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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN


UNIVERSITARIA
MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA CULTURA
UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LAS ARTES
PNF: DANZA
CREA ARGIMIRO GABALDÓN

BIOÉTICA Y MODELOS DE DESARROLLO


Cuarto Momento: Consumo Vs Vivir Bien

PARTICIPANTE:

Erika Vidal 25469000

FACILITADORA:

Yuly Orellana
Araure, enero de 2020

Hoy en día todo es consumido y desechado, hay un concepto que justifica el que los
productos que nosotros compramos, tengan una vida poco útil y duradera, se denomina:
Obsolescencia Programada, nos hacen creer que las cosas dejan de funcionar porque si, y
que lo lógico seria comprar otro nuevo producto, desde los años veinte lo comerciantes
acortaron la vida de los productos para de esa forma vender más y obtener más rápido las
ganancias, ya después de perfeccionados los productos, los ingenieros se vieron obligados a
inventar o descubrir mecanismo que acorten la vida de tales productos, es decir, se
atrasaron en relación de los descubrimientos hallados hasta entonces.

Para la sociedad de consumo y las grandes industrias capitalistas no es viable que surja
una economía sin la obsolescencia programada. En 1924 salió la primera notificación
mundial donde se decía que tenían que controlar la producción de bombillas eléctricas con
la intensión de repartirse el pastel de mercado mundial. Thomas Édison generó una
bombilla que duraba 1000 horas, con el pasar del tiempo esto fue mejorando, ya para 1924
se anunciaba con orgullo 2500 horas de vida útil para una bombilla, y los fabricantes
destacaban la longevidad de sus bombillas, sin embargo, más adelante se generó un decreto
entre las productoras fabricantes de bambillas para llegar esta vida útil solo a 1000 horas y
así a los fabricantes les todo hacer experimentos para crear una bombilla más frágil, los
comerciantes multaban a los productores que no cumplían las reglas severamente.

A medida que a obsolescencia programada empezó a socavar la mente de las personas la


vida útil empezó a caer, y en solo dos años paso de 2500 horas a menos de 1500. Ya en
1940 el cartel ya había conseguido su objetivo de las bombillas estándares de 1000 horas Se
vio también en las linternas, al principio una bombilla duraba tres pilas después, obligaron a
que la bombilla durara casi el mismo tiempo que la pila. Así que las bombillas eléctricas
fueron el primer producto en sufrir esta obsolescencia programada. No obstante, la
obsolescencia programada surgió al mismo tiempo que la producción en masa y la sociedad
de consumo, en el marco de la evolución industrial.

Otro gran ejemplo en relación a este concepto nos lo brinda el empresario


estadounidense Henry Ford, quien fue el creador del modelo Fort T, y este vehículo a
finales de los años veinte la mitad de los carros del mundo eran de este señor. Para competir
con Ford, los de la General Motors optaron por una estrategia diferente el lugar de hacer el
nuevo Chevrolet tan fiable y duradero como el modelo T, le darían un giro radical y
fundamentalmente estético. Con varios diseños modelos y colores, y aun precio un poco
más bajo que el modelo T. fue gracias a esto que la Ford retiro el modelo T del mercado y
después adopto la misma estrategia de la General Motors. Así estas dos empresas sacaron
modelos cada año, aumentando de esta manera la economía de una forma muy rápida.

En 1929 la crisis del wall Street freno de seco la insipiente sociedad de consumo y llevo
a los estados unidos a una profunda decesión económica, en 1933 el desempleo se situó en
el 25 por ciento y las colas ya no eran para comprar sino para pedir comida y trabajo. Fue
también en este año el presidente Roosevelt introdujo su programa New Deal con la
intención de acabar la gran depresión que ocurría en aquel entonces, a través de enormes
inversiones en obras públicas, todos querían ganarse la ayuda que recibían para salir
adelante, así su capacidad de compra era vital para estimular el comercio. Sin embargo, no
todo el mundo confiaba en el New Deal.

Desde Nueva York llegó una propuesta radicalmente diferente del inminente
inmobiliario Bernal London, sugirió salir de la depresión haciendo obligatoria la
obsolescencia programada, era la primera vez que el concepto aparecía escrito. London
planteaba que todos los productos tuvieran una vida limitada y una fecha de caducidad
después de la cual se considerarían legalmente muertos, de esta manera los consumidores
los devolverían a una agencia del gobierno para su destrucción, quien se quedara con el
producto después de caducado pagaría una multa. Según este inmobiliario esta etapa de
obsolescencia programada reviviría el consumo y la necesidad de producir mercancías,
London pensaba que con la producción la gente seguiría consumiendo y se seguiría
produciendo, por un lado, habría trabajo para todos. intentaba equilibrar capital y trabajo
London era judío y llego en el siglo XX a NY sin embargo so se sabe si London por medio
de la obsolescencia pretendía maximizar los beneficios y ayudar a los parados, pues este
hombre participo en muchas obras de inversión social, como escuelas para niños judíos
pobres entre otras cosas no obstante la obsolescencia programada no fue obligatoria, fue
hasta los años 50 la obsolescencia programada resurgió pero con un giro crucial, ya no se
trataba de obligar al consumidor sino de seducirlo.
En el mundo europeo se preocupaban porque el producto durara bastante, el enfoque
americano fue lo contrario, ya que era el comprar y tener las cosas más nuevas, incluso se
podría venderlas de segunda mano y así acceder a otra nueva, la gente se acostumbra a la
perspectiva de lo nuevo bonito y moderno.

Con el pasar de los años esta Obsolescencia Programada se ha hecho parte del común, es
decir, ahora es la gente es la que busca esta obsolescencia en los productos, sin embargo,
puede que sea una obligación inherente en el modelo de consumo actual, puede que sea por
falta de dinero, en la actualidad es bien sabido que las cosas que duran un poco más de
tiempo son extremadamente caras en comparación con lo que tiene menos vida útil. Sin la
obsolescencia programada no existirían muchas cosas a los que la sociedad esta
acostumbrados.

El economista francés Serge Latouche, partidario del decrecimiento afirma que vivimos
en una sociedad de crecimiento cuya lógica no es crecer para satisfacer las necesidades,
sino crecer por crecer, Crecer infinitamente, con una producción sin límites. Y para
justificarlo este consumo hay tres instrumentos fundamentales: La Publicidad, La
Obsolescencia Programada y el Crédito. En la actualidad son muy usados los créditos,
utilizamos créditos para comprar cosas que ciertamente no necesitamos. Los críticos de la
sociedad del crecimiento de que esta sociedad no es sostenible a largo plazo, pues una
sociedad con un crecimiento ilimitado no es compatible con un planeta el cual tiene
recursos limitados, sin embargo, en la realidad cotidiana de la actualidad, todas estas
personas tienen este nefasto pensamiento económico. La sociedad de consumo va muy
rápido, y es algo que se salió de control, así que muchos críticos piensan que va a llegar a
su fin tal vez de una forma no tan agradable. La teoría del decrecimiento de Latouche
propone abandonar totalmente el crecimiento, la esencia del decrecimiento se puede
resumir, en una palabra: reducir. Reducir el despilfarro, la sobreproducción el sobre
consumo al reducir el consumo y la producción podemos liberar tiempo para desarrollar
otras formas de riqueza que tienen la ventaja de no agotarse al usarlas.

Los ingenieros de la vieja escuela que hacer los productos menos útiles era algo absurdo
y que estaba en contra de la ley natural el abuso de los recursos que la tierra nos da, no
obstante, estaban bajo presiones que debían cumplir, la destrucción de un producto se
puede programar científicamente. Hoy en día la obsolescencia programada se enseña en las
escuelas de diseño e ingeniería. En 1970 salieron a la luz “la garantía” a los productos, esto
fue una guerra que duro por veinte años y fue un golpe duro para la obsolescencia
programada.

De igual forma existían naciones en el que su desarrollo se determinaba bajos diferentes


métodos, como por ejemplo la Unión Soviética que a finales de los cincuenta la economía
comunista no se basaba en el libre mercado, sino que estaba planificada por el estado, no
obstante, era poco eficiente y sufría una falta de recursos crónica, entonces en este sistema
la obsolescencia programada no tenía ningún sentido. En la Alemania Socialista del Este,
también se aseguraba que los productos duraran más tiempo sin embargo después de la
caída del muro de Berlín todo esto cambio.

La pregunta es ¿en dónde acaban todos estos residuos tecnológicos hoy en día? Es en
Ghana donde llegan todos estos residuos de aparatos electrónicos, llegan a pesar de un
tratado internacional que prohíbe enviar residuos al tercer mundo, sin embargo los
mercaderes utilizan un simple truco que es de declararlos “productos de segunda mano” y
así los envían y luego los ghaneses lo comercian así, en Ghana se repara todo lo que se
pueda reparar, sin embargo, más del 80 % de estos residuos que se reciben no se pueden
reparar y quedan abandonados en vertederos por todo el país, y Ghana está ahora sumida
en la contaminación.

Es de señalar que se puede luchar en contra de la obsolescencia programada,


replantando la ingeniería y la producción de los productos, bajo el nuevo concepto llamado
“De la Cuna a la Cuna” por los alemanes Braungart y McDonough, afirmaron que si las
fábricas funcionaran como la naturaleza la propia obsolescencia quedaría obsoleta.

Los productos se eligen bajo decisiones y formas de trabajo que tienen que ver con la
vida de las otras personas y con la de nosotros mismos, un claro ejemplo de esto serían los
productos transgénicos, los cuales son modificadas genéticamente para que resistan los
ataques de pesticidas y a los insectos.

La producción de alimentos transgénicos en masa que producen las transnacionales,


hace que las tierras de estas empresas se extiendan, los herbicidas y pesticidas afectan al
campesino, este a su vez es obligado a emigrar a las ciudades, lucha en defensa de sus
tierras para que no se las quiten, es tan execrable este contexto que hasta los empresarios y
terratenientes falsifican títulos de dominios y esto hace que se generen conflictos. Antes era
pacífico que se le hablaba a la gente, sin embargo, ahora utilizan bandas armadas.

El sistema natural se ve amenazado por el consumismo, no obstante, hay algo que se


puede hacer y que reúne todo el carácter de consciencia que ameritan tener las productoras
con respecto a medio ambiente y a la explotación del hombre. En algunas partes de sur
América la gente considera que vivir en la ciudad es un modo moderno de vivir, pues no
existe la consciencia hacia las leyes naturales, entonces el agricultor se siente menoscabado
por los que están al poder.

El Desarrollo sustentable; abarca una consciencia amplia hacia la biodiversidad del


planeta y sobre todo el trato justo entre productores, mercaderes o industriales, la
producción agrícola nacional podría de alguna manera frenar a las empresas extranjeras, las
familias tendrían que producir sus alimentos, ganaderos y avicultores con consciencia
natural. Si se fomentan proyectos y prácticas que respeten el medio ambiente, vamos a
tener un futuro sustentable.

El desarrollo sustentable fundamentalmente se basa en la consciencia de consumo, es


decir, estar consciente del origen del producto, para de esta manera no apoyar al
subdesarrollo natural del modelo productivo. En tanto que no existe una negociación
comercial clásica, es decir, el precio no es el factor del negocio, sino de los gastos reales
causados por el consciente de la biodiversidad.

El problema económico que tiene los países subdesarrollados parte de que los gobiernos
se concentran más en la exportación de la materia prima, antes que de la producción para
las necesidades que necesitan estos países, las empresas pasan por encima de las leyes de
los gobiernos. Sin embargo, no hay que olvidar la idea de desarrollo y progreso, en este
sentido el tema no es capitalismo, sino el por qué nosotros vamos a adoptar unas
características de una modernidad tardía.

Cada vez que elegimos algo aunque no lo sepamos estamos apoyando un modelo de
producción y esa elección realizada por muchas personas, habría un modelo de sociedad si
hay un gran productor, esto hace que hayan muchos productores pequeños, si se trata de
una multinacional o como una cooperativa, si los productos son transgénicos u orgánicos, si
se contamina y no se respeta el medio ambiente, si hay un solo comercializador que se
queda con una gran tajada de la ganancia, entre otras.

Sin embargo, las cosas pueden ser de otra manera , hay alternativas, pero que esas
alternativas sobrevivan tiene que ver con distintos factores , no solo juegan los grandes
intereses políticos y económicos , las personas dentro de nuestros lugares podemos elegir
muchas formas de sociedades, desde la perspectiva consumidora y también desde la
productora, consciencia natural, es de suma importancia la preservación del medio
ambiente, tomar consciencia, exigir justicia ante las personas, las cosas pueden cambiar,
podemos generar cambios en ese estilo, con la intención de que sea justo, inclusivo y
sustentable este nuevo modelo de desarrollo.

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