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República Bolivariana de Venezuela.

Universidad Nacional Experimental “Rómulo Gallegos”.

Maturín – Edo. Monagas.

PNF en fisioterapia.

Catedra: Alteraciones del sistema nervioso I.

Trayecto II. Tramo III.

Informe sobre el tema I: Embarazo, parto y prematuridad.

Profesor: Estudiante:

Dr. Romel Murguey. Stefany Chirico C.I. 31.168.647.

Sección 1.

Maturín, enero del 2023.


Todo inicia con la fecundación de los gametos masculinos (espermatozoides) con los
gametos femeninos (ovocitos secundarios). Este ovulo fecundado es denominado cigoto,
este de va a dividir varias veces (fase de segmentación) mientras se desplaza por las
trompas de Falopio hasta llegar al útero. El cigoto va a pasar a ser blastómero, mórula,
hasta convertirse en una esfera hueca de células que se denomina blastocito. Transcurridos
unos 6 días después de la fecundación, el blastocito se adhiere al revestimiento interno del
útero, por lo general cerca de la parte superior. En la zona engrosada del blastocito, las
células internas se convierten en el embrión, mientras que las externas penetran en la pared
del útero y se transforman en la placenta. La siguiente etapa evolutiva corresponde al
embrión, que se desarrolla en el interior del saco amniótico, bajo el revestimiento del
útero, en un lado. La mayoría de los órganos comienzan a formarse alrededor de 3 semanas
después de la fecundación, lo que equivale a 5 semanas de embarazo. En este momento, el
embrión se alarga, y empieza a entreverse una forma humana. Los vasos sanguíneos
continúan desarrollándose en el embrión y en la placenta. A las 8 semanas de embarazo, la
placenta y el feto llevan 6 semanas de desarrollo. La placenta forma diminutas
proyecciones pilosas, que se extienden hacia el interior de la pared uterina. En estas
vellosidades se desarrollan los vasos sanguíneos del embrión, que pasan por el cordón
umbilical hasta la placenta. Casi todos los órganos terminan de formarse unas 10 semanas
después de la fecundación. Las excepciones son el encéfalo y la médula espinal, que siguen
formándose y madurando durante todo el embarazo. Al final de la octava semana después
de la fecundación (10 semanas de embarazo), el embrión se considera un feto. Durante esta
fase, las estructuras ya formadas crecen y se desarrollan. A las 12 semanas de embarazo, el
feto llena completamente el útero. A las 14 semanas puede identificarse el sexo del feto.
Entre las 16 y las 20 semanas, la mujer embarazada siente por primera vez los movimientos
del feto. Las mujeres que ya han estado embarazadas suelen percibir los movimientos del
feto unas 2 semanas antes que las primigestas. Los pulmones siguen madurando hasta casi
el momento del parto. El cerebro acumula células nuevas durante todo el embarazo y
durante el primer año de vida después del nacimiento.

Algunas mujeres experimentan problemas de salud durante el embarazo. Estas


complicaciones pueden afectar la salud de la madre, la salud del feto o la de ambos. Incluso
las mujeres que estaban sanas antes de quedar embarazadas pueden tener complicaciones.
Estas complicaciones pueden hacer que el embarazo sea un embarazo de alto riesgo. Las
complicaciones frecuentes durante el embarazo son la presión arterial alta, diabetes
gestacional, infecciones, preeclampsia, trabajo de parto prematuro, entre otra. Por esto es
importante recibir cuidados prenatales regulares desde el inicio del embarazo puede ayudar
a disminuir el riesgo de tener problemas, ya que permite a los proveedores de atención
médica diagnosticar, tratar o manejar afecciones antes de que se vuelvan serias. Cuidados
prenatales también puede ayudar a identificar problemas de salud mental relacionados con
el embarazo, como ansiedad y depresión.

El parto se considera a término cuando es entre las 37 a 42 semanas de embarazo, si


es antes de las 37 semanas se considera pretérmino, y si es después de las 42 semanas se
considera postérmino. El parto puede ser natural (eutócico o instrumentado) o parto por
cesárea. Algunas de las complicaciones mas comunes en el parto son cuando el trabajo de
parto no progresa, cuando hay desgarros perineales, problemas con el cordón umbilical,
frecuencia cardiaca anormal del bebe, cuando la fuente se rompe de manera prematura,
asfixia perinatal, sangrado excesivo (síndrome de sheehan). La mayoría de estas
complicaciones durante el parto derivan a una intervención quirúrgica de emergencia para
intentar salvar ambas vidas.

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