El poder

de
la soledad
Morelia Mich. a 26 de octubre del 2020 Braulio Adriel Salgado Arce No. de lista: 37 1F
MECATRONICA Lectura Expresión Oral y Escrita I
Prologo

David Campos era un joven que vivía rodeado de la felicidad y del amor de otras personas,
lo hacían sentir vivo, su motona rutina le complacía porque tenía la oportunidad de rodearse
de sus amigos y así como él estaba para ellos en cualquier momento pensaba que esas
personas compartían el mismo pensamiento.

Hasta que un día tendría que emprender un camino en el que se apartaría de ellos y pondría
aprueba la palabra de sus amigos y su capacidad de autosuficiencia.

¿No les ha pasado que habían estado postergando algo durante mucho tiempo, y cuando
menos lo esperan es necesario saberlo y hacerlo por su propio bien? Que tenían noción de
ello, pero aun así seguían ignorándolo. Bueno, esa fue la lección que nuestro protagonista
debió aprender de la manera, tal vez, menos adecuada.
 Capítulo I

EL DILUVIO

“Ave María purísima. Sin pecado concebido padre. Y bien, dime ¿Qué es lo que te aqueja?
Ahh padre, por dónde empezar”

David Campos nació en un ambiente familiar en el cual se respiraba el amor, la unión y la

felicidad, al menos eso a él le contaban, fue creciendo rodeado siempre de la compañía de
sus padres, abuelos, tíos y primos. Por lo cual fueron vistas absolutamente todas sus etapas
de vida, fue criado con valores y modales, tuvo toda la atención de sus padres, los consejos
de sus abuelos y regalos geniales de sus tíos. Y que para nada era introvertido, era un
pequeño muy empático y muy inteligente, entre sus gracias eran el baile, el canto, y los
chistes que de inmediato le hicieron ganar el cariño de toda su familia cercana o lejana.

- ¡Que vida tan genial! - exclamaba el pequeño David desconociendo lo que le aguardaba.

Llegaría la etapa escolar la prescolar para ser exactos, la aventura comienza.

- ¿Qué es este lugar?, ¿Quiénes son ellos? - eran las preguntas que rodeaba la mente de
David mientras esperaban la hora de entrada.

Su madre se agacho a la altura de sus ojos y le dijo:

-David aquí te vas a quedar solo algunas cuantas horas, vendré por ti al rato. - A lo que
David respondió:

-No mami no me quiero quedar aquí, quiero ir contigo. - Su madre respondió

-Hijo, tienes que quedarte, conocerás muchos amiguitos con quien jugar, a tus adorables
maestras que te enseñaran mucho jugando y riendo. –

Entre lágrimas suena el timbre en entrada para la escuela, David debe despedirse de su
mama para conocer un mundo totalmente nuevo.

El primer día, fue un lleno de nervios y miedo debido a que todo era desconocido y sabemos
que todo ser humano le teme a lo desconocido, pero hasta que una persona rompió el hielo
y susurro cerca de David:
-Holaa, soy Said, ¿cómo te llamas? – A lo que David respondió un tanto tímido:

-Braulio- y Said responde:

-Si quieres podemos ser amigos- A lo que de inmediato respondió David

-Siii claro. -

Durante todo el día se acompañaron los dos nuevos amigos, la maestra noto su unión a lo
cual indico una actividad pequeña para integrar a más compañeritos y se conocieran; esto
sirvió para que Said y David hicieran más fuerte su amistad y al mismo tiempo conocieran
a más amiguitos como fue Juan, Dafne y Geovanni. Tal vez no era muy incluyente con las
niñas porque ¡Ay no, ugh, que asco las niñas!

Estos últimos compañeros fueron sus compañeros de juego y diversión los primeros 3 años
de preescolar, sonara mal, pero, a esa edad los niños solo les interesa alguien que juegue
con ellos, y no tanto alguien que les aconseje o los comprenda. Es aburrido para ellos.

El fin del ciclo escolar se llegó, se afianzaron esas amistades, pero era más que nada para
divertirse y jugar. Fue entonces que David dijo:

-Ja, bueno después de todo no es tan mala la escuela. –

Nuevo ciclo escolar, nueva etapa, y cambios en el físico y personalidad de David. Se fue la
timidez y la inseguridad para conocer a las personas, pero, ¡WOW! ¿Qué sucedió contigo?
Al parecer la alegría y seguridad propia hizo crecer tu corazón que ahora también abarca
tu estómago, no sé, amm, estas robustito, GORDO, es la palabra adecuada para describirlo.
¿Todo seguirá siendo igual? Veamos.

David entraría a una nueva escuela, pero ya con una experiencia satisfactoria en
preescolar, una voz en su cabeza decía:

-Fue increíble todo este tiempo, mucha alegría y diversión. Pero… una vez más se repite el
proceso, nuevo ambiente, nueva gente y el doble de gente. Naa, estaré bien.

Y fue aquí el inicio del verdadero trauma de David. Los primeros 4 años de primaria,
alrededor de los 6 a 10 años de edad la vida de David fue el parteaguas para formar a la
persona de hoy en día. A la primaria que llego tuvo un grupo muy conflictivo, y los problemas
no tardaron en comenzar. El primero fue que a David le encantaban los superhéroes y
videojuegos, tenía un gusto y obsesión por ellos que los hacia resaltar en su personalidad
y había dos personas que realmente empataban en gustos y que llegaron a ser amigos,
esos chicos eran Omar y Daniel, pero en su mayoría, había otra parte de personas que se
burlaban de el de una manera muy cruel; rayándole las libretas, escondiendo su mochila,
insultarlo con groserías. Otro problema que fue el más grave fue el de su físico, “albóndiga”,
“ñaña”, “bola de manteca”,” p#$% GORDA”, sumándole que, al ser el más inteligente,
aplicado y el mejor promedio del grupo agregaban insultos como “nerd”, “cerebrito” y al ser
sobreprotegido en exceso por su padre también le decían “niña” o “niño de papi”. Además
de que era golpeado en su escuela por su obesidad, y todo esto incremento
exponencialmente al decirle los sentimientos a la chica que le gustaba, y lo terminara
despreciando de una manera fría e inhumana, insultándolo por cómo era y por la apariencia
que tenía.
Además, sufría bullying en su propia familia, de su hermano y primos principalmente, y todo
esto trajo consigo que David contrajera un odio consigo mismo, una inseguridad enorme
por lo que era, tanto física y mentalmente.

David les rogaba a sus padres que lo inscribieran a un deporte, futbol o karate, para poder
tener la aceptación de su grupo, adelgazar y conquistar a la niña que le gustaba, pero lo
único que sus padres le decían era:

-Si, lo que quieras yo te inscribo cuando tú quieras. - Pero solo eran largas que nunca
llegaron y las excusas que le decían eran:

- Ahorita no, después. Tú quieres todo pues hijo, ¿y tu hermano qué? No tengo dinero. –

O le decía a su mama:

-Mamá quiero ponerme a dieta, quiero bajar de peso. – A lo que mama le contestaba: -
Estas muy chico para eso. –

Pasaba el tiempo y su papá le decía a su mama y David:

-Amor, mira no más, este niño está muy gordo, parece pelota, ¡Ya no le des de comer! –

Realmente no había lugar y tiempo donde él no se sintiera mal por su cuerpo, porque fuera
en su casa, en la escuela o en la calle, había insultos terribles o la clásica descripción de
“gordito”.
Y cuando no pudo más, de tanto coraje y tristeza, en su escuela decido enfrentarse a golpes
con el principal alumno que lo molestaba, pero esto solo ocasiono que las burlas
incrementaran debido a que perdió el combate con aquel abusador. También golpes y
castigos de sus padres debido a que la maestra los reporto con el director de la escuela al
verlos pelear.
Fue una etapa de desesperación y coraje demasiado grande, esto llevo a que David formara
una coraza de inseguridad miedo y odio contra él la cual no dejaba que alguna otra persona
lo conociera realmente.
Comenzando el cuarto año de primaria hubo problemas internos de administración escolar,
los cuales llevaron a que varios maestros renunciaran y bajara el nivel de educación que
impartían. Esto orillo a que los padres de David buscaran una nueva escuela con un buen
nivel académico y mejor aún que la anterior.

Y Hasta ese momento, David no había considerado a nadie como su amigo, puesto que
pensaba que toda aquella persona con lo que se había topado con su misma edad lo
trataban cada vez peor.

Pero el día era inevitable, día uno de clases en su nueva escuela, estaba super nervioso,
cruzaba los patios en busca de su nuevo salón y observaba a todos los alumnos tan
asustado, hasta que finalmente llego a su salón en compañía de su mama y ella le explico
a la maestra toda la situación y la maestra acepto encantada a David y les dijo:

-Si no hay problema señora no se preocupe, este será el nuevo salón de su hijo y
bienvenidos. –

-Gracias maestra y se lo encargo mucho- le contesto la madre de David

-Si señora, no se preocupe. –

David pasa a su nuevo salón, acompañado de la maestra, todos lo observan fijamente y la

maestra le dice:

-Hijo, siéntate ahí mira, y ya al rato nos presentamos ¿ok? –

Mientras la profesora proseguía con la clase un chico volteo hacia él y le dijo:

-Pssst ¿Cómo te llamas? -

-David- le contesto
- ¿Te gusta el futbol? Nos hace falta uno para estar parejos. - A lo que David contesto:

-Si, está bien. –

Y de allí hasta el receso tomaron atención y apunte de la clase hasta la hora de recreo.

Cuando por fin fue recreo, salieron del salón, llamaron a David y le dijeron que lo
acompañaran. Y en la cancha de futbol se presentó el chico que le había hablado en clase
y le dijo:

-Yo soy Oscar, él es Pablo, el Andrés y aquel es David. – y al presentarse chocaron puños
con él. Y se acercaba otro chico y Oscar le dijo:

-Ahh, y él es Abraham. – Chocaron puños también y Oscar prosiguió y le dijo:

-Nosotros ya estamos completos, pero a ellos les hace falta uno ¿porque no vas? – David
acepto muy tímido y alguien del otro lado de la cancha grita:

- ¡Heeey tú! ¡Vente pa´aca eres de mi equipo! A lo David se acercó a él y le dijo:

- ¡Qué onda!, lo siento ¿Cuál era tu nombre jaja? - A lo que David respondió, y ese otro
chico le dijo:

-Ok David, yo soy Marco, él es Isaac, el Iván, aquel de allá es Emiliano y este es Axel- Ellos
lo saludaron y comenzaron a jugar.

De alguna u otra manera a David le interesaba mejorar en la única cosa que podía tener
aceptación en su escuela, que era el futbol, así que busco a su abuelo, un ex futbolista de
gran calidad de juego y experiencia, y su abuelo lo ayudo a ser mejor jugador de lo que era,
y cuando llego el momento, ya no era tan difícil para David, aunque aún tenía mucho que
mejorar.

Y durante el juego no le fue mal, realmente fue un juego con mucha participación de su
equipo y el, y gracias a eso David fue el autor de los dos goles de la victoria.

Con eso sus nuevos compañeros lo empezaron a juntar más en especial Marco, y gracias
a ellos pudieron conocer a otros compañeros, es el caso de Uri, Ángel y Eduardo, que al
igual que el eran grandes fans de los superhéroes y el cine. Poco a poco fue conociendo a
todo el grupo chicos buena onda y chicas muy guapas y dulces. Realmente no había nadie
que lo molestara o lo criticara, al contrario, lo buscaban o lo integraban, pero él seguía con
esa coraza de inseguridad y baja autoestima, y procuraba que nadie lo conociera realmente
como persona, tan solo dejaba ver su inteligencia y responsabilidad con la escuela.

Así se fue formulando una idea, se le había ocurrido ser el amigo, apoyo y hombro de todos
ellos, cualquier cosa que ellos necesitaran David estaría ahí para ayudarlos en lo que él
pudiera, oírlos, consolarlos, tal vez enseñarles o aconsejarlos. Y de esa manera sus
compañeros lo considerarían como alguien importante y querido para ellos, lo cual eso no
les permitirá dañarlo de cualquier forma. Y de esta manera superar sus miedos, puesto que
recordó una frase que le había dicho su abuela:

-Lo que hagas de corazón por los demás, Dios te lo recompensara con algo más grande. -

Y con esa idea comenzó socializar más aun con sus compañeros, conocerlos, ganarse su
confianza y empezar a ayudarlos con cosas pequeñas, con dudas que tenían para hacer
sus trabajos escolares y cosas por el estilo, de esa manera iba aumentando la confianza y
la estimación que tenían en él. Y la primera persona que abrió su corazón para desahogar
lo mal que la estaba pasando en esos momentos fue Marco.

Un día, en la hora de salida, lo vio con los ojos cristalinos y le pregunto:

-Oye, ¿Estas bien?, ¿Qué pasa? - A lo que Marco contesta:

-No nada solo, tenía polvo en el ojo. - A lo que David contesta:

-Puedes confiar en mí, nadie lo sabrá, pero si quieres guardártelo está bien. –

Se limpio los ojos, y le comenzó a contar, que su hermano mayor había fallecido hace 3
días, que realmente lo extrañaba puesto que él era quien se quedaba con él para hacer
tareas y llevarlo a futbol y a natación.

David lo único que hizo fue consolarlo, escucharlo y decirle que en la tenía un amigo en
quien confiar, a lo que Marco contesto:

- ¿Por qué siempre eres tan misterioso?, no lo sé, cuando las personas se te acercan, en
tu rostro se ve inseguridad, pero cuando ves alguien pasarla mal, eres totalmente diferente-

A lo que David responde:

-Solo trato que no me lastimen-

- ¿Cómo? No entiendo- Contesto Marco y mientras se dirigían a la salida. David le explico
de una manera muy resumida lo que había pasado los últimos cuatro años en su anterior
escuela y en su familia también. A lo que Marco, contesto:

- ¿Por qué harían eso?, eres una gran persona y excelente amigo. Te diré algo, nunca había
encontrado a una persona con la que me identificara totalmente, que me escuchara y
comprendiera. Si tú lo quieres podemos empezar a juntarnos más, yo te puedo ayudar a
corregir todo lo que no te gusta de ti, y cualquier persona que intente dañarte no lo
madre#$os, ¿ok?

David acepto y significo mucho para el que Marco dijera eso, durante el resto de la primaria,
él y Marco a lado de otros amigos, empezaron a juntarlo más, a escucharlo, conocerlo y
darle consejos para que fuera la mejor versión de él. Y David respondía el gesto de la misma
manera con sus amigos y compañeros.

Solo fue cuestión de unos meses para que David se adaptara y mostrara realmente como
era realmente, y con ayuda de Marco y sus amigos superara el miedo de mostrar su
personalidad, sus gustos y sus pensamientos u opiniones. Y no debe importarle lo que la
demás gente piensa acerca de ello.

Socializaba y jugaba más con las chicas, platicaba con ellas, se juntaba en ocasiones con
ellas, hasta logro tener amigas muy interesantes y guapas, incluso un par de novias que a
pesar de que terminaron bien, le sirvió como aprendizaje y conocimiento de cómo debía ser
una relación sentimental, para un fututo aplicar lo aprendido.

A mitad del quinto año, una vez que ya conocían al 100% a David, él y Marco se dieron
cuenta que la amistad que tenían era una especial jamás experimentada, que sus dos
personalidades empataban y se complementaban entre sí; y después de todo lo que habían
logrado y aprendido se convirtieron en mejores amigos.

David a lado de su mejor amigo y de otros de sus amigos pasaron momentos divertidos y
memorables, que perduran en la memoria de David. También empezó a acercarse más al
género opuesto, conocerlas, platicar y divertirse junto a ellas. Fue adquiriendo seguridad y
confianza y todo parecía marchar en orden, pero aún no estaba listo para dejar atrás todo
lo que había sufrido.

Terminaría la primaria, fue un final bastante satisfactorio después de cuatro años te tortura,
se llevaría consigo importantes amistades y bonitos recuerdos de las personas que lo
ayudaron a vencer algunos de sus miedos, que lo aconsejaron y que él pudo nombrarlos
finalmente como amigos.
 Capitulo II
Un hombre nuevo

A la edad de 12 años, David vivía muy de cerca de Dios y la religión católica, puesto que
había hecho su primera comunión un año anterior y estaba próximo a celebrar su
confirmación, y durante ese año estuvo asistiendo a clases de catecismo cada sábado.
En estas clases no se tomaban apuntes o se hacían tareas, sino que, eran charlas con
sacerdotes, monjas, o jóvenes que habían respondido el llamado de servir a Dios y a su
iglesia. Y esas charlas tocaban temas como:
Que es Dios para tu vida, ¿lo has aceptado en tu corazón? ¿has sentido su presencia en
tu vida?
Y sobre esta premisa, te platicaban la historia de Jesús, el hijo de Dios, desde que su madre
la Virgen María y su padre San José recibieron el anuncio del Ángel Gabriel que serían
padres del salvador del mundo, su nacimiento en un pesebre en Belén y como tres Reyes
fueron guiados por una estrella. Todos los milagros, buenas acciones y parábolas que
predicaba por Jerusalén. La traición de Judas, su condena, tortura y muerte en la cruz para
salvarnos del pecado. Hasta su resurrección y a asenso al reino de los cielos. Así como
también los pasajes de los doce discípulos antes y después de asunción de Jesús. Algunos
hombres que fueron de la gracia de Dios muchos años atrás, como Noe, Abraham, Moisés,
Job, Jacob, José, algunos profetas, entre otros. Así también de la historia de la Virgen María
y los santos.
David vivía en cercanía y armonía con el Señor. Según a palabras del propio David, el Señor
escucho las humildes plegarias de David y lo ayudo en su vida familiar y social, puesto que
se presentaron las oportunidades deshacer y cambiar aquello que no quería.
Aunque poco a poco se fue alejando de Dios y la iglesia, puesto que se enfocaba en lo
material más que otra cosa.

Comenzó por su físico, a ejercitar su cuerpo con una alimentación baja en calorías para
lograr adelgazar, hidratar su cuerpo, humectar su piel, cuidar su cabello adecuadamente,
su postura, entre otros aspectos.
Después fue su mentalidad y pensamientos, como su actitud que la verdad aún sigue
trabajando en mejorarla, se concentró en aprender hobbies y conocimientos nuevos que le
aportaran cosas positivas a su vida, trabajo en su seguridad al expresarse o moverse,
también descubrió que la escuela no lo es todo que tiene que darse el tiempo de vivir fuera
de las matemáticas o las ciencias. Y concluyo con sus sentimientos, perdono a todas las
personas que dañaron en algún momento, le nació la autoconfianza en lo que sabía o podía
hacer, de lo que él podía lograr a hacer.

Era y se consideraba una persona atractiva, interesante y totalmente diferente, pero, le

aborrecía y asqueaba al niño que había sido años atrás, y a pesar de que había dejado
atrás, enfurecía al verse el mismo en fotos familiares, lo cual lo envolvía en un pensamiento
fragilidad y temor a volver a ser el mismo de antes.
Esos dos años (ultimo de primaria y primero de secundaria) fueron totalmente productivos
para él, y ya al segundo año de la secundaria se sentía mil veces mejor consigo mismo, y
sabía que todo lo que el deseara nadie se lo daría, tendría que luchar por el hasta obtenerlo
y que de ninguna manera seria fácil. Además, de no todas las personas iban compartir
formas de ser o y hacer las cosas, que sería imposible agradarle a todo mundo.
Y que hay aspectos de la vida que ni Dios, ni sus padres ni un milagro harían por él. Que
tuviera que ser valeroso y responsable de lo que dijese o hiciese.

Cada domingo asistía al templo para orar y agradecer todo lo acontecía en su día a día, y
se encomendaba a él todos los días. También estaba agradecido con sus padres y con su
mejor amigo por mostrarle hasta dónde puede llegar y que él puede romper sus límites y
supéralos si se lo propone.
Seguía viviendo una etapa de estudiante, ahora la secundaria, que, a palabras de los
adultos, era una de las etapas más bonitas de la vida de una persona.
Corría el segundo grado, había tenido la dicha de que su mejor amigo Marco y otro gran
amigo llamado Andrés coincidieran en el mismo salón, y con Eduardo en la misma escuela
Su grupo era el 2°H, y tras un año, ya había escogido a sus amistades además de los tres
ya mencionados, tal era el caso de Alan, Luis, Jonathan y Riki (su nombre era Ricardo, pero
debido a un meme que el usaba mucho, se le apodo así). Y por parte de las chicas Yazmin,
Karla, Kate, Sophia, Diana, Ximena y Ananda eran su círculo de amigas más cercano, pero
no significaba que con más compañeros y compañeras no se divirtiera o conviviera bien
A lado de ellos vivió momentos increíbles, llenos de risa y diversión, además de unos
cuantos líos que en su momento fueron terribles, pero hoy, nos morimos de risa. Y con las
chicas bueno, pudo conocer más de ellas, se dio cuenta que ellas se divierten o ríen de
cosas muy diferentes, que la compañía femenina puede darse mucha buena vibra y alegría
en un hombre. Comprendió que ante una señorita no se puede comportar igual que con sus
amigos, debe guardar la postura y educación sin caer en lo aburrido Que sus formas de
trabajar varean a la de los hombres. Una cosa espectacular convivir con sus amigas, llena
de experiencias magistrales.
Fue tomando confianza en sí mismo al ver que su vida marchaba muy bien, y poco a poco
fue volviéndose un poco egocentrista, arrogante y sarcástico en su forma de ser, y pesar
de ello, no llegaba a ser tan detestable como uno puede imaginar. Esto con el fin de ocultar,
la fragilidad de sus sentimientos y las cicatrices que dejo su pasado. El segundo año sirvió
para conocer gente nueva y afianzar amistades nuevas

Pero desde que comenzó el segundo año de secundaria, había una chica que realmente
se había enamorado, después de tanto tiempo sin experimentar eso, en ese momento era
su principal pensamiento.
Era un chica muy responsable, honesta, dulce, divertida, en su bello se reflejaba el misterio
de su personalidad, con unos ojos claros espectaculares, muy imperativa, respetuosa, con
un cabello sedoso, suave y claro, amorosa, y claro, sumamente guapa. Su nombre era
Cristina.
Empezó a llamar la atención de David, tenía un no sé qué se yo, que al estar junto a ella se
sentía en las nubes. Y tras unos días de pensar como preguntarle si ella sentía lo mismo
por el o como hacerle la petición de que fueran novios, y al no encontrar la manera, acudió
con Marco y le explico la situación:
-Bro, te diré algo, pero tú no vayas a decir nada ehh. – A lo que Marco responde:
-Chale, hasta me ofendes, ya sabes que de aquí no sale nada bro. – A lo que David dice:
-Lo siento, está bien, bueno lo que pasa es que a mí me gusta Cristina, pero no como decirle
o donde. Si preguntarle si le gusto o aventarme así no más. – y Marco contesta y dice:
- A ver, pues… yo te puedo hacer paro preguntándole que si le gustas y ya después le
dices. –
- ¿¡Pero ¿¡qué le digooo!?- Contesta riendo David. Y Marco responde:
-Pues la verdad- -Wow, vaya aclaración- Responde David con cara una sonrisa sarcástica.
-Pues le dices que de un tiempo para acá que has tenido la oportunidad de conocerla, te
ha fascinado, que estas enamorado de ella y que si quiere ser tu novia. – -OK gracias bro-
respondió David.
-Ahh, pero que, en lugar a solas, para que nadie vaya a interrumpirlos. –

Al día siguiente, un viernes, antes de irse a la escuela, David le había pedido permiso a su
papá para ir al centro con alguien, su papa acepto no muy convencido, pero al ver la alegría
de David no dijo más. Camino a la escuela, iba pensando la forma de invitarla a salir cuando
de la nada choca con alguien:
- ¡Oye! Fíjate por don…- Y al voltear se da cuenta que es ella, Cristina.
- Ahh holaa, eres tú jaja, lamento haberte chocado- Dijo David algo nervioso. A lo que la
Cristina responde sonriendo tiernamente:
-Holaa David, no te preocupes- Ocurre un silencio incomodo y Cristina dice riendo:
- ¿Cómo estás? - - Bien muy bien Cris, gracias ¿y tú? – Responde de inmediato David.
-Bien gracias- Contesta Cristina. -De hecho, te quería decir algo… ¿te gustaría ir mañana
al centro a caminar?, tal vez un helado.
Y ella responde encantada: -Siii, está bien ¿a qué hora? - - A las 5 ¿te parece bien?
-Si no hay problema, te veo mañana ¿va? - -Va- Ella se despide besando en la mejilla a
David, a lo que el queda en shock y muy feliz.
- ¡SIIIII! – Grito David mientras se dirigía a su salón. El resto del día fue tan indiferente
después de conseguir salir con Cristina, que sus propios amigos lo notaban tan feliz y
ausente en todo lo decían o hacían.
Al día siguiente en casa, David se acercó a su hermano, y le dijo que necesitaba su ayuda.
Toda la mañana estuvieron escogiendo la ropa que usaría para salir con Cristina, su
hermano le presto un par de zapatos casuales y su perfume. Uso su cera para peinar su
cabello. Solo era cuestión de esperar la hora acordada para salir. Estaba tan desesperado,
el tiempo transcurría lento, los segundos se hacían minutos, y los minutos se hacían horas,
muy estresante esperar que el reloj marcara las 5 pm.
Y cuando por fin llegó la hora, tomo sus llaves, cartera, celular y dijo:
- ¡Ahorita vengoo! ¡Llego más tarde! -

Iba por el transporte público nervioso por lo que fuera a pasar, rezando porque todo fuera
a salir muy bien.
Al llegar al lugar acordado ella ya se encontraba ahí, ella lo saludo nuevamente con un beso
en la mejilla y comenzaron a caminar por el centro mientras platicaban y se conocían aún
más, platicando de su pasado, de su niñez, de lo que quieren hacer con sus vidas. Hacían
paradas para entrar a tiendas, comprar un helado, o un café.
Se dirigieron a un bosque que estaba cerca, ahí se sentaron, siguieron comiendo y
platicando. Platicaban de la escuela y sus amigos, de cosas divertidas que han vivido juntos
y de la familia de cada uno.
Había un bonito atardecer, a ella se le ocurrió que se tomaran fotos juntos, y fue tan bonito,
que la gente que pasaba se les quedaba viendo y les causaba una sonrisa verlos. Después
de la sesión increíble de fotos, fueron por un café y de ahí ella le dijo a David muy
desilusionada:
-Oye, perdóname, pero mis papas solo me dieron permiso hasta las 8 pm. – Y reiteraba
-Tengo que irme, pero nos vemos el lunes ¿va? - A lo que David le respondió
-Si no te preocupes, ¿quieres que te acompañe a tu casa? - A lo que ella acepto.
Se subieron al transporte público, iban sentados juntos, abrazados, con la cabeza de ella
apoyada en el hombro de David.
Al llegar a su casa, David la dejo en la puerta de su casa y le dijo muy relajado con una
sonrisa:
-Me la pase de maravilla contigo, gracias por aceptar salir conmigo. – Y Cristina le contestó
con una sonrisa:
-Nono, al contrario, gracias por invitarme a salir y por la comida. Ya después podemos
volver a salir a otro lado- - Sisi, tú me dices cuando tengas tiempo ¿ok? - Le respondió
David.
Hubo un silencio incomodo, a lo que David comento:
-Cris, tengo que decirte algo muy importante, estoy enamorado de ti. Desde hace ya
algunas semanas te he querido decir esto, y…. quería preguntarte si te gustaría ser mi
novia. – A lo que Cristina le responde con una voz dulce y tierna:
- Yo también estoy enamorada de ti- - ¿Quieres ser mi novia? - Le pregunto David.
Ella no le contesto, solo se fue acercando hasta llegar a sus labios y besarlo, al terminar
ella lo miro a los ojos y le dijo:
-Nos vemos el lunes ¿ok? - Se metió a su casa y David se sentía soñado, sumamente feliz
y emocionado, se dirigió a su casa.
Durante todo el fin de semana estuvo pensando en ella, hasta que llego su mensaje
diciendo: “Hola mi amor”. Fueron horas y horas de charla, desvelos hasta que llegara el
lunes para volverla a ver.
Fue una relación muy amorosa, llena de salidas, detalles, risas y momentos inolvidables,
que marcaron la vida de ambos. Existía una química entre ellos fascinante, viajaron juntos
a otra ciudad, asintieron a campamentos juntos entre otras vivencias más. Ambos ayudaron
a motivarse a empezar a hacer sus mejorar como personas (física y mentalmente),
buscando aprender cosas nuevas, motivándose en sus momentos de estrés y frustración,
una relación constructiva. Pero como en todas las relaciones, no todos fueron miel sobre
hojuelas. Hubo momentos difíciles y tóxicos, discusiones, gritos e insultos; por problemas
de chismes o celos.
Sus sentimientos eran tan estrechos, que habían acordado inscribirse en la misma
preparatoria, hacer lo posible por quedar en mismo turno, y ayudarse mutuamente a
perseguir sus sueños y a superar sus peores miedos.
Tras un par de maravillosos años juntos, y casi por finalizar la secundaria, sucedió algo. Un
viernes que salieron juntos, fueron a comer al café de costumbre, mientras ordenaban,
David noto algo raro en Cristina, no le tomo gran importancia y ordena lo de costumbre, dos
frapuchinos fríos con jarabe de chocolate y crema batida encima. Y al intentar platicar con
ella y bromear, Cristina simplemente hace la sonrisa más falsa posible. Y tras un silencio
incomodo le pregunta:
-Bueno ya ¡¿Qué tienes?!-
Y mientras preguntas, traen las dos bebidas, Y David insiste a lo que Cristina responde:
-Nada, solo come ¿ok? - -Estas así desde ya hace unos días, ¿Qué pasa? – Responde
David.
Y Cristina interrumpe enseguida: - Ya basta ¿de acuerdo?, ¿alguna vez no te has sentido
vacío? Que estas a la deriva y no sabes donde estas y hacia donde te diriges-
- ¿Por qué lo dices? - - ¡¿Por qué?!, míranos, estamos sentados bebiendo una estúpida
malteada, a la 1 de la tarde, no sé, ¿te parece normal? -
- ¿Normal? No importa yo soy feliz-
- ¿Eres feliz? -
- ¿Tu no? –
Vuelve a ver un silencio y Cristina dice:
-Necesito tiempo, necesito tiempo para ordenar mi cabeza, mi corazón y estar a solas un
rato. Espero lo entiendas.
Cristina se levanta, paga las bebidas y se va, dejando solo a David.
David entre confundido y furioso se dirige a casa, sin hablar con nadie. Llega a casa y su
mama lo saluda:
-Hola cariño, ¿Cómo te fue con Cris? - El la ignora y azota a puerta del cuarto. Mas tarde
su padre intenta hablar con él, llama a la puerta y dice:
- ¿Hijo? ¿Podemos hablar?, sé que paso algo entre Cristina y tú, pero pues- -No papa, no
quiero hablar solo quiero estar solo, ¿está bien? – Al anochecer su padre se acercó a él y
le dijo tranquilamente:
- ¿Qué paso campeón?, ¿Qué tienes?, ¿Es cristina? - A lo David asintió con la cabeza y
le explico lo sucedido esa tarde.
-Mira… sé que ella es muy importante para ti, que han vivido muchas cosas juntos, pero
tal vez esta confundida por los cambios que se aproximan a la vida de los dos o en el peor
de los casos, le interesa alguien más. Dale unos días para que piense y reflexione, y
después trata de hablar con ella, para saber que pasara con ustedes ¿ok? Ahora ven
vamos, despeja tu mente, no pienses tanto ello, diviértete, distraerte, come algo. –
Lo que resto el fin de semana, se enfocó en pasarla bien con su familia, pasear, reír, platicar
y fue muy des estresante.
Al día siguiente, lunes, tocaba de nuevo ir a la escuela, donde rodeado de su círculo de
amigos cercanos (Marco, Luis y Alan) les platico lo sucedido, a lo que Alan dijo:
-Que mala onda amigo. ¡ANIMOOO! Yo te puedo presentar a unas amigas, están guapas
y tal vez ahí se arme. – Luis agrego:
- Simón bro, date tiempo de conocer más gente, podemos salir nosotros sin necesidad de
ellas, nosotros 4 echando desmadre, pasarla bien y si quieres también invito a unas amigas.

Tan pronto les informo de su desgracia, sus amigos empezaban a idear divertidos planes
para ayudar a superar ese mal trago de David. Y por un par de meses así fue, salidas muy
frecuentes con amigos, risas y diversión, travesuras, conocían chicas nuevas y en
ocasiones no llegaban a diferenciar la línea entre “amigos” y “pretendientes”. Y si antes de
esto eran un grupo de buenos amigos, cercanos y muy imperativos y traviesos, estos meses
lo incremento todavía mucho más su nivel de amistad, irreverencia y rebeldía.
Después de la escuela David decide visitar a sus abuelitos, así que se dirige hacia allá,
llama a la puerta y abre su abuelita:
-Holaa hijo, ¿cómo estás? – Holaa abre muy bien ¿y tú? - También hijo, aquí mira. – Que
bueno abre. -Pásale hijo, no más que ando haciendo la comida. –
David sigue a su abuelita, pero antes cierra la puerta de entrada y su abuelita le pregunta
a David:
- ¿Cómo te fue el viernes? – A lo que David respondió:
-Pues…al parecer nos dimos una pausa, o terminamos no lo sé. – Ah hijo, tan bonitos y
contentos que se veía juntos. Pero así es la vida, habrá momentos en los que creerás ser
el más afortunado y otros momentos llenos crudos y amargos, pero eso ya lo sabes–
-Abue, ¿puedo hacerte una pregunta un poco rara? -
-Te equivocas hijo, ¿te acuerdas que fue lo que me dijiste cuando entraste a la secundaria
y al catecismo? - Pregunto su abuelita y añadió:
-Prometiste a Dios nuestro señor y a ti mismo, olvidar y cambiar. Y cambiaste, adelgazaste,
tu piel, tu pelo, aprendiste cosas nuevas que te son de gran utilidad y perdonaste a todos
los que te lastimaron. Excepto a alguien y el más importante. - - ¿A quién? - Pregunto David
-A ti mismo. Ese pequeño David está agradecido contigo porque lo ayudaste a salir de todo
el sufrimiento, ¿Por qué tu no? -
-Es una parte de mí que me ocasiona mucho coraje, me repugna y quiero olvidar-
- ¿Sabes que es lo que veo? Que estas asustado del ser el mismo de antes. Temes de ti y
eso no es malo, impide que seas creador de momentos que puedas arrepentirte después.
Date tiempo de ordenar tu corazón, tal vez seas una bendición para los demás, pero para
ti mismo, estas siendo tu maldición….
 Capítulo 3
Dios nos da, Dios nos quita

Faltando dos meses para terminar la secundaria un seceso sin precedentes sorprende al
mundo, un virus letal se empieza a esparcir en el mundo, ocasionando millones de muertes
alrededor del planeta. Entramos en estado de alerta, por lo cual, los altos mandos del
gobierno, ordenan un confinamiento en su país, cierran parques, escuelas, plazas
comerciales, cines, teatros. Los hospitales están repletos de gente enferma por este virus
además de la gente ya internada por razones diferentes al virus, los medicamentos se
agotan, el personal médico no alcanza, millones fueren. Es declarada una pandemia
mundial.
La vida de todo el mundo queda en pausa, los gobiernos del mundo de acuerdo a sus
posibilidades salen adelante con la esperanza de una cura.
En medio de todo esto, David ahora estaba en su casa con su familia, extrañando la vida
que conocía, quería darse tiempo para realizar lo que su abuela le dijo, pero todo seguía
“normal” con su vida social.
Por medio de redes sociales eran su comunicación con el mundo exterior, monitoreaba lo
que sucedía en el mundo y que esto no duraría poco tiempo.
Al paso de unas semanas, hablaría con Cristina, la buscaría para entablar una charla y
aclarar todo lo que había sucedido.
-Tienes tiempo, me gustaría hablar contigo. Ya paso cerca de un mes, creo que es momento
de saber que es lo que pasa. – Envió el mensaje y pasaron horas hasta que contestara.
-Hola, tienes razón. Resolvamos dudas. - Respondió Cristina
Entre ese par de horas de platica, David se dio cuenta de los sentimientos de Cristina:
-Nuestra relación fue muy bonita, tu fuiste parte esencial de mi vida, ayudaste a dejar todo
atrás, me ayúdate a darme cuenta de lo plana y feliz que puedo ser, que hay maravillas de
mi que no conocía, que es absurdo refugiarse en alguien más de ti mismo.
Realmente me siento bien conmigo misma, y quiero seguir descubriéndome. Y es algo que
debo hacer sola. Es por eso que te pedí un tiempo, y es por eso que ahora te pido que
terminemos. Espero que lo comprendas. Y deseo que tú también encuentres eso, se que
algunas personas y yo éramos tu refugio de ti mismo, pero conmigo ya no cuentes. Además,
me mudare a Monterrey y dudo que sigamos siendo amigos. Pero aun así te llevare en mi
corazón. –
Al leer esto, David no quiso insistir más, era inevitable. Su relación amorosa llego a su fin.
Por días David entro en depresión, a diario le mandaba mensaje a Marco, para
desahogarse, para llorar, y Marco en su desesperación de verlo así lo invitaba a jugar en
línea, le platicaba de cosas diferentes a lo que el estaba pasando, trataba de que no cayera
de nuevo en el tema.
-Bro, no puedes estar así siempre, levántate, has algo diferente, ejercicio, canta, busca algo
que te distraiga. Demuéstrale que no la necesitas y tal vez termine funcionado. - Eso
mencionaba Marco.
Sus amigos y amigas, ya tenían conocimiento de lo que había pasado, puesto que todos
conocían a Cristina y eran sus amigos.
El buscaba a sus amigos, derrochando lastima y lagrimas y ellos trataban de darle ánimos,
pero con la terquedad de David, terminaban por ignorarlo.
Sus amistades seguían con su vida, aprovechaban su tiempo libre para hacer las cosas
que les gustaban o que no tenían tiempo de hacer, descansaban, se ejercitaban o jugaban,
y David solo sumergido en su tristeza.
Durante los primeros 2 meses de la pandemia, conversaba con sus amigos, ya no era tan
notoria su tristeza, pero extrañaba la normalidad, platica lo mismo con las mismas personas,
eran tan monótona y aburrida sus platicas que mejor optaban por no responderle o
simplemente dejarlo en visto y buscaban personas con las que se divirtieran más o
simplemente no fueran lastimas y tristezas como las de él.
Alrededor del 4rto mes, falleció su abuelita. Aquel ser que le daba los consejos perfectos
en los momentos más críticos. Aquella persona la cual la había influenciado tanto para que
viera a Dios no como un ser místico, si no como un amigo confidente. Aquel ser que le había
enseñado que la generosidad no representa sacrificio, si se da con el corazón. Aquel ser
que, con el corazón más lastimado y más destruido, regalaba el amor más bello del mundo.
Aquel ser que le dijo que no era malo tener miedo de nosotros mismos, que eso era lo que
evitaba que fuéramos la peor versión de nosotros mismos. Aquel ser había fallecido.

Por órdenes sanitarias gubernamentales, se habían prohibido los funerales de cualquier

causa, para evitar contagios.
Por lo cual desde el momento que ingreso al hospital por problemas de presión arterial, no
la volvieron a ver, estuvo sola desde que ingreso al hospital y de la misma manera murió.
Fueron 4 días que estuvo internada, totalmente incomunicada, rezaban a Dios que no fuera
apártala del lado David y su familia, y ponían toda la fe en el personal medico para que ella
saliera con bien, pero ya vimos que no fue así.
El padre de David fue al hospital cuando le informaron del suceso lamentable, firmo algunos
papeles y le informaron que cremarían el cuerpo, que no estaba a discusión y que le
entregarían las cenizas en algunas horas. Los papas de David, su hermano, sus tías, su
prima y su abuelo se dirigieron al cementerio y esperaban a que les entregaran los restos.
Entre un mar de lagrimas de toda la familia, regresaron a casa, donde solo se centraron en
la sala a llorar y lamentar su perdida durante horas. Días posteriores, lograron conseguir
organizar una misa con toda la familia con las medidas de seguridad necesarias para darle
el ultimo adiós a la abuelita de David. Nuestro protagonista volvería a caer en la depresión
y en las lagrimas sin control alguno. Días, semanas grises, se realizaban trámites legales
muy amargamente.
Una tarde, encerrado en un rincón de su cuarto llorando, empezaba a recordar los
momentos que paso a lado de su abuelita, las enseñanzas que le mostro, los consejos que
dijo, los besos y abrazos que con tanto amor daba. Y en un momento de coraje con
lágrimas, grito enfurecidamente hacia el cielo y hacia una cerámica de un Cristo clavado en
la cruz que tenía en su pared:
- ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHHHG!,ERES UN MALDITO HIJO DE P#$%, ERES UN
CUL#$% CON TODA LA HUMANIDAD, JAMAS NO HAS PERMITIDO SER
FELICES!,ERES UNA FARZA!, ¡¿QUE MAS QUIERES DE MIIII?!- Todo esto mientras
lloraba descansadamente. Durante semanas insultaba y se burlaba de la Palabra de Dios,
llegando a decírselos a sus padres, que para nada lo aceptaron, y su papa lo golpeo y lo
castigo por días, las peleas entre sus padres se volvieron mas frecuentes y mas graves,
llegando varias veces a punto de divorciarse. Su abuelo lloraba constantemente durante el
día, negándose a comer, su hermano ingería alcohol a escondidas de sus padres, lo cual
lo descubrieron y trajo un problema enorme. Fueron meses de un ambiente familiar terrible,
y cito las palabras del mismo David “Fueron meses terribles que yo realmente creía que mi
familia se iba hundiendo poco a poco”.
Tanta era su frustración consigo mismo, con la vida y con Dios que opto por intentar
suicidarse.
Contantemente trataba de cortarse las venas con una navaja pequeña pero no tenia el valor
suficiente de cortar tan profundamente. Opto por la sobredosis, y en su intento definitivo fue
descubierto por su madre, lo cual obligo a David a escupirlas de su boca y después a
regañarlo:
- ¡¿QUE ESTAS HACIENDO?! Eres tonto o que, pudiste haber muerto David, ¿sabes lo
grave que pudo haber terminado!? – Muy enojada le decía a David, y el respondía:
-Precisamente por eso lo hacía, moriría en minutos con eso. – Apuntando a las pastillas.
-Te quiero aquí en la sala hasta que llegue tu papa, esto no se va quedar así ¿oíste? -
Al llegar su padre, no tuvo tiempo de comer cuando empezó la mamá de David a platicar lo
sucedido:
- ¡Este pen#$jo David, esto te mata en cuestión de minutos Ahora que te quieres morir, no
seas tonto, te ahogas en un vaso de agua, solo porque te termino Cristina, si tu abuela
estuviera aquí…-
- ¡PERO NO ESTA AQUÍ!, esta muerta, Estoy harto de mi vida, tu Dios es un falso, nos ha
abandonada cuando mas lo necesitábamos, hemos hecho lo que el ha querido sin importar
nuestro propio juicio ¿y con esto nos paga? No quiero volver a escuchar de él, todas las
porquerías relacionadas que hay en mi cuarto las voy a tirar, estoy harto. -
Sus padres tuvieron que tragarse su coraje para no orillarlo a que hiciera otra estupidez.
Imágenes, cerámica, rosarios, biblia, todo eso saco de su cuarto, lo puso en una bolsa y lo
dejo en la recamara de sus padres.
Era tanto su coraje que insultaba a sus amigos a través de redes sociales y después de
desahogar su odio con cada uno los eliminaba de sus redes sociales. Literalmente sus
redes sociales tenían un total de 0 contactos y 0 mensajes.
Días después de que David intentara suicidarse, los problemas matrimoniales de sus
padres, se resolvieron, su hermano dejo de tomar a escondidas, y su abuelo empezó a
sentirse mucho mejor. Ahora él era el problema.
Su abuelo se mudo con David y sus padres, y la casa donde antes vivían sus dos abuelos
fue desalojada. La familia completa, vendió los muebles, la ropa que usaba su abuelita fue
donada a caridad, y en el proceso de desalojar toda la casa, David se topo con una foto,
donde aparece su abuelita cargando a David de bebe, y en el reverso de la carta tenia algo
escrito que decía: “A veces la tormenta es necesaria, para limpiar la superficie”
Lagrimas empezaron a derramarse sobre la foto, la beso con mucha ternura y la guardo en
su pantalón. De la mudanza solo quedo todas las pertenencias de su abuelito y su abuelita
(excepto ropa) y su coche.
Llegaron a casa de la familia de David, empezaron a ayudar a instalarse en su nueva
habitación a su abuelito, aquellas cosas que no tuvieran lugar en la habitación eran puestas
en algún lugar de la casa o en el garaje. De una caja, el hermano de David saca un álbum
super grueso de fotos, lo hojea y dice:
-Miren, son fotos familiares- Se acerca David y su abuelito, y empiezan a ver las fotografías
y a recordar el momento que esta plasmado en ellas, “Son sentimiento encontrados, alegría
y tristeza, emoción y desesperación al ver el álbum, sin duda algo muy especial” comento
su abuelito:
-Ella cuando los sostenía a ambos en sus brazos decía que “Yo estaré muerta, pero día
que vea derrotados a mis nietos, saldré de mi tumba para aclamar su nombre y verlos
convertirse en mis campeones”- Los tres ríen y votan lágrimas de sus ojos, y su abuelo
finaliza diciendo:
-Algún día tendremos que quedarnos solos, es necesario en la vida, solo así podemos saber
que tan listos estamos para tener a alguien con nosotros. –

En 7timo mes de cuarentena, ese día era cumpleaños de su abuelita, toda la familia de
David y el, iría a la iglesia a rezar, agradecer todo lo vivido, y a pedir que tuviera a su abuelita
en el reino de los cielos del Señor. Cuando un sacerdote se acerca y dice:
-La misa casi comienza, ¿alguien gusta confesarse? – A lo que David alza la mano,
acompaña al sacerdote al confesionario, se sienta, David se inca y comienza:
“-Ave María purísima. -
-Sin pecado concebido padre. -
- Y bien dime ¿Qué te aqueja? -
-Ahh padre, por dónde empezar. –“

CONCLUCION

“El amor es como una enorme pizarra llena, muchos ya escribieron en ella, ya hay borrones,
tachones, manchas, pero siempre hay espacio para más, en cambio la soledad es aquella pizarra
sucia difícil de limpiar, es muy tardada y complicada de limpiar, pero una vez que la limpias, es
tan satisfactorio verla reluciente, y tendrás mucho cuidado que es lo que escribes ahí o con quien
lo escribes”
Braulio Adriel Salgado Arce

Es fue el consejo que me dieron antes de empezar esta novela, y para serles sinceros, aun
estoy en proceso en limpiar mi pizarra, y me he dado cuenta que, aquel pequeño que
escribió en esta pizarra, lo escribió con toda la inocencia del mundo pensando siempre lo
mejor, y que no es su culpa los tachones y las manchas que hay en ella, simplemente quería
corregirlas como podía.
Muchas veces nos avergüenza nuestro pasado, nos hiere y lastima, pero si huimos de él,
él nos interceptara con la misma situación solo que ahora 2 veces mas fuerte de lo que fue
alguna vez.
Aprendamos a perdonarnos, abrasemos a ese pequeño niño en nuestro interior,
consolémoslo y ayudémoslo a que no vuelva a caer en lo mismo. Dediquemos tiempo a
nosotros, a conocernos, a valorarnos, a darnos nuestro lugar y cuando estemos listos Dios,
la vida o el destino nos enviara alguien con quien compartir nuestra pizarra.