usuarios de las redes.
Las redes sociales agrupan a los individuos en racimos, en base a “informaciones
acomodaticias que ratifican entre sí sus creencias mientras rechazan los datos no
concurrentes con sus ideas; los datos reciben de este modo el mismo tratamiento que las
opiniones, descartándose subjetivamente aquellos que no se comprometen o disgustan
sobre la base de esa sola razón” (Aznar, 2018: 6).
La circulación digital de las mentiras.
Las redes digitales encierran a la audiencia dentro de espacios informativos coincidentes
con su ideología preferida. El fácil acceso y la amplia difusión ofrecida por las
herramientas de Internet, permite que los opositores a las vacunas o quienes niegan el
cambio climático, expongan sus elucubraciones a escala global. Como sus prejuicios son
reforzados al escuchar el eco de sus correligionarios digitales, cuando recibe el famoso like
o la mano con el pulgar levantado del “me gusta”. Son una suerte de ignorantes
empoderados (Lacy 2015).
Aparici y García-Marín denuncian que la verdad y la mentira son equivalenciadas por las
redes sociales. Hechos y ficción, mentiras y verdades, contenidos contrastados y bulos
circulan bajo un régimen de isonomía (igualdad de apariencia) tanto en las redes digitales
como en los otros medios de comunicación (Aparici y García-Marín, 2019: 241).
Mientras que las emotivas narrativas de la posverdad se masifican o viralizan con rapidez y
gran impacto, los desmentidos de sus mentiras no se viralizan por apelar a la razón y
resultar poco atractivos (Aznar, 2018: 9).
La eficacia realizativa de la posverdad.
Mike Cernovich envenenó la campaña electoral de 2016 en los Estados Unidos con
calumnias viralizadas por las redes digitales. Que mostraron como las mentiras de la
llamada posverdad puede alcanzar eficacia realizativa. El bloguero ultra derechista alcanzó
notoriedad por el escandalo #PizzaGate. Cernovich difamó a Hillary Clinton, acusándola de
participar en un inexistente culto sexual pedófilo, que supuestamente se reunía en una
pizzeria de la capital norteamericana. El infundio alcanzó tal difusión en las redes sociales,
que un ultraconservador desquiciado fue al restaurant para tirotear a los supuestos
implicados. Mike Cernovich justificó la falsedad de calumnias, presentándolas como
“hechos alternativos”. Porque “gracias al posmodernismo aprendido en la universidad, se
había enterado –Jacques Lacan mediante- de que todo es simplemente narrativa” (Kakutani,
69

2018: 41). Christopher considera al relativismo que ha predominado en la academia durante


las últimas décadas, como responsable parcial de la actual era de la posverdad (Christopher,
2018: 40). El evangelio del posmodernismo prefigurado por Nietzsche decretó la
“inexistencia de verdades universales contra el imperio de las pequeñas verdades
personales” (Kakutan, 2018: 18). Según Christopher Domínguez, la derecha conservadora
impuso en los Estados Unidos el llamado “efecto Rashomon”, según el cual todo punto de
vista depende mi punto de vista (Christopher, 2018: 41)
Las posverdades durante la campaña electoral mexicana del 2018.
Naveja y Naveja concluyen que las redes sociales por su capacidad global de difusión han
favorecido el lanzamiento de mensajes maliciosos, para golpear al oponente o posicionar
temas en la agenda de la opinión pública (Naveja y Naveja, 2018: 20). Durante la campaña
electoral mexicana en 2018, las redes sociales tuvieron gran influencia entre la población de
18 a 35 años de edad. Esos 40 millones de jóvenes electores han migrado de la
manipulación de los noticieros en la televisión, rumbo a nuevas plataformas como Twitter,
Facebook e Instagram. “Su mundo es el streaming, sus fuentes de información están en las
redes sociales, sus lideres de opinión son completamente diferentes a las de sus antecesores.
Al mismo tiempo, hacen su aparición las fake news, el espionaje desde la red” (Naveja y
Naveja, 2018: 20). Bajo el anonimato proliferan sitios virtuales mercenarios, para
desinformar en las redes digitales. El 20 de junio de 2018 en el marco del último debate de
los candidatos presidenciales, Alejandra Barrales difundió una supuesta encuesta de
Televisa y Publimetro, donde aparecía en empate técnico con Claudia Sheinbaum,
candidata a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. “Después de que este supuesto
estudio empezara a propagarse Televisa se deslindó en twitter de la encuestra, mientras que
Publimentro asumió haberla publicado, más no su realización. Incluso menciono que es
autoría de la empresa Megamhetryk” (Rencillas, 2018: 8).
Durante el mes de mayo del 2018 apareció el sitio retroceso.com. Donde se difundió la
falsa noticia de Andres Manuel López Obrador -el candidato puntero- se proponía
desaparecer al ejército. Ya encarrerado el falaz sitio lanzó otras 12 noticias maliciosas.
“Según VerificadoMX, el dominio de la página fue comprado el 26 de mayo, y está
registrado en Oregón, EU, bajo un servicio de privacidad que oculta la identidad de quien
lo contrata” (Rencillas, 2018: 8). Otro esfuerzo por descreditar a López Obrador fue el
lanzamiento del falsario portal Pejeleaks experto en divulgar posverdades injuriantes. “El
17 de abril, Etcétera desentraño la trama que pretendía vincular a López Obrador con el
narcotráfico, la cual se construyó con testimonios, documentos apócrifos y la amañada
concatenación de sucesos inconexos” (Rencillas, 2018: 11).
Durante la campaña electoral presidencial del 2018, circularon muchos memes generados
no solo por usuarios comunes y corrientes de las redes, sino por “casas de campaña,
agencias de marketing y simpatizantes de algún partido o candidato. Estos memes
liquidaron el pensamiento crítico. Por lo general intentaron imponer una visión de la
realidad” (Contreras, 2018: 40). A fin de desorientar al electorado. Según Rapahel, esta
epidemia de posverdad conllevó el menosprecio de la evidencia, de la objetividad de los
hechos y el contexto. El relativismo posmoderno cobija a los “hechos alternativos” y la
posverdad. Provocando, que “el monólogo triunfe sobre el diálogo; la gesticulación
elocuente sobre los argumentos; las pasiones más bajas por encima de las razones y el
marketing desprovisto de sentido sobre la política democrática” (Rapahael, 2018).
“Cuando lo verdadero y lo falso pueden ser confundidos masivamente llegó el momento de
preocuparse por la civilización” (Raphael, 2018).
70

Ante la inundación del ciberespacio con rumores e infundios, medios periodísticos y otras
empresas informativas como la revista Proceso, constituyeron el sitio Verificado 2018.
Encargado de monitorear y contrastar las redes digitales. Dicha iniciativa denunció un falso
documento sobre las primeras acciones que realizaría el gobierno de López Obrador. Que
entre otras falsedades decía que: “ ‘El servicio de internet será manejado por el Estado’, ‘el
gobierno tendrá la facultad de eliminar cualquier noticia falsa, tendenciosa o difamatoria’;
‘empleados del sector privado no podrán ganar más de 15 mil pesos’; no se podrán vende
vehículos de más de cuatro cilindros’ ” (Redacción de La Jornada, 6 de julio de 2018).

Bibliografía.
Aparici, Roberto y David García-Marín (coords.) (2019) La posverdad. Una cartografía de
los medios, las redes y la política. Barcelona: Editorial Gedisa

Aparici, Roberto y David García-Marín (2017) “Arqueología de la narrativa digital


interactiva y la nueva comunicación” En: Aparici, Roberto y David García-Marín ¡Sonrie,
te están puteando! Narrativa digital interactiva en la era de Black Mirror. Barcelona:
GedisaArendt, Hanna (2016) “Verdad y Política”. 7 Entre el pasado y el futuro. Ocho
ejercicios sobre la reflexión política, Ariel, 2016, 374-402
¿Arendt 2018?

Arendt, Hanna (1968) Hombres en tiempos de oscuridad. Gedisa, Barcelona, 1990

Arendt, Hanna (1972) “Lying in Políticas. Refletions on the Pentagono Papers”.


Recuperado el 25 de septiembre de 2018 de: https:
//ss.nybooks.com/articles/1971/11/18/lying-in-politics-reflections-on-the-pentagon-pape/

Arendt, Hanna (2016) “Verdad y Política”. 7 Entre el pasado y el futuro. Ocho ejercicios
sobre la reflexión política, Ariel, 2016, 374-402

Arias, Manuel ( 2017) “Genealogía de la posverdad”. El País, 30 de marzo,

Aznar, Fernández (2018) Algunas reflexiones sobre la posverdad desde la perspectiva de la


seguridad, Documento Análisis. Instituto Español de Estudios Estratégicos. 22/2018, 12 de
junio

Bachelard, G. La formación del espíritu científico. Contribución a un psicoanálisis del


conocimiento objetivo. Siglo XXI Ediciones, 23ava. Edición.

Bachelard, G. La formación del espíritu científico. Contribución a un psicoanálisis del


conocimiento objetivo. Siglo XXI Ediciones, 23ava. Edición.

Bianco, Gabriella Desde el posmoderniso a la pos-verdad. Implicaciones para América


Latina. CECIES. Pensamiento Latinoamericano y Alternativo. Filosofía.
http://www.cecies.org/articulo.asp?id=582
71

Bradner, E. (2017, 23 de enero). Conway: Trump White House offered ‘alternative facts’
on crowd size. http://edition.cnn.com/2017/01/22/politics/kellyanne-conway-alternative-
facts/index.htm

Cárdenas, María Luisa y David Polo Serrano (2019) Posverdad y comunicación política:
infoxicación y fact-cheking. En Aparici, Roberto y David García-Marín (coords.) (2019) La
posverdad. Una cartografía de los medios, las redes y la política. Barcelona: Editorial
Gedisa, posición 2536-2864.

Chomsky N. (10 de marzo 2018). «La gente ya no cree en los hechos», El País. Babelia.
Recuperado de: http://cort.as/-2kwE

Deleuze, G. Foucault. Paidos Studio, Barcelona, 1987

Derrida, Jacques (1995) “Historia de la mentira, prolegómenos”. Recuperado el 25 de


septiembre de 2018 de: http://www.ddoss.org/articulos/textos/Derrida.htm#_edu4

Derrida, Jacques (1995) Historia de la mentira. Prolegómenos, (Conferencia dictada en


Buenos Aires en 1995) Organizada por la Escuela de Filosofía y Letras y por la
Universidad de Buenos Aires) Edición digital de Derrida en castellano.
https: //redaprenderycambiar.com.ar/derrida/textos/mentira.htm
Sitio creado y actualizado por Horacio Protel, consultado el 11 de marzo de 2019

Entman, R. Framing: Toward clarification of a fractured paradigm. Journal of


Communication 1993, 43(4), 2017.

Evelio,editor (2018) El posmodernismo es el padrino de la posverdad. Ideofilia, 23 de


noviembre.
https://ideofilia.wordpress.com/2018/11/23/ consultada el 10/3/2019

Foucault M. La arqueología del saber, Siglo XXI Editores, 2018 (1969)

Fuchs, C. (2015) Culture and economy in the age of social media. New York and London:
Routdledge.

García-Marín, David y Roberto Aparici La sociedad de la mentira. En Aparici, Roberto y


David
García-Marín (coords.) (2019) La posverdad. Una cartografía de los medios, las redes y la
política. Barcelona: Editorial Gedisa (posiciones 3125-3068

Han, B.C. (2017) La expulsión de los distintos. Barcelona: Herder Editorial.

Hunt, E. (2017, 22 de enero). Trump’s inauguration crowd: Sean Spicer’s claims versus
the evidence. https://www.theguardian.com/us-news/2017/jan/22/trump-inauguration-
crowd-sean-spicers-claims-versus-the-evidence l
72

Kant, I. Crítica del juicio. Editorial Tecnos, 2007 (1790)

Koyré A. “La fonctions politique du mesange moderne” en Libération, Paris, del 7 de


agosto de 1995.

Kreiter, R. Post-truth and its consequences: What a 25-year old essay tells us about the
current moment. The Nation, November 30, 2016.

Lacy, Tim (2015) “La ignorancia intencional en general y el antiintelectualismo en la


academia: el problema de “dos culturas” recicladas de Lee McIntyre. Blog de la USIH,
Society for U.S. Intellectual History, conferencia,
https://s-usih.org/2015/06/willful-ignorance-at-large-antiintellectualism-in-the-academy/

Lanier, J. (2018) Revista Telos. Recuperado el 23 de septiembre de:


https://telos.fundaciontelefonica.com/revista/telos-109/#contentNewspaper

Muñoz, Diana M. (2016) “La textualidad del texto. En torno al encuentro Gadamer-
Derrida, Franciscanum. Revista de las Ciencias del Espíritu, vol. LVIII, núm. 165, enero-
junio, Colombia: Universidad de San Buenaventura.

Ponce, Marcelo F. (2018) Verdad y Política de Hannah Arendt en la era de la posverdad.


Social Science Research Network, Rochester NY, no. 3209067, july 5, 2018.

Popper, K. La Sociedad abierta y sus enemigos. Paidos, 2006 (Routledge 1945).

Salas, J. (17 de dic. 2016) «La posverdad está en tu cerebro» El País. Recuperado de:
http://cort.as/-3cog

Stack, Liam (2017) Who is Mike Cernovich?


https://www.nytimes.com/2017/04/05/us/politics/mike-cernovich-bio-who.html
Consultado el 26 de febrero de 2019.

Zollo, F. et al. (2015) «Emotional Dynamics in the age of misinformation» PluS ONE 10,
no. 9. Recuperado de: http://cort.as/-3cp5
73

Xxxxxxxxxx

Elección 2012
Crisis 2008-2012
La dimensión económica de la crisis comenzó con el crack financiero de 2008
y se acentuó a partir de 2012, por el efecto de contagio de Estados Unidos y la
caída de los precios de las materias primas. La crisis social fue resultado de las
reformas neoliberales -desregulaciones, privatizaciones y recortes de los
derechos económicos y sociales- que se implementaron en el país desde la
presidencia de Carlos Salinas de Gortari. La crisis moral fue el resultado de la
corrupción -83.1% de los mexicanos creía que la corrupción estaba
generalizada entre los funcionarios (LAPOP, 2014)- y la inseguridad con “la
guerra contra el narcotráfico”, iniciada durante la presidencia de Felipe
Calderón, la tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes en México pasó
de 7.8 en 2007 a 22.6 en 2011 (Banco Mundial, 2016a). Aunque con el
regreso del PRI al gobierno esta tasa se rebajó, la percepción de inseguridad se
mantuvo alta, en 2014 más de la mitad de los mexicanos se sentían algo o muy
inseguros en sus barrios (LAPOP, 2014). Por último, la crisis política fue fruto
de la desafección de los mexicanos hacia la clase política tradicional, en 2014,
66.1% de los mexicanos afirmaba tener poca o ninguna confianza en los
partidos (LAPOP, 2014). (Rivas-Otero, 2019: 227-228)

En las elecciones presidenciales, la coalición Movimiento Progresista


encabezada por López Obrador quedó en segundo lugar, cuestionando su
resultado, argumentando que la coalición ganadora denominada Compromiso
por México, encabezada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el
Partido Verde Ecologista (PVEM), que postuló a Enrique Peña Nieto, había
“comprado” la elección. (Bolivar, 2014: 32)
74

Obrador abandona al PRD


La decisión de López Obrador de abandonar las filas del PRD se dio una vez
emitido el fallo inapelable del TEPJF que daba como ganador a Peña Nieto…
optó por mirar hacia adelante y hacer un movimiento de izquierda
diferenciado a los ya existentes… En una asamblea realizada el 9 de
septiembre de 2012 en el zócalo de la ciudad de México, López Obrador
esbozó el nuevo rumbo de MORENA: transitar de asociación civil a partido
político. (Bolivar, 2014: 36)

AMLO rechaza Pacto por México


Previo a que se firmara el Pacto por México y aún antes de que tomara
posesión del cargo Enrique Peña Nieto, López Obrador recibió ofrecimientos
de firmar dicho pacto e incluir su propuestas de campaña, condicionado a
reconocer como presidente al ex candidato del PRI-PVEM. Su respuesta fue
negativa (Bolivar, 2014: 39)

Chuchos impulsan al pacto por México


El Pacto por México nació por un acuerdo inicial entre el priísta José Murat y
el perredista Jesús Ortega. La idea fue de este último… El argumento de
Ortega fue que el PRI y Peña no podrían gobernar solos ante un Estado sin
control de los territorios, con instituciones en crisis y los monopolios
controlando la economía. (Bolivar, 2014: 39-40)

Obrador candidato de MORENA


Con MORENA hecho partido, López Obrador asegura su candidatura
presidencial para 2018. (Bolivar, 2014: 48)

Xxxxxxxxxxxxxxxxxxx
Estilo de dirección
Entrevistado en 2018 sobre la posibilidad de que se repitiera una guerra sucia
en contra de su imagen, Obrador reconoció que la masiva difamación a su
imagen sufrida en 2006. Le permitió comprender, que la clave para
contrarrestar cualquier campaña sucia y evitar que cunda el miedo, es la
difusión de la información veraz y oportuna.

“Según López Obrador, la estrategia del PAN le hizo cambiar la propia para
irse un poco más al centro y tratar de conseguir votos de la clase media.
Pero, de acuerdo con la segunda entrega del estudio Voto Milenial de
Nación321 la mayoría de los jóvenes nacidos entre 1980 y 2000 considera
75

como falso que López Obrador sea un “peligro para México” (Nación321,
2018).

Andrés Manuel López Obrador siempre ha ejercido un liderazgo de carácter


carismático. Desde el inicio de su carrera política, mostró su compromiso con
un ejercicio honesto de la administración pública. Al capacitar a los comités
locales del PRI en Tabasco, para fiscalizar el desempeño de los munícipes.
También en aquella época impulsó los llamados camellones chontales, para
que los indígenas marginados pudieran sembrar en terrenos de inundación. Y
aprendió del gobernador Enrique González Pedrero, que las obras públicas
impactan favorablemente al electorado.
La salida de Cárdenas y la Corriente Democrática del Revolucionario
Institucional y el proceso que condujo a la creación del Partido de la
Revolución Democrática, fueron consolidando su vocación por los excluidos.
Pero fue en 2006. cuando la campaña sucia del PAN lo llevó a la
radicalización. Convencido de haber sufrido un fraude electoral, convocó a sus
simpatizantes a congregarse el sábado 8 de julio en el Zócalo capitalino.
Desde el 30 de julio instaló un plantón de protesta a lo largo del Paseo de la
Reforma, desde la Plaza de la Constitución hasta la Fuente de Petróleos. En
demanda de un recuento de votos casilla por casilla. La medida fue bien
recibida en la Ciudad de México, pero con el correr de los días, los trastornos
a la circulación provocaron descontento popular. Tras 47 días de caos vial, el
plantón se levantó cuando el Tibunal Electoral había declarado ganador a
Felipe Calderón.
El propio López Obrador admitió que la guerra sucia y el fraude de 2006 lo
desprestigiaron. Y que su impacto alcanzó hasta su siguiente campaña por la
presidencia de la república en 2012. “Nos costó mucho trabajo remontarlo…
fueron años muy difíciles después de 2006, de mucho rechazo porque nos
bombardearon, nos satanizaron y aguantamos” (Nación321, 2018). La guerra
sucia desplegada por Acción Nacional, lo condujo a moverse hacia el centro,
en busca de los votos de las capas medias.

A José Manuel Rivas-Otero, quien estudiaba la evolución en los estilos de


liderazgos en nuevos partidos políticos. Le llamó la atención esta adecuación
estratégica de López Obrador, ante el desfavorable contexto que enfrentó tras
las protestas de 2006. Procedió a compararla con las pragmáticas decisiones
desplegadas por Pablo Iglesias de Podemos y Albert Rivera de Ciudadanos en
la vida política española. Concluyendo que: “en los casos analizados
(Obrador, Iglesias, Albert Rivera), el estilo de liderazgo y los atributos que lo
conforman responden a un comportamiento estratégico que cambia en función
76

del contexto. Cuando los medios de comunicación presionan al líder y su


entorno por actuaciones irregulares o falta de experiencia, éste rebaja el tono
discursivo o trata de mostrarse como un gestor; cuando el partido del líder
accede a cargos de responsabilidad institucional, la necesidad de alcanzar
acuerdos con otros grupos provoca un cambio en la estrategia discursiva; por
último, cuando se publican datos sobre proyección electoral del líder o su
partido, cambia la autoconfianza y la forma en que se apela al grupo de
seguidores” (Rivas-Otero, 2019: 245).

Basave: “AMLO alberga a no dudarlo, un amasijo doctrinario. Cohabitan en


él, vgr., una fascinante mezcla de estatismo y neoliberalismo económico,
abomina la privatizaciones y reivindica el Estado, pero al mismo tiempo
repudia la prolijidad burocrática que caracteriza el aparato estatal, una
paradoja que yo aplaudo y por cuya conciliación hago votos. Y es que
práctica, tal vez inconscientemente, ciertos usos y costumbres neoliberales, la
simplicidad de los esquemas redistributivos -tipo negativa income de
Friedman-, la equiparación de burocracia y corrupción y la renuncia al
endeudamiento, el presupuesto deficitario y, sobre todo, el aumento de los
impuestos. (Basave, 2019: 12-13)
Basave, Agustín (2019) Descifrando a AMLO, el liberal. Proceso, núm. 2210,
10 de marzo, pp. 12-13.

Merino advierte sobre el estilo de López Obrador: “Andrés Manuel cree lo que
dice y dice lo que cree, las dos cosas son ciertas. Cuando a mi me dicen que
finge, digo que no: cada cosa que dice es porque de verdad lo cree. Eso puede
que no produzca acuerdo, pero produce confianza. La gente le cree. (Delgado,
2019b: 16)
Delgado, Álvaro (2019b) “El poder cambia a la gente”. Proceso, núm. 2210,
10 de marzo, pp. 14-17.

Krauze: Conversión amorosa de Obrador


Hace poco más de una década, liquidado el sistema que imperó por setenta
años, apareció un líder social -Andrés Manuel López Obrador- que, desde el
cargo de Jefe de Gobierno del Distrito Federal y más tarde en su campaña
presidencial, siguió el libreto populista. De haber triunfado, hubiese sido el
primer presidente populista (y aún mesiánico) de la historia mexicana.
Han pasado casi seis años desde aquella elección y López Obrador es, de
nueva cuenta, el candidato de la izquierda. Pero algo ha cambiado
recientemente en su estilo personal. El tono y la actitud se han suavizado, el
mensaje se ha vuelto conciliatorio y -en sus propias palabras- amoroso. Se ha
77

atenuado la belicosa prédica contra el “no pueblo”, pero muchos perplejos


ciudadanos, legítimamente, se preguntan: ¿Le ha ocurrido una conversión
religiosa? ¿Se trata de una táctica electoral? ¿O el cambio obedece a un
proyecto político alejado ya del populismo?
López Obrador parece haber experimentado una conversión tolstoyiana (en
sentido estricto, leyendo a Tolstoy, siguiendo su ejemplo). De allí su renuncia
a la confrontación y su cambio diametral de prédica de la indignación
flamígera a la persuasión amorosa. Por otra parte, el viraje tiene un obvio
sentido electoral: AMLO sabe bien que sin el apoyo de las clases medias
difícilmente alcanzará los votos necesarios para triunfar. Lo que no está claro
es la naturaleza política de su cambio. Y no lo está porque no ha hablado de
ella. (Krause, 2012)

Obrador se transformó
López Obrador tiene que lidiar con esta situación. Y no será sencillo. Está
limitado por la izquierda y su nacionalismo revanchista a la vieja usanza, por
su base radicalizada y por la percepción en México de que Peña Nieto fue
demasiado complaciente con Washington, muy a menudo. También está
presionado por la derecha, encarnada en políticos preocupados por una
economía que se debilita -un peso golpeado y una bolsa de valores que
languidece-, en integración don Estados Unidos y la vulnerabilidad del país
ante cualquier represalia trumpiana por pecados reales o percibidos.
(Castañeda, 2018)

Cosificación de la víctima
Las redes sociales cosifican y despersonalizan a la víctima. El acusador reduce
a los individuos a simples cosas susceptibles de ataque y manipulación. La
tecnología digital empodera al agresor y a sus seguidores bajo un contexto de
invisibilidad causando confusión en la víctima (Avilés, 2013: 67-69). La
lejanía propia de las redes, invisibiliza las reacciones emocionales de la
víctima. El agresor disfruta el helado y cruel placer de maltratar sin sentir
culpa. Supone que en el ciberespacio todo está permitido y no existen
restricciones. Hay cierta “relajación y bienestar ante la agresión: obtener lo
que se quiere y cuando lo quiere, sin resistencia ni feedback, no educa la
frustración” (Avilés, 2013: 68). La audiencia también colabora con el daño,
gente desconocida pueden recibir la difamación y replicarla sólo “por
bromear”.
78

Como la verdad factual ya no se puede percibir en las redes digitales, aparece


un problema político y moral. La falsa posverdad se presenta como una lectura
alternativa más de la realidad, ocultando su malicia. Hanna Arendt en “Los
orígenes del totalitarismo” identificó al seguidor ideal del nazismo, como
alguien para quien la distinción entre hecho o ficción, entre verdad y mentira
ha dejado de existir. A diferencia de Foucault, para quien la verdad depende
casi siempre del punto de vista de quien la formula. Y se deriva de un proceso
de construcción social, más que de su correspondencia con una realidad
exterior al ser humano.
Hanna Arendt defiende el espacio de la “verdad factual”, una verdad que
como la científica, debe ser convalidada intersubjetivamente. Como las
estrategias discursivas de las llamadas Fake News, desdibujan la frontera entre
la verdad factual y los discursos veraces. Lo verdadero termina por no ser fácil
de reconocer. Los poderes del sistema atacan la verdad factual, fabrican sus
propios hechos “alternativos” y esparcen la calumnia. Por ello -considera
Arendt- las posibilidades de que la verdad factual sobreviva a la embestida
feroz del poder son muy escasas; siempre corre el peligro de que la arrojen del
mundo, no sólo por un periodo sino potencialmente para siempre.
79
80

También podría gustarte