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Los defensores de derechos humanos ambientales protegen y promueven los derechos humanos
relacionados con el medio ambiente. Algunos son abogados o periodistas, mientras que otros son
personas comunes que viven en áreas remotas. Representan a comunidades indígenas y tribales que
defienden sus tierras amenazadas por proyectos como represas, tala de árboles, minería y extracción
petrolera. Todos buscan proteger el medio ambiente, del cual dependen muchos derechos humanos. Es
importante que disfruten de los derechos a la libertad de expresión y asociación para contribuir a la
protección del medio ambiente. Así, se establecería un círculo virtuoso entre los derechos humanos y el
medio ambiente, donde el ejercicio de los derechos humanos protegería el medio ambiente y este
garantizaría el pleno goce de los derechos humanos.
Durante años, las personas defensoras de la tierra y el medio ambiente han estado en la primera línea
de defensa en contra de las causas e impactos del colapso climático.
La crisis climática es una amenaza global a nuestra existencia. A medida que aumenta, muchos de los
otros serios problemas en el mundo actual, empeoran.
Las personas defensoras de la tierra y el medio ambiente son la primera línea de defensa contra el
colapso climático. Han desafiado industrias irresponsables que destruyen bosques, cielos, humedales,
océanos y zonas de biodiversidad en riesgo.
La Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas ha señalado que la violencia ha incrementado,
la reforma agraria incentivo el cambio de cultivos ilegales a cosechas legales.
Desde el 2018, Filipinas se ha vuelto cada vez más mortal para los activistas, y ha sido señalado como
uno de los peores lugares en Asia por sus ataques a defensores.
En 2019 con el incremento de asesinatos a 43 de las personas defensoras por parte del gobierno.
En América Latina, más de dos tercios de los asesinatos a defensores de derechos humanos ocurrieron.
En 2019, se registraron 33 muertes solo en la región amazónica, con casi el 90% de los asesinatos en
Brasil. En Honduras, los asesinatos aumentaron de cuatro en 2018 a 14 el año pasado, convirtiéndose en
el país más peligroso per cápita en 2019.
La minería fue el sector más letal, con 50 defensores asesinados en 2019. El 85% de los cuales fueron
registrados en Asia. La tala fue el sector con el mayor aumento de asesinatos a nivel mundial desde
2018.
Europa tiene menos víctimas, con solo dos asesinatos en 2019. Los pueblos indígenas son especialmente
vulnerables, representando el 40% de las víctimas. Entre 2015 y 2019, más de un tercio de los ataques
mortales fueron dirigidos a los pueblos indígenas.
Más de 1 de cada 10 personas defensoras asesinadas eran mujeres. Las mujeres que actúan y alzan la
voz pueden también enfrentar amenazas específicas a su género, incluida la violencia sexual.
En 2020 y 2021, Perú sufrió 12 asesinatos relacionados con la defensa ambiental, principalmente en la
Amazonía, donde persistieron delitos como la tala ilegal, la minería ilegal y el tráfico de vida silvestre.
Estos crímenes estuvieron conectados con otros delitos organizados como el narcotráfico y la trata de
personas.
Las y los defensores ambientales están expuestos a diversas formas de violencia como amenazas,
detenciones ilegales y agresiones. Además, las mujeres en particular se enfrentan a formas de violencia
específicas de género, incluida la violencia sexual.
Se han implementado medidas en Perú para proteger a los defensores, como el registro de situaciones
de riesgo y mecanismos intersectoriales de protección.
Sin embargo, aún hay una agenda pendiente para lograr una defensa realmente efectiva, como la
ratificación del Acuerdo de Escazú, el cual garantiza participación ciudadana y justicia ambiental, así
como el fortalecimiento de la protección de las y los defensores ambientales.
Link: https://preveniramazonia.pe/infografia-las-personas-defensoras-ambientales-en-la-amazonia-
peruana/