En nuestro día a día, tomamos ciertas actividades como indispensables para nuestra

rutina. Estas serían como levantarse temprano y desayunar; saludar con un “hola” o “buen
día”, vestirse de cierta manera dependiendo la actividad que vayamos a realizar, entre
otras. Todas estas actividades las tomamos como algo natural, como algo inamovible y
necesario para la vida. Pero hay que tener en cuenta que muchas de nuestras
costumbres no son iguales en otras sociedades. No hace falta irse a otro continente u otro
país para darnos cuenta de estas diferencias. A veces, al visitar una casa ajena vemos
cosas que para nosotros son extrañas; pero para los que habitan en esa casa son
totalmente naturales. Esto se debe a que cuando nacemos, se nos enseña y transmite
ciertos saberes que se consideran indispensables. Sea desde la alimentación, la higiene,
la forma de interactuar con el otro, la forma de comunicarnos; etc., y con el paso del
tiempo lo vamos asimilando a nuestra rutina cotidiana.
La escuela no se escapa de esta naturalización. Desde que tengo memoria, sabía que
en algún momento tendría que ir a la escuela. Y siempre por la misma razón: “tenes que
estudiar para ser alguien en la vida”, como decía mis abuelos y mis padres. Y hasta el día
de hoy, siempre que escucho la palabra escuela, siempre imagino un edificio grande con
varias aulas, un patio con un mástil en el medio, donde se hacen los actos en los días
patrios; la maestra con su guardapolvo, libros y lapiceras en los bancos. Pero esto no
siempre fue así. La escuela como institución educativa no estuvo desde el principio de la
historia, sino que fue algo que se fue formando a través de una necesidad histórico-
cultural. Por eso, para poder entender su recorrido, hace falta desnaturalizar a la escuela.
Es ver las formas de educación de nuestros antepasados, haciendo hincapié en el
carácter histórico; es pensar de otra forma a la que estamos acostumbrados. Así,
podemos notar que la escuela no aparece desde el principio, pero la necesidad de educar
a las generaciones más jóvenes siempre estuvo latente.