Está en la página 1de 3

AMAR COMO DIOS AMA

Juan 15:12-14
Y este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado.
Nadie tiene amor más grande que el dar la vida por sus amigos. Ustedes son mis amigos
si hacen lo que yo les mando.

Si conocemos a Dios conoceremos lo que es el verdadero amor. Él nos ama y nos da su


amor para amar a los demás. Cuando ponemos condiciones, juzgamos o condenamos a
otras personas, mostramos falta de compasión. Si no perdonamos, dejamos de operar en
el amor de Dios y caminamos de acuerdo con la naturaleza caída y pecaminosa del
hombre que no ha nacido de nuevo.

¿Cuáles son algunas características del amor de Dios?

Hoy veremos tres de ellas:

1. Dios nos ama sin condiciones :

Romanos 5:8
Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos
pecadores, Cristo murió por nosotros.

Dios muestra su amor por nosotros, cada mañana, al permitirnos abrir los ojos y
respirar, sin importar lo que hicimos bien o mal. No importa que tan buenos o malos
seamos, su misericordia es nueva cada día, con cada uno de nosotros. Por eso,
debemos amar a los demás viéndolos como Dios los ve; como valiosos, preciosos y
únicos.

2. Dios nos ama pacientemente:

2 Pedro 3:9
El Señor no tarda en cumplir su promesa, según entienden algunos la tardanza. Más
bien, él tiene paciencia con ustedes, porque no quiere que nadie perezca, sino que
todos se arrepientan.
Dios conoce nuestra condición y es paciente con nosotros. Él no nos condenó
inmediatamente, sino que nos dio una segunda oportunidad, a través de su hijo Jesús.
Su voluntad es que todos se arrepientan y alcancen la salvación. Por esta razón
debemos ir y decirles a todos que Dios es un Dios de amor y de segundas
oportunidades. Enseñémosle a todos que Jesús ya pagó por nuestros pecados y que,
cuando nos arrepentimos, somos libres de nuestro pasado.

3. Dios nos ama con compasión:

Mateo 9:36
Al ver a las multitudes, tuvo compasión de ellas, porque estaban agobiadas y
desamparadas, como ovejas sin pastor.

Las escrituras nos enseñan que Jesús tuvo compasión por las multitudes porque las
miraba perdidas y sin esperanza. Esto nos dice que nosotros también debemos tener
compasión por los demás. Si vemos a alguien en pecado y perdido, nuestra reacción
no debe ser de juicio, sino de compasión. Compasión no es lo mismo que lastima. La
lastima no necesariamente lleva a una acción. En cambio, la compasión si actúa, y
manifiesta la naturaleza amorosa de Dios.

Amar y perdonar

Efesios 4:32
Más bien, sean bondadosos y compasivos unos con otros, y perdónense mutuamente,
así como Dios los perdonó a ustedes en Cristo.

Así como Dios nos ha perdonado en Cristo, nosotros debemos perdonar a los demás. En
vez de buscar venganza, cuando nos hacen un mal, debemos ser pacientes, compasivos y
amar como Dios ama. Desafortunadamente, muchas personas no conocen el amor de
Dios. Por eso, Jesús nos mandó a predicar las buenas nuevas al mundo entero.

Dondequiera que usted se encuentre, ya sea en el trabajo, en la calle o en el colegio,


manifieste el amor de Dios. Acuérdese que ese amor es sin condiciones; no juzga, es
compasivo y paciente. Así las personas conocerán que Dios habita en usted y vendrán a
los pies de Cristo, atraídos por el amor.

Si usted no ha recibido a Jesús, hoy es su oportunidad.

ACTIVACIÓN
El líder hará el llamado de salvación, luego guiará al grupo a arrepentirse por no estar
mostrando el amor de Dios. Orará para que el amor de Dios se derrame sobre cada uno de
los asistentes.
OFRENDA
2 Corintios 8:2-3

También podría gustarte